4.1
La propuesta educativa del Movimiento Scout es una propuesta de “educación por la acción”, donde todo se realiza a través de actividades. Desde la Manada hasta la Comunidad, los niños y jóvenes son los protagonistas de estas actividades al proponerlas, e l e g i r l a s, d e s a r r o l a r l a s y evaluarlas. Este “aprender haciendo” es lo que posibilita el logro de los objetivos educativos, permitiendo a traves del descubrimiento, que cada individuo incorpore los conocimientos, actitudes y habilidades de manera
profunda. En este proceso no hay caminos preestablecidos ni guías mágicas que indiquen pruebas a superar o puntajes que lograr. Se trata de hacer para crecer.
Experiencias personales Cada actividad que realizamos suscita experiencias personales en quienes participamos de ellas.
P La actividad es la acción desarrollada entre todos, en la que se viven diferentes situaciones.
La experiencia es lo que P pasa en cada persona; lo que uno obtiene de la actividad. Por lo tanto una misma actividad, dependiendo de una amplia variedad de c i r c u n s t a n c i a s, g e n e r a r á experiencias distintas en sus participantes. Estas experiencias personales son las que finalmente se traducen en el logro de los objetivos educativos, no las actividades per se. Una actividad puede estar perfectamente pensada, ser muy divertida y exitosa pero aún así no generar experiencias personales enriquecedoras. Por otro lado una actividad m e n o r, q u e q u i z á s p a s e desapercibida, puede ser muy rica en experiencias para algunos individuos en particular.
Al ser estas experiencias algo interno de cada persona, los dirigentes no podemos manipularla. Muchas veces ni siquiera preverla con certeza. Pero si podemos mejorar la calidad de las actividades para que estas favorezcan las experiencias y por tanto el logro de objetivos educativos.
4.2
Para que una actividad genere las mejores oportunidades a cada uno de sus participantes hay que cuidar muchos aspectos.
Las actividades no pueden improvisarse Todas las actividades tienen una finalidad educativa y los dirigentes debemos planificarlas para poder llevar adelante un programa coherente y evaluable. Cuando hablamos de planificar no solo nos referimos a pensar las actividades de la próxima reunión semanal, sino a trabajar dentro de un Ciclo de Pr o g r a m a, p e r m i t i e n d o n o s trabajar con un rumbo claro. No basta con que las actividades sean divertidas. Debemos poder evaluarlas en base a los objetivos de la actividad y estar atentos a la experiencia personal de cada joven.
Cuando caemos en el día a día es difícil reconocer los logros y las dificultades. Todos deben tener oportunidad de participación No solo en el desarrollo, sino también en la preparación y evaluación. Esta participación sera mayor, cuanto mayor sea la edad de los participantes. Pero tanto en la propuesta, en el desarrollo o en la evaluación, todos deben tener oportunidad de participar.
La propuesta debe ser variada Pa r a l o g r a r o b j e t i v o s educativos en todas las áreas de desarrollo, es necesario que las actividades sean variadas, cubriendo todas las dimensiones de la personalidad. Esto no quiere decir que las actividades sean pensadas como una secuencia de actividades por área de desarrollo, sino que a largo plazo deben trabajarse todas las áreas.
Es tarea de cada dirigente hacerse de una buena cantidad de información sobre actividades, ya sea en forma de libros, fichas o notas personales.
La s a c t i v i d a d e s d e b e n respetar las necesidades de los jóvenes De nada sirve una actividad que esté planificada hasta el último detalle si esta no tiene que ver con lo que los participantes buscan. ¿Cuantas veces hemos preparado actividades que pensábamos eran excelentes y no despertaron el mas mínimo entusiasmo? Esto es lo que Baden-Powell llamaba “tratar de pescar usando carnada para hombres”.
Para esto la mejor herramienta es el “Ciclo de programa”. Una herramienta de consulta y participación que permite conjugar la intención de los dirigentes con las necesidades de los jóvenes.
4.3
Actividades según prioridad educativa El GRM propone agrupar las actividades en base a las “prioridades educativas” (ver capitulo 3). Esto nos permite tener un catalogo de actividades organizado dentro de cada área de desarrollo, y poder encontrar fácilmente actividades relacionadas con la prioridad educativa que se esté buscando trabajar, durante cada Ciclo de Programa. Las actividades pensadas para una prioridad educativa, favorecen el logro de los objetivos intermedios de dicha prioridad.
Las fichas de actividades A los efectos prácticos el GRM elabora fichas de actividades para cada Rama, y también provee de fichas en blanco para que cada dirigente pueda catalogar las que el mismo elabore.