NAVIDAD…LA HUELLA DE DIOS EN EL PESEBRE La historia del pueblo de Dios, como nuestra historia está marcada por huellas. Por las pisadas de otros, por las marcas y señales de otras, por los caminos abiertos, por los puentes construidos, aún en aquellos espacios que parecen imposibles de transitar !!!
Es difícil perderse en el mundo actual, las luces de la ciudad impiden ver las estrellas. Aun así, cada Navidad, nos vuelve a recordar que el Señor de la creación nos sigue guiando, señalando el Camino, poniendo a nuestro alrededor, personas que nos acompañan, que nos invitan a seguir, a compartir, porque nunca nuestra historia se escribe en individual. Una de las formas más comunes de la antigüedad para mostrar el camino, era indicándolo con piedras apiladas, desde las grandes pirámides a monolitos más rústicos, que se conservan a través del tiempo y de la historia. Cuando Dios eligió dejar su marca no lo hizo sobre piedra, lo hizo sobre la paja peremne de un humilde pesebre, y en el corazón de una mujer y de un hombre dispuesto a a dejarse abrazar por lo inexplicable. Dios nos continúa desafiando hoy, no a no dejar nuestra huella en este mundo, sino a ser su huella… una huella de paz, de bondad, de verdad, de compromiso y empatía, de solidaridad, de amor. De intentar ser una estrella titilando en medio de tantas luces que nos encandilan…una señal que no remita a nuestra propia vida, sino que señale hacia el único que nos puede dar eso que estamos necesitando. EL Emanuel, el Dios hecho niño… FELIZ NAVIDAD !!!
Pastora Mariel Pons