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Extremadura: la normalidad como protagonista
La campaña de fruta de hueso extremeña transcurre bajo signos de regularidad, con la única excepción del desastre climatológico acontecido con la cereza.
mundial por su alta especialización extracomunitaria en contenedores que salen hacia Brasil, Colombia, Ecuador, Méjico, Canadá y Sudáfrica, así como otros destinos en Oriente Medio.
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Las ventas hacia los mercados comunitarios también están resultando óptimas a pesar de la demanda un tanto ralentizada de los europeos por causa de la elevada inflación de los alimentos.
El mercado nacional representa alrededor de un 20% de las ventas; del restante 80% que va a los mercados exteriores, el 30% se dedica a países extracomunitarios.
Variedades de ciruelas
Desde Afruex se calcula que la producción final en Extremadura puede estar entorno a los 260.000 toneladas de fruta, ya que han perdido más de 20.000 toneladas de cereza. Una cifra inferior a su potencial real pero que permitirá que la campaña transcurra con la normalidad habitual en términos de calidad de la fruta y de su comercialización.
La temporada empezó algo más tarde de lo que es usual, con un comienzo que se situó a finales del mes de mayo y se prolongará hasta septiembre. Las variedades extra tempranas se vieron afectadas por las heladas del mes de febrero, por lo que en este inicio los volúmenes fueron escasos. “Sin embargo pasada esta primera etapa, la situación ha quedado regularizada plenamente en todos los sentidos desde el calibre de la fruta hasta su excelente calidad,” explica Miguel Angel Gómez, gerente de la entidad extremeña.
En la semana 28, la escasa cosecha de cereza se encontraba muy avanzada y respecto a melocotón, nectarina y paraguayo el 80% de la producción ya había sido recolectada. En cuanto a la ‘fruta reina’ de Extremadura, la ciruela se había cosechado alrededor de un 26%. A partir de esta semana aparecen en el mercado las variedades de ciruela con mayor volumen, y todo indica que la campaña acabará sin incidencias.
Precisamente, en ciruela, Extremadura se ha convertido en todo un referente
La variedad Angeleno representa una de las más típicas de Extremadura y se encuentra en el segmento más tardío con un buena producción y comercialización. Sin embargo, y para alargar la temporada, los operadores de esta fruta han llevado a cabo una reconversión varietal desde ciruelas más antiguas hacia variedades más tempranas y productivas, con lo que los meses de junio, julio y agosto quedan cubiertos. Las nuevas variedades van desde Fortune hasta Larry Ann, o variedades amarillas que ocupan todo el calendario. Angeleno es la encargada de cerrar la campaña.
Paraguayos
Una de las notas peculiares de la campaña la ha puesto el paraguayo, del que Extremadura solo produce un 7%, pero que no se librado de los bajos precios registrados durante toda la campaña, por debajo del precio del melocotón. “No es una cuestión que nos afecta de pleno porque no somos los grandes productores españoles de esta fruta, pero es un asunto que ya preocupa al sector en general, debido a la gran cantidad de plan - taciones que se pusieron para sustituir variedades más antiguas de otras frutas de hueso.”
El Jerte, declarado zona catastrófica
La nota más negativa de la campaña la ha protagonizado la cereza del Jerte, en una campaña en la que se esperaban unos 40 millones de kilos de cerezas, todo se fue al traste con las intensas lluvias que rajaron la cereza a principios del mes de junio.
La cereza es una fruta a la que la lluvia hace mucho daño cuando está madura porque el árbol absorbe muy rápidamente el agua y la fruta empieza a engordar muy deprisa, revienta la piel y se agrieta.
Las pérdidas se situaron entorno a los 60 y 80 millones de euros, lo que ha significado un lastre absoluto para los vecinos de la zona, ya que un 90% de su población vive directa o indirectamente del negocio de la cereza.
Como paliativo a esta situación, el Ministerio de Agricultura destinó unos 8 millones de euros a la zona. Estas ayudas serán financiadas con cargo al paquete de 276,7 millones de euros de apoyo al sector agrario incluido en el real decreto-ley de medidas contra la sequía y para hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 4 de mayo.
La comunidad con más pantanos
Una de las grandes ventajas de Extremadura es que tiene el 27% del agua dulce de España y cuenta, además, con los mayores pantanos de España, entre los cuales destaca el de La Serena, que es el tercero más grande de Europa. Sin embargo, en estos momentos no mantiene las reservas adecuadas, aunque si están estables en el resto de pantanos.
Este hecho, dentro del contexto del cambio climático que se vive, proporciona cierta seguridad al sector hortofrutícola, al menos de momento.