Mes de octubre de 2017
500 AÑOS DE LA REFORMA Es posible que, en este último año en el que conmemoramos 500 años de la reforma protestante, hayamos pasado nuestra vista por numerosos artículos, notas, semblanzas, o asistido a conferencias, paneles o charlas donde se han recordado a sus principales personajes, sus hechos, sus principios fundamentales, los cambios que representó no solo para la iglesia cristiana, sino para la sociedad del medioevo, y la historia moderna. Y todos ellos han alimentado nuestra memoria, o nuestro conocimiento. El Dr. Martín Lutero, monje y profesor, es protagonista del hecho más significativo que dio inicio al movimiento de la Reforma protestante, que concluyó con la hegemonía religiosa y política de la Iglesia de Roma. Ese hecho fue la exposición pública de las 95 tesis, que presentaban el “Cuestionamiento al poder y eficacia de las indulgencias”, en las puertas de la Iglesia del Palacio de Wittemberg, en Alemania, un 31 de octubre de 1517. El contexto de este escrito, pensado para ser base de un debate teológico, fue el hecho de que Johann Tetzel, un sacerdote de la Orden de los Hermanos Predicadores, comisionado por el arzobispo de Maguncia y por el papa León X, vendiera indulgencias para limpiar los pecados de aquellos que los hubieran cometido. El fin era el de recaudar fondos como para poder renovar la Basílica de San Pedro en Roma, y otorgaba un documento que les concedía el perdón por todos los pecados y por futuras malas obras que pudieran realizar, durante por ejemplo 100 días. A lo largo de toda su vida pública Martín Lutero generó polémicas entre sus contemporáneos. Unos lo consideraron héroe de la fe evangélica por redescubrir que la relación entre Dios y el ser humano se caracteriza por la gracia, es decir, por ser gratuita. Otros lo vieron como destructor de la unidad de la iglesia cristiana occidental, por llevar al extremo la crítica de cuestiones religiosas formales y externas, cuestionándolo como un verdadero intolerante. Lo cierto es que Martín Lutero modifica de forma sustancial la comprensión religiosa de su tiempo en cuanto a cómo y de qué manera se relaciona Dios con el hombre y la mujer pecadores. Y su propuesta de cambio tiene tal impacto en la dimensión política y eclesial de su tiempo que genera una ruptura con la iglesia medieval romana, y multiplica su efecto a otros sectores de la sociedad. Es por eso que, aun siendo un movimiento religioso, el pensamiento elaborado por Lutero, y por otros tantos reformadores, produjo cambios en casi todos los aspectos de la vida social, política y económica, producto de una fuerte crítica a las prácticas en todos estos ámbitos, sustentada en la lectura y comprensión de la Biblia. Varios pilares que solemos repetir, y tal vez debiéramos hacerlos más carne en su significado, han sostenido estos 500 años: sola fe, sola gracia, sola escritura, solo Cristo… y otros menos recordados: la libertad cristiana, el sacerdocio universal, la “iglesia reformada siempre reformándose”, y ese “a Dios, y sólo a Dios, sea toda la gloria”. Pero nada mejor que un texto de esa época para captar el significado del cambio de la reforma… un himno donde Lutero presenta un testimonio propio, pero que cantado se transforma en una experiencia de fe que se socializa. Por su extensión comparto apenas un par de estrofas: 1-Alégrense pues queridos cristianos todos 3-Cuanto yo hice y enseñé Y saltemos contentos Debes hacer y enseñar ti Que confiados y todos a la vez Para que el Reino de Dios Con gusto y amor cantamos sea aumentado. Lo que Dios cambió en nosotros En alabanza y honra a él Realizando sus dulces milagros Y cuídate de la ley humana Pues caro lo ha adquirido. Pues arruina el noble tesoro Es lo último que te encomiendo. 2-Él me dijo “Agárrate de mí, Ahora vas a lograrlo Yo mismo me entrego todo por ti Voy a luchar en tu lugar Porque yo soy tuyo y tú eres mío Donde yo esté, allí estarás tú El enemigo no habrá de separarnos. Romina Roger
“DE LUTERO A LA PLAZA DE MAYO, 500 AÑOS DESPUÉS” El viernes 15 de septiembre de 2017, participamos conjuntamente con Celia, Winie Peiro, Romina Roger y Ester Becker en la Catedral de Buenos Aires de un acto de Oración Común a 500 años de la Reforma Protestante, organizado por el Arzobispado de Buenos Aires por parte de la Conferencia Episcopal Argentina y la Comunión de Iglesias de la Reforma compuesta por las Iglesias Evangélicas del Rio de la Plata, Reformada Argentina, Valdense del Rio de la Plata, Metodista Argentina y Luterana Unida. Hubo un sermón conjunto entre el Cardenal Mario Poli y la Pastora Mercedes García Bachman de la Iglesia Evangélicas Luterana Unida. Mientras el coro cantaba suavemente en canon “El Señor es mi fortaleza” canto del Monasterio Protestante de Taize, hermosa canción. Luego el Padre Nuestro de acuerdo a la forma de cada tradición y luego en arameo. Después, en una oración de despedida, dimos gracias a Dios por lo que puede hacer en nosotros y lo que Dios puede hacer fuera de nosotros, por todas las personas en quienes Cristo vivió antes que nosotros y nosotras, por todo lo que el Espíritu nos quiere ofrecer, por donde el Espíritu nos quiere enviar. En el altar estaban el Cardenal Poli , nuestro nuevo Obispo Américo Jara Reyes, el Obispo Emérito Frank De Nully Brown, el Pastor Carlos Duarte Presidente de la Iglesia Evangélica del Rio de la Plata y el Pastor Lisandro Orlov de la Iglesia Luterana Unida. Fue una jornada muy fuerte en emociones, recuerdos y espíritu elevado. ¡¡¡Un hermoso acto de oración y liturgia en común!!! ¡Demos gracias a Dios! Hugo García - Hugo es miembro de nuestra congregación EBP, ha trabajado muchísimo en Derechos Humanos. En un próximo boletín se incluirá todo su trabajo ecuménico, que hizo con total dedicación.
CELEBRACIÓN DE LA REFORMA EN EL TEATRO COLON
El 5 de septiembre hubo un Concierto conmemorando los 500 años de la Reforma protestante. Citando al papa Francisco, el presidente de la Nación, Ing. Mauricio Macri, destacó el "aporte muy importante" que hizo Martín Lutero "para llevar la palabra de Dios a millones de habitantes de este planeta". "Y ustedes lo están haciendo acá, en nuestro querido país, desde hace ya más de 200 años, batallando por los valores en los que creemos, que son la ética, la cultura del trabajo, la solidaridad, cosas que tienen que ver con este momento de cambio que estamos planteando en nuestro país", dijo. "Y sobre todo el valor de comunicarnos y construir desde la verdad –siguió diciendo-, que es lo que genera confianza y lo que empieza a mover este maravilloso país que tiene tantas deudas pendientes y gente que está esperando por una oportunidad". Y agregó: "Estamos convencidos de que trabajando juntos, con solidaridad y respetando al otro, vamos a transformar todos esos sueños en realidad".
"Sonreír" Una sonrisa no cuesta nada y da mucho. Enriquece a los que la reciben, sin empobrecer a los que la ofrecen, Solo dura un instante, pero su recuerdo, a veces, es eterno. Nadie es tan rico que puede prescindir de ella, ni tan pobre que no pueda ofrecerla. Es el signo sensible de la amistad. Una sonrisa procura reposo al ser fatigado y mima al más desanimado. Y si alguna vez encuentra una persona que no le ofrece la sonrisa que usted merece, sea generoso, ofrézcale la suya. Porque nadie necesita tanto una sonrisa como aquél que no es capaz de ofrecérsela a los demás. Poema que la médica gerontóloga del Hogar de ancianos les leyó al grupo y Cuca Martínez le pidió una copia porque consideró que era un mensaje muy lindo para compartir con nuestra congregación
Vivenciando el “Godly Play” Fue una rica experiencia participar del taller propuesto por el Centro Metodista de Estudios Wesleyanos (CMEW) sobre la educación cristiana en todas las edades, del que se comentó en nuestro boletín del mes de julio. Fue cierto que lo vivenciado, nos permitió como habitar un “espacio sagrado” para escuchar atentamente, reflexionar, explorar la fe y construir con las manos, lo que esos relatos nos significaban. El propósito planteado, al pretender concientizarnos sobre la “misteriosa presencia de Dios en nuestras vidas”, fue altamente alcanzado por los presentes en esta experiencia. Comenzó con la participación de la “portera” quien dio una bienvenida personal; a cada uno de los miembros que ingresaban al salón, los saludaba con calidez y les preguntaba acerca de sus expectativas. Entre todos formamos un grupo que se acomodó en forma de círculo rodeando a la “relatora” quien con un lenguaje claro y sereno narró la historia bíblica (“sagrada”, en el lenguaje de otras comunidades) acompañándola con una sencilla pero significativa visualización . El relato no se “explicaba”, no se “aplicaba”, no “dirigió” el pensamiento, sino que fue un medio por el cual se brindó un tiempo y un lugar para la “reflexión y el sentir” de cada uno de los que participábamos. En cada una de las escenas de la historia que seleccionó la relatora, se hizo una pausa, luego de la cual intervino con la misma expresión: “me pregunto”... al tiempo que planteaba un interrogante: ¿”qué pensas de”...? ... ¿”qué parte de la historia es la más importante para vos”?... ¿”qué tiene que ver con vos”?... y otros, frente a los cuales los participantes reflexionábamos y también, quien o quienes querían, expresaban su pensamiento o su sentir. La narradora creó un clima de libertad y confianza que hizo posible la espontaneidad para expresar o no, las respuestas; no las juzgaba sino que respetó cada una de ellas sin calificar. Luego se dio lugar a la “expresión creativa”; mediante la presentación de distintos materiales como: arcilla, papeles, lápices de colores, telas, etc. cada uno de nosotros construyó un objeto que parecía “cobrar vida” y en él “respondíamos a la historia”, representábamos lo sentido y lo pensado en ese espacio. Este enfoque de la evangelización (distinto al con los que alguna vez usamos chicos) es una nueva invitación para pensar, creer y sentir “la misteriosa presencia de Dios en nuestras vidas”. Finalmente hubo un tiempo para vivir “la fiesta y la comunión”, compartiendo alimentos y las inquietudes en el grupo. Como cierre recibimos una bendición y nos despedimos llevándonos como recuerdo, el objeto que construimos, el resultado de lo aprendido. Liliana Contino – septiembre del 2017
El 3 y 4 de éste mes tuvimos nuestra Feria Americana ¡¡Damos gracias al Señor porque tuvimos la visita de muchos vecinos del barrio!!
LECTURAS BÍBLICAS: Domingos de octubre
Domingo 1 Éxodo 17: 1-7 Salmo 78: 1-4; 12-16 Filipenses 2: 1-13 Mateo 21: 23-32
Domingo 8 Éxodo 20: 1-20 Salmo 19 Filipenses 3: 4b-14 Mateo 21: 33-46
Domingo 15 Éxodo 32: 1-14 Salmo 106: 1-6, 19-23 Filipenses 4: 1-9 Mateo 22: 1-14
Domingo 22 Éxodo 33: 12-33 Salmo 99 1° Tesalonicenses 1: 1-10 Mateo 22: 15-22
Domingo 29 Deuteronomio 34: 1-12 Salmo 90: 1-6, 13-17 1° Tesalonicenses 2: 1-8 Mateo 22: 34-46
Eras de los primeros en llegar De la mano de Elina, claro. Sabías que llegar tarde al culto o “a las apuradas" le hace perder a uno algo de la mañana del domingo. Pero con vos no eran cinco minutos antes del culto que arribabas, era media hora, por lo menos. En ese tiempo te vi muchas veces repasando la Palabra y te miré de lejos porque sabía lo que eso significaba para vos. Pero también te veía conversando con algún hermano o hermana, mostrando interés por los que, en la iglesia, el Señor había puesto al lado tuyo. Era un gozo para mí después del “¿Cómo te va? “ y su respuesta, tomarnos el pelo mutuamente (yo no tenía mucho de dónde agarrar) en la confianza que el cariño fraternal nos daba permiso para reírnos del otro y con el otro. Durante la semana, los versículos del día que vos enviabas nos ayudaban a empezar bien la jornada y a modo de hermanos exigentes nos preguntábamos qué te pasaba si a las ocho de la mañana no había hecho un sonidito el celular o no encontrábamos el texto en la computadora. Y hablando de textos bíblicos, no sabías solo de memoria el Salmo 23, creo que habías leído muchas veces Mateo 6: 2-3: “Cuando, pues , des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles para ser alabados por los hombres…no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha”. Y no te lo digo porque sea adivino sino que te vi poner en práctica muchas veces este principio que nos enseñó Jesús y que no solo se aplica a la limosna. Te conformaba saber lo que “tu Padre ve en secreto”. Lo ponías en práctica cuando venías entre semana a abrir el templo o cuando nos ilustrabas con tus escritos sobre Juan Wesley y la historia de los Discípulos de Cristo o la Iglesia Metodista. Seguro que hacías esto para que hagamos carne que nuestra iglesia no nació de un repollo sino de la pasión y el entusiasmo que provocó el seguimiento de Jesús en muchos de los hermanos que nos antecedieron. Héctor, con tu partida nos has precedido, pero tu ejemplo se quedó muy hondo en el “mientras tanto” nuestro. Vos estás allí, con el Señor, en la tierra donde no hay diabetes ni corazones debilitados, con un “cuerpo espiritual” al decir del Apóstol Pablo, “cara a cara” como muchas 5 veces cantaste cuando esperabas verle, gozando de esa presencia suprema sobre la que tantas veces enseñaste y predicaste. Pastor Hugo N. Santos
RECUERDOS SOBRE HÉCTOR DIOMEDE Héctor fue para mí, una de las personas que conocí en nuestra comunidad, más comprometidas con el servicio al Señor y a los hermanos. Los mensajes que compartía en los cultos, además de ayudarnos en nuestro crecimiento espiritual, demostraban un profundo conocimiento de las Escrituras al que asociaba con otros textos que enriquecían la comprensión y el valor de ellas. Estuvo a cargo de estudios bíblicos, a los que conducía con la misma profundidad demostrada en los mensajes, lo cual daba cuenta de su avidez como lector. En ellos se permitía el debate, la reflexión, las dudas e inquietudes y se apreciaba lo firme en sus convicciones. Cada mañana, muy temprano, nos enviaba por correo un texto bíblico apropiado para cada día y de tanto en tanto, un viejo sermón que nos permitía conocer, a quienes no pertenecíamos a esta tradición, los fundamentos wesleyanos. ¡Doy gracias al Señor por su vida y su ministerio entre nosotros!
Liliana Contino
MI LLEGADA AL CIELO – 6 DE SEPTIEMBRE ¡No pensaba llegar tan pronto, pero aquí estoy! Gracias a Dios el Salmo 23 me ayudó, siempre estuvo el mi cabeza y en mi corazón, pero así, tan inesperado dejar todo, fue muy difícil. A mis seres queridos, a mis adorables nietos y a mis amigos con quienes disfruté tantos años. Los de mi niñez, juventud y a mis hermanos de la congregación con los que compartí la FE. Todo fue muy rápido, no hubo tiempo de despedida. Pero fue mejor así, los dejé en la plenitud de mi vida, íntegro, no me vieron sufrir con el deterioro de una cruel enfermedad. ¡Y llegué aquí!, quedé atónito mirando, qué hermoso, qué blancura, todo luminoso! Me estaban esperando seres celestiales, me abrazaron para acompañarme. ¡Era muy grande la alegría del reencuentro! Estaban familiares muy queridos y amigos que habían llegado antes. Todo me parecía muy raro, pero empezaba a disfrutar, todo era diferente. ¡Sentía paz y sin darme cuenta, Él estaba a mi lado, me rodeó con sus tiernos brazos! Volvió a mi mente el Salmo 23: “reconfortará mi alma y nada me faltará, no tengas miedo, estarás conmigo, te infundiré aliento y aquí morarás por largos días” ¡¡¡ERA CIERTO!!! Quiero decirles algo: ¡¡¡ Los sigo amando, estoy siempre en el corazón de cada uno, y ahora me despido hasta que volvamos a encontrarnos, Amén !!! Piti Maceratesi
TEXTO DEL HERMANO JUAN CARLOS MONZÓN ESCRITO PARA EL BOLETÍN DE LA IGLESIA METODISTA DE LA BOCA. FALLECIMIENTO Fue realmente un fuerte impacto el haber recibido, minutos antes de la entrada en prensa de esta edición, la noticia del llamado ante la presencia del Señor de nuestro amigo y hermano en la fe Héctor Diomede, acontecida el 6 de septiembre último. Recordamos que su niñez y juventud se desarrolló en esta Iglesia de La Boca formando parte de las Ligas de Intermedios y de Jóvenes en las que cumplió diferentes tareas con la capacidad y responsabilidad que siempre demostró. Años después contrajo enlace con Elina Pesce (que también formaba parte de nuestra Congregación) y fruto del matrimonio nacieron Mario y Laura. Posteriormente y por razones de radicación, formaron parte de la Iglesia Metodista de Belgrano y tiempo después en la Congregación Unida El Buen Pastor, en el barrio de Colegiales, lugar en que él y su esposa se congregaban actualmente. Héctor siempre fue un “testimonio de vida cristiana”. Pedimos al Señor que otorgue a Elina, a sus hijos Mario y Laura, a sus familiares, a sus hermanos en la Fe y a sus amigos, el consuelo que solamente Él puede conceder.
“Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación” “Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios” (Mateo 5)
UN SALUDO DE GRATITUD POR LA VIDA DE HÉCTOR, “EL OSO TIERNO” Compartimos las asambleas de la cooperativa Manantial en los comienzos de los años 70 y la lucha por conseguir nuestra casa. Las charlas en el 8vo “A” mientras los chicos corrían por el comedor. La visita a nuestra casa en Mendoza siempre acompañada por una buena colección de vinos de diferentes colores. El mundial de 1978 y el regreso a la democracia donde participamos en los pasos y la alegría de la efervescencia política en un local partidario del barrio. Las asambleas de la iglesia, los estudios bíblicos y los retiros y las reuniones fraternales. Luego la familia compartida y los nietos hermosos que tenemos. El bautismo de los nietos. Los actos del jardín de infantes y los de la primaria. Celebramos con los chicos las fiestas patrias y los comienzos y fines de curso, las juras o promesas a la bandera. Lo vi cambiar de opinión cuando decidimos en la congregación tomar la Santa Cena todos los domingos. Se resistió y ahora la celebra con gran devoción muchos domingos al mes. Hace poco en la última predicación que lo escuche tuvo un párrafo dedicado a los que “sirvieron en la causa de los derechos humanos por fe y por servicio y no por causas políticas solamente”; gracias Héctor por esas palabras. Me llegaron sus libros, cuentos, novelas y los técnicos. Algunos los entendí y a otros no, tenía una pluma fina y un saber alto que habría que seguir leyendo para poder trabajarlos y seguir aprendiendo de su búsqueda. Su formación técnica y científica en las ciencias sociales era muy profunda. Se destacó en la academia, ámbito difícil, competitivo y lleno de egos y lucha intelectual y también en esa rigurosidad del diseño de la reglamentación de la Iglesia Metodista Argentina desde su creación en 1969. Me llamó la atención cuando empezó con el templo abierto y cumplió rigurosamente con ese importante y difícil ministerio. Es un ejercicio de acercar el conocimiento a los más sencillos que venían a buscar un poco de consuelo orientación y escucha. Comí platos que además de exquisitos, estaban presentados con rigurosidad estética planificada, ya que cuando preparaba la comida, también diseñaba la forma de presentación en el plato. Sus pizzas eran famosas. Descubrí tardíamente que su pasión por Boca y La Boca, el futbol lo vivió con intensidad. Compartimos infinidad de reuniones y fiestas familiares donde ponía sus dotes sociales en funcionamiento. Era difícil llegar a su intimidad. Su tamaño grande, su robustez como de oso, sus conocimientos lo hacían sobresalir; pero poder vencer esa distancia, como de timidez que ponía, era muy difícil. Detrás de ese aparente muro, había un océano de ternura y calidez enorme, un cariño tierno y saltarín. De niño de barrio, de muchacho de las orillas con sabor a niebla del Riachuelo. De artista de la palabra. Lo vi contento y emocionado por el bautismo de Lucas y cercano a su capacitación y formación. Lo vi en las asambleas de la IEMA debatir con precisión y sacar a relucir sus dotes de esgrimista parlamentario. Creo que disfrutó su jubilación haciendo lo que quería, investigar, escribir, publicar en papel y digitalmente. Y creo que lo logró. Recuerdo nuestra charla sobre la publicación diaria del versículo bíblico que mandaba por correo electrónico y como, al usar solo la versión de la biblia de Reina Valera tradicional, y al no tener ningún comentario, el lenguaje era críptico y rebuscado y casi solo para entendidos y vi con alegría que comenzó a colocar otros textos y otras traducciones. Desde la traducción del griego o desde el hebreo siempre hacemos hermenéutica al traducir. Sus aportes sobre los sermones de Wesley han sido un servicio al desarrollo del Metodismo. Todos tenemos en nuestros archivos ese material que seguramente mucho trabajo le dio. Junto a su figura imponente siempre está Elina operando en lo práctico. Como su soporte afectivo y hondamente humano que la caracteriza. Sus hijos Laura y Mario con sus familias, Paula y Gustavo, su nieto Lucas y Milagros y Marcos los nietos compartidos, que pronto serán jóvenes y podrán tener presente la figura de su abuelo. Nos faltaron cafecitos, tecitos, matecitos o vinitos compartidos juntos. Nos faltaron charlas tranquilas y cercanas para reconocernos mejor. No importa, en el reencuentro lo haremos. Queda ahora un silencio hondo, profundo y respetuoso. Queda ahora estar cerca de su familia en cariño y esperanza. ¡Adiós hermano mayor. Gracias por tu servicio y por todo lo que nos diste! Que el viento sople a tus espaldas La lluvia moje tu recuerdo Y hasta que volvamos a encontrarnos Dios te tenga y nos tenga En la palma de sus manos Como dice esa bendición irlandesa que muchas veces hemos compartida Hugo García - Una madrugada de septiembre de 2017
FOTOS DE NUESTRO HERMANO HÉCTOR DIOMEDE
HÉCTOR DIOMEDE No tuve la oportunidad de conocerlo tanto, hasta que dos años atrás, lo designaron integrante del equipo pastoral, en reemplazo de Hugo Santos, el pastor saliente. Igual, disfrutaba sus prédicas dominicales. Héctor era un hombre muy instruido. Autor de varios libros, sabía mucho acerca de la Biblia y cómo transmitir ese conocimiento. A partir de su nombramiento, el contacto fue mayor, aunque por falta de tiempo, no todo lo que yo hubiera querido. Recuerdo una charla que mantuvimos cierto día, a raíz de una inquietud personal. Lo llamé por teléfono para concertar la cita y no dudó en acudir a mi consulta. Del encuentro me quedó grabada una frase: «Yo también soy un nostálgico... Me gusta el tango...» Desde luego, una de las primeras cosas que hacía cada mañana, era mirar mi correo electrónico, pues él seleccionaba diariamente versículos bíblicos que muy temprano, enviaba por cadena a toda la lista de la congregación. Asimismo se colocó al frente de los Estudios Bíblicos matutinos, un encuentro que una vez a la semana, ofrecía en Lacroze y Zapiola. Lamentablemente, su salud le impidió continuar con ellos, y también por las mismas razones, se vio obligado a dejar el equipo pastoral al poco tiempo de haber asumido. «Ando con un problema diabético», me dijo cuándo me atreví a preguntarle sobre el tema. No obstante, seguía concurriendo al culto junto a su esposa. El optimismo y buen humor lo caracterizaban, predicaba con frecuencia y se lo veía bien. Por eso la noticia, obviamente, me sorprendió. Como a todos. Ahora, como siempre, el desafío será el de recordarlo con alegría, sabiendo en qué lugar está. Para comenzar a hacerlo, me tomo la licencia de elegir las mismas líneas que Ester Becker colocó en el final de aquel correo electrónico: «La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del Señor habitaré para siempre». Salmo 23: 6 Pablo Wildau CUMPLEAÑOS DE OCTUBRE 1º - Josefina Ossvald 7 - Sofía Lepera 9 - Norma Falchetti - Romina Roger 11 - Silvina Maceratesi 12 - Blanca “Cuca” Martínez 15 - Sarina Vázquez - Patricia Flores Zapata 29 - Abel Duarte 31 - Esperanza Bernal Vázquez ACTIVIDADES DE OCTUBRE
4to viernes del mes a las 19.00 hs. Cine-café: Un lugar para el encuentro, la recreación y la reflexión.
Todos los sábados de 15.00 a 17.00 hs. Juegoteca: Juegos y talleres para niños desde 4 años- Entrada por Zapiola 721.
Domingos 10.30 hs. Culto de adoración –Santa Cena
Equipo pastoral: Romina Roger (romina.roger@gmail.com) Inés Sarli (inessarli@yahoo.com.ar) Amalia Sanahuja (asanahuja@hotmail.com) Teléfono: 4551-4204 www.iglesiaencolegiales.com.ar
Edición y recopilación: M. Cristina P. de Maceratesi: mcristinaparodi@yahoo.com.ar Romina Roger, Ines Sarli, Amalia Sanahuja y Ester Becker