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CAYETANO COLL Y CUCHI (OdonMarcial) 137

Autorizaban esa Resolución CAYETANO COLL Y CUCBI, Delegado por San Juan; don Nemesio R. Canales, Delegado porArecibo; don ErnestoLópezDtaz, Delegado por Aguadílla; don JOSE COLL Y CUCHI, Delegado por Ponce; don LUIS MUÑOZ RCVERA, Delegado por Guayama, y don Herminio DlAZ NAVARRO, Delegado por Humacao. (1909) convirti6se en cacique. El guerrero nativo eufri6 la ignominiosa cadena del esclavo, y no por el más noble, y no por el má.11 ,bravo si no por el que usaba el fuego y la coraza contra la débil flecha de la autóctona raza.

Tan patriótica actitud tr11jo por consecuencia la ruptura del partido y de la Cámara conel Poder Ejecutivo. Asf las cosas se nombró una Comisión que marchar{\ a Estados Unidos para protestar de lasituerión y de la forma en que se violaba la ley por los representantes de la Nación en �uerto Rico, asf como para que trabnjase por las enmiendas que debían hacerse al Actl\ Foraker. compatibles coo nueftro carácter de pueblocivilizado, sediento de libertad y de justicia.

Tal Comisión estalJa integrada por los sef\.orPs don LUIS MUÑOZ RIVERA, don CAYETA_NO COLL Y COCHI y don EUGENIO BENITEZ CASTANOS. CAYETANO fué el hombre de confianza de donLUIS. A su lado trabajó en Washington con todas las energías y actividades de sus veinte y ocho atlos. poniendo al servicio de la Patria sus talentos e inteligencia resaltando su figura simpática entre los b'lmbres de la Administración de la Metrópoli, admirados de la juventud y sabidurfa del adalid arecibefio.

De regreso de au \'iaje referido dió a la publicidad i:u libro PRO PATRIA, que epiloga el propio don Luis Muñoz Rivera.

Después, sus lurhas, sus éxito11, sus triunfos. en el Foro, en la tribuna pública. en la Cámara de ReprePentantes que llegó a presidir. hasta ahoraen que, en ostracismo voluntario, que no sRbemos cuánto tiempo habrá de durar, puso entre enemigos y su ingrato pa[s, el mar. quetiene olas ménos amargas que las maldades de los hombres y las inconsecuencias de los pueblos.

CAYETANO COLL Y CUCHI, como <le.io di<'ho, escribió y publicó delicarlas comrosiciones noéfi<'as. L11s autorizaba con el pseurlónimo de ODON MARCIAL, en Puerto Rico y en revistas habaneras.

"MIS VERSOS" es una composición inédita, Sencilla, espontánea. Es de sus primeros frotos.

Vibró :,or las asmontan de r<1ca en roca el grito.

A poco tiempo el huéHped, dominador altivo,

Lo recibe Agueynaba y 11encillo demuestra su amistad a JliAN PONCE que le ofrece su diestra.

Que trae a la conquista del peflón borincano al noble y decidido guerrero castellano.

El indio candoroso ni teme ni recela al ver de�de sus costas la hispana carabela

Para LUIS MUNOZ RIVERA

Antes Y Ahora

En este libro pongo en el momento lo que pare mi mu!la con raholgu y por fea que sea la vestjdura divierto el alma con el pensamiento. Aunque conozco muchas produccione11 de grandes vates, llricos poetas, no he tenido el humor de imil11r nada; porque uno pasa grandes focone1so ai ajenas arcas roba, aunque pletas,re y mal acaba siempre su jornada.

En mi! horas de grande aburrimiento dando al alma un momento ::le soltura, a casa me dirijo con premura, la pluma empu1lo y a escribir me siento.

Mis Versos

case la lira del poeta por la plum1t del pol1ticol iLástima grande que YETANOCA COLL Y CUCHI tro• vera es un canto de amor a la patria. Es un himno guerrero, de tonos viriles, de épica entonación.

"ANTES Y AHORA" dedicada a don Luis Muttoz Ri­

Cant6se un areyto en Rolemne conjura de todos los caciques, y corrieron las tribus )os augures bohiques incitatJdO a la guerra a nobles y vasallos contra los hombres blancos de olimpicr,s caballos. El indio de bronclneo continenLe y gtllarda figura no vacila ni teme a la lombarda ni al hierro de los blancos.

Noble muerte le espera. y él marcha bácia su encuentro con voluntad entera. La tizona luciente que al rebelde asesina cuando la vida arranca la esclavitud termina. Pasaron corto.a afloa.

Ya la grey borincana no manda en el terrufto donde fué soberana: t>I indio va muriendo de tristeza profunda; el yugo le domena, le oprime la coyunda, despuéi que del Luquillo en la vertiente estrecha el último cacique lanzó la última flecha. Perel!i6 el nitayno en combate sangriento contra loR hr1mbreii blancos de riquez'\ se�ientos los nabnrfe-1 muriE>ron softando con Guaynfa en noche• de quebrantos y de melancolla ...

Y pasaron los anos, loa siglos transcurrieron y los hombres del Nurte Borinquen invadieron, lo mismo que de antano las huestes espaflolas rompiendo c,,n sus barcos las crestas de las olas.

El pálido riquf'i'lo tTanQuilo en eus montaftaa vi6 pohlan�e los valles con las gentes extraf'las que salían de barco.¡ como m6nstruos de acero, y les brindó un asilo confiado y sincero.

;Como en tiempos anti�uos el indio borincano al espaf'lol brindara su carif'lo de hermano! Ahora, como antallo, dominador altivo, el huésped es caaique.

El infeliz natiTo sufre la ignominiosa carJena del e11clavo y no por el más noble, y no por el más bravo.... Má3 ya no suena ronco el car11col guerrero que ordena el exterminio del invasor artero, oi existen los caciquee que cantan areytos ni llenan la montana los estridentes gritos de un pueblo que camina derecho hácia la muerte porque otro pueblo exlraño, que es másgrande y rrás fuerte al robarle la tierra ta:lmbién no le arrebate el honor de la sangre que en 11us arterias late.

Triste suerte la suerte del hembre que ba nacido , . en una tierra extrafla y sufre envilecido, el pesa que le oprime de servidumbre horrible sin erguirse ante el dé�pota magnifico y terrible, y lanzarle a la cara su eterna mald1ci6n.

Triste suerte la suerte del que sufre el baldón de eRclavitud impuesta por mano vencedora que por solo u ta.:to envilece y dtsdora.

Ante la fuerza bruta levántase sublime, como potente arma que algúntitán esgrime el escudo glorioso del honor del patriota. iQue importa la batalla! ..... !Se acepta la derrota!

Y la razón burlada, conculcado el derecho, orgulloso!il levantan los patriotas las testas para lanzar al mundo sus últimas protestas.

¿Por qué doblar. sumiso, �a trémnla rodilla y acatar del extraño la .vol.untadque humilla tanto como deshonra?·

¿Acaso no es más fuerte aquél que mejor sabe menospreciar la muerte?

Mi Sue O

tYo a veces sueño! ....En mi continuo anhelo de venturas, de glorias, y de honores el alma pura elévase hasta el cielo y ajeno a toda clase de dolores me arrullo con las notas de mi lira y me duerme el perfume de las flores.•,:. 1

Una visión en mi contorno gira, • .. extrai\a imágen de mujer y diosa, musa bendita que mi canto inspira no como tü tan bella ytan hermosa; que ni en suei\oa forjar puede la mente para ti una rival, nina preciosa,

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