5 minute read
CAYETANO COLL Y CUCHI (Odon Marcia[) 133
múltiple3 colores, brillando, heridas por el sol, las cuchillas dispuestas siempre a cortar el vuelo la\ los otros competidoces.... 1 íBenditos días aquellos de la niflez! ¡Horas cuyo re- cuerdo llena de plaeidez el alma, combatida por las tempestadesde la vida: ¡benditas seáis!
Las horas libres de escuela pasábalas CAYETANO en nuestra h,1milde c,1sa. olvidando a veces la suculenta mesa paterna para participar de nuestra pobre comida. Mi abuelo m'lterno. que en ocasiones nos ayud1tba en la preparación de útiles p.1ra nuestros juegos y nos acompv.í1aba la mAyor de la3 tardes, como fiel guardiin. dijo, refiriéndose a CAYETANO, más de una vez. al verle discutir con cálida fluidez de palabras: lfERte muchacho es de porvenir. Haría un gran abogado", rien-to, aunque disimuladamente con los dichos y travesuras del chico.
Ell abuelo tenia por don CAYETANO (padre) gran predilección y cariño, pues le co11ocfa desde nifto. Llegado a Arecibo el año 1816-cuatro años ánteM de nacer el Dr. Coll y Toste-no volvió a salir de este pueblo, donde falleció en 1901, guardanrlo siempre en su alma vivo el amor a su patria, Andalucía, y su fidelidad a España.
De abl mi amistad con CAYETANO COLL Y CUCHI, que no se entibió nunca, que él mantuvo siempre, no obstante haber escalado los puestos más altos, tanto representativos como poltticos, y haberme yo mantenido en el humilde circulo en que se han desarrollado mis escasas aptitudes. Jamás, en medio de sus triunfos y sus éxitos, que han sido grandes, se hizo el desconocido para conmigo. Por el contr.trio, fiel a nuestra amistad de la niñez, mostróse siempre noble y leal y afectuoso, sin que le envanecieran sus glorias y prestigios.
En la poética plazoleta del histórico "Cerro de la Monserr::i.te", desaparecida la vieja Ermita para edificar sobre sos cimientos el Hospital Municipal, entónces en construcción, se levantaba el campo de nuestros jueJ,?os infantiles. Quedaba aún en oié en unapequef\a estribucióndel "Cerro" uno de aquellos Pinos del cementerio a quienes cantara don Cayetano Coll y Toste (1) en sentidas estrofas. Alto. delgado. de on verde oscuro sombrfo, arrugarlo el tronco de un colorrojo plomizo, el dichoso pino era, por logeneral. elpunto fuerte contra el cual iban a estrellarse, rompiéndose como ta ola en la playa, nuestras chirinaas y vola11tines ......
11) Co1X1POSfoi60 l)06tlc:a11ue 11,ium,oeste libro.
POT la mente pasa comoen finísimocristal de ensuet'\o. la imágende los chicosde nuestra edad, alegres y scnr1entes, devivaz mirada, diligPntes y traviesos; los corros que formábamos cantHndo el "SanSerenf del Monte", "Doña Ana no estáaquí", "Hilo, hilo, hilo verde", y otras más; la� carrer1:1s largas, l:isvueltas innumerables que dábamos por la plazoleta, alrededor de los almendres; las pedradas que dfrigiamos aéstos anhelosos de hacer caer al suelo la codiciada frutade sabor agridulce; nuestras peleas, todo aquello que formóla aurora de muchas vidas, extinguidas ya, unas, otras dispersas en Jos combates rudos del vivir.
¡Hoy todo ha camhiado! Panoramas, nombres, rostros, árboles. ¡El Progreso lo va c::imbiando todo, lo va desfigurandotodo, haciéndolo más útil; pero, ménos bello......!
Estudió el primer afiode Bachillerato en Arecibo con el Profesor don Francisco G. de Silva, que desde 1889 tenla establecido aquf un Colegio de SP.gunda Enseñanza en conexión con el Instituto Provincial de la Capital de la isla, e ingresóen éste el afio 1892, cursando enél los tres años restantes. Allíobtuvo sutitulodeBachillerenArtesen1896.
Seguidamente marchó a España y en la Facultadde Derechn de la Universidad de Barcelona se matriculó. Surgida la guerrahispano americana rf>gresóal lar nativo, enviándole su padreal Colegio de Notre Dame en Norte América. concluyendola carrerade Abogado en mayo 20 de 1902 en WashingtonD. C. Comoestudiante fué entónces modelo de aplicación. Su natural talento se desarrolló con elestudio. Fué lo que quiso ser.
Tiene el completo dominio de los idiomas. espaflol,francés e inglé!'I. Se cuenta de su mocedad estudiantil la siguiente anécdota:
Marchaba acompafladodel Leño. dnn Federico Degetau y González-primer ComisionadoResidente de Puerto Rico en el Congreso norteamericano-para tomar el ferrocarril queles condujesea New York. Un nPgro llevaba las maletas. Degetau hablóaJ mandadero en inglés, pero no se entendieron. Cayetano entónC'es entró en conversación con el b'lmbre color de ébano. Pero no hRb!Rban PD ninguno de los dos idiomas conocidos por el Comisionado Residente.
Intrigo.do éste preguntó a COLL Y CUCHI:-¿Qué diablo de lengua habla ese negro?-Es el patois anglo-africano de esta gente de trabajo-respondió el jóven compueblano.y ¿cómo lo entiende usted?tornó a pr1-guntar Degeti,u.Porque mipadre, respondióle Cayetano, me ha aconsejado uno y otrodla que e'3tudie elinglés hasta elpunto de poder garatearenél como si fuera en el idioma vernáculo. Siguiendo el consejo y habiendo tropezado con uno de estos cargadores a quién nopude entender, un verano me fui a la casadel mismo y alU lo aprendí, como ustedvé.
Ya Mnpropiapersonalidadestableció subufetede Abogado y Notario en San Juande Puerto Rico Jóven, valien• te, buen mozo. de fácil y galanapalabra, fué el [dolo de mujeres y amigos. Tuvo una juventud borrascosa;perosin quecometieraacciónalguna que pudiera deshonrarle. iEI juego;elbuen vino y lasmujeres fueron patrimo11io siempre delos jóvenes ricos, y alicientes para los viejos verdes....1 iLocurasquedisculpa la edadt
Militó en elpartido Republicano puertorriqu,;,flo; pe_ro por las turbulencias y desmane11 Eleé-te se separó del m1�mo. Elinmortalpoeta JOSE MERCADO (Momo) desde lascolumnas dfl su revista literaria "La Arei'la" en prosay enverso, habla comenzado a abogar por launión de la fomitia puertorriqueila, como únicomedio desalvar la personalidad de nuestro pueblo en elnaufragio en que la sumieran la deaorientaci6n de unos. las complacencias y debilidades de otros y la diestra política del elemento continental que "dividia para vencer"..... .
Don Rosendo Matienzo Cintrón, don Cayetano Coll y Toste, sus dos hijos mayores (Pepe y CayPtano) el ledo. en Derecho don Félix Santooi Rodríguez, filói,¡ofo y petriota, don Mateo Fajardoy el doctor don ManuelZIDNO GANDIA -que figura en esta obra por derecho propie como poeta arecibel'loinspiradi<1imo-comprendieron IR necesidad de la unión. Matienzo Cintrón se lanzó a la préclica de la redentora doctrina, que no ba podi::lo cristalizar aún. Otros como los sef\ores Santoni, Zeno Gandla y no rerordamos quien más, llevaron a una Asamblea del partido Republicano una Resolución tenclPnte a tRn patrióticos anheloP. Trece vc,tos obtuvo aquella, siendo derrotadaporunai11mensa mayorla.
Pero la semillano habla sidoregada en campo estéril. Del seno delpartido Republicano bubo grandes y prestigio- sos desprendimientos; el partido Federal, por su parte, alla116 dificultades y con1:1ti1.uyendo h1 n1alcrla ir.n1ema del electorado, convocó a una asamblea genenl, De ella salió la Asociación Patriótica nominada "Oniión de Puerto Rico", cuyo programa comprendía en lo polltico las aspiracioot!s de los gr.ipo:1 militantas, perfectamt!nte definidas, a saber; Autonomía, Estado e Independencia absoluta, eon ese credJ lanzár.:>11se a la propaganda aottguos federales y disidentes republicano:1. El país harto de 11ervihsmoe, de!!eoso de p 1z y de progreso, ac.>gió con deleite la idea unionista y prestó a sus hombres sus simpatlas y solidaridad.
Muñoz Rivera, Georgetti, Herminio Díaz Navarro, Coll y Toste, Coll y Cochi, Santoui y cien patricios mé.s, ejercieron sus influencias en el seno del electorado, y en los comicios <le! año 1905obtuvo el más ruidoso de los triunfos electoralesen loe sietedistritos represenb:ttivos que elegían los miembros de la Cámara de Representantes.
CAYETANO COLL Y CUCHI formó parte de !a Asamblea Legislativa que comenzó sus sesiones en 11 de enero de 1906, repre!lentando al Di3trito de San Juan. El gobPrnador Regís H. Post, por lns poderes dictatori1:1les que habla puesto en sus manos el Acta Orgánica para Puerto Rico d.enominada "Ley Foraker", se habla pueeto de frente al partido Unión de Puerto Rico, y por ende, a la Asamblea Legislativa cuvos hombres eran parte intPgrante de aqut-lla patriótica A11ociaci6n. C�lebrada una reunión conjunta de la Junta Central unionista y los treinta y cuatro representiin tes de la Cámara (el otro, señor Ric1:1rdo MartfnPz, Delegado por Mayagüez, falleció i:in tomar poiaesi6n de su cargo) y €D vista de la 11ituación creada por el Ej�cutivo, se acordó la 11nea de conducta a seguir, del modo siguiente: l. Actuar enérgicamente contra la snbsi11tencia del Acta Foraker, y contra la forma en que la aplicaban los Centros oficiales.
2. No llevar a cabo ningún acto de opo11ición sistemAtica pc!ro la Cámara arioptarfa una !lituación de irrevorable independencia con respecto a los actos del Gobierno Insular.
3. Que la Cámara votase y sostuviese leyes de earácter autonómico para la vida del pafs; entrase en la crítica aevera de los actos de la Ariministraclón en todas suE dependenciae, utilizando, además, todos los recursos polfticos para que sns leyes fueran Aprobadas y corregida la Administración de sus vicios y defectos, Esto en afotesis.