2 minute read

Visión Global

VISION GLOBAL

INVESTIGADORES DE STANFORD IDENTIFICAN CUATRO CAUSAS DE LA “FATIGA DE ZOOM” Y SUS SOLUCIONES SIMPLES

Advertisement

n un texto publicado en el sitio web de la Universidad de Stanford, firmado por Vignesh Ramachandran, se alerta acerca de algunas consecuencias físicas y mentales de la prolongada utilización de plataformas como Zoom para comunicarse a distancia. El profesor de comunicación Jeremy Bailenson, director fundador del Laboratorio Virtual de Interacción Humana de Stanford (VHIL), examinó las consecuencias psicológicas de pasar horas al día en esas plataformas de comunicación. Esto le permitió identificar cuatro consecuencias de los chats de video prolongados que contribuyen a la “fatiga del zoom”: 1) Una cantidad excesiva de contacto visual de cerca puede resultar muy intensa.

Tanto la cantidad de contacto visual que mantenemos en los chats de video como el tamaño de los rostros en las pantallas están fuera de lo natural, nuestro cerebro lo interpreta como una situación intensa que va a conducir al apareamiento o al conflicto.

Solución: Bailenson recomienda evitar la opción de pantalla completa y reducir el tamaño de la ventana en relación con el monitor para minimizar el tamaño de la cara, además, usar un teclado externo para aumentar el espacio entre uno mismo y la pantalla. 2) Verse a sí mismo durante los chats de video constantemente en tiempo real es fatigoso.

La mayoría de las plataformas de video muestran un cuadro de cómo te ves en la cámara durante un chat. Eso es antinatural.

“Es agotador para nosotros, es estresante. Y hay muchas investigaciones que muestran que hay consecuencias emocionales negativas por verse en un espejo”.

Solución: Los usuarios deberían usar el botón “ocultar vista propia” una vez que vean que su rostro está enmarcado correctamente en el video. 3) Los chats de video reducen drásticamente nuestra movilidad habitual.

En las videoconferencias la mayoría de las cámaras tienen un campo de visión establecido, lo que significa que una persona generalmente debe permanecer en el mismo lugar. El movimiento está limitado de formas que no son naturales.

Solución: Pensar más en la sala en la que realizan las videoconferencias, dónde está colocada la cámara y si elementos como un teclado externo pueden ayudar a crear distancia o flexibilidad. Una cámara externa alejada de la pantalla permitirá moverse más. Apagar el video periódicamente es una buena regla para darse un breve descanso no verbal. 4) La carga cognitiva es mucho mayor en los chats de video.

En la interacción habitual cara a cara, la comunicación no verbal es bastante natural y cada uno de nosotros hace e interpreta de forma natural gestos y señales no verbales de forma subconsciente. Pero en los chats de video, tenemos que trabajar más para enviar y recibir señales.

Una mirada de reojo a alguien durante una reunión en persona significa algo muy diferente que en un chat de video.

Solución: durante largas reuniones, darse un descanso de ‛solo audio’. “No simplemente apagar la cámara para tomar un descanso de estar activo de forma no verbal, sino también apartar el cuerpo de la pantalla”. “Con suerte, nuestro trabajo contribuirá a descubrir las raíces de este problema y ayudará a las personas a adaptar sus prácticas de videoconferencia para aliviar la ‘fatiga del zoom’”, agregó Géraldine Fauville, profesora asistente en la Universidad de Gotemburgo en Suecia. https://news.stanford.edu/2021/02/23/four-causes-zoomfatigue-solutions/

This article is from: