LA HISTORIA DE SAN
LEONARDO MURIALDO nació en Turín el 26 de Octubre de 1828. El papá se llamaba también Leonardo y fue agente de cambio; la mamá es Teresa Rho. Leonardo es el penúltimo de siete hermanas y un hermano. Pro la vida feliz y serena de la familia termina pronto, porque en 1833 muere el papá. Leonardo tiene solo 5 años.
La mamá decide enviar a los dos hijos varones, Leonardo y Ernesto, a un Colegio de Savona de los Padres de las Escuelas Pías. Bueno y serio, óptimo en la escuela, Leonardo es tomado del pelo por algunos compañeros vagos y poco a poco se hace como uno de ellos. Pero pronto se da cuenta de su error y se arrepiente, Y así pide a su mamá que lo saque del colegio y lo regrese a la casa.
Continúa los estudios y siente que Dios tiene proyectos sobre él. El 20 de Septiembre de 1851 es ordenado sacerdote, su mamá ya había muerto.
Por el tiempo de 14 años trabajará en la periferia turinesa más pobre, entre talleres y fábricas, migrantes, miseria y delincuencia. Comienza a ocuparse de los niños dándoles catecismo en el Oratorio del Ángel Custodio.
Pero no le basta, quiere hacer algo más para los chicos que viven en la calle, abandonados a si mismos, víctimas de la ignorancia e injusticias. Así recorre las calles más pobres de Turín tocando una campanilla y llamando a los niños a seguirle al Oratorio
Allí les ofrece comida, instrucción y, sobretodo, su amistad.
Visita las pobres chabolas en donde viven los más pobres de la ciudad, consuela a los enfermos en los hospitales. Cada Jueves Murialdo entra en la “ GENERALA”, la triste cárcel en donde están recluidos los jóvenes que han cometido algún robo o violencia. Allí escucha las historias de tantos muchachos, los confiesa, los anima a cambiar de vida cuando salgan.
Un día de 1857 en una calle de Turín Leonardo Murialdo encuentra a un sacerdote famoso, San Juan Bosco, quien se hace pagar una “ copita” en el ” Bar Café de los alpes” En esa conversación San Juan Bosco le pide a Murialdo que acepte la dirección del Oratorio de San Luis que se había quedado sin un guía. Leonardo estuvo un poco dudoso, pero al final aceptó diciendo que no se podía decir no a Don Bosco.
Don Bosco pide a Leonardo acompañarle a Roma, a encontrar al Papa Pio IX. Los dos sacerdotes piamonteses hablan con entusiasmo de su trabajo en medio de los jóvenes pobres de Turín y también de las dificultades que encuentran.
El Papa entrega a Don Bosco 200 Escudos de oro. Servirán para llevar a los chicos a un paseo con comida comprendida.
En 1865, Leonardo Murialdo decide dejar Turín. Sigue a su hermano Ernesto en Paris. Pero no de vacaciones, porque en la capital Francesa èl regresa a ser estudiante.
Frecuenta el famoso Seminario de San Sulpicio, en donde aprende tantas cosas nuevas que les servirán cuando regrese entre sus muchachos.
En Turín existe el ”Colegio de los Artesanitos”, que recoge chicos internos de toda edad y proveniencia: allì realizan sus estudios y aprenden un oficio que les servirá en el futuro. En 1866 piden a Acepta, pero, dice:” Sólo Murialdo que provisoriamente, hasta que no lo dirija. encuentren otro Rector mejor que yo”. Quedará como Rector 34 años, hasta la muerte.
En el Colegio de los Artesanitos, el Rector Leonardo Murialdo se preocupa de los chicos huérfanos, siempre más numerosos, los acepta a todos, también cuando falta el dinero para darle el alimento. Además de los estudios, organiza su tiempo libre: así surgen la banda musical, la escuela de canto, la compañía de teatro, las horas de gimnasia.
El Colegio está siempre lleno de deudas, muchos aconsejan al rector de no recibir ya más niños. Pero èl no sabe decir “no”, tiene plena confianza en la Providencia de Dios. Y no duda en golpear las puertas de los ricos y también pedir limosna delante de las Iglesias de Turín, acompañados de algunos de sus muchachos. Y siempre, o casi, encontrará dinero para seguir adelante con su misión.
El 19 de Marzo de 1873 Murialdo funda la Congregación de San José, una nueva familia religiosa llamada también de los “Josefinos de Murialdo” para la guía y educación de los niños pobres. El primer grupo está formado por 6 persones. Pero luego seguirán muchas y muchas más.
Leonardo Murialdo se preocupa también de lo que sucede en su alrededor, de los grandes problemas sociales y políticos de su tiempo. Participa a tantas iniciativas en favor de los pobres y funda también un periódico que se llama “ LA VOZ DEL OBRERO”, que sigue saliendo hoy en Turín , con el nombre de “LA VOZ DEL PUEBLO”
Lleva a los montes tambi茅n a sus muchachos para que encuentren a Dios en las bellezas de la Creaci贸n.
Es un hombre lleno de intereses y vitalidad. Ama estar en medio de la naturaleza, practica la nataci贸n y el alpinismo, junto a su hermano Ernesto escala las cumbres del Gran Para铆so y del Monviso.
Es El 30 dE Marzo dE 1900. 70 años dEpuès El papa paulo VI lo proclaMarà “
A 72 años, pero, su cuerpo debilitado por la enfermedad por las fatigas, por las preocupaciones, ya no resiste. Leonardo Murialdo muere en Turín, en medio de sus Artesanitos y cohermanos de la Congregación josefina que continuarán luego su obra.