QUEDA PROHIBIDO
23 de abril de 2012 ies Fernando de los ríoSs Fuente Vaqueros - Granada
DERECHOS DEL LECTOR
Q
ueda prohibido llorar sin aprender, levantarte un dĂa sin saber que hacer, tener miedo a tus recuerdos.
Q
ueda prohibido no sonreĂr a los problemas, no luchar por lo que quieres, abandonarlo todo por miedo, no convertir en realidad tus sueĂąos.
Q
ueda prohibido no demostrar tu amor, hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor.
Q
ueda prohibido dejar a tus amigos, no intentar comprender lo que vivieron juntos, llamarles solo cuando los necesitas.
Q
ueda prohibido no ser tĂş ante la gente, fingir ante las personas que no te importan, hacerte el gracioso con tal de que te recuerden, olvidar a toda la gente que te quiere.
Q
ueda prohibido no hacer las cosas por ti mismo, tener miedo a la vida y a sus compromisos, no vivir cada dĂa como si fuera un Ăşltimo suspiro.
Q
ueda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte, olvidar sus ojos, su risa, todo porque sus caminos han dejado de abrazarse, olvidar su pasado y pagarlo con su presente.
Q
ueda prohibido no intentar comprender a las personas, pensar que sus vidas valen mĂĄs que la tuya, no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.
Q
ueda prohibido no crear tu historia, no tener un momento para la gente que te necesita, no comprender que lo que la vida te da, tambiĂŠn te lo quita.
Q
ueda prohibido no buscar tu felicidad, no vivir tu vida con una actitud positiva, no pensar en que podemos ser mejores, no sentir que sin ti este mundo no serĂa igual.
INVITAMOS A CONTINUAR EL POEMA
TE ANIMAMOS A CONTINUAR EL POEMA TE INVITAMOS A CONTINUAR EL POEMA
Qu Qu
eda prohibido
eda prohibido
Qu Qu Qu Qu
eda prohibido
eda prohibido
eda prohibido
eda prohibido
DERECHOS DEL LECTOR Daniel Pennac En materia de lectura, nosotros, «lectores», nos permitimos todos los derechos, comenzando por aquellos que negamos a los jóvenes a los que pretendemos iniciar en la lectura. 1. 2. 3. 4. 5. 6.
El derecho a no leer. El derecho a saltamos las páginas. El derecho a no terminar un libro. El derecho a releer. El derecho a leer cualquier cosa. El derecho al bovarismo1 (enfermedad de transmisión textual) 7. El derecho a leer en cualquier sitio. 8. El derecho a hojear. 9. El derecho a leer en voz alta. 10. El derecho a callarnos. la imaginación brota, los nervios se agitan, el corazón se acelera, la adrenalina sube, se producen identificaciones por doquier, y el cerebro confunde (momentáneamente) lo cotidiano con lo novelesco. 1
m
ies Fernando de los rĂos Fuente Vaqueros - Granada