Letra núm. 693, 25 de octubre de 2020

Page 1

LOS ESCRITOS REFORMISTAS DE LUTERO A 500 AÑOS DE SU PUBLICACIÓN EL PERIODO DE JULIO DE 1519 A JULIO DE 1521 MARCA EL pináculo de la vida de Lutero en cuanto a sus escritos y obra reformadora. Después de su regreso de Leipzig a Wittenberg, Lutero se vio forzado a sostener una polémica por escrito con varios representantes de la teología romana. Sus convicciones iban afinándose conforme pasaba el tiempo, pero las excesivas tensiones y ansiedades poco a poco afectaban su salud. Para empeorar las cosas, el Papa demoraba la convocatoria de un concilio tal y como lo esperaba Lutero. […] …es sorprendente saber sobre su abundante producción literaria en los meses siguientes al debate de Leipzig. Estaba convencido de que una reforma de la iglesia era indispensable y no podía esperar más tiempo. Había llegado el momento para poner manos a la obra reformadora. […] En 1520, Lutero también escribió tres tratados en los cuales prácticamente delineó un programa de reforma. ALBERTO L. GARCÍA y RUBÉN D. DOMÍNGUEZ, Introducción a la

vida y teología de Martín Lutero.

Nashville, AETH-Abingdon Press, 2008, pp. 103, 105.

1 . A la n o b leza cr ist ian a de l a na ció n a lem an a

a c e r c a d e l m e j o r a m i e n t o d e l e s t a d o cr i s t i a n o

C

( a g o s t o ) ( F r a gm e n t o )

GRAN HABILIDAD LOS "ROMANISTAS" SE circundaron de tres murallas, con las cuales se protegían hasta ahora, de modo que nadie ha podido reformarlos y con ello toda la cristiandad ha caído terriblemente. Primero: cuando uno quería obligarlos por el poder secular, establecían y manifestaban que el poder secular no tenía ningún derecho sobre ellos, sino, por el contrario, el poder eclesiástico estaba por encima del secular. Segundo: si uno quería censurarlos mediante las Sagradas Escrituras, le objetaban que interpretar las Escrituras no le correspondía a nadie sino al Papa. Tercero: cuando uno los amenazaba con un concilio, inventaban que nadie puede convocar un concilio sino el Papa. De esta manera, nos hurtaron subrepticiamente los tres azotes para quedarse sin castigo, y se hicieron fuertes detrás de la protección de estas tres murallas para practicar toda ON

clase de villanías y maldades, como lo vemos ahora. Y cuando se vieron forzados a celebrar un concilio, le restaron eficacia con anticipación, obligando previamente a los príncipes mediante juramentos a dejarlos tales como son. Además, dieron al Papa pleno poder respecto al ordenamiento del concilio con supercherías y ficciones. Tan terriblemente temen por su pellejo ante un concilio correcto libre, que intimaron a los reyes y príncipes para que creyesen que estarían contra Dios, si no les obedeciesen en todas esas fantasmagorías pérfidas y astutas. Que Dios nos ayude ahora y nos dé una de las trompetas con las cuales se destruyeron las murallas de Jericó, a fin de que derribemos también de un soplo esas murallas de paja y papel, y tomemos los azotes cristianos para castigar el pecado y revelar la astucia y el embuste del diablo. Así, mediante el castigo, nos corregiremos y recuperaremos el favor de Dios. […] Muchas veces ofrecí mis escritos para su juicio y examen. Pero no me valió para nada. También sé perfectamente que mi causa, si es justa, ha de ser condenada en la tierra y sólo justificada por Cristo en el cielo. Toda la Escritura enseña que la causa de los cristianos y de la cristiandad debe ser juzgada sólo por Dios. Jamás fue justificada alguna causa por los hombres en la tierra, sino siempre hubo en exceso una resistencia grande y fuerte. Siempre han sido mi preocupación mayor y mi temor que mi causa quede sin condenación, puesto que en esto notaría por cierto que aún no agrada a Dios. Por ello que procedan con desenvoltura el Papa, los obispos, los curas, los monjes o los doctos. Son las personas indicadas para perseguir la verdad, como siempre lo hicieron. ¡Que Dios nos dé a todos un entendimiento cristiano y, especialmente a la nobleza cristiana de la nación alemana, un modo de pensar recto y espiritual para hacer lo mejor en beneficio de la pobre Iglesia! Amén.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.