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7.2.1. Trata con fines de explotación laboral - trabajo forzoso

7.2.1. Trata con fines de explotación laboral - trabajo forzoso

La trata con fines de explotación laboral es una de las modalidades invisibilizadas por la mezcla existente entre mercado laboral informal y formal en países como la República Dominicana.

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No es posible hablar de explotación laboral sin establecer los vínculos que esta tiene con los diversos fenómenos que componen la globalización y su evolución hacia un sistema capitalista global. La explotación laboral suele ser vista como una de las peores consecuencias de la globalización, ya que, además de generar más desigualdad, reproduce discursos hegemónicos neocolonialistas que elaboran nociones sobre la diferencia humana con relación al trabajo (Viteri, Ceja y Yépez, 2017: 55).

La presencia de la explotación laboral a través de las redes de trata de mujeres que las llevan a España, Suiza y Costa Rica está mediada por la lógica del mercado laboral en la República Dominicana, donde la informalidad tiene un fuerte peso y el capitalismo se alimenta de ello. Así, espacios laborales como salones de belleza y la agricultura cuentan con estructuras de contratación informales sostenidas en relaciones primarias y familiares que ocultan la explotación y que se agudizan con la trata.

La trata con fines de explotación laboral se esconde más fácilmente que otras modalidades de trata por las razones expuestas anteriormente.

Se presentan casos de explotación laboral en salones de belleza, la cual se combina con servidumbre doméstica en Suiza y Costa Rica según lo que se desprende de la lectura de las historias de vida de las sobrevivientes entrevistadas. Igualmente, tanto en Costa Rica como en Suiza las instituciones entrevistadas indican que han acreditado y asistido a mujeres que han sido víctimas de trata en estas condiciones.

Yo vine engañada. Mi tía me trajo para estudiar, para tener una mejor calidad de vida que la que llevaba en República Dominicana. Yo soy de San Juan de la Maguana y mi papá es pobre. Las cosas no resultaron como tenían que suceder y resultaron de otra manera. No como tenían que suceder, porque me trajeron en una situación migratoria que se complicó un poco; pasó el tiempo,

la situación migratoria no estaba buena para yo hacer los documentos. Mi tía me puso a trabajar en su salón de belleza: trabajaba todos los días y tenía que hacer los oficios de la casa (limpiar, cocinar, lavar). Yo era una sirvienta para mi tía. Era demasiado lo que tenía que hacer en la casa. Demasiado lo que tenía que aguantarme donde ella. Para eso no fue que yo vine aquí. Ella me trajo diciéndome que me iba a ayudar a estudiar y no fue así. No me pagaba y yo le reclamé. Tuvimos problemas, ella me maltrató. Me escapé de la casa, pero ella se quedó con mi pasaporte, nunca me lo dio (dominicana sobreviviente de trata C. R. 1).

En este relato se muestra el caso de una joven dominicana que fue víctima de su tía, que la sometió a trata en explotación laboral y servidumbre doméstica. La tía la sedujo para que ella fuera a Costa Rica a estudiar y la sometió a condiciones de explotación laboral en el salón de belleza que ella tenía, así como en servidumbre doméstica en su hogar. No le pagaba y le retuvo el pasaporte, privándola de su libertad. Ella nunca la denunció. Decidió escaparse y duró un tiempo en la calle para luego insertarse en el comercio sexual, dedicándose al trabajo sexual.

En Suiza, en forma similar, se presentan casos de sobrevivientes de trata que son víctimas de explotación laboral en salones de belleza de familiares y amigas dominicanas. En esas situaciones se encuentran mujeres con doble victimización: son víctimas de trata en el salón de belleza y también de violencia de género por cónyuges suizos. Una de las entrevistadas expresó lo siguiente:

Tengo 9 años en esa peluquería, con un supuesto contrato de trabajo que no se cumple, pues no me pagan lo que me corresponde […]. Nunca he tenido vacaciones y solo tengo libre los lunes, que es cuando cierra el salón. No tengo seguro médico y, cuando estuvimos encerrados por el COVID, si me pasaba algo, tenía que pagar de mi bolsillo si iba al hospital […]. No me he ido del salón porque aquí se conocen todos los dominicanos y ella seguro que me va a desacreditar con las otras dueñas de salón, me lo ha dicho. Pero estoy buscando en otro lado. No la he denunciado porque me da pena hacerlo, después de todo ella es mi jefa (dominicana víctima de trata 10 Sz.).

Esta mujer, que también ha sido víctima de violencia de género por parte del ciudadano suizo con el que se casó, continúa sometida a los malos tratos de su jefa en la peluquería y teme dar cualquier paso para salir de esta situación. Estos casos de explotación laboral serían comunes en Suiza según lo expresó una de las expertas entrevistada.

En los casos de trata para explotación laboral en salones de belleza encontrados en Costa Rica y en Suiza está ausente la denuncia de la persona tratante por la existencia de relaciones familiares y primarias, que son una gran barrera para la identificación de la explotación laboral a la que están sometidas las mujeres, que cargan, además, con un gran endeudamiento.

Tanto en Suiza como en Costa Rica se han presentado varios casos similares de explotación laboral en salones de belleza dirigidos por familiares según señalan las instituciones entrevistadas, casos en los que las mujeres logran romper con el miedo a la denuncia.

Estuvimos asistiendo un caso reciente de una chica dominicana. La estaban explotando en una peluquería en la frontera sur de Costa Rica. Una dominicana, dueña del salón, traía las dominicanas por Nicaragua y luego a Costa Rica. Las explotaba un tiempo y luego las dejaba. Las ayudaba a venirse y las usaba para que trabajaran sin pagarles. Con situación de encierro, no les daba llaves, inmovilidad, entre otros (institución gubernamental 3 C. R.).

La comprensión de la diferencia entre la trata con fines de explotación laboral y la explotación laboral en sí resulta difusa y las instituciones hacen un esfuerzo con señalamientos precisos sobre ello. En este sentido, las instituciones gubernamentales costarricenses entrevistadas destacan como elementos diferenciadores los siguientes:

1. La explotación laboral tiene características propias, como sobrecarga laboral y baja remuneración, pero no hay mecanismos de control y sometimiento, como retención de documentos de identificación y castigo físico. No hay amenazas ni control de la autodeterminación de la persona, ya sea en la forma de encierro o privación de la comunicación. En la trata con fines de explotación laboral sí hay todos estos elementos.

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