Sentido común capítulo 2 by Integral Comunicación

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CAPÍTULO 2 El jugador

n jugador está compuesto básicamente por aspectos: TÉCNICOS, TÁCTICOS, FÍSICOS Y PSICOLÓGICOS.

Vimos el ejemplo con el que Carlos y Luis tuvieron que resolver el problema del televisor. La idea es que puedan contar con más recursos técnicos y golpes que les ayuden a resolver las situaciones que se les pudieran presentar en un partido. A eso llamo “la caja de herramientas”. Pero recuerden a Carlos y que estas servirán sólo si saben cuándo, para qué, y cómo usarlas. (Táctica) Los golpes (caja mínima de herramientas) y conceptos tácticos básicos que deberán tener son: - Saque. - Golpe de derecha (drive) plano . - Golpe de revés plano. - Salida de pared defensiva. - Giros y rodeos de salidas de pared. - Pared lateral. - Conocer la lógica de los rebotes de pared. - Globos. - Voleas de bloqueo (cortas defensivas). - Bandeja (smash de preparación del punto). - Sobrepiques. - Jugar con el error del rival. - Los golpes neutros. - No cometer errores. No regalar nada. - No dar rebotes con las bandejas y smash y aprovechar cuando el rival lo haga (contragolpe). Para tener una buena caja de herramientas sumaríamos estos golpes y conceptos tácticos: - Smash de definición. 51

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- Voleas altas de presión o definición. - Salida de pared alta de definición. - Golpes con slice o cortados. - Condicionar al rival. - Buen complemento con el compañero (armar una pareja). - Ganar muchos puntos con los errores no forzados y forzados de los rivales. Ya una caja muy buena sería la que también contara con: - Sacar la bola de la cancha por 4 metros. - Tontitas. - Entrar a volear. - Traer la bola con el smash de potencia. - Manejo de direcciones con las bandejas y salidas de pared. - Subir a volear las bandejas del rival. - Presionar al rival. - Sumar también golpes ganadores. Podría seguir agregando golpes más especiales a esa caja como la viborita, sacarla de la cancha por 3 metros, por ejemplo. Lo mismo con las situaciones tácticas, mentales. La idea es que cada golpe que puedan agregar en su caja, les permitirá poseer variantes para condicionar al rival, o bien para contrarrestar lo que propone. LA TÁCTICA Me gustaría dividirla en interna o externa. A la interna la llamaremos de ahora en más sistema de juego. Es la manera que tiene cada jugador de desarrollar sus aptitudes de la mejor manera para ser eficaz en el juego, más allá del rival. La externa seria, cómo ejecutaran el planteo estratégico que han hecho del partido en función de los rivales. LA CONDICIÓN FISICA Es el conjunto de capacidades físicas como la potencia, resistencia, velocidad, flexibilidad y fuerza que un jugador posee. Esta 52

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deberá ser tenida en cuenta a la hora de definir el sistema de juego de un jugador. Es muy común ver jugadores que atacan mucho y mantienen la presión en la red, pero que no llegan físicamente bien al tercer set y pierden. Deberán jugar de otra manera o mejorar su condición física. Si hablamos de jugadores de 40 años en adelante, les recomiendo que cambien el sistema de juego ya que no podrán hacer un cambio físico considerable. LA MENTALIDAD Sería la fortaleza mental y la actitud que posee un jugador para conseguir el objetivo propuesto. Dentro de la mentalidad está la confianza para mantener una táctica o ejecutar la técnica. Esta estará alimentada directamente por la seguridad que el jugador tenga de que “la tiene” y “la sabe” hacer perfectamente. Cuando un jugador no tiene buena técnica es imposible que se tenga confianza; a lo sumo le podríamos pedir audacia para que intente lograr algo de lo cual sabe que desconoce casi todo. El combustible para la mentalidad es la confianza, el de esta es la seguridad y el de la seguridad el aprendizaje y entrenamiento. La idea es entrar en ese círculo virtuoso al que en principio, solo se podrá entrar, adquiriendo nuevos conocimientos.

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La confianza no es algo que se pueda adquirir de la nada. Está sostenida por la capacidad que se tenga para resolver situaciones y de la conciencia que se tenga de que se cuenta con esas capacidades: - ENTRENAMIENTO - MENTALIDAD - CONFIANZA - SEGURIDAD Muchas veces alumnos o jugadores atribuyen sus errores y malos resultados a problemas de confianza. Es muy común escuchar cosas como: “cuando me tranquilice voy a jugar mejor”, o “me falta más confianza y sentirme seguro en el juego cuando compito”. En el caso de los niños es normal que mucha gente evalúe su juego diciendo “Juega muy bien, por ahora se apura mucho y le falta cabeza pero cuando se calme será buenísimo”. Para que entiendan mi opinión sobre este tema más que escuchado en el deporte, en la siguiente sección les contaré una breve historia.

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Juan es un chico normal, sensato, a quien le proponen trabajar en la construcción del rascacielos más alto de la ciudad. Sin ninguna experiencia en trabajos en altura, en principio se niega a aceptarlo por miedo a caerse o terminar lastimado. Si como amigo lo aliento a que lo acepte, lo llevo a charlas para que tenga más confianza y le doy muchos libros de autoayuda para que los lea, a lo sumo intentará probar un día pero seguramente bajará aterrado. No servirá de nada que yo le pida que tenga confianza y que pasee tranquilo por la estructura del edificio solo pensando en tener confianza y concentración. En realidad, la única manera de que Juan podría aceptar esas condiciones, sería siendo audaz, valiente y muy inconsciente. Ahora bien; si yo quisiera que mi amigo pueda conseguir ese empleo y no saliera lastimado, deberé darle herramientas que lo hagan sentirse seguro y no una charla sobre la importancia de la mentalidad positiva, ya que con ese único punto, se caerá en su primer día. Lo llevaría a cursos de seguridad industrial, a entrenarse con el equipo adecuado, a cursos de rapel, alpinismo para que de a poco se acostumbre a manejar el vértigo que le pudiese provocar la altura. Luego de seis meses de estudio y entrenamiento lo acompaño a su primer día de trabajo al mismo piso del rascacielos, en el que no se había animado a dar siquiera un paso y veré como va tranquilo, relajado y SEGURO, ya que cuenta con todas las herramientas necesarias para poder desempeñarse en su tarea y estará seguro que nada le puede pasar. Es imposible estar tranquilo sin estar seguro y para estar seguro hay que estar preparado. Con Juan, en esta última oportunidad no hablé nada sobre confianza, mentalidad positiva, ni nada. Solo lo ayude a prepararse y empezó a ser más “valiente” pero sólo al saber que contaba con los recursos necesarios. La confianza no se puede comprar. Sí se pueden adquirir conocimientos que nos hagan sentir más seguros y de esa manera mejorar la confianza que llevará a tener una mentalidad más ganadora. Para ser audaz solo hace falta valentía, poco sentido común, inconsciencia y un poco de locura o tener muy poco que perder. Para tener confianza hace falta saber y tener conciencia 55

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de que se sabe. Esto mismo pasa en el pádel con algunos jugadores que a la vista padecen problemas de confianza pero en realidad tienen que aprender muchos golpes y entrenar mucho para poder mejorar su juego. En octubre del 2009 se jugó el mundial de menores en Sevilla, España y formé parte del cuerpo técnico de equipo Argentino. Estuve dedicado al equipo de sub 18 de chicas y chicos. La final del torneo por equipos masculino estuvo muy cerca y muy lejos a la vez. De tres partidos ganamos uno y simultáneamente se jugaban los otros dos partidos que definirían el campeonato. Yo estaba sentado junto a Aris Patinotis y Lautaro González Pezz que jugaron contra Angel Gaona y Alvaro Cepero. El primer set lo ganaron jugando fantástico. El tercer set definiría el campeonato ya que se había perdido el segundo partido. Los chicos españoles fueron creciendo poco a poco hasta llegar a terminar jugando un partido excelente y fueron justos ganadores en un 6/3 final. Al terminar el partido muchos me preguntaban si la presión les había jugado en contra a nuestros chicos o si no se habían tenido la suficiente CONFIANZA para cerrar el partido. Yo estaba orgulloso del partido que habían jugado los chicos y del coraje que justamente habían tenido. Los jugadores españoles llegaron muy bien preparados al mundial, con recursos, torneos y mucho apoyo que no tuvieron nuestros chicos. Se perdió por poco y por mucho ya que en esos momentos clave es donde cuenta la preparación previa. Esa preparación es la única capaz de reemplazar la palabra coraje por confianza. Hay muchos jugadores que tienen muy buenos golpes o virtudes pero no son realmente conscientes de su potencial y terminan sin aprovecharlos. A veces solo hay que generar un ejercicio o situación para que el jugador se conozca y sea consciente de lo que es capaz.

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~ · ENTRENEN IGUAL A COMO PRETENDEN JUGAR · ~ Entrenar no es más que repetir gestos o situaciones, con el fin de generar automaticidad en los gestos técnicos adecuados para cada situación que se presente en el partido. Si cada vez que entrenan o juegan un partido intentan inventar golpes nuevos, o juegan aquellos poco eficaces, seguramente cometerán esos errores de manera automática durante una competencia. Me ha pasado muchas veces, mientras entrenaba a un jugador, ver que intentaba resolver una bola de la manera más vistosa pero poco eficaz. Al corregirlo y decirle que esa jugada no servía, me respondía que solo estaba aprovechando que era un entrenamiento, ya que de ninguna mane" Los número uno ra haría esa jugada en el partido, no sólo son mejores pues era conciente de que no era jugando los torneos, la adecuada. En ese caso se presensino que son mejores tarán dos problemas cuando deba también entrenando " resolver esa bola en un partido. El primero será que no se animará a usar la practicada (poco eficaz y de bajo porcentaje de éxito) y el segundo, y más grave aún, será que no tendrá ensayada ninguna otra, por lo que seguramente hará un golpe “NI”, perdiendo el punto, o bien perdiéndose la posibilidad de ganarlo. (Ver: “los tiros NI”). Ahora les contaré algo que no tiene que ver con el pádel pero sí con el deporte, como para que entiendan que hay un concepto general en todas las disciplinas profesionales. Cuando tenía 18 años iba siempre de vacaciones a Mar del Plata (Ciudad turística de la provincia de Buenos Aires y cuna de grandes jugadores de pádel). Ahí, en un balneario que tenía cancha de futbol sala y otros deportes, conocí a Fernando Kuyumchoglu. En ese momento tenía 15 años y jugaba al fútbol en las inferiores de River Plate. Teníamos buena onda y me invitaba a jugar con él y sus amigos al fútbol. Ahí fue donde descubrí que tenía buena onda conmigo, ya que nunca fui demasiado bueno. El tema es que era tan habilidoso que tomaba la pelota en su área y gambeteaba a todos, para dejármela servida contra el arco rival. Era un crack. Hacía todo tipo de malabares con la pelota. Así termino ese verano. A mitad de 57

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año se jugó el campeonato sudamericano sub 16 en Buenos Aires y cuando veo el partido lo encuentro jugando con el seleccionado argentino. Era un equipazo en el que también jugaba Hugo Maradona, hermano de Diego. Salieron campeones y fue un equipo que le llegó mucho a la gente. Al siguiente verano voy al mismo balneario y lo encuentro en la misma cancha. Lo felicito, charlamos y me invita a jugar un partido. Ya no hacía ni un lujo. Jugaba de primera, y ya no podía jugar de otra manera que no fuera con esa eficacia y responsabilidad. Me di cuenta de que para ser bueno hay que entrenar y jugar siempre como bueno. Esto también tiene excepciones ya que hay muchos jugadores que entrenan muy bien pero que luego compiten muy mal. Pero lo que es seguro, es que los número uno entrenarán bien.

" Vean a un jugador entrenar y sabrán como juega "

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~ · LOS GOLPES VIRTUALES · ~

Es muy común escuchar a jugadores decir: “No sé por qué no me sale esta viborita rápida, si en los entrenamientos me sale siempre”. Quizás entrenan los golpes a los que llamo “GOLPES VIRTUALES” o “GOLPES DE LABORATORIO”. Son aquéllos que se entrenan en condiciones “ideales”, esperando la bola parados en el lugar de ejecución real, pero…quietos y cómodos, y ejecutándolos a una velocidad que seguramente nunca se animarían a usar en un partido “real”. Es muy común observarlo en bandejas, viboritas o sobrepiques, que a veces les salen entrenando con el profesor, pero nunca en un partido. Estos “golpes virtuales”, generalmente coinciden con una falta de concepto al querer lograr con un golpe mucho más de lo que se le puede pedir. Piensen en este ejemplo: Un arquero de fútbol (o portero, para los amigos españoles) tiene que atajar un penal. Imaginen que el goleador de su equipo le propone que intente atrapar la pelota y que le haga un pase para contragolpear y hacer un gol en el arco rival. Estaría buenísimo…¿o no? Claro que sí, pero es imposible. Sería una jugada virtual. Más que una jugada, un deseo, un sueño… En la práctica o en el mundo real, si el arquero llegase a tapar el remate, aún dando rebote, sería un héroe. Esto mismo pero con ejemplos más sutiles, suele ocurrir en 59

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el pádel. Se le pide mucho más a los golpes de lo que ellos pueden ofrecer dentro de la zona segura (zona segura o velocidad crucero, es la manera con la que me gusta llamar, a cuando uno juega sus golpes a una velocidad y dirección en las que se tiene un muy bajo margen de error). No hay que confundir a los golpes virtuales con la etapa inicial de incorporación de la técnica de un golpe (donde obviamente se cometen muchos errores), o en aquellos golpes de definición que suelen errarse hasta quedar consolidados. Esto estaría dentro de la progresión lógica de la incorporación de la técnica. Por el contrario es muy bueno entrenar los golpes tendiendo a llegar al ideal, o a su máxima expresión. El problema es que quizás no se tiene noción de ese límite. También es importante practicar esos golpes en la “situación real de partido” (en dinámica e incómodos), y a una velocidad “creíble”, para que en algún momento puedan usarlo sin mayores riesgos. Para esto, es clave que primero se pregunten cual sería el límite o lo máximo que se le puede pedir a un golpe o situación. No busquen golpes “increíbles” ya que la misma palabra les dice que son poco creíbles y no les entrarán nunca. Sepan invertir su tiempo en golpes creíbles y que puedan transferir del laboratorio al partido. De nada servirá practicar golpes que no se animarán a usar cuando deban competir

" no entrenen golpes virtuales, practiquen los reales "

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~ · ASIGNARLE VALOR A CADA GOLPE / PUNTO · ~ Una vez asimiladas las dos cuestiones anteriores, en las que hablaba de los golpes virtuales y de la importancia de entrenar igual que como jugarán, podemos empezar a entender que hay que darle valor a cada bola. Suele ocurrir que los jugadores no tienen verdadera conciencia de la cantidad de errores (regalos al rival) que hacen en los partidos. Me ha pasado que al terminar de monitorear un partido de un alumno, y luego de contabilizar sus errores no forzados, mi alumno no podía creer la cantidad de errores que había cometido. Generalmente no se le da el valor suficiente a cada bola, a cada decisión y a cada punto. Les contaré una anécdota real de cuando estaba dándole una clase a un alumno. Era el típico perfil de alumno al que nadie del club podía hacerle entender que las tiraba “todas afuera”. Era un poco soberbio y hasta distante y no escuchaba a los profesores del club. Ese perfil es el de quien toma clases como para que le digan que es el más lindo, y el que mejor juega del club, pero que nunca jugará bien. Tenía un aparente buen pasar económico que le gustaba que no pasara desapercibido. Al empezar la clase comencé a hacer un trabajo de control sencillo pero con la única finalidad de que metiera la bola dentro de mi campo. Jugaba a una velocidad tal que no pasaba más de tres veces la bola a mi campo (espero que no te sientas identificado por esto último…). En un momento le propuse jugar durante cinco minutos a que por cada error le cobraría dos euros. Al minuto del peloteo ya iba perdiendo casi treinta euros. Cuando se lo recordé, empezó a empujar la bola a mi campo. Sus golpes parecían en cámara lenta y apenas pasaban la red. Fue ahí cuando paré el ejercicio, lo llamé para que se acercara a la red y le dije: “Ya tenemos solucionado el problema. No tienes problemas de concepto importantes sólo eres muy amarrete”. Fue el detonante de lo que quería que pasara. Se ofendió, me dijo que yo no le podía decir eso. Lo interrumpí y le dije que no era un tema personal, sólo quería demostrarle que al “darle valor a cada golpe”, había empezado a jugar a la velocidad en la que él sentía que no cometería errores (zona segura). Esa velocidad era 61

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notablemente más baja de cómo el había empezado a jugar. Lo entendió y al menos de ahí en más empezó a intentar querer aprender realmente. Les propongo que intenten hacer un partido con la siguiente consigna: Cada jugador que cometa un error deberá poner un euro/peso en una bolsa común. Al terminar el partido podrán ir a cenar con ese dinero o compartir un momento divertido. (No es una apuesta, sino un ejercicio didáctico para darle valor a cada golpe). Obviamente quien haya cometido más errores será quien más dinero deba poner. Sólo necesitarán a un amigo o entrenador fuera de la cancha apuntando los errores de cada uno. Se sorprenderán al ver cuanto más lento es el partido y cómo cuidarán cada bola. Ahora bien, en un partido no deberán pagar con dinero sus errores, pero sí con la derrota. Algo que puede generar esta desvalorización de los golpes/ puntos es el uso excesivo del canasto en las clases. Deberán sustituirlo por más trabajos de control, en donde se vean más los errores. Otro consejo es que entrenen sólo con una bola en cada ejercicio. Es tan fastidioso tener que buscarla cada vez que se pierde, que terminarán sin cometer errores.

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~ · QUE EL PERSONAJE NO SE LOS COMA · ~

Hay muchos jugadores que son vistosos jugando, no tienen buenos resultados pero su carisma y manera de jugar atrae a la gente. Quizás, gente de su club y de otros los reconozcan por algunas de sus cualidades, y les dé un lugar de pertenencia, una identidad que los diferencie de otros. Si ese personaje hace que el jugador tome una popularidad que antes no tenía, puede pasar que pierda, olvide, o se aleje de su objetivo inicial (que podría haber sido “ser el mejor del club”). De alguna manera terminarán condicionados a tener que hacer algo que llame la atención de los demás, más allá de que eso fuese lo mejor para conseguir un resultado favorable. Seguramente en su club encontrarán decenas de ejemplos como: - El fenómeno sin cabeza que siempre tira algo distinto, porque es un habilidoso nato que tiene personalidad, y no especula en pasar bolas porque eso es para perdedores. (NUNCA GANA UN PARTIDO) - El loco que tiene unas condiciones excelentes, pero sale cada noche de marcha y si se dedicara sería el mejor (TAMPOCO GANA NADA NUNCA). - El que venía jugando cada día mejor pero no tiene recursos para 63

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poder entrenar. Si entrenara sería un verdadero crack. (En realidad tiene recursos pero pone como excusa decir que no por miedo a fracasar). - El que juega bien pero se enoja por nada, se vuelve loco y las tira todas afuera; pero a la vez ya se ganó ese apodo de “loco simpático”. A lo largo de más de veinte años me he topado con cientos de los jugadores que tal como vimos anteriormente en la sección dedicada a ellos, los denomino “JUGADORES Y SI…”. “Y SI…” yo me entrenase; “Y SI…” yo tuviera cabeza; “Y SI…” yo tuviera tiempo; “Y SI…” yo no fuera tan vago para prepararme físicamente; sería un fenómeno. El “Y SI…” no sirve para nada más que para desviarse con excusas del objetivo. Quizás muchos buscaban ser alguien dentro del club, al principio siendo el mejor, pero al haber conseguido ser populares por otra cosa ya no se preocupan por lo otro. Esto último no es grave ya que el objetivo más profundo y verdadero estaría cumplido (ser popular), pero hay muchos a quienes se los come el personaje y terminan desviándose y frustrados por no haber alcanzado lo que soñaban.

" Fracasar es no intentarlo "

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Mis inicios en el tenis criollo en el club Comunicaciones. Actualmente es más conocido como Tenis con Paleta. De ahí en más siempre con una paleta en la mano.

Mi primer viaje a España en el año 1991. Jugué con mi amigo el Chino Mazzuchi. En Marbella enfrentábamos a Ian Mc Dougall y Arturo Jiménez. A la gira viajamos junto a Pali Rovaletti, Cubito Asnaghi y Juan Carlos De Marco. 65

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Con Julio Nigrelli, mi amigo y compañero. Empezamos allá por 1987 en tercera categoría y llegamos a estar pareja 8 del ranking profesional APP que era el circuito más competitivo del mundo en ese entonces. Jugué 7 años inolvidables.

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Una banda… arriba de izquierda a derecha, Cubito Asnaghi, Pali Rovaletti, El Chino Mazzuchi, Juan Carlos De Marco, Juan Martín Díaz. Abajo están Manu Caracotche, Martín Linardi y Alejandro “El Mago” Sanz.

Partido con Diego Maradona en el club El Balcón. Organizado por Ceso Baccigalupo jugamos con La China Mazzuchi y Julio Nigrelli. 67

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AllĂĄ por 1993 mis patrocinadores principales eran Adidas y Prince.

Entrenando y acompaĂąando a Ceso Baccigalupo y Adriana Costagliola en el mundial de Mendoza, Argentina de 1994. Salieron campeonas mundiales por equipos y en el Open de parejas. 68

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Dictando clínicas junto a Gustavo Maquirriain. Sin duda uno de los primeros cerebros del padel. Aprendí mucho y pasamos muy buenos momentos. Trabajamos juntos desde el año 1993 aproximadamente.

Mis primeros torneos junto a Gaby Reca. Desde ahí nacería una amistad y una relación profesional que aún mantengo como una de las cosas más lindas que me dio el padel. 69

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Con Leonardo “Jaimito” Urrutia. Jugué con él y ganamos algunos torneos Challenger y satélites. Un amigo más que no podía faltar.

Nuevamente con Ceso y Adriana pero ahora luego de ganar nuevamente el campeonato Mundial en Madrid, España en 1996. Ganaron por equipos y el Open de parejas. En este último vencieron en la final a Iciar Montes y Araceli Montero. 70

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Junto a Seba Nerone al otro día de ganar su primer reconocimiento importante. El Olimpia de Plata que se le entrega al deportista más destacado de cada deporte en la Argentina.

El grupo al que entrene durante muchos años. Trabajábamos mucho y la pasábamos muy bien. De ahí se formó un grupo de amigos que perdura hasta hoy día. Arriba, Seba Nerone, Pali Castro, Facundo Zunino y Rodrigo Ovide. Sentados están Guga Vazquez, Diego Cipriano, Fernando Cavalleri y Cutu Perez Millán. 71

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Mi primera experiencia como Capitán del seleccionado femenino en Méjico DF en el año 2002. Salimos campeones mundiales en una final increíble contra España. Yuyo Céspedes, Adriana Costagliola, Mariana Pérez, Inés Alvarez, Paula Eyheraguibel, María José Sbrascini y Cata Tenorio.

De entrenador y coach de Gaby Reca y Sebastián Nerone en el torneo de Sotogrande (España) en el año 2006. Estuve 3 temporadas junto a ellos acompañándolos en el circuito cuando eran la pareja 2 del mundo. 72

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~ · EL ENTRENAMIENTO INVISIBLE · ~ Muchos jugadores entrenan muy bien en la cancha, juegan partidos y les gusta entrenar. Resulta lógico que a quien le gusta jugar al pádel, en principio no le molestará hacer canastos, entrenar golpes y jugar partidos. Pero eso a veces es lo más fácil. A esto hay que sumarle la preparación física específica, que hoy es un tema excluyente en un deportista. Pero aunque eso parezca mucho no basta. Se le llama entrenamiento invisible a aquellos factores que no se ven pero que son muy importantes en el rendimiento final. Estos son: El descanso y la calidad del sueño La alimentación Los suplementos deportivos o ayudas ergogénicas Los masajes y prácticas fisioterapéuticas El entrenamiento mental El entrenamiento de un deportista no termina cuando acaba su sesión de preparación física o en cancha, es un estilo de vida que requiere de mucha constancia y conducta. Es todo un trabajo para dentro y fuera de la cancha.

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Si bien esta frase no me gusta ya que es un poco prejuiciosa y no siempre es verdad, en muchos casos es certera. Contar en un centro de entrenamiento con la presencia de un jugador profesional, o que quien lo dirija haya sido un buen jugador, eleva sin dudas la calidad del centro y aumenta también la posibilidad de formar buenos jugadores. Como les contaba, cuando hablaba de la formación técnica de menores, los modelos son clave dentro del aprendizaje. Para eso es importante que ese jugador sea un buen ejemplo dentro y fuera de la cancha. Debe ser un profesional en los entrenamientos visibles e invisibles. Si sos un jugador joven que quiere mejorar, intentá acercarte a donde están los mejores. Ofrecete como sparring (peloteador), o a colaborar en lo que sea. Si podés entrená con quienes tengan ese ambiente y donde se respire profesionalismo. Todo el contexto ayudará a que uno tienda a superarse o si no, deba resignarse a quedarse… En febrero de 2012 hicieron la pretemporada en Buenos Aires en “El Monasterio” Gaby Reca y Agustín Gomez Silingo. Junto a ellos entrenaron Fabricio Cattáneo y Juan Manuel “Guga” Vázquez. Si bien estos últimos ya habían entrenado conmigo y otros jugadores profesionales, lo primero que les dije es que aprovecharan la presencia de Gaby al máximo. Que escucharan, observaran y aprendieran todo lo que pudiesen de uno de los más grandes jugadores que dio el pádel, y que aprovecharan la oportunidad de compartir una pretemporada. Meses más tarde llegué a Madrid donde estuve unos días pa rando en la casa de Seba Nerone. Un día vino Eduardo, mi amigo 74

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y socio en Padelstat, y compartió una jornada con nosotros. Seba había regresado de entrenar, luego almorzó, durmió una siesta para luego ir al fisioterapeuta y más tarde seguía entrenando. Al terminar el día, Edu me comentó que le había llamado la atención la conducta que Seba tenía en sus rutinas diarias. Un profesional está todo el día enfocado en su trabajo, no es solo pelotear y jugar partidos. Ser un jugador profesional es un estilo de vida.

" Estén cerca de los mejores y serán mejores "