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El camino hacia la no oficina

Recursos Humanos El camino hacia la no oficina

La propuesta de una office as a tribe contempla diferentes espacios que de manera simbólica retoman elementos tribales para rescatar y humanizar las oficinas.

Por: CEO Juan Carlos Baumgartner y Psicóloga Carlotta Zanoli

spAce Arquitectura. @spAce_mex @baumgarj spAce Arquitectura https://spacemex.com/ El diseño y la arquitectura pueden causar dolor e incomodidad, pero también pueden ser generadores de bienestar y felicidad. La arquitectura no es un fin último, sino un medio que puede liberar a través del espacio, luz y formas. En este sentido, la nuestra es una, que atendiendo al momento, pero sobre todo al futuro, brinda una solución al problema de las oficinas tradicionales y una respuesta al cómo pueden ser las oficinas después de la llegada del Covid-19.

La idea de asemejar la oficina a una estructura tribu, es a razón de la fragmentación comunitaria al interior de estos espacios. Las sociedades diferenciadas dieron primacía al individuo, la Guerra Fría posicionó la tesis de que el ser humano es egoísta por naturaleza y la revolución industrial de la mano de Ford redujo el trabajo a una productividad vacía. Estos tres elementos resultaron en una herida laboral, que es posible comenzar a sanar desde una arquitectura del bienestar que promueva una creación y fortalecimiento de comunidad, así como encausar el sentido de la productividad y del trabajo.

El ser humano a diferencia de otras especies es bastante débil, por lo menos físicamente. Fue la agrupación con otros seres humanos a partir de tribus lo que supuso fortaleza en términos evolutivos. Estas agrupaciones sociales posibilitaron una mejor supervivencia y una vida cada vez más pacífica. Los miembros de una tribu formaban una familia cuyo lazo dependía de un tótem y no de lazos sanguíneos: “se consideraban como hermanos y hermanas, obligados a ayudarse y protegerse recíprocamente”1 .

La tribu suponía una comunidad de crecimiento e interiorización. Realizaban un trabajo diario de forma conjunta como cazar, recolectar y cuidarse entre sí, pero también lo acompañaban con una serie de prácticas y rituales, muchas de ellas alrededor del fuego, que generaban sentido de vida. Todo sucedía de manera colectiva, cada individuo representaba a su tribu y había solidaridad entre ellos.

Para el antropólogo social James Frazer, el sistema totémico, la unión a partir de un elemento mágico y social, daba como resultado una “organización puramente práctica, destinada a combatir las necesidades más naturales del hombre. Los primitivos formaban, por decirlo así, una asociación mágica de producción y de consumo”2 .

Algunos de los elementos que servían para dar cohesión a una tribu, además del tótem, fueron: la cueva, el fuego, los rituales y los tabús. Estos elementos posibilitaron crear conocimientos, cultura y sentido a nivel individual y colectivo. Hay en la tribu un claro sentido de pertenencia y unidad a diferencia del presente donde todo se presenta dislocado.

Cómo hacer una oficina tribu

La oficina tribu al ser una no oficina, integra los elementos principales de la tribu a su funcionamiento para superar el aspecto mecánico de las bullshit offices y construir una nueva, cimentada en el bienestar a fin de humanizar las oficinas. La cooperación, dignidad, bienestar comunitario y sobre todo el sentido, son el eje central.

A partir de los elementos clave de una tribu, la propuesta de una office as a tribe contempla diferentes espacios que de manera simbólica retoman elementos tribales para rescatar y humanizar las oficinas. El espacio tiene que evidenciar el propósito y trascendencia de la oficina como tribu.

• Espacio fuego. Espacios pensados para promover una mayor sociabilidad entre los integrantes de la tribu, así como la construcción de nuevos conocimientos. Estos espacios tienen como objetivo rescatar la epistemología del fuego, esos conocimientos que se creaban alrededor de este elemento. Un espacio que recupera

simbólicamente el papel del fuego como punto de reunión y aprendizaje social. El espacio como estímulo para realizar acciones y socializar.

• Espacio cueva. La oficina entera se piensa como cueva ya que es el refugio de la tribu. Sin embargo, siempre ha sido necesario también un espacio individual donde refugiarse del otro e interiorizar en sí mismo y sus pensamientos. El espacio cueva promueve un momento de contención y reflexión individual donde las personas pueden actuar y moverse con independencia.

Son espacios para usar herramientas, experimentar y quizá también para compartirlos con pocas personas sin necesidad de que participe toda la tribu. Casetas de videollamadas, espacios one to one, espacios tradicionales de trabajo repensados bajo una arquitectura del bienestar spAce.

• Espacios think. La idea de producción frecuentemente aturde a los trabajadores y termina por desgastarlos a nivel intelectual. Si todo se mide bajo esta lógica, lo que desaparece es el tiempo para pensar y crear.

La office as a tribe no es solo un lugar de producción, sino de una creación encaminada que tiene sentido. Los espacios think promueven el pensamiento, el fluir de la creatividad e ideas a partir de un diseño zen.

• Espacios tótem. Los espacios tótem van más allá del espacio físico pues la meta a conseguir es conectar a la tribu con los valores de la oficina: pueden ser espacios, objetos, ideas o frases que generan familiaridad con la marca. Los espacios tótem generan momentos tótem, puntos de unión para la tribu con los valores emocionales de la organización. Valores de individuo y de corporación a través de los comportamientos. El diseño de affordances es vital para trascender a partir del diseño más allá del espacio físico.

• Espacios refugio. La idea desmesurada de producción acapara la idea de reposo, pero sin reposo no hay un cuerpo saludable que pueda vivir cómodamente, pensar, ser creativo y trabajar. Los espacios refugio son espacios de autorregulación al interior de la tribu. Espacios feel que sirven para relajar cuerpo y mente, y dar un espacio del trabajo. Una isla simbólica diseñada para descansar.

• Espacios lúdicos. Son espacios propuestos para que la tribu pueda divertirse y conectar a partir del juego (play). En estos espacios, a diferencia del game que está estructurado para conseguir metas específicas, lo que se promueve es el play, un juego lúdico y orgánico que permite sacar la personalidad de los individuos, y a partir de esto, conectar. La conexión de la tribu no solo es desde el trabajo, sino desde el ocio y el juego.

Referencias:

1.- Freud Sigmund, Tótem y tabú, Alianza editorial, 2019, pág. 139. 2.- Ibíd. Pág 151

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