Análisis comparativos de resultados de ensayos de resistencia a la compresión cilíndrica y resistencia a la flexotracción de hormigones en la Región Metropolitana de Santiago de Chile Introducción Desde la entrada en vigencia de la Norma NCh 170 de Hormigones en Chile, existe una urgente necesidad de llegar a acuerdos que permitan establecer una equivalencia que relacione los resultados de ensayos de resistencia a la compresión cilíndrica y resistencia a la flexotracción de hormigones realizados a probetas moldeadas. Aunque parece a primera vista un asunto relativamente simple, la realidad es que identificar una relación única y representativa no es un tema trivial, principalmente porque son varios y de diversa índole los factores que pueden incidir en la determinación un coeficiente de correlación entre ambas resistencias, más aún cuando cada uno de dichos factores dependiendo el contexto puede llegar a tener niveles diferentes de sensibilidad. Lo anterior, comienza a cobrar mayor relevancia al considerar la complejidad e implicaciones del control de hormigones en el laboratorio mediante el ensayo de viga para obtener el valor de resistencia a la flexotracción, el cual normalmente se caracteriza por presentar una escasa repetibilidad y por ende una significativa dispersión de los resultados de ensayo, debido principalmente a lo sensible del ensayo en si mismo y a la dificultad por lograr mantener una probeta en condiciones optimas de ensayo. Sumado a lo anterior está el hecho de que en la fabricación de las probetas para el ensayo de laboratorio de flexotracción con viga, es necesario tener presente que el transporte y manipulación de los especímenes por parte de los operarios del laboratorio supera los límites legales vigentes en Chile (Ley del Saco). En este sentido, sabiendo que el control de hormigones por compresión cilíndrica es considerablemente más rápido y confiable, y que es perfectamente posible deducir, la equivalencia entre ambas resistencias para un determinado hormigón, se propone especificar y
controlar el hormigón solamente en términos de compresión cilíndrica, lo cual resulta además oportuno y pertinente si se tiene en cuenta que la Norma NCh 170 emplea la nomenclatura en Grados G. Por lo tanto, partiendo de esta situación se sugiere especificar el hormigón para pavimentos, en términos de Grado de resistencia a la compresión cilíndrica a los 28 días, en lugar de especificar el hormigón mediante la resistencia a la Flexotracción, para lo cual se debe reconocer y respaldar como válida la equivalencia resultante a partir del análisis de los datos de los ensayos realizados para el análisis comparativo. Por tal motivo, el Instituto del Cemento y del Hormigón de Chile – ICH ha encabezado un ejercicio tendiente a determinar una equivalencia valida y representativa entre ambos tipos de ensayo, (resistencia del hormigón a compresión cilíndrica con su equivalente en resistencia a flexotracción), para el caso de hormigones especificados por el grado G (Grado de resistencia a la compresión cilíndrica a los 28 días). En este sentido. para efectos de los análisis comparativos, se consideraron hormigones especificados como G25, G30 y G35. Adicionalmente, para efectos acotar la muestra, así como otorgar una mayor representatividad, consistencia y coherencia al análisis comparativo, se definió que los hormigones a utilizar en los análisis fueran fabricados en plantas de hormigón premezclado localizadas en la Región Metropolitana de Santiago, pertenecientes a las empresas de premezclado que se vincularon y contribuyeron con el ejercicio. Finalmente, es importante comentar que la iniciativa nace de la necesidad de actualizar los criterios y valores, acordes al tipo de ensayo empleado en la actualidad (resistencia a la compresión cilíndrica) respecto de la correlación que hasta hace poco se encontraba vigente entre resistencia a la compresión cubica y la resistencia a la flexotración en viga.