Tapices y Palabras
MarĂa Cecilia Reyes de la Maza
Creo que desde nuestro nacimiento vamos experimentando una serie de acontecimientos donde se va ligando el afecto al tiempo... en edad más avanzada, estos hechos se pueden vivenciar como recuerdos, que según las características de los mismos, nos despiertan y remueven emociones muchas veces para curar heridas secretas y redescubrir el amor. Qué quieres que te diga, fabuloso el trabajo, los tapices llenos de creatividad, plasmados de una enorme sensibilidad, sólo reflejan la tendencia permanente de su creadora a lograr el éxito o el interés por conseguir un estándar de excelencia, mostrando sentimientos de pertenencia, autonomía, orden, belleza, intimidad, verdad, objetivos espirituales... en una vida llena de alternativas y desplazamientos, con sus límites y confusiones, afanes y alegrías, esfuerzos y descansos… Tengo tres de ellos que no sólo adornan mi casa, sino que cuando en momentos de quietud y reflexión admiro la historia que traen consigo, me dan valor, optimismo, fuerza, llegando a mi corazón todos los razonamientos por los que una persona debe creer en Dios. Abrazos Francisca Rius del Río Profesora de Biología Talca, Diciembre, 2008
Diseño y producción: Felipe Fuenzalida K. felipefuenzalida.com
Impreso en Santiago de Chile, el año 2014 Imprenta The Good Print.
Este diario de vida estรก dedicado a mis hijos y sus vidas.
2014
Se me van las ideas entre las lanas, los recuerdos y colores bordan sensaciones y sentimientos, tienen formas distintas y movimiento desde ellos queda impresa mi vida, lo que en mi subconsciente anida. Los han reconocido como bonitos hasta han puesto en duda la autoría ¿usted los hace? y son tan sencillos, solo bordo lo que me va saliendo sin diseños previos. Los miro y me entretienen, sirven para reconocerme en distintas instancias. Con ellos hay una complicidad, nunca he querido ser triste, es por eso que están llenos de colores y formas. Al final, son para mí, aunque hay algunos que viven en otras casas, en este momento van ciento veinticinco, más los que ya se fueron suman más de ciento cincuenta. Me voy mirando en el espejo de mis tapices y siempre descubro algo nuevo en ellos, ahí están repartidos en nuestra casa suspendidos en el tiempo de mi creatividad.
Indice 8 Abuela María de Valladolid 10 Mi abuela que cantaba en catalán 12 Mis padres : Alberto Reyes Lapiedra - Yolanda de la Maza Pascual 14 Mis hermanos 16 Los amigos 18 La tía Loli 20 Los colores del cariño 22 Mirando el horizonte 24 Las canciones 26 Reunión ancestral 28 La paloma de la paz 30 Orden Puntual 32 Una frustración importante 34 Antes y después 36 Un momento de recuerdos 38 Caminos 40 Empatía 42 ¿Será que el tiempo es redondo? 44 Observaciones 46 Búsquedas 48 Laberintos 50 Espejos de lo que no es 52 Palabras sobre el amor 54 Génesis
56 60 62 64 66 68 70 72 74 76 78 80 82 84 86 88 90 94 96 98 100 102 104 106 108 110
Mis Angeles Visiones originarias El Conquistador Desde Mozambique Mar de Pemba Paisaje de Nampula En Salamanca Isla de Mozambique Cuando fui Bióloga Pangane N’Guri Isla de Iñaca Educación Ambiental Episodios con el Presidente Samora El mar Nuestra casa Entre América y Africa Un testimonio necesario En Vilches alto México muy lindo Errores Reencuentro Decisiones Construyéndome Armonía Un consejo
112 114 116 118 120 122 124 126 128 130 132 134 136 140 142 144 146 148 150 152 154 156 158 160 162 164
En el Valle del Elqui Hasta Andacollo Jardín Una realidad holística Otra botánica Viviendo la Vida Haciendo Caminos Música y Colores Valparaíso Mis alegrías El presente de ayer Suspendidos en el tiempo Gracias Señor En Medio del Océano Colegio Insular Distintas realidades Bahía Cumberland El Faro Marcos –Robinson Amiga Pescadora La Plazoleta El Refugio de Robinson Crusoe Homenaje a un amigo pescador Encuentro presidencial Una mañana en el muelle El Artista
166 168 170 172 174 176 178 180 184 186 188 190 192 194 196 198 200 202 204 206 208 210 212 214
Con la mística y la realidad a cuestas El Castillo Ayer Islatón El Idioma Santa Cecilia Travesía El Tsunami Relatos en grupo Los mercados Una visita especial Las islas que he conocido Los zoológicos El triángulo del cariño Misión : Iniciar Los dolores de la patria Ordenamiento territorial Un encuentro inesperado Todas mis vidas El maniquí de las campanas El año 2012 42 Años Mayores Cien Tapices: Mil Colores, Mil Palabras
Abuela MarĂa de Valladolid
8
“ … el vapor demoró más de un mes. Partimos desde Vega de Rui Ponce, Valladolid, Castilla la Vieja” -decía ella -. Llegamos a Talcahuano en el año 1912, mi padre, don Ildefonso Pascual Valdaliso y mi madre Dorotea, dejaron sus viñas, sus amigos y su familia, para encontrarse con un primo que se vino al nuevo mundo. Se instalaron en Temuco. Mi abuela María Vicenta tenía entonces 14 años. De ella todo era fino, decía que había que ser prolija, el frivolité bailaba en sus manos, en su casa nada dejaba de brillar, vivió siempre con esa nostalgia desolada de lo que fue. Nos quiso a su manera, llena de formas y estructuras severas e irrompibles. Le emocionaba Sarita Montiel y después de Serrat, me hacía cantar sus canciones también. Mi madre y su hermano, sus únicos hijos. La mantilla para ir a la Iglesia, el mes de María, todas las oraciones en latín y en español, los veranos con horarios muy establecidos, mermeladas, playa, pan caliente e historias de otras tierras desconocidas, los almidones, la blancura de la ropa y los modales sin equívocos, donde íbamos creciendo y queriendo algo lejano con sentido. Ya se fue al cielo, nunca aceptó la nacionalidad; allá debe estar preparando bordados y manjares para encantar a los ángeles, con esa finura tan de ella y esa permanente dedicación y esmero.
9
Mi Abuela que Cantaba en Catalรกn
10
Ella tocaba la guitarra, tenía los ojos color del tiempo, a veces celestes, verde agua o grises, era alegre y vivía con nosotros para acompañar nuestros días. Me hizo cantar desde que nací, decían que soy como ella en canciones y esperanzas. Vino del sur y antes ya había llegado del norte del mundo. Con otras palabras y melodías me hablaba y yo repetía… …l’airet, l’airet, l’airet de la matinada del ric estiu, del ric estiu, del ric estiu replega, replega la rosada que llança el riu, que llança el riu... En fin, se fue cuando tenía yo once años. Joyas, perfumes y su historia de vida la llevaba consigo día a día. En las noches de invierno, nos íbamos a su pieza mis hermanos y yo, comíamos fruta, rezábamos el rosario en medio de las manzanas, las lúcumas y la lluvia. Bacalao a la vizcaína, arroz a la valenciana, habas refogadas ¡…que comidas que preparaba! Tantos domingos lindos que tuvimos… Encantaba con su canto, su sonrisa y sus palabras. Mi padre fue su hijo único, lo adoraba. Desde esta lejana historia nueva, ya lejos de Linares, y de los lugares tuyos y míos abuelita Belde, Beldecira Lapiedra Cañizar, no quiero perder tu nombre y te rezo una oración, para que bailes por los caminos de Dios.
11
Mis Padres : Alberto Reyes Lapiedra Yolanda de la Maza Pascual
12
Ellos fueron todo. Mi norte y mi sur, mis puntos cardinales. Mis orígenes ciudadanos y familiares, mis sueños mi amparo, mi empuje, mis cuidados para siempre. Ellos me mostraron el mundo desde donde aprendí lo de la vida y otro tanto. Con ellos supe de los colores y de los amores verdaderos, de la importancia de aprender a ser y estar en lo cierto, de la humildad, el respeto. De lo hermoso de mis casas y mi mundo. Supe que de ellos aprendí a vivir cuando se fueron, supe que de ellos me nació la fe, que la fuerza de la vida partió en cualquier momento entre las mil cosas que tenía un día con ellos, comprendí que aprendería toda mi vida, pues el motivo necesario lo pusieron ellos. Me he dado cuenta que en este breve tiempo donde me tocó ser hija, también me mostraron el valor de ser, el valor de creer y el valor para cada día nacer.
13
Mis Hermanos
14
Dos, mayores, hombres, distintos y personales. Uno eligió el cielo y aprendió a volar, cursando mil paisajes de montaña y de mar. El otro, eligió la tierra y la hizo florecer, dar frutos y generar recursos en geografías de pueblos blancos, negros, de lenguas vivas y de esperanzas sin azar. Nunca fuimos amigos, nunca supe más de ellos que lo que se veía al andar. Alguna vez me invitaron a volar y a sembrar, muy puntualmente, para conocer algo más que el mar. Ellos pensaron distinto al momento en que se quebró la paz y eso, distorsionó verdades, secretos y toda las creencias que había que ocultar. Cada uno por su cuenta gestó su propia verdad. Han pasado todos los años y hasta aquí con una vida plena de idas y venidas, cada uno vive su mundo apartado de toda historia familiar. Tuvieron hijos, mis sobrinos, grandes y cada uno construyendo sus caminos lejos, bien parados y continuando a su manera siempre, personal. Así ha sido, crecimos, nos hicimos personas, pensando que el mundo tenía los problemas resueltos desde ese hogar que nos vio nacer -dónde en cada espacio el tiempo transformaba todo en algo bueno-salimos a vivir y tuvimos que aprender sin consejos. La historia nos golpeó muy feo, todas las penas estuvieron presente el día en que murió el “ Presidente Compañero”, entonces partió cada uno fuera sin pensar en regresos. Ahora, bajo el mismo cielo chileno, somos otros, estamos más viejos, nos quedamos fuera de aquello que imagino, cada uno guarda como un pasar modelo, en esa vida de provincia que tuvimos tan completa y tan perdida en recuerdos.
15
Los Amigos
16
En un molde común se adaptan las distintas formas de ser, las canciones de la vida atrapan la misma sintonía y te encuentras riendo y hablando con todas las emociones sin fronteras, sin censuras, para hablar de ti y de mi, de todas las vivencias, de las acciones pensadas y de las otras. Los amigos y su incondicionalidad alimentan tu creatividad, sabes que siempre están, te impulsan a intentarlo una y otra vez más. Ellos deben tener un pasado común contigo en algún lugar de la existencia. Para siempre se quedan con tus afanes y los respetan. Los amigos escriben su nombre en tu corazón y de esa forma van contigo donde te lleve tu propia rotación y traslación. Muchas veces son tan distintos y sin embargo ese “cordón de plata” nunca se cortó, entonces, pasan los años y te vuelves a encontrar cara a cara, como si recién ayer te hubieras separado. Los amigos son un privilegio. Que hacen poesía todo momento que quieres transformar en silencio o en una conversación sin final, los amigos son del alma, de las canciones de siempre y de las que vendrán.
17
La Tía Loli
18
Y se fue para alcanzar las estrellas, se fue para encontrar los pasos perdidos del amor de su vida que partió sin pedir permiso. Allá donde todos los que queremos están, había una fiesta, la tía Loli llegó y los ángeles la recibieron, acá nosotros, con los que más tarde habrá nuevos encuentros. Tanta vida vivida sin Anita y sin el tío Gerardo, ya era hora de volver a juntarlos. Estamos contentos, los círculos cumplen sus ciclos y ya está, nos quedamos preparados para volver a nacer cada día, cada año, con esta historia de volcanes y paisajes de campo, con esta historia de mar y asados, con esta historia de ciudad dormida en invierno con truenos y relámpagos, mientras el manjar y otros sabores nos acompañan a cantar, damos las gracias por estar en esa historia de nunca romper lazos, para saber quiénes somos, para saber cuánto valoramos ese especial pasado. Tía Loli, Maite y Glori, parte de mi memoria joven y llena de sueños, se va en volantines al cielo para llevar el cariño de un esperado regreso.
19
Reuni贸n Ancestral
26
El mundo de mi América es pequeño, aún no terminamos de encontrarlo tanto escándalo de belleza natural, no nos deja pensar y se nos pasa el tiempo, deslumbrados dejando crecer la tristeza, la miseria, los males de antaño. Que insolente inteligencia y desvaríos en el arte, en todo lo que nos hace definitivos. Descubre el camino (sí es que ves más allá de las estrellas) para que el hombre, la mujer y el niño construyan otro mundo, de futuros más amables, esenciales, tanto tiempo perseguidos. Habla a los Dioses nuestros y al Dios de los que llegaron, entrega el mensaje de los orígenes. Hay que empujar la fuerza de lo que fue, hay que nuevamente coordinar con los árboles, los planetas, los animales, el viento, el sol, la montaña, para volver a ser en la trascendencia, volver a la vida con todos los poderes, en esta próxima reunión ancestral, donde algún día estarán todos ellos, desde el Río Grande hasta la Tierra del Fuego …de los Selk’Nam
27
MĂşsica y Colores
126
Mi alumna nueva, entre música y colores llegó hasta estas tierras. Sisi es líder es la mirada donde muchos niños quieren llegar, es conocimiento sensibilidad, cultura y acogida. Vienen sus compañeros a casa para conversar con ella y se habla del mundo, de la ecología, del futuro profesional de cada uno. La invitan a conocer los cerros, el mar. A trotar, a cantar, a compartir las vivencias naturalistas que en el día a día descubren acá. Ella le dio vida y luz a esta casa y mis días cambiaron a una alegre armonía. Sisi es mi tercer milagro, mi hija menor, mi princesa hermosa, alegre, inquieta, tiene personalidad y quiere aprender Inteligente, artista y completa. Desde Juan Fernández donde la rutina no tiene caminos ella ha puesto la construcción de sueños entre sus compañeros isleños con el mágico puente del ejemplo.
127
ValparaĂso
128
Las puertas, las ventanas, las murallas, los barrancos, el viento, los ĂĄrboles y todas las lluvias corren cerro abajo en medio de tantas casas que cuelgan en un desorden alineado, toda la geografĂa abrupta y sin memoria -pues a veces-, se borra en temblores el pasado. Completa de personas y movimientos donde los colores buscaron un remanso, se van bordeando las lomas, suben, bajan y nos dejan soĂąar en recovecos de sorprendentes circunstancias con lejanas muestras de emigrantes y emigrados. Lo que queda en los cerros se refleja en el plano.
129
Mis AlegrĂas
130
La alegría es como el mar, viene y va. Es como lo que más te gusta de un paisaje, de un buen libro, de una buena cena y de una conversación completa. Es como enamorarse, bailar, escuchar, sentir que las emociones optimizan todo devenir. Nacen desde dentro y felizmente se quedan ahí. Mis alegrías tienen receta, elijo ser feliz y esa parte permanece en toda historia que viví. Tengo tantas alegrías en mi vida que solo me queda volver y mirar, encontrar en el pasado esa huella sin igual de realización personal, que a pesar de las balas los abusos y desmanes ellos… no pudieron ganar. Sigo feliz. Ese optimismo porfiado y permanente me hizo ver siempre el mundo diferente, entonces entre las penas y los engaños, entre las lágrimas y la impotencia, aprendí a doblar a todo eso la mano. No hay mayor fortaleza que la que se adquiere de una triste experiencia. Al final, todo es bueno, nada más hay que aprender a leerlo.
131
Ordenamiento Territorial
200
La tierra se queja, se enoja, se reordena y nos enseña los volcanes, terremotos, huracanes, lluvias, tornados, trombas y todo en exceso y a destiempo. Hemos roto los límites y lo profano se ha convertido en juego, peligroso y no deseado. Se empieza licuar la antártica, el sol y sus rayos entran a la atmósfera sin filtro hasta donde estamos. Construyen represas, cortan árboles, la basura suma y sigue, se irrita el carácter en todas las personas y en todos los estados, la gente pierde el norte pues hay un desorden planetario. Somos parte de un todo, y no un todo aparte, hay que ordenar donde poner las casas, los caminos, las plazas donde los parques, las represas, las canchas. Cómo usar mejor los recursos de todos los que estamos y los que vendrán, el desorden territorial se debe acabar pues por ahí se nos va la vida, nada nuevo comienza, solo empezamos a vivir el final. La necesidad es un ordenamiento territorial. En todas partes ya expresan lo que no está bien, salen todos a marchar, y en la mezcla de lo humano y lo divino están todas las respuestas. Hay que mirar la vida, solo allí encontraremos el orden de los cambios que la tierra exige, que la tierra enseña, que toda la naturaleza y los elementos nos muestran para permanecer sanos en la conciencia del universo.
201
Encuentro Inesperado
202
De repente te miras al espejo y estás distinta, esos ojos y esa risa tan característica, ahora tienen más caminos entre medio de mil pistas. Cambió la cara, las manos, el cabello, el tono de la voz. Veo en esto todo junto, el mar que me gusta, los viajes y todos los aprendizajes, las batallas ganadas y las otras aún sin madurar, las huellas de los hijos, las nuevas imágenes en la piel, los reflejos de la vida y de la memoria conocida. Me alegra lo que veo, me cuesta acomodar tantos años en este estuche nuevo, uno vive entre sus colores y sus desvelos. De repente te das cuenta que ha pasado el tiempo que en ti está impreso y ese es el tesoro que llevas dentro. Entonces, de este encuentro nuevo reordenas los recuerdos, acomodas la existencia y sigues bordando sueños.
203
214
CIEN TAPICES: MIL COLORES MIL PALABRAS
• Para guardar la vida en bordados con diseños de añoranzas. • Para fijar en la memoria la alegría y tristeza de experiencias pasadas. • Para asombrar al tiempo de lo vivido, sin reparos de emociones y esperanzas. • Para aceptar que la estabilidad está en el cambio. • Para que determinen que hay que salir a buscar los sueños. • Para construir fortalezas con palabras de amor y verdades geográficas. • Para poder compartir la belleza que se ve y se atesora en momentos mágicos. • Para aprender que las estrellas alumbran como el sol y la luna un momento de amor. • Para escuchar, observar y retener minutos insondables que solo llegan una vez en la vida y se van casi al pestañear. • Para saber que los colores de la vida se parecen a los del arcoiris. • Para asumir que la memoria es la compañía más completa que debemos conservar. • Para bailar reír, conversar, estudiar e inventar siempre en todo lugar lo nuevo, lo propio de ustedes. • Para caminar soñando o rezando. Ambos casos, son antesala de la realidad esperada. • Para que cada día amanezca una sonrisa en nuestra cara. • Para agradecer al universo, a Dios o a ti mismo, día a día, cada semana. • Para que nuestros nombres familiares no se pierdan en el tiempo. • Para que los hijos sepan que el sentido de la vida aparece cuando ellos llegan. • Para reconocer en el ciclo de la vida, lo valiente y consecuente, que así es la coherencia. • Para que los hijos asuman que tienen sangre de varios continentes y se deben a una identidad híbrida, inquieta y guerrera. • Para nunca olvidar el paisaje, para no pasar sin mirar el día a día de su alrededor. • Para que comprendan que la justicia existe cuando se sustenta en lo moral. • Para que el amor siga siendo prioridad en la elección de su propia escala de la felicidad.
215
Para escribir una historia llena de historias, fue mejor vaciar colores y formas que se convirtieron en palabras. Entonces entre bordar y bordar aparecieron identidades y vivencias que habrían quedado en el olvido, sin embargo se transformaron en nombres finalmente y así nació este diario con vida, un cuento de recuerdos, legados, proyectos, momentos lejanos y cercanos que fueron esqueletizando mi propia identidad. Esto es un poco lo que soy. De alguna manera esta historia personal, también permitirá recordar a muchos de mi generación las penas, los miedos y desencuentros que nos tocó vivir. Las faltas, las ausencias y el reencuentro con lo que se siente propio, que a veces se va y nos deja muy solos. Hay alegría, optimismo, fe y por sobre todo testimonios que entre muchos otros construyen una historia patria ajena, donde tuvimos que ayudar a que el sol nunca dejara de brillar en nuestros corazones y en nuestras acciones.
FELIPEFUENZALIDA.COM