Volumen II, Nr 9
Tu O b r a Catecismo vs. Discipulado L a Te o l o g Ă a d e l a P ro s p e r i d a d
Sobre el Miedo y la Ansiedad P a u l
T r i p p
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TABLA MÉTODO DE ESTUDIO
ARTÍCULO
3
ODIUM HUMANI GENERIS
Por Roberto K R E J C I R
P OR W ENCESLAO C ALVO
CONSEJERIA
8 5
C ATECISMO VS. D ISCIPULADO
S OBRE EL M IEDO Y LA A NSIEDAD P OR P AUL T RIPP
Por J. A. Barrera
MISCELÁNEA
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DICCIONARIO DE LA TEOLOGÍA DE LA PROSPERIDAD Por J E F F S M I T H
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Odium humanis generis: nerones cristianos Wenceslao Calvo Uno de los documentos más antiguos, aparte de los escritos del Nuevo Testamento, que demuestran la existencia de la figura histórica de Jesús es el que nos ha dejado el historiador romano Tácito, quien describiendo los sucesos de la persecución de Nerón contra los cristianos alude a que tal nombre "les venía de Chrestos, el cual, durante el reinado de Tiberio, fue condenado al suplicio por el procura-
cas de su fe radicaba en el insólito mandato de Jesús de que sus seguidores amaran a sus enemigos. Es decir, en el caso de los cristianos resulta poco comprensible sostener tal clase de acusación. ¿Cómo iban a odiar al género humano quienes habían sido aleccionados por su Maestro y Señor, mediante su enseñanza y ejemplo, a que amaran al género humano?
dor Poncio Pilato."
Pero lo que parece una contradicción se resuelve
Al explicar las razones
y explica fácilmente.
de la persecución Tácito menciona principal-
En primer lugar porque
mente dos: La primera
una cosa es la intención
es que Nerón descargó
que parte del agente emi-
en ellos la responsabili-
sor de una determinada
dad del incendio de Ro-
acción y otra la recepción
ma y la segunda es que los cristianos eran notorios por su "odio contra el género humano". La primera razón es coyuntural y está sustentada por la segunda, que no depende de circunstancias sino de la noción que el vulgo tenía sobre los cristianos. De ahí que Nerón se aprovechase de tal noción para lanzar su campaña contra ellos. La frase en latín es odium humani generis , siendo equivalente a la palabra griega misanthropia , que se ha vertido en español como misantropía. No era la primera vez que tal acusación se lanzaba contra una comunidad religiosa, dado que ya se había empleado contra los judíos. Pero destaca el hecho de que se usara contra los cristianos, si tenemos en cuenta que una de las característi-
con la que se toma por parte de los destinatarios de la misma. Una cosa es el móvil que impulsa a alguien a actuar y otra la interpretación que de tal motivación hace aquel hacia quien va destinada tal acción. Pero si además tenemos en cuenta que existe un modelo vigente de principios y verdades en toda sociedad por el que se juzga y condena todo lo que no concuerde con tal modelo, entonces resulta fácil explicar el por qué de la acusación contra los judíos y también contra los cristianos, ya que ambos se movían en una dirección opuesta a los cánones imperantes en aquella civilización greco-romana. El mensaje de la fe cristiana contenía una denuncia sin paliativos de mucho de lo que era (Continúa en la página 4)
TU OBRA
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mano, lo mismo que nuestros antepasados. (Viene de la página 3)
considerado normal por aquella civilización. Lo que los paganos llamaban libertad era entendido por los cristianos como mero desenfreno; lo que los primeros concebían como verdadero lo entendían los segundos como erróneo; lo que aquéllos consideraban grande y digno lo contemplaban éstos como ruin y grosero. No es de extrañar que, a pesar de los mandatos para amar a todos, judíos y cristianos fueran considerados aborrecedores del género humano, pues sus doctrinas y manera de entender la vida chocaban de frente con lo establecido. Si se hubieran adaptado o se hubieran conformado a lo hegemónico habrían sido bien considerados. En el capítulo 11 de Apocalipsis se hace mención
Esa clasificación va a suponer, a su vez, un aborrecimiento en contra nuestra por parte de aquellos que odian lo que representamos. Aunque en verdad no debemos sorprendernos, porque ya nos lo avisó Jesús: "Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros." (2) La alternativa a la que nos veremos abocados será la de sufrir el vituperio asociado con la frase odium humani generis o la de negar nuestra identidad, para recibir la aprobación del mundo. Algo a lo que, en definitiva, los que nos precedieron ya estuvieron abocados. 1. Apocalipsis 11:10 2. Juan 15:18
de dos testigos de Dios que durante un tiempo estipulado ministrarán en la tierra. Todo parece indicar que ambos son evocaciones de Moisés y Elías, por el tipo de prodigios que realizan. Sin embargo, suscitan un rechazo tan grande que
(Viene de la página 12)
sólo con su muerte queda satisfecho el antago-
de ellos (1 Cro 16.22), usado fuera de contexto para
nismo existente contra ellos. La alegría que pro-
colocar miedo en los fieles.
duce su muerte se debe a que "estos dos profe-
V – VIDA ETERNA: algo con lo que no se debe tener
tas habían atormentado a los moradores de la
preocupación. Lo que importa es el “aquí” y el “ahora”.
tierra." (1) Aunque el texto no lo diga estos dos perso-
W – WHAT IS IT?: It´s an embromation. ( ¿¿Qué es
najes, sean figuras individuales o corporativas, son con-
eso?? ¡Es engatusar!)
siderados aborrecedores del género humano, aunque en
X - XÔ!: interjección (Brasil) utilizada para espantar la
realidad son auténticos siervos de Dios. Y es que aque-
miseria.
llos a quienes va dirigido su ministerio son moradores
Y – YES, WE CAN!: nada a ver con Barack Obama.
de "la grande ciudad que en sentido espiritual se llama
Para los adeptos de la Teología de la Prosperidad: ¡Si,
Sodoma y Egipto", lo cual muestra su depravada condición moral y espiritual. Al no estar dispuestos a arrepentirse y aceptar el mensaje que traen estos dos personajes, es por lo que alimentan una reacción tan hostil hacia ellos. Estamos viviendo en tiempos en los que en na-
nosotros podemos todo! ¡Tenemos poder en nuestras palabras! En fin… Z - ZOE: Usted es un pequeño-dios andando sobre la Tierra, así como Jesús lo fue (dicen ellos). Al final, la propia vida de Dios está en usted! (Zoe: libro propagador de estas herejías, escrito por Kenneth Hagin)
ciones donde anteriormente hubo principios cristianos, pero que ahora se han cambiado por principios paganos, los cristianos vamos a ser considerados aborrecedores del género hu-
¡¡¡Soli deo Gloria!!!
S
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Catecismo vs. Discipulado: Por qué no funciona el catecismo Aún los católicos se dan cuenta. Tómese el trabajo de leer este texto, que, aunque sea católico, podrá comprender más el discipulado evangélico.
P
ara entender cómo evangelizar hoy en día, lo primero que hace falta es entender la cultura en la que nos movemos. Tampoco está de más hacer un diagnóstico diferencial, para comprender la diferencia entre el modelo cultural en el que fuimos educados y la realidad actual en la que se mueven la inmensa mayoría de los mortales jóvenes. La generación de nuestros abuelos e incluso la de nuestros padres fue catequizada - que no evangelizada- a golpe de catecismo de Ripalda. La metodología era clara: enseñar unos contenidos a unos niños que recién despertaban a una incipiente madurez personal para recibir así la iniciación cristiana. Se daban por supuestas demasiadas cosas, entre ellas la fe personal del niño que recibía la iniciación. Para cuando yo recibí la preparación la sociedad ya había cambiado mucho con respecto a la de mis abuelos, aunque todavía se vivía un modelo educativo no tan distinto del que ellos vivieron. Todo este cambio se aceleró a un ritmo vertiginoso hasta llevarnos a la situación de postmodernidad en la que vivimos, y mucho me temo que la metodología de la Iglesia en cambio ha seguido siendo la misma de la modernidad. Si entendemos esta clave podremos comprender mucho de lo que con este post quisiera plantear. En el Congreso de Pastoral Juvenil de Valencia Mons. Carlos Osoro hizo una valiosísima distinción entre Primer Anuncio y Catequesis, para decir que ambos se complementan y juegan su papel dentro de la evangelización de la persona. Aunque esta distinción parezca una obviedad a un nivel teórico, lo cierto es que está muy poco asimilada a nivel práctico. Esto se traduce en que muchas veces tanto pastores concretos como movimientos se saltan a la torera el primer anuncio y se dedican a catequizar, llamando evangelización a lo que es el segundo paso y no el primero. En otras palabras hablan un lenguaje para iniciados y convencidos a unas personas alejadas que no han tenido una experiencia de conversión (la conversión es el convencimiento de nuestro pecado (Jn 16,8) y el testimonio acerca del Señorío de Jesucristo (1 Cor 12,3) dados por el Espíritu Santo jun-
to con el acto voluntario de fe de abrir la puerta a Jesucristo de Apocalipsis 3,20) Aunque en sentido amplio todo lo que hace la Iglesia sea evangelización - lo dice la Evangelii Nuntiandi - lo cierto es que si queremos hablar de Nueva Evangelización tenemos que empezar por el Primer Anuncio. Hasta aquí el avance de lo escuchado en Valencia, que al fin y al cabo es tan viejo como la Iglesia misma pero que había caído en desuso pastoral. Ahora bien, una vez convencidos de la necesidad de hacer Primer Anuncio, entramos en el siguiente problema: ¿hacemos primer anuncio al estilo de nuestros abuelos o lo hacemos a estilo de nuestros jóvenes de hoy? Porque el estilo anterior, el de la modernidad, está íntimamente ligado al del catecismo. Consiste en el discurso. A es verdad luego tienes que creer A. Para que tú creas yo te lo enseño, y tú lo aprendes de memoria. Por lo tanto todo el peso - que no la preocupación- de la acción pastoral se concentra en los contenidos de A y no tanto en la persona que aprende esos contenidos. Nos preocupa la persona pero ponemos el peso en los contenidos. Enseñemos la verdad, enseñemos el catecismo que nos habla de las verdades de fe, para que así el mundo crea en Jesucristo que es la Verdad. ¿Cuál es el problema de este planteamiento? Que repele a un joven postmoderno de hoy en día hasta el punto que le hace refractario a este mensaje de Verdad. Lo expresaba de esta manera Al Gordon, uno de los creadores de Worship Central: “esto es lo que la Iglesia ha hecho por años con los jóvenes: darles las “respuestas” sin ayudarlos a pensar ni fundamentar sus razones”. Es un modelo de respuestas por oposición a un modelo de razones. El modelo de la postmodernidad es un modelo de preguntas y por ende es un modelo de razones. Sólo es verdad lo que yo experimento. Dicho de otra manera: sólo es verdad lo que pasa por mi persona y es asimilado como experiencia propia. La razón última para un joven postmoderno no es la verdad, (Continúa en la página 6)
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(Viene de la página 5)
sino su experiencia personal y subjetiva de las cosas. Y precisamente en este terreno la Iglesia se ha sentido incómoda en nombre de no entiendo bien qué precauciones contra el sentimentalismo y la experiencia sensible que no son sino los ecos de toda la estética de Trento que arrambló con toda referencia subjetiva a la Fe en reacción a la reforma protestante. Pero quien tiene fe es el sujeto - aunque ésta sea razonablepor lo que la fides ha de ser personal y razonada. No se transmite la fe a base de libros, sino de persona a persona. No se entra en la dimensión de Jesucristo sin una relación con Él. La Iglesia es una comunidad de piedras vivas, no de sillares marmóreos y fríos. Precisamente en el terreno de la postmodernidad tenemos la oportunidad de ganar la partida allá donde se juega: la experiencia personal de Dios que salva es la experiencia última que toda persona necesita y anhela. Y todo el mundo se pregunta acerca de la misma, pues es un ansia que está inscrita en lo más profundo de nuestro corazón. Pero estarán conmigo los que han estudiado filosofía en que la clave de la mayéutica está en que el maestro se limite a preguntar. ¿Acaso Jesús no se calló? Últimamente me fascina leer el Evangelio de San Juan cuando Jesús declara: “Cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a TODA verdad”( Juan 16, 13) Un maestro que sabe que los discípulos tienen que llegar a la verdad plena por sí mismos (auxiliados por el Espíritu Santo) Un maestro que no da respuestas de catecismo, sino que interpela a los discípulos: “¿y vosotros quien decís que soy yo?” (Mt 16,15) Si nos damos cuenta Jesús nunca fue por ahí dando lecciones de catecismo diciendo que Él era Dios. Se ponía en la posición de Dios, hacía declaraciones indirectas y otras muy directas para un judío de la época (“Yo soy” Juan 8,58) pero las más de las veces eran los demás los que confesaban que Él era Dios: “tú eres el Cristo, el hijo del Dios vivo” (Mt 16,16) Era y es un Dios que tenía mucho de postmoderno pues como nos dice la Dei Verbum se dedicó a anunciar el mensaje del evangelio con “obras y palabras” (DV 2). Le gustaba preguntar y hacer, tanto como enseñar. Y lo que hacía era discípulos, no alumnos de catequesis que se aprendieran un contenido. Retomando el hilo anterior, la Iglesia de la modernidad se ha concentrado demasiado en las palabras, haciendo de la transmisión de la fe un discurso catequético que al confrontarse con el sujeto postmoderno se ha quedado hueco y huero de toda significación para quienes lo oían. Permítanme delinear otra clave. Se llama discipulado, y tiene que ver con lo que Jesús mandó: “Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mt 28,19) Durante muchos años hemos bautizado a todo lo que se mue-
Editor: José Nuñez Diéguez josedomingonunez@arnet.com.ar Martínez, Pcia de Buenos Aires Argentina ve… ¿pero cuántos discípulos hemos hecho? Tal como veo las cosas a día de hoy un catequizado no es un discípulo de Cristo. Tampoco una persona que recibe el Primer Anuncio se convierte automáticamente en un discípulo de Cristo. Hace falta un proceso, que algunos han venido en llamar discipulado, que es mucho más complejo y rico que la simple transmisión de unas verdades de fe a través de un discurso catequético. Se aprende a ser discípulo a los pies del maestro en el seno de la comunidad de los discípulos. Se aprende a hacer lo que Jesús hizo cuando Jesús envía a los discípulos (Lc 10) “de prácticas” Se aprende a ser discípulo con muchas horas de vuelo libre, confiando en que el Espíritu Santo es el que guía a TODA la verdad. Y eso no es sino una experiencia, cosa que cualquier joven postmoderno puede entender, la cual es radicalmente diferente del modelo de catequesis en el que nos hemos educado. No es lo mismo por tanto la catequesis que el discipulado. Y la catequesis, para ser lo que realmente está llamada a ser, debe ser “discipuladora” y “discipulante”. Debe crear discípulos, no alumnos que sepan dar respuestas. Y en esto estriba la dificultad actual en un momento en el que todo el mundo en la Iglesia quiere lanzarse a la Nueva Evangelización. Una Nueva Evangelización hecha con los paradigmas y parámetros de la modernidad es un simple maquillaje estético abocado al fracaso. Sería simplemente pretender poner una imagen joven a una vieja fórmula: una Iglesia preocupada en dar respuestas sin ayudar a las personas a encontrar sus razones para creer. Por eso si me dan a elegir entre catecismo y discipulado me quedo con el segundo. Lo prefiero porque estoy seguro de que todos los discípulos al final llegan al catecismo, y por lo tanto a las respuestas. En cambio he visto a muy poca gente empezar por las respuestas, seguir por el catecismo y hacerse discípulos. Al final todo es una cuestión de orden, no de demolición de cosas que en sí son buenas y tienen un gran potencial si se las pone en el lugar adecuado. José Alberto Barrera Marchessi, abogado español. www.religionenlibertad.com
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La Tabla del Método de Estudio del Dtr. Ricardo Krejcir
Escrituras: Capítulo y
Observaciones
Observaciones
Aplicación
título de lectura. Ora para que puedas esforzarte y haz un compromiso, observa todo el libro, capítulo y versículos.
Paso I & II: Ora y esfuérzate. Pasaje____________
¿Qué me está diciendo? “Revisa” la gramática y el estilo literario.
¿Qué significa? Atrévete a preguntar, aunque cometas errores, y utiliza herramientas de estudio. Haz las siguientes preguntas: “qué”, “cómo”, “quién”, “dónde”, “por qué”.
Identifícate emocionalmente. Busca respuesta a tus preguntas y permite que estas te afecten.
Paso IIIb & IV: Preguntas.
Paso V & VI: Conoce y Aplica.
Paso III: Observa Temas Bíblicos:
¿Cómo se aplica esto a mi persona?
Mis Preguntas:
¿Qué voy hacer? ¿Cuándo lo voy hacer?
Versos claves: Obediencia Palabras claves:
1. ¿Que nos esta diciendo este pasaje bíblico? 2. ¿Que significa para ti? 3. ¿Que Dios me esta diciendo? ¿Te sientes alentado y fortalecido? 4. ¿Que tipo de confesión y arrepentimiento se necesita cuando pecamos? 5. ¿Que tengo que cambiar en mi persona para que pueda aprender y crecer? 6. ¿Que esta interrumpiendo que los preceptos bíblicos afecten tu vida? ¿Que cosas están estorbando el que escuches a Dios? 7. ¿Como se aplica esto a mi persona? ¿Que voy a hacer respecto a esto? 8. ¿Que puedo modelar y enseñar? ¿Que Dios desea que yo comparta con otros?
ESCRIBE OTRAS NOTAS Y PETICIONES POR LAS CUALES HAY QUE ORAR: "Escucho y me olvido. Veo y me acuerdo. Al hacer, entonces comprendo."
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CONSEJERIA
Sobre el Miedo y la Ansiedad Paul Tripp
S
ally se preocupa por los niños todo el día mientras ellos están en la escuela. Roberto parece nunca dejar la carga de sus finanzas. Linda teme que nunca se va casar. Sara le tiene pavor a los dolores que convienen con el envejecimiento. Freddy constantemente se preocupa por lo que la gente a su alrededor piensa de él. Benjamín se preocupa de que él no será parte del equipo. María nunca es libre de la preocupación por su peso. Karina ha pasado muchas noches sin dormir preocupándose por su relación con Raúl. Como estudiante de último año, Elizabeth tiene un poco de pánico por lo que pasará después de la universidad. Susana admite que ella es algo germófoba. Claudio evita las multitudes, pero no quiere que nadie sepa. Beatriz tiene miedo de que Dios no la quiera, pero no habla de ello. Ricardo sabe que él pasa muchísimo tiempo preocupándose sobre perder su trabajo, pero él no logra mantener su mente fuera de eso. Alejandra se preocupa tanto por sus hijos adultos que teme que sus frecuentes llamadas los alejen de ella. A Pedro le fue muy bien en el seminario, pero sus sermones siempre están acompañados de ansiedad. Mariana se preocupa más de lo que sus compañeros piensan de ella que de sus notas. Nahuel se preocupa cada vez que se le informa que su jefe quiere verlo. La preocupación - está realmente en todas partes. Tal vez sea la experiencia que todos tenemos en común. Considere las personas mencionadas anteriormente. Ellos tienen dos cosas en común. Todos son creyentes que profesan y todos luchan con la preocupación. ¿Y usted? ¿Cuánta es la preocupación en su vida diaria? ¿En qué forma la preocupación le da forma a lo que usted hace y a lo que usted no hace? ¿Cómo interactúa la preocupación con la fe que tanto valoras? ¿Podría ser que la preocupación es una mayor influencia en su vida de lo que normalmente usted ha considerado? Tal vez la preocupación es uno de los secretos sucios de la iglesia. Tal vez nos hace tímidos, pasivos y dudosos cuando nuestra teología nos dice que tenemos todos los motivos para ser valientes, activos, y con confianza. ¿Podría ser que muchos de nosotros vivimos con una enorme brecha entre la confianza teológica que celebramos el domingo y el temor a nivel de la calle, la preocupación y la ansiedad que nos acompañan el resto de la semana?
¿Por qué tantos de nosotros nos preocupamos tanto? ¿Por qué no experimentamos el descanso del que el Evangelio está destinado a darnos? ¿Por qué tenemos noches sin dormir, estómagos nerviosos y días irritantes? ¿Por qué la preocupación entra por nuestra puerta tan a menudo? La preocupación y el mundo caído Tal vez su respuesta a las preguntas que he realizado es: "¡Pablo, me preocupo porque vivo en un mundo caído!" Es cierto que el mundo en que vivimos simplemente no funciona de la manera que el Creador quiso. Debido a esto, vivimos en un mundo donde el engaño, el peligro, y la decepción son realidades. La Biblia es muy honesta en su descripción sobre realmente qué tan quebrado está este mundo. Hay cosas en este mundo a las que se debe temer. Hay cosas que deben llamar su atención y causar su inquietud. Hay cosas en las que usted debe trabajar para evitar y proteger a sus seres queridos. Usted debe vivir cuidadosamente y en alerta. Vivir con las expectativas realistas que una comprensión bíblica de la caída de nuestro mundo ofrece es una cosa responsable y divina por hacer. Usted no debe ser ingenuo. Este lado del cielo, siempre debe recordar que el shalom (paz y la plenitud) que el Creador hizo ha sido hecho añicos. Cada día, de algún modo, de alguna manera, la ruptura de su mundo presionará sobre usted. Será de esta manera hasta que usted cruce al otro lado. Sin embargo, debe hacerse una importante distinción entre mirar la vida a través del lente honesto de la Escritura y vivir una vida de preocupación sutil y no tan sutil. En la Biblia, nos enfrentamos a la realidad de que en situaciones en las que el pueblo de Dios estaba experimentando algunas de las más duras realidades de la vida en un mundo caído, ellos experimentaron, en esos momentos, algo del más remarcable descanso del alma que la Biblia registra. Permítanme ofrecerles un poderoso ejemplo. Salmos 3 y 4 son salmos de mañana y tarde, escritos cuando David estaba huyendo por su vida y de aquellos que tomarían su trono. Ustedes conocen la historia de fondo. Fue Absalón, hijo de David, quien deseaba su trono. El ya se había ganado los corazones
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del pueblo de Israel, y ahora deseaba el reino de su padre. David sabía de qué se trataba. Esta era una monarquía: para que un hijo tomara definitivamente el trono de su padre, este tenía que morir. Por eso David huye por su vida con un pequeño grupo de hombres leales y se esconde en una cueva. Tal vez no hay una historia más desgarradora en las Escrituras: el pecado que rasga una familia aparte, el pecado que resulta en la sedición y posiblemente la muerte. En esta historia, usted está viendo el mundo caído en lo peor. Pero en el medio de todo, David no está paralizado por el pánico. Él no está impulsado por la preocupación. Él no está cautivo por el "qué pasaría si". No, David esta remarcadamente relajado. Mire lo que escribe desde la cueva: "En paz me acostaré y así mismo dormiré; porque sólo tú, oh Señor, me haces vivir confiado" (Salmo 4:8). 4:8). David está experimentando todo el peso de la decepción y el peligro de la vida en este mundo caído, pero no está lleno de ansiedad. Su corazón está en reposo y su cuerpo es capaz de dormir, incluso en medio de lo que rompería el corazón de cualquier padre. La historia de David y el salmo de David nos enfrentan a algo importante. Es lo que vamos a tratar en el resto de éste artículo. Aquí está: Las dificultades de la vida en este mundo caído son el motivo de nuestra preocupación, pero no la causa. Para entender la causa, hay que mirar más profundo. David estaba en una circunstancia que podría ser la ocasión para preocuparse mucho, sin embargo, no estaba temeroso o ansioso. Su descanso nos señala en donde se puede encontrar la ayuda para nuestra preocupación. La preocupación no es la consecuencia por lo que existe fuera de nosotros. No, la preocupación es la causa por lo que está pasando dentro de nosotros. Mundos encogidos y la preocupación Para entender por qué los cristianos tienden a preocuparse más de lo que alguien debería con nuestra teología de la vida cotidiana, voy a tener que llevarle a un viaje bíblico. Quiero comenzar con dos versos que ofrecen una visión espectacular de lo que el pecado hace en todos nosotros. Estos versículos empiezan a señalarnos por qué la preocupación es una lucha universal. "Pues el amor de Cristo nos apremia, habiendo llegado a esta conclusión: que uno murió por todos... que los que viven ya no vivan para sí mismos sino para aquel que murió por ellos y fue resucitado" (2 Cor. 5:14-15; el énfasis es mío). Aquí Pablo hace una estruendosa observación acerca de cómo el pecado fundamentalmente altera el enfoque de
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toda persona por la vida. Yo estaba destinado a vivir por algo mucho más grande que mi mismo. Fui creado para vivir para Dios - Su reino y Su gloria. Fui diseñado para hacer vertical mi identidad, significado y propósito, y mi sentido interno de bienestar. Fui hecho para obtener mi razón por hacer lo que estoy haciendo y mi descanso en medio de hacerlo de parte de Dios. Pero el pecado hace que cada uno de nosotros viva para sí mismo, es decir, reducir nuestras vidas al tamaño de nuestras vidas. El pecado nos lleva a reducir el campo de nuestros sueños y preocupaciones hasta nuestros deseos, nuestras necesidades y nuestros sentimientos. El pecado nos hace aterradoramente ensimismados, egocéntricos y automotivantes. ¿Qué tiene esto que ver con la preocupación? ¡Todo! Como resultado del pecado, ya no atamos nuestra paz interior a un Dios que es la definición de sabiduría, poder y amor y que nunca, nunca cambiará. No, sin darnos cuenta de lo que hemos hecho, comenzamos a buscar horizontalmente la identidad, significado y propósito, y nuestro sentido interno de bienestar. Vemos las situaciones rotas y en constante cambio y las relaciones de éste mundo caído para nuestro propósito y nuestro descanso interior. Cosas que no fueron diseñadas para darnos paz y sobre las cuales no tenemos control alguno se convierten en nuestro mesías de reemplazo. Les pedimos que hagan por nosotros lo que sólo Dios es capaz de hacer. Ya ves, esto es lo que sucede: las cosas importantes (como la familia, el trabajo, la vivienda, el dinero, etc) se convierten en algo muy importante para nosotros porque se transforman en los lugares que buscamos para descansar. Cuando lo hacen, no sólo no nos dan descanso, sino que se convierten en la razón de los ciclos interminables de preocupación, ansiedad y temor que, francamente, se encuentran en las vidas cotidianas de muchos creyentes. Su trabajo es importante, pero no debe ser la fuente de su identidad, y cuando lo es, se convierte en la causa de ansiedad interminable. Su matrimonio o amistades son importantes, pero no deben ser el lugar que usted busca para paz interior. Aquí es lo que las Escrituras nos mueven a decir. La preocupación que nos conduce o nos paraliza revela más sobre lo que hay dentro de nosotros que de lo que está fuera de nosotros. Aquí es donde creo que nuestro siguiente pasaje, Mateo 6:19-34, es muy útil.
(Continúa en la página 10)
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Reinos, tesoros, y la preocupación Mateo 6:19-34 es uno de los pasajes más conocidos de la Biblia acerca de la ansiedad y la preocupación. (¿Por qué no detenerse a leer el pasaje ahora mismo?) ¿Quién no está familiarizado con las palabras "¿Quién de ustedes, por mucho que se inquiete, puede añadir un solo instante al tiempo de su vida? (v.27) o "No se inquieten entonces, diciendo: "¿Qué comeremos, qué beberemos, o con qué nos vestiremos?" (v. 31). Cuando terminas este pasaje, ves de inmediato que es mucho más que un examen sobre la preocupación. Es realmente un detallado desembalaje de la guerra entre el reino de Dios y el reino de sí mismo. Esto es precisamente por qué dice lo que dice acerca de la preocupación. Nos enseña que detrás de cada momento de preocupación hay una guerra para el corazón. Esta batalla es sobre si nuestros corazones serán gobernados eficaz y funcionalmente por el reino de Dios o el reino del yo. A causa del pecado, nuestras luchas con el reino del yo son tan penetrantes y seductoras que Cristo pasa la mayor parte de su tiempo desembalando la dinámica de este reino (vv. 19-32). No es sino hasta la primera palabra del versículo 33, "Pero", que llegamos al giro en el pasaje y la llamada a vivir para el reino de Dios. Esencialmente, lo que Cristo dice es que el reino del yo está impulsado por una búsqueda de tesoros apegados a la tierra y necesidades llenas de ansiedad. El reino del yo reduce la vida a un catálogo de tesoros físicos y vivenciales, y a una lista de necesidades personales. En este reino vivo para asegurarme de que adquiero lo que quiero y suplo mis necesidades. Ahora, antes de que digas: "Bueno, Pablo, yo no vivo de esa manera!" déjeme preguntarle, ¿cuánto de su preocupación en el último mes tuvo algo que ver con el reino de Dios? Te animo a permitir humildemente que este pasaje sea un espejo en el que mires para ver cosas de ti mismo que no verías de otra manera. Cristo usa una palabra muy útil en este caso para las cosas que capturan nuestro corazón: tesoro. Piensa sobre esta palabra. Hay muy pocos tesoros de la vida que tienen un valor intrínseco. La mayoría de los tesoros tienen un valor asignado. Es por eso que el viejo proverbio dice: "La basura de un hombre es el tesoro de otro hombre." Por ejemplo, ¿por qué es que un billete de veinte dólares vale veinte dólares? No es debido a que contenga el valor de veinte dólares en tinta o papel. No, su valor es asignado. De la misma manera, usted esta asignando valor a las cosas en su vida. Es imposible ser un ser
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humano y no hacer esto. Jesús nos advierte que seamos cuidadosos con lo que valoramos, lo que llamamos nuestro tesoro controlará nuestros corazones, y lo que controla nuestros corazones controlará nuestro comportamiento. ¿Cómo se relaciona esto con la preocupación? La conexión es obvia y poderosa. La preocupación y el descanso siempre revelan los verdaderos tesoros de su corazón. Usted descansará más cuando lo que más atesoras está seguro, y te preocuparás más cuando lo que más atesoras está en riesgo. ¿Qué revela tu mundo de preocupación acerca de los verdaderos tesoros de tu corazón? Pero, en este pasaje, Jesús usa otra categoría provocativa - necesidad. Tu vida está siempre conformada por lo que te dices a ti mismo que necesitas. Si la necesidad significa "esencial para la vida", el llamar a algo una necesidad es un compromiso significante del corazón. Si estás convencido de que algo es una necesidad, entonces parece correcto el esperar que lo tendrás y parece natural el preocuparse de que podrías no obtenerlo. Quizás una de las palabras mas descuidadas utilizada por los seres humanos es la palabra necesidad. La gran mayoría de las cosas que llamamos necesidades no son necesidades. Y Jesús argumentaría que las cosas que son verdaderas necesidades nuestro Padre celestial las proveerá con gracia. Así, la asignación de necesidades se conecta a la preocupación de dos maneras. En primer lugar, tenderás a preocuparte cuando has fijado la vitalidad de tu vida a cosas que en realidad no necesitas y no puedes controlar siempre. Y en segundo lugar, tenderás a preocuparte ante la necesidad legítima cuando te olvidas de tu Padre celestial y su siempre fiel pacto de amor. Tu Padre es soberano, sabio, lleno de gracia y poderoso. Él gobierna sobre todas las cosas por el bien de su iglesia (Efesios 1:15-23). “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?” (Romanos 8:3132)? El descanso y la guerra Estoy profundamente convencido de que el descanso personal real y duradero del corazón nunca se encuentra en la facilidad de las circunstancias. Incluso en la mejor de las situaciones en Este mundo caído, tu corazón será capaz de encontrar razones para las cuales preocuparse. El reposo interno del alma y la paz duradera en el corazón sólo son encontradas cuando Jesús y Su reino son tus tesoros más altos y profundos. Cuando pones tu identidad en Sus nunca cambiantes manos, cuando en(Continúa en la página 11)
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cuentras tu significado y propósito en el trabajo imparable de Su reino, y cuando pones tu sentido interior de bienestar en el sólido fundamento de Su promesa de satisfacer todas tus necesidades, serás capaz de descansar, aún cuando las situaciones y relaciones que te rodean estén rotas. El derrotar la preocupación no es acerca de la esperanza de que mañana será mejor. No, el derrotar la preocupación es acerca de ser un buen soldado en esta guerra más profunda para el corazón. Se trata de la lucha contra la tentación de colocar la paz de tu corazón en las cosas que, por su propia naturaleza son temporales y, por tanto, no están orgánicamente diseñadas para darte paz duradera (véase Mat. 6:19). Se trata de alimentar diariamente tu alma con las promesas y las provisiones de tu Padre celestial. Se trata de tener cuidado especial antes de nombrar algo una necesidad. Y se trata de vivir para algo más grande que tú. Se trata de dar el amor y el interés de tu corazón al Rey y Su reino y luchar contra el instinto de construir un reino liliputiense por tu propia cuenta. El reino del yo nunca te dará descanso por que no tiene la capacidad de satisfacer los deseos de tu corazón. En la cueva, David tenía razón cuando dijo: "Porque sólo tú, oh Jehová, me haces vivir confiado" (Salmo 4:8) Es como si David estuviera diciendo, "¡Mi paz no se encuentra en lugares, relaciones o circunstancias, sino que se encuentra en el Señor. Debido a que lo es, yo soy tan libre de preocupaciones en esta cueva tal y como yo estaba en el palacio!" Sí, David fue afligido como cualquier padre lo hubiera sido, y no, él no sabía cómo las cosas iban a salir, pero en medio de sus preguntas y en medio de su dolor, era un hombre con un corazón en reposo, tanto así que era capaz de dormir. La preocupación y el descanso siempre revelan los verdaderos tesoros de nuestros corazones, y en esta batalla no estamos solos, porque el Rey a quien estamos llamados a servir también es Emmanuel. El está siempre con nosotros y lucha por nosotros por Su gracia. Traducción por Ileana Mattison
Devocional Jonás 1.2 “Anda, ve a la gran ciudad de Nínive y proclama contra ella que su maldad ha llegado hasta mi presencia” Jonás 1.2 “Dios es Señor de todas las naciones”. Salmo 57.8 Jonás le dijo al rey que debe expandirse porque es voluntad de Dios según nos relata en 2 Reyes 14.25, pero en el momento de su llamado, su nacionalismo le juega en contra al ver la soberanía absoluta y universal de Dios. Dios también es Señor de Nínive. Esto no le agrada al profeta cuando tiene que pensar que Dios es Señor de todo, porque quiere condicionar este Señorío siempre y cuando signifique un beneficio a Israel. Vemos el marco limitado de su obediencia y lo ridículo que somos muchas veces cuando queremos que Dios se adecue a nuestro molde. Es aquí cuando huimos de nuestro Dios al que decimos servir. Nosotros como Jonás también tenemos nuestras Nínives. Se nos enseña hacer discípulos e ir a todas las naciones, pero muchas veces nos encontramos luchando contra Dios, limitando el alcance de la gracia divina. Hablamos de ir a todos lados, pero en la práctica hay determinadas Nínives que no queremos abordar o no salir de “nuestra tierra”. Decimos de estar dispuestos a ir donde Dios nos envíe, pero siempre y cuando sea gente como nosotros. No queremos meternos en determinados campos y Dios os dice que la razón por la cual nos quiere enviar es porque “su maldad ha llegado hasta mi presencia”. Nos negamos a ir a Nínive y el resultado es que Nínive sigue andando por sus caminos de destrucción. Por un lado afirmamos tener una excelente teología como Jonás (capítulo 1.9), pero en la práctica queremos que Dios nos sirva a nosotros y nos desentendemos de los demás. Le pedimos que actúe de determinados modos y solo en ciertos ámbitos. Solo para nuestros beneficios. Si Jonás parece ridículo, desobediente, cuando más nosotros cuando actuamos de la misma manera. Dios actúa con nosotros o sin nosotros, pero si lo hace sin nosotros, nos perdemos la bendición de estar unidos a su propósito. Oración: Señor, ayúdame a ser obediente y estar disponible a ir donde tu me envíes.
MISCELANEA
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DICCIONARIO DE LA
TEOLOGÍA DE LA
P R O S P E R I D A D:
citado con corrección. Bien de vez en cuando… Raramente, yo diría… K- K. H.: Las iniciales del papa. (Kenneth Hagin, fundador de este movimiento) L – LAVADO CEREBRAL: destrucción de la capacidad de los fieles de hacer reflexiones racionales, con la intención de transformarlos en esclavos del liderazgo. M – MAMON: el único dios. N – NUEVO TESTAMENTO: Algo interesante. Ha-
d e s d e la “ a ” h as t a la “ z ”
bría que leerlo. Solamente que en el Antiguo hay nombres mejores para campañas: “Campaña de la Fe de Abraham”, “ayuno de Gedeón”, “hoguera Santa del
A – APÓSTOL: es aquel que, cansado de ser pastor, se
Monte Sinaí”, “Las siete semanas del manto de Elías”,
intitula obispo y, cansado de ser
“Ayuno de Caleb”, y así su-
obispo, quiere ser llamado por ese
cesivamente.
título (a veces, auto- titulado). Su
O – OFRENDA: la palabra
próximo paso en la jerarquía ecle-
-clave del culto. Es a través
siástica es recibir el epíteto de vice-
de ella que usted mueve el
Dios.
corazón de “dios”.
B – BENDICIÓN: aquello que,
P – PASTOR: alguien que
supuestamente, se puede comprar
posee refinada labia y es
mediante la entrega de determina-
profundo conocedor de téc-
da cantidad en un sobre. Pero,
nicas de venta. No es nece-
atención: el simple hecho de entre-
sario que conozca mucho la
gar el sobre no es garantía de la
Biblia. También conocido
bendición. Puede ser que, por falta de fe de su parte,
como animador del auditorio, sabe anunciar productos
usted no reciba.
diversos como nadie más. Es un apóstol en potencial.
C – CREYENTES: o clientes. Consumidores en poten-
Q – QUEMAR: es lo que hacen con los pedidos de ora-
cia.
ción. Tal vez porque acrediten que, si no los quemaren,
D– DIOS: ser autómata (manejable) para quien usted
el pedido no va ser atendido.
“exige”, “determina”, y él tiene que obedecer. No se trata
R – RHEMA: “determine” la victoria y “tome pose-
del Dios Todo Poderoso y soberano del evangelio.
sión”. Al final, usted todo lo puede a través de su confe-
E – EVANGELIO: mero pretexto para la difusión de
sión positiva. (Centro de formación y propagación de
doctrinas ilegitimas y explotación de la fe.
esta teología)
F – FE: sentimiento que lleva al fiel a colocar $ 1000,00
S – SALVACIÓN: casamiento, casa nueva y auto del
en un sobre y entregarlo al “hombre de dios”.
año.
G – GRACIA: ¡olvídela! Nada en este mundo es por
T – TIEMPO (templo): es dinero.
gracia.
U – UNGIDO: clase “especial” de personas en quien
H – HERMENÉUTICA: El arte de distorsionar textos
no se debe tocar y que no se debe corregir o criticar, por
bíblicos.
más que estén errados. Al final, “hay de aquel que tocare
I- IGLESIA: hipermercado de la fe. Cuanto mayor es la
en mis ungidos”. Además, ese es el versículo preferido
ofrenda, mayor es la promesa de bendición. J- JESUS: personaje bíblico que, de vez en cuando, es
(Continúa en la página 4)