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EL MILIARIO EXTRAVAGANTE
BOLETIN TRIMESTRAL PARA EI, ESTUDIO DE LAS VÍAS ROMANAS Y orRos rEMAS DE GEocRAr'Íe ursrózuca
ISSN:0214-1051 Depósito Legal: CA 613/88
Editor, director, redactor-jefe, adminishador y mecanógrafo : Gonzalo Arias Los Rosales, 20 29380 Cortes de la Frontera (Málaga)
4499 Fax:95 215 4473 Coreo electr.'. gzlarias(Ej et. es S itio ll/E B : http://web.j et.es/gzlarias Teléfono: 95215
Cuurta Epoca
N',84 Marzo de 2003 Secretaria:
Hilde Dietrich de Arias
JUSTO A TIEMPO El Miliario Extravagante fue "intermitente" largo tiempo, y se comprometió a ser "trimestral" sólo apartir del número 59. Desde entonces no sólo hemos mantenido nuestro compromiso, sino que más de un número se adelantó a la fecha prevista de aparición. Esta vez hemos andado un poco apurados, pero confiamos en que este número esté en manos de los suscriptores antes de fin de mes. Justo a tiempo.
SUMARIO Página Poblamiento y caminos antiguos en el Campo de Gibraltar, por Domin go ly'rariscal et al. Apostillas del director ElPuente de Talamanca, por Federico González Couto Apostilla del director LaYía Vadiniense en la Cantabria romana, por David Martino García La ubicación del Puente de Segovia y los caminos a los que servía en época medieval, por Jesús Rodríguez Morales Aposti llas levemente polémicas Vías romanas del Limousin y su entorno. Comentario y divagación Abóbriga y el Monte Medulio. Comentario Un viejo estudio de las vías entre el bajo Miño y la costa aflántica. Comentario Caminos conquenses. Comentario La via Cástulo-Saetabi s. Comentario Alcácer do Sal. Breve comentario Política viaria en Hispania. Breve reseña Vías del Sur de Lusitania. Complemento de comentario La Hoja J-30 de la T.I.R. Comentario Adiós a José María Almendral Lucas Lo que dicen nuestros corresponsales Ecos de "Los caminos del Muradal" Ciudades y vías en el Convento Cluniense Autovía yersus calzada romana Leído en la prensa Rehabilitación de la calzada del lregua Miliarios en la región de Évoroa Actualización de I Map a-Indi ce
2 5
6 6 7 13
l5 17 21
23 25
2l 28 28 29 30 30 31 31 31
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Poblamiento y caminos antiguos en el Campo de Gibraltar Domingo Mariscal Rivera, Ldo. en Geografia e Historia María Isabel Gómez Arroquia, Arqueóloga Margarita García Díaz, Arqueóloga, Directora del yacimiento de Carteia Francisco Luis Torres Abril, Ldo. en Ciencias Geológicas
El Miliario Extravagunfe ha tenido qcceso al trabajo de estos cuatro qutores Íifulado "Pautas de poblamiento en el Campo de Gibraltar durante la antigüedad", que se encuentra actualmente en prensa y aparecerá en breve en la revista Almoraimu, n" 29, Algeciras. Debidamente autorizados, nos complacemos en ofrecer a nuestros lectores el "Resumen" con que los autores encabezan el estudio, la sección sobre "Las vías de comunicación", el mapa de conjunto de la redviariay las "Conclusiones". Las otras secciones de que consta el estudio son "Metodología y zona de estudio", "Yacimientos prerromanos", "Yacimientos romanos" (zona costera, ciudades costeras, factorías de salazón, salinas y alfares, zona interior, ciudades del interior, las villas) y una amplia Bibliografia. Hay también otros mapqs, en los que aparecen numerados y relacionados todos los yacimientos.
RESUMEN
A la luz de los últimos
descubrimientos arqueo-
lógicos, que son, en gran parte, el resultado de varios proyectos de trabajo, entre ellos el que estamos llevando a
cabo los firmantes de esta comunicación, confitmamos diversas hipótesis sobre el poblamiento antiguo enlazona de estudio y aportamos nuevas perspectivas en aspectos
novedosos como
el poblamiento rural, la articulación
económica del territorio y la red de vías de comunicación, que, en gran medida, han perdurado hasta la actualidad. Se dan a conocer más de 50 yacimientos inéditos y se
plantea una posible articulación económica y poblacional
del territorio vertebrada en tres ejes:
con ciudades portuarias
e
l) Línea de costa, y pequeños
industriales
asentamientos dedicados fundamentalmente a la pesca, a las salazones de pescado y a otras actividades artesanales relacionadas con estas últimas (salinas y alfares) 2) Valles de los ríos, con una explotación agropecuaria del territorio
mediante unidades productivas del tipo villae, en ocasiones relacionadas con el proceso de colonización posterior a la conquista. 3) Vías de comunicación, con los enclaves antiguos relacionados con ellas y las ciudades
que cumplían una función de control administrativo y estratégico de las principales rutas.
tradicionales. Diversos autores, desde hace muchos años, han considerado esta red de comunicación como muy antigua, anterior incluso a la romanización, y en algunos casos, con origen en los pasos prehistóricos utilizados para comunicar la costa con el interior montañoso. (Arias,
1988; Silliéres, 1988; Mariscal, 1997; Sáez, 19971' Álvarez,1998); Lo que no deja de ser lógico, por otra parte,ya que estas vías utilizan los valles, collados y otros
pasos naturales que, muchas veces, son
los
únicos
caminos posibles para comunicar distintas zonas.
los
Si para buscar los asentamientos romanos utilizamos
caminos tradicionales, han sido luego
estos
yacimientos los que nos han facilitado la tarea de trazar sobre el papel el itinerario de las vías antiguas. En la mayor parte de los casos la ubicación de los yacimientos
sobre el mapa estaba dibujando, ante
nuestros
sorprendidos ojos, el discurrir de los caminos.
Esta red comunicativa disponía probablemente de viales primarios y secundarios. Los principales unían las ciudades de la comarca entre sí y con otras zonas del exterior. También existía una amplia red de caminos menos importantes que servía de nexo de unión entre asentamientos menores. Creemos poder afirmar que muy pocos núcleos rurales carecían de un camino cercano o podían considerarse incomunicados, tal debió ser la complejidad de esta red viaria.
LAS VÍAS DE COMLINICACION Ya dijimos al principio que una de nuestras premisas para la búsqueda de yacimientos arqueológicos romanos fue seguir el trayecto de las vías pecuarias y caminos
184)2
El nudo de comunicaciones más importante era la ciudad de Carteia, donde confluían las dos principales vías de la comarca: la que proveniente de Corduba, discuría hacia el sur pasando por Acinipo y Oba; y la que, desde el Este, la unía con Malaca, a través de Barbésula y después de Carteia se dirigía hacia el Oeste y
se
bifurcaba en varios ramales para atravesar las montañas
occidentales.
1.- Las vías Norte-Sur I .I
pasando por
caminos ufilizaba como paso
nafural los valles del Hozgarganta y el Guadarranque. A lo largo ellos existe un buen número de villas a ambos lados del trazado de la vía, algunas bien conocidas desde antiguo (Marchenilla, Venta Conejo, Almoraima, Cotilla), otras, hallazgos más recientes. El paso de un valle a otro se iniciaba en un punto cercano al actual cruce de la carretera A-369 con la carretera que lleva al Tesorillo (CA-5 13). En este nudo se encuentra la importante villa de Venta Conejo. Desde aquí se desviaba un ramal que se
el curso, primero del Guadiaro. Numerosos yacimientos cercanos a la via así lo confirman. Desde el cruce, el camino principal hacia Carteia pasaba a la dirigÍa
a
Barbésula, siguiendo
Hozgarganta
y luego del
cuenca del Guadarranque por el pequeño collado de Santa
Clara,
hacia
y bajando por el valle se dirigía por terreno llano la Bahía, siguiendo aproximadamente el trazado
actual de la caretera. El camino entraba en su tramo hnal probablemente buscando el pequeño valle del Arroyo de la Madre Vieja (San Roque), ya que debía rehuir la gran zona de marismas que existiría en el entonces más amplio estuario del Guadarranque, como han demostrado las recientes investigaciones sobre la antigua línea de costa. (Mancebo, 1995) Pensamos que coincidiría aproximadamente con la carretera que enlaza actualmente la ciudad de Carteia con la N-340, justo en el enlace que hay junto al mencionado arroyo, como atestiguan los yacimientos situados a su margen.
Antes de entrar en el valle del Hozgargarúa, a la alfiira de San Pablo de Buceite, varios ramales comunicados entre sí por caminos secundarios bajaban hacia el mar utilizando el curso del río Guadiaro, hacia las ciudades de Barbésula o Carteia. Uno de esos ramales,
coincidía probablemente con el antiguo "camino de Gaucín a Algeciras" (Arias, 1988). Discurriendo por la cima de las lomas que bordean la margen izquierda del río, esta ruta se dirigiría hacia el sur para entrar en la Bahía de Algeciras por la Siera del Arca y el Corlijo Albalate. A lo largo de todo su recorrido también hay numerosos yacimientos romanos.
1
.2.
- Ob a-Lacip o-B arbésula
Desde
la vía principal (Corduba-Oba-Carteia)
el Cortijo El
Dorado
y el Cortijo
Las
Bombas, uniéndose muy cerca de este punto con el ramal anterior.
.- Oba-Carteia-Barbésula
El primero de estos
Estas vías se cruzaban con otros caminos que las unían entre sí o que comunicaban otras ciudades cercanas. Tal es el caso de la ruta entre Lacipo y Oba, que pasaba por el Cerro Carretero y seguía hasta esta última ciudad
se
desviaba, a la altura de Jimena, el camino de Barbésula, que, tras pasar del valle del Hozgarganfa al del Guadiaro por el camino que va de la barriada de la Estación a la
Barca de Moreno, tendría luego un recorrido casi coincidente con la caretera que une San Pablo con San Martín del Tesorillo (CA-9021), dejando a lo largo de su recorido yacimientos como Mesilla de los Angeles, Cerro delaGá|vez, Sambana o Cortijo del Acebuchal.
Desde Lacipo bajaba otra vía que discurría por el valle del Genal y se dirigía a Barbésula tras pasar por el asentamiento del Cerro de Los Nogales.
2.-Vías Este-Oeste 2. 1.-
Barbésula-Carteia-Iulia Traducta
Es muy probable que el trazado de esta vía fuese muy
similar al de la calretera N-340. Procedente de Malaca, pasaría por Barbésula y desde esa ciudad, tras cruzar el Guadiaro por un lugar que desconocemos, ya que no tenemos noticia de restos de puente antiguo, seguirÍa hacia el Suroeste, dejando cerca diversos enclaves romanos, como la loma de las Mesas, el Cortiio de la Doctora, el Cerro del Infante o el Cortijo del Almendro. Muy cerca de allí se uniría con la vía Corduba-Carteia y llegaría a la ciudad dirigiéndose hacia el sur por el tramo mencionado del Arroyo de la Madre Vieja. Desde Carteia el camino discurría probablemente hacia el Oeste por la cañada de San Roque a Medina. Pasaba por el importante núcleo de asentamientos rurales romanos de Guadacorte y Cortijillos y, tras dejar la Venta del Carmen, bordeaba el amplio estuario y la zona de marismas que formaba el río Palmones en la Antigüedad (Alvarez, 1998) Antes de llegar a Los Barrios, justo al pie de las lomas que separan esa localidad de la zona costera de la Bahía, un ramal de la ruta se dirigía hacia el noroeste, siguiendo el valle del río Palmones. Otro ramal, sin embargo, iba hacia el sureste y, pasando por el asentamiento de la Vega del Ringo Rango (Bernal, 1995), soterrado bajo la vega aluvial, atravesaba luego el río Palmones por el puente del Vado de los Pilares y se dirigía hacia Iulia Traducta. 2.2.- Carteia-Asido
El ramal que seguiría hacia el noroeste desde el cruce con Iulia Traducta continuaría por el trazado de la cañada San Roque-Medina, siguiendo el valle del río Palmones para adentrarse en el interior montañoso con un itinerario casi paralelo al de la A-381 hasta la Montera del Torero. Muy cerca de allí giraría hacia el Oeste por el curso del Arroyo de Valdeinf,rerno y buscaría el actual límite con el T.M. de Medina a través del Puerto del Alisoso. A lo largo del itinerario esta vía pasaba cerca de asentamientos romanos tan notables como la villa del Puente Grande o la del Cortijo del Jaramillo, ésta última situada río aniba, a unos tres kilómetros de Los Barrios, junto un importante cruce de caminos, como veremos a continuación.
[84] 3
2.3.- Carteia-Gades
recientemente
un
importante yacimiento turdetano-
romano.
Desde el Cortiio del Jaramillo un ramal de la ruta anterior se desviaba al Oeste, hacia el paso natural de la Garganta del Raudal-Tiradero. Desde allí, a través de un valle encajonado entre abruptas sierras, buscaba el Puerto de Ojén, para dirigirse, bajando el valle del río Almodóvar, hasta los llanos tarifeños de la Laguna de Janda. Desconocemos cómo sería el enlace entre esta vía y las localidades costeras (Mellaria, Baelo, Baesippo, Mergablum) En el Puerlo de Ojén, donde también hay un importante enclave romano conocido desde antiguo, se unía a esta vía la que, procedente de Algeciras, atravesaba la Sierra de las Esclarecidas para llegar a este punto. En este tramo, que Gonzalo Arias considera la vía principal Carteia-Gades, este autor documentó la existencia de
varios restos de camino empedrado (Arias, 1988). Nosotros hemos hallado un pequeño tramo, aún bien visible entre la espesa vegetación, muy cerca del Puerto de Bacinete, algo desviado del trazado de la vÍa. Creemos que podría tratarse de los restos de un ramal que uniría a través del citado puerto, esta ruta con la de Carteia-Asido, muy cercana a este lugar. Frente a este punto, situado en un lugar desde el que se domina el valle, conocemos la
existencia de un recinto foftificado de cronología tardorromana que ponemos en relación con el control de la vía. (Baliña,1987) 2.4.- Iulia Traducta-Gades
Aunque no tenemos datos de asentamientos romanos que nos permitan trazar sobre el tereno estos caminos, siguiendo a los autores que han tratado este tema es probable que partieran desde Iulia Traducta tres vías hacia el Oeste. Una de ellas seguiría aproximadamente el frazado de la actual caffetera N-340 (Tonemocha, 1989),
otra iría bordeando la costa, por las plataformas que existen sobre los acantilados y a través de las cuales discurre un sendero actual (Silliéres, 1997) y una tercera se adentraría hacia el noroeste a través de las montañas (Sáez, 1997) buscando el valle de Ojén y uniéndose a otras vías para dirigirse, por medio de ramales, hacia Mellaria, Baelo, y los llanos de la Janda (Arias, 1988) 2.5.- Barbésula-Lascuta
Otra de las vías primarias era con toda probabilidad la que, partiendo de Cafteia, unía la comarca con Lascuta. Discurría paralela a la cafiada real San Roque Medina, unos kilómetros más al Norte. Salía de Carteia por la ruta hacia Oba y se desviaba al Oeste a la altura del actual estadio de San Bernardo. Tras pasar por el yacimiento del Cortijo de Villegas, subía por los valles del Guadacortes y el Palmones para seguir la misma dirección de la A-381 hasta Alcalá de los Gazules. A lo largo de esta vía hay varios asentamientos romanos importantes, como los de Malpica y El Palancar. En el borde del camino, en la finca El Jautor, ha sido excavado
l84l4
Este camino conectaba con la cañada real de San Roque a Medina por dos imporlantes ramales. Uno de ellos partía de la Venta del Carmen y se dirigía hacia el norte por el curso del río Guadacortes, dejando a su derecha yacimientos como los de la Vega de Bocanegra, Fuente Magaña y Cruce del Patrón.
Otro ramal tenía su origen en el importante nudo viario que existía en el casco urbano de Los Barrios y se dirigía hacia el norte por la actual vereda del Cementerio. Junto a este camino se localizan yacimientos como el cortijo del Arenoso o la Coracha. Sería demasiado prolijo detenerse en la descripción dg las vÍas secundarias. Mencionaremos solamente dos zonas en las cuales destaca, con respecto al resto, la complejidad del trazado viario y dejaremos su análisis más pormenorizado para futuros trabajos, Una de ellas, situada en la margen derecha del Guadarranque, entre este
río y el
la ponemos en el territorium de Carteia y las primeras
Palmones, (Mariscal, 2002)
relación con
colonizaciones de la zona. La otra es la que se encuentra en el área más fértil de la comarca, entre los ríos Guadiaro y Hozgarganta. Es de suponer que éste sería el territorio con una mayor producción agropecuaria y necesitaría una más amplia red comunicativa que facilitara la actividad comercial.
CONCLUSIONES Durante la Edad Antigua el carácter montañoso de la
mayor parte de la comarca, la escasez de tierras cultivables (tan sólo el 9oA del total) y un clima poco favorable parala agricultura (excesiva humedad y fuertes vientos), hicieron que las actividades económicas de la zona se dirigieran más hacia la pesca y las tareas relacionadas con el mar (conservas pesqueras, comercio y
transporte marítimo), quedando la explotación agropecuaria como una actividad dirigida fundamentalmente al mercado interno.
La ocupación y explotación intensa del territorio
produjo durante el proceso de
se
romanización,
probablemente en el período altoimperial. Se llevó a cabo una colonización del campo dirigida desde las ciudades cercanas, que, de ese modo articulaban su territorium. Desconocemos, por ahora, qué espacios teritoriales corresponderían a cada una de ellas.
La mayor parte de los asentamientos se ubican en las zonas baja y media de la Bahía y su territorio interior, en
los valles de los ríos, Genal, Guadiaro, Hozgarganta, Guadarranque, Guadacortes y Palmones. Existen pocos yacimientos en el área montañosa, y los que existen están relacionados directamente con las vías de comunicación.
El trazado de las vías romanas que planteamos coincide con el de muchas vías pecuarias actuales. Casi todos los yacimientos romanos documentados están relacionados con esa red de caminos tradicionales.
zona de estudio y unas líneas de trabajo claras y esperanzadoras que nos permitan continuar profundizando en la cuestión en los próximos años.
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Apostillas del director l.- Frente al "rigorismo"
de un Isaac Morenct (que
2.- l{ótese que en el mapa de esta página sólo los
sólo para las vías
nombres en MAYUSCULAS indican emplazamientos de ciudades, mientras que los demás indican la dirección que llevan los caminos qtte salen de la zona del mapa. 3.- Para Baelo y Mellaria, por ejemplo, se podría ir
reserva el calificativo "romana"
construidas con ciertos criterios ingenieriles estrictos), se observará el "laxismo" aquí adoptado, en el sentido de incluir en la red viaria romana cualquier camino usado en tiempos romqnos, basándose su detección no ya en restos de calzada, puentes o miliarios sino sobre todo en
deduccir.¡nes derivadas de las alineaciones de yacimientos, la geogra/ía del terreno y la persistencia de caminc¡s antiguos. Ambos criterios son muy respetables, pero a efectos prácticos El Miliario Extravagonte tratcl de adoptar uno ecléctico, sin desdeñar caminos no ingenieriles pero sin llegar a proponer una ted viaria tan tupida.
desde
IULIA
TRADUCTA
por dos o incluso tres
camínos; uno por el interior (la A6, para mí) y otros dos mucho más cercanos a la costa (en los que yo no creo). Pero los autores no han comprobado sobre el terueno estos caminos costeros (síendo significativo que el mapa
se corte justo al sur de lulia Traducta), sino simplemente
no se deciden a
contradecir
a
que los
investigadores que siguen afetados a una ínterpretación errónea (a mi juicio) del ltinerario de Antonino. G.A.
[84] 5
El Puente de Talamanca Federico González Couto Cada vez que alguien adscribe
etiqueta
a un puente
de romano, nunca faltan "colegas
Ia
documentos del Archivo sabemos que en estas fechas
de
hubo que reedihcar otros muchos puentes.
extravagancia" que niegan su romanidad. Pero las más de las veces lo hacen coloquialmente y nunca por escrito,
a
pesar de los estudios tipológicos realizados, seguimos sin tener la seguridad de poder datar su construcción. Cito a don Manuel Durán, uno de los más
pues
importantes estudiosos en este campo: "No cabe la menor duda que fijar la época de construcción de un puente antiguo reviste siempre una gran dificultad, ya que casi
nunca se dispone de documentación -sobre todo de los
más antiguos-, ni se han realizado en ellos o en su entorno estudios o campañas arqueológicas, y ni tan siquiera el estudio exclusivamente tipológico proporciona ayuda o da algún resulfado, por el hecho de haberse empleado las mismas formas y técnicas constructivas a lo largo de los siglos"
Y hablando de puentes siempre considerados como romanos, el Mapa-Indice de El Miliario Exfravagante y el Catálogo correspondiente mencionan una Vía (la CG16) que parliendo de Talamanca ya a Torrecaballeros. Fue estudiada por don Francisco Alonso Otero, ingeniero de Caminos de Madrid y el M.E. publicó su artículo en 1988 (en el número l7,páginas 9-11). Que yo sepa no se ha welto a hablar de tal via desde entonces y parece que el
catalogarla como romana pasa
por la hipótesis
de
considerar romano el puente de Talamanca sobre el río Jarama.
En el Archivo Municipal de San Martín de la Vega
El tercer documento (englobado en la Signarura
obligación de alargar la calzada 170 pies más.
Una vez más nos encontramos con un puente calificado por todos como romano y del que tenemos constancia documental de haber sufrido reparaciones importantes en tiempos modernos. ¿Es posible distinguir la fábrica antigua de la reparada en la Edad Modema? No sé si alguien sería capaz de calcular el volumen de las obras en base a los dineros empleados en las reparaciones. en cuenta es que junto al puente se construyó una buena longitud de calzada, 1o que obliga a ser extremadamente prudente en los estudios arqueológicos de su entorno.
Y otro asunto a tener muy
Y ya que hablamos de Arqueología, el asunto se complica, porque Malalana, Martínez Lillo y Sáez Lara,
en "Orígenes Históricos de la Actual Comunidad Autónoma de Madrid", afirman que mantienen la
atribución romana de este puente por simple prudencia, ya
que tradicionalmente ha sido considerado así, aunque dicen que "sin embargo, de esta época, a falta de un
estudio pormenorizado, sólo quedaría el trazado y el emplazamiento elegidos. Por su aspecto -la sillería empleaday las marcas de cantero- los arcos y algunos de
se conservas kes documentos modemos que hablan de tal
los tajamares son defacfura románics".
puente, pues los vecinos de la villa tuvieron que contribuir a sus obras, por estar dentro del radio de veinte leguas, obras que consistieron precisamente tres reparaciones de tal puente en los años 1631,1760 y 1763.
Apostilla del Director
El primer documento (englobado en la Signatura no 3858), impreso, del año 163 1, manda repartir 20000 ducados en que se remató la obra y reparo que hay que pagar al maestro de obras Andrés de San Román. Por otros documentos de1 Archivo podemos saber que en 1629 se produjeron grandes avenidas que causaron desperfectos importantes, no sólo en la vega del Jarama,
sino también en los puentes de San Marlín
No he podido encontrar una foto del puente de para ílustrar este artículo. En cambio, he podido encontrar en el Diccionario de Madoz (voz Talqmanca
"Jarama") un dato según el cual la secular lucha del río contra el puente parece haber terminado con la victoria del segundo, ya que el río habría desviqdo la mayor parte de su caudal por olro lado. Dice en efecto Madoz:
de
Valdeiglesias sobre el río Alberche.
El segundo documento (englobado en la Signatura no 3961), impreso, del aflo 1760, manda repartir 139145 reales por la obra y reparos, además de gastos y costas y no menciona al arquitecto, aunque es evidente que es el mencionado en el documento siguiente. Por otros
[84] 6
no
465), impreso, del año 1763, dice que el repartimiento anterior fue insuficiente y que hay que repaftir otros 17815 reales y 11 maravedíes para pagar al maestro arquitecto don Pedro Folc, que por otra pafte tiene la
"...y el (puente) de Talamanca
de
piedra con un ojo
por el cual pasa un caz, para dos molinos que hay en dicho pueblo,pues la mayor parte del r. corre por un lado del puente. " G.A
La vía vadiniense en la Cantabria romana David Martino García NOTA EDITOzuAL. Lo que sigue es un extracto del ar1ículo publicado originalmente con el título "La vía vadiniense. Una vía secundaria de montaña en la Cantabria romana" en Memorias de Historia Antigua, vol. XIX-XX,1998-7999, Univ. de Oviedo. Creemos que este trabajo, llegado recientemente a nuestras manos, tiene un interés que trasciende del ámbito local, pues ayuda mucho a aclarar ideas sobre el tema siempre discutido de los criterios para asignar una antigüedad romana o medieval a los viejos caminos, especialmente en zonas de montaña y cuando se carece de apoyos en miliarios o en textos de época romana. Por ello, mejor que dar cuenta del aftículo con un "comentario" , El Miliario Extravagante opta por ofrecer a sus lectores un amplio extracto, con la
autorización del autor. Lo reproducido es aproximadamente el 50%o del texto y la totalidad de las fotos y los mapas. han suprimido las notas, en las que se recoge una nutrida bibliografía.
El
pueblo cántabro de los vadinienses nos es (II, 6, 50), una de las ocho civitates del interior del territorio cántabro, y especialmente por el importante conjunto
claramente separados
Se
por la cordillera cantábrica;
el
conocido por la mención de Ptolomeo a Vadinia
grupo norte (alrededor de una veintena de inscripciones) en torno al valle del alto Sella y su afluente el Güeña; y el grupo sur en el alto Esla (algo más de medio centenar)
epigráfico fi.merario, más de 70 inscripciones. (...) Las vías del ámbito
(ver mapa no 1).
cántabro han recibido aten-
ción desigual.
muy llamativo de la falta de estudio son las vías romanas que se internaban por territorio vadiniense en el extremo occidental de Cantabria. (...)
La
escasez
de
las
fuentes tradicionales para el
conocimiento
de una
vía
romana, es decir, los itinerarios y miliarios, ha provocado
la
necesidad
X,j
(...) Un caso
de acudir
a
nuevos planteamientos metodológicos para avanzar en e\ conocimiento de las comuni-
caciones romanas
en
^4(4\4
A
lt
C
Al" -l l"l:iVa\;'{.}
[)iYisoria
dc la Cord. C¡ntábrica.
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' LÍmrtc probablc dcl tcnitorio dt los ladinicnses.
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P
/ _*n"..^1, ,{
rrazado aproxintado dc
la Vía vadinicnsc.
e¡ I@
casrros.
\úclcos<iemayor
concenración de cpigralia vrdinicnse
i
I
\*
WÍftus
?¡.
(con tramas dc dcnsid¡d de conccntración).
lt\
,?(
zonas
montañosas. (...) Ya apuntábamos que el territorio de los vadinienses,
ill
en Ia parte más occidental de Cantabria, en el límite con los astures, es una de estas zonas. Este pueblo se extendía por la
L* ,r;
siguiente área'. zona monta-
,*
ñosa de la cuenca alta del río Esla y sus afluentes el Porma
y el Cea, en la provincia de León, y del río Carión en Palencia; esta zor,a se
¡*1.:Y1,t'.,
*ir'/:::.>
,!
\
1¡
/
{ "' ".4 r**^-*-/
.*
prolonga hacia el nofte, ya en
por los valles del Sella y sus afluentes el Ponga y el Güeña. Desde luego, la distribución de los hallazgos epigráficos nos permite agruparlos en dos grandes focos, Asturias,
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Mapa L. Mapa general del traz¡do
de la oía oadiniense
18417
El objetivo de nuestro trabajo se centra en presentar de la principal vÍa de comunicación norte-sur trazado el del territorio vadiniense; especialmente en cuanto a las comunicaciones intemas de este pueblo;
("')
Nuestra metodología consiste en conjugar una serie de elementos geográficos e histórico-arqueológicos para presentar un trazado aproximado. El primer paso es una ievisión de las investigaciones precedentes' A partir de este estado de la cuestión comienza la estructuración de la hipótesis del trazado siguiendo los siguientes pasos:
primáro se procede al estudio de las condiciones geográficas de la región, teniendo .en cuenta áspecialmente los corredores naturales, así como los diierentes pasos de montaña. Sobre esta base de comunicaciónes naturales, se observa la situación de los
yacimientos arqueológicos (atendiendo a los núcleos iestacados) (...) La cartografía de los principales núcleos de población se establece, debido al escaso conocimiento de la arqueología de la zona, tomando como guía la distribución geográfica de la epigrafía, considerando los puntos de mayor densidad de inscripciones' Esta
cartografía se completa con la situación de los castros ("') Ultimamente se viene utilizando la documentación medieval para apoyar y concretar el trazado de vÍas
romanasl pasajes cuanto más arcaicos mejor,
y
nunca
posteriores al siglo XIII. Interesan aquellos que se iefieren a vías, especialmente menciones del fipo strata, calzada; y también caruale o via, aunque estas últimas son indicios más débiles a menos que lleven el apelativo antiqua. Por último, se revisa el terreno en busca de tramos pavimentados y otras obras de fábrica ("')
E\ frazado se desarrolla de sur a nofte entre la vía I del
a
grandes rasgos
Itinerario de Antonino, en las cercanías de Lancia (Villasabariego, León) Y Cangas de
Onís, donde se junta con la vía transversal que va hasta
H
es enlace del foco norte con el foco sur vadiniense vez entre los principales núcleos de población'
Sector 1o: Sorriba
-
y a la
Riaño (MaPa 2)
Este primer sector de la vía , el más meridional, es el
mejor doóumentado; además de hallarse núcleos de poúlación destacados, conocidos por la concentración Lpigráfica y por la arqueología, se cuenta con varias réferencias medievales interesantes así como con algunos tramos pavimentados muy destacados. ('..) Eite primer sector desarrolla su trazado a lo largo de la vega dei Esla, que queda como único corredor natural de acceso a la comarca de Riaño, acentuada esta ruta natural por la escarpada orografía de la zona. Es camino
de enlace entre impoftantes núcleos de población; entre Aleje, Verdiago y Valdoré con Crémenes y a su vez con Rialo, tal como propuso hace bastante tiempo. pero sin entrar en detalle, C. Sánchez Albomoz. (...)
En
detalle, la vía entraba desde ia llanura en territorio montañoso por Soriba y
bruscamente
Cistierna. Superada esta población, en el mismo límite sur de la cordillera, en la margen opuesta a Peña Corada, se encuentra el Castro de "Vegamediana", también conocido por "La Cildad" en término de Sabero, municipio donde
se ha recogido otra inscripción
vadiniense'
Este
asentamiento es un imponente recinto en altura sobre el Esla, con destacadas defensas naturales y donde todavía se pueden observar restos de viviendas circulares; no ha
sido excavado, pero se tienen noticias de hallazgos romanos en el mismo. Lo cierto es que la vía no entra en el castro, lo costea por bajo siguiendo el río. (..') Frente a
T@doapt*inado(tc
la Víü yadinicns.
Á Licsos
(5)
Lugudchallugodc
ióo vadinicns dc inrcripcionq cua¡do son 2 o mdÁ).
Lucus Asturum (Lugo de Llanera, Asturias). A grandes rasgos, la vía discure a 1o largo del valle del Esla hasta Riaño, y de aquí Por Valde-
burón hasta
el
Puerto
de
Ventaniella, donde cruza la
de la cordillera' Seguidamente desciende Por el río Ponga hasta unirse al Sella y de allí a Cangas de
divisoria
Onís (ver maPa 1). Desde luego, el primer tramo, hasta
VACCAOS
Soniba, no podemos considerarlo propiamente como vadi-
niense, pues
a
Pesar
de
l0 Mapa
2-.
encontrarse dos inscriPciones vadinienses en la zona ('..) más bien debemos considerarlo dentro del territorio de Lancia, ciudad astur.. En adelante, vamos a denominar a este camino romano como la vía vadiniense, atendiendo a que es eje nofte-sur vertebrador del territorio de Vadinia,
[84]
I
20 \
3O
tm.
Mapa del sector Soniba-Riaño
por el lugar donde discurre la vía, en Santa Olaja de la Varga, se conoce otra inscripción y
este asentamiento,
castro menor ocupado en época romana.
La vía continúa por la margen izquierda para llegar
a un tramo del río que es un importante foco
de
asentamientos vadinienses; el que engloba los pueblos de Aleje-Verdiago-Valdoré-Velilla de Valdoré. Conocemos un total de siete inscripciones ('..)' Además se tiene constancia de la existencia de un castro con ocupación romana en Verdiago. Una referencia medieval completa
los indicios de camino romano en este tramo; una
"carrere antiqua" en el año 958 en Aleje. Superado Valdoré, todavía por la margen izquierda, la vía deja la vega y va tomando altura progresivamente para dirigirse a Crémenes. El valle se estrecha considerablemente y el Esla llega a encajonarse; aparecen
los primeros restos visibles de calzada en un lugar muy escarpado y rocoso, conocido como "El Pajar del Diablo", Somos conscientes de que en muchas ocasiones resulta muy complejo diferenciar los caminos romanos de los medievales; aunque, por otra pafte, muchos caminos medievales son sólo reutilizaciones, con sus pertinentes reparaciones y remodelaciones, de caminos romanos; y en zorras apartadas, frecuentemente puefios de montaña y desfiladeros, lugares que no han suflido transformaciones agrícolas posteriores, es donde se conservan mejor estos trámos pavimentados; a pesar de que la continua utilización de estos caminos, incluso hasta nuestros días, pueda haber hecho transformar o desaparecer el ievestimiento original. El tramo de "El Pajar del Diablo" se conserva en cerca de 500 metros de longitud (foto 1)' Por el lado interno, la calzada va cortando la peña, mientras que por el externo se asienta sobre un destacado muro de contención, un elemento característico de vías
romanas en tramos montañosos. Se puede estimar en por
menos tres metros la anchura del camino' La vegetación que crece sobre el mismo no oculta el
lo
puuitrtanto, y en varios puntos se pueden observar grandes iosas de más de 1 m2, preferentemente marcando el borde extemo de la calzada. El final de este tramo continúa directamente en otro con restos de pavimento en el lugar
conocido actualmente como "La Vega Entrecisa"' E'l río
forma un pronunciado meandro alrededor de
un
Foto 1. Vísta g*neral ¿Je Is zrár en «El P*j*r de D iablo o. Vill *t¡ andre, Cr éYn enes
ilustrativos, tenemos otros indicios que remontan la construcción de este camino a la época romana. Un documento medieval que recoge una donación de Alfonso III al presbítero Sisnando en 874, menciona en Crémenes
un lugar llamado intercisa, del que deriva la "Entrecisa" actual. La etimología de este término latino es evidente al observar el cofie de la roca en este paso; y es que semejante obra en la roca deja también su impronta en el nombre del lugar. Así lo podemos constatar mediante
algunos paralelismos en otros lugares del Imperio romano. En Italia, en Umbria, en la Vía Flarninia los itinerarios mencionan Intercisa, un lugar que ha recibido
.d
impoftante espigÓn rocoso. El camino opta Por cortar la peña para evitar el rodeo. El paso, tallado en la roca, tiene una anchura de unos tres metros, aunque ha perdido el revestimiento pétreo. Por el contrario, los tramos de calzada de entrada y salida de este Paso todavía
conservan
el
,.
:lr **,,á¿l
Pavimento
visible y en buen estado
(foto 2). Volvemos a contemplar grandes losas en el
borde, dejando otras
de
menor tamaño en el interior. Las más grandes, en muchos casos superan el metro de Iado (foto 3). La anchura de
la
calzada supera siemPre los
tres metros. Por si los restos conservados fueran Poco F0tr¡ 2.
Vi;la
dcl p.li)rnrcnto a
]a salida del tortr üt lü
rLlctt de
"L,t
Vcqn rtúrccisa"
[84] e
ese nombre por
la
misma
causa (...)
El paso de "la Vega Entrecisa" abre el acceso a la vega de Crémenes, desciende \a calzada hasta dicha Población a través de VillaYandre. El valle se abre sensible-
mente en esta zona. Hasta el
es el concentración mayor de lugar
momento, Crémenes
inscripciones de éPoca romana, hasta diez ejem-
de
plares. (...)
La vía
continuaba Pro-
bablemente Por la margen izquierda hasta las cercanías
51":1s§$
de Las Salas, lugar donde aparecen de nuevo algunos tramos empedrados. (...) En Las Salas se conser-
van dos tramos empedradosl el primero, según subimos,
encuentra
en el
se
" She
*
i*i.,"-J¡i§ury-§§i')¿*i¡¿ñnffiS*¡a:':
FctÜ 3. l.lrfalk
¡ü: l¡¡s l*s¡is
lugar conocido como "El Escobio de Remanganes", en la margen izquierda. La calzada se hace visible en unos 150 metros y con una anchura
d*
a los tres metros. Los puntos
mejor la roca coftando que va los en aquellos son conservados por el lado intemo, observando también, las losas que
siempre superior
iormun
el bordillo exterior (foto 4)' El
revestimiento
central se ha perdido en muchos puntos. En este tramo destaca un paso en la roca en el que se observan las huellas dejadas en la peña por las rodaduras de los carros durante tantos siglos de utilización. El segundo tramo, también en la margen izquierda, se encuentra en el lugar de "San Roque". Un tramo largo, superior a los quinientos metros de longitud, aunque no todo él en el mismo estado de conservación' Se pueden observar varios pasos corlados en la roca. La anchura de la calzadanunca es inferior a tres metros, llegando incluso a los 3,75. Volvemos a encontrar las losas más grandes formando el bordilto exterior, algunas de ellas de más de 70 cm de largo (foto 5) ( ) A la salida de Las Salas, ya en las cercanías del muro de contención del pantano, se r''uelve a perder la
calzada. No vamos a entrar en la descripción de este último segmento de vÍa, hasta llegar a Riaño, por encontrarse anegado.
Sector 2": Riaño
-
.':
'
-:$-.e,]N:tiMñ
t'íe r,1 ¿"1 irr¡¡rlr] r{*
tli:
li'5c InÍrcuí§á' Itii*v¡¡¡¡dre. Cr¿irler¡s
momento se conocen tres tnscrlpclones vadinienses en el mismo Riaño y el castro "Encima la Hasta
el
Cueva", separado por foso del castillo medieval. Riaño es nudo de comunicaciones regional' Hacia oriente, siguiendo el rÍo Yuso, parte un ramal imporlante que a grandes rasgos discurre por Pedrosa del Rey, lugar donde se conocen dos inscripciones y castro; atraviesa por Barniedo de la Reina, con una lápida y castro. Desde esta
última localidad, a través de Portilla de la Reina se alcanza el puerto de San Glorio, en la divisoria, y el
camino se adentra en la Liébana para llegar hasta Potes, de manera que une el solar vadiniense con el corazón de la Cantabria romana y la costa.
k"X
*§
':
¡! i^' ai* rtr ,:-
Puerto de Ventaniella (Mapa 3)
l)ra vez superado el encajonamiento del río en el primer sector, la vega del Esla se abre considerablemente en Riaño. (...) La documentación que manejamos para este sector se reduce considerablemente; no conocemos ninguna referencia medieval ni hemos conseguido observar ningún resto de camino pavimentado o de muros de contención, pues probablemente estén ocultos o destruidos' ("') [84] 10
I¡¡
1-^
-.,. y
:í
,J ,;il G;
A nosotros nos interesa más el ramal norte, pues éste además de llevarnos
por una variante hasta
tenitorio astur, es el camino para enlazar con el grupo norte vadiniense. La vía sale de Riaño por el vecino pueblo de La Puerta, con otra inscripción vadiniense,
y llega hasta Escaro, con
su
castro "Las Coronas", encima de Puente Torteros, en la
formidable
confluencia del Esla con el Ocza, donde se abre el valle de Valdeburón. (...)
El amplio valle
de
Valdeburón es de capital importancia. pues se domi-
nan los accesos directos para todos los pasos de montaña que conectan con
MAR CANTÁE RIC O
las dos cabeceras de
la decir, es Sella, cuenca del el propio alto Sella y el alto Ponga. A la vez, encontramos una importante con-
centración de lápidas y
de
castros romanizados
de
importancia (...) La vía (...) seguramente avaÍza hasfa Liegos (...) donde se conocen cinco epígrafes y de allí a Uña, donde recientemente
se dio a conocer
Y¡iiñd
Divisoria
l¡ Cdd. CsübriÉ
P
fru.ilrozptoxinúo&
la Vla vldinimsc.
A
c*[o. (5) Lutardch¡llu8odc
Licgos inrripción vrdinien*
(o' dc in§EipcioBt cu¿rdo
sü
2 o m&)
otra
inscripción. Entre estas dos
localidades se halla el imponente castro de "La Corona" de Acebedo, del que se observan restos de muro y foso, aunque no se
ha practicado ningún
sondeo arqueológico (...). Desde La Uña se accede
4
Mons Vindius (Picos de EuroPa)
ra
tr F-.r
V)
directamente por el río de Riosol al puefto de Tarna Y Mapa 3. Mapa de los sectores Rinño-Pueúo de Ventaniella y Pto. Vmtaníella-Cangas de Onís de allí se baja por el Nalón el desfiladero de Los Beyos, dificultando seriamente las hacia el corazórt del territorio astur transmon-tano, lo que de hecho, el desfiladero apenas fue comunicaciones; por romana vía justifica de la existencia por sí solo la construcción de la carretera actual a practicable hasta Valdeburón. (...) Pero por otra parte, hay pasado. fines del siglo con para enlazar montaña pasos de los a cuanto En el grupo nofie vadiniense, hay varias posibilidades (...), testimonios medievales en favor de la importancia de esta ruta. Así, se nombra urra cqrrer(l maiore en Sajambre, y aunque en la práctica se reducen a dos: el Puerto de se denomina via Saliamica a la ruta que lleva a este valle. Pontón y el Puefio de Ventaniella. (...) En el Puerto del Pontón existe ermita y alberguería, por lo en Puente del Puerto de Pontón sale
El ramal
Torleros y asciende suavemente a través de Vegacerneja, por el valle del Ocza y de su afluente el Tuerlo hasta el Puerto Pontón, en la divisoria. Aunque esta ruta es más directa y el Puerto de Pontón es el paso de menos altura, 1.280 metros, una vez en la vertiente norte, tras atravesar el pequeño valle de Sajambre, el río Sella se encajona por
menos desde comienzos del siglo XII, protegida y auspiciada por el Rey, para dar cobijo a los viajeros; lo que demuestra el tránsito fluido por el puerto y el interés del poder central por mantener abierta esta ruta. Veamos ahora la alternativa de Ventaniella. Ur.a vez rebasada la población de La Uña, la vía se bifur:ca en dos
[84]
11'
el ramal occl(...) se dirige hacia dentat ramales;
en puerto de Tarna. El otro
ramal sale en dirección norte, hacia
el
Puerto
de
Ventaniella. La vía discure a través de las praderías de
Valdosín, ascendiendo suavemente hasta Ventaniella, 1.420 metros, Para cruzar la
cordillera car-retero.
por un camino En la vertiente
nofie, el camino desciende hasta la ermita Y alberguería, en las praderías de Ventaniella. Desde allí, sin
tu;;;;
desniveles discurre por el valle de Ponga nasta
ffiffi*'§fl;'t'- ?X,{;i i{';"1 H*,.§.i,-.il§,*'' f;."1: ,;
lIffi*{l.t:,iffi6*ii
}ir, ri ;:w*ffi
'!&;liFt§{'* * *""' " '", camino en época romana :-":" ,-"_ .'.', . s¡¡*fijJár:, &nict;¡t ,\.{iir¿r ¡le rcrJe ¡¡¿:;ri¡r cr *l in¡r¡* ¿re r,i:" trxlr-¡¡rr: *l Fv¿r¡:fe dr l-ns cr¡rzos ú^ I;r:to fue ya destacada p", ,.M: Este tramo visible termina en el Puente de Los Sánchez-pagÍn, que menciona la existencia de algunos Grazos, donde la vía pasa a la margen derecha del Sella tramos,,enlosados,,(que nosotros no hemos visto) (...) (foto 7). No conocemos ningún estudio pomenorizado de Puefio Nuestra propuesta se inclina por considerar.eL este puente, únicamente la escueta fiase "pudiera ser las en utilizada más de Ventaniella como la ruta romano" de c. Fernández Casado. Se aprecian varias (...) y sur. noÍe grupos comunicaciones entre los obras de reconstrucción y reparación del mismo ("')' El sector septentrional de la vía vadiniense termina Sector 3': puerto de Ventaniella - Cangas de Onís en Cangas de Onís, concretamente al empalmar con la vía (Mapa 3) transversal E-O Picos de Europa-Iucus Asturum.(...) No cabe duda de que la vía vadiniense es un camino La documentación que tenemos para este último secundario dentro del esquema de las comunicaciones del sector de la vía es muy escása (...). conventus cluniensis. Pero resulta de interés fundamental de La vía desciende desde la alberguerÍa y ermita para las comunicaciones regionales, como eje sur-norte del las fuentes Ventaniella, lugar donde se encuentán ponga. ( ) El iamino continúa paralelo al curso del río vertebrador del territorio pefteneciente a la circuns(...) proüautemente por la margen deiecha hasta Sobrefoz. A cripción administrativa de la civitas vadiniensis. partir de esta localidad es difícil concretar el frazado' * '¡ 'c bestacamos el paso probable de la vía por San Juan de del Mapa-Indice -que revisión próxima la inscripciones áos hallaron que se [En la en localidád Beleño,
tendrá que esperar un año- se aplicará a la Vía por último, la vía discurre a través del camino VadinienselasiglaGtgl,mientrasqueelramalalPuerto GAJ llamará CfgL natural abierto por el río hasta Puente Sellaño, en e-l curso 4!,San Glorio y Potes se bajo del Ponga, lugar en el
vadinienses.
(...)
que tenemos [a noticia de un
fragmento de lápida (...), y
desde
allí
hasta Santillán,
localidad en la que el Ponga confluye con el Sella.
Poco antes de
la
confluencia se hace visible un nuevo tramo de camino con destacados muros de contención que discurre Por
la
margen izquierda del
Ponga" Se puede observar
dicho tramo en unos 500 metros ( ) (foto 6). El revestimiento Pétreo se ha
perdido, pero establecer
la
Podemos
anchura del
camino en unos 3,5 metros.
184112
La ubicación del Puente de Segovia y los caminos a los que servía en época medieval Jesús Rodríguez Morales término municipal de Madrid con los de Alcorcón y
Recientemente he colaborado con la empresa que ha efectuado el estudio previo arqueológico de los ter-renos
afectados
Pozuelo de Alarcón. Para ella he elaborado un estudio de los caminos antiguos de la zona. Del estudio del material
por el llamado Plan
Campamento, la urbanización de ios terrenos, actualmente de uso militar,
situados
a
cartográfico antiguo,
de la N-V, Carretera de entre la Casa de Campo y los límites del
ambos lados
Extremadura,
el M.T.N. l:
50.000,
mapas
municipales, mapa de vías pecuarias y fotografía aérea puede deducir el siguiente esquema:
se
ESQUEMA DE LOS CAM¡NOS DEt.O. DE MADI(It)
roMADo DE LA
r*
tlth,,-iñl'ío.ooo
EDrcroN irs75)
o
5
Krn' hit:
il¡nutnarrl
MADRfD
-: Yi:ry.lo dal
Vtteda da A{c*t't:on * Cordel de f-a C«rrera
{.buire.la la dlarwa
l1iliit o
{'o^rirü
J¿ d.1
.'ll&rint lixtretto.lr¡ta
decir el camino desde Madrid al Cordel de La Canera, también llamado Cañada de Alcorcón, que, como he mantenido repetidas veces' es la vía romana de Toledo a
Me han llamado la atención sobre todo: el camino la Carrera y que el
rotulado Vereda del Camino de
Camino de Villaviciosa de Odón se llame también Caiada Real de Madrid. En cuanto al primero hay que notar que el nombre implica que es el camino que se dirige a La Carrerar, es
' Lu Cun"ru es un nombre propio, como ha notado F. González Couto, "Caminos del Sexmo de Casarrubios en tres documentos medievales", El Miliario Extravagante, 60, Marzo de 1997, p. 9, que se había de aplicar a la carreÍa por antonomasia en su momento.
' J. Rodríguez
Morales, "Los caminos de Toledo
a
Segovia, El Miliario Extravagante , 77 , lunio de 2001 , pp. 7- 16 e idem, "Las rutas antoninianas en el Centro de la Península", El Miliario Extravagante, 81, Mayo de2002, pp. 26- 30. Recientemente, y en el punto en donde la nueva Radial 5 ha cortado el Cordel de la Panadera, justo en el límite entre Alcorcón, Fuenlabrada y Leganés, 40" 19' 40" N, 3o 49' O, ha quedado al descubierto el perfil
del camino de unos 6,5 m. de anchura. En el corte se advieften dos capas: Arriba: 0-22 cm., arenoso, durísimo. Muy apelmazado. Abajo: 23- 39 arerra y arcilla más
t84l 13
Segovia por las cuerdas altas, que constituÍa en época musulmana el límite entre las ciudades andalusíes de Calatalifa y Madrid. En cuanto al segundo, que procede de Madrid, y aún
más
al E, del Puente de Viveros, con el
nombre
de
CafladaReal de la Puefia del Sol o de Merinas3; al SO. de la capital, tras pasar por la Venta de La Rubia, se dirige a Villaviciosa de Odón y a la antigua ciudad musulmana de Calatalifa, situada así mismo al SO. de Madrid. Es curioso, y no sé si se ha notado, que, al salir de Madrid, la antigua caffetera de Extremadura, hoy Paseo de Extremadura en su primer tramo y luego N-V, a partr del paraje de las Ventas de Alcorcón, en Campamento, gira unos 30" hacia la izquierda, tomando francamente el rumbo SO. para superponerse a lo que el Mapa de Vías Pecuarias d¿l Ayuntamiento de Madrida llama Cañada de Extremadura, dirigiéndose asÍ a Alcorcón. Si, en vez de cambiar de rumbo en ese lugar, seguimos de frente, tomaríamos la Calle Cametera de Boadilla, y luego el Camino de Villaviciosa, y por lo tanto ei de Calatalifa. Parece como
Calatalifa
si el último tramo del antiguo camino de
a Madrid hubiera sido aprovechado por
el
Camino de Alcorcón a Madrid cuando fue trazado éste. Según afirmaba G. Ariass en 1987: "supongo que la vía 25 iría bastante más recta que la carretera actual de Extremadura, bordeando quizá Villcliciosa de Odón por el Sur... Despttés podría coincidir en parte con el camino
que de Villaviciosa conduce al barrio madrileño de Campamento pasando por la Venta de la Rubia... Entremos en Madrid atravesando el Puente de Segovia. Es sabido que el puente actual fue construido por Herrera, el arquitecto de Felipe II, y que de este tiempo data también la urbanización de la calle de Segovia. que
prolonga la línea del puente. El nombre que llevan puente y calle nos dice claramente que, por entonces, la salida hacia Segovia se hacía por aquí, y que el tráfico con esa
el de Extremadura, demasiado alejada pdr(t protestar contra ttna
ciudad era más importante que
suplantación a todas luces iniusta." La intuición de Arias sobre la importancia de la vía era casi correcta, pero la denominación no es injusta, puesto que, saliendo por el Puente de Segovia se iba igualmente en época medieval hacia Extremadura que hacia Segovia y ésta se encuentra más cerca.
El nombre tradicional del actual
Paseo
de
Extremadura, que arranca en el Puente de Segovia, era Camino de las Ventas de Alcorcón y en el plano de Pedro
Teixeira, de 1656, se rotula como Camino de Móstoles, mientras que el que sale de 1o que hoy sería la Glorieta de San Vicente, por la orilla izquierda del Manzanares aparece como Camino de El Pardo. La verdad es que si la vía romana hacia Segovia, como quiere Gonzalo Arias, hubiera seguido lo que hoy es la Carretera de Castilla, no se entiende que el puente de Segovia no estuviera al final de la actual Cuesta de San Vicente, en donde hoy está el Puente del Rey, por donde Arias indica, en su mapau del cruce de las vías romanas en Madrid, que viene de Segovia, por Guadarrama, lavia24. La explicación más lógica de la ubicacién del Puente de Segovia es, pues, que, efectivamente, por él se salía en
el Madrid medieval, árabe y cristiano, hacia Segovia, no por la orilla del Manzanares sino por la actual carretera de Extremadura y la Vereda del Camino de La Carrera, para tomar la antigua via romana del Cordel de la Carrera hacia el N y, por Majadahonda, Las Rozas y Torrelodones, dirigirse a La FuenÍlia y la ciudad del Acueducto. Así quedaría explicada la aparentemente
anómala denominación del puente más antiguo y más bello que queda en Madrid. La antigüedad del puente y su utilización desde época medieval queda asegurada por documentos del Archivo de la Villa de Madrid. El 1 de Diciembre de 1345 Alfonso XI ordenaba que se hiciera efectiva la donación que en su testamento hizo doña Mencia Fernández para obras en el Puente de SegoviaT.
y,
Menos de un año después, el 3 de Octubre de 1346, seguramente, porque la cantidad anterior no permitía
acometer la reparación del puente, de nuevo Alfonso XI
autorizaba
al
Concejo de Madrid
al
reparto de una
derrama de 8.000 maravedís para obras en el Puente de Segovia8.
Así que a mediados del siglo XIV había en Madrid un puente de Segovia y de alguna antigüedad, puesto que y
a hacía falta repararlo.
Un último apunte. El camino de Villaviciosa
o
Cañada Real de Madrid debió de ser una de las dos vías principales utilizadas, a partir del siglo XVI, para salir de
Madrid en dirección a El Escorial. y, por ello, Herera construyó para Felipe II un puente, el llamado de Brunete, para crvzar el Guadarrama, en el tramo de Villaviciosa a Brunetee. Así que los mapas que ilustran los artículos abajo citados deberian ser corregidos, en el sentido de que
el camino no va por Carabanchel, sino directamente a Villaviciosa. Existe abundante documentación que I y 10 cm. La mayoria de 5 cm. En esta capa ha aparecido un
sueltas, con bastante zahorra de tamaños entre
fragmento de cerámica común romana, que nos fecharía su construcción en esta éPoca. ' F. M. Martínez Fronce, El área madrileña: platdorma de trashumancia, Madrid, Comunidad de Madrid, 1991. p. 38 a Consejería de Agricultura y Cooperación de la Comunidad de Madrid, Plano General de l'ías Pearurias de Madrid, Madrid, 1986, escala 1: 100.000 ' G. Arias Bonet, Repertc¡rio de caminos de la Hispania romana,Lalínea de la Concepción, Edición del autor, 1987, p.368.
184114
u
lbíd.,mapap.364 'AVM-S 1-133-41.
M. C. Cayetano Martín, La documentación medieval del Archivo de Villa (1152I 47 4), Madrid, 1991, doc. 62, p. 36. * Ib¡d., AVM-] t-r33-42, doc. 69, p. 39 . 'P. Navascués Palacio, "Puentes de acceso al Escorial", Archivo Español de Arqueología, 58, 1985, pp. 97- 101 y L.
Cervera Vera, "Conjuntos
Monasterio
y
caminos en torno al
de San Lorenzo el Real", Población y
Monasterio. El entornr¡. IV Centenario del Monasterio El Escorial, M.O.P.U. Madrid, 1986, pp. 19- 81
de
demuestra que FeliPe
li utilizó
siemPre
estos dos caminos para ir a El Escorial. Esto no demuestra sino que los caminos eristían y debían de ser los que estaban en mejor estado, aunque, sobre el mapa un
§UAO¿\RA¡4A
CA¡IPIL
VILLALVA
§Al'l LüftE s§ccfttAL
ente deGuodnrrctnr.r
LA FñESNCDA
ORRELODON
camino muY directo Ivladrid - Aravaca Las Rozas -Colmenarejo - El Escorial
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(unos 40 km) sea más corto que un rodeo
§
I
VALOEMÜRI LLÜA
§ :1
por Villaviciosa de Odón -v Brunete (unos 50 km).
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VILLÁY'CIO5A
NE
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ODON
(rl
Del artículo de L. cerverá vera, "üonjuntox y c*minos en iorno ¿l Monasf,eriade san l.orenrs €l §lsal", Pobl¿¿ciány Monasterio (El Entarrw) tv centenurio del Monasterio de El Escorial, Madrid,lgg6, p. 6l +++
.l
Carnino pr*fuest(l de Madrirl a Villavicir:sa de Odün
Ap ostillus levemente p olémicus Deduzco del anterior artículo dos conclusiones o certezas principales que me parecen inobjetables;
l)
que el Cordel de la Carrera, Cañada de Alcorcón o camino de Toledo a Segovia por las cuerdas altas (Cl7 del Mapa-Indice) fue probablemente una vía romana; 2) que
el nombre del "Puenfe de Segovia" en Madrid tiene
su
antecedente en un puente medieval situado en el mismo lugar sobre el Manzanares, y clue se justifica porque durante ,siglos se salía de Madrid normalmente por allí para ir a Segovia. Hasta aquí, enteramente de acuerdo. Pero nc¡ es eso todo lo que veo en el artículo de mi
buen amigo Jesús. Veo también, más implícita qu.e explícita, su persistente resistencia a dar por bueno uno de los pilares básicos en que,se asienta la concepción de
la red viaria hispanorromana podríamos
sostenida
por la
que
llomar "línea editorial" de El Miliario
Extravagante. Me refiero al cruce en el centro de Madrid de dos importantísimas vías romanas.
Ya es significativo que mientras no vacila en llamar "vía romana" a la C17, se guarda de aplicar tal etiqueta a la Cañada Real o Cañada de Extremadura que
"procede de Madrid,
y
aún más al E, del puente
de
Viveros ".
Pc¡ne también en duda que la "Carretera de Castilla" en la Casa de Campo madrileña sea heredera de una vía romana, porque si así fuera, dice, "no se entiende que el Puente de Segovia no estuviera alfinal de la actual Cuesta de San Vicente, en donde hoy está el Puente del Rey, por donde Arias indico..." Es decir, de la existencia desde el siglo XIV por lo menos de un puente en la línea de la presumible ruta A25
deduce nuestro colaborador la inexi,stencia en siglos anteriores de un puente en la línea de la que yo llamo Cl - CLl. Conclusión algo abusiva, a mi parecer. Desde el rincón de la sierra rondeña en que se encuentran las "oficinas" de El Miliario Extravagante,
[84] 15
difícilmente podría escuclt"iñar archivos madrileños en busca de antecedenles de los puentes sobre el Manzanares. Pero tantpoco estoy enterqmente huétfuno de medios. una rápida búsqueda en el incomparable
Madoz, un golpe de suerte, y he aquí lo que
he
encontrado (vol. I 0, voz " Madrid", pág. 929): "Puenfe Verde. Se halla frente de San Antonio de la Florida y es de madera pintada de verde. Sirve para la comunicación de los lavaderos que se ven a la derecha del r., y es de 1 1 ojos sostenido por fuertes pilares de piedra sillería y ladrillo. Cerca de este puente se fundó por Enrique IV el monasterio de Ntra. Sra. del Paso que fue trasladado al prado con el título de San Gerónimo por los Reyes Católicos. Refiere Garibay que en su tiempo aún había señales del primitivo y mal sano monast. , cuyo sitio conservó mucho tiempo el título del Paso viejo." Es decir, clue todavía a mediadc¡s del XIX había precisamente frente a San Antonio de la Florída (¿puede pedirse más coincidencia?) un puente. Cierto que era un puente de madera pintada de verde, pero se asentaba sobre nada menos que I 2 Juertes pilares de piedra sillería y ladrillo. Cae por su peso la deducción de que los pilares, al menos en su parfe de piedra sillería, eran vestigios de una esfructura mucho más antigua, aprovechados en fiernpos ntc¡dernos para hacer con ladrillo y madera un puente -quizá una simple pasarela
peatonal o "paso viejo" qne dio título al monasterio"para la cr.¡municación de los lavaderos" de la otra orilla
El devenir histórico podría entonce,\ resuntirse en las s igtrientes etap as : - Tiempos romqnos; Sendos puentes para la C1 '
CLl y para la A25.
- Siglo VIIl: La estratégico" creado
queda despoblada.
zona, próxima
al
"desierfo
por las campañas de Alfonso I, Ruinct o destrucción de ambos
puentes.
- Siglo IX:
Fundación de Madrid. Interesa
reconstruir el Puente Sur, para la comunicación con Toleclo y con Al-Ándatus en general, pero en modo alguno el Puente l{orte, clue lleva a una Segovia despoblada y a tierro.\ crist ianas.
- l0B2' Madrid y Toledo pasanal dontinio del rey castellano-leonés. Segovia sigue despoblada.
- l0B7; Repoblación de Segovia. Entonces, y no antes, empezaría el Puente Snr a ser conocido como "Puente de Segovia". Nadie piensa en reconslruir el Puente lVorte, dada la proximidad de ambos y los escasos recursos disponibles en esos tiempos para obras púb.licas. - Siglos XII-XIV; una o varias reconslrucciones del Puente Sur, que sin embargo estaba de nuevo arruinado o fuera de servicio en f iempos de Felipe II. - Siglo XV; Enrique IV funda el Monasterio del Paso junto al Puente lVorte, y posiblemente entonces se acondiciona un primer paso de madera sobre
el río
aprovechando los viejos pilares.
del río. No me pdrece pensable que unos
simples lavaderos justificaran el gran esfuerzo de construir en el cauce del río I 2 fuerÍes pilares de sillería. ¿Quedctrá todavía, después de las obras protnottidas por el alcalde Tierno Galván en el cauce del río, algún resto de tales pilares? Invito o nuestros lectores ntctdrileños a comprobarlo, aunque quizá hoya
(Los llamaremos Pttente lVorle y
Puente Sur, para entendernos.)
Siglo
XVI; Reconstrucción definitiva del Puente
Sur.
Siglo XIX: Reconstrucción del Puente l¡lorfe con madera pintada de verde. ¿.Siglo
XX? ; Ruina definitiva del Puente Norte. Gonzalo Arias
que esperat/ a un año defuerte sequía.
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[84] 16
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Vías romanas del Limousin y su entorno Comentario y divagación Jean-Michel DESBORDES. voies romaines
en Limousin. Travaux d,Archéologie
Limousine, Supplément 3. Limoges 1997.
Poca es la atención que El Miliqrio Extravagante
y, en
general,
los
investigadores españoles hemos
prestado a los trabajos de nuestros colegas franceses sobre la red viaria romana en el país vecino. El libro que ahora comentamos nos da la oporlunidad de cotejar algunos
. aspectos del estado de este tipo de investigaciones en nuestros respectivos países y de la problemática que suscitan.
Bien presentado, bien sistematizado, con atractivas
y planos claros y perhles representativos de vías en teruaplén (agger) y en trinchera, este estudio es producto de un prolongado trabajo sobre el tereno. Con modestia y realismo, el autor declara que no fotografías, mapas
pretende hacer
un inventario exhaustivo de las
vías romanas en la región estudiada, sino que sólo comenta los
segmentos fosilizados de las calzadas reconocidas en superñcie, casi siempre en zonas boscosas. Se plantea,
por otra parte, una pregunta esencial, no fácii
de
responder: ¿Qué es una vía romana?
caminos empedrados medievales o incluso muy modernos, elocuencia de las fotografías aéreas en tierras de cultivo... En todas estas y en otras cuestiones la obra comentada no merece sino elogios.
Este comentarista no se cree especialmente fuerte
en análisis de la técnica ingenieril romana. Pero sí creo tener cierta competencia, como saben nuestros lectores, en la interpretación de los itinerarios romanos, y en especial del Itinerario de Antonino. Y desde este punto de vista me veo obligado a señalar deficiencias en la obra de Desbordes.
El Itinerario de Antonino
contiene dos rutas que
pueden interesar al Limousin, ambas bajo el título general
DE AQUITAI{IA IN GALLIAS. Una, Item a Burdigala Augustodunutn (Wess. 458,5 - 460,8) rodea la región tocándola en un punto tangencialmente. Otra, Item a
Burdigala Argantomago (Wess. 461,1 atraviesadeSaN.
Todo el primer capítulo, dedicado a responder
a
esta pregunta, reacciona contra una tradición erudita que "a multiplié les voies romaines en Limousin, désignant
- 462,3) la
Desbordes cita mal la segunda, atribuyéndole una mansio (Avaricum) que en realidad es de la primera. Pero
además
no hace referencia alguna a las
distancias
bien souvent, sous ce yocable, d'anciens chemins dont
consignadas en el documento romano.
I'origine est tantót antérieure, tantót postérieure
Mayor atención presta a la Tabla de Peutinger, pero está lejos de ser claro en sus conclusiones. En la primera columna de la página 33 hace una equivalencia correcta de 14 leguas :40 km., 1o que da parala legua el valor reconocido de 2.220 mefros. Pero en la segunda
d
I' Antiquit é cl as s ique."
La
consideración de las fuentes escritas de la
antigüedad clásica, pero sobre todo el estudio del relieve y la cartografia de la región, llevan a Desbordes a distinguir
entre dos series de vías, foutes deux en usage aprés la conquéte:
l) Por un lado los que dialectalmente se denominan caminos de pouge o pouéze, vocablo derivado del latín podia (: altura), es decir caminos de cresta o cima que discurren por las divisorias de aguas y no requieren obras de ingeniería. Aunque fueran aprovechados también por los romanos, no deberían ser considerados propiamente como "vías romanas". 2) Por otro lado las chaussées bdties, trazadas par monts et par vatx, souvent d la perpendiculaire du résseau hydrographique, que suponen el dominio técnico de un relieve montañoso e implican la existencia de un cuerpo de ingenieros. En zonas pantanosas, o en secciones llanas o de débil pendiente, estas vías se construyen en
ligero terraplén (agger), mientras que en secciones
de
pendiente fuefte coftan el relieve con trincheras (cavées) profundas. Son muchas las enseñanzas que de este estudio
local pueden extraerse para su aplicación a otras provincias y regiones del Imperio: cuestiones de toponimia, tipología de vados y puentes, anchura de las vías romanas, engañosa atribución a los romanos de
columna de la misma página encontramos 14 leguas : 51 km, lo que estiraría la legua hasta 3.643 metros. El siguiente párrafo resulta incomprensible para quien trate de proyectarlo sobre el mapa: "I¿s Fines méridionales des Lémovices indiquées sur la Table sont d 14 lieues de Périgueux et a 14 lieues de Limoges, soit deuxfois 5l km, au total 102 km, ce qui correspond exactement it la distance calculée sur le tracé de la voie... " El párrafo, a mi juicio, se entendería mejor así: Ies Fines méridionales des Lémovices indiquées sur I'Itinéraire d'AnÍonin sont d 2l lieues de Périgueux et a 28 lieues de Limoges, soiÍ 2l+28 = 49 = 109 km, ce qui correspond qssez bien d la distance calculée sur le tracé de la voie... " Señalaré finalmente, antes de pasar a mi
"Divagación", gue Desbordes ignora totalmente los trabajos de Denis van Berchem sobre la naturaleza del Itinerario de Antonino (recopilación de rutas que la mayor pafte de las veces fueron seguidas por unidades militares en misión de recaudación de la annona), y por supuesto todo lo que se ha dicho en El Miliario Extravagante sobre la interpretación gramatical del ltinerario. Este hecho da
l84l17
l0
Restitution de l'espace lémovice Vestiges de chaussée romaine Tracé schématique proposé Frontiére de l'ancien diocése de Limoges
lo
Limites départementales Cheminement d'origine préromaine d'Armorique á la Méditenanée
a
t
I
Chetlieu de la cité Agglomérations secondaires et statlons routiéres Bornes routiéres Voies romaines et voies romanisées dans
la cité
des Lémoylces
".";h Tn'il*'
más valor a la observación de Desbordes de que el itinerario entre Limoges y Périgueux (común a la Tabla de Peutinger y al It. de Antonino) "adopte, sur I'essenciel de son parcours, le tracé d'un cheminement de hauteur guidé par les lignes de partage des eaux." Si recordamos su anterior distinción entre caminos con y sin intervención de un cuerpo de ingenieros, podremos concluir -como siempre hemos sostenido- que las rutas del Itinerario de Antonino no siempre siguen caminos frazados por ingenieros romanos.
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En vista de las deficiencias señaladas, me he decidido a emprender un intento de proyección sobre el mapa de las dos rutas antoninianas a que antes me he referido. No he tenido en cuenta Ia Tabla de peutinger, de la que no dispongo de una edición completa y de la que Desbordes ofrece sólo un pequeño fragmento.
Aceptando el mapa de Desbordes sobre las voies romaines el voies romanisées en la región estudiada (parte
central de nuestro mapa)
y
ampliando
espacio
que es uniforme para
el
conjunto), he dibujado unos
trazados que me parecen en general congruentes. Antes de verlos de cerca, tres advertencias de carácter general:
Primera: Tal como opina Cuntz, y con él muchos autores, creo que en estas rutas, como en otras muchas de las Galias, hay que entender que las medidas corresponden a leguas (leugae) de 2.222 metros, y que el compilador del Itinerario erró poniendo
z.p. Sólo en un
tramo al sur del Garona, como diré, especulo con la posibilidad de que se trate realmente de millas.
[84] 18
el
considerado (para lo cual he tenido que reducir la escala,
Segunda: No se olvide que para mí la terminación de acusativo (y aquÍ hay nada menos que 14 en -um, además de 3 fines) puede significar que el núcleo de
población mencionado esté alejado de Ia ruta una cierta distancia. Lo veremos caso por caso.
Tercera: He utilizado los mapas de carreteras Michelin a escala 1/200.000 números 68, 69,71,72,73 y
75 (años 1966, 1965, 1956, t965, 1973 y 1964 respectivamente). Aunque estos mapas son excelentes, no me cabe duda de que en los mapas 1125.000 se podrían encontrar muchos más indicios topográficos y
toponímicos. Pasemos pues a considerar la primera de las rutas
antoninianas, empezando por copiarla de
la edición
de
Cunfz:
mansio pudo estar en la costa mientras que el núcleo de población habría que buscarlo talyezhacia en interior. Novioregum. Las distancias en leguas, siempre navegando por el estuario del Garona o Gironde, nos llevan a St.Georges, inmediato a Royan, más bien que a esta ciudad. De nuevo pido atención a las desinencias: Noviorego serÍa Royan, pero la mansio o estación de recolección de la annona, que estaría apenas a una legua, se designaría con el acusativo Novioregum.
Mediolanum Santonum. parece haber acuerdo
en
su ubicación en Saintes.
Aunedonnacum. Podría tener relación con el campamento militar comprobado en Aulnayr.
Raurarum. Según Cuntz hay que corregir Raraunum. Se me ocure Rom, pero no sé si alguien lo ha sugerido ya.
Item u Burdigulu Augustodunum m.p, CCLXXIIII: Blauto Tannum
Novioregum Mediolanum
Santonum
Aunedonnacum
m.p. XVIIII m.p. XVI m.p. XII m.p. XV m.p. XVI m.p. XX m.p. XXi m.p. XXI m.p. XXI m.p. XYVII m.p. XIII m.p. XX m.p. XXII m.p. XIIII m.p. XYII
Uniendo con tramos rectos
a la conclusión de que ciertas
etapas de las rutas antoninianas son fluviales, aunque ello
no se diga.
Tannum. En esta etapa es donde Cuntz conjetura
-
juicio sin razón- que "XVI" podría ser un error por "XXI". Tal vez 16+12 leguas le parecieron insuficientes para llegar a Royan por las actuales carreteras Nl37 y a mi
N730, y no pensó en trayectos fluviales.
Por las distancias, Tannum podría haber hacia St.Romain-sur-Gironde Pero teniendo en cuenta
o
Lomounum o Lemonum. Hay acuerdo en que
es
Poitiers.
Rqurarum Lomounum Fines Agrantomago Ernodorum Ayaricum Tincontium Deccidae Alisincum Augustoduno Respecto a la distancia total, Cuntz hace notar que la suma de las parciales no es 274 sino 279, y por su pafte opina que debería ser 284 (porque cree que en una de las etapas hay un error de 5 unidades). yo no creo que sea útil demorarse en estas cábalas. Ya en otras ocasiones he hecho constar que, aunque tengo una gran confranza en el trabajo concienzudo de los copistas medievales respecto a la transmisión de las distancias parciales, no tengo la misma conftanza en los conocimientos geográficos ni en la habilidad aritmética del recopilador original del I.A., a quien se deben los encabezamientos de cada ruta, y que no parece fuera muy diestro en el manejo del ábaco. Blauto. Sin duda effor por Blavio, como señala Ctntz y parece generalmente admitido. A la actual Blaye puede llegarse bien con las 19 leguas, pero atravesando primero el río Garona y luego el Dordogne. pienso que la patrulla para la que se escribió esta hoja de ruta haría el viaje mucho más cómodamente por vía fluvial. No es la
primera vez que llego
'
estado
Mortagne-sur-Gironde.
la desinencia de acusativo.
Ia
los cuatro
puntos
anteriores, encontraríamos que en unos casos las leguas disponibles apenas cubrirían la distancia a welo de páJaro (caso Royan-Saintes), en otros se quedarían muy cortas
(Aulnay-Rom) y en el último tramo sobrarían leguas (Rom-Poitiers). Pero el total del segmento arroji lZ leguas: 160 km, lo que puede coresponder muy bien a una vía que cubre una distancia a vuelo de pájaro de 14g km (Royan-Poitiers). Es decir, que de nuevo los acusativos indicadores de ramales conducentes a las ciudades (como es notorio sobre todo en el caso de Rom, apaftada de la línea recta) pueden resolvernos el problema.
Fines. No sé qué límite habría aquí en tiempos romanos, pero es curioso que las distancias nos lleven con bastante precisión al límite entre los departamentos actuales de Vienne y Indre. Agrantomago, o más bien Argantomago. Aunque el nombre se haya conservado en Argenton, parece que los arqueólogos la sitúan en la contigua St. Marcel. En cualquier caso, si damos crédito a la desinencia de ablativo, lavíatocaría el núcleo urbano o lo atravesaría.
Ernodorum. En el mapa Michelin 68, más
menos paralelo
a la
o
carretera Chateauroux-Bourges,
aparece un camino local rotulado tres veces como .,Levée de César" y después como "Ancienne voie romaine,,. Esa es nuestra ruta y por ahí habría que buscar Ernodorum, pero nada he podido encontrar.
Avaricum. No pongo en duda que sea Bourges,
la que nos lleva derechamente la
a
,,ancienne voie
romaine", pero la desinencia en -um me hace sospechar que la ciudad antigua estaría algo apartada de la vía.
Tincontium,
¿?
Deccidae. Cuntz propone corregir Decetiae, por lo que supongo que hay otras fuentes antiguas que dan ese nombre. A una distancia conveniente de Bourges (42 leguas) está Decize, que parece conservar el nombre.
' F. Turruur, "Quelques remarques sur le reseall routier du centre ouest gallo-romain", en Caesarodunum 1983. n, XVlll, que contiene las Actes du Colloque Les voies anciennes en Gaule, pág. 298: ,.on doit souligner... la présence d'un camp mllitaire á Aulnay-de-saintonge sur la voie Saintes-Poitiers, á la limite des territoires des pictons et des Santons, et á un carrefour oü arrive une
yoie venant de Limoses "
[84] 1e
Alisincum. Bourbon-Lancy, cuyo segundo elemento podría derivar del nombre antiguo, está algo lejos
de
Decize (más de 35 km, cuando las 14 leguas son poco más de 31 km). Podemos agarrarnos de nuevo al acusativo, pero no es la única posibilidad. En la toponimia
menor veo un Mont d'Azy :unos 14 km al norte Bourbon-Lancy, a distancias convenientes tanto
de de
Decize como de Autun. ¿Alisinco > Azy?
Augustoduno
:
Trsvectus, Sin duda hay que leer Traiectus, término que como es sabido suele aplicarse en los
Autun.
itinerarios al paso en barca de un río imporlante. El único en juego es el Dordogne, y el examen atento del mapa nos lleva a precisar el lugar con bastante seguridad: Sorts, próxima a Limeuil, justo después de que el río reciba las aguas del Vézére. Este
Paso a la segunda ruta, cuyos datos son así:
río que puede entrar aquí
Ifem u Burdigala Arguntomago m.p. CXCVII Sirione Ussubium
Fines Aginnum Excisum Travectus Vesunna
Fines Augustoritum Argantomago
m.p. m.p. m.p. m.p. m.p. m.p. m.p. m.p. m.p. m.p.
XV XX
punto parece estar
XV
1964, fecha de mi mapa)
carretera local D2, probable heredera de la vía romana.
XXI
Vesunnu. Se da por seguro que es Périgueux, y deb¡ haler bqSnas razonqs p4ra ello. Fines. Me remito a lo dicho al principio sobre un párrafo confuso de Desbordes. Augustorilum. Limoges; también esta identificación se da por segura. Argantomago, Aquí sí que hay un problema de difícil solución. Ya hemos visto en la ruta anterior que el nombre se ha conservado en Argenton, pero que los arqueólogos optan por la contigua ciudad de St. Marcel.
XVIII XXI XXVIII XXI las
Agen nos obligaría a proponer un rodeo para el que, realmente, no parece haber justif,rcación ni indicios. El cómputo en millas, en cambio, parece quedarse corto. Las dos primeras mansiones no nos sugieren nada, pero la tercera, Fines, podria darnos una pista. Podría tratarse aquí de un límite entre dos circunscripciones importantes, por ejemplo entre Aquitania y la Galia Lugdunense, y no parece imposible que cuando se estableció esta ruta tal límite estuviera en el Garona. Llevemos más lejos la hipótesis: una vía que saliera de Burdeos en dirección a Agen podría muy bien cruzar el Garona hacia Tonneins, es decir a unos 87 km de Burdeos, equivalentes a 59 millas (XV+XX+XXIIII).
la división provincial
sea
indefectiblemente el criterio para optar por una u otra unidad de medida. Yo mismo he sostenido respecto a otra vía aquitana, que además penetra en Hispania, que hay que medirla en leguas (ME 76, l6s). Pero también creo haber dejado claro (ME 76,13s) que hay casos en que el
a otra se realizaba
precisamente en un Fines inferprovincial, y que sin embargo la administración romana nunca llegó a delimitar de manera clara los ámbitos geográficos de uso de la milla o de la legua. Admitiendo como probable el cómputo en millas hasta Fines,la dificultad ahora es que XV leguas no son suficientes para llegar a Agen. Esta insuficiencia, unida a la insuficiencia de las dos cifras siguientes, como veremos, para llegar a un Traiectus verosímil, nos obligan a colocar "Aginn.um-empalme" bastante al norte de Agen, qurzá a 15 ó 20 km (No puedo precisar más, me falta aquí
el mapa Michelin 19). A ese punto 184120
hoy (o en a cruzar el río en barca la
XIII
:
paso de una unidad de medida
distancia requerida de las
4tansiones anterior y posterior, y por ahí lleva
De nuevo el total no es la suma real de
pretendo que
a la
XXIilI
distancias parciales (196), y lo que a Cuntz le gustaría no es ninguna de estas ciflas sino 213. No hagamos caso, aunque ya veremos al final que Cuntz tenía sus razones. Se nos plantea aquí, de entrada, la cuestión de ia unidad de medida. El cómputo en leguas hasta Aginnum
No
contribuyentes de Aginno a pagar la annona a la unidad militar recaudadora. Excisum. ¿Hacia Monflanquin? Mi diccionario latino ilustra el significado de este verbo con el ejemplo vias per montes excidere, "cavar o abrir caminos a través de las montañas". Habría que ver si en Monflanquin la topografía justifica este nombre para una mansio.
acudirían los
Pero tanto una como otra están a una distancia de XXI leguas. Según Cuntz, lo
Limoges muy superior a
que debería decir el itinerario (pero ningún códice dice) es
XXXVIII. Problemas análogos hemos encontrado más de una
vez en Hispania. Algunos se resuelven bien apelando al homeoteleuton o salto de línea entre dos palabras iguales o similares, fenómeno bien estudiado en los análisis de textos. Pero para recurrir a este expediente tendría que estar documentada la existencia en estos parajes de otra ciudad de nombre parecido a Argantomago, y no parece que sea ese el caso.
Otra posible explicación es contar la distancia hasta o desde un límite de circunscripción que llevaría el nombre de la ciudad a la que no se puede llegar (convento cesaraugustano en lugar de Caesaraugusta en nuestra ruta 431) o de la que no se puede partir (convento bracarense en lugar de Bracara en nuestra ruta A20). Pensando en esta posibilidad he medido 21 leguas desde Limoges, por la carretera N.20, para ver si me llevan a un lugar geográficamente destacado. (Me extraña, por cierto, que Desbordes no tome en consideración la N.20 como heredera probable de un antiguo camino directo de Limoges a Argenton.) He llegado a un pequeño lugar cuyo nombre, La Croisiére, se refiere al cruce con la N. 142. Lo interesante es que esta última es en esta parte un camino de pouge, que sigue la divisoria de aguas entre los ríos Brame y Semme. El dato puede ser interesante, pero insuficiente
para decidir que hasta aquí llegaba la jurisdicción de Argantomago. No tengo elementos para proseguir la investigación. Gonzalo Arias
Abóbriga y el Monte Medulio Comentario Raúl VILLANUEVA GONZALEZ. La mansión marítíma Abóbriga en Mons Medulius. Trabajo inédito, Vigo, abril de 2002.
El Miliario Extravagante está entre los contadísimos privilegiados que han recibido una copia de este original y meritorio trabajo, encuadernado como libro de 119 páginas. Las actuales técnicas de reprografía pemiten (a un coste que sin duda no es baladí, pero tampoco inaccesible) la impresión y encuadernación, con gran pulcritud e incluso con fotografías y mapas en color de muy buena calidad, de reducidísimas tiradas de libros, incluso de uno en uno. Paradójicamente, se diría que el progreso de la técnica nos deluelve en cierto modo a los tiempos anteriores a Gutenberg, cuando un libro era una obra artesanal y casi irrepetible, y no un producto fabricado en serie. Aunque el autor insiste en presentarse como
"aficionado novel"
y
se disculpa por la "osadía"
de
especular sobre los textos clásicos de Plinio, Mela, Silio Itálico, Estrabón, Ptolomeo, etc., lo ciefto es (si se admite la opinión de otro ahcionado, aunque ya no novel) que nos encontramos ante un estudio muy bien documentado,
que por la congruencia de su razonamiento y por su erudición nada tiene que envidiar de las publicaciones de
algunos de los profesionales de los que discrepa. La tesis fundamental es la ubicación de Abobriga
en el monte de Santa Trega o Santa Tecla, entre La Guardia y la desembocadura del Miño, donde desde 1864 se conoce la existencia de un importantísimo castro ocupado hasta época tardorromana. El testimonio de Plinio (//1/ IV, 1 12) es decisivo para esta identihcación: "A Celenis, conlenfus Bracarum, Helleni, Gravii, Castellum Tyde, Grecorum soboles omnia. Insulae Cicae, insigne oppidum Abobriga, Minius amnius IV M. Pass. Ore spatiosus, Leuni, Seurvi..."
(A
continuación
de los
Celenos, comienza el
convento de los Brácaros con los Helenos, los Grovios y el Castelo de Tuy todos ellos del linaje de los griegos, las islas Cíes y el conocido opidum de Abóbriga. Sigue el curso del Miño, con una desembocadura de 4.000 pasos de ancho, los Leunis, los Seurvis...) Pero por supuesto no es este el único argumento.
Povo s y1a ép igráfia, ciudacl éstf úliimlqué s e s ituari a en Briteiros, a orillas del río Avo, al SE de Braga.
doi
Añadamos que ni una ni otra han de confundirse con la Adrobrica citada por Mela entre los áftabros, que suele identificarse con El Ferrol. Al analizar el "Padráo dos Povos", columna erigida
por diez pueblos en
Chaves,
de la que se tienen
referencias desde 1548 y que se encontró en 1980 en el fondo del río Támega (aunque se tienen dudas de que sea la misma o si hubo dos parecidas), Raúl Villanueva no sólo deja en claro la identidad de los Aobrigenses, sino que se demora en revisar los datos de que se dispone sobre los okos nueve pueblos y en hjar la ubicación de sus capitales AquiJlavienses, Bibali, Coelerni, Equaesi, Interamici, Limici, Aebisoci, Quarquerni y Tamagani. Dos cuestiones de detalle. Una es la frjación del límite entre los conventos lucense y bracarense en el río Verdugo, en 1o cual convenimos varios investigadores y que es importante para mí pues en ese límite (pero no en la costa sino en el interior) es donde se iniciaría laruta20. Véase mi Repertorio, págs. 57-72. Otra es el mapa de las ciudades que llevan el componente "briga", que dibujan claramente el ámbito de predominio céltico en Hispania,
como han hecho notar Untemann y otros autores. Excluyendo de la lista las más que dudosas Arcos de la Frontera (Cádiz), Aroche (Huelva), Carith Briga (Carmona?-Sevilla), la para mí desconocida Augusta Briga (El Pedroso-Sevilla) y la muy aislada y discutible Berga (Barcelona), el límite de las tierras célticas coincidirá prácticamente con la línea separadora de pueblos indoeuropeos e ibéricos trazada en el Mapa 2 de
mi Atlas histórico de la península ibérica
(agotado).
Quedarán fuera del ámbito céltico o indoeuropeo, en especial, todas las tieras vascas, navarras, aragonesas y catalanas al norte del Ebro. La parte final deI volumen, presentada como "Anexo", se dedica a defender otra tesis ya enunciada en el título: que el famoso Monte Medullius hasfa el que
Se consideran detenidamente los resultados de
las excavaciones en el castro del Trega, que arrojan luz sobre
fueron perseguidos por los ejércitos romanos los derrotados cántabros y astures no es otro que el mismo monte Trega. La idea es sugestiva, pero el propio Raúl
su importancia
y su cronología, se analizan las fuentes y sobre el Trega y sus alrededores, y medievales antiguas
Villanueva reconoce que "necesita prestarle atención y más tiempo para poder concluir con argumentos más
se repasan las conclusiones de los investigadores que se han ocupado de este tema. Entre estos últimos, ocupa un lugar destacado Juan Domínguez Fontenla, del que se reproducen Íntegros los artículos que con el título "La ciudad en Santa Tecla. Abóbriga(?)" publicó en 1914 en el periódico guardés La Voz del Tecla importante de Raúl Villanueva (y Ot.,
amplios de los que aquí sostengo." Teminaré este comentario expresando mi sorpresa por algo que se anuncia en la presentación del volumen. Se dice allí que éste "se corresponde con un capítulo del
"onctutiOn
en esto discrepa de Fontenla) es la distinción entre Ábobrig, de plinio y la Aobriga o Avobriga del Padráo
la
estudio desarrollado..., ya finalizado y en fase de redacción, sobre las vías y calzadas de la Gallaecia Romana conocidas como vías XIX y XX (Per Loca Maritima) del itinerario de Antonino Augusto, titulado: Definitiva Restitución de Vico Spacorum y las mansiones 184121
romanas de: Abóbriga, Ad Duos Pontes y Brigantium, entre otrqs- coruespondientes a la prerromana vía
conocida como Per Loca Maritimq del ltinerario de Antonino Augusto."
El largo título del estudio anunciado tiene
nadie piense que tal numeración proviene de una fuente latina.) Pero me pregunto si Villanueva es consciente de que somos más de uno los que pensamos que ha de
entenderse vicos caporum, algún
motivo para sorprender. Veamos: DeJinifiva. Adjetivo que casa mal con la modestia mostrada por el autor en otros lugares. Opino que el carácter "def,rnitivo" de una interpretación de la historia
sólo puede darlo la práctica unanimidad de los historiadores que sigan a quien ha hecho fal interpretación.
Vico Spucorum. Así se escribe esta mansio en la ruta antoniniana 20. (Es sabido que yo prefiero hablar de "rutas" y no de "vías" antoninianas, y que prefiero la numeración arábíga establecida por Saavedra para que
lo que conlleva ciertas
implicaciones en relación con
el acusativo plural y
Abóbriga. ¿Es un lapsus o es intencionado citarla como mansio? No figura ni en la ruta 19 ni en la 20.
... la prerromanu vía.,. Aquí, la sorpresa
agradable.
argumentos para apoyar la idea de que la ruta 20 sigue en pal'te una vía prerromana, establecida por mercaderes fenicios o griegos. Véanse las páginas de mi Repertorio antes citadas, que espero consulte Villanueva antes de
ultimar su estudio.
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184122
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En efecto, hace ya 38 añitos que acopié
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pa*r:s"ánricn ,}*rxtXE
los
cáporos.
fJn viejo estudio de las vías entre el bajo Miño v la cost a atlántica Comentario
J.M. del TAMUJE. La vía romena "per loca maritima por el baio Miño y costa Atlántica. La Guardia (Pontevedra) , 197 5 .
Esta breve monografia estaba hace tiempo incluida
en nuestra bibliografia, pero sólo hace muy poco he tenido acceso a ella gracias a los buenos oficios de un
conesponsal que me ha facilitado fotocopia' Aunque mi desacuerdo es radical respecto a Ia propuesta de rastrear la per loca maritima (A20) en la zona estudiada, sé apreciar Ln Tamuje, como en tantas otras ocasiones análogas, la solidez de aquellas de sus conclusiones que se basan en un buen conocimiento del tereno. Como investigador de gabinete y a distancia en la mayoría de los casos' soy óonsciente de que debo reconocerme tributario de 1o que otros ojos ven, para que pueda tener crédito en cambio mi mura.á, a veces "extravagante ", de interpretar los datos del Itinerario de Antonino para compatibilizarlos con la realidad geográhca.
La posición de Tamuje ante las aparentes de la via per loca maritima no se
incongruencias
diferencia en lo esencial de la adoptada por la mayoría de los investigadores. No cree que haya error en el título atribuido a esta ruta, y en consecuencia la busca por la
orilla izquierda del Miño desde Tuy (pese a que Tude no se cita .n tu AZO; y por la costa hasta Vigo y Redondela' Como los datos antoninianos no encajan en este trayecto,
no tiene empacho en declarar que el célebre documento romano está plagado de errores en topónimos y en medidas de longitud. Es sabido que mi posición es precisamente la inversa: los datos numéricos son exactos ii los sabemos interpretar, mientras que el título "per loca maritima", puesto por un recopilador que trabajaba en Roma sin conocer la geografía del lugar y al que probablemente indujo a error el hecho de que esta ruta se mida parcialente en estadios, no debe tomarse en serio'
inierpretación quedó suficientemente razonada en mi Repertorio, pág. 57 Y sigs. Dejemos pues la ruta antoniniana y veamos las vías que Tamuje encuentra en la zona estudiada. Me servirán éstas para confitmar y aporfar precisiones a las que yo había retenido para el Mapa-Indice, basándome sobre todo en el atento estudio de los mapas topográficos, donde encontré varios topónimos "Estrada" (cf. ME 20,7-10), y en un trabajo de Elisa Ferreira (cf. ME 71, 17 ss')' Respecto a la vía de Tuy (Tude) a La Guardia (nuesffa Gi;, se nos dice que "saliendo de Tuy, es fácil ir comprobando restos de algun camiño real, verea vella, calzadas, estradas, etc, que sin duda son vestigios de la antigua via". Patece, no obstante, que en esta parte no se observan directamente inffaestructuras viarias romanas' y que es sobre todo la alineación de diversos testimonios de *ltrtu romana -poblados, castros romanizados, villae,
Mi
minas, esculturas, estelas, etc.- lo que da la seguridad de
la
estrada vella (vieja, pero relativamente moderna) ha quedado sepultada la primitiva calzada'
que bajo
Distinto es el caso de la vía litoral de La Guardia a Bayona, Vigo y Redondela (para nosotros G2, que coincide en su tramo final con la A19), a lo largo de la cual Tamuje señala y fotografía varios restos de calzada' La defectuosa calidad de la fotocopia de que dispongo me disuade de publicar las imágenes' Se trata del tipo de calzada empedrada con grandes losas irregulares, de
bordes redondeados por
la
acción del tiempo,
en
disposición no geométrica. No parecen apreciarse roderas de carros, ni éstas se mencionan en el texto. Lo que más me ha interesado de este trabajo es la confirmación de una vía directa, señalada también por otros autores, de Tuy (Tude) a Bayona (Erizana), pese a que no encaja en los esquemas preconcebidos de Tamuje:
"No tenemos inconveniente en admitir ese trazado por San Julián, Couso, Donas... Bayona, como auténtica calzada romana, pero de las rudimentarias e interiores'" Hay que hacer no obstante la salvedad de que el examen del mápa 261 (1943) del IG obliga a excluir el paso de la vía poila Hospedería y Capilla de San Julián, encaramada en él monte más alto de la comarcay aparfada 3 ó 4 km
del topónimo "Estrada", por donde sin duda iba
camino.
En 1989 (ME 20)
argumenté,
creo
el
que
cumplidamente, que por ahÍ iría una desviación de la ruta Af9, que se apartaba en un trecho de la gran arteria
gallega N-S, estirando hasta XVI+XVI millas las etapas Tude (Tly) - Burbida (?) - Turoqua (Arcade)' De los miliarios hallados en Arcade, Redondela y Sajamonde se
deduce que la distancia Tuy-Arcade por la calzada principal y directa era sólo de 23 millas, o sea 9 millas menos que el rodeo de la ruta antoniniana.
señalada en el trabajo comentado coincide en parte con la que yo presumí en 1989 por la bisectriz del ángulo formado por el Miño y la costaitlántica. Cita Tamuje las palabras del historiador guardés Rodríguez Fontenla sobre una via interior rrudimentaria" que desde La Guardia "cruzaba el Valle de El Rosal, comunicando sus castros con los de Loureza"' para dirigirse a Borreiros, Belesar, Barcala, en Donas, y ieguir poi el Burgo hasta Bayona'" Parece que se trata del "Camino de Campo Grande a Torroña" 0G 261)' pero no veo lógico, una vez en Belesar, apartarse a oriente 3 kilómetros hasta Donas para virar luego a occidente en
Finalmente
busca de
otra vía
Bayona.
G.A.
184123
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coMENTARIo AL TRABAJo
pr J.M. oE Tnuu¡e
VÍa principal Bracara-Luco por Tude y Aquis Celenis, atestiguada por los miliarios Vía romana según Tamuje
* r.] + a Restos de calzada segÚn Tamuje -
-
=====
VÍa "secundaria" o "de las rudimentarias e interiores" según Tamuje, lrazado algo modificado por G.A. Sería en su mayor parte un tramo de la ruta A19 segÚn G.A. Otro tramo de la ruta Al9 según G.A. Puentes romanos según Tamuje
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Caminos conquenses Comentario Santiago PALOMERO y Gustavo VILLALBA. Alfonsípolis, Cuetca, 2002.
Singular y atractivo librito de bolsillo, en el que hay que distinguir dos paftes gue, aun siendo complementarias, son de índole enteramente dispar.
El texto, que ocupa alrededor de un tercio de las páginas, es de Santiago Palomero, quien hace gala como es habitual en é1 de su buen humor, su erudición y sus dotes literarias. Entre las explicaciones generales sobre las vías romanas conquenses, retengamos este párrafo que
deja entrever
la
dif,rcultad
de decidir lo que
verdaderamente "caminos romanos"
son
:
"Los estudios realizados en la provincia
de
Cuenca nos llevan a la conclusión de que para construir las vías no existía un material preponderante, sino que
lógicamente, se aprovechan los materiales más abundantes de cada zona. Por lo tanto, si observamos una vía que pase por terreno montañoso, veremos que el
pavimento está hecho con caliza, mientras que en ferrenos llanos el material varía, siendo la superficie de guijarros mezclados con morÍero, como se aprecia en Ercávica y Segóbriga, o de simple tierra. Sólo la,s encontramos enlosadas en las entradas a las ciudades." La red viaria romana que Palomero propone ahora en su provincia mantiene los grandes rasgos de la que propuso en 1987 en su importante obra Las vías romanas en la provincia de Cuenca, comentada en ME 16. Por ejemplo, es sabido que Palomero, pese a sus reiterados
elogios a El Miliario Extravagante, se resiste a suscribir una de nuestras tesis más revolucionarias, como es la orientación constante de la Cl (Vía del Espafio) a través de su provincia y la prolongación de tal vía desde las cercanías de Segóbriga bajo el asfalto de 1a vieja carretera
de Madrid a Valencia
y el pavimento de la Calle de
Atocha. Las posiciones no parecen haber cambiado a este respecto.
En lo que sí hay algún cambio es en el trazado propuesto para l,a ruta antoniniana A31. Aunque no se renuncia a su paso por la actual provincia de Cuenca (de lo cual yo discrepo), se proponen modificaciones en su frazado de las que ya se trató en nuestras páginas. Véase el arlículo de Palomero en ME 76,24ss y mis "Apostillas
tozudas" explicar
al
mismo.
La
gran dihcultad sigue siendo
la omisión en el Itinerario de Egelasta si
se
sostiene que la ruta pasaba por Iniesta.
Otras novedades hay en puntos concretos, por ejemplo en la zona de Almodóvar del Pinat, donde parece haberse tenido en cuenta la obra de Manuel Navarro comentada en ME 80,30ss. La mitad de las páginas de texto está ocupada por un divertido relato titulado "Un paseo extravagante por la Cuenca romana" que transcribe un supuesto "testimonio" hallado en las excavaciones de Ercávica, legado a la
El viaje por la
Cuenca romqna. Ed
posteridad por un ciudadano romano a quien el emperador
habría confiado la misión de estudiar la posibilidad
de
explotar las minas de espejuelo (lapis specularis) cercanas a Segóbriga. En un ágil revoltijo de épocas y personajes desfilan por la pluma de este "naturalista" rómano, buen discípulo de Plinio el Viejo, tanto los paisajes de aquella Hispania de la que pronto queda prendado como los espíritus (o ectoplasmas, o prefiguraciones, o Dios sabe qué) de un ingenioso caballero a lomos del caballo Rocinante, de un caminante por los caminos alcarreños que sueña con ser enterrado en Iria Flavia, o incluso, ya con mención de nombres y apellidos, de contemporáneos (de Palomero) que gracias a la magia literaria encajan en el contexto de hace dos mil años. Y como colofón, se nos dice que el sorprendente texto está firmado por "Franciscus Suay, el Valeriense". Ya en serio, aclara Palomero que con su fantasía literaria ha querido rendir homenaje a Francisco Suay, iniciador de Ias excavaciones en Valeria (a la que consiguió devolver su nombre en lugar del anterior "Valera de Arriba"). "He tenido la fortuna de conocerlo -dice-, siempre me pareció un noble patricio romano escapado de su tiempo..."
En los dos tercios restantes del librito están los mapas. Ya que Santiago Palomero y Gustavo Villalba figuran como coautores, y los textos son de Palomero, hay que dar por seguro que el trabajo de ordenación y presentación de los mapas es mérito (no pequeño) de Villalba, aunque sin duda la señalización de los itinerarios está hecha bajo la dirección de Palomero.
No es pequeño mérito, en efecto, haber conseguido meter en un librito de bolsillo de 12 x 15,5 cm la casi totalidad de los mapas 1:50.000 del Instituto Geográfico correspondientes a la provincia de Cuenca. Las reproducciones en color son de excelente calidad, perfectamente legibles aunque se haya reducido la escala hasta el
7 5oA.
Cada hoja del
IG se ha dividido en 8 fragmentos
numerados de I a 8, y cada uno de estos fragmentos ocupa una página del librito. Con rotulador amarillo se han marcado sobre los mapas las vías consideradas como principales, y con rotulador naranja las secundarias.
Los
números
del IG, los
números
de
los
Íiagmentos de 1 a 8 y la numeración correlativa de los fragmentos (:páginas) de 1 a 123 se combinan, con un sistema de remisiones en los márgenes, para facilitar el paso de un mapa a otro. Es inevitable que esto resulte algo complicado. Algo de confusión añade la existencia de otra numeración, la de las páginas del libro, que para los mapas va de 67 a 198 (el fiagmento-página 1 es la página 67 del libro).
l84l25
Falta un mapa provincial que ofrezca una visión de conjunto (no lo es el esquema rudimentario que aparece en la cubiena posterior). Aquí entra en funciones el Servicio Cartográfico de El Miliario Extravagante. Como la obra, pese a los puntos
que puedan parecemos discutibles, es sin duda fundamental para cuantos quieran proseguir la investigación en tierras conquenses, nos hemos decidido a componer pacientemente las piezas del rompecabezas. El resultado se ofrece en esta página.
5s9
Una última observación.
Al
comparar estos mapas
con los de mi propia colección he visto que a veces Palomero y Villalba utilizan mapas más antiguos que los míos, y a veces es al revés. Es importante utilizar. siempre que sea posible, las ediciones más antiguas de las hojas
del IG, que rotulaban casi todos los caminos. En las ediciones más modernas no sólo se prescinde de la rotulación, sino que se da el caso de que caminos que llevaban un nombre signihcativo ("vereda", "camino real", "cañada", etc.) han desaparecido por completo. G.A.
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Vías romanas de la provincia de Cuenca según S. Palomero y G.Villalba
Vías
Vías
184126
principales ,'a---^
secundarias
Ríos
LÍmite de provincia
(Servicio Cartográfico de El Miliario Extravagante)
I
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La vía C ástulo-Saetabis Comentario Martín JIMENEZ COBO. "La via romana Castulo-Saetabis". Boletín del Instituto
de
Estudios Giennenses CLXXIX, julio-diciembre 2001, pp. 101-151.
Dispongo de dos versiones de este trabajo. El autor
Lostal 51. Magdalena de Castro, Linares. Es
de
ofreció en un principio a El Miliario Extrwagante :una primera versión de 163 páginas; pero éstas, aunque con
Claudio y marca una milla a Castulo. Lostal 78. Entre Navas de San Juan
bastantes espacios en blanco, eran excesivas no ya para un
del Puerto. Es de Trajano. Lostal 90. En Navas de San Juan. Es de Adriano. los dos que han escapado a Jiménez Cobo son: ' YLostal 101. Se da como procedencia "la partida de Puente Quebrada de Linares". Es de Caracalla. Aunque
artículo en el boletín, sino incluso para un Anexo. El BIEG tenía naturalmente más capacidad editorial que nosotros, y allí fue a parar el trabajo. Pero aún así, hubo que recortarlo de manera considerable. Esto es de lamentar, porque ha sido amputado de elementos muy valiosos. Y lo que es peor, los recoftes se han operado a veces con poco tacto, de manera que cuando se dice por ejemplo "De ellas flas inscripciones] hablaremos en el capítulo dedicado a la epigrafía", el lector buscará en vano tal capítulo, sin saber que ha sido suprimido. En este habajo, no parece que Jiménez Cobo haya
un
desenfoque rutinario repetidamente denunciado en nuestras páginas: la no distinción entre vías y rutas, o más bien la consideración como "vías" de superado
las rutas descritas en el Itinerario de Antonino. No es una simple cuestión de palabras. Llamar "vía" a la ruta A2, desde los Pirineos a Cástulo dando un gran rodeo por Cartagena y tierras bastetanas, lleva implícitamente a
suponerle una unidad de concepción y ejecución, suposición que se explicita cuando se propone, "para evitar confusiones", que "debería acordarse llamar... Vía Augusta a la del Itinerario de Antonino por Basti, Acci, etc." No, amigo Martín: el nombre Via Augusta fue dado por los romanos a un par de vías en Hispania, y el papel de1 historiador no es rehacer la historia a su conveniencia, sino tratar de averiguar lo que realmente fue, es decir, a qué vías aplicaron esa denominación los que la acuñaron. Pero vengamos al llamado Camino de Aníbal, que es el que aquí se estudia. El mérito de Jiménez Cobo es
doble: por un lado, un buen conocimiento directo del terreno, en especial en las provincias de Jaén
Real; por otro lado exhaustiva,
de
y
Ciudad
la
paciente recopilación, casi testimonios epigráficos y literarios
antiguos y modernos relacionados con esta vía, así como de las conclusiones de múltiples investigadores. En cuanto a la epigrafía -suprimida, como he dicho, en la versión publicada-, por un momento he pensado que El Miliario Extravaganfe podría al menos publicar los miliarios de esta vía, que no son muchos (no inscripciones funerarias u otras, muy numerosas). Pero desistí al comprobar que todos están publicados por Lostal, en obra que puede consultarse en cualquier buena biblioteca (*). Es más, Lostal reseña otros dos miliarios que Jiménez Cobo no ha tenido en cuenta. Los que ambos autores reseñan son: Lostal 44. Hallado en Aldeahermosa, paraje del
Portichuelo. Es de Tiberio
y
Santisteban
Lostal
1o situa'Junto al cruce del Guadalimar", creo que debe tratarse de uno de los puentes sobre el Guarrizas o el
Guadalén.
Lostal 178. Linares, cerca del Cortijo de Los Arquillos. Descubierto por Silliéres hacia 1980. Es de Constantino II.
En cuanto a los testimonios literarios relativos a la vía, es lástima que los recortes operados hayan excluido algunos de relativa antigüedad, bastante interés y no fáciles de encontrar. Como botón de muestra, terminaré copiando de la versión original de Martínez Cobo el siguiente párrafo, que é1 toma de J. Lozano, Basfifania y Contestania en el reino de Murcia,Murcia 1794: "Dixe que la dirección del camino tenía por objeto
inmediaciones de Chinchilla; y con efecto un testimonio que obra en el Archivo de Simancas y fue copiado posteriormente a 1576, afirma de la calzada 'ser camino abierto por Hérculkes y que se dirigía a esta ciudad'. Los naturales añaden que aún se descubre en nuestros días corriendo por el Convento de Los Llanos y por Santa Ana de Argamasilla... Todos ven que llamar camino de Hércules la calzada es fábula de los tiempos de antaño; pero aquí se origina la verdad del camino romeno, que es nuestro objeto. Una miscelánea sobre antigüedades que debo al favor de Don Josef Barnuevo, hijo de aquella ciudad, confirma la especie del camino y que tiene asimismo varias inflexiones. Que se dexa ver en la Casa del Alcalde, término de Albacete; que aún tiene tres leguas de longitud; que viene a Nuestra Señora de los Llanos; luego al término de Chinchillay toca el ceto nombrado Hellín. Que hasta zafar el término de aquella Ciudad solo se descubre en pequeños tránsitos y
las
destrozado; que después aparece así descompuesto en el heredamiento de los Rubiales, donde se notan cimientos de población arruinada; y que en una de las azas de Don
Vicente Cano Manuel
se han recogido
monedas
romanas... Que en fin dicho camino sigue desde esfe parage hasta la heredad de Aldea lVueva, donde se ve el Pozo Milla y también los vestigios de grande población muY
Patentes G.A.
(*)
Joaquín LOSTAL PROS. Zos miliarios de la provincia
Tar r ac one
ns
e. Institución Fernando el Católico, Zar agoza, 1992.
t8412i
Alcácer do Sal Breve comentario Joáo Carlos Lázaro FAzuA. Alcácer do Sql ao tempo dos romanos. Edigóes Colibri Cámara Municipal de Alcácer do Sal. 2002.
Mi afiiculito "Imperatoria Salacia" (ME 78, 9ss) encontrado resistencias en Portugal, como era previsible. Dudar de la ubicación de aquella ciudad romana en la actual Alcácer do Sal es ir en contra de un
ha
si no universal, al
-
igualmente a Malateca), y sobre todo en la medición de las distancias dadas por el Itinerario de Antonino y por Estrabón y en la mayor proximidad al lugar donde aparecieron inscripciones que hablan del municipio
menos sólidamente
salaciense. No parece lógico que "a residéncia de uma das
arraigado en la arqueologÍa oficial. Para tratar de disuadirme de mi presunto error, mi
enviarme el librito al que se refiere este comentario. Muito obrigado, caro amigo, mais... Amicus Plato sed
maiores famílias do município salaciense" (palabras de Alarcáo recogidas por Faria) esté a unos 30 km de la cabeza del municipio, es decir a una buena jornada de viaje. Debo hacer notar que Faria cuya obra constituye
magis amica veritas.
sin duda alguna una excelente puesta
De ningún modo me creo depositario infalible de la verdad, pero mi verdad particular en este caso es que no veo en esta preciosa obra base alguna para contradecir mis razonamientos. Recordemos que yo proponía situar la romana Malateca en Alcácer, e Imperatoría Salacia mucho más arriba, en algún lugar entre Porlo Rei y la confluencia Xarrama-Sado. Mis argumentos consistían en
conocimientos arqueológicos sobre Alácer
convencimiento,
buen amigo Luis Fraga da Silva tiene la amabilidad de
la falta de hallazgos concluyentes en Alcácer (los
vestigios
de edificios
romanos podrían coresponder
habiendo dedicado varios años
a la
al y
día de
los
su término,
investigación y
manejado una extensa bibliografía- no es precisamente un
especialista en itinerarios romanos. Nada de medir distancias. También hay algún curioso desliz, como la atribución al Itinerario de Antonino y al Anónimo de Ravena respectivamente de la mención de una ciudad (o
río?) con los nombres de CATON o CETON.
Estos
nombrelno aparecen en las citadas
G.A.
fuentes.
Política viaria en Hispania Breve reseña J.M. SOLANA y L. HERNANDEZ GUERRA'. La política viaria en Hispania, siglo
III
d.C.,
Universidad de Valladolid, Valladolid, 2002
Apenas unas líneas para referin.ros a esta novedad bibliográfica que anuncia en el título objetivos distintos de los que parece querer alcanzar el contenido. El trabajo de Solana y Hernández Guerra forma pafte, se anuncia en la introducción, de una obra más amplia destinada a contribuir "a un mayor conocimiento de la política viaria en la Península Ibérica". Publicado ya el volumen correspondiente al siglo IV, la serie se amplía ahora con
éste, dedicado
al s. III d.C. En realidad,
el libro
se
estructura en dos secciones, [a primera mayoritariamente
estadística y la segunda exclusivamente epigráfica, una simple recopilación (incompleta) de miliarios. El enfoque
es
absolutamente tradicional,
no sólo porque
la
bibliografía recure exclusivamente a grandes obras clásicas -y aun ignora algunas, como el trabajo de recopilación de Roldán titulado Itineraria Hispana-, sino
también porque considera como "vías" las rutas antoninianas (p 11) y excluye nuevas lecturas e interpretaciones de algunos miliarios (sin aclarar qué [84) 28
criterio se siguió para optar por la lectura escogida). En ocasiones, incluso, se ignoran por completo inscripciones viarias publicadas, así como otras que cuentan con un número propio en los museos. No es raro, por tanto, que en este contexto de conservadurismo metodológico la
presencia
mínima de ME quede reducida a la -l968.
expresión, una sola cita de Gonzalo Arias del año
En resumen, un desconceftante volumen que.
si
bien no aclara nada al lector sobre la política viaria seguida en Hispania en el siglo III d.C., tampoco cubre las (escasas) lagunas que tenía el trabajo de Lostal sobre los miliarios de la Tarraconense (Zos miliarios en la Provincia Taruaconense, Zaragoza, 1992). Esperaremos, en fin, ansiosos los volúmenes correspondientes a los
siglos I y II, porque quizás en ellos se incluya, como colofón a la obra, la visión global que, por inexistente, se echa en faita en este trabajo. Carlos Caballero
Vías del Sur de Lusitania Complemento de comentario Quizá fue algo prematuro mi comentario,
en
nuestro número anterior, del trabajo de Luis Fraga da Silva I regido de Sdo Brás de Alportel na antiguidade. O
povoamento romano
e a sua
evoluEdo posterior num
territorio rural do Algarve Central. El comentario, en efecto, se hizo sobre una prueba tipográfica enviada amablemente por el autor, y la versión final que también me ha enviado tiene añadidos muy merecedores de atención.
Muy impoftante es la reproducción de un mapa titulado Regnorum Portugalliae et Algarbiae, publicado por Carolus Allard en Amsterdan en 1660 (veinte años después, por consiguiente, de la restauración del reino de Poúugal separado de España). Considera Fraga da Silva que el mapa se basa en datos bastante más antiguos, y supone con buen fundamento que los principales caminos señalados en él están probablemente calcados sobre
antiguas calzadas romanas, toda yez que ,,náo
se
coniecem programas viários significativos anteriores aos finais do séc. XVII." En atención a este mapa y a otras apoftaciones de
Fraga da Silva, completo
y
rectifico el sector lusitano meridional del Mapa-Indice como se indica en el siguiente esquema. Las diferencias respecto al mapa de
ME 83,21
son:
esta Salacia del Algarve en Ia costa. En efecto, Salir ni ni está a la distancia adecuada,
puede derivar de Salacia,
ni tiene vestigios romanos de importancia, ni hay allí minas de sal. En cambio Quarteira, en la desembocadura del Algibre, está a la distancia debida y fue un importante puerto marítimo propicio parala producción de sal.
- Yía L79: Pace lulia-Mirobriga. Mal rotulada antes como L66, número que corresponde a otra vía en Extremadura. - Vía L87: Aplico ahora este número a un camino dizigonal desde Portus Magnus (portimáo) hasta pace Iulia por Monchique y Garváo. - Yía L692: En su tramo Norte, en lugar de ir en
busca de Aranni corre paralela
al Río Mira
hasta
Milfontes, en su desembocadura. En cuanto a la ubicación de Aranni (Sta. Bárbara de Padróes para Fraga da Silva, Garváo para mí) sigue pareciéndome dudosa, pero me llama la atención que en el mapa 4 de la obra comentada el emplazamiento de Garváo está señalado con signos que significan,,Oppidum
pré-romano" y "Santuário impoftante", y a su lado el rótulo"Borvonnis".Pero nada encuentro en la obra sobre esta Boruonnrs, que no veo mencionada en las fuentes clásicas a mi alcance, ni tampoco hallo sobre Garváo más que un par de menciones accidentales.
-
Salacia. En carta particular Fraga da Silva me convence para que vuelva a mi idea original de buscar
G.A.
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La hoja J-30 de la T.I.R. Comentario Unión Académica Internacional. Comité Español de la T.I.R. Tabula Imperii Romani. Hoja
J-30: Valencla. Ministerio de Fomento, Ministerio de Ciencia y Tecnoiogía, Ministerio áe Educación, Cultura y Depofte, D.G. del Instituto Geográfico Nacional, CSIC. Madrid 2001. 437 págs.
Sobre las virtudes
la TIR en su
1
mapa plegable en color. 20,19 €.
y los defectos de la empresa
(ME 39,6s; ME 47,9s; ME 62,14s; ME 68,30s). Como impresión general, baste decir que, aun reconociendo la impoftancia y la utilidad de la obra, así como las difrcultades de compiiar, extractar y volúmenes anteriores
coordinar los trabajos de numerosísimos investigadores pretéritos y actuales contentando a todos, nuestra opinión es que el trabajo podría haberse hecho bastante mejor. por supuesto, puede decirse que esta opinión es parcial y está condicionada por la ausencia prácticamente tofal de El Miliario Extravagante entre las fuentes utilizadas El elenco de colaboradores es, coni9, mucho más nutrido que en cualquiera de los volúmenes anteriores. De nuevo es Adela Cepas Palanca la única que figura en
todos los grupos de autoría (editores, revisores, procesamiento informático, infografía), siendo los revisores, además de ella, Domingo Plácido y F.Javier Sánchez Palencia. En cuanto a la red viaria, en las páginas iniciales se dan algunas explicaciones según las cuales los autores que se han tenido en cuenta son sobre todo Corzo Toscano
y
(para Andalucía), Fernández Corales (para Extremadura), Silliéres (Hispania meridional), Palomero (Cuenca) y, en menor medida, Morote Barbera y Corchado.
He aquÍ algunos de
nuestros puntos
de
discrepancia:
- Laminium
- Asterum o Alternum (Ravenate) se presenta como
de
parte hispánica, que culmina con este volumen, bastante hemos dicho al comentar los
se ubica en Alhambra sin mencionar
una mansio, aunque se advierte que ,,según algunos autores.. no sería un topónimo, sino la indicación de un ramal secundario..."; pero no se dice que algo análogo ocurre con Celeret (cf. ME 53,11). - La Regiana de la A10 se identifica sin vacilación con la Regina de Plinio y la epigrafia (cf. ME l7,l8 y
ME 18,21).
- Se persiste en sacar de la Lusitania la ruta A29 Per Lusitaniam, para lo que se confunde la Sisalone d,el Itinerario con Sisapone y se da por descontada la situación de Carcuvium en Caracuel.
-
Hay una sola entrada para Mentesa (la de
Ciudad Real) que la frase "es posible que existieran dos poblaciones del mismo nombre en relativa cercanía,,. - Se caftografían como vías de "trazado seguro" la ruta A5 entre Murgi y Malaca y la ruta A6 entre Carteia y Baesippo, ambas por costas escarpadas en las que nadie ha encontrado vestigio alguno de vía romana (la primera
era probablemente una ruta marítima de cabotaje,
y
la
segunda iba por el interior).
Como contrapeso de estas divergencias, citaré un punto en el que encuentro un acuerdo que no esperaba: se renuncia a catalogar una supuesta "singilia Barba", y en
la yoz Singili se
presenta como problemática la
identificación de Singilia con la Barbi que aparece en fuentes de época visigoda (cf. ME 22,8-9).
siquiera las dudas que alguien pueda tener.
G.A.
Adiós a José María Almendral Lucas Con tristeza hemos sabido el fallecimiento hace pocos meses de José María Almendral Lucas. Ingeniero que durante largos años dedicó principalmente su actividad profesional a obras hidráulicas en la cabecera del Guadalquivir, su interés por la historia de los caminos estaba patente en la primera obra que de él conocimos, Jaén desde sus obras públicas (Colegio de Ing. de C.C.P., Madrid 1986). Escribió también numerosos artÍculos sobre vÍas romanas y temas conexos, y El Miliario Extravagante tuvo la satisfacción de contarle entre sus corresponsales y colaboradores. Uno de sus últimos trabaios, quizáel último, fue Caminos antiguos entre Cástuloy Córdoba, publicado en el Boletín del Instituto de Estudios Gienenses y comentado en ME 80,39. En la última cafta que de él hemos recibido nos decía que también lo habia publicado la Revista de O.P., y esperaba que ello fuera ocasión para que sus colegas opinaran sobre sus deducciones respecto a los "puentes mixtos" (piedra y madera) en tiempos romanos. Hablaremos de nuevo de eso en el más allá, José María.
[84] 30
los
La Guardia, Jaén), y no encuentro más alusión a la de los oretanos (Villanueva de la Fuente, bastetanos en
G.A.
Lo que dicen nuestros corresponsales ECOS DE O'LOS CAMII{OS DEL MURADAL" José Muñoz del camPo,.interlocutor al que principalmente se dirigen los artículos sobre ..Los caminos del Muradal" publicados en los dos ,itii.os núáeros i" ii uil¡or¡o Extraraganle, ha tenido la amabilidad de remitirnos copia de la carta que ha dirigido u ¡.r,i, ián.n ez sánchez,autor de tales artículos' Admira el primero en el segundo ':su apabuliante erudición y capacidad de síntesis, así como"' la originalidad de ciertos enfoques novedosos,nry lnt...runi.r;,, to qu" no obsta para oponer alguna objeción a algún dato concreto.
Nuestro corresponsal nos dice expresamente'que. no.desea que se publique ra carfa, y la dirección del ME conviene en que la áinuciosidad del an¿üsis ioiJg.afi.o e histórico en que se recrean ambos interlocutores desborda la capacidad y la vocación ¿. irirt.o boletÍn. El Mil iario Extravaganf e
CIUDADES Y VÍAS EN EL CO¡{VENTO CLUNIBI\SE Escribe Isabel Barrio Arribas (30.01.02)
miliario),
Echo de menos en el índice de ciudades todas las de ptolomeo (Bahabón de Esgueva), Ambisna (que sitúan cerca de
mi zona (sur de Burgos): Ia Bravun de Pampliega), Sisaraca
Fuen-tespina
y
fal vez Aranda... ¿Dónde podria
obtener más información?
(tal yez sob.e la Muela
de
Quintanilla Somuñó), una Cottaeóbriga que existiría sobre el camino real de Segovia a Burgos (más aniba de Roa y
Tordómar); también echo de menos una calzada desdL Clunia a Deobrígula que la toponimia refleja sobre el terreno, o la_ calzada que desde Segovia por Sepúlveda y Roa desemboca en Deobrígula; o la que va desde Navafría hasta Sepúlveda, Villalbilla de Montejo (Hay
[Parece que esta misiva se Íraspapeló, y se publica con más de un año de retraso. por si alguieln lo dudara, queda demostrado que a la administracián de El Miliario Extravagante le vendría bien un refuerzo de su personal. .Ng ueo que haya seguridad, y ni siquiera
la ubicación de iinguna de las ciudades citadas. Tampoco encuenfro las bases toponímicas u otras para avalar las vías propuestas. No
probabilidad, para
me queda sino repetir la pregunta de mi correiponsal.
G.A.J
AUTOVIA VERSUS CALZADA ROMANA Escribe Santiago Bayón Vera desde Salamanca (
18.02.03)
... con la construcción de la autovía del puerto de Béjar (Salamanca) a Baños de Montemayor se ha destrozado un trozo de la calzada romana Vía de la plata - Cañada Real de la plata, y es más han intentado reproducir una calzada romana, que es un insulto tanto a
los romanos como a la gente que defiende esta historia, estoy revelando unas fotografías para mandártelas...
[Al lado, una de las fotos en cuestión. El tramo "reparado" (?) está señalizado con un gran letrero;
"Calzada Romana
*
Vía de la
plata".
GA
J
[84]
31
LEÍDO EN LA PRENSA
REHABILITACIÓN DE LA CALZADADEL TREGUA Con el título "Medio Ambiente habilita eltramo de la vÍa romana del Iregua desde Viguera hasta Torrecilla y la variante de Pradillo", el diario La Rioia publicó el 28 de febrero una información en la que, aparte del interés que tiene el hecho en sí mismo, se trasluce la polémica
o
modemidad de la calzada
en sobre la romanidad sobre edita folletos "Turismo cuestión. Los subtítulos son:
\a calzada, dividida en 5 tramos para el senderismo", y "Laruta une 12 municipios en 52 kilómetros". Copiamos los siguientes párrafos:
"Durante la presentación oficial del trazado y las guías, los responsables de Medio l{aturales centrqron en el interés natural y cultural de la vía dado que, según explican, 'la vía romanq original daba comíenzo en Varea y atravesaba la Rioia, siguiendo el curso del Iregua con destino a Numqncia'. No obstante, en opinión de varios expertos en vías romanas, la calzada podría
contar con un eruor de datación de unos que asegurqn que pertenece al siglo XV."
ll
siglos dado
de Medio Natural de La Rioja que aseguró "cxtando empezamos este estudio nos
El
responsable
pusimos en mqnos de un experto pqra que dijese cuáles eran las actuaciones. A mi modesto entender creo que sí que lo es, aunque no soy un experto y no voy a entrar en estas disquisiciones". Además, añadió que"desde Medio I'{atural lo que pretendemos es lener una senda con una excusa que nos da la posibilidad de cruzar el río lregua y si es romana, fabuloso, y si fuera del Alto Medieval, también." No es dificil detectar tras estas lÍneas, aunque no se le mencione, el criterio rigorista de nuestro colaborador Isaac Moreno en cuanto a la caracterización de una vía romana.
MILIARIOS EI{ LA REGIÓX DE ÉVORA En la web http://jornal.publico.pt hemos encontrado
la
siguiente información
el 7 de julio de
2002.
Traducimos del potlugués: "Fue pedaleando como Francisco Bilou terminó por 'unir lo útil a lo agradable' y procedió a la identificación de los testimonios arqueológicos de la red viqria romana
en
la región de Evora. El historiador
apasionado de
ciclismo, con su bicicleta todo terreno (BTT), puso manos a la tarea de 'cotejar el trabajo de campo de Mário Saa', el investigador que en los años cincuenta emprendió el levantamiento de las grandes vías de la Lusitania. Francisco Bilou inició su trabaio por la vía Ebora-
Pax Julia (Évora-Beja), a partir de un moión miliario enconfrado accidentalmente 12 kilómetros al sur de la ciudad, no reseñado por Mário Saa. Suponiendo que el mojón se encontraba en su sitio original, el historiador y
sus colaboradores montaron
en las
bicicletas y
marcharon desde qllí en dirección a la ciudad, en línea recta. Bilou sabía que los caminos romanos por todo el Imperio solían presentar trazados rectilíneos y que los miliarios distaban entre sí una 'milia passum', o sea l4B0 metros.
Cuando los cuentakilómetros de las BTT indicaron
medio enterrado, que Saa tampoco había identificado. Prosiguiendo en dirección a Éuoro, hicieron en línea rectq otros I 500 metros y encontraron otro mojón en un montón de piedras, una pieza muy grande, partida en tres
pedazos con un total de casi tres metros de altura. Repitiendo la operación, siempre en dirección Norte, fueron a dar exactamente con otro moión. En este caso se trataba de una pieza que ya había sido identificada, aunque erróneamente clasificada como un menhir. (...)
En total, la identificación de más de treinta miliarios en la región permitió a Francisco Bilou confirmar arqueológicamente la existencia de ocho 'viae publicae'. Dos unían Ebora a Augusta Emeritq (Mérida), cruzando la sierra de Ossa en puntos diferentes, una por
y otrq por Redondo. Otras dos, en dirección a Lisboa, iban de Ebora a Salacia (Alcácer do Sal), una por Valverde, otra por las Alcáqovas. Evora también estaba unida por 'viae publicae' a Pc*x Julia, Scalabis (Santarém), Sellium (Tomar) y Serpa." Evoramonte
La información contiene otras interesantes
precisiones sobre ubicación de estructuras de apoyo a los viajeros y rectificaciones a la obra de Mário Saa. Mucho nos gustaría tomar contacto con Francisco Bilou, para lo
esa distqncia, el equipo hizo una prospección de la zonay
que quizá puedan ayudarnos nuestros
encontró efectivamen.te otro mojón, caído
portugueses.
y sin base,
Actualización del Mapa-Indice
corresponsales
Nuestro Mapa-Indice de vías romanas y caminos milenarios de Hispania ha sido actualizado en enero de 2003. Puede consultarse en http://webjet.es/gzlarias, donde también puede consultarse su complemento, el Catálogo de vías romqnas y caminos milenarios de Hispania. El Mapa-Indice esfá también disponible en edición impresa (4 hojas color de 40 x28 cm) al precio de 6 euros.
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