¿Desde dónde se ve?
Pedro García Crespillo
El turó (cerro) de la Vilana se alza hasta los 445 metros sobre el nivel del mar, 67 menos
que el Tibidabo. Desde muchos puntos de la ciudad se divisaba perfectamente; sólo hacía falta ponerse en zona alta o libre de edificios (una gran plaza, un descampado, una gran avenida) o transitar por alguna calle orientada hacia él. Pero hacía falta, sobre todo, saber lo que se buscaba. Fuera de la ciudad se podía ver desde demasiados puntos como para enumerarlos; se divisaba, por ejemplo, desde Montserrat, desde Granera, desde Sabadell o Terrassa, desde Sant Cugat, obviamente, desde el camino que asciendía a la Mola, en Sant Llorenç de Munt… ¡Qué se yo!, desde casi todas partes. Antes de 1992, el turó carecía de protagonismo, situado a la derecha o a la izquierda del Tibidabo, según se mirase desde fuera o desde dentro de la ciudad, respectivamente. Así es que aunque pudiese verse, no se buscaba con la mirada: de silueta poco reconocible, le faltaba lo que sí tenía el Tibidabo, una construcción encima que lo señalara y lo sacase del anonimato en el skyline de la Sierra de Collserola.
Lo que el Tibidabo tenía sobre sí era el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón, empezado a construir en 1902 y terminado en 1961, y culminado por el abrazo entre el cielo y la tierra de su gran Cristo de cobre, que sustituyó en 1950 el destruido en 1936, durante la Guerra. Y antes, desde 1899, contaba con el parque de atracciones más antiguo de España y el segundo más antiguo de Europa. Primero uno y luego otro, sirvieron de referencia. “Allí está Barcelona”, desde la distancia, o “Desde aquí se ve así el Tibidabo”, desde dentro. Hasta que en 1992, con motivo de las Olimpiadas de Barcelona y como faro de comunicaciones para el mundo ávido de noticia y espectáculo, se levantó 288 metros sobre los 445 del turó de la Vilana, para un total de 773, la nueva referencia. Desde Sabadell, desde la Ronda del Litoral, desde la Barceloneta, desde el Port Vell, desde la Plaça d’Espanya, desde la terrassa de Les Arenes, desde Urgell, desde Carles III, desde el Carmel y el Coll, desde Sant Gervasi y desde la Ronda de Dalt... Así se ve la Torre de Collserola
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Entrada de Sabadell
Ronda del Litoral
Barceloneta
Port Vell
Plaça d’Espanya
Terrassa de Les Arenes
Urgell
Carles III
El Carmel
El Coll
Ronda de Dalt
Sant Gervasi
Y tú, ¿desde dónde la ves?
IDEP. Paisaje Urbano. Prof. I単igo Bujedo Aguirre. Febrero de 2014