ISSN 1900-3943
MAYO DE 2016
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contexto@unal.edu.co Bogotá, Colombia
contexto Publicación estudiantil de la Universidad Nacional de Colombia - Sede Bogotá
Abismarse es una serie realizada en el 2015 en las ruinas del Edificio de Artes (303) por la iconicidad de dicho espacio, que, por una parte, refuerza la exploración visual y conceptual de la serie y, por otra, guarda un registro de un edifico que sufre el mismo destino que el cuerpo protagonista de la serie. Javier Rey.
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Defendamos a Ceniciencia
La deuda de los estudiantes con la paz
Fuck you, MEN!
Manual para acabar con la Universidad Pública
Daniel Zabala Torres
David Enrique Flórez Salgado
Camilo Andrés Álvarez Lozano - VIDA UNIVERSITARIA -
- VIDA UNIVERSITARIA -
Camilo Arana Toscano - PENSAR A COLOMBIA -
- PENSAR A COLOMBIA -
contexto Publicación de los estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá ISSN 1900-3943 Número 21 MAYO de 2016 ........................................................................... Comité Editorial Alexei Ochoa Duarte Maestría en Ingeniería de Sistemas y Computación David Enrique Flórez Licenciatura en Filología e Idiomas: Francés
Editorial
Jennifer Pedraza Economía
Representación estudiantil Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá
Andrés Felipe Rojas Administración de Empresas Jennifer Cardona Enfermería ........................................................................... Colaboradores Joan Sebastián Arteaga Estadística Laura Navarro Odontología ........................................................................... Corrección de Estilo Manuela Rondón Triana ........................................................................... Fotografías Javier Rey (Portada) Luis Alejandro Orjuela Pimienta David Enrique Flórez Salgado ........................................................................... DISEÑO Y Diagramación Germán Escobar Barbosa ...........................................................................
El material expuesto en esta publicación puede ser distribuido, copiado y exhibido por terceros si se muestra en los créditos. No se puede obtener ningún beneficio comercial. No se pueden realizar obras derivadas. Los textos presentados en la siguiente publicación expresan la opinión de sus respectivos autores y la Universidad Nacional de Colombia no se compromete directamente con la opinión que estos puedan suscitar.
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i hablamos de paz, ¿qué se imagina? Seguramente nos encontraremos con un concepto de múltiples significados y que despierta variedad de sensaciones en los colombianos, a pesar de que, para la mayoría de nosotros, denota de manera común aquello desconocido por este país y, por tanto, un anhelo al que todos debemos aportar. La apertura de la mesa de diálogos en la Habana entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP, y la reciente instalación de una nueva mesa con el ELN han devuelto la centralidad a la discusión en torno a cómo entendemos el conflicto armado en Colombia. Este conflicto nos toca a todos de manera directa o indirecta y, por ende, es tarea colectiva la construcción de la paz: una apuesta que incluye discusiones políticas y económicas cruciales para el país. La academia ha realizado invaluables aportes al conocimiento de la complejidad del conflicto colombiano que permiten reconocer diversas percepciones, desde las cuales se plantean diferentes caminos para brindar posibles soluciones, que pueden o no ser excluyentes. Ejemplo de esto fue la conformación de la Comisión Histórica del Conflicto y Sus Víctimas, en el marco de la mesa de la Habana. Hoy el principal reto se ubica en el aporte que, desde la academia (con los estudiantes como sujetos activos en ella), se debe hacer a la construcción de la paz y, en consecuencia, en la discusión sobre qué modelo educativo correspondería forjar en esa nueva realidad e, incluso, sobre si es pertinente pensar en ello. La responsabilidad que tiene la Universidad más importante del país en el escenario actual está sujeta a algunos cuestionamientos: ¿sabemos acaso, como comunidad universitaria, qué significa una educación para la paz?, ¿esta se enmarca únicamente en la defensa de una educación pública, gratuita y de calidad? ¿Está la universidad colombiana preparada para avanzar en la implementación de los acuerdos? Todos estos y otros muchos cuestionamientos son los que, desde múltiples visiones y posturas, propias de la diversidad de los estudiantes de la UN, se nos plantea que resolvamos. Esto, aun más cuando el tema parece ser secundario en la universidad pública e, incluso, hemos sido espectadores de cómo otras instituciones, incluyendo universidades como La Salle
EDITORIAL / CONTENIDO
Contenido ........................................................................... VIDA UNIVERSITARIA
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Crédito para la Universidad Nacional: estocada final de la privatización David Rodríguez Defendamos a Ceniciencia Daniel Zabala Torres
5 La deuda de los estudiantes con la paz Camilo Andrés Álvarez Lozano ........................................................................... PENSAR A COLOMBIA
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y Los Andes, se han “puesto la 10” y, a través de programas académicos o eventos, en los que inclusive las insurgencias han tenido un puesto importante (cosa que no debería sorprendernos), han puesto de su parte para la construcción de una paz real. Es tiempo de que la paz sea el resultado no solo del evento en que se firmen unos acuerdos (que, en el caso de la mesa de la Habana, podría, como se ha comentado, ser en el Auditorio León de Greiff), sino de la síntesis de una amplia discusión al interior de toda la sociedad colombiana. Allí, la comunidad académica tiene un asiento, que ha estado vacío, pero que es de vital importancia. La universidad, en su carácter científico y generador de conocimiento, debe salir del letargo en que el mismo conflicto político y social la ha ubicado y debe asumir nuevamente su papel como un centro de pensamiento y debate de todos los temas relevantes para el país. El arte, la cultura, la ciencia, las disciplinas, la crítica, la diversidad y la academia en general deben estar sustentados en propósitos reales de justicia social. Los aportes particulares de todas las ramas del conocimiento no solo son importantes, sino también imprescindibles. Es una responsabilidad, una obligación que no podemos evadir y un reto irrenunciable con la sociedad colombiana el que nos plantea la historia. Debemos responder a él con el criterio y la altura que se espera de la Universidad Nacional de los colombianos.¶
Fuck you, MEN! David Enrique Flórez Salgado ...........................................................................
7 Manual para acabar con la Universidad Pública Camilo Arana Toscano ........................................................................... CONTEXTO INTERNACIONAL
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Haga un nuevo Estado en 18 meses Andrés Felipe Chiguasuque Buenhombre ........................................................................... REBELARTE
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¿Por qué importa la historia del movimiento estudiantil? Gabriela Rondón Triana Leidy Sophia Sandoval Camargo ........................................................................... CIENCIA Y CULTURA
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La revolución científica: ¿motor o freno de la transformación social? Alexei Ochoa ........................................................................... CRÓNICA
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Una súper estudiante nueva en la U.N. ........................................................................... PALABRARTE
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Réquiem por la juventud Ignacio Alcantuz Atemporal Doris Villareal Pazos Fotografía: Luis Alejandro Orjuela Pimienta, estudiante de Contaduría pública.
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Crédito para la Universidad Nacional: estocada final de la privatización David Rodríguez Estudiante de Administración de empresas
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as directivas de la Universidad Nacional han decidido aprobar un cupo de endeudamiento con Findeter ante la necesidad de fortalecer y mejorar la estructura de la UN, lo cual es completamente necesario. Sin embargo, el tema en cuestión es si el proyecto debe hacerse mediante un crédito con una institución financiera, o mediante una financiación progresiva y adecuada del Estado. La lógica que guía al rector Ignacio Mantilla es que, ante la necesidad, debemos aprovechar la tasa de interés que nos ofrece Findeter, porque considera que la Universidad podrá responder al nuevo compromiso por medio de la Estampilla pro UN y los ingresos provenientes por concepto del impuesto CREE —los cuales desaparecerían con la reforma tributaria impulsada por el Gobierno Nacional—.Lo que no menciona el rector es que hay un estudio riguroso del comportamiento financiero de la Universidad, elaborado por los profesores de Ciencias Económicas, que demuestra que la situación de la institución no es color de rosa, como nos la quieren pintar. De acuerdo con el documento que presentó el Decano de la Facultad de Ciencias Económicas, José Guillermo García a la Comunidad Universitaria, “durante el periodo 2000-2013 los ingresos netos de la Universidad crecieron un 52%, [mientras que sus] gastos crecieron un 76%. Es decir, que durante un periodo de 13 años, se [ha] ido acumulando un déficit creciente del presupuesto de la Universidad Nacional de Colombia” (¿Autismo en el Pan Global de Desarrollo?, 2015). Adicionalmente, el mismo texto alerta que, de no tomarse serias medidas estructurales, la situación se tornará insostenible y la probabilidad de una situación de default, o banca rota en los próximos veinte años, o menos, no puede descartarse Si a lo anterior le añadimos el crédito, la posibilidad de que nuestra Alma Mater entre en default será un hecho. Actualmente, el Consejo de la Sede Palmira ha decidido aprobar el primer préstamo efectivo con Findeter, en el cual los dos escenarios de crédito ofrecidos a la institución son pagar, al final del plazo, ¡el doble del préstamo adquirido o cinco veces y media este monto! (Rodríguez, 2016). En ambos casos, un boquete grande o gigantesco al pequeño barco en el que se sostienen las finanzas de la UN.
Mientras tanto, el Gobierno de Santos y Parody se quiere lavar las manos de la responsabilidad de financiar adecuadamente la Universidad. Espera, además, solucionar el problema de la financiación con demagógicos subsidios en las tasas de interés. El gobierno propone una tasa de compensación del crédito, que pone en evidencia que su “compromiso” con el centro de pensamiento más importante del país, en cuanto a infraestructura, no es más que un subsidio del 1% en el primer escenario del crédito (usando el IPC como base para el préstamo) o del 3% en el escenario más adverso (usando el DTF como base). Eso sí, el MEN hace una salvedad en su respuesta a la petición de la compensación de la tasa, en la cual comunica que no asegura que la UN tenga los recursos suficientes para cumplir con el pago. En caso de que la institución no pueda cumplir con las obligaciones adquiridas por el servicio a la deuda, que es lo más probable en caso de que se apruebe el crédito con Findeter, la Universidad no podrá cumplir con sus responsabilidades financieras y estará en banca rota. Dada esta situación, se le dirá al país que lo público no es eficiente —negando la irresponsabilidad estatal en este caso— y, entonces, se propondrá que la UN sea intervenida por el músculo financiero del capital privado, que la “salvará”. Con esto, quedan al desnudo las intenciones del Gobierno Nacional de acelerar y fomentar un proceso de liquidación de la Universidad de los colombianos. Por este motivo, la comunidad universitaria, en conjunto, debe agitar la bandera por la plena financiación de la educación superior pública y articular la lucha con los demás sectores que se oponen a las políticas económicas del gobierno de Santos, para así, con una gran convergencia nacional, lograr construir un nuevo modelo de país.¶
REFERENCIAS >> ¿”Autismo” en el Plan Global de Desarrollo? Comentarios a las Ideas Rectoras del PGD 2016-2018 de los Profesores de la Facultad de Ciencias Económicas. (2015). Bogotá D.C (paper). >> Rodríguez, D. (2016). Análisis financiero del crédito con el FINDETER, Sede Palmira. Bogotá (paper).
Defendamos a Ceniciencia Daniel Zabala Torres Estudiante de Química Farmacéutica
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Imagen: AhNinniah. Mad scientist. www.openclipart.org/detail/178586/mad-scientist. CC-BY.
a princesa, la niña de los ojos lindos de los países que buscan consolidar o lograr su desarrollo, es la ciencia y la investigación. Esto se puede notar en países que ostentan la mejor calidad de vida, como Dinamarca, Australia y Alemania, y que invierten más del 2.8% del PIB en actividades de Investigación y Desarrollo, mientras Colombia invierte tan solo el 0.2%. Corea hace 50 años poseía condiciones similares a las de Colombia y, gracias a apostarle a la producción nacional, hoy invierte el 4,1% de su PIB en este campo (Unesco, 2015). A nuestra princesa la conforman en cerca del 30% los aportes de los estudiantes y profesores de la Universidad Nacional (CVNE, 2013), la institución que más aporta a la producción científica del país. No obstante, a esta princesa los últimos gobiernos la han puesto a vestir harapos y oropel. Así, actuando en contra de los intereses de la comunidad académica, Santos redujo en 28.000 millones de pesos el presupuesto de Colciencias para el año 2016, como se estableció en el Presupuesto General de la Nación. Colombia está en mora de generar políticas claras en materia de ciencia que le apuesten a los centros de carácter público de producción de conocimiento, logrando que nuestra Universidad dé todo su potencial. El 10% de las regalías que se destinan a Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) para las regiones no es suficiente ni efectivo, ya que se convierte en plata de bolsillo y mermelada de las gobernaciones. Un ejemplo de esto es que de 2010 a 2013 la Inversión en CTI se incrementó, al pasar de $2.7 billones en 2010 a $3.5 billones en 2013; pero el valor de los proyectos calificados sufrió una disminución, de $402 mil millones en 2010 a $240 mil millones en 2013, lo que concluye en una correlación negativa (-0.66) entre dinero destinado e inversión en CTI.
Publicación estudiantil de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá El Conpes de Política Nacional de CTI para la próxima década guarda un silencio doloso frente a la financiación directa por parte del estado a las IES públicas y, para salirse por la tangente, descarga esta responsabilidad en el sector privado. Como dato curioso, se puede afirmar que la organización más citada para determinar la política estructural del documento fue la OCDE. A partir sus recomendaciones, se quiere pasar de 7 doctores graduados por millón de habitantes anuales a 70, sin una inyección presupuestal e incentivando el endeudamiento de los doctorandos. Esto difiere de lo que hacen los países más desarrollados, que invierten directamente en las universidades para aumentar el número de doctores. Pareciera que en Colombia el propósito de aumentar el número de doctores es más un negocio del sector financiero que una apuesta por generaer conocimiento. Finalmente, el presupuesto de investigación de la Universidad Nacional hace parte de presupuesto de
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inversión. Para disminuir el déficit del presupuesto de funcionamiento de 93 mil millones a 24 mil millones, la Universidad se ha apretado el cinturón, recortando su inversión. Evidencia de esto es la reducción en la cantidad de bases de datos: 112 en 2012 y 55 hoy1; que la mayoría de equipos robustos de investigación sean obsoletos e, incluso, presenten problemas por falta de mantenimiento; y que haya habido reducción del 52% en el presupuesto de investigación. La solución a este muro de lamentos, el hada madrina que le permitirá a Ceniciencia ir al baile del desarrollo, será la unión de los profesores, los estudiantes y la comunidad académica en general para exigir políticas acertadas de financiación directa a las universidades públicas, las mayores productoras de ciencia en el país. No es imposible, la misma hada impidió que se le arrancaran 43 mil millones a Colciencias para este año. Por lo tanto, la tarea es demostrar que Ceniciencia tiene dolientes y defensores que saben que Colombia está en toda la capacidad de estar a la vanguardia de la ciencia y la tecnología mundial.¶ 1. Datos de marzo de 2016. REFERENCIAS
>> Gasto en Investigación y Desarrollo, porcentaje del PIB. (2015). Instituto de Estadística de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). Recuperado el 26 de marzo de 2016 de: datos.bancomundial.org/indicador/GB.XPD.RSDV.GD.ZS >> 28% de la producción científica del país lo aporta la UN. (24 de Mayo de 2013). Centro Virtual de Noticias de la Educación (CVNE). Recuperado el 26 de marzo de 2016 de: http://www.mineducacion.gov.co/cvn/1665/w3-article-322978.html >> Congreso de Colombia. (2015). Ley Nº 1769, Presupuesto General de la Nación. >> República, P. G. (s.f.). Evaluación política pública Beneficios tributarios. Ciencia, tecnología e innovación. Obtenido de http://goo.gl/WVy5SY >> CONPES política nacional en Ciencia Tecnología e Innovación 2015 – 2015. (2015). Departamento Nacional de Planeación. Colombia.
La deuda de los estudiantes con la paz1 Camilo Andrés Álvarez Lozano Estudiante de Ingeniería Eléctrica
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ra una mañana típica bogotana, con el frío estremecedor que azota a los capitalinos, mezclado con el estrés y la ansiedad de la movilidad diaria. Todo se conjugaba para hacer de esa jornada otra sin ningún acontecimiento especial. Excepto para mí y otros 3.296 estudiantes que fueron admitidos a la Universidad Nacional de Colombia. Sin duda alguna, el primer día de universidad es un momento indeleble para nuestras vidas. Lo que ocurra en esos primeros contactos con la educación superior marcará de manera definitiva y contundente la vida del universitario promedio. Afortunadamente existe esa denominada “semana de inducción”, que, lejos de ser una experiencia meramente académica, permite el reconocimiento de un mundo totalmente diferente para el nuevo estudiantado. Eran de esperarse las actividades bochornosas y los juegos sin sentido para romper el hielo y conocer a los compañeros de carrera; además de las tediosas, aunque necesarias, charlas sobre todos los servicios que ofrece la Universidad. Me sentía inmerso en un mar de información, en donde cada curso, clase y grupo de investigación se veía como una nueva oportunidad para ser mejor y contribuir a este proyecto llamado “Colombia”. Esta posibilidad es un ideal que nos compete a todos los que, por azar o destino, nacimos en este pedazo de tierra y aun más a los estudiantes, que seremos los forjadores del mañana. Sin embargo, la susodicha semana fue algo alejada de lo que es la Nacional hoy día. ¿Qué mejor muestra de esa realidad que la visita del presidente de la república Juan Manuel Santos? El campus y las redes sociales se atiborraron con comentarios que alababan o condenaban la visita del mandatario a la Ciudad Universitaria. Por mi parte, considero que llegar a una resolución frente al tema no es tarea fácil. Cada quien tiene definida de antemano su postura política: dejamos de perseguir ideales y metas para ser solamente seguidores de caras y nombres de partidos políticos, apoyándolos incondicionalmente (aunque muchas veces no haya razones lógicas para hacerlo).
Lo que sí puedo aseverar es que este inesperado momento en el auditorio más representativo de nuestra institución (que ha pasado por fogosos debates, foros de los mejores académicos e, incluso, por el trasero blanco del exrector Mockus) debe significar algo especial. No puede ser una simple coincidencia o un espacio vacío que tenía el presidente en su agenda. Debe ser que el país está resaltando aun más el papel que tendrá la academia, y en especial la mejor universidad pública del país, luego de la firma de la paz, hecho que, para bien o para mal, cambiará el país completamente. Lo que hoy vemos en los medios de difusión acerca de tratados, acuerdos, reparación, etc. será lo que en unos años nuestros hijos estudiarán como historia de Colombia. Los atentados y ataques que sufrimos a diario aparecerán solo en libros y en nuestra memoria. Inclusive, más adelante los colombianos posiblemente consideraremos esos episodios como parte de un texto de ciencia ficción. En este punto debemos replantear nuestro pensamiento como institución de educación superior e investigación, y focalizarnos en lo que se viene en los siguientes años. Muchas veces hemos escuchado que seremos la generación de la paz y, aunque para muchos es algo lejano, cada día vemos que el acuerdo definitivo se está materializando y que nosotros seremos quienes tomarán las riendas de Colombia para contribuir a su desarrollo, el cual ha sido dejado en segundo plano por los 50 años de violencia. La Universidad Nacional de Colombia, gracias a su calidad de pública y autónoma, debería convertirse en el principal centro de pensamiento para el posconflicto. Pero obviamente es el estudiantado el que debe tomar la iniciativa. Para nosotros debería ser un deber atender el llamado de nuestra Nación y usar la academia para darle fin a esta guerra. Aún existen muchas temáticas que abordar y muchos aspectos en los que podemos contribuir a nuestra patria. Como estudiantes de uno de los mayores generadores de pensamiento político, económico y académico de Colombia, ¿qué estamos haciendo desde nuestra vocación para ayudar a la resolución del conflicto? ¿Convendría o no asistir a los foros, debates, conferencias y centros de pensamiento para el seguimiento a los diálogos de la paz? ¿Nos estamos organizando para replantear un país en paz con los retos que acontezcan? ¿Cuál es el país que soñamos y qué estamos haciendo por él?¶
La Universidad Nacional de Colombia, gracias a su calidad de pública y autónoma, debería convertirse en el principal centro de pensamiento para el posconflicto.”
1. Agradezco a Daniel Santiago Flechas y a Katty Lorena Salazar por su opinión, y a Vanessa Sarmiento Alarcón por su valiosa ayuda en este escrito.
REFERENCIAS
>> La U.N. recibe nuevo contingente es estudiantes. Agencia de noticias Universidad Nacional. (29 de noviembre de 2015). Recuperado el 16 de marzo de 2016 de: http://agenciadenoticias.unal.edu.co/detalle/article/la-un-recibe-nuevo-contingente-de-estudiantes.html
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Fuck you, MEN! David Enrique Flórez Salgado Estudiante Filología e Idiomas: Francés
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ompartimos con ustedes la situación que trae la nueva reforma del sistema educativo, con base en la declaración política del Encuentro Nacional de Estudiantes de Licenciaturas (ENEL), que se llevó a cabo a inicios de marzo en la Universidad de Caldas con alrededor mil futuros profesores de todas las regiones del país. Desde el año pasado fueron difundidos, por vías informales, la Resolución 02041 de 2016 y el Decreto 2450 de 2015, dos documentos que el MEN (Ministerio de Educación Nacional) esperaba pasaran desapercibidos; a pesar de que modifican de forma sustancial los requisitos para otorgar el registro calificado a las licenciaturas de todo el país y, por ende, el corazón del sistema educativo, la labor docente. A simple vista, trasluce el interés mezquino del gobierno a través de su ministerio: disminuir el contenido específico de los currículos (bajo la excusa de aumentar la práctica), transformando las licenciaturas en carreras técnicas y debilitando, hasta hacer desaparecer, los programas de licenciaturas de las universidades públicas. Esto fortalece la educación privada y abre nuevos nichos de negocio y endeudamiento al capital financiero (por eso el nuevo programa Ser pilo paga, profe y el repentino interés de las universidades privadas en abrir licenciaturas). Esta reforma iguala los requisitos para otorgar el registro calificado a los de la Acreditación de Alta Calidad, otorgada por el CNA (Consejo Nacional de Acreditación). Esto sería un proyecto provechoso, si se respetara la autonomía universitaria (dejando de lado los estándares del CNA) y si viniera acompañado del presupuesto necesario para mejorar la baja calidad de algunos programas a causa del desfinanciamiento que el Estado ocasiona. Al no existir el compromiso por financiar el cumplimento de estas exigencias, se anuncian desde ya cierres de programas por todo el país “por no cumplir los estándares de calidad”. También impone la unificación de saberes por áreas de conocimiento, obligando a las universidades a impartir un conocimiento general, para así eliminar y estandarizar algunos programas. Además, se exigen nuevos requisitos, como certificar nivel B1 de inglés para todos los licenciados y C1 para los de lenguas extranjeras, que se vuelven cargas financieras que obligarán a universidades y familias a endeudarse. Otro requisito perjudicial es la exigencia de que todas las licenciaturas sean presenciales. Ya se han comenzado a eliminar aquellas que son a distancia y que constituyen la única posibilidad de acceder a la educación superior en algunas regiones apartadas. Producto de las discusiones del ENEL se exige: • La derogatoria de la resolución y del decreto impuestos por el MEN y del Artículo 222 del actual Plan Nacional de Desarrollo, cuya procedencia y contenido fueron rechazados por unanimidad. • Promoción y desarrollo de las luchas locales por la no aplicación de las reformas a favor de los requerimientos del MEN, pues ya hay programas que están siendo reformados. • Impulsar una reforma democrática y vinculante de las licenciaturas, desde un escenario en el que prevalezca la voz de las comunidades educativas y se respete la autonomía universitaria.
• Plena financiación de las universidades públicas y respeto a la autonomía de las comunidades educativas, con el fin de resolver las álgidas problemáticas de las licenciaturas. Se convoca a que regionalmente se discuta acerca de la necesidad de organizar un espacio nacional de estudiantes para enfrentar esta nueva táctica reformista. Se espera que se analice la necesidad y pertinencia de un encuentro nacional de estudiantes de educación superior. De acuerdo con esa discusión, se considerará preparar un paro nacional estudiantil. Al mismo tiempo se ha promovido la movilización: • Se han realizado actividades para socializar las conclusiones del ENEL y las implicaciones de la resolución y el decreto. Se participó del Paro Nacional el 17 de marzo con la consigna: ¡Que la educación no pague la crisis! • El 13 de abril realizamos una consulta nacional acerca del futuro de las licenciaturas, la pertinencia de esta reforma y la disposición a construir una reforma desde las universidades. En nuestra universidad votaron 389 estudiantes de las cuatro licenciaturas. La gran mayoría respondió que no había participado en la construcción de la reforma, y que quería exigir su derogación y apoyar la construcción colectiva de una nueva reforma como política pública. • Salimos a marchar el 21 de abril para entregar al MEN el resultado de la Consulta Nacional y exigir respeto por la voluntad de las comunidades educativas. • Se trató la grave situación de la Universidad del Tolima, cuya desfinanciación la tiene a punto de cerrar, y se ha promovido una movilización en solidaridad desde Ibagué hasta Bogotá para exigir presupuesto y autonomía. • Se invita a vincular nuevos aliados: universidades privadas, el magisterio agremiado en Fecode, organizaciones de profesores universitarios, Escuelas Normales Superiores, entre otros. Nuestra tarea es unir fuerzas contra el modelo neoliberal de educación, preparar futuras batallas, como la de la reglamentación del Sistema General de Participaciones, y proponer una reforma que realmente mejore el sistema educativo desde sus bases.
No podemos (…) permitirnos renunciar a esta lucha histórica por una universidad al alcance de las necesidades y oportunidades de nuestro país.”
Lo invitamos a usted, querido lector, a que esté al tanto y nos acompañe a gritar “Fuck you, MEN!”. No podemos seguir siendo espectadores del debilitamiento del pensamiento crítico y autónomo ni permitirnos renunciar a esta lucha histórica por una universidad al alcance de las necesidades y oportunidades de nuestro país. No podemos apáticamente dejar solos a los licenciados como si no nos importaran. Necesitamos que nuestro mensaje llegue a la opinión pública. Empezaron por las licenciaturas y pronto irán por las demás disciplinas. Si logramos unirnos desde ya, podremos tomarle ventaja a esta fuckin’ política, que, gota a gota, está desquebrajando nuestra Nación. Es momento de demostrar que es legítimo exigir y obtener una educación propuesta desde los pupitres y no desde los escritorios.¶ Declaración política del ENEL completa en http://j.mp/ENEL2016MZL
Fotografía: David Enrique Flórez Salgado.
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P E N S A R A C O LO M B I A
Manual para acabar con la Universidad Pública Camilo Arana Toscano Estudiante de la Licenciatura en Filología e Idiomas: Alemán Este es un manual de uso exclusivo para los enemigos de lo público. Si usted no es uno de ellos, absténgase de permitir que cualquiera de las recomendaciones expuestas en este documento sea puesta en práctica. continuación se presentan algunas de las tácticas mediante las cuales, con un gobierno de apariencia democrática, podemos lograr imponer nuestros intereses y los de la propiedad privada por encima de los derechos de la ciudadanía. 1. La Universidad Pública da razones a la población para pensar que la existencia de lo público es conveniente o, incluso, necesaria. La fuerza de esta idea debe ser disminuida. Por ello se recomienda, antes que nada, fortalecer el modelo que avala y promueve la propiedad privada. Se debe hacer uso de cualquier estratagema mediática que ayude a promover el individualismo y el egoísmo, a afianzar el culto a la propiedad privada. Con esto cumplido, la mercantilización de la educación —y de los derechos, en general— no parecerá algo improcedente. 2. La educación es un derecho humano; sin embargo, no está legalmente establecido qué tipo de educación superior debe garantizar el Estado. Por esto, el Estado no está obligado a financiar y proteger la Universidad Pública, pues puede subsidiar la educación superior por medio de cualquier otro tipo de instituciones de calidad despreocupada y proyección social nula, o destinar el presupuesto a entidades financieras que cumplan función de “mediadoras” y “garantes”. De esta manera, resulta viable congelar el presupuesto orientado a la Universidad Pública y destinar los recursos públicos a instituciones que los transformen en privados —como las entidades financieras encargadas de los créditos educativos— a través, por ejemplo, de programas populistas que disfracen una inyección presupuestal a las universidades privadas. Acciones como estas solo son definitivas a largo plazo, pero sin duda arrojan resultados progresivamente desde su implementación. 3. “Autonomía universitaria” es un concepto que, afortunadamente, no se ha desarrollado del todo y, por tanto, puede ser reorientado. Aprovechando esto, y la posibilidad de incidencia del Estado, un paso fundamental para el aniquilamiento de la Universidad Pública es evitar que exista una democracia real en su interior, concentrando la posibilidad de Autonomía Universitaria en un pequeño grupo de profesores de entera confianza. Alejar a la comunidad universitaria de la capacidad de decidir los rumbos de su universidad asegura que no la fortalezca internamente y sea marginada institucionalmente mientras el plan continúa. 4. Con un gobierno universitario poco democrático, dirigido por pocos, es fácil apremiar a quienes están a cargo para que tomen decisiones que aceleren y encausen el proceso de aniquilamiento de la Universidad Pública. Iniciativas como endeudar a la Universidad, reducir sus gastos —y, por consiguiente, su calidad— y buscar reemplazar la financiación estatal por autofinanciación degradante logran este cometido. Todo esto sin olvidar que, paralelamente, los directivos de la Universidad pueden ir generando un escape de presupuesto significativo por medio de la corrupción y el despilfarro. 5. A esta altura, la oposición al aniquilamiento de la Universidad Pública seguramente se habrá organizado de diversas formas. Desarticular esta oposición es un trabajo tedioso, pero que debe llevarse a cabo. La estigmatización y deslegitimación pueden funcionar hasta cierto punto; sin embargo, en un escenario posterior, es necesario prohibir cualquier acción movilizadora que esté en contra del plan: tomar represalias académicas contra los agitadores y emprender acciones coercitivas en cualquier escenario de manifestación pública. Si la situación se prolonga, se debe recurrir, sin dudarlo, a las amenazas y ataques directos hacia los focos de organización y movilización del estudiantado, mediante las confiables fuerzas paraestatales. 6. Sin embargo, la movilización estudiantil se puede evitar con algunas medidas previas. La proyección social de la universidad y el pensamiento crítico como eje de la formación académica son factores esencialmente contraproducentes, puesto que proporcionan al estudiantado herramientas para interpelar y confrontar al gobierno y al modelo de universidad que nos conviene. Además, la simplificación de los currículos, que aleja la universidad de la proyección académica e investigación, la invisibilizan y le quitan impacto
Fotografía: David Enrique Flórez Salgado.
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en la sociedad. La modificación de las mallas curriculares en pro de la configuración de un proceso académico alejado de la realidad del país significa un paso sustancial en la muerte de la Universidad Pública. 7. Con una comunidad estudiantil con altos niveles de indiferencia, es más fácil lograr un alineamiento hacia nuestro proyecto de universidad y, ¿por qué no?, de país. Privar a los estudiantes de la posibilidad de apropiarse del campus y de la universidad como universalidad del conocimiento, mediante la manipulación y la generación de imaginarios excluyentes dentro del estudiantado mismo, ayuda a conseguir un apoyo importante que incluso puede lograr que se vea como necesaria la privatización o la desaparición de la universidad. Para ello, es necesario colmar el campus de propaganda institucional y erradicar cualquier iniciativa identitaria de los estudiantes. 8. Con 7 pasos cumplidos, la Universidad Pública ya estará agonizando. Para dar paso a su entierro, se debe generar preocupación sobre la calidad educativa. Así será posible introducir la idea del seguimiento a las universidades, mediante estándares impuestos por nosotros mismos. Al crear estándares de fácil manipulación para las privadas e imposible cumplimiento para las públicas, se podrá proceder a dar el golpe de gracia: eliminar los programas que no cumplan con los estándares planteados. Un golpe de gracia que debe asestarse pausadamente, atacando agrupaciones curriculares específicas; así, en el caso de haber oposición, no contará con la fuerza suficiente para causar problemas. La prudencia aquí juega un papel importante, pues si se logra eliminar una primera agrupación de programas curriculares, la segunda será más fácil y, pronto, las universidades públicas no tendrán programas que ofrecer.
Entonces, presenciaremos la muerte de la Universidad Pública y tendremos la satisfacción del deber cumplido.¶
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Fotografía: We are a nation and we have the right to decide!. Paco Rivière. https://goo.gl/PY8LU5. CC-BY.
Haga un nuevo Estado en 18 meses Andrés Felipe Chiguasuque Buenhombre Estudiante de Ciencia Política
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l 10 de enero de 2016 el parlamento de Cataluña invistió como presidente al periodista y exalcalde Carles Puigdemont, un abierto independentista que envió un mensaje directo al gobierno español: vamos por la Transición Nacional. A Finales de 2015 el partido de unidad nacional independentista Juntos por el Sí, conformado por grupos de izquierda y de derecha, no conseguía la mayoría para investir al expresidente Artur Mas. El proceso independentista parecía quedar estático. Los partidos opositores decidieron votar en bloque contra la independencia directa, a excepción de uno, que no estaba en ninguna de las dos coaliciones: la Candidatura de la Unidad Popular (CUP), un partido autoproclamado socialista, independentista, feminista, ecologista y anticapitalista que había conseguido 10 escaños, necesarios para la investidura de un nuevo presidente independentista. La CUP se volvió imprescindible para el proceso independentista, logró hacer dimitir a Mas, forzando la investidura del actual presidente, Puigdemont, exigiéndole amplias reformas sociales en pro de los más necesitados y un plazo de 18 meses para llevar a Cataluña a la nueva Constituyente. El proceso independentista catalán se ha convertido en una fuerza ineludible que golpea cada vez más fuerte el Estado español. Actualmente la política centralista española y el drenaje de recursos, que para Cataluña significa la pérdida anual de un ocho por ciento del PIB (Libro Blanco), han generado malestar, lo que ha exacerbado el sentimiento autonomista en buena parte de la sociedad catalana. Esto la llevó a exigir en 2005 una reestructuración del estatuto de autonomía, que el gobierno español
recortó sustancialmente en 2010. Las reacciones no se hicieron esperar: miles de personas acompañadas por el gobierno de Cataluña tomaron las calles y plazas ondeando la Estelada (bandera independentista catalana), al grito de: Somos una Nación, nosotros decidimos. Múltiples manifestaciones y marchas en pro de la independencia llevaron a que el 9 de noviembre de 2014 se realizara un referéndum consultivo sobre la independencia que constó de dos preguntas: ¿quiere que Cataluña sea un Estado? En caso afirmativo, ¿quiere que este Estado sea independiente? El referendo fue apoyado por el 81% de los participantes. Aun cuando participaron 2.3 millones de personas de los 7.5 que habitan la región (Pérez y Ríos, 2014), los resultados son el reflejo de la movilización social y las multitudinarias marchas, conciertos y celebraciones que se tomaron Cataluña durante tres años. La idea del catalanismo político, que ha calado en el imaginario de sus habitantes y dirigentes, defiende la tesis de que el pueblo de Cataluña es una Nación soberana, con base en su cultura, historia y lengua propia. Afirma, también, que Cataluña no logrará su máxima plenitud social, cultural y económica de la mano de España. La identidad catalana ha sido una fuerza cultural que ha permeado las esferas políticas y sociales. Esto ha generado un sentimiento de unidad inexorable, abanderado por figuras como Pep Guardiola, extécnico del Barcelona (que en señal de apoyo decidió unirse como el último de la lista a la candidatura de Juntos por el Sí), y también del FC Barcelona mismo, que, ante la investidura de Puigdemont, no tardó en trinar: “Felicidades,
REFERENCIAS >> Generalitat de Catalunya (2014). Libro blanco La Transición Nacional de Cataluña Síntesis. Barcelona. >> Pérez, Jesús y Ríos, Pere. (14 de noviembre de 2014). 1,8 millones de personas votan por la independencia catalana en el 9-N. Recuperado el 30 de enero de 2016 de: http://politica.elpais.com/politica/2014/11/09/actualidad/1415542400_466311.html
presidente Puigdemont. Que el acierto os acompañe en esta etapa histórica y apasionante que hoy inicia nuestro país, Catalunya”.
(...) miles de personas acompañadas por el gobierno de Cataluña tomaron las calles y plazas ondeando la Estelada (bandera independentista catalana), al grito de: Somos una Nación, nosotros decidimos.” El proceso se da por la unión de sectores extremadamente opuestos, todo un hito en la historia partidista española, que replantea el poder de las fuerzas constituyentes y la idea de Nación, y propone un gran debate para el derecho internacional. El nuevo Estado tiene varios retos: la responsabilidad de crear una nueva Constitución, negociar con el Estado español las deudas y las competencias administrativas, planificar la economía, crear un banco, gestionar la seguridad social y buscar la anexión a la Unión Europea.¶
Publicación estudiantil de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá
REBELARTE
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¿Por qué importa la historia del movimiento estudiantil? Gabriela Rondón Triana y Leidy Sophia Sandoval Camargo Estudiantes de Lingüística
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lo largo de la historia, los estudiantes han tenido un papel importante en las transformaciones sociales y políticas. Esto lo han logrado, en parte, gracias al movimiento estudiantil, que se ha caracterizado por el accionar autónomo dirigido a la construcción social y cultural del Estado. Por esto, ha organizado diferentes movilizaciones (que simbolizan la inconformidad, el desacuerdo y la resistencia) en las que se manifiestan sus críticas frente a quien ejerce el poder y, a su vez, se proponen soluciones alternativas. Así, los estudiantes se presentan como canales de comunicación entre los problemas sociales y las instancias académicas; buscan incentivar el debate y la reflexión crítica con el fin de promover los intereses populares. Por tanto, es importante para nosotros, los estudiantes, recordar, al menos parcialmente, la historia del movimiento estudiantil (que, como veremos, ha estado relacionada con la de la Universidad), pues él ha contribuido a cambios constitucionales y sociales. Veamos, entonces, algunas generalidades del movimiento, para resaltar la importancia de que tengamos en cuenta su historia. Durante el Frente Nacional, con el Frente Unido de Camilo Torres, el movimiento estudiantil se restablece en contra de las políticas regularizadoras impuestas por aquel y se presenta como una alternativa a los espacios políticos estrechos (que, en general, no admitían oposición) ofrecidos por los partidos políticos. Esta falta de alternativas hizo que se generara en los estudiantes una conciencia crítica a favor del cambio y la revolución. Por esto, durante esta época, el movimiento de los estudiantes finalmente logra unificar gran parte de los objetivos del cuerpo estudiantil (al igual que sus dispersas manifestaciones) y, a su vez, marca una tendencia
Fotografía: Melissa Ortíz. https://goo.gl/oATm3Q. CC-BY.
contestataria y de izquierda que estará presente en el movimiento durante los años venideros. Por otro lado, a partir de la mitad de la década de los 70, el movimiento estudiantil comenzó a caracterizarse por tener una inclinación hacia los movimientos populares (sindicales y campesinos, por ejemplo), como respuesta a las problemáticas que perjudicaban la educación, pero que, a su vez, eran transversales y llevaban a reivindicaciones compartidas. Lo anterior permitió la adhesión de otros sectores de la sociedad a la lucha por la educación como un derecho que compete a todos los ciudadanos. Esta lucha madura con el tiempo e impulsa al movimiento a trabajar por tener un papel activo en las políticas de educación en el país. Ahora bien, la Universidad Nacional, como institución pública de educación superior, ha tenido un papel fundamental en el desarrollo y consolidación del movimiento estudiantil universitario a lo largo de su historia. Los procesos que han tenido lugar en él son también elementos presentes en la historia de nuestra institución. Ejemplo de ello han sido los ceses que ha tenido el movimiento estudiantil, pues han estado relacionados con problemas internos de las universidades, como las ofensivas violentas por parte de algunos gobiernos, que tuvieron como consecuencia, incluso, la muerte de varios estudiantes de la Universidad Nacional el 16 de mayo de 1984. Asimismo, cabe resaltar el papel de la Universidad en la búsqueda de mejores condiciones, sobre todo, en el campo educativo, tanto a nivel interno, en el caso de las protestas contra rectores por decisiones que afectan las dinámicas universitarias; como a nivel externo, por su participación en las manifestaciones por la mejora de algunas de las políticas educativas nacionales. Un ejemplo de esto son las movilizaciones
organizadas por la MANE, unas de las más grandes de América Latina, en contra la reforma propuesta a la Ley 30 (en la cual se planteaban muchos aspectos discutibles, como la inclusión directa del sector privado en la educación pública y la necesidad de convertir los procesos educativos en actividades económicas y mercantiles). Gracias a estas movilizaciones, se logró que se retirara la reforma y se propuso la construcción de una ley alternativa sobre la educación superior. Una de las características resaltables de las protestas que se dieron en el 2011 fue implementar formas de participación más lúdicas y pacíficas, que inducían a mecanismos de diálogo entre las partes involucradas, en lugar de recurrir a la violencia.
“(…) la construcción de la memoria histórica hace un llamado a la comunidad universitaria para reconocer la importancia del movimiento estudiantil (…)
A modo de conclusión, es resaltable el hecho de que los estudiantes, que, con frecuencia, han estado en desacuerdo con las políticas del Estado, junto con otros estamentos (y otros movimientos), hayan logrado generar cambios decisivos, no solo en la manera en cómo se llevan a cabo las políticas que giran en torno al bienestar universitario y, en general, a los modelos de educación; sino también en las formas de pensar la sociedad y la universidad a través del pensamiento crítico y la reflexión continua. No obstante, en los últimos años el movimiento estudiantil en Colombia ha perdido fuerza y las movilizaciones más recientes no han logrado ser tan amplias como se esperaba. En ese sentido, la construcción de la memoria histórica hace un llamado a la comunidad universitaria para reconocer la importancia del movimiento estudiantil, que históricamente ha estado relacionado con la Universidad Nacional. Recordarlo invita, por un lado, a discutir la política, la educación, la economía y el derecho en nuestro país y, por otro lado, a reflexionar sobre el rol que los estudiantes están ejerciendo como agentes para lograr una sociedad más justa y, en esa medida, poder tomar en cuenta las acciones del pasado para construir el futuro. Esto podría ayudar a revitalizar ese movimiento que tal vez necesitamos ahora para alcanzar lo que, como estudiantes, deseamos para nuestras universidades y nuestro país.¶
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Ed. 21 Mayo 2016
C I E N C I A Y C U LT U R A
La revolución científica: ¿motor o freno de la transformación social? Alexei Ochoa Estudiante de la Maestría en Ingeniería de Sistemas y Computación
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l constante desarrollo de la ciencia y la tecnología ha traído consigo aportes en diversos aspectos. La historia de la humanidad no habría sido la misma de no existir la relación entre el Mundo de las Ideas y el progreso tecnológico que ha hecho evolucionar las diferentes sociedades hasta nuestros días. Desde épocas prehistóricas, el desarrollo del ser humano ha tenido lugar gracias a los adelantos técnicos. La tecnología ha sido unos de los principales impulsores de los cambios sociales (Fara, 2009). Toda revolución científica y tecnológica ha provocado una profunda reorganización de la economía y de las relaciones sociales de las comunidades (Kuhn, 1962). Un ejemplo de esto es el comienzo de la gran revolución industrial en el siglo XVIII, que buscaba la transformación y el control de la energía para aplicarla adecuadamente a los procesos de fabricación (Shapin, 2000). Desde entonces, la ciencia no solo ha colaborado en la resolución de algunos de los misterios del universo, sino que también ha ayudado a descifrar cuestiones más trascendentales. En el siglo XX y lo que llevamos del XXI, ha habido grandes avances en los campos de la física, química, biología, medicina, sociología, psicología y tecnología, entre otros. Hoy puede decirse que está en marcha una nueva revolución: la Revolución de la información. El objeto central de esta nueva revolución son los datos, conocimientos y programas, que generalmente involucran la participación de máquinas. Dicha revolución no es la única innovación de los últimos años, pero constituye el factor común que permite y acelera todas las demás. La computación y la electrónica transforman el tratamiento, el almacenamiento y la transmisión de la información y, por tanto, modifican el modelo de sociedad, hasta el punto de hablar del término “Sociedad del Conocimiento”. En esta, la gestión, la calidad y la rapidez de la información se convierten en factor clave de la competitividad: como insumo para el conjunto de la industria y como servicio prestado a los consumidores finales, las tecnologías de la información y la comunicación condicionan los diferentes sectores de la economía (Vega, 2007). Los avances de las ciencias y la aplicación de nuevas tecnologías de información y comunicación han generado modificaciones en la producción, mediante actividades de creación e innovación en ámbitos muy competitivos de los diferentes sectores de la industria. El desarrollo de la tecnología y la ciencia moderna ha ofrecido al ser humano la capacidad de controlar la naturaleza y las máquinas para hacer sus labores más sencillas. Sin embargo, a veces no se tiene en cuenta su impacto social o ambiental. Por otro lado, actualmente la ciencia estudia diversas visiones de la realidad, pero hace poco por transformarla. Son pocos los científicos reconocidos por sus planteamientos transformadores; la mayoría se basa en un desarrollo centrado en el mismo sistema político, económico y social que impera en el mundo actual y no busca cambios. Esto ha contagiado a la mayoría de estudiantes de ciencias e ingeniería, que se concentran únicamente en producir resultados que sean publicados y les permitan subir su estatus como investigadores, sin detenerse a observar cuáles son sus contribuciones a la sociedad en la que viven. De esta manera, se pierde el sentido social que deben tener las universidades con el país. Se hace extensión para las grandes empresas, pero no para las comunidades necesitadas. Y si se hace, se adopta una visión paternalista que considera al científico como la persona capaz de solucionar todos los problemas
(…) actualmente la ciencia estudia diversas visiones de la realidad, pero hace poco por transformarla.”
Imagen: www.thescientificcartoonist.com. CC-BY.
de la comunidad, cuando existe conocimiento que únicamente es apropiado por quienes viven allí, cuya participación activa es necesaria para tener una visión holística que permita llegar a una mejor solución para todos. Por esto, la interdisciplinariedad y los procesos de construcción colectiva del conocimiento pueden ayudar a tener una visión mucho más amplia de la ciencia, lo que permitiría una transformación hacia una sociedad más justa. ¿Es la revolución científica motor o freno de la transformación social? Es motor porque ha permitido, en algunos casos, el surgimiento de tecnologías que ayudan a mejorar la calidad de vida (e.g. el uso de robots en lugares radioactivos). No obstante, también es freno, ya que, en otros casos, ha destruido el medio ambiente y perjudicado a comunidades (e.g. la creación de la bomba atómica, que aniquiló una ciudad completa). ¿Cuál de estas concepciones queremos que prime en el futuro?¶
REFERENCIAS >> Fara, P. (2009). Breve historia de la ciencia. Barcelona: Ariel. >> Kuhn, T. (1962). La estructura de las revoluciones científicas. University of Chicago Press. >> Shapin, S. (2000). La Revolución Científica: Una interpretación alternativa. Ediciones Paidós. Vega, R. (2007). La “sociedad del conocimiento”: una falacia comercial del capitalismo contemporáneo. Revista Herramienta.
Publicación estudiantil de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá
CRÓNICA
Una súper estudiante nueva en la U.N. J
ennifer Cañaveral es, ahora, la primera estudiante sorda de la Maestría en Urbanismo de la Universidad Nacional de Colombia. Es caleña y nació en perfectas condiciones de salud. Sin embargo, cuando tenía nueve meses, sufrió una infección que derivó en meningitis y le ocasionó una pérdida total de audición. Con ayuda de su familia, en especial de su mamá, aprendió a comunicarse leyendo los labios (no utilizando la lengua de señas, que ahora desea aprender) y tuvo una infancia bastante normal. Jennifer estudió arquitectura, es conferencista independiente sobre diseño y accesibilidad, y trabaja en el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) como parte del grupo de accesibilidad al espacio público. Ella cree que podemos mejorar el mundo y hacer cosas extraordinarias por los demás. Parte de esta mejora consiste en hacer que las ciudades sean accesibles, es decir, que las personas discapacitadas (sin importar sus recursos económicos) no estén obligadas a enfrentarse a obstáculos que han sido creados por la sociedad y, por tanto, tengan una mejor calidad de vida, con la dignidad que merecen. Motivada por este deseo de cambiar el mundo, Jennifer se presentó a la Maestría en Urbanismo de la Universidad. El proceso de admisión no fue sencillo. El examen de inglés que debía presentar, por ejemplo, fue mucho más difícil de lo que ella esperaba. Sin embargo, con confianza y con la ayuda de un rezo, logró completarlo exitosamente. La entrevista también fue un reto, pero Jennifer, con mucha calma, pudo contestar bien todo lo que algunos profesores de la Maestría le preguntaron. Dos semanas después de haber completado el proceso de admisión, llegaron los tan esperados resultados: había sido admitida. Según Jennifer, la vida no es fácil. A causa de su discapacidad, tuvo que enfrentar muchos obstáculos, varios relacionados con la posibilidad de lograr su formación profesional. A pesar de esto, ella invita a otras personas con discapacidad a no dejarse vencer por la falta de oportunidades o por cualquier otra dificultad, a luchar para que el mundo las escuche y a no perder de vista sus sueños. Los invita, en resumen, a no rendirse.¶
(…) ella invita a otras personas con discapacidad a no dejarse vencer por la falta de oportunidades o por cualquier otra dificultad, a luchar para que el mundo las escuche y a no perder de vista sus sueños.”
Fotografía: Luis Alejandro Orjuela Pimienta, estudiante de Contaduría pública.
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Ed. 21 Mayo 2016
PA L A B R A R T E
Réquiem por la juventud Ignacio Alcantuz Hoy en mi cuarto de lluvia guardado me invade el recuerdo de la flébil historia de los jóvenes cortados por los grises heraldos del orden del reinado del terror y del plomo. Plenas están sus sienes de gusanos, ¿cuántos de ellos aún no encontrados ni por sus dolientes ni por el sol? Sus bocas, llenas de tierra ajena, escrutando un cielo sin colores.
Son los jóvenes cuya juventud quedará eternizada, inconclusa, como sacrificio a los señores, que untaron con sangre los engranajes de su máquina de guerra y dolor. Hijos, hermanos, amigos, amantes han sido rapados de nuestras vidas, calzados en botas de militantes de guerras ajenas, guerras distantes, y desechados en zanjas perdidas.
Ya suman tres mil las vidas cortadas por los fusiles de hienas y buitres que siguen órdenes —sin cuestionarlas— de los brutales demonios serviles que comen de la mano de los amos, de los amos de la guerra y la muerte, que prefieren ver la tierra sembrada de cadáveres antes que de trigo, pues esto implica ver a su enemigo, el pueblo, con la dignidad alzada.¶
Atemporal Doris Villareal Pazos Estudiante de la Maestría en Escrituras Creativas, Línea Dramaturgia Pieza breve a partir de la obra pictórica “La persistencia de la memoria” de Salvador Dalí.
(Un reloj deforme sobre una mesa; entre el número cinco y seis está el horero, en el número nueve está el minutero, y el segundero da pequeños pasos a un mismo ritmo. Al fondo un paisaje árido y seco). Horero: El reloj de bolsillo murió. Su tic tac dejó de sonar. Minutero: Las hormigas se amontonaron sobre él, quieren entrar para acabar con lo que queda. Segundero: ¿Y los otros? Minutero: El uno pende de la rama de un árbol; el otro, del rostro que duerme en el suelo. Segundero: Si morimos, llegarán las moscas. Horero: Si tan solo nos moviéramos… Cuerda: Ya hice lo suficiente, no tengo fuerzas. Ahora no depende de mí, sino de ustedes. Segundero: Mi ritmo se hizo más lento. Minutero: Es la temperatura, el calor afecta el movimiento. Cuerda: No son eficientes en lo que les corresponde, siempre se atrasan y a quien culpan es a mí. Horero: Hablo de movernos de aquí, de zafarnos de esta mesa.
Segundero: Yo a los dos. Cuerda: Las mancillas no están diseñadas para marcar el mismo ritmo, el sistema se puede averiar, perderíamos la noción de tiempo, es una locura. Minutero: Caer en la tierra es nuestra salvación. Cuerda: Sería una humillación morir desbaratados en el suelo, suficiente tenemos con derretirnos. Horero: Lo vamos hacer, está decidido, somos mayoría. Segundero: Cuando complete el minuto, comenzamos a correr. Listos, cinco, cuatro, tres, dos, uno, ¡ya!
(El segundero empuja al minutero y este al horero, logrando dar vueltas al mismo ritmo; el reloj se mueve al borde de la mesa, se escurre poco a poco, se deforma, dificultando dar las vueltas a las manecillas; el horero se cansa primero, se agarra del seis; el minutero da un par de vueltas más, no resiste, se agarra del once; el segundero baja su ritmo hasta llegar al número seis; ninguno se mueve). Cuerda: Seis horas, menos cinco minutos y treinta segundos. Tenemos la mitad del cuerpo sobre la mesa y la otra colgando. ¿Por qué se detienen? No paren, sigan. ¿No quieren vivir? Estamos a punto de caer.
(Una mosca se para bajo el número 12, el tiempo se detiene).
Cuerda: ¿Qué hora es? Horero: Son las cinco. Minutero: Cincuenta minutos. Segundero: Diez segundos y marcando. Cuerda: El sol está despertando; cuando salga del todo, nos consumirá con sus rayos. Minutero: Si nos despegamos de la mesa, podríamos salvarnos. Segundero: Caeríamos en la arena, abajo está más fresco. Minutero: Tenemos que unir nuestras fuerzas, marcar un mismo ritmo y rápido para generar movimiento y caer. Segundero: Dar vueltas juntos sería emocionante, lo hacemos a mi ritmo, ¿les parece? Horero: Mi estado físico no está diseñado para dar vueltas tan rápido, pero lo haré Minutero: Yo te impulso.
Imagen: Dalí, Salvador (1931). La persistencia de la memoria [Pintura]. Nueva York, MOMA.