LA INVENCIÓN DEL CULTO REFORMADO (I) C h r i s t o p h e C h a l a m e t y F r a nç o i s D e r m a n ge
L
a Reforma no sólo quiso renovar la teología y la
presente a Dios en
estructura de la Iglesia, sino la forma de adorar a
este
mundo
y
de
Dios, con la convicción de que no se le honraba
apaciguarlo.
como él quería y como debía. En esta área, como en
sacrificio de la Misa
muchas otras, se basó en tradiciones anteriores. La
no fue sólo acción de
aportación de Ueli Zahnd y Michel Grandjean arroja
gracias,
luz sobre sus raíces medievales, a las que hay que
oscureció el de Cristo,
añadir las de la devotio moderna o de los valdenses.
ofrecido de una vez por todas, quien dio pleno
También se basa en las exigencias contemporáneas
testimonio del amor y el perdón de Dios, sin
planteadas
renacentista,
necesidad de añadirle nada, complemento, por
esforzándose por redescubrir la forma de celebración
iniciativa humana. Si los reformadores, por tanto, no
de
los
cuestionan la interpretación sacrificial de la salvación,
reformadores son unánimes al pasar la celebración a
la de Cristo es única y completamente suficiente para
escudriñar el texto bíblico, tanto en sustancia como
la salvación. […]
1
la
por
Iglesia
el
humanismo
antigua.
Pero
sobre
todo
en forma.
El
sino
que
La centralidad reconocida de la gracia y de la
Básicamente, todos siguen la estela de la protesta
justificación por la fe cuestionó la pretensión de
de Lutero. Ya en 1520, de hecho, en su Preludio a El
hacer una contribución humana a la salvación a
cautiverio babilónico de la Iglesia, denuncia un "triple
través del rito. Tal como fue concebida, la Misa
cautiverio" de la Misa, que la separa del mensaje
encubría la promesa: la de ser aceptados por Dios, tal
evangélico. […]
como somos, sin precondiciones ni condiciones,
2
Al igual que con las indulgencias, la revuelta de
invocando al lado humano solo fe: creer que Dios
Lutero apuntó principalmente aquí a los abusos, pero
decía la verdad en su promesa. Éste fue el principal
más allá de estos abusos, era cierto que en la
“cautiverio” de la Misa. […]
teología católica el sacrificio incruento celebrado en
La misma forma de concebir el culto se
el altar, si actualizaba el de Cristo, adquiría su propio
transformó. Ya no se trataba de esperar ganar el
valor para el perdón de los pecados. La repetición de
favor divino, sino simplemente responder al don
los gestos de los sacerdotes tenía el poder de hacer
recibido teniendo fe y la Palabra y obedeciéndola. Como
Cf. Elsie Anne McKee, “Reformed Worship in the Sixteenth Century”, en Lukas Vischer, ed., Christian Worship in Reformed Churches Past and Present, Grand Rapids, Eerdmans, 2003, pp. 3-31. 2 Martín Lutero, “Preludio sobre La cautividad babilónica de la Iglesia”, en OEuvres I, Marc Lienhard y Matthieu Arnold, dirs., París, Gallimard (Bibliothèque de la Pléiade), 1999, pp. 711-824. 1
la
gracia
debía
ser
conocida
por su
proclamación, era deber de la Iglesia proclamarla, aunque sólo Dios por su Espíritu podía sellar su certeza
en
los
corazones.
Ésta
fue
la
tarea
encomendada a los ministros, simples expositores de la Escritura y no sacerdotes con un poder especial de mediación hacia Dios. Aunque los primeros tiempos