¿Quién es Saul Bass? página 10
Los orígenes de los gráficos en movimiento página 17
Diseño gráfico y cine, el principio de una gran amistad página 31
El maestro que «re-inventó» los títulos de crédito página 46
Cinco décadas diseñando sueños para Hollywood página 56
Trabajos para Preminger y Hitchcock página 93
Proyectos de identidad corporativa página 130
Entrevista a Arnold Schwartzman página 162
Saul Bass 1920-1996
1952 Crea su propio estudio, Saul Bass & Associates
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1946 Se traslada a vivir a Los Ángeles
1956 Contrata a su primer empleado, la diseñadora Elaine Makatura
br e de lb Vé rt ra zo An igo de at Ps om or o ic ía os d is e u n as es in at o
1961 Se casa con Elaine Makatura. A partir de entonces firmarán los trabajos conjuntamente
Nueva York (EE.UU.)
se estrena Fantasía, 1ª película en estéreo
1936
1940
1945
1950
1955
1960
1964
1954-66 Etapa de esplendor diseñando títulos
1936-39 Estudia en la Arts Students League de NY bajo la tutela de Howard Trafton y trabaja como aprendiz a media jornada en el departamento de arte las oficinas de Warner Bros.
1954 Realiza los primeros títulos de crédito para Carmen Jones
1960 Diseña el logotipo de Warner
Introduce el primer programa de diseño corporativo para cine en El hombre del brazo de oro de Otto Preminger 1944-45 Formación Brooklyn College con Gyorgy Kepes
1958 Primer trabajo para Hitchcock, los créditos de Vértigo
1964 The searching eye, primer corto con el que ganó en el Festival de Venecia
1981 Medalla de Oro del American Insttute of Graphic Arts (AIGA)
Entra en el Hall of Fame, New York Art Directors Club
Muere el 25 de abril en Los Ángeles a causa de un linfoma de No-Hodgkin
Lo go tip o
Ex xo n
1965 Es nombrado Diseñador Real para la Industria por la Royal Society of Arts de Londres
superman, 1os títulos realizados con tecnología digital
1965 de crédito
1968
1974
1977
1981
1984
1990
1967-90 Etapa centrada en el diseño corporativo y proyectos personales
Gana el Oscar por el corto Why man creates?
1974 Dirige su primera y única película de larga duración, Phase IV
Diseña la nueva imagen de marca de United Airlines
1995 Casino, último trabajo para Martin Scorsese, finalizado por su mujer Elaine
1990 Retoma los títulos de crédito con Goodfellas, primer trabajo para Martin Scorsese
1996
Cronología de creaciones audiovisuales En el siguiente listado encontrarás una guía que te ayudará a situar cronológicamente la obra de Saul Bass como diseñador de títulos de crédito y director de producciones propias para cine.
1960
1954
Carmen Jones, Otto Preminger
1955
Hombres temerarios (The racers), Henry Hathaway The Shrike, José Ferrer La podadora (The big knife), Robert Aldrich La tentación vive arriba (The seven year itch), Billy Wilder El hombre del brazo de oro (The man with the golden arm), Otto Preminger
1956
Attack, Robert Aldrich Trapecio (Trapez), Carol Reed La vuelta al mundo en 80 días (Around the world in eighty days), Michael Anderson
1957
Saint Joan, Otto Preminger Ariane (Love in the afternoon), Billy Wilder Donde la ciudad termina (Edge of the City), Martin Ritt Un joven extraño (The young stranger), John Frankenheimer La bella de Moscú (Silk stockings), Rouben Mamoulian Orgullo y pasión (The pride and the passion), Stanley Kramer
1958
Vértigo. De entre los muertos (Vertigo), Alfred Hitchcock Bonjour Tristesse, Otto Preminger Horizontes de grandeza (The Big Country), William Wyler
1959
Anatomía de un asesinato (Anatomy of a murder), Otto Preminger Con la muerte en los talones (North by Northwest), Alfred Hitchcock
1960
Exodus, Otto Preminger Psicosis (Psycho), Alfred Hitchcock Espartaco (Spartacus), Stanley Kubrick The facts of fife, Melvin Frank Ocean’s eleven, Lewis Milestone
1961
Un, dos, tres (One,Two,Three), Billy Wilder Something wild, Jack Garfein West Side Story, Robert Wise y Jerome Robbins
1962
Tempestad sobre Washington (Advice & Consent), Otto Preminger Birdman of Alcatraz, John Frankenheimer Walk on the wild side, Edward Dmytryk
1963
El mundo está loco, loco, loco, loco (It’s mad, mad, mad, mad world), Stanley Kramer Los vencedores (The victors), Carl Foreman El Cardenal (The Cardinal), Otto Preminger Nueve horas de terror (Nine Hours to Rama), Mark Robson
1970
1964
The searching eye
1965
Primera victoria (In harm’s way), Otto Preminger Bunny Lake is missing, Otto Preminger From here to there
1966
Seconds, John Frankenheimer Grand Prix, John Frankenheimer Bromas con mi mujer… ¡no! (Not with my wife, Don’t you!), Norman Panama
1968
Why man creates?
1971
Extraña amistad (Such good friends), Otto Preminger
1974
Phase IV
1976
That’s entertainment, Part II, Gene Kelly*
1977 1978
Notes of the popular arts
1979
The double McGuffin, Joe Camp El factor humano (The human factor), Otto Preminger
1981
The solar film
1980
1990
Bass on Titles, producción de Pyramid Films y Saul Bass Films
1983
Quest
1987
Al filo de la noticia (Broadcast news), James L. Brooks
1988
Big, Penny Marshall
1989
La guerra de los Rose (The war of the Roses), Danny de Vitto
1990
Uno de los nuestros (Goodfellas), Martin Scorsese
1991
El cabo del miedo (Cape fear), Martin Scorsese 84C Mopic, Patrick Shean Duncan Mr. Saturday night, Billy Crystal Preminger: Anatomy of film maker, Valerie A. Robins*
1993
La edad de la inocencia (The age of innocence), Martin Scorsese
1995
A personal journey with Martin Scorsese through the American movies* Casino, Martin Scorsese
Producciones propias. Entrevista documental en la que Bass narra su trayectoria como diseñador de títulos de crédito. * Documentales cuyos títulos de crédito fueron realizados por Saul Bass.
«El diseño consi el pensamiento». Saul Bass
.
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¿Quién es Saul Bass? Es indudable que el nombre de Saul Bass está ligado al cine. Él fue quien introdujo el diseño gráfico en la gran pantalla tal y como lo conocemos hoy. Los cerca de 60 títulos de crédito que realizó para directores como Preminger, Hitchcock, Wilder, Kubrick y Scorsese revelan la amplia dimensión de su legado. Sin embargo, es importante señalar que su trabajo para Hollywood fue sólo una vertiente de su labor creativa. Bass era ante todo diseñador. Nació en el barrio del Bronx en 1920 y creció con la nueva generación de diseñadores que como Paul Rand, Alvin Lustig, Bradbury Thompson y Herb Lubalin, entre otros, hacían bandera del modernismo y conformaron la denominada Escuela de Nueva York. Aunque en 1946 se trasladó a Los Ángeles y sus proyectos más conocidos son los que hizo para Hollywood, desde su oficina en Sunset Boulevard, Bass también realizó una de las mayores contribuciones al diseño de marca estadounidense. Entre 1959 y hasta poco antes de su muerte en 1996, creó numerosos programas de identidad corporativa para las principales compañías: Exxon, AT&T, Bell, Warner, Girl Scouts, Geffen, Kleenex…, muchos de ellos aún hoy están vigentes. A lo largo de su carrera sumó otra serie de actividades como la de fotógrafo, ilustrador, diseñador de packaging, director de arte, realizador de cortos de animación, incluso dirigió un largo de ciencia ficción, Phase IV. 10
Para Saul Bass el diseño gráfico sobre todo debía cumplir una misión: comunicar un mensaje de la manera más clara y concisa. Los recursos que como diseñador tenía para alcanzar este objetivo eran la simplicidad, el poder de la ambigüedad mediante el uso de la metáfora y la introducción de imágenes con gran capacidad evocadora. A mediados de los 50, Saul expandió las bondades de este concepto de diseño dentro de la industria cinematográfica. Entre 1954 y 1995 creó numerosos títulos de crédito, además de carteles y campañas publicitarias para una amplia variedad de films, géneros y directores. Entre sus trabajos para el cine más memorables están las tres colaboraciones con Hitchcock, pero quizás los más significativos son los 13 títulos que realizó para Preminger, entre los que destacan El hombre del brazo de oro (1955), Anatomía de un asesinato (1959) y Éxodo (1960). Muchos de estos proyectos fueron creados con la ayuda de su mujer, la diseñadora Elaine Bass, quien se convirtió en su colaboradora incondicional desde 1956. Ello sin olvidar otros trabajos imprescindibles, como las fantásticas animaciones de La vuelta al mundo en 80 días (1956), la belleza monumental de Espartaco (1960) y la expresividad tipográfica de West Side Story (1961). El broche de oro a su carrera en Hollywood llegó en los años 90. Una última etapa brillante, que fue relanzada por su gran admirador Martin Scorsese cuando le encargó los títulos de Uno de los nuestros (1990). La colaboración entre el matrimonio Bass y Scorsese continuó con tres trabajos maravillosos: El cabo del miedo (1991), La edad de la inocencia (1993) y Casino (1995). En todos ellos, sin duda, Bass llevó el modernismo a la gran pantalla. 11
Sin duda, Bass conocía a fondo el trabajo de estos primerizos títulos de crédito, como bien demuestra en trabajos como El hombre del brazo de oro (1955) y Anatomía de un asesinato (1959), dirigidas ambas por Otto Preminger. Lo mismo que Metrópolis y el cine expresionista fue una considerable fuente de inspiración para Bass, los títulos de crédito del diseñador neoyorquino también han sido la inspiración de muchos cineastas actuales. Si la gran aportación del Constructivismo a los títulos de crédito fue el montaje, la mayor contribución del Expresionismo fue la experimentación con la luz y la utilización de formas abstractas en la composición. Como ejemplo de ello tenemos a Walter Ruttmann director de Opus I, II y III, las primeras películas abstractas de la historia -realizadas entre 1920 y 1922-. Tras la abstracción, Ruttmann se dedicó a proyectos como Berlín sinfonía de una ciudad (1927), uno de los grandes hitos en la historia del cine. A través del ritmo de la música narra un día en la vida berlinesa y la ciudad se convierte en formas verticales y horizontales. La huella de este cine se observa también en algunos títulos de Saul Bass como en la danza de figuras y luces de color en Bonjour Tristesse (Preminger, 1958), en las flechas dibujadas a modo de bayonetas que cruzan la imagen de un grabado del siglo XIX en Orgullo y pasión (Stanley Kramer, 1957) o en la escenografía y el juego de colores en La tentación vive arriba (Billy Wilder, 1955) y West Side Story (Robert Wise, 1961). Incluso en su último trabajo, Casino (Martin Scorsese, 1995). En todo caso, Bass fue más allá del Expresionismo alemán. Introdujo un elemento novedoso, el de la anticipación. 26
Pensaba y diseñaba los títulos de crédito como micro-películas que condensaban la esencia argumental del film en cuestión. Su función era crear tensión perceptiva, preparar psicológicamente al espectador y que éste estuviera en estado de alerta para lo que iba a ver en la pantalla. Algo que conseguía a la perfección con los recursos visuales que le ofrecían los expresionistas. El juego de la metáfora, Dadá. La desenfrenada apuesta por «la libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, actual y aleatorio» del dadaísmo también se coló en la forma de entender el diseño por Bass. De los dadás alemanes -Max Ernst, John Heartfield, Raoul Hausmann…-, aprendió también las técnicas del fotomontaje, el humor, la espontaneidad y el uso libre de la tipografía. Ese humor es el que Bass recoge en La vuelta al mundo en 80 días (Michael Anderson, 1956), en unos títulos de crédito -en este caso de cierre- realizados con animación, donde combina el fotomontaje y el collage. En un tono muy acorde con la película que raya lo caricaturesco. Bass también recogió el espíritu dadá cuando éste llegó a Estados Unidos. La mejor prueba es el trabajo realizado por el estadounidense Marcel Duchamp (1887-1968). Para Duchamp lo esencial en una obra de arte era la producción 27
de significado y no las ideas corrientes que la definen como tal: «aura», expresión del trazo gestual, morfología, forma, colores, etc. De igual manera, el significado de la imagen, el juego con la metáfora del objeto cotidiano son características constantes en la carrera de Bass como diseñador de títulos. Desde su primer encargo hasta el último. La llama cimbreante y sinuosa que se funde en una rosa en Carmen Jones (Otto Preminger, 1954), símbolo de la pasión y la tentación; las barras que avanzan por la pantalla y fragmentan la tipografía de los títulos en Psicosis (Alfred Hitchcock, 1960), un claro signo del desdoblamiento de la personalidad de Norman; las estatuas quebradas de Espartaco (Stanley Kubrick, 1960), una alegoría de la caída del imperio romano. Así, entre otras muchas. El Surrealismo y la búsqueda de la provocación. En la obra de Saul Bass no se puede obviar la huella del Surrealismo y su énfasis en el sueño y el simbolismo. A través de un juego entre lo real y lo irreal se busca la provocación en el espectador. Con los surrealistas, el arte se concibe como un instrumento por el que emergen los deseos y sentimientos del subconsciente humano, hasta que finalmente estos se manifiestan por medio de los sueños. En cine, el mejor ejemplo es Un perro andaluz (Luis Buñuel y Salvador Dalí, 1929). De forma metafórica aparece un primer plano de una joven a la que le practican un corte en el ojo con una navaja. Hay quienes ven una clara referencia a Un perro andaluz en el cartel de Phase IV, el único largometraje dirigido por Bass en 1974. Con un carácter profundamente inquietante y perturbador, en él se observa una mano 28
que emerge en el centro de la composición como un tótem y que es atravesada por una hormiga. Las técnicas del collage, los fotomontajes y el frottage, permitían al artista soñar mientras actuaba según sus ideales. Las metáforas surgían de manera espontánea, sin buscar el sentido coherente tradicional. Otros ejemplos destacables son: Regreso a la razón (1923), de Man Ray; Entreacto (1924), de René Clair; La caracola y el clérigo (1928), de Germaine Dulac y Antonin Artaud; y La edad de oro (1930), de Luis Buñuel y Salvador Dalí.
El mundo de lo fantástico y lo onírico, la influencia del subconsciente y las malas pasadas que nos juega al confundir realidad y ficción son aspectos inevitables de ver en los títulos de crédito que Bass diseñó para Vértigo (Hitchcock, 1958). Unos títulos de crédito inquietantes desde el primer segundo, en el que un primer plano de un rostro femenino nos introduce en un viaje mucho más profundo. Mediante un plano detalle de la pupila, el color rojo que adquiere la 29
Page)106. Es interesante saber que una primera versión del logo de Continental también fue diseñado por Saul Bass. En 1978, la asociación Girl Scouts de los EEUU entra a formar parte de la cartera de clientes de Saul Bass & Associates. Fundada en 1912, Girl Scouts pronto se convirtió en un símbolo de la cultura estadounidense. El fin de esta organización voluntaria de niñas americanas era potenciar la confianza en sí mismas y las habilidades de liderazgo con un trasfondo humanista. Para construir el logotipo, Bass se decidió por las siluetas de tres jóvenes colocadas de manera similar a la forma de un trébol de cuatro hojas. Un diseño que conseguía estar a la altura de los valores que buscaba transmitir la marca: fuerza, pureza e inocencia. La magistral composición y la combinación de los colores blanco y verde son el símbolo de Girls Scouts. La última versión del logo sólo difiere ligeramente de la identidad diseñada en 1978 por Saul Bass en el color y en algunos detalles de las caras de las figuras femeninas. La tipografía también es similar aunque con ligeros cambios, como el punto de la i, el uso de las minúsculas y además es más bold y más chata. Ese mismo año también trabaja para la empresa japonesa Minolta. El diseño que Bass presenta en 1978 se compone de una esfera azul estriada por cuatro líneas blancas en horizontal y más anchas en el centro (una idea que retoma en 1983 en el re-diseño del logo para AT&T). El hecho de representar una esfera no escondía ningún misterio. Ésta 106
http://blogs.sitepoint.com/save-the-united-airlines-iconic-tulip.
154
pretende simbolizar la Tierra y cómo el mercado global se expande dentro de ella, según Minolta explica, de ahí también el color azul (Pantone 300C). Mientras que las líneas estriadas simbolizan los amplios rangos que la tecnología puede abarcar, más allá de la imaginación107. Todo ello venía acompañado con la firma abajo del nombre de la marca, «MINOLTA», en mayúscula y en tipografía sans serif. El logotipo fue modificado en 2003, aunque sin grandes cambios, intentando mantener la base del diseño que Bass realizó en 1978. En el nuevo logo se mantenía el color azul del original y las líneas estriadas pasan de ser cuatro a cinco. Por su parte, el nombre de marca -Minoltase modificó por uno más largo -Konica Minolta- con el fin de «expresar la precisión y la calidad», así como la «frescura» y la capacidad de «sorpresa» que la marca puede ofrecer al público, según indica la propia compañía108. También se definió la tipografía Neue Helvetica (que pasó a llamarse Konica Minolta).
Con el trabajo para Minolta, Saul Bass cierra los años setenta y cuatro décadas dedicado a demostrar cómo el diseño puede cambiar el punto de vista comercial. 107 108
konicaminolta.com/about/corporate/symbol_logo.html. Ibid. 155
Aparte del diseño corporativo y de los proyectos para cine, Bass realizó otras aportaciones a la historia de la gráfica publicitaria. Uno de las más célebres es un póster promocional de las Olimpiadas de Los Ángeles en 1984 por encargo de su amigo y director de diseño de los Juegos Olímpicos, Arnold Schwartzman. Además, a lo largo de los 80 diseñó diferentes carteles en defensa de los derechos humanos. General Food le encarga en 1984 a Saul Bass renovar la imagen de la compañía. En sus comienzos, el logotipo estaba formado por una pequeña caja que contenía las letras «g» y «f» y unos lunares de colores. Para el re-diseño, crea un símbolo formado por una hoja enmarcada en negro. Respecto a este trabajo Bass comentó: «La hoja transporta a la noción de crecimiento, esto relaciona la naturaleza con el negocio de la empresa (la alimentación) y la corporación en si misma»110. James L. Freguson, presidente general de la compañía, describió su trabajo como: «fuerte, dinámico, contemporáneo; refleja el compromiso de la empresa por los valores humanos». Un logo que se usó hasta la fusión de la compañía con Kraft en 1990. En 1988, el estudio trabaja para YWCA (Young Women’s Christian Association), una organización con fines humanitarios que lucha contra el racismo y a favor de la mujer. Un logo donde una vez más utiliza el blanco y el rojo, aunque esta vez abandona la imagen circular para destacar una 110 Philip H. Dougherty, artículo Advertising: General Foods: A New Look publicado The New York Times en noviembre de 1984.
158
figura trapezoidal. La forma es más rígida y juega con el espacio positivo y negativo que, en esta ocasión, se genera en el bloque central. Se trata de líneas simples que se elevan y se abren hacia la parte superior, asemejándose a los rayos de luz o a la copa de un árbol. Con este proyecto para la YWCA, Bass vuelve a hacer uso de los conceptos simbólicos que focalizan la atención hacia los valores de la organización (crecimiento personal, apertura, cooperación). El diseño creado por Bass fue cambiado en 2003. También en la década de los 80, Saul Bass & Associates es el estudio encargado del rediseño del logo de Kleenex.
La predilección por las formas redondeadas se observa en el lettering elegido para Kleenex, en el que utiliza una fuente redondeada creada a mano por el artista Harry Jacobs . 111
Durante los años en que Art Goodman fue el director de arte del estudio de Bass, Jacobs fue uno de sus colaboradores habituales para la realización de tipografías, lo mismo que Dave Nagata 112 y el propio Goodman. 111 112
http://blog.signalnoise.com/2008/08/28/inspiration-logos-by-saul-bass. www.typophile.com/node/31052. 159
Entrevista a Arnold Schwartzman Para la realización de este libro hemos contado con la colaboración de Arnold Schwartzman, ex-director de arte de Saul Bass & Associates y gran amigo de Saul. En cuanto supo de nuestro proyecto-libro biográfico acerca de Bass, Schwartzman quiso prestarnos su ayuda. Arnold Schwartzman comenzó su carrera en la televisión británica realizando spots y anuncios publicitarios. Conoció a Saul Bass en 1973 durante el rodaje de Phase IV en Inglaterra. En 1978 Arnold no dudó en mudarse de su Londres natal a Los Ángeles cuando su amigo Saul Bass le preguntó si quería ser el director de arte de su estudio en Sunset Boulevard. Además, de otras numerosas facetas, Schwartzman es productor, director y guionista de varios films, entre ellos el documental Genocide (1981), con el que obtuvo un Oscar de la Academia. En 1984 fue designado director de diseño para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. En las siguientes líneas puedes leer la entrevista que Arnold Schwartzman nos concedió a gràffica.info en enero de 2011 muy amablemente desde su oficina de Los Ángeles. Una información de gran valor ya que, a través de ella hemos podido clarificar las múltiples facetas de Saul Bass, no sólo como realizador de títulos de crédito, sino también 162
como director de cortos, diseñador de marcas, proyectos de identidad corporativa y artista global. Y, sobre todo, porque Schwartzman nos ha ayudado a descubrir algo difícil de encontrar en los libros, la faceta más humana y personal del maestro que nos enseñó a soñar en el cine a través de la síntesis y la metáfora. En el momento en el que Saul Bass le pide que deje Londres para entrar a formar parte de la plantilla de Saul Bass & Associates en Los Ángeles como director de director de arte del estudio, ¿qué sintió? ¿Cuándo empezó su relación profesional con Saul Bass? Fue en 1978 cuando Saul Bass me invitó a trasladarme de mi Londres natal para ser su director de director de arte en Hollywood. Sin embargo, a pesar de mi gran admiración por mi héroe yo tenía mis propios proyectos y preferí continuar con ellos y sólo pasé seis meses trabajando con él. Cuando entré en el estudio, yo tenía la esperanza de que nosotros pudiéramos trabajar juntos en proyectos de diseño para films, pero por aquellas fechas la atención principal del estudio estaba centrada en el programa de re-diseño para EXXON. Fue cuando ya me iba, cuando él me recomendó para producir y dirigir la película que me hizo ganar el Oscar. ¿Cómo era un día de trabajo cualquiera en la oficina de Bass? Nosotros teníamos reuniones regulares para discutir la estrategia de diseño. Mi oficina estaba cerca de la suya. Por tanto, yo pasaba mucho tiempo en su despacho, donde podía admirar su maravillosa colección de figu163