Monolito III

Page 1


2

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

EDITORIAL

Es importante que te importe, que nos importe lo que pueda ocurrirle a cada uno de nosotros que somos parte de una sociedad. Se ha dejado de sentir por los demás: ya no se logra palpar los sentimientos de los que sufren en silencio: todos. Nos hemos vuelto fríos. Los valores humanos son de vital importancia para el crecimiento individual y colectivo, y lamentablemente, vemos día a día cómo éstos mueren. Los valores tardaron muchísimos años en el proceso evolutivo para desarrollarse y asentarse en nosotros los seres humanos, para entenderlos y aplicarlos en la vida diaria, y los estamos aniquilando. Poco a poco se van olvidando, y no es de hoy, también ha sido a causa de un proceso de involución que ha dado como resultado más violencia, delincuencia, encono, egoísmo, individualismos, ambiciones, inhumanidad, carencias, indolencia y por ende más pobreza. Por eso no hay que extrañarse por las situaciones tan penosas que estamos viviendo como país (y en el mundo). No debemos sorprendernos por ver que nuestro tiempo será catalogado por la historia como un periodo dantesco, oscuro, irracional, inmoral y caótico. Pero esto está aquí, hoy, y no podemos más que enfrentarlo. Mas nuestro error es el darle la espalda a los problemas, o peor, pretender que unos cuantos que, solo velan por sus intereses, salgan en nuestro auxilio para que el día de mañana el país se convierta en otro México, en otra Latinoamérica donde no habrá pobreza, todos nos amaremos, serán solamente sonrisas; donde habremos superado los gobierno totalitarios, donde no habrá más delincuencia, ni grupos terroristas, ni secuestros, ni narcotráfico… Entonces saldría el libertador, con la bandera al pecho, mano al aire y con un megáfono a cambiar el nombre a nuestro continente, ya no será nunca más América sino por fuerza tendrá que llamarse Utopía. No, esto no ocurrirá jamás, por más que los políticos se empeñen en querernos ver la cara y hacernos creer que este país y este mundo quedará algún día libre de todos nuestros problemas: no ocurrirá. Lo que sí puede ocurrir es mejorar y vivir con menos problemas. Con una sociedad consciente, doliente para con los demás se pueden regenerar los valores y esto nos llevará a una forma de pensar más avanzada, más madura en donde podamos vivir y no sobrevivir como hasta ahora. Que la historia no nos tache cómo la época de las espaldas, donde en vez de enfrentar los problemas, damos la vuelta y seguimos como si nada hubiese pasado aunque las bombas de nuestra realidad nos exploten a cada paso. Cada uno desde su posición social, económica, artística, académica, etcétera puede y debe levantar la voz por los que no pueden. El mejoramiento y evolución de estas sociedades depende de nosotros mismos, de los que queremos vivir en estados de satisfacción. Es un trabajo que debe hacerse para ver resultados de aquí a los próximos 50 años, pero se tienen que hacer... Nosotros seremos un filtro social donde todo aquel que no haya sido capaz de evolucionar, se quede en el camino y esto lo hace la naturaleza misma: la evolución no espera, y nosotros no debemos detenernos por nadie. JUAN MIRELES http://wwwjuanmireles.blogspot.mx/

¿Quieres colaborar? Manda tus textos a revistarusticamex@hotmail.com Registros en trámite. Cada uno de los textos e imágenes aquí presentados, son responsabilidad y propiedad de los autores. ¿Quieres colaborar? Envía tu material a revistarusticamex@hotmail.com

Facebook: www.facebook.com/RevistaLiterariaMonolito


2 de agosto del 2012 3

REVISTA BIMESTRAL

EDITORIAL Juan Mireles Director-Editor

Mario Islasáinz Editor

José Pulido

Molly Bloom: arquetipo e imagen de erotismo en el Ulises de Joyce […] eso como un hierro o alguna clase de palanca gruesa tiesa todo el tiempo ha tenido que comer ostras creo unas cuantas docenas[…] (Joyce, pág. 787)

Editor Cristina Arreola Editor

Carlos Casu

Madrugada. Saben en su lógica que no es descrita a humano cualquiera, saben que me molestan. Cala la almohada cuando su posición rebasa la media hora con mi espalda encima. Los gatos siguen jugando “miaaaauuu”, si la columna descansara un momento en la esquina del cuarto que aguarda mis ojos. Café. La luna no apareció hoy, sin embargo los gatos tienen esa capacidad que mis ojos desean por la noche. El cerebro adopta una postura en rebeldía al impulso que ordeno. Arroja los párpados para trenzar pestañas. Lo que ellos no entienden es que leer a Joyce se me ha asignado. Dormito.

Magdalena Arte de portada

Justina Cabral Publicidad online Números Anteriores

Si Freud no hubiera nacido, según Piglia, Joyce no hubiera tomado el psicoanálisis desde su perspectiva: para la narración en sí y no para la estructura de los personajes. “[…] datos y escenas lejanas resuenan en la superficie y se enlazan secretamente” (Piglia, pág. 61). Así es como se explica la descripción tan particular que envuelve la obra, situaciones narradas desde el monólogo interior; es a causa de esta visión detallada que tuve que recurrir a dar un paso atrás para mirar el cuadro, luego alejarme lo mayormente posible, (hasta donde permitió mi miopía), tal como apunta Frye “tomando un poco de distancia hacia atrás, el diseño salta más claramente a la vista y, más bien, estudiamos el contenido representado […] Mientras más retrocedemos, cobramos mayor conciencia del diseño organizador” (pág. 186) Así fue como redescubrí la fuerza del personaje femenino más sensual de toda la obra: Molly Bloom. No, no me estoy refiriendo sólo al último capítulo de la obra. Sino a las descripciones que encierra el discurso y los pensamientos de Bloom; “Cielo nocturno, luna, violeta, color de las ligas nuevas de Molly” (pág. 54). O en la descripción de su molde físico un tanto opulento: “Él miró calmadamente su corpulencia y entre sus grandes tetas suaves, caídas dentro de su camisón como ubres de cabra”, acompañada con la sensualidad de un movimiento tan simple como degustar un té: “sus labios carnosos, al beber, sonrieron”(pág. 60), siempre haciendo mención de su ropa interior, por extrema descripción que parezca: “sus bragas sucias[…] una liga gris retorcida y enrollada alrededor de una media: arrugada” (pág. 61); luego el ritual para encontrar un libro caído: todo en ojos de un Bloom desesperado por obtener el calor que empapaban aquellas sábanas al lado de su mujer. Y como ningún detalle es de gratuita aparición en la novela, también tiene su significación importante en la vida de Joyce, pues retomando el artículo de Ricardo Piglia, “Joyce estaba muy atento a la voz de las mujeres” (pág. 62) fue escuchando el discurso de su esposa, que Molly recibió voz en la novela. Sin embargo, como ya lo mencionaba anteriormente, nuestro personaje se nos presenta en un principio, desde la voz de un hombre, su marido, con todo el deseo representado. [¿Joyce es Bloom?], así es como entramos al terreno de las imágenes apocalípticas de Frye, desde el “simbolismo sexual” que él nos propone. Mi punto de vista se encamina primeramente a que Bloom ve a su esposa desde un estado de enamoramiento: “dos cuerpos, que se vuelven un mismo cuerpo por obra del amor” (Frye, pág. 190). Pero como se ve en la obra, el rechazo de Molly y su infidelidad hacen que Bloom entre en el terreno del apetito sexual, muy lejano al amor puro.


4

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

Es entonces, que se pasa de lo apocalíptico a lo demoniaco, siendo en este último “uno de los temas centrales la parodia, la burla del juego exuberante de la vida al sugerir su imitación en términos de “vida real”” (Frye, pág. 195). Como en estas imágenes lo humano se refleja en condiciones individuales, sexuales y sociales; la representación de Molly se asienta perfectamente aquí. “Y lo vi que miraba con sus dos hermanas solteronas cuando me levanté y le pregunté a la chica dónde estaba lo que me importa que se me salía a chorros y aquellos calzones estrechos y negros que hizo que me comprara que te lleva media hora bajártelos mojándome entera siempre con una manía nueva semana sí semana no tan largo fue que me olvidé mis guantes de ante en el asiento atrás que no recuperé nunca” (pág. 791-792). ¿Hace falta intervenir con decencia ante tal expresión mental de esta mujer…? La fuerza del personaje, la voz de mando, la imagen física y los movimientos seductores, perfectamente calculados a la mirada del hombre: personaje, lector, marido o autor. Parece que a todos logró atrapar en una red tal, que el propio Joyce no pudo resistir la propuesta de permitirle concluir la obra, claro, con la condición de lograr un buen sabor de boca, o de lo que a usted le produzca placer, o sea, para cerrar con broche de oro. El monólogo interior de Molly que se desarrolla en el último capítulo es la respuesta que estaba buscando para resolver esa obsesión de Bloom por pensarla y tomarla como base en toda la novela, no hay pensamiento o suceso que circule en su mundo que no retorne de alguna manera a referencia de Molly (que se infla con la col). También pude deducir que a Joyce le atraían las mujeres de piernas gorditas, pero son simplezas que van saliendo con la lectura. Antes de perderme en los recursos de Joyce y convertirme en un personaje más de su novela, debo concluir con la “relación demoníaca erótica” que propone Frye (que es además el punto esencial de mi análisis) la cual “se convierte en pasión feroz y destructora que obra en contra de la lealtad o deja frustrado a quien la posee” (pág. 197), ¿y no es Molly la “hembra tentadora” infiel digna de esta categoría?, donde Bloom y ella acercan su relación a los límites peores de un matrimonio, típico en la realidad actual. “[…] me moría por saber si estaba circuncidado él temblaba como un flan de arriba abajo quieren hacerlo todo demasiado deprisa le quita el placer a eso” (pág. 792)…, cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Bibliografía: Joyce, James. (1921). Ulises. (Versión digital). Piglia, Ricardo. (2005). Los sujetos trágicos (literatura y psicoanálisis).Freudiana: Revista psicoanalítica. Barcelona. Nº. 42, 2005, págs. 107-113 Frye, Northrop. Anatomía de la crítica. Crítica arquetípica: teoría de los mitos

Por Cristina Arreola


Concepción de la praxis en Kosík, Karel

5

Palabras claves: filosofía- lo obvio - praxis Datos acerca del filósofo Karel Kosik Filósofo checoslovaco, nacido en Praga en 1926. Pertenece a la nueva corriente de filósofos marxistas -en Polonia, Kolakowski y Adam Schaff a la cabeza; el grupo de Ernst Bloch y sus discípulos, en Alemania oriental- que protagoniza la destalinización en el pensamiento filosófico. A principios de 1964, interviene junto con Sartre, Garaudy, Paci y otros filósofos occidentales, en el Coloquio sobre moral y sociedad, organizado en Roma por el Instituto Gramsci. Teoría versus práctica Una de las características del pensamiento filosófico es descubrir, hacer evidente, rescatar del olvido y la mistificación, ideas que luego la conciencia ingenua se apropia y -por no haber recorrido el camino de la filosofía-, no las toma muy en serio y las considera obvias. Es lo que sucede, dice Kosík, con el concepto de praxis, el cual se ha convertido en el concepto central de la moderna filosofía materialista. Sin embargo, lo que sólo queda de ese gran descubrimiento es la idea de que la práctica es algo muy importante y que la unidad de la teoría y la práctica tienen el valor de un principio. Pero con eso no basta para comprender en qué medida lo es. Históricamente la práctica ha sido entendida como "socialidad" y la filosofía materialista como doctrina de la "socialidad del hombre". Otra de las formas de entender la práctica fue su reducción a mera categoría con función de correlato del conocimiento y de concepto fundamental de la epistemología. También se la identificó con la técnica, en el más amplio sentido de la palabra; entendida y practicada como técnica operativa, como arte de disponer de los hombres y de las cosas; como poder y arte de manipular. Kosík se pregunta: "¿En qué sentido, y de que tradición intelectual, la filosofía materialista ha deducido la práctica como su propio concepto central? (...) ¿Acaso no sabían los pensadores y hombres prácticos de todos los tiempos que el hombre es prácticamente activo? ¿Acaso toda la filosofía de los tiempos modernos no se ha formado (en consciente oposición a la escolástica medieval) como ciencia y conocimiento que deben hacer de nosotros los “dueños y señores de la naturaleza?” Se pregunta el filósofo, haciendo alusión a la obra de Renato Descartes, Discurso del método, cap. VI. También la filosofía clásica de la historia ya había formulado la idea de que los hombres actúan en la historia, y de sus acciones derivan consecuencias en los que ellos no habían pensado. Se refiere a G. Vico, I. Kant y -especialmente- Hegel. Para salvar el carácter filosófico del concepto de práctica y que no quede convertido en una categoría de la teoría dialéctica de la sociedad, Kosík, afirma que la problemática de la praxis no puede desarrollarse partiendo de la relación teoría-práctica o contemplación-actividad. Históricamente encontramos en algunos filósofos el primado de la teoría o contemplación (Aristóteles y la teología medieval) como su inversa, el primado de la práctica y la actividad (Bacon, Descartes y la ciencia natural moderna). La proclamación de la supremacía de la práctica sobre la teoría -según Kosík- acompaña el desconocimiento del significado de la teoría. Eso lleva a que se la reduzca a mera teoría y a funcionar como auxiliar de la práctica. A su vez, el sentido y contenido de la práctica, en esa posición, se comprende tan poco como cuando se reivindicaba anteriormente la teoría sobre la práctica. Cada una de esas posiciones parte de un aspecto históricamente determinado de la praxis.

Práctica como dominación de la naturaleza y el hombre El autor observa que, simultáneamente a la desacralización de la naturaleza y el descubrimiento de ella como objeto de explotación y dominación, se da la desacralización del hombre. Es decir, se comprueba que también él es un ser manipulable. Como prueba de esta afirmación, Kosík nos remite a la obra de Maquiavelo. Su descubrimiento fundamental es el concepto de hombre como ser disponible y manipulable.


6

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

Son tres los ítems a tener en cuenta en esta concepción que analiza Kosík: el descubrimiento de la naturaleza como objeto de conocimiento y dominación; aparición de una ciencia operativa como la postula Bacon y anteriormente Galileo, que elabora ese concepto de naturaleza y la concepción antropológica maquiavélica. La concepción política que acompaña este paradigma, también tiene el carácter de ser una técnica calculadora y racionalista; un modo de manipulación del material humano. Al interior de esta concepción, la “práctica” es considerada como la manipulación de la naturaleza y del hombre. Desde esta concepción de la práctica es imposible, según Kosík, llegar a comprender la naturaleza de la praxis.

El problema de la praxis es filosófico El abordaje de la praxis como problema sólo se puede plantear como respuesta a la cuestión filosófica: ¿quién es el hombre, qué es la realidad humano-social y cómo se crea esa realidad? Es a partir de ese planteo filosófico que podemos valorar el interesante aporte de Karel Kosík, quien va a diferenciar la realidad humano-social de lo dado. El ser humano no es humano por naturaleza. La humanidad se va construyendo en el proceso de mundanizar; en el proceso de interrelación efectiva entre hombre y mundo. En Kosík la ontología un papel, pero en sus escritos siempre se trata de una ontología praxiológica, es decir, centrada en la praxis histórica de la humanidad. El filósofo checo en su posición ontológica praxiológica, dirá: La praxis es la esfera del ser humano. Con esta sencilla afir mación el autor está poniendo de relieve, encuadrando, el hacer humano como realidad ontológica. La práctica es la revelación del secreto del hombre como ser onto-creador; como un ser que crea la realidad (humano-social), y eso le posibilita el comprender y explicar la realidad ( humana y no humana; la realidad en su totalidad). "La praxis del hombre no es una actividad práctica opuesta a la teoría, sino que es la determinación de la existencia humana como transformación de la realidad". (240) A partir de este punto, podemos afirmar que la práctica es activa y va produciendo, históricamente, la unidad del hombre y el mundo. La historia se comprende así como un proceso práctico en cuyo curso se distingue lo humano de lo no humano. Con esta posición, según Kosik, lo humano y lo no humano se determinan en la historia a través de la diferenciación práctica. Tampoco se puede reducir la práctica al trabajo. La praxis se funde con todo el hombre y lo determina en su totalidad. Esto quiere decir que la praxis no es una determinación exterior al hombre. ¨una máquina o un perro no tienen ni conocen la praxis¨. Y aquí es necesario comprender el carácter ontológico de la praxis: "El hombre no produce la cultura y la civilización, su realidad humanosocial, como una defensa contra la mortalidad y su finitud (...)". Es justamente en la objetivación de su ser, en el trabajo que descubre: en primer lugar, el futuro como dimensión de su existencia. En segundo lugar, la posibilidad de la muerte en ese futuro. Kosik se vale de la figura del amo y del esclavo de Hegel para demostrar esta idea. En el enfrentamiento a muerte, tanto el hombre que prefiere la servidumbre antes que la muerte como el que arriesga su vida para ser reconocido como señor, son hombres que ya tienen idea del tiempo y de la temporalidad. Puede entonces ejercer su libertad: someterse a su destino de esclavo o luchar por su futuro libre. En el momento del enfrentamiento, ambos ponen en juego el presente y el futuro. Sólo la dialéctica del propio movimiento de las cosas transforma el futuro. La tridimensionalidad del tiempo como forma de su propia existencia se revela al hombre en su objetivación, es decir, en el trabajo. La praxis es, tanto objetivación del hombre y dominio de la naturaleza, como realización de la libertad humana. En este sentido, la praxis presenta otra dimensión más: en su proceso crea -no sólo la realidad humana- también una realidad que existe independiente del hombre: la cultura. ¨La creación de la realidad humano-social es la premisa de la apertura y comprensión de la realidad en general¨. La única realidad, para Kosík, está constituida por el hombre y la naturaleza -ambos transformables por la acción humana. No existen leyes eternas; las leyes relativas al desarrollo histórico-social son productos de la propia praxis humana, sedimentaciones de su propia actividad.

Por Martha Alicia Lombardelli


l término

Ellas: erotismo sensorial LA CULTURA EN LA PATAGONIA ARGENTINA (1º Parte) Hasta el año 1865, los indios Tehuelches y Mapuches, habitaban las tierras de la hoy Provincia del Chubut. Su cultura musical era acompañada por cantos e instrumentos de percusión y algunos de vientos, que acompañaban las danzas rituales como El Camaruco, Rogativas y Fiesta de inicio de año. Conocidas son las telas que hasta hoy los mapuches tejen en sus colonias. El curtido de las pieles de guanacos y ciervos junto con los picaderos de flecha y alfarería complementa la cultura de estos pueblos. El 28 de julio de 1865, un grupo de galeses arriba a esta provincia, dando comienzo a la colonización. En estas tierras extensamente desoladas, casi áridas, de clima frío, y vientos intensos, los galeses, introdujeron su música celta, costumbres y la gran vocación poética y coral de sus antepasados. Con el tiempo, ya afincados comenzaron a dar a conocer sus costumbres que hasta hoy perduran. Manifestadas en sus Tabernáculos, casas de Té y por sobre todo en los concursos internacionales de poesía que se realizan todos los años llamados Esteifood, separados en dos eventos; uno para jóvenes y otro para adultos. El galardón principal es La Corona del Poeta y el Sillón Bardo. Por otra parte, anualmente se celebran festivales de coros internacionales. Por Carlos Daniel Buselli En la ciudad de Trelew (Tierra de Luis en Gales), influenciada por estos inmigrantes, expone su

Sobre la obra Ellas y no siempre el espejo de Gabriel Martín

7

Por David Soules

El mundo, querámoslo o no, está lleno de sensaciones. A través de los sentidos percibimos nuestro alrededor como una serie de estímulos que llegan a nosotros mediante el olfato, la vista, el tacto, el gusto, el oído. Asimismo estos estímulos deben ser expresados de alguna manera, ya sea para compartirlos o para no dejar que se esfumen en el tiempo. De este modo Gabriel Martín acerca al lector, en su obra Ellas y no siempre el espejo, una serie de relatos en donde la palabra exhibe su fuerza a través de la experiencia; trece de ellas, vívidas, para ser exactos. La palabra comunica sensaciones, las vuelve sintaxis, las corporiza. La palabra de Gabriel nos conduce mediante signos inalterables y por demás conocidos, que no obstante pudieran esconder en el fondo un laberinto de humo y piernas. “Dicen que el amor es siempre así, que las mujeres como el humo se meten a los ojos, se suben a la cabeza, terminan por hacer llorar y antes de notarlo siquiera, ya son parte de la piel y la ropa”. (Viñeta de humo, página 36) Un hecho innegable del libro es su constante veneración al ente femenino; al hecho, dado que ellas al parecer suceden. En las mujeres, Gabriel, el narrador o el escritor, concibe el ahora dándoles además un papel de filtro: son ellas quienes nos muestran la realidad como a través de sí mismas, abriendo sus poros y dejándose liberar. Como un cristal que no se empaña, las 13 mujeres aquí encarnadas son el centro de su propio relato, pero a su vez interactúan con la experiencia, trayendo consigo un cúmulo de imágenes. Juegan entonces el papel de principio fundamental para el mundo a su alrededor, donde todo es distinto cuando las toca. Cada quien, en el universo de Gabriel, toca su propio instrumento. Es la mujer quien conduce esta orquesta, “Las dos primeras, de izquierda a derecha, no son convenientes: el papel requiere de alguien con menos experiencia; además tanto rojo en las mejillas es difícil de filmar”. (Travelling de once a tres, página 49) Amazonas de película. La técnica o técnicas narrativas con que el autor retrata los hechos –los hechos sucedidos y las mujeres sucedientes– sugiere en ocasiones las tomas de un filme poco menos novelesco. Con un paneo, acercamiento, incluso literalmente con uno que otro fade out, aparecen escenas concebidas para dar foco a la mujer tomada, extraída de su propia realidad, la del relato, pero que quiere ser parte del mundo de los sentidos, comunicándose –como hemos dichocon el lector y penetrando su universo. No es para menos que la experiencia del autor en lo libresco se vea reflejada en la combinación de elementos que dan vida a su obra. Hombre de mundo y educado, pudiéramos decir, es como si prestara algo de sí a cada personaje. Pero fuera de él, en el ámbito puro de lo literario, cada uno de los relatos que componen este libro asemeja un instante que perdura. En ellos no se detiene el tiempo, continúa. Pero lo interesante es que pareciera que, con inocencia, siempre, cada uno de los finales, nos conduce de nuevo al inicio.


8

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

Torres en la niebla II Carlos Casu Bravo Nacido en Madrid en 1955. Formado en la antigua Escuela Central de Artes Aplicadas de Madrid (hoy Escuela de Arte La Palma), en la especialidad de Diseño Gráfico Publicitario, complementado con algunos cursos de Grabado Artístico. Pinté de forma anónima durante un largo periodo. En 2008 decidí desaprender todo lo anterior, para ello me incorporé al taller del artista plástico José Luis Martin de Vidales, donde profundicé en diversas técnicas pictóricas y procedimientos expresivos. He contribuido activamente en la formación de diversos grupos de pintura, como el colectivo “Pastel Obsesión”, y soy miembro de ASPAS (Asociación de pastelistas españoles) y AEDAL (Asociación Española de las Artes y las Letras), así como promotor de diversos grupos de arte en Facebook. Colaboro con la Galería Laura Márquez de Madrid; Galería Kontraste de Erwitte-Horn (Alemania), y con el proyecto de Art Home.


RELATOS

9

EL ÁRBOL FUENTE DE VIDA: Encina Autor: José Rodríguez Infante ¿Qué tienes tú negra encina campesina …/… Se preguntaba Don Antonio Machado comparando su figura con la de otros árboles y el mismo poeta nos hace ver la enorme expansión geográfica de la vetusta encina, adaptada a nuestra península y a nuestro clima como pocas especies. La encina (Quercusilex) de la familia Fagaceas es algo consustancial al paisaje tórrido del sur y así la podemos encontrar en la Sierra Norte de Sevilla ofreciendo su fruto (bellota) al ganado y sus ramas a multitud de especies animales, para que de ella hagan lugar seguro donde sacar adelante sus crías. Alanís, Constantina, El Pedroso, San Nicolás del Puerto, son algunos de los pueblos de la sierra ligados a este árbol y sus vicisitudes. Las hojas de la encina –coriáceas y pinchudas- dan idea de las dificultades del conjunto para encontrar agua suficiente. A base de transpirar agua, energía solar y temperaturas altas, el árbol transforma los materiales terrestres basados en la química del silicio en productos con carbono, de tipo orgánico. Las hojas de los árboles con sus caprichosas formas, coquetean con el carbono ofreciéndole hospedaje, pero a veces las relaciones con los minerales del suelo no son de buena vecindad y ésta termina descomponiéndose en el suelo para entrar de nuevo en el ciclo aunque sea parcialmente; como vivimos de ellos, hemos de hincar el filo del acero en su dura piel. Procuremos que la herida sea producida en sus justos términos: época precisa, ramas adecuadas, daño imprescindible, personal adecuado, directrices oportunas. Al final ellos siempre nos lo agradecen. La encina –sin que nadie se lo diga- procura crecer rodeada de pinchudas carrascas, protegiéndose así de la visita de los herbívoros. La rentabilidad económica del bosque mediterráneo –del que la encina es su más fiel representante- puede ser elevada si se realiza un aprovechamiento integrado de todos sus recursos: ganadería, caza, corcho, leña y carbón vegetal; en el Plan Forestal Andaluz se contempló repoblaciones con encinas –entre otros árboles- para subsanar la nefasta política de los años sesenta, que nos llenó los campos de eucaliptos a costa de los milenarios Quercus. Otro tipo de ayudas, de origen comunidad europea, también está consiguiendo llenar de plantaciones, terrenos que antes estaban baldíos. Esperemos que estos planes puedan llegar a buen puerto, y vayamos recobrando nuestros bosques por el bien de toda la comunidad. En la Odisea podemos ya encontrar referencias a este árbol; así Penélope le dice a Ulises: “No creo que seáis de esos hombres que no conocían a sus antepasados y afirmaban haber nacido de una Encina y una Roca”. De ella se obtiene picón, carbón, bellota para el ganado; tolera el calor, el frío, las sequías prolongadas y las podas más brutales. Se lleva bien con el alcornoque, el madroño, el brezo, el lentisco, las jaras, el cantueso, el águila imperial, el lince, el lagarto corredor, el sapo partero…no nos debemos extrañar, por tanto, que en la Grecia antigua, los vencedores en los juegos nemeos luciesen en su sien una corona de ramas de encina. Puede alcanzar los veinte metros de altura, vivir mil años y dar cobijo a su sombra a mil quinientas ovejas. Del bosque de encinas que cubrían nuestra península, hemos pasado a todo tipo de cultivos: pastizales, pinares o eucaliptales, quedándonos como mal menor la dehesa, forma de convivencia que parece la más idónea para el hombre y el árbol. Confiemos que esto sea así y dejemos de ver desaparecer más ejemplares de la que ha llegado a ser considerada como árbol nacional: la encina. …/… con tus ramas sin color en el campo sin verdor; con tu tronco ceniciento sin esbeltez ni altiveza, con tu vigor sin tormento, y tu humildad que es firmeza?


10

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

RELATOS

El Coyote por Juan Mauricio Muñoz El Coyote miraba de reojo al grupo que estaba guiando hasta la frontera. Se aproximaban al Río Bravo bajo la luz de la luna. . De este grupo sólo unos cuantos cabrones llegarán al otro lado, a vivir el sueño americano, todo por unos pinches verdes que no le alcanzarán ni para sobrevivir, pensó. Se escuchaba el caudal del río. El Coyote observaba el cielo. En cualquier momento, aparecería la Migra, y él lo sabía. A unos metros de la orilla del río, frenó a todo el grupo para darle el mismo discurso que les daba a todos los grupos que había guiado. -Bueno, bueno. Pos a partir de acá, ustedes van solos. Se escucharon algunos rechifles. -Pos no sean pendejos, ustedes me pagaron hasta acá, así que no se hagan, antes que madree a uno por chingón-expresó, mostrando su arma. El silencio y las caras largas se apoderaron del grupo. -Pos ahora les explico cómo cruzarán. Crucen el río rápidamente, apenas lleguen al otro lado, deberán correr durante todo el día en el desierto. A todos les he dado una botella de agua, pos porque soy buena gente, otro cabrón los hubiera madreado por quejones. No se les ocurra detenerse, así el pinche sol les queme el cuerpo continúen. La Migra está en todos lados, y a los gringos les vale madre si los matan, pos ya no hay opción a reclamo. Si ven camionetas blancas, se esconden. No crean que los vienen a ayudar, sino a matar. Son gente que mata hispanos por placer y esos abundan en todo el desierto. No va ser fácil la chinga, pero miles de cabrones lo han logrado. Ahora, órale que la pinche Migra no la veo por ningún lado. Desde acá depende de ustedes-culminó. El Coyote se ocultó entre los arbustos. Era el mismo proceso de siempre, ver cómo cruzaban, cómo aparecería la migra. Su corazón estaba endurecido. Había visto tanta gente morir, le parecía tan normal como comerse un pan. El grupo comenzó a cruzar el río agarrándose de las manos formando una cadena humana. De repente, un sonido ensordecedor se aproximaba, un helicóptero con una luz muy potente tomaba el lugar de la luz de la luna. Pinche migra, pensó el Coyote, y prendió un cigarrillo. Al ver el helicóptero, el grupo se dispersó en diferentes direcciones. Deténganse, perifoneó un oficial desde el helicóptero con un español masticado. Deténganse, repitió. El grupo corría en diferentes direcciones, haciendo caso omiso al pedido del oficial. Ahorita comienza el party, especuló el Coyote. Y el party comenzó con un festival de balas desde el helicóptero, se escuchaban aves marías, recordatorios, suspiros, gritos, y el festival de balas continuaba, no a herir, sino a matar. Porque a mi país no entras maldito mojado.. Esos segundos eternos culminaron cuando el helicóptero se dio una vuelta para que el oficial se percatara que nadie se levantaba. -A todos los mojaditos, los maté-. El Coyote culminaba la última pitada de su cigarrillo. Observó la sombra de las pocas personas que lograron cruzar. Suertudos, musitó, y sonrío. Tiró el cigarrillo y caminó de vuelta a Reynosa, donde lo esperaría otro grupo.

Pasadas las elecciones y la cansada jornada de campañas de noche y día, en México el tema de la lectura ha ido muy de la mano con este proceso, desde la pasada Feria Internacional del Libro en Guadalajara, cuando – como se recordará-, el entonces candidato Enrique Peña Nieto entrara en un trance existencial por no poder mencionar al menos tres libros leídos durante su vida. La noticia dio de qué hablar alrededor del mundo, sin embargo; la situación no se ha centrado en lo que realmente importa, alejado de la crítica a “quien no lee”, deberíamos centrarnos en “quien sí lee”. ¿Qué están haciendo esos que mantienen lecturas constantes por placer, disciplina o profesión, para el bien del resto de la sociedad? Lo que sucede particularmente en nuestro país, es que el acercamiento a las disciplinas artísticas continúa siendo algo a lo que sólo ciertas élites pueden llegar, algo catalogado por algunos como “favorable”, pues mantiene en cierto esquema el nivel de las mismas, sin embargo; también trae como resultado una sociedad tercermundista y nuestro tema central: una sociedad que no lee.


RELATOS

11

METAMORFOSIS Por Araminta Solizabet Gálves

Cierra los ojos con celo y con suavidad, como si dentro guardara un secreto infranqueable. Las minúsculas pestañas parapetan la entrada. No hay privilegios, excepto para la última mismas, sin embargo; también trae como resultado una sociedad tercermundista y nuestro tema central: una sociedad que no lee. Y qué labor podemos jugar aquellos que tenemos al menos la buena costumbre de portar en nuestro bolso un libro para “matar el tiempo”, en contra a los altos precios que algunas editoriales manejan, lo que vuelve imposible la adquisición de algunas buenas obras; si a eso le sumamos las carencias en el acervo de algunas bibliotecas y la falta de interés en la mayoría, que es el problema principal de la falta de lectores. Nos enfrentamos a una dura situación. Lectoreros, tenemos en nuestras manos el tesoro del mundo, evitemos caer en el egoísmo y brindemos a nuestra comunidad una pequeña parte de lo necesario para crecer en conjunto, o qué, ¿no nos quejábamos de los monopolios? Consejo editorial

lágrima que aflora rotunda, llena de espejismos y brillos que camuflan la hondura de su tristeza. El tiempo, todo el tiempo del mundo se le viene encima, fraccionado en imágenes de infancias vividas, tal vez inventadas o imaginadas… recuerda la vez aquella que el río la abrazó tan fuerte que estuvo a punto de ahogarla, o cuando la bicicleta parecía agigantarse al momento de bajar y no tenía más remedio que dejarse caer, siendo su colchón su propio cuerpo… recordaba la leche de la ubre de la vaca escurriéndose por sus comisuras, mientras su papá ordeñaba diligentemente las tetas rebosantes, haciendo malabarismos de pulso sobre su boca abierta como luna llena… a veces los chorritos se escapaban salpicando su cara y su risa afloraba y se metamorfoseaba en carcajadas que la hacían casi orinar… Le vienen los olores de las manos de su mamá, siente, oye, mastica, imagina el retozo de los trozos de carne y verduras en las ollas de los domingos, los aromas cobran formas y los susurros sabores nunca antes imaginados… los recuerdos y colores le vienen en bandadas, los rojos se escandalizan con su propia intensidad descarnada, los azules estallan en cielos que no tienen nubarrones, los amarillos coquetean con la vida y con sí mismos, los alizarinas juegan a disfrazarse de alegría y cucuruchos… y los verdes, hay Dios, los verdes borboritan la savia de la brisa… Las imágenes, las maravillosas imágenes la acarician, le llegan como azacuanes anunciando inviernos, como alboradas repletas de sol, como garabatos de lluvias, montañas, caminos, trozos de sal, orugas sin rumbo pero con vuelo oculto… Las granadas y las mandarinas suman a sus provocadores olores la explosión casi inmoral de sus colores, un rinoceronte se esconde bajo de una silla para darle el paso a una grulla, y los peces entre suspiros de corales e iridiscencias de algas le asaltan los recuerdos también… los sonidos cobran protagonismo y se magnifican en su piel. Se está metamorfoseando y lo sabe. De ahora en adelante sus ojos serán sus manos y su luz la noche eterna. Dentro de poco su ceguera dejará de ser secreto.


12

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

CASTILLOS DE ARENA (OLEO SOBRE TELA , MED, 149X90 CM) WILMER LUGO PAZ

1956: Nació el 19 de Diciembre de 1956 en San Lorenzo, Estado Zulia, Venezuela.

Exposiciones Individuales: 2004: “Die Schöpfung der Tropen”. Galerie Tantow, Berlín, Alemania. 2008: „Genesis en el trópico“. Pdvsa Petromonagas, Puerto La Cruz, Venezuela. Ha participado en innumerables exposiciones colectivas como:1981: Centro Universitario. Avignon, Francia. 1982: Casa de Actividades Culturales de la Ciudad Científica. Lille, Francia. 1983. Ecole Nationale Supérieur D’art Décoratif. Paris, Francia. Fundación Gran Mariscal de Ayacucho ANTONIO JOSÉ DE SUCRE. Paris, Francia. 1983: Embajada de Venezuela. Paris, Francia. “El Infinito Canto de este Sol” - Exposición Inaugural del Museo de Arte Contemporáneo del Zulia (MACZUL). Maracaibo, Venezuela. “Al Margen”. Galería de Artes Visuales EMERIO DARÍO LUNAR, Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela. 1999: “De Costa a Costa” - Exposición Itinerante. Secretaría de Cultura del Estado Zulia, Cabimas, Bachaquero, Machiques y La Villa de Rosario, Venezuela. 2003: “La Luz del eterno Equinoccio”.World of TUI, Berlín, Alemania. VIII. Exposición Colectiva de Arte de la Fundación JOSÉ FÉLIX RIBAS. Fundación Banco Maracaibo, Maracaibo, Venezuela. 2004: „De Maracaibo a Berlín“. Espacio arte Galería, Maracaibo, Venezuela. Von Maracaibo nach Berlin”. Galerie Tantow, Berlín, Alemania. Artistas de la galería”. Entre otras más.


13

MICRORRELATOS ÚLTIMA ESCENA Un hálito frígido me abraza la espalda aunque el sol de este amanecer de junio se vierte lujuriante por la ventana. Bebo un trago largo y silencioso de vodka, mientras sostengo el dogal con la otra mano. Por un momento mi rostro se refleja en la conciencia neblinosa del espejo, veo mi piel ajada, los años grabaron cada fracaso con su trazo indeleble, tengo las cicatrices del alma calcadas en el cuerpo; soy un espectro macilento, un hijo de la soledad, el marido de la desesperanza. Mi memoria es una barca –ocupada por bravatas en tabernas, noches de compañía compradas en lóbregas esquinas y reyes de copas bajo la mangaflotando en un mar de botellas. Quizá está no sea la última escena, quizá sea mejor esperar el desenlace de la suma de mis dolores y no escribir con un nudo el final de mi historia.

Mónica Siabato

EL TREN Mientras arribaba al caserío dormido sobre el valle, parecía sierpe enroscándose por el desértico vestido de la tarde. En resecas hojas y sobre pentagramas de silicio escribía el viento odas de desgarrada soledad. Perfumaban el aire nombres, el mutismo era un sudario que lo amortajaba vivo. El espejismo se le trepó a los ojos y harto, se estiró sobre el paraje. Al llamado, bajo la perforada túnica emprendió el regreso. Lánguido tizón que en su propia huella volvió a zigzaguear. Beatriz Teresa Bustos

DEFINICIÓN Considero que un microrrelato va más allá del propio texto. Incita a pensar que hay más que sus palabras: Me casé hace ocho años con el soldado Abel. Un microrrelato debe contar una historia, sino es una simple enumeración: A pesar de ello sigo enamorada de Mehmet, hacemos el amor todas las semanas. También debe dar a entender que no se acaba con el punto final: Mi marido ahora es general, y en mi país el adulterio se condena con la lapidación. Cada piedra sobre mi cuerpo es el recuerdo de los dedos de Mehmet en la primera noche. Alejandro Ruiz

Juan Mauricio Muñoz (Lima 1984) Vivió en Estados Unidos desde los 15 hasta los 19 años, donde leyó a autores como Miguel Piñero, Walt Whitman, Ernest Hemingway y David Foster Wallace en su idioma natal. Perteneció a una pandilla hispana en Carolina del Norte, para luego ser deportado a Perú. Desde que llegó al Perú se dedicó a escribir poesía y cuentos sobre su vida de ilegal en las tierras del norte. En el 2008 obtuvo el tercer puesto en poesía y cuento en los Juegos Florales de la Universidad Ricardo Palma. En el 2009, se publica su primer y único poemario “El Lado Oscuro” (Editorial de Los Cuatro Vientos) en Argentina. Ha sido publicado en antologías, y en revistas digitales e impresas de México, Chile, Perú y España. . Actualmente, prepara su segundo poemario y su primera novela. Fue colaborador del “Chompipe” (Tabasco, México) y es parte del nuevo proyecto de blog “La Higuerilla”. (http://www.lahiguerilla.c om/). .


14

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

MICRORRELATOS

RENACER Zulema se encontraba cansada por la mediocridad que agobiaba su alma en aquel rincón olvidado de la tierra. Sólo la esperanza de una nueva vida más allá de las paredes que le retenían, le hacían no perder la fe. Un buen día por fin le dejaron en libertad. Corrió velozmente hasta alejarse por completo del lugar; se detuvo, cerró los ojos y suspiró al tiempo que el viento acompañado de una suave brisa bañaban su rostro. Volteó en todas direcciones admirando el hermoso paisaje. De inmediato comenzó a sentir cómo la felicidad le invadía por completo cada parte de su ser. Tomó un profundo respiro y continuó su camino. Había vuelto a vivir.

Fermín Hernández

Schrödinger Por la mañana no le basta con ser un hombre cualquiera. Le interesa ser todo luz, agregar a las mismas cosas la sensualidad del deseo. Azoteas, calles, edificios, los rincones del día aguardan la sombra de su piel oscura; su mirada de sol que los hiere con la duda de si volverá. Esos mismos espacios en el otro lado del día envejecen con un temor que, es esa presencia sutil que los provoca. En la balanza de las sombras, el crepúsculo descubre que la noche desdibuja a un hombre. Ojos migrantes, puntas de estrella como garras le igualan a un gato

Zeydel Bernal

A propósito de Tito II Luego de la muerte de Monterroso, quise preguntarle algo que no me dejaba dormir por las noches. Emprendí el viaje y busqué a Monterroso por todo ese llano que los humanos hemos llamado cielo; pero que no es cielo sino simplemente llano. Después de un tiempo que consideré largo (cinco lustros), encontré a Monterroso que estaba leyendo a Monterroso porque Monterroso en vida leyó muy poco a Monterroso. Entonces aproveché ese momento de erudición en Monterroso, de Monterroso y para Monterroso y sin más, le expresé a lo que venía, y que ya me había tomado demasiado tiempo. Entonces la pregunta salió así, llana, simple, sencilla, ─Maestro, dígame ¿cómo se siente usted? A lo que apresuradamente respondió. ─Augusto, muy Augusto. Y tranquilamente me puse a leer a Monterroso, para la eternidad

Alberto Llanes


POEMAS

15

AUSENCIAS

LUMÍNICA PRESENCIA

Ya no busco el rastro ojeroso de la noche sobre tu piel dormida, ni deambulo en mi sombra para evitar tus sentidos, solo me alejé en un atardecer eléctrico, en una nube de silencios, en un soplo de alas que se agitaron en algún rincón del alma. Solo me aleje ese día tropical que te vi en la espuma de las olas, desnuda, ausente, lejana, y cuando me acerqué, para besar tus labios, solo vi dos abismos inmensos y negros donde antes estaban los hermosos astros de tu mirada.

Cuando el barco de los recuerdos parece alejarse. Cuando las heridas comienzan poco a poco a arder menos… Otra vez presencia oceánica que llega, me acaricia, me besa, me permites imaginar una mañana. Obstinado amor que incendia sueños. Obstinado con infinitos símbolos, entrañables, en tu voz, en tu piel, en tus manos. Obstinadamente obstinado en hacer resistible, desde nuestra parición, tanto deseo. Obstinada, aquí me quedo, con el pulso del tiempo implacable, gozando tu lumínica presencia sobre el universo. Rosalba Pelle Mancuso

ESPACIOS DE ALIENTO En este espacio del mundo: donde el frio congela mis huesos,

Martín Clemente Zambrano Astudillo

En nuestro exilio Me gustaría desenterrarte de la arena esa misma arena de la cual me vestiste. Podría desde mi anhelo lleno de hollín y letras volver a lamer tu espalda para darle mi tintura. Tinta vacía de estrellas ajena a las manos que temblaban ante tu voz. En este aire salino podría desenterrarme desnuda de arena sola. Andrea Herrera R.

donde cada mañana gris calla mi mente y cada minuto mojado me adormenta; sueño con besarte con labios cálidos, de mirarte con ojos a menos y acariciarte en el tiempo medido con la arena. En este espacio del mundo: donde el sol no me deja ver mar abierto, ni mis pies sienten el suave oleaje; sueño con extasiarme de tu brisa y volar impulsado por tu aliento humano. Recorrer cada instante de tu inmensidad y reposar en tus sombras e cielo iluminado. En este espacio del mundo: quiero que seas mi aliento… Fray Rodolfo de Jesús O. Carm


COSMOGONÌA HOMBRE, MUJERES: DE MAÍZ I: Deidades delELhombre de Maíz 16 ESCRIBA TÍTULO AQUÍ La choza está de fiesta. ¡El abuelo regresó¡ desanduvo veredas, mil veces caminadas. Es el teatro de la vida que confesó, El mismo follaje que el abuelo dominó, Tierra que quiso tanto que incluso caminó… Y por final presagio desnudo Regresó. Entre ceibas, veredas, serpientes emplumadas, Con su jícara llena de nostálgico esfuerzo, Cuculkan lo estimula cruzar las explanadas Ixbalamqué, le ofrece protegerlo del cierzo Ixquic da la autoridad de almas iluminadas Y la palabra abuelo será centro del Bierzo Hoy Corazón de cielo forma cosmogonía Quetzalcoatl la sierpe es nueva sinfonía. -II: Linaje del hombre de maíz No es un sacramento nuestro Shamán tiene el abuelo aspecto de los astros. El sortilegio. Viene desde Adán, hechizo maya que le reflejó a modo de Señor, Grande nació y vuela más alto que gavilán. Por su piel, le envidian los alabastros. el quetzal lo reviste de arcoíris en su real historia deja rastros del pabellón bañado en chirimiris cien colores, lastre de poetastros o nuestro blanco que ilumina el iris el índigo de nuestra Guatemala que nosotros llevamos de bengala III.- Nacimiento del hombre de maíz Hoy día llovió maíz retumbaron ya las milpas. Ese varón es raíz, el que la luna cubrió del real quetzal nació… Cumarcaaj, mi matriz. Presagia nuevas etapas, cosmogonía u origen exhumado de las zapas como marimba aborigen, Y en sus notas las más guapas nos da claves que nos rigen: La Reverencia de olivos, Quetzales nunca cautivos. IV.- “Mujeres de Maíz” Gran corazón de cielo presume su almaizal, les rendimos honores en altar carolino. Mujeres ancestrales himnonan al Quetzal; es la mujer, ensueño, izando pabellón, la mujer que descansa en su alma de canción y se torna a si misma en miel de Carrizal. Deflagración de luz la vega del camino, huyendo a la carrera, desnuda margaritas en su clásico carmen, matute alejandrino,

INFINITUS M. La calle desierta, el silencio en silencio y miro al cielo y te extraño. Anudas mi garganta cargada de distancia y haces que mis ojos brillen al recordarte. Y recuerdo que aún suenan tus pasos allá donde caminas, que aún sonríes aunque no te mire y es que te miro y me das la vida de nuevo, nuevamente te extraño. Anudas mi garganta cargada de distancia y haces que el reloj se detenga al pensarte. Y aunque a veces recordar se me olvida la única voz que ha hecho más fuerte la mía ha nacido de tus propios labios. La calle desierta, el silencio en silencio, miro al cielo y te extraño. José Martín González

EDICTO Que no devuelva nadie las sandalias que os di para el abrigo de la espina. Huid y buscar otras sendas donde hundir vuestras uñas despiadadas, otras hojas que herir con desnudas esquirlas, otra piel que arrancar al son de vuestro canto enloquecido. Pero aquí, no. No en mi linaje porque es humano y se me duele, porque es de cristal y se me astilla, porque es corazón y teme que el furor o la violencia anide en sus resquicios y os funda la lágrima sin tregua. Antonia María Carrascal


17

mujeres de “Delos” las fábulas escritas; cobijo en este acápite, carácter femenino que marcan esta historia de musas afroditas el vocablo perfecto… Mujer, obra, raíz: ¡Las Siempre laureadas “Mujeres de Maíz”! Rafael Mérida Cruz-Lascano

ÁRBOL AÉREO

Solo la poesía puede crecer como un árbol en el cielo. Solo la poesía, sembrada con las raíces hacia arriba florece mariposas y libélulas. Solo la poesía nos da de tarde en tarde un fruto dulce “En medio del camino de la vida”. Solo la poesía puede ser el sueño y la vigilia el canto del amor y del olvido el himno de la dicha y el gemido. Solo la poesía ese árbol cuyas raíces nacen del corazón de Dios.

POEMA SEGUNDO

Esperando llegar al encuentro en ese congreso que el viento cayendo en el eco del miedo destruye el esperpento. Cocina en el viento del miedo del fuego cayendo tejiendo cogiendo viviendo en el viento. Ezequiel Andrés Cámara

Jorge Dávila Vázquez


18

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

PICADOR CON MARGARITAS (73x60 cm, óleo sobre lienzo) VITO CANO LA VOLUNTAD DE SER PINTOR

Texto del escritor Florián Recio

Nacido en Almendralejo, Badajoz, 1958. Es oportuno que les hable de un hombre que nació con un estigma en la frente al modo de los personajes de Herman Hesse, un hombre que vino al mundo con los lomos tatuados por la desventura, con todas las papeletas para ser un perdedor y que, no obstante, se plantó un buen día de jarras, se parapetó detrás de un lienzo y decidió ganarle la partida a los infortunios. Se llama Vito García Cano. Es extremeño, aunque él no reconoce más frontera que el círculo perfecto y negro de las pupilas de sus dos hijos. Él no sabe de fronteras. En realidad no sabe de casi nada, pues se encierra doce horas en su estudio precisamente para eso, para que el mundo resbale por su espalda sin rozarle y deje a su paso un vaho de colores empañando el cristal rugoso de sus lienzos. El pintor extremeño y su universo de figuras de rasgos cubistas, color descarado de rostros angulados que nos miran directamente a los ojos, invitándonos a contemplar obras deseosas de ser compartidas por todo el mundo. (Galería Oriente&Occidente).


LA ENTREVISTA

19

MARIO ISLASÁINZ 1959, Córdoba, Veracruz, México. Poeta y editor. Publicado en diversas antologías y autor de una veintena de libros. Lic. en Psicología por la BUAP. Puebla, 1979-1983. Lic. en Filosofía y Letras por la UDLA. A.C. Cholula, Puebla. 1981-1985. Maestría en Literatura Hispánica por la UDLA. S.A. de C.V. Cholula, Puebla. 1985-1987. Coordinó el Taller Libre de Creación Literaria, “Parménides García Saldaña”, desde febrero de 1992 hasta el mismo mes de 2002, en Orizaba, Ver. Impartió talleres de creación literaria para el Museo de Arte del Estado de Veracruz de 1998 a 2003.Vicepresidente de la Red Nacional Autónoma de Talleres de Creación Literarios. 2002-2004.Director Editor de más de 300 libros y plaquetas, bajo el sello Editorial Independiente “Letras de Pasto Verde” desde 1993. Publica desde 1984 en diversas revistas y suplementos culturales nacionales y extranjeros. Colaboró para “El Búho”, Suplemento Cultural del periódico Excélsior de 1990 a 1998. Desde 1990, imparte Talleres. Cursos y Seminarios de Lectura y Creación Literaria para diferentes Institutos del País, para niños, adolescentes y adultos. Director Editor de la Revista Literaria “Pasto Verde” de 1993 a 2002, con la cual obtuvo los reconocimientos nacionales. para revistas independientes “Edmundo Valadés” en 1996 y 1997 respectivamente, con 47 números.

¿En qué momento despiertas a la literatura y te das cuenta que es el camino por el que deseas andar? Tempranamente gracias a la soledad de vivir en provincia bajo la férrea mirada de una tía académica quien tenía una amistad epistolar con Rosario Castellanos, misma que la dotaba de muy buenos libros alimentando la pequeña, pero exquisitamente nutrida biblioteca que existía en casa. En ella descubrí innumerables autores, leía todo lo posible en las demasiadas horas que tenía, pues a raíz de un accidente acercándome a los seis años de edad al caerme de la azotea y ser prácticamente salvado por un cordón o mecate en donde se cuelga la ropa, desvió mi trayectoria al rozar mi cabeza con éste y caer de lleno sobre el piso con la quijada; situación que si bien me salvó, inexplicablemente perdí el poder dormir, al menos las ocho horas que se recomiendan para esa edad, por lo que aproveché para sin guía alguna adentrarme en la lectura entre preocupaciones de mis padres y las no menos de una treintena de visitas a hospitales de diferentes partes del país, pues hasta los 47 años logré dormir más de una hora, creo que en ese ínterin inició mi despertar por el gusto por las letras.


20

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

Encuentras en la poesía tu medio más importante de expresión, ¿por qué? ¿Qué te dan los versos que la prosa no? A través de los años y luego de infinidad de talleres literarios, encuentros de escritores y escribir lo más posible, fue que caí en la cuenta de que la poesía era lo que mejor se me daba, y aunque publiqué una novela que tuvo buen recibimiento independientemente de la mala edición, gracias a un editor ambicioso, pero improvisado, creo la reeditaré en algún momento con más calma y bajo un sello enteramente profesional; asimismo publiqué en una apuesta con René Avilés Fabila y José Luis Cuevas, un libro de cuentos, que también obtuvo muy favorables comentarios ya que la base consistió en erotismo, mas la poesía ya me había atrapado, de ahí que me considere más poeta, amén de los diez y ocho libros publicados, aunque bueno, confieso que me inicié en esto escribiendo para Periódicos, y no sólo en el aspecto cultural, sino más bien, un periodismo de ensayo que hoy no practico más.

Fuiste una persona cercana a Juan José Arreola. ¿Qué nos puedes platicar acerca de la relación que tuviste con él? Fue esencialmente de oyente, de aprendiz, de seguidor ferviente, pues su locuacidad ingeniosa me dio mucho, lo mismo me ocurrió con Jaime Sabines, Octavio Paz, Juan Bañuelos, Alejandro Aura, el ya citado René Avilés Fabila, Bernardo Ruiz, Dionicio Morales, y bueno, con muchos de los que aún continúo aprendiendo, creo que la lista resultaría interminable, he sido y soy muy afortunado en esto de la literatura, que si bien no me da para comer, sí me brinda un motivo importante de vida.

Mario, ¿a quién admiras? A los malditos, que no a los malitos, con esto me refiero que no a todo aquél que dice lo que le nace, sino cómo lo hace. En mi obra se notan las influencias, aunque he procurado lograr mi voz, que cuando se lea algo mío, se reconozca si no de inmediato, sí al momento en que se me va leyendo. Volviendo a lo anterior, a los malitos, ejemplos sobran, tantos que mencionarlos me llevaría un buen de espacio, que bien puede y siento debe ser aprovechado por otros.

Eres una persona que siempre está dispuesto a dar y apoyar a los jóvenes. ¿De dónde nacen esas ganas por impulsar el desarrollo de las nuevas plumas? Bueno, cuando uno se hace prácticamente solo, es decir, sí, conocí y conozco a infinidad de escritores y escritoras, pero de no ser por mi manera de ser tan terca, simplemente nada hubiese ocurrido. A mí nadie me dio nada, fui a buscarlo hasta donde no me llamaban, recibí bofetadas por ser un desconocido en estas lides, pero jamás retrocedí, siempre fui hacia delante con mis propios medios, así me fui haciendo, en los bares acercándome, en los encuentros, en las presentaciones de libros, en fin, siempre discreto aprendiendo y aprehendiendo, de ahí que cuando te cuesta tanto lograr algo entre tanta egolatría, no te queda sino dar, brindarte a todo aquél que se asoma a pedirte algo que sabes lo tienes y ya está, aclaro que luego de dar, ya no depende de mí. Han habido muchos que lo han aprovechado y los más, me atrevería a decir que no, y qué bueno, no estaban para esto, aunque reconozco que varios lo han hecho exclusivamente para su peculio y de ahí los malitos, los fantoches de pacotilla que pululan en éste y en otros medios creativos y no sólo en México, que conste.

La literatura en México ha dado al mundo escritores de excepción como Sor Juana Inés de la Cruz, Alfonso Reyes, Octavio Paz, Juan Rulfo, Juan José Arreola, José Gorostiza; otro tanto ha acompañado a estos grandes literatos y eso aseguraba un recambio generacional. En los últimos años no se ve el recambio. ¿México, al día de hoy, tiene plumas jóvenes o no tan jóvenes que puedan lograr esa renovación? ¿La literatura mexicana tiene el talento suficiente como para gestar y lanzar a la luz escritores que puedan tomar la bandera que dejaron los antes mencionados? Y si no, ¿qué falta?


Claro que lo tiene, reconociendo que seré ingrato, pues sólo citaré a algunos, pues nuevamente la lista resultaría 21 interminable, pero desde Sergio Pitol, Rubén Bonifaz Nuño, Ernesto de la Peña, Eduardo Elizalde, el tigre, Hugo Gutiérrez Vega, José Emilio Pacheco, Emmanuel Carballo, Dolores Castro, Elena Poniatowska, Thelma Nava, Eraclio Zepeda, Juan Bañuelos, Agustínl Ramos, Marco Antonio Campos, Samuel Gordon, Vicente Quirarte, David Huerta, Elsa Cross, Gabriel Zaid, Beatriz Espejo, René Avilés Fabila, Coral Bracho, Gustavo Sainz, Raúl Renán, Patricia Medina, Juan Guillermo Samperio, Julio Trujillo, Elmer Mendoza, Ignacio Padilla, Héctor Carreto, Eduardo Langagne, Carmen Boullosa, Juan Villoro, Myriam Moscona, Juan Domingo Argüelles, Dana Gelinas, Efraín Bartolomé, Marianne Toussaint, Minerva Margarita Villarreal, Raúl Bañuelos, Baudelio Camarillo, Ignacio Betancourt, Francisco Hernández, José Luis Rivas, Malva Flores, Ricardo Yañez, Eusebio Ruvalcaba, Guillermo Fadanelli, Lucía Rivadeneyra, Enrique Serna, Mariana Bernárdez, Luis Armenta Malpica , Féliz Suárez, Silvia Tomasa Rivera, Jorge Volpi, Armando Alanís Pulido, Mario Bojórquez, Jorge Esquinca, Jeremías Marquines, Jahir Cortés, Alí Calderón, en fin, que insisto, la lista resultaría interminable, porque podría mencionar a muchísimos más que están partiéndose el alma por y para la literatura, y sí, los hay que están en grupúsculos nefastos para las letras mexicanas, pero tenemos a muchos que la están beneficiando desde la marginalidad. No olvidar que México es demasiados Méxicos y que la centralización vuelve invisibles a muchos, pero para ello están los libros, tanto de editoriales de renombre como las independientes, incluyendo a las marginales. Por supuesto, los encuentros estatales y nacionales, las ferias del libro -sin olvidar la enorme cantidad de talleres en donde se gestan escritores por todo el País, en cada Estado y ciudades- existen compañeros haciendo verdaderos apostolados desde sus trincheras, desde su promoción cultural, no siempre afortunada, pero válida, allí donde los malos gobiernos no han logrado llegar a interrumpir el quehacer de éstos. Lo que falta, bueno, considero que no bastan los apoyos al sistema nacional de creadores, muy cuestionado, así como las becas en todos los sentidos, me refiero a las estatales y nacionales en donde bien sabemos, existen las tristemente clásicas componendas entre quienes las reparten, me atrevería incluso a las formas en cómo se otorgan los premios existentes en nuestro País, nada transparentes, creo que en cuanto ello se limpie de todo el oscurantismo que lo rodea, entonces podremos hablar de soluciones, mientras tanto, lo sé más que difícil, imposible.

¿Qué les dices a los que inician esta carrera larga y abstracta que es la literatura? Soy tremendamente honesto, procuro siempre recomendarles que estudien o que se aferren a algo que les permita comer, pues de la literatura difícilmente lo van a lograr, pero siempre estoy dispuesto a dar como ya lo mencioné, pues el arte es un motivo o forma de vida mediante la cual expresarse otorga libertad, mas no comodidades y menos, forjar un futuro como se acostumbra en quienes trabajan para dizque vivir.

¿Cuál es la importancia que debe tener la revista literaria en general? Primero y antes que nada apertura, ya después y mediante un consejo se verá qué vale la pena y qué no, lógicamente haciendo un seguimiento de los autores que no logran tener la calidad que la revista requiera. Diversidad, la mayor posible. Opciones para combinar autores jóvenes o desconocidos con los no tanto, o los llamados consagrados y más. Máximo cuidado tanto en la edición como en su conformación, y no se diga respecto a los textos a incluir, mientras más revisiones se le den, mayor será la complacencia tanto para los autores como lectores y finalmente algo que antes era lo más difícil (no olvidar que dirigí la revista Pasto Verde diez años), y que hoy afortunadamente por la internet se ha logrado lo imposible, la distribución y promoción de la misma, en resumen, un producto a entregar con la mayor honestidad en cuanto a su contenido y la calidad de la revista y esto se nota, de ahí éstas humildes opiniones de un servidor agradecido.

GRACIAS, MARIO, POR LA ENTREVISTA


22

ESCRIBA EL TÍTULO AQUÍ

COLABORADORES

Alberto Llanes Alejandro Ruiz Araminta Solizabet Gálvez Andrea Herrera R. Antonia María Carrascal Beatriz Teresa Bustos Carlos Daniel Buselli David Soules Ezequiel Andrés Cámara Fray Rodolfo de Jesús O. Carm Fermín Hernández Juan Mauricio Muñoz Jorge Dávila Vázquez José Martín González Rafael Medina Cruz-Lascano José Rodríguez Infante Martha Alicia Lombardelli Martín Clemente Zambrano Mónica Siabato Rosalba Pelle Mancuso Wilmer Lugo Paz Vito Cano Zeydel Bernal

GRACIAS A TODOS


23

ESCUCHA MONOLITO RADIO POR WWW.DELIBERADAMENTERADIO.COM Con la participación de Cristina Arreola, José Pulido, Justina Cabral, Juan Mireles. Más colaboradores invitados.

Espera el próximo número de Monolito Arte el próximo mes 2 de septiembre.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.