SISTEMA NACIONAL de IMPRENTAS
Mร RIDA
NATHANDREA
Gustavo E. Guillen Viloria
Colecciรณn Ramรณn Palomares
Ukumarito (voz quechua), representación indígena del oso frontino, tomada de un petroglifo hallado en la Mesa de San Isidro, en las proximidades de Santa Cruz de Mora. Mérida – Venezuela.
El Sistema Nacional de Imprentas es un proyecto impulsado por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura a través de la Fundación Editorial el perro y la rana, con el apoyo y la participación de la Red Nacional de Escritores de Venezuela, tiene como objeto fundamental brindar una herramienta esencial en la construcción de las ideas: el libro. Este sistema se ramifica por todos los estados del país, donde funciona una pequeña imprenta que le da paso a la publicación de autores, principalmente inéditos. A través de un Consejo Editorial Popular, se realiza la selección de los títulos a publicar dentro de un plan de abierta participación.
Como homenaje a uno de los maestros de la Poesía en Hispanoamérica, la Colección Ramón Palomares, en aras de fomentar este género, da espacio a la creación de autores inéditos y ya publicados, quienes en su afán por encontrar propia voz han decidido confrontar la palabra con la crítica, poetas y un público anónimo que finalmente es lector sin cortapisas de su obra. Mediante estas publicaciones intentamos dar justa difusión a una poesía merideña poco domeñada, inaprensible al lenguaje impuesto por directrices del esquema, dispuesta a preservar los sonidos de un español venezolano cada día más persistente en el tiempo invariable de la palabra.
Gustavo E. Guillén Viloria
NATHANDREA
Fundación Editorial el perro y la rana Red Nacional de Escritores de Venezuela Imprenta de Mérida. 2015 Colección Ramón Palomares
© Gustavo E. Guillén Viloria © Fundación Editorial el perro y la rana, 2015 Ministerio del Poder Popular para la Cultura Centro Simón Bolívar, Torre Norte, Piso 21, El Silencio, Caracas – Venezuela 1010 Telfs.: (0212) 377.2811 / 808.4986 RIF: G-20007541-4 sistemanacionaldeimprentas@gmail.com editorial@elperroylarana.gob.ve http://www.elperroylarana.gob.ve Ediciones Sistema Nacional de Imprentas, Mérida Calle 21, entre Av 2 y 3. Centro Cultural Tulio Febres Cordero, nivel sótano Mérida – Venezuela sistemadeimprentasmerida@gmail.com Red Nacional de Escritores de Venezuela Fundación para el Desarrollo Cultural del Estado Mérida – FUNDECEM Consejo Editorial Popular Fabiola Fonseca Hermes Vargas José Gregorio González Karelyn Buenaño Otoniel Contreras Stephen Marsh Planchart Simón Zambrano Diseño y diagramación Sistema Nacional de Imprentas Fotografía de portada © Andreht Marcel Gonzalez Guzman Depósito Legal: LFI4022015800456 ISBN: 978-980-14-3041-4
Gustavo E. Guillén Viloria
NATHANDREA
Al gran “Yo Soy” Que me permitió un propósito en la vida A mis amadas y hermosas hijas Que como frutos del amor adornan mi vida A todas las mujeres de mi vida Que influenciaron y formaron mi ser A mi amada Alba Que inspiró algunos de los versos y ha sido la compañía idónea de estos momentos de mi vida
Dos hijas, entre las flores, mis girasoles... Gustavo E. Guillen Viloria
Es casi un clímax espiritual… Entre lo terrenal y lo divino Encontrarme nuevamente en la senda de la poesía Y celebrar incansablemente con ella Estos versos divinos Ahora sé que moriré tranquilo… Rozando en tus regazos Y abrazándome a tu lado Para vivirte siempre…
Nathandrea. Cantos del Alma | 13
Pasiones Estas pasiones de soberana angustia Se vuelcan en mi carne por tu ausencia eterna amada Si te digo que te ansío, no lo sé Si te digo que te envuelvo en mí ser con cada recuerdo tuyo, es posible ¿Por qué la insensatez de tu corazón dormido en frente de mi ser? Acepto mi desdicha, frente a tu orgullo ya calcinado de tanto olvidar… Moribunda pues Moribunda pues Eternamente mi pena Y eternamente mi amada.
14 | Gustavo Viloria
Soledades ¿Qué hago en las soledades? Cuando el sol de reverso se esconde, y las tinieblas avanzan lentamente tomando posición. ¿Qué hago en las soledades? Cuando los pensamientos vienen como espíritus fantasmales y te abrazan al silencio de una tarde más sin esperanza. ¡Qué hago en las soledades? Cuando buscas sin querer entre los escombros del pasado, y solo entre ellos, se levantan espigas secas, doloridas de tanto permanecer ¿Qué hago en las soledades? Pasmoso momento, sumergido en mí como una costumbre me palmea de vez en cuando y se esconde en la multitud ¿Qué hago en las soledades?...
Nathandrea. Cantos del Alma | 15
Eso es amor Amor es creerte completita Hacerme detener en cada mirada tuya Como en un siglo‌ Y prepararme antes de un segundo Para volverte a mirar por otro siglo mas‌
16 | Gustavo Viloria
Cerquita de ti Como quisiera que este poema se sintiera bien a tú lado. Que se sentaran los dos, se abrazaran y te contara todo de mi ser. Que te arrebatara en tu descuido, algo de tu amor. Y lo precipitara sobre mí Como quisiera que este poema, se sintiera bien a tu lado Te diera a entender, el siglo que llevo con mi desdicha de no poseerte, cercana, perfecta para mí Como quisiera que este poema, se sintiera bien a tu lado Y ¡tú! Le pidieras algo parecido Pero solo de mí…
Nathandrea. Cantos del Alma | 17
Ausencia No quiero tu ausencia No quiero tu milagro Tu luz, tu presencia, eso quiero Quiero privar de todo al mundo, hasta de ti Que tu mano y tu vara no se destile para nadie Quiero la excelsitud amada Por favor presÊntate pura y plena a enamorarme No quiero solo tus regalos amada, quiero tenerte Bienaventurado soy si hallo gracia en tu presencia Si estas tu no hay ausencia Si estas tu no hay temor Si me anidaras por un instante en tu seno Amada si quisieras‌
18 | Gustavo Viloria
Alegría Hoy es día de júbilo ¡Batid las manos todos! Han llegado las infantas de mi reino Preparad banquete, solícitos todos a las infantas de mi amor. ¡Bufones! Que no pare la risa, la corte toda celebrad Ya llegaron del Zulia, ya llegaron del sol Las infantas de mis lomos Las infantas de mi amor.
Nathandrea. Cantos del Alma | 19
La sabia solicitud Donde estas ¡oh! Solicitud, ya ni te encuentro Te busco Te socorro y tu a mí qué Merodeas y no te siento Te fuiste como el eco, y soñé que venias en mi auxilio ¿Dónde estás compañera invisible? Otra vez merodeas a las puertas de las plazas Maquínas entre labriegos En los rincones de las bibliotecas deambulas Te sientas con los príncipes Vistes a los ancianos ¿Dónde estás sabia solicitud? Te descubro, ¡eres la sabiduría! Eres la hija de Dios, que juegas con los filósofos y los haces rabiar.
20 | Gustavo Viloria
Metáfora de una mujer La misma distancia del universo entero, me congoja hoy Patrocinas melancólica esta infatigable desnudez ¡Mujer! ¿Por qué me fatigas hoy con tu belleza? ¿Y con tus aromas me aprisionas? Bástate tu gracia Porque tu belleza sobrepasa a las de las piedras preciosas.
Nathandrea. Cantos del Alma | 21
¿Podrá fluir sin la vivencia? Es difícil escribir y no tomar con la mirada del corazón mil cosas. Es difícil escribir y no tomar del sabio su lenguaje, del niño su sonrisa del sol que esconde sus colores en un atardecer. Es difícil escribir y no sentir en tu propio pecho la tristeza del huérfano, el dolor de la viuda, y el sentir del menesteroso. Es difícil escribir sin escuchar las notas tristes de un olvidado violín, sin respirar al son de unos últimos latidos, sin despedir un cuerpo frío hasta el final. Es difícil escribir sin tomar en cuenta la ausencia de una amada, la desgracia de un amado, el roto corazón, las espigas contra el viento. Es difícil escribir sin la palabra, sin el norte de tu vida, sin la revelación, sin lágrima arrepentida con el corazón colgando. Es difícil escribir Es difícil escribir Sin la mirada del corazón abierto.
22 | Gustavo Viloria
Consolación Ahora comprendo que las cosas que me han sucedido, reposan como piezas perfectas de un rompecabezas. Cada una cae, silenciosa y se acomoda casi que con perfecto agrado. ¡Hay mi Dios! Como quiero levantar mi voz Que no quede muda Que salga todo de mí, que se exprima mi ser y pueda ser leído, que pueda yo sustentar a cualquier alma solitaria A cualquier alma entristecida Si tan solo un alma se salvara con mi pluma y con mis versos, yo estaría feliz…
Nathandrea. Cantos del Alma | 23
La poesía … Es toda palabra concebida de toda vida, música y color, que transforma al hombre en tinta y pluma. Se derrama con todo sentir, toda palabra suya es escogida desde antes de la fundación del mundo. Conoce todo del ser y nada se le escapa. Se desplaza sigilosamente desde el corazón del hombre, para luego salir estrepitosa, cargada, desnuda, para esconderse en el oyente y causar todo lo que quiera causar. Reposa dispuesta, como dispuesto esta el rocío sobre la delicada rosa También esta adormecida hace no se cuanto tiempo, en cualquier rincón solitario Dios es desde siempre y por siempre, ella es su hija. La poesía es el alfarero, es el barro La poesía es la clave que evita la rigidez del pensamiento y penetra hasta el alma, despierta en el oyente la sensatez y lo sublime Carcome la médula de los huesos y se desplaza inadvertida para sembrar en otra alma, En todas las almas el amor…
24 | Gustavo Viloria
A Franz Kafka Soy esa voz silenciosa, no sé hasta qué tiempo Pero el no decirte lo que no te han dicho, sería una pena Con un respeto, casi inmaculado, difiero mucho de ti ¿Dónde yacen tus principios divinos no señalados con el mismo poder que la ofensa o la herida? Tengo contra ti una mezcla de divinidad, sapiencia que se diluyen en un vaso de cristal Perdona a tu padre, como perdonas al viento, al sol, al agua cristalina o al aliento de cualquier moribundo Aprovecha el gesto de tu madre, la obediencia de la esclava o el silencio de la noche, pero perdona… Permite a este hombre pasar de las manos frias a otras manos, pero perdona Perdónalo que se siente triste Perdónalo que angustiado está Perdónalo Que la muerte se aproxima…
Nathandrea. Cantos del Alma | 25
Mi principio Con el alma pura y la sencillez de un niùo poeta‌ Y con la balanza justa de la autenticidad.
26 | Gustavo Viloria
¡Sabes! Hay poetas silenciosos y hay poetas silenciados Uno de ellos es Gabriel Mantilla No por su empeño, sino por su lugar Que no debe ser otro que el de los excelsos poetas ¡Sabes! Este hombre no tiene miedo, no tiene afán Esta erguido desde siempre en este mismo lugar ¡Sabes! Hay poetas silenciados y hay poetas mal tratados Gabriel Mantilla es… Si se enojara Dios, Siervo solitario Redimido de este mundo es.
Nathandrea. Cantos del Alma | 27
La palabra de vida Un día se acercó mi lengua a mi alma, la tomó por los brazos y le dijo: Ven, camina conmigo, acércate a mi lado y caminemos juntas Te mostraré donde yo habito, y cuál es mi sentido El alma asustada le siguió pensativa y le dijo: Salgamos, corramos juntas, el tiempo se acaba Unámonos, seamos una, pensemos igual, sintamos lo mismo El alma sobrecogida por la torpeza de la lengua La abrazó y le regaló un manto de sabiduría Le regaló un antiguo manuscrito griego Le regaló un báculo Le regaló la palabra…
28 | Gustavo Viloria
Cuánto vale el don Un anciano en la esquina de la catedral… ve pasar a un hombre que dice a viva voz: Con estos sudorosos siete bolívares, compré parte del universo entero Y lo que era un dolor para salir de mi bolsillo, Fue gratificado casi hasta llorar Son los siete más dolorosos Que compraron siete mil mansiones Gracias a estas siete mil, compré un gran pedazo de pan del universo entero. ¿Qué carajo compraste? le pregunta el anciano El hombre que había estado muerto, le responde: Ya vivo, he nacido de nuevo, fui a comprar y me regalaron la salvación me regalaron la palabra me regalaron la fe…
Nathandrea. Cantos del Alma | 29
¡Vamos! escribamos No nos cuidemos de mantenernos al cuidado de un delirio espiritual Cuidémonos de hacer para lo que hemos sido confeccionados Que cumplas tú Que cumpla yo Dios me dio la vida, yo le daré mis versos No importa que de vez en cuando nos desproporcionemos, pero sobrios todos escribamos nuestro papel Portentosos, o humildes Escribe lo que se te pida, pero escribe al final Y al final escribe.
30 | Gustavo Viloria
La pareja A la sombra de un desierto, se asoma una pareja conflictiva hasta la depresión Ahí se puede ver, se dañan, se destruye uno contra el otro Al instante, uno le dice al otro: He sido arruinada, mi alma, mi ser y mi semblante a la sombra de tus manos. El hombrecillo responde: Mujer amarga, reseca, me has dañado mi ser, mi bolsillo y entero nada soy ¡De pronto!.. Despiertan los dos, se miran, se toman de las manos y caminan como con el primer amor Como con el primer amor entre sus piernas.
Nathandrea. Cantos del Alma | 31
Gracias señor por éste regalo No tiene ser No tiene tamaño Es totalmente bello, dulce Gracias señor, ni todas las benevolencias se comparan a él Es real, solo real y bello Gracias señor A la quietud de tu amor siempre quiero andar Despertar a la luz de tu sonrisa Gracias Dios Eternamente para mí…
32 | Gustavo Viloria
Preparación Juventud divino tesoro Mientras estés entre mis brazos, voy a decirte todo lo que sienta Pasaras lentamente no lo sé No podría descifrarlo Juventud divino tesoro, no puedo hacer blanco o negro ninguno de mis cabellos Pero tengo contra tí Que en ella se mezclaron contra mí, todos los dolores del sentir Que me robaron mis ojos, que me aislaron de la dádiva del amor, del sueño, de la doncella Me alejaron de mis manos y de mis pies Todo esto sucedió en el seno de mi juventud.
Nathandrea. Cantos del Alma | 33
Canto sublime a Nathanaylen Natha campanita AllĂĄ en el cielo hay un parque azul, donde podremos jugar toditos juntos, Natha, hasta el amanecer No te apartes Natha campanita No abandones los rĂos cristalinos de tus ojos, no caigas en demasiada tristeza No abandones la fe, el amor Cuando te mires no olvides Natha, la luz de los ĂĄngeles entre tus coloreados ojitos No te apartes Natha De Jesucristo el Salvador.
34 | Gustavo Viloria
Eres Andrea Hay muchas cosas que podría decirte de tí, de mí, y del universo que está en tí Has crecido ya Descubres lentamente lo encubierto guardado para tí Busca, sondea, ármate del ansia y camina sigilosa ante todo lo sabio Enamórate eterna y constante de todo el devenir Sé que estas serena, a veces en duda A veces dura A veces tenue Buscando entre la bulla, respuestas Para tú circundante vida Declaro sobre tí las bendiciones del reino Tu historia, la victoria, el éxito, la eternidad.
Nathandrea. Cantos del Alma | 35
Exógeno Que son los viejos sino Corazones quebrantados, hombres sabios, cuerpos cansados Manos, y frente y cuello con demasiadas líneas Que son los viejos sino Pergaminos olvidados Musculo de huesos desprendidos Mirada gris, pasos lentos, frente y espalda hacia el suelo, Buscando el piso Que son los viejos sino El don póstumo de la vida Aún sin retorno La tarde gris, el ocaso, el tiempo Parmenidéo Que son los viejos sino La espada envainada, el jarrón guardado, los parpados cerrados, la vela apagada, la ultima palada.
36 | Gustavo Viloria
Los males de los hombres Desavenencia pura y casta, que tocas a los hombres y los haces temblar Te muestras indolente, pervertida, y llegas imprevista para tocar a cualquier ser Te muestras odiosa, grotesca, burlona, no perdonas ni clases ni estratos No preguntas al entrar, no preguntas si es alma noble, buena, sufrida, merecedora de tĂş presencia Necesaria te conviertes, nadie te ignora, nadie te encierra Hecha estas para el hombre Si pudiĂŠramos vestirte Si pudiĂŠramos encerrarte Te paseas inquebrantable, soberana, en cada rincĂłn Donde habitan los hombres.
Nathandrea. Cantos del Alma | 37
Al Santo de Israel Al gran Yo Soy… Me paseo entre los Salmos de David, Para decirte: Socórreme en tu justicia, apiádate de mí Ven en mi auxilio contra todos los adversarios de mi alma Mis ojos están gastados de sufrir Fenezca ahora mismo Señor la maldad de los insensatos que desean mi mal Sé tú la porción del cáliz que sustente mi alma en la hora mala Toma gobierno sobre mí como gobiernas los senderos del mar Como das calor a la madriguera, como avisas al sol los colores del día Sé mi escudo, sé mi roca, sé la brisa ¡Oh! En tí esperaré Como mirando al invisible Con la certeza de lo que se espera, Con la convicción de lo que no se ve Con la esperanza de las almas quebrantadas.
38 | Gustavo Viloria
Joseph Sipros Evahans Donde quiera que vayas Arderá en ti el fuego de la poesía Deja fluir, con dolor o miedo, hambre, sed o frío Que después se convierte En placentero itinerario de tu existencia.
Nathandrea. Cantos del Alma | 39
Ataques Ataques de demonios Ambulantes o enviados Podrán penetrar la esfera de mis sueños Pero no podrán tocarme Por lo tanto, sus hechizos Solo pretenden mordisquear en mi descanso Para regresar fracasados, lloriqueando A sus ollas de pócimas nauseabundas Y a sus brujas amateurs.
40 | Gustavo Viloria
Temer “No temas, creed en El, creed también en su palabra” Todos los días de este mundo Sale Jesús cargado de miles de millones de milagros Para recorrer la tierra con ellos Y soltarlos libremente como la escarcha de nieve Sobre los sedientos necesitados Acomódate, en la espera, con postura de hambre y sed, Esperando uno de ellos Todos los días pasa Jesús Esperando entrar en ti Y posar en el umbral de tu corazón cansado Con un milagro para tus manos.
Nathandrea. Cantos del Alma | 41
El impulso me llevó a desprender sus manos y besarlas Y con la devoción del alma calcinada de sed Incliné mi rostro Y rodilla en tierra le pedí perdón Todo por amarla de nuevo.
42 | Gustavo Viloria
La mujer, Que no sea un servicio Ăştil Sino que sea la utilidad del amor.
Nathandrea. Cantos del Alma | 43
Amor que desmenuza Cuando Dios te ama, te ama Te persigue Cada quien decide como entrar a su llamado Algunos entran quebrantados Otros quebrados Otros por cualquier camino equivocado Cualquier cosa hace JesĂşs Para que por la roca no quedes desmenuzado.
44 | Gustavo Viloria
Liberación Nadie altere La soberanía de la mujer libre De Dios es la sujeción Pero no el sometimiento La mujer es ayuda idónea No prisionera ni esclava Debe estar a la altura de la costilla de su amado Para mantenerla dentro de la soberanía del abrazo eficaz Hasta corroerse con ella En las láminas de la vejez placentera Y sostenerla abrasada constantemente Hasta el final de los tiempos Sean buenos o malos Sin cuestionar…
Nathandrea. Cantos del Alma | 45
El amor es el encuentro de dos En el umbral de un sueño Caminando de la mano, paso a paso, se revela su misterio Alguien nos atrae Entre el encuentro Reencuentro Huidas Dolor Gracia y decepción Se fortalece en un santiamén y toma vida Tránsito que traduce al final Un canto sublime para dos.
46 | Gustavo Viloria
Salvaguardado en la reflexión Y con la inteligencia provista de razón Aprendo, conquisto Me hago sabio Las situaciones no cesan pero se multiplican las maneras de abordarlas Hasta vencerlas y seguir… Nuevas dimensiones nos esperan Donde el placer no cesa Y la lágrima no cala.
Nathandrea. Cantos del Alma | 47
Índice Es casi un clímax espiritual… Pasiones Soledades Eso es amor Cerquita de ti Ausencia Alegría La sabía solicitud Metáfora de una mujer ¿Podrá fluir sin la vivencia? Consolación La poesía A Franz Kafka Mi principio ¡Sabes! La palabra de vida Cuánto vale el don ¡Vamos! escribamos La pareja Gracias señor por éste regalo Preparación Eres Andrea Exógeno Los males de los hombres Al Santo de Israel Joseph Sipros Evahans Ataques Temer El impulso me llevó La mujer, Amor que desmenuza Liberación El amor es el encuentro de dos Salvaguardado en la reflexión
13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47
VersiĂłn digital, marzo de 2015 Sistema Nacional de Imprentas MĂŠrida - Venezuela
Fotografía: Andrea Guillen Fuenmayor
Gustavo E. Guillen Viloria (Mérida, 1965) Escritor venezolano y filósofo. Es Licenciado en Letras y Magíster en Filosofía. Ha ejercido la profesión docente por más de veinte años, trabajando en la Universidad de Los Andes (ULA), Universidad de las fuerzas Armadas Venezolanas (UNEFA), Universidad Bolivariana de Venezuela y en la Academia de Policía del Estado Mérida. Ha sido orientador por más de veinte años en el área de Conducta juvenil y actualmente es el orientador de la Unidad Educativa Julio César Dávila en la Mesa de Los Indios de Ejido, en el estado Mérida. Ha escrito: La aventura de un andino; Like, poemas de amor para facebook, libro traducido al idioma ingles; Poesía de restauración; Filosofía en poesía, los dos últimos, publicados por la Editorial Española United PC. También ha escrito veinte canciones con letra y música y una pieza para Orquesta Sinfónica.
Al comienzo del camino, se presenta Nathandrea para interpretar la gran fuerza espiritual contenida en estos cantos del alma. El autor deja colar inadvertidos latidos poéticos en esta obra con el fin de exaltar de alguna manera la memoria de sus por siempre amadas hijas.