3 minute read
Editorial
GUILLERMO ROMO
IA y crecimiento económico, los retos
Dos temas centrales en la Reunión 54 del Foro Económica Mundial (WEF, por siglas en inglés), fueron: la incertidumbre económica mundial y el avance vertiginoso de la Inteligencia Artificial en los procesos productivos.
En ambos casos, hay preocupación por parte de los líderes políticos, empresariales, analistas y representantes de organizaciones civiles y sociales. El punto es que, efectivamente, hay claroscuros en el horizonte de 2024 que representan un reto y una amenaza para las economías.
En el caso del crecimiento económico, claramente se observa un camino complicado. El punto es que los conflictos geopolíticos (en Medio Oriente y UcraniaRusia), aunado a las elecciones para elegir nuevos gobernantes en muchas partes del mundo, están mandando señales negativas a los inversionistas.
De acuerdo con el informe de Perspectivas de los Economistas en Jefe, presentado en el marco de la reunión de Davos, más de la mitad (56%) esperan que la economía global se debilite este año, mientras que 43% prevé condiciones sin cambios o más fuertes.
De hecho, una gran mayoría cree que el impacto en mercados laborales (77%) y las condiciones financieras (70%), se reflejarán durante 2025. Son datos reveladores.
Saadia Zahidi, directora general del Foro Económico Mundial, advirtió que las tensiones globales se están profundizando y las desigualdades están aumentando, lo que pone de relieve la necesidad urgente de cooperación global para generar impulso para un crecimiento económico sostenible e inclusivo. Su mensaje es muy claro, respecto a lo que el mundo debe hacer de forma inmediata. De ahí el lema del foro: reconstruir la confianza.
Y en el tema sobre el avance de la Inteligencia Artificial, el cual no sorprende, también se dieron a conocer datos importantes. Por ejemplo, los economistas señalaron que, en este 2024, la IA generativa aumentará la eficiencia de la producción (79%) y la innovación (74%) en las economías de altos ingresos.
Para los próximos los próximos cinco años, 94% espera que estos beneficios de productividad se vuelvan económicamente significativos en las economías de altos ingresos, en comparación con solo 53% en las economías de bajos ingresos; y esperan que los efectos positivos de la IA variarán ampliamente de acuerdo con el nivel de ingresos de las distintas economías mundiales.
Así pues, ante un escenario incierto, es necesario redoblar el paso en los rubros donde hay focos rojos. En el caso del campo y la agricultura mexicana, la preocupación central se ubica en la sequía (falta de agua); el impacto del cambio climático; prohibiciones absur das como las importaciones de maíz y el uso del glifosato; apertura del mercado de carne proveniente de naciones como Brasil; reducción del presupuesto para el sector y organismos como el Senasica; y falta de políticas para algunas indus trias como el de la leche (lácteos).
Es ahí donde debemos poner aten ción, para enfrentar tiempos difíci les e inciertos, en un mundo frag mentado por una ola de cambios políticos, sociales, climatológi cos y económicos. No perda mos el tiempo.