1 minute read
Resucitación cardiopulmonar
RESUCITACIÓN CARDIOPULMONAR (RCP) PARA NIÑOS
Si te encontrás en una situación con un bebé que puede haber sufrido un paro cardíaco, recordá estos pasos a seguir para evaluar la emergencia de la situación y pedir ayuda:
Advertisement
∞ Comprobar que la escena sea segura. ∞ Golpear suavemente a la víctima y dirigirse a ella en voz alta, buscar respuesta. ∞ Pedir ayuda: llamar al número local de emergencias y tratar de conseguir un DEA.
∞ Comprobar la respiración: si el lactante no se mueve, no llora, no parpadea ni reacciona, la víctima no responde, iniciar inmediatamente la maniobra de RCP.
Maniobra de RCP
En bebés, utilizando los dedos, se presiona a 1 cm. por debajo de la línea intermamilar (es la que une a las tetillas) 30 veces y se alterna con 2 insuflaciones, abarcando la boca y nariz para minimizar la pérdida de aire (fig. 3).
En niños de 1 a 8 años, el masaje se realiza con el talón de la mano en el tercio inferior del esternón y alternando la insuflación con la misma relación que el caso anterior.
En niños mayores a 8 años y adolescentes, se utilizan ambas manos superpuestas con el talón de la inferior ejerciendo el apoyo y alternando 30 compresiones y 2 insuflaciones. En todos los casos, se realizan 5 ciclos de 30 compresiones y 2 insuflaciones. Si no se perciben movimientos ventilatorios, para iniciar las insuflaciones se extiende la cabeza hacias atrás, siempre y cuando no se sospeche de la presencia de una lesión en la columna cervical. En este caso, el profesional que acuda al sitio inmovilizará la cabeza sujetando la cara desde los laterales. Al evaluar la cavidad, se deberá constatar que se encuentre vacía y limpia. Con la cabeza ligeramente extendida y levantando la mandíbula para favorecer la apertura bucal, se exhala con energía en un segundo y, al mismo tiempo, se ocluyen ambos orificios nasales para evitar el escape de aire (fig. 1 y 2).
Figura 1 Figura 2
Figura 3