El correo bíblico SIETE VERDADES DE LA PALABRA DE DIOS, SALMOS 19:10 Las Palabras de Dios son afinadas Parte 3 Por José Rubén Arango Introducción Vamos a reflexionar en Salmos 19:10a sietes verdades que podemos inferir a partir de la imagen que nos ofrece el texto. Sete realidades acerca de la Escritura en relación con su valor para el ser humano. Es comparada con el oro: “deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado”. El adjetivo afinado podríamos definirlo así: “que se apura o se aquilata hasta el extremo la calidad, la condición y el valor del oro”. Imaginemos una joya en oro del más preciado valor, en oro purísimo. Humanamente hablando, ¿No desearías lucir un adorno de semejante talante y belleza? Estoy seguro que sí. Te merece al menos todos los halagos y las más hermosas palabras para alabar la obra del orfebre. ¿Cuánto más piensas que merece ser apreciada, valorada y deseada la Escritura, obra del Dios Altísimo y vivo, santo y todopoderoso que pensando en hacernos todo el bien y colmarnos de bendiciones, propuso un manual amoroso para que vivamos quieta y reposadamente, en armonía con Él, con la creación, con los semejantes y con nosotros mismos? Su Palabra traza el plan redentor, restaurador y santificador en todos los aspectos imaginables. Pero la Biblia, que contiene todas las palabras de Dios, es decir, sus pensamientos y deseos, sus sueños y su voluntad, su revelación y su plan, ha sido acrisolada, ha sido depurada en el crisol de la historia humana, a través de siete fuegos humanos, saliendo ilesa en cada proceso. Ella es purísima, santísima, perfectísima, sacratísima, excelentísima, integérrima, bonísima y fortísima.
Las Palabras de Dios es oro probado y depurado Valor de la Palabra Eficaz. No existe ningún libro con la capacidad de lograr el efecto que se ha trazado en su propósito, de alcanzar en los seres humanos lo que desea y lo que espera por tantos siglos y en épocas diferentes, agente tan diversa cultural y socialmente. Solo la Palabra mantiene la frescura y el poder pleno de su eficacia en cualquier tiempo y sobre cualquier ser humano. Mientras los libros impactan a ciertos grupos y logran influir sobre cierto tipo de público, la Palabra impacta, influye y transforma a todo el que se acerca a su fuente inagotable de restauración y sanidad. Sin duda un Quijote o la Divina Comedia han sido eficaces en mentes intelectuales y en la obra de muchos escritores, pero jamás han logrado que un hombre vuelva su corazón a Dios. Efectiva. Solamente la Escritura puede conseguir que el ser humano, tú y
yo, tengamos cambios reales, visiones verdaderas, determinaciones auténticas y propósitos genuinos, porque este libro eterno fue escrito por un Ser eterno, verdadero y real, cuyo plan para el hombre es igualmente verdadero y real. Los libros sagrados de cualquier religión, proponen planes y visiones desgastantes, quiméricas y falsamente dichas por algún dios de la fantasía del hombre o de su tradición. Cualquier intento de cambio, cualquier propósito de ser mejor o dejar algo fallará, pues no contiene un ápice de efectividad. Lo mismo puede decirse de los libros de superación personal, escritos por las mentes más brillantes y probadas en técnicas y estrategias de reingeniería de vida humana. Su efectividad tiene límites y falencias. Pero la efectividad de la Escritura es imbatible, irrefutable y contundente. Eficiente. ¿Qué libro, manual o palabra sabia puede hacer que un hombre haga puntualmente lo que se señala o conseguir que algo o alguien se amolden a sus intenciones y deseos, a no ser por manipulación psicológica o técnicas de efecto subliminal? Ninguno, verdad. Solo la Biblia es eficiente. Puede lograr que el ser más despreciable, miserable y perdido –aunque todos éramos así, en términos soteriológicos- se vista de gloria, de excelencia espiritual y sea santo y ministro del evangelio. Solo la Biblia ha conseguido que cada “Saulo de Tarso” sea “Pablo”, que “Simón” sea “Pedro”, que centenares de “Lázaros” resuciten y que hombres y mujeres, hijos del diablo, seamos ahora hijos de Dios. Su eficacia no tiene parangón ni aproximación con los más exitosos libros de transformación humana, ya que solo la Divina Respuesta logra una genuina y verdadera conversión. Espiritual. Únicamente la Palabra es inspirada por Dios en su totalidad. El Espíritu Santo tuvo cuidado que fuera transmitida sin error su revelación y pensamientos. Preservó el texto de cualquier yerro, de la furia humana y de su exterminio. El fuego y los edictos reales han borrado todo vestigio de obras valiosas de la literatura, pero jamás han logrado que desaparezca la Palabra, pues este libro no es producto humano, aunque hayan participado en su elaboración. Por ser obra divina, el mismo autor ha logrado el milagro de preservarla y conservarla, de sostenerla y mantenerla perenne a través de los siglos. Todo el proceso fue guiado por Dios. Este libro único en lo espiritual, “acomoda lo espiritual a lo espiritual” para que llevemos vidas igualmente espirituales por encima de cualquier avatar, imprevisto y ataque. Especial. Seguramente estarás pensando en obras maravillosas, especiales para ti, que te han comunicado algo en particular, algún episodio transformador y motivador. Pero, ¿superan la Escritura? Solo la Mente y el Corazón de Dios, materializados en su Palabra eterna e invaluable, tiene palabras sublimes, dichos especiales y mensajes bellos para cualquier ocasión. Su capacidad de embeleso es inigualable. Solo ella transforma tu corazón, sana las heridas de tu alma y reevalúa tus proyectos de vida. Solo ella conquista y eleva tu espíritu a la condición de una vida santa e íntegra. Exactitud. Es el único libro que siempre atrae a cualquier persona a su lectura y a su mensaje por la precisión de sus palabras, de su narración histórica, de sus profecías y de sus pactos. Es su Mensaje Eterno puntual y fidedigno, feraz y fructífero, poderoso y cumplidor en todo lo que ha anunciado y prometido al hombre. Carece de cualquier imprecisión o errata. Eviterna. Solo la Voz de Dios ha comenzado en la historia humana, vistiendo su lenguaje y sus formas de escritura, pero dura para siempre. Solo Dios tiene palabras eternas de vida eterna para seres mortales que vivirán eternamente y que reciben bendiciones eternas.
MEDITACIÓN: LEE Y REFLEXIONA “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.” (Hebreos 4:12) MEDITA: Escribe diez situaciones, donde puedas argumentar que la Palabra ha sido probada en el crisol de las dudas o los pensamientos que piensan que la Biblia es ineficaz, deficiente, humana, corriente, inexacta, fantasiosa y desactualizada, pero que ha salido victoriosa. Ejemplos: los sicólogos ven en sus páginas una parábola sabia como texto de superación, los historiadores aducen inexactitudes geográficas e históricas, la literatura mira la Biblia como una obra de arte. La Palabra de Dios ha sido probada en tu vida: _____________________________________ _____________________________________ _____________________________________ _____________________________________ _____________________________________
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AVERIGUA E INTENTA EXPLICAR CADA UNO DE LOS VALORES DE LA BIBLIA CON UN EJEMPLO DE LA HISTORIA O DE TU VIDA.
IMPORTANTE: Comparte conmigo tus conclusiones: joaro2140@gmail.com o a través de Raquel Pinto. Espero tus respuestas.