Mes de junio de 2012
Amar es también escuchar ¿Cómo podemos amar a quienes nosotros no escuchamos? Hablamos con voz enérgica, nos movemos rápidamente, afirmamos nuestros pareceres, decimos a unos y a otros lo que tienen que hacer, pero a menudo somos incapaces de escucharlos realmente y, por tanto, de comprender al otro. Hoy, en la sociedad de la prisa, de la hiperactividad y del estrés, existe un gran déficit de escucha atenta y serena. Comprender a los demás suele ser difícil. Requiere el empeño por resistir al orgullo y a la superficialidad en la relación interpersonal, pero sobre todo requiere hacerse cargo de lo que a los demás les pasa, aunque muchas veces ni siquiera sean capaces de decirlo y lo expresen solo con sus gestos, con su tono de voz o con su modo de comunicarse. Pero, más que una técnica que pueda dominarse, escuchar es sobre todo una actitud que se aprende cuando se vive en un espacio humano en el que hay afecto, en el que escuchar a la persona que se comunica con nosotros es el primer paso para una paz duradera y un diálogo genuino. Se trata de descubrir en el diálogo la singularidad del otro. Dice el Talmud: “Tenemos dos oídos y una sola boca para recordar que debemos escuchar el doble y hablar la mitad”. Y alguien quiso perfeccionar la frase diciendo: “El ser humano tiene dos orejas, dos ojos y una boca para escuchar cuatro veces más de lo que habla”. El escritor francés Joseph Joubert afirma: “Si queréis hablar a alguien, empezad por abrir los oídos”. Solo una actitud de escucha atenta hace fecunda la palabra que podemos brindar a nuestro interlocutor. Es difícil poder decir algo válido al que dialoga con nosotros si antes no abrimos de par en par nuestros oídos para escuchar. Ejercitémonos en el gesto sabio y sereno de saber escuchar. Es un ejercicio muy saludable y enriquecedor. Significa ejercer la solidaridad en una sociedad donde hay tantos seres humanos que necesitan ansiosamente que alguien les preste atención. Sin embargo, a cada paso nos encontramos con un enamorado de su propio discurso. No se trata de hacer una pausa mientras acomodamos el aire y le permitimos al otro que diga algunas palabras, no consiste que nosotros estemos pensando, mientras el otro habla, acerca de cómo enlazamos nuestro propio argumento como si nuestro interlocutor fuera simplemente un partenaire para que explayemos nuestras ideas. Es necesario aprender a escuchar. A veces los diálogos parecieran que fueran dos turnos de oratoria entre dos o más que no escuchan y que solo producen monólogos alternativos con el fin de escucharse a sí mismos. Dice el psicólogo Hugo Pratter “Nadie está equivocado, cuando mucho a alguien le falta un pedazo de información”, de modo que a menudo teniendo cada uno de nosotros esa falta de información y negando que tenemos esa carencia nos lanzamos a defender nuestra limitación seguros que nuestra equivocación es plenamente cierta. A menos que estemos convencidos que a nosotros nos falta algo de información, alguna carencia de verdad en nuestros discursos, no daremos lugar al otro para atrapar esa cuota de la verdad que nos falta. Nos concentramos en lo que queremos decir y no en lo que nos están diciendo. Nos apurarnos por responder sin escuchar hasta el final lo que el otro quiere decirnos. Asegurarse que uno ha entendido lo que el otro dice y mantener limitada al máximo nuestra actitud de interrumpir son elementos fundamentales en este proceso. Escuchar nos preserva de priorizar nuestros preconceptos que a veces nos llevan a darle sentido a los mensajes recibidos independientemente de las intenciones del emisor. Aquí vendría la pregunta: si es así ¿Por qué nos resistimos tanto a abrirnos a la palabra y a los gestos del otro? Nos encerramos en nuestros propios puntos de vista y le damos a estos certeza absoluta convirtiéndolos en axiomas fundamentales a los cuales defendemos muchas veces aplicando la agresión, explícita o implícita, sobre los otros. Sobrevaloramos nuestro saber y desvalorizamos aquello que no sabemos, nos preocupa más afirmar nuestra superioridad que reconocer lo que no sabemos. Una razón muy importante de mantener nuestros aspectos negativos es que nos hacemos cómplices en la defensa de ellos para mantenerlos. Hay aspectos ciegos para nosotros que pueden empezar a verse a partir de la escucha a otros. Si pudiéramos atesorar en nosotros mucho de lo que nuestros oídos han escuchado y lo relacionáramos con nuestras propias ignorancias, tal vez nos iríamos a acostar cada noche con algo de más sabiduría en nosotros mismos. Por supuesto, esto implica saber escuchar aun aquello que va contra de nuestras ideas y principios. Todos al hablar tenemos expectativas acerca de cómo queremos ser escuchados. Nos pasa que nos ponemos mal con algunas personas cuando hemos sentido que no fuimos bien escuchados.
La escucha activa reduce los puntos de desacuerdo, los malentendidos y ayuda a encaminar conflictos en la medida que no nos pone “a priori” en actitud de reprobación y oposición. Para poder comprender a otra persona es preciso reconocer que podemos aprender de ella. Al menos, como escribió la Madre Teresa de Calcuta, "estar con alguien, escucharle sin mirar el reloj y sin esperar resultados nos enseña algo sobre el amor". Efectivamente, para poder escuchar es preciso no mirar tanto el reloj, no tener tanta prisa por dentro, tener paciencia. "La paciencia —escribió lúcidamente Von Balthasar— es el amor que se hace tiempo". Pastor Hugo N. Santos
25 de Mayo 2012 Te Deum, San Carlos de Bariloche, Río Negro. ORACION POR AL PAIS La presidencia de la Nación convocó por primera vez a un obispo metodista a participar del tradicional oficio religioso realizado hoy en Bariloche. El pastor De Nully Brown presentó una invocación en nombre de la Iglesia Metodista Argentina.
“Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas” (Mateo 6:33) Te damos gracias, Señor, por los hombres y las mujeres que forjaron nuestra Patria, por aquellos héroes anónimos que han trabajado y dieron su vida, por la causa de la libertad. Te agradecemos por esta tierra que abrió sus puertas generosamente a diversas manifestaciones de fe para contribuir con sus valores a cimentar nuestra comunidad.
Te damos gracias, Señor, por ser parte de un continente que está en búsqueda de una sociedad más justa, sensible a las necesidades de los más desamparados para forjar lazos de hermandad superando dolorosas divisiones que han dañado nuestra región.
Te pedimos por nuestro pueblo. Por su anhelo de paz y de justicia. Por sus logros y esperanzas. No permitas que nuestras divisiones impidan el camino de la reconciliación. Ayúdanos a trabajar juntos, para que la comunidad toda pueda crecer en libertad, justicia y paz.
Te pedimos por los pueblos originarios, que por tanto tiempo han sido olvidados y despojados de sus derechos, a fin de que su dignidad sea plenamente restaurada, como parte de una comunidad más justa y solidaria, donde todos puedan gozar de una vida verdaderamente humana con pleno acceso a la salud y a la educación, respetando su cultura.
Te pedimos Señor que nos ayudes a ser más tolerantes y solidarios. Ayúdanos a derribar los prejuicios y miedos que nos separan a los seres humanos. Que nadie, por ningún motivo, se sienta excluido del profundo amor que Tú tienes por cada ser humano.
Te pedimos que nos enseñes a respetar los valiosos bienes de la tierra. Ayúdanos a restaurar la comunión entre tu creación y el pueblo, para que los productos del esfuerzo humano lleguen a ser disfrutados por la comunidad toda.
En este día festivo, al rogarte tu bendición sobre todo nuestro pueblo, queremos pedirte por los hombres y mujeres que nos legislan, los ministros y aquellos que imparten justicia, a fin de que su tarea redunde en bienestar y desarrollo equitativo para el país. Y, sobre todo, Señor, pedimos tu bendición sobre la Sra. Presidenta, para que tu gracia la sostenga y le guíe a ejercer su responsabilidad
con sabiduría y valor para el bien del pueblo todo. En el nombre de nuestro Señor Jesucristo en quien confiamos, te lo pedimos. Amén
IGLESIA DISCÍPULOS DE CRISTO: Las ofrendas del domingo 17 de junio serán dedicadas a la terminación de las obras del Edificio Comunitario de Gral. Vedia Recordemos someramente la vida de la congregación de Gral Vedia, Pcia de Chaco. Se encuentra a 100 Km de Resistencia, al Norte, en línea casi directa a Asunción, Paraguay. Muy cerca de las localidades de La Leonesa, Las Palmas y Puerto Bermejo, a pocos Km del Río Paraguay. En la obra del Chaco se destacó la evangelización por la radio. El pastor Feliciano Sarli, inició la llamada “La Voz Evangélica”, lo suguieron los pastores Nicolás Martínez, Angel Peiró, y Norberto Sarli. Peiró siempre terminaba sus audiciones invitando a acercarse a Jesucristo asistiendo a los cultos de la Iglesia más cercana, no importando la denominación. En 1959 comenzó a llegar correspondencia indicando que no había iglesia en su cecanía, ni pastores los visitaban. Las cartas provenían todas de la zona rural de Gral Vedia (Lotes 13 y 14). Recién en Julio de ese año se pudo hacer la primera visita, buscando a los remitentes. Los caminos eran todos de tierra y sólo se poseía una Vespa. En esa primer visita se pudo realizar un culto, al aire libre, con más de 40 adultos e infinidad de niños. Al poco tiempo de esa visita, Peiró bautizo 36 hermanos en el río Zapirán. Se pensó en construir una Capilla, con esfuerzo propio y se levantó la misma, con las técnicas por ellos conocida, un gran salón con amplias galerías, tipo “rancho” con maderas duras y semiduras del lugar. Con gran maestría escuadraron columnas de 30 a 40 cm en quebracho colorado. Fué un gran gozo contar con jóvenes que vinieron desde Bs As para un campamento de ayuda. Hay quienes aseguran que se cumplen ya 50 años de ese campamento. Las áreas rurales de nuestro país cambian. Los campesinos de los lotes 13 y14 debieron irse de allí, porque en su mayoría eran arrendatarios y las tierras fueron convertidas a la ganadería. El éxodo principal fué hacia el pueblo de Gral Vedia (entre 10 a 12 Km). Otros hermanos comenzaron a emigrar hacia otros horizontes. Por eso la primera Capilla, con mucho dolor, fue abandonada. Se construyó una capilla sencilla con ladrillos asentados en barro, en tiempos del misionero Fernow. Seguir esta nota sería muy largo. Prometo contarles en otra ocasión las vicisitudes de ésta congregación. Tuvimos cooperativas avícolas, tierras de cultivo para refugiados de la tragedia chilena. Campamentos de recuperación postinundación en Puerto Bermejo. Muchas experiencias han tenido, la última fue perder su Capilla por un tornado. Por eso pensamos en comenzar un edificio para alojar jóvenes que van a torneos deportivos. Es una construcción que cuenta con un salón de usos múltiples y dormitorios en su planta alta. Necesita para terminarse realizar en madera el entrepiso, instalar los baños y la cocina y terminar los trabajos de electricidad y obras sanitarias, además de pavimentar la Planta Baja. Todo ésto requiere un gran esfuerzo financiero. ¡Esperamos la generosidad de los hermanos!. Ángel Peiró
Abrigando el invierno
Nuevamente se abrió la puerta de Zapiola para realizar la primera Feria Americana de ropa de invierno los días viernes 11 y sábado 12 del mes que acaba de terminar. Un grupo importante de mujeres y nuestro siempre presente Gerardo Sivieri se movilizaron desde temprano estos días. El jueves fue el preludio que implicó una exhaustiva preparación para cubrir todos los detalles: el salón de actos en condiciones, mesas y percheros atrayentes y tentadores con ropa en muy buen estado y todo lo que hay que tener para la administración del evento. Pero más: folletos de inspiración cristiana y el Aposento Alto daban cuenta de que la Feria va más allá de prestar un gran servicio al barrio al ofrecer las prendas a precios económicos. También compartimos nuestra fe alcanzando a gente que se siente atraída por nuestra actividad. Es interesante que recibimos aportes de ropa valiosa tanto de la gente del barrio como de hermanos de la iglesia no solo para esta Feria sino también para la ayuda de los lunes a aquellos que necesitan de la misma de una manera especial. Como siempre la respuesta fue positiva y la oportunidad de interactuar en diálogo con los presentes ayudó a que nuestra comunidad se conozca un poco más.
La Juegoteca sigue creciendo......
¡Damos gracias al Señor! Porque sábado a sábado varios niños del barrio se están acercando. Ellos encuentran un espacio para jugar, aprender historias de la Biblia y hacerse de nuevos amigos. Las mamás que los acompañan, también disfrutan de ese tiempo entre ellas y con los líderes.
ACTIVIDADES REGULARES Lunes 10 a 12 hs. Ropero comunitario, servicio a la comunidad y orientación a las personas que se acercan hacia las instituciones de la red barrial. Entrada por Zapiola 721. Lunes 16 17 hs. Yoga para todas las edades. Actividad gratuitapara la comunidad de Colegiales. Entrada por Zapiola 721.
Miércoles 19 hs. Estudio Bíblico: Un espacio para compartir, reflexionar y orar. Si quieres unirte a un grupo que desea descubrir cómo la Palabra de Dios Habla a nuestra realidad cotidiana, estás cordialmente invitado, estamos leyendo el Evangelio de San Juan.
4to Viernes 19.30 hs. Cine-café: Un lugar para el encuentro, la recreación y la reflexión. Nos reunimos para ver una película, abrir el debate y compartir un café.
Sábados s 16 a 18 hs. Juegoteca: juegos y talleres para niños desde 4 años. Entrada por Zapiola 721.
Domingos 10.30 hs. Culto de adoración - Escuela bíblica para niños
Cumpleaños mes de junio 4 – Mariano Turk
UN ESPACIO PARA EL DIÁLOGO Si deseas conversar con nuestro pastor durante la semana buscando asesoramiento pastoral, ayuda espiritual o para hablar sobre algún tema del cual tengas inquietudes, sea en tu casa o en la oficina de la iglesia, comunicate con él a través de su correo electrónico o proponele un encuentro cuando lo veas personalmente. Si alguna de las personas con las que estás vinculado/a quiere o necesita hacer lo mismo, está a disposición. Hugo Santos - hnsantos@ciudad.com.ar
Humor cristiano Un día en un pueblo apareció muerto un burro frente a la iglesia, y pasaban los días y nadie lo recogía, y el pastor manda a la secretaria de la iglesia a llamar al alcalde y le dice:
-Señor alcalde, usted como alcalde por qué no manda que recojan ese burro. El alcalde que no estaba ese día de muy buen humor le responde: -Y usted como buena cristiana dele una cristiana sepultura. Y la secretaria responde: -Sí, pero como buena
cristiana es también mi deber avisar a sus familiares.
Edición y recopilación: M. Cristina P. de Maceratesi: mcristinaparodi@yahoo.com.ar Pastor Hugo Santos: hnsantos@ciudad.com.ar – móvil: 11 (15) 5935 0556 Blog: http:/ibuenpastor.wordpress.com/