Turismo en pandemia

La industria turística de San Martín de los Andes en tiempos de pandemia

A pesar de ser un entusiasta de las estadísticas y las referencias numéricas como sistema fiable de análisis, comparación y proyección de cualquier actividad del desarrollo humano, en este caso abordo la realidad del turismo enfocado en los factores y las políticas que desde el sentido común y la práctica ayudarían a impulsar su crecimiento. La pandemia de Covid19 ha tenido un impacto directo en la economía mundial con muy distintas consecuencias y resultados en función de las medidas tomadas en cada país para controlar la enfermedad y prevenir los contagios. Desgraciadamente en la Argentina, el gobierno central optó por la alternativa autoritaria del control fáctico estableciendo una cuarentena interminable, limitando inexplicablemente las libertades individuales y cerrando la actividad económica hasta ahogar a muchos emprendimientos llevándolos a la quiebra. Otros países implementaron políticas basadas en la responsabilidad ciudadana y el respeto a la libertad y, como era de esperar, obtuvieron mejores resultados en el control de la pandemia y contribuyeron a mantener activa la economía conservando puestos de trabajo. En la provincia del Neuquén, los comerciantes, hoteleros, agentes de servicios turísticos, Pymes relacionadas a la construcción y otros agentes de la actividad privada se vieron obligados a emprender protestas ante la decisión unilateral del gobierno de reinstalar las medidas de la fase uno, a solo una semana de reabrir la actividad turística. Afortunadamente, se consiguió revertir la medida, no obstante, debería servir Por JORGE TAYLOR

Emprendedor forestal y maderero; Desarrollador de proyectos urbano/ turísticos de San Martín de los Andes. jorgetaylor@estanciachapelco.com.ar

de enseñanza a las autoridades respecto a que dicha medida causa preocupación en el mercado e incentiva la elección de otros destinos turísticos al momento de organizar las vacaciones, perjudicando nuestra economía. La difusión mediática contribuye negativamente respecto a los esfuerzos de marketing turístico de los emprendimientos privados y también del Estado, poniendo a nuestro destino en desventaja competitiva. El éxito de la industria turística depende en gran medida de la conectividad, y al ser destinos alejados de los centros emisores, dicha dependencia es mucho mayor respecto a la conectividad aérea. Durante la cuarentena, la provincia encaró -e increíblemente aún no termina- una reparación de la plataforma de estacionamiento de aeronaves del aeropuerto Chapelco, que se habilitará recién el 15 de diciembre; y a partir del 17, recibirá dos vuelos semanales, cuando anteriormente recibía uno o dos vuelos por día; mientras que en San Carlos de Bariloche ya está recibiendo tres vuelos por día de Aerolíneas Argentinas. Adicionalmente, la conectividad terrestre debería contar con rutas modernas, seguras y bien mantenidas. En lugar de incentivar la reflexión y crear las condiciones necesarias para modificar políticas perjudiciales para el desarrollo, el gobierno provincial y los municipios no entienden el daño producido a la industria turística al castigar a la inversión en segundas residencias y resorts turísticos con altísimos impuestos inmobiliarios y tasas. La inversión en este tipo de desarrollo es completamente privada y no requiere financiamiento ni subsidio estatal; y crea centros de atracción de interés nacional e internacional, que aumenta la demanda del destino y produce un fenómeno buscado por todos los competidores del mundo: la fidelidad del turista con el destino. Es esencial entender que a partir de una reducción de la carga impositiva del Estado se crearán las condiciones para aumentar exponencialmente las inversiones; como en hoteles, resorts turísticos, centros de entretenimiento y otros desarrollos exitosos, emprendidos por las mentes imaginativas y los capitales atraídos. Esto aumentaría la actividad económica, creando nuevas oportunidades de trabajo bien remuneradas y, por ende, mejoraría la calidad de vida de nuestro pueblo.