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Ivermectina
EL DEBATE RESURGE
Ivermectina,
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Una reciente investigación, avalada por los científicos más reputados que luchan contra el coronavirus en Estados Unidos, revela que usar el fármaco podría reducir en 74 % la mortalidad por el virus.
Barata, eficaz y segura. Hablamos de la ivermectina, una de las medicinas de amplio rango de acción que ha hecho mucho bien a la humanidad. De hecho, su descubrimiento, hace más de 30 años, le valió al japonés Satoshi Omura ganar el premio Nobel de Fisiología y Medicina. Aunque su promoción en 2020 como uno de los “medicamentos más prometedores” contra el COVID-19 fue descartada por las autoridades sanitarias por la falta de ensayos clínicos concluyentes, hoy en día la publicación de nuevos estudios revive el debate en torno a la efectividad del fármaco.
Es que este medicamento, conocido sobre todo por su poderosa acción contra los parásitos internos y externos del organismo, fue catalogado de “esencial” por la Organización Mundial de la Salud (OMS), entidad que en su momento señaló que, por su potencial, era “candidato a convertirse
Los estudios de inteligencia sanitaria indican que tendremos una tercera ola de contagios. Dosificar ivermectina a todos los que aún no se han vacunado y que son la inmensa mayoría evitará que necesiten oxígeno o lleguen a UCI si se contagian.
en uno de los más grandes descubrimientos en la salud global”. Sin embargo, hoy la misma OMS se opone a su uso contra el COVID-19, pese a que cada vez hay más evidencia de su seguridad.
Precisamente, respondiendo a la necesidad de hacer más estudios en torno al medicamento, la OMS financió una investigación y, en enero de este año, el médico Andrew Hill, de la Universidad de Liverpool (Reino Unido), dio a conocer –a través de un video que fue filtrado y luego borrado en YouTube– los resultados de un análisis realizado a 18 estudios sobre la ivermectina, los cuales tuvieron hallazgos asombrosos.
El análisis concluyó que esta medicina podía eliminar más rápido el virus SARS-CoV-2, causante del COVID-19. Además, disminuía el tiempo de hospitalización de los pacientes infectados, producía una tasa de recuperación clínica 43 % mayor y mejoraba la supervivencia de las personas en un 83 %, tanto en pacientes moderados como graves. El autor reconocía entonces
Datos
• El incremento de los contagios eleva la demanda de oxígeno. Los familiares de los pacientes tienen que hacer largas colas para conseguir un balón a elevados precios, además de la incomodidad que significa su transporte. A ello se suma que no hay camas UCI. Administrando ivermectina como preventivo, no necesitarían oxígeno ni camas UCI, lo que evitaría tanto sufrimiento y muertes.
las limitaciones de los resultados porque los estudios analizados no eran muy grandes y solo reunían a 1452 voluntarios en Egipto, Bangladesh, Irán, España y Argentina.
Pero Hill fue más allá y pudo comprobar que la droga, cuya elaboración solo cuesta 12 centavos de dólar, también podría ser usada como método preventivo ante el COVID-19, pues obstruía la infección en las personas y hacía más difícil que aquellos ya infectados contagien a otros. “Si la gente que da positivo es tratada de inmediato con ivermectina, hará que su caso sea menos infeccioso, pues el fármaco limpia el virus con rapidez”, aseguró entonces.
Eficacia comprobada
Pese a los resultados, el estudio no fue considerado por la OMS que, en marzo último, optó por desaconsejar su uso aduciendo la falta de evidencia científica sobre su efectividad. Sin embargo, meses después, otra investigación vuelve a dar certeza de la confiabilidad del medicamento.
Esta vez, el estudio ha sido realizado por un grupo de expertos médicos y científicos de la Alianza de Cuidado Crítico de Primera Línea contra el COVID-19 (FLCCC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, entre los cuales se incluyó a tres investigadores de alto nivel del gobierno estadounidense, que analizaron 56 ensayos hechos por 469 científicos con la participación de 18,447 pacientes en todo el mundo.
Los resultados del estudio atribuyen a la ivermectina propiedades terapéuticas asombrosas contra el COVID-19. Fueron publicados en la edición mayo-junio de la revista “American Journal of Therapeutics” y se centraron en los 28 ensayos controlados aleatorios (el tipo de ensayo considerado de gran autoridad en la comunidad médica) realizados en Reino Unido, Italia, España y Japón. Los investigadores
Con la evidencia, los científicos pidieron a las autoridades sanitarias regionales y a los profesionales médicos de todo el mundo que exijan que la ivermectina sea incluida en sus estándares de atención médica de inmediato para así poner fin a la pandemia.
Datos
• Los expertos recomiendan usar preventivamente la ivermectina (fórmula humana), tomando dos gotas por kilo de peso, por dos días consecutivos, y repetir la toma cada 14 días. • En el caso de contagio, la dosis aumenta a tres gotas por kilo de peso por cuatro días. • El horario recomendado para la toma del fármaco es las 5:00 p.m. (tres horas después del almuerzo y tres horas antes de la cena). • Además, se sugiere acompañar la toma con una pastilla de zinc de 50 mg, para potenciar su efecto, pues es como tomar una dosis más alta.
encontraron una mejora del 85 % en los pacientes cuando el medicamento es tomado como preventivo, antes de la exposición, una mejora del 78 % cuando se administra temprano y una mejora del 46 % cuando se entrega tarde. En el caso de la mortalidad, el fármaco logra una reducción drástica del 74 %.
“Tras llevar a cabo la revisión más completa de los datos disponibles sobre la ivermectina, concluimos que puede poner fin a esta pandemia”, dijo Pierre Kory, presidente y director médico de la alianza. A lo que Paul E. Marik, jefe de Medicina Pulmonar y de Cuidados Intensivos de la Facultad de Medicina de Virginia Oriental, agregó que “ya no queda duda de que la ivermectina es altamente efectiva como profilaxis y tratamiento seguro para el COVID-19”. Resultados en Perú
Aunque en muchas regiones ya se reconoce ahora que la ivermectina es una profilaxis y tratamiento potente contra el coronavirus y países como Sudáfrica, Zimbabue, Eslovaquia, República Checa, México e India han aprobado su uso, la OMS insiste en que el fármaco solo se use en ensayos clínicos. Acogiendo la recomendación, en Perú, el mes pasado, el medicamento fue retirado de la lista de tratamientos contra el
Los nuevos estudios muestran una mejora del 85 % en los pacientes cuando el medicamento es tomado como preventivo. Abajo, Satoshi Omura obtuvo el premio Nobel de Fisiología y Medicina con su descubrimiento.
COVID-19. Ello pese a que investigaciones propias del país también comprobaron la eficacia del antiparasitario.
Precisamente, un estudio realizado por el Ministerio de Salud sobre la efectividad de la ivermectina y otros esquemas terapéuticos, que fue hecho público por “IDL Reporteros”, que analizó a 144 364 pacientes tratados con la medicación entre mayo y septiembre del año pasado, reveló que la droga disminuyó la letalidad respecto de las personas que no tuvieron acceso a esta medicación.
En el caso de los enfermos de edad avanzada, el fármaco redujo casi a la mitad la tasa de mortalidad respecto de quienes no recibieron tratamiento. Y en el caso de los pacientes con obesidad también mejoró la capacidad de resistir y sobrevivir a la infección.
Los resultados son obvios, pero pese a ello, no solo en el Perú, sino en el mundo, este medicamento ha encontrado en las autoridades sanitarias un muro de resistencia. Para el veterinario y microbiólogo Manuel Fernández, gerente del laboratorio Farvet –que trabaja en el desarrollo de la vacuna peruana contra el COVID-19–, la razón es sencilla: “el fármaco es genérico, de uso libre y barato, y no tiene padrinos ni lobbies que lo respalden”.
Lo cierto es que mientras en el Perú la vacunación contra el COVID-19 avanza a paso lento, teniendo en cuenta la evidencia científica, usar el medicamento podría ser un buen complemento para reducir los contagios y evitar complicaciones y muertes, así como cuarentenas, restricciones y cierres de negocios que siguen llevando a la población a la desocupación y al hambre.
Una mano amiga
La pandemia ha revelado la creciente necesidad de atención domiciliaria para los adultos mayores
En este tiempo nuevo de desafíos como el aislamiento, el temor al contagio, el detrimento de la economía y el trabajo remoto, la vida familiar de muchos comenzó a desdibujarse cuando además tuvieron que hacerse cargo de los cuidados de padres o abuelos que ya no pueden valerse por sí mismos.
“Me cuesta encontrar las palabras adecuadas para describir el impacto que los cuidadores han tenido no solo en mi mamá sino también en mí y en mis hermanas. Teníamos la tranquilidad de que una persona estaba atenta a mamá y sus necesidades y reducía el riesgo de accidentes. La cuidadora se enfocó en las habilidades de mi mamá, en lo que ella ya no podía hacer y encontró formas de alegrarle el día”. Este testimonio grafica el importante rol que cumple un cuidador externo que debe contar con ciertas características como la humildad, respeto, solidaridad y amor incondicional para brindar un óptimo servicio de acompañamiento, así como el necesario apoyo y reciprocidad de la familia.
“¿Por qué ya no me abrazas? ¿Por qué no te sientas a mi lado para ver la película? Quiero que compartas mi comida como antes. ¿Por qué no vamos de compras? ¿Por qué no vamos de paseo como antes? Quiero salir a ver a mis amigas / amigos del parque. ¿Puedo salir sin mascarillas? ¿Por qué estoy tanto tiempo en el cuarto?”. Estas y otras son las preguntas y los requerimientos que se hacen los adultos mayores y que exigen de los cuidadores una capacitación y empatía adecuadas. “Vamos a que le coloquen la vacuna, señora Lourdes, debemos usar dos mascarillas y un protector facial”, dice el cuidador. Viene entonces la réplica inmediata: “¡Así no puedo respirar, así no quiero ir!”. “Permítame, yo le ayudo, todo esto es porque la queremos y yo soy responsable de cuidarla, ayúdeme a hacer mi trabajo”, añade.
Pero también existe el revés de la moneda: “Sra. Meche, hoy le diagnosticaron COVID-19 a mi madre. Es necesario que usted se haga la prueba también. Cuesta 120 soles, que descontaré de sus honorarios”. O en otro caso: “Señora Doris, muchas gracias por cuidar a mi abuela, dado que por el COVID ha sido internada en el hospital y está grave, ya no necesitamos sus servicios”.
La situación cambia cuando los miembros de la familia retrasan la colocación de un cuidador externo en el hogar. Entonces, son las mujeres de la familia las que se hacen cargo del cuidado, en paralelo a las labores domésticas y/o el trabajo desde casa. Debido a la sobrecarga que tienen, ya que las demandas exceden sus recursos propios, caen en lo que los especialistas llaman ‘el síndrome del cuidador’. El estrés de hacerse cargo, la demanda física, el no comprender la enfermedad, el ver a un ser querido que se deteriora, que manifiesta una conducta diferente, que se resiste a tomar la medicación, etc., va generando un desgaste que aumenta el riesgo de tener cefaleas, lumbalgias, alteraciones gastrointestinales y otros problemas psíquicos como cansancio, depresión e irritabilidad, que podrían evitarse con una mayor formación y contención.
Lo fundamental es que la cuidadora sepa que, en paralelo a los cuidados que brinda a su ser querido, deberá ella misma cuidarse y esto implica una atención que va desde el sostén psicológico hasta la formación acerca de cuestiones prácticas del día a día. El cuidador familiar desempeña un papel importante en el tratamiento y cuidado del paciente, subsanando las carencias de los servicios de salud y evitando o retrasando el internamiento en casas de reposo de los adultos mayores. En este sentido, el sistema de salud debería tener un enfoque renovado sobre los cuidadores familiares y considerarlo un servicio esencial.
* Médico Cirujano, Administrador de Salud.