18 de junio de 2015 José Antonio Jasso Lugo PRACTICAS SOCIALES DEL LENGUAJ
LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL
INTRODUCCIÓN “La lectura hace al hombre completo; la conversación, ágil y el escribir, preciso”. SIR FRANCIS BACON
Para comenzar abordando el tema del español en el nivel preescolar es importante recalcar el concepto del español como una materia académica en donde se abrirá paso al análisis de su enfoque en el nivel preescolar, además de mencionar por qué esta materia es importante aplicarla en los primeros años de vida de un niño. Es importante mencionar que se hablará del español no como un idioma sino como el conocimiento de dicha lengua en forma oral y escrita para que los alumnos puedan manejar el vocabulario, la sintaxis y la gramática de dicha lengua. En la educación preescolar es el primer acercamiento al lenguaje escrito y al desarrollo del lenguaje oral, siendo el principal propósito proporcionarles a los niños las herramientas necesarias para que comprendan la importancia de aprender la escritura, presentarles situaciones que les ayuden a entender para que se escribe, familiarizarlos con el lenguaje escrito a partir de situaciones que impliquen la necesidad de expresión e interpretación de diversos textos, más para los niños que no tienen en sus hogares un lugar alfabetizador. Por otro lado se mencionará lo importante de esta lengua para el niño preescolar a lo largo de su vida, ya que sin esta no se pudiera entender ninguna otra materia y/o asignatura como lo es la historia, la matemática la física, etc. Conforme se vaya realizando este ensayo surgirán dudas como; ¿Por qué es tan importante esta lengua? ¿Por qué se debe enseñar a tan temprana edad? Entre muchas otras que se trataran de responder. El propósito de este ensayo es investigar acerca de los tipos de enseñanza del español, practicar sobre la elaboración del mismo y conocer sobre los diferentes tipos de estrategias. “Un niño que lee será un adulto que piensa”
LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL EN NIVEL PREESCOLAR El ser humano nace con un número de neuronas finito, más de cien mil millones que, a partir de ahí, se irán reduciendo hasta el fin de nuestros días, según Emilio Rodríguez Ferrón doctor en el Hospital Perpetuo Socorro de Alicante. Sin embargo, es durante los primeros 3 años de vida cuando estas neuronas se organizan y comienzan a establecer conexiones entre ellas a una velocidad irrepetible. Desde el nacimiento hasta los tres años, que es cuando el cerebro tiene su máxima plasticidad, las regiones cerebrales son capaces de adaptarse e incluso ejercer las funciones de otras regiones si éstas están dañadas por cualquier motivo. Hasta los seis años el cerebro sigue adquiriendo habilidades. Una estructura anatómica ya definida; de manera que a esa edad puede darse por concluido el proceso de desarrollo cerebral. De 2 a 6 años las actividades que realicemos deben ser fundamentalmente significativas, es decir, con contenidos familiares al niño para que sean significativas, claro está, el profesor ha de tener capacidad de empatía, de improvisación y de adaptar las actividades que haya preparado, porque con niños tan pequeñitos no es recomendable hablar de lluvia en un día que haga sol. Lo importante es que las actividades de aprendizaje sean siempre actividades significativas y que estén integradas en el contexto más amplio de aprendizaje del niño. A estas edades tan tempranas, los niños necesitan de la afectividad en el entorno de enseñanza-aprendizaje, por eso es importante que el profesor haga uso de su empatía con los pequeños y que tienda siempre a premiar lo correcto para crear incentivos y autoconfianza. ¿Qué sabemos?, ¿qué queremos saber?, y ¿qué hemos aprendido?: Con estas tres preguntas podemos planificar nuestros criterios y ejes de evaluación. Las prácticas sociales juegan un papel importante en la enseñanza del español dentro del preescolar ya que están constituidas por los diferentes usos del lenguaje que permiten recibir, transmitir y utilizar la información; la representación, la interpretación y la comprensión de la realidad; la construcción y el intercambio de los conocimientos; la organización y autorregulación del pensamiento; las emociones y la conducta; entre otras habilidades. Ya con todas las cartas sobre la mesa tenemos la libertad de remendar párrafos anteriores en una buena conclusión y de esta forma establecer que la enseñanza del español en el nivel
preescolar es de suma importancia, por muchos motivos, de los cuales se rescatan dos principales: el primero consiste en la importancia del español ya que sin éste sería muy difícil desarrollar otras ramas de conocimiento, y el segundo radica en las edades que engloba el preescolar siendo éstas las más favorables para construir cualquier tipo de conocimientos y que mejor que el del español. En fin, el español es la principal herramienta para el desarrollo óptimo de muchas competencias, por lo tanto, se debe considerar que esta rama requiere ser aprendida significativamente, para que los individuos puedan sacarle el mayor provecho, y que mejor momento que adquirirla a temprana edad para que siga evolucionando conforme el individuo madure. En un ambiente de aprendizaje el participante actúa, usa sus capacidades, crea o utiliza herramientas o artefactos para obtener e interpretar información con el fin de construir su aprendizaje. (González y Flores, 1997) y si hablamos de alfabetización nos referimos a “la capacidad que tiene los seres humanos para poder utilizar la lectura y la escritura en los diferentes contextos donde se desenvuelve.” (Luna, 2005). Sabemos que existen diversas estrategias para la enseñanza del español, ¿Pero cuál se apega más a los diversos contextos? Es por ello que cuándo se toma en cuenta esta estrategia que quizá no sea la más apropiada, pero se puede adaptar en cualquier espacio disponible, teniendo en cuenta la flexibilidad de sus materiales y la posibilidad que nos da como docentes de reflejar la lengua escrita en el modo de trabajo a partir del aula, a partir de portadores de texto y materiales escritos que sean significativos para el alumnado. En este caso el papel que jugamos como educadoras, es darle sentido primero conocer esta estrategia y cómo podemos desenvolverla con los alumnos, recordemos que el aula de clases no se limita únicamente a la escuela, sino también al contexto donde se desarrolla el alumno, es por eso que desde mi punto de vista el ambiente alfabetizador se encarga de mostrar al alumno que el proceso de lecto-escritura lo puede practicar en cualquier espacio, sin importar que no sea el aula de clases, así como también, limitándonos en el nivel preescolar, que es posible que los alumnos identifiquen que la grafía, la fonética, y sus derivados de la escritura los podemos encontrar en nuestra vida diaria y que el uso que se les debe dar es para expresarnos, decir lo que sentimos, comunicarnos, cumplir una necesidad, etc. Cuando hablamos de facilitar y motivar este conocimiento por medio de ambientes de aprendizaje en los portadores de texto, es que el alumno pregunte sobre lo que observa y se interese por lo que identifica como texto o le interese saber cuál es el mensaje que se da, en este caso es importante que conozca su entorno y que observe lo que hay en él para que en todo caso lo que no encuentra se aplique dentro de la escuela.
“Los diferentes usos del lenguaje permiten al hablante la comunicación oral y escrita, la representación, interpretación y comprensión de la realidad; la construcción y el intercambio de los conocimientos; la organización y la autorregulación del pensamiento, las emociones y la conducta. Uno de los propósitos centrales de la enseñanza del español es desarrollar las competencias comunicativas que le permitan al estudiante expresar pensamientos, emociones, vivencias y opiniones; dialogar y resolver los conflictos; formar un juicio crítico; generar ideas y estructurar el conocimiento; dar coherencia y cohesión al discurso; disfrutar del uso estético del lenguaje; y desarrollar la autoestima y la confianza en sí mismo”.1 En palabras de Steve Pinker (El instinto del lenguaje, 2007), el lenguaje no se aprende, sino que se desarrolla. Por supuesto que la adquisición del lenguaje propio se extiende durante toda la vida. En la etapa de preescolar, la facilidad de aprender es tan sorprendente, sin embargo, como la rapidez y la facilidad para olvidar, por eso si damos clase a niños tan pequeños es fundamental no bajar la guardia y ser rigurosamente constantes, porque si en el aprendizaje no hay constancia no habrá tampoco grandes resultados. “Lo que cambia a nuestro planeta es el conocimiento, lo que crea conocimiento es educación”. Anónimo
Conclusión
1http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/rc/programas/lepree/practicas_sociales_del_len guaje_lepree.pdf