Juan de Dios Vial Correa
La vocación humana está en peligro Entrevista concedida al diario El Mercurio por el Dr. Vial Correa en abril de 1995, al momento de la publicación de la encíclica Evangelium vitae de Juan Pablo II.
Presidente de la Pontificia Academia para la Vida, el rector de la Universidad Católica
de Chile se encuentra estrechamente vinculado a los temas de la encíclica Evangelium vitae, sobre el valor y el carácter inviolable de la vida humana. A propósito de esta defensa del hombre en la cual se ha empeñado tan a fondo el pontificado de Juan Pablo II, Juan de Dios Vial Correa discurre en su despacho de rector en Alameda 340. Pausadamente sus respuestas a El Mercurio van recorriendo el hilo temático de la Evangelium vitae.
—En el contexto general del magisterio de Juan Pablo II ¿qué importancia y qué oportunidad le atribuye a la encíclica Evangelium vitae, publicada en marzo de 1995? —Una de las grandes paradojas del siglo XX es el contraste entre las inmensas posibilidades de proteger la vida y de hacer el bien, por un lado, y el frío desdén hacia la vida humana por el otro. Este último aspecto negativo ha estado creciendo fuera de toda proporción, como se ve en la justificación ideológica y la aceptación legal de prácticas como el aborto y la eutanasia. Estos cambios implican una alteración profunda en las bases de la convivencia humana. Por eso es que era necesario no sólo que la enseñanza milenaria de la Iglesia fuera reafirmada, sino que se lo hiciera con particular energía.
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—En pocas ocasiones el actual Papa ha usado un lenguaje tan categórico como en esta encíclica para referirse a una clara confrontación entre el bien y el mal y a la responsabilidad que en ello cabe a los distintos poderes sociales. ¿Cómo evalúa esto? ¿Podrá sobreponerse el bien al mal? —La encíclica se llama “Evangelio de la Vida”. Evangelio es una buena noticia. La buena noticia es que la vida humana es siempre buena, y siempre digna de ser vivida. Esta afirmación, que responde a un deseo muy profundo del corazón humano, debe ser fundamentada y desarrollada. Véase por ejemplo el número 81 de la encíclica: el núcleo del Evangelio de la Vida es el anuncio de un Dios vivo y cercano que nos llama a una profunda comunión con Él. La última victoria le pertenece ciertamente a Dios.
Ahora bien, el rechazo a la vida huma- algún momento del desarrollo fetal del na, singularmente a la de los débiles e sistema nervioso, o bien en el momenindefensos, es rechazo a ese Dios vivo y to en que la madre “los desea”, o bien cercano. Rechazo en las conciencias indi- cuando el embrión se implanta, etc. Pero viduales, en las costumbres y en las legis- el desarrollo de los gemelos univitelinos laciones. Es rechazo a una buena noticia (mellizos iguales), que provienen de un y augurio de una época de inhumanidad solo huevo fecundado, muestra que la y desconfianza. Eso es evitable. Mas para determinación de las características indievitarlo se requiere entender lo que está viduales de un sujeto se halla establecida en juego. Lo que está en juego es el bien desde mucho antes que cualquiera de de la vida, es la fidelidad esos momentos. Un emal Dios de la Vida. brión muy precoz no es los hombres de hoy son Me parece que los homun mero “tejido humano”, ingenuos frente al mal. Tendemos a pensar que es bres de hoy son ingenuos sino que es efectivamente el fruto de la ignorancia frente al mal. Tendemos tal o cual sujeto humano o de la debilidad y que a pensar que es el fruto en un momento tempraestamos básicamente de la ignorancia o de la no de su desarrollo, y inclinados a actuar bien. debilidad y que estamos salvo en la fecundación, Los cristianos sabemos que no es así. La pasión básicamente inclinados a no existe ningún instante de Jesucristo no tendría actuar bien. Los cristianos en el que el proceso de razón de ser si el combate sabemos que no es así. desarrollo se haga disno fuera tremendamente La pasión de Jesucristo continuo. Después de la serio. Lo que ocurre es no tendría razón de ser fecundación no hay ninque prevalece un estilo insinuante, aparentemente si el combate no fuera gún momento en que uno pacífico, que va disimulando tremendamente serio. Lo pueda decir: hasta aquí se la dramaticidad del que ocurre es que prevatrataba simplemente de momento. lece un estilo insinuante, un poco de “tejido humaaparentemente pacífico, no” distinto de los tejidos que va disimulando la dramaticidad del de los padres: desde aquí se trata de un momento. “nuevo individuo”; y luego, más tarde, Algunos defensores del aborto sostienen ser tal o cual hombre o mujer, o sea, una que, al menos hasta pasado cierto tiempo, “persona”. Por el contrario, el simple el fruto de la concepción no puede consi- buen sentido sugiere que es correcta la derarse una vida personal. posición del magisterio de que desde la En esto se ha dicho de todo. Los seres fecundación hay un proceso de desarrohumanos adquirirían derechos algún llo continuo y que el ser humano existe tiempo después de nacidos, o bien en como tal desde la fecundación del hue-
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vo. Incluso si uno no estuviera del todo lo hace, le falla gravemente a la sociedad seguro, no podría negar que esta es una humana. Peor aun si se esmera en buscar posición muy plausible. Entonces vale lo argumentos para no hacerlo. que dice la encíclica: “Por lo demás, está en juego algo tan importante que, desde Progresión del aborto el punto de vista de la obligación moral, bastaría la sola probabilidad de encon- —A menudo quienes se manifiestan en trarse ante una persona para justificar contra de la pena de muerte son proclives o la más rotunda prohibición de cualquier bien defienden el aborto y a veces también la intervención destinada a eliminar un em- eutanasia. Asimismo, Estados que proclaman brión humano”. Cuando los derechos inviolables de la se está bajo el peso de una persona y afirman el valor El ejercicio de la libertad duda razonable, no puede de la vida, hacen “legal” el política en una democracia ser lícito matar. aborto y la eutanasia. ¿Cómo sólo tiene sentido si por se explica esta aparente conella se busca cautelar y —¿Qué decir de la actitud promover los derechos tradicción? del hombre. Lo auténtico “prometeica” que, según la —Creo que el fundade mi libertad se mide encíclica, en materias de vida mento profundo de la en la forma en que ella y muerte muestra la ciencia doctrina de los derechos promueve la plenitud y, contemporánea? humanos se ha debilitadesde luego, la libertad —Nadie es dueño de la del otro. El que se arroga do. Para mucha gente los la facultad de decidir vida, ni de la vida propia. derechos humanos son sobre la vida de un Como insiste la encíclica, cosa de la sensibilidad. inocente es un tirano, o un si se admite que algunos En el extremo, tiene deaspirante a tirano. son dueños de disponer rechos el que es capaz de de vidas ajenas, se está quejarse. El embrión, el consagrando de hecho la libertad de recién nacido deforme, el moribundo los fuertes contra los débiles. Fuera de inconsciente no son capaces de quejarmuchas cosas que podrían decirse sobre se. De allí se puede pasar como se ha esto, hay que mencionar que si se permite visto muchas veces, a la eliminación de ese ejercicio pervertido del poder, inevi- aquellos cuyas quejas no alcanzan a ser tablemente se altera la base de confianza escuchadas. Un mundo que vive mucho recíproca que mantiene cohesionada a la de apariencia y espectáculo, vive mucho sociedad en la benevolencia, en el querer de lo que siente con la epidermis. bien al otro, y no a cualquier otro sino al Más allá de estas y otras contradicciones, enfermo, al disminuido, al indefenso. Su el desenvolvimiento social y político del razón de ser es defender esa vida. Si no aborto y de la eutanasia responde en el
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planteamiento del Papa a un concepto de libertad “absolutizado en clave individualista”.
con el aborto como medio de control del crecimiento demográfico (hasta con la recomendación de formas disimuladas de imposición del aborto pasando por —¿Qué supone esto a la larga para la de- encima de la libertad de las mujeres), mocracia? y ahora, del aborto se está pasando a la —El Papa hace ver simplemente que justificación del infanticidio. De ahí a la “reivindicar el derecho al aborto, al in- eliminación de los enfermos inútiles no fanticidio, a la eutanasia, y reconocerlo hay más que un paso, un paso que ya se legalmente, significa atribuir a la libertad ha dado alguna vez en la historia de la humana un significado humanidad. Hay en eso perverso e inicuo: el de una lógica inexorable aunEl tirano es insaciable en el un poder absoluto sobre que perversa, que puede abuso del poder. La historia los demás y contra los destruir las bases de la reciente del aborto lo demuestra. Una generación demás…” El ejercicio de sociabilidad humana. El atrás, este era considerado la libertad política en una arbitrio del individuo no una cosa abominable. democracia sólo tiene es lo propio de la condiLuego se empezó por el sentido si por ella se busca ción humana. Puede ser aborto “terapéutico”, cautelar y promover los su peor corrupción. se siguió por el derecho al aborto, se empezó a derechos del hombre. Lo decir que el derecho al auténtico de mi libertad —Una ley de aborto o de aborto era un derecho se mide en la forma en que eutanasia ¿puede llamarse de la mujer; más tarde se ella promueve la plenitud propiamente “ley” y obligar continuó con el aborto y, desde luego, la libertad en cuanto tal? como medio de control del crecimiento demográfico, del otro. El que se arroga —Nadie puede obedecer a y ahora se está pasando la facultad de decidir sola disposición que le ordea la justificación del bre la vida de un inocente na matar al inocente. Eso infanticidio. es un tirano, o un aspiranque parece obvio está hoy te a tirano. Y el tirano es día puesto en cuestión insaciable en el abuso del en países en los cuales el poder. La historia reciente del aborto lo médico que rehúsa practicar el aborto ve demuestra. Una generación atrás, este era su carrera profesional tronchada. En esa considerado una cosa abominable. Luego forma, la “ley” perversa viola el fuero se empezó por el aborto “terapéutico”, se de la conciencia individual, y pretende siguió por el derecho al aborto, se empezó forzarlos a todos a vivir bajo su imperio. a decir que el derecho al aborto era un de- Es por eso que problemas como los del recho de la mujer; más tarde se continuó aborto y la eutanasia amenazan destruir
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a la sociedad humana. Porque su im- población si el aborto no sólo no tuviera plantación legal violenta de tal modo la ninguna sanción, sino que además gozara conciencia moral que trae el desprestigio de atención médica pública? Pensaría del orden jurídico. Si la norma que con- que los legisladores declaran legítimo sagra la peor injusticia llega a imponerse, al aborto, y veríamos tarde o temprano, la justicia de cualquier norma se hace por ejemplo, el contrasentido que se ensospechosa. cuentra ya en algunos países, de que el La encíclica recuerda las palabras de Juan médico que rehúsa prestarse a tal forma XXIII: “Por lo tanto si la ley o preceptos de homicidio sufre una discriminación de los gobernantes estuvieran en contra- en su contra, cuando no una persecución dicción con aquel orden y consiguiente- funcionaria. mente con la voluntad de Dios, no tendrían fuerza Derechos de la mujer Es por eso que problemas para obligar en conciencomo los del aborto y cia. Más aún en tal caso, —¿Son también esas ya la eutanasia amenazan la autoridad dejaría de mencionadas claves individestruir a la sociedad humana. Su implantación ser tal y degeneraría en dualistas de la libertad las legal violenta de tal abuso”. Por otro lado, esa que dan curso a un tratamodo la conciencia moral es la enseñanza invariable miento de la cuestión deque trae el desprestigio de la Iglesia, y nadie tenmográfica, que hace al Papa del orden jurídico. Si la dría derecho a declararse comparar la actitud de los norma que consagra la peor injusticia llega a escandalizado cuando el países ricos a este respecto imponerse, la justicia de Papa, conformándose a con la figura bíblica del Facualquier norma se hace esa enseñanza, dice: “De raón de Egipto? sospechosa. esto se sigue que cuando —Refrenar el crecimiento una ley legitima el aborto de un pueblo recurrieno la eutanasia, deja de ser por ello mis- do a la matanza de sus hijos es lo que mo, una verdadera ley civil moralmente ha cubierto de oprobio por milenios a vinculante”. la figura de ese Faraón. Hoy no es tan Hay que recordar, además, que la ley distinto lo que se preconiza al defender no sólo “manda, prohíbe o permite”. el aborto como medio de regular el creDe hecho, la ley enseña. Eso se ve en las cimiento demográfico. Y no se diga que propuestas de “despenalizar” el aborto. ahora se está procediendo de otro modo El nuestro es un país donde el robo de porque las madres toman libremente su una gallina está penado; donde se castiga decisión. A la criatura que es abortada al automovilista que estaciona mal su ve- nadie le pidió su parecer. Como no pohículo en la calle. ¿Qué podría pensar la día defenderse, ni siquiera manifestarse,
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simplemente no tenía derechos. ¡Y esto se defiende en nombre de los derechos de la mujer! El cincuenta por ciento de los fetos abortados es de sexo femenino. ¿Quién hizo valer los derechos de esas mujeres?
que el respeto a la vida, el cuidado de ella, engendra una confianza que mantiene a la sociedad humana. El inmenso valor que por muchos siglos se le ha conferido a la Medicina refleja simplemente ese hecho fundamental, que el ser humano se siente —Los preceptos morales negativos –como el exigido, requerido por atender al débil y al mandamiento “no matarás”– entran en co- enfermo: hasta en el juramento de Hipólisión con cierta idea moderna de la libertad. crates, juramento pagano, se percibe que ¿Podría usted explicar su alcance positivo? las necesidades del hombre disminuido —La encíclica responde por la enfermedad son un citando a San Agustín: centro dinámico de la vida Esa es la enseñanza “La primera libertad es social. invariable de la Iglesia, y nadie tendría no tener delitos…”. El derecho a declararse mandamiento negativo, —Al tratar sobre la valoescandalizado cuando el por lo mismo que pone ración moral del aborto, la Papa, conformándose a esa un límite mínimo, es cuiencíclica Evangelium vitae enseñanza, dice: “De esto se dadoso con la debilidad hace referencia a problemas sigue que cuando una ley humana. No le ordena a como las intervenciones solegitima el aborto o la eutanasia, deja de ser por uno hacer aquello que esbre los embriones humanos ello mismo, una verdadera taría a lo mejor por encima y las técnicas de diagnóstico ley civil moralmente de sus fuerzas, sino que lo prenatal. ¿Quisiera comenvinculante”. pone en guardia sobre el tar algo al respecto? punto en que su conducta —El hombre y la mujer en se hace irremediablemente antihumana. la etapa embrionaria o fetal de su vida Pero al mismo tiempo, el mandamiento son acreedores al respeto que se le debe negativo, con su tono absoluto, invita a a la persona. Eso significa que son lícitas reflexionar sobre las razones que se hallan todas las intervenciones que buscan su detrás de un precepto tan serio. ¿Por qué bien y su salud, y que son ilícitas las que causa así, absolutamente, no matar? Y la arriesgan su vida en forma inútil. Yo diría reflexión humana iluminada por la gracia además que son atroces las intervenciova descubriendo que la vida humana es nes que buscan aprovechar esa vida para sagrada, y que odiar o despreciar al otro la experimentación. El hecho de que se es alzarse contra Dios que lo ama, y que el persiga un bien como es el del aumento homicidio se defiende debajo de la menti- del conocimiento, por ejemplo, lejos de ra, y que termina por destruir la sociedad atenuar el mal, lo hace aún más escandahumana. Y del otro lado va descubriendo loso y destructivo del tejido social.
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rechaza el homicidio del inocente, rechaza el aborto, rechaza la eutanasia. ¿Por —¿Puede afirmarse que en la condenación qué entonces esta reiteración solemne, que en la encíclica Evangelium vitae se hace hecha con las fórmulas de la infalibilidad, del aborto y de la eutanasia el Papa habló “ex de la condena a algo que contradice en cathedra”, esto es, comprometiendo su infali- forma tan obvia la ley de Dios? Creo que la forma usada por el Papa muestra lo bilidad en materia de fe y de moral? —Tres veces en la encíclica el Papa usa grave de la situación de las conciencias. una fórmula solemne para proclamar una Existe una verdadera marejada que busca doctrina moral: primero, que la eliminación borrar la imagen de Dios en el hombre. directa y voluntaria de un ser humano ino- Arrecian los argumentos seudocientíficente es siempre gravemente inmoral (n. cos. Se exaltan sin pudor los derechos de los sanos y fuertes a 57); segundo, que el aborto disponer de los débiles. directo, es decir, querido A la criatura que es Se pretende disolver el como fin o como medio, es abortada nadie le pidió vínculo más sagrado de siempre un desorden mosu parecer. Como no podía defenderse, ni siquiera la sociabilidad humana ral grave (n. 62), y tercero, manifestarse, simplemente al justificar y proponer que la eutanasia (acción no tenía derechos. ¡Y esto que las madres consientan y omisión que por su nase defiende en nombre de en la muerte de sus hijos. turaleza y en la intención los derechos de la mujer! Todo esto queda como cucausa la muerte con el fin El cincuenta por ciento de los fetos abortados es de bierto de una espesa capa de eliminar cualquier dosexo femenino. ¿Quién hizo de insensibilidad moral. lor), es una grave violación valer los derechos de esas En el cumplimiento del de la ley de Dios (n. 65). mujeres? “no matarás”, lo que está En las dos últimas, el Papa en juego es el fundamento invoca la autoridad de San Pedro que recibió las llaves, la enseñanza mismo de la convivencia humana. Por concorde de sus predecesores y del magis- eso es que el Papa ha juzgado necesario terio ordinario, la tradición de la Iglesia y el usar del más solemne y categórico lenconsenso del colegio episcopal. No soy un guaje del magisterio para “confirmar en canonista para juzgar del aspecto jurídico la fe” a los muchos que podrían vacilar. de todas estas afirmaciones. Pero es evidente que a ellas se traspasa toda la fuerza del Una visión ciertamente sombría… magisterio y que representan doctrina de la Iglesia. De eso no tengo la menor duda. Insisto en que todo esto debe mirarse a la Lo que me llama la atención es otra cosa. luz de la propuesta de la encíclica, del anunLa conciencia cristiana educada en la fe cio de un Dios vivo y cercano, que busca al
Motivos de una reiteración
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hombre, que le da sentido a su alegría como —¿Este Evangelio de la Vida está dirigido a su dolor, que convoca a todos los hombres sólo a los cristianos? y mujeres como a hijos suyos. Un anuncio —La encíclica se dirige “…a todas las que habla de la plenitud de la vida humana. personas de buena voluntad...”, y lueEsa maravillosa vocación humana está en go nos recuerda que “El Evangelio de peligro, y es eso lo que arranca los párrafos la Vida es para la ciudad de los hommás ardientes de la encíclibres…”. El Evangelio de ca. Eso es también lo que la Vida le da su auténEl hombre y la mujer en la lleva al Papa a enumerar tico fundamento a algo etapa embrionaria o fetal los signos positivos, que los que es necesario a todos de su vida son acreedores hay y muchos. Signos molos hombres y mujeres. al respeto que se le debe a la persona. Eso significa rales de búsqueda de fraSin la “dignidad” de las que son lícitas todas las ternidad, de atención a los personas no hay una sointervenciones que buscan desvalidos, de mil formas ciedad verdaderamente su bien y su salud, y que son nuevas de solidaridad huhumana. El tema de la ilícitas las que arriesgan mana. Signos intelectuales vida recibe una luz y su vida en forma inútil. de progreso científico que una fuerza extraordinaabre nuevas esperanzas de rias desde la fe; pero de vida. Testimonios de valentía y dignidad. suyo “… él pertenece a toda conciencia Cuando la encíclica habla de sombras es humana que aspira a la verdad y está precisamente porque la realidad se halla atenta y preocupada por la suerte de bajo una luz resplandeciente. la humanidad”. Entrevista de JAIME ANTÚNEZ ALDUNATE *
* Jaime Antúnez Aldunate, ex editor de “Artes y Letras” de “El Mercurio” es el director de Revista Humanitas
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