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La ¿gerente?

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El Ying Yang

El Ying Yang

Su nombre era Saira, morena delgada de gran culo y tetas, casi la mujer deseada, su vida desde los 15 años se había tornado algo brutal. Su edad 23 años, muchos se preguntan como hizo para tener tantas cosas materiales si antes era una pobre alma vagabunda; su contestación siempre es la misma – “papá Noel me trajo todo esto” - la gente creía que estaba corrida.

pero lo que si sabían era de su trabajo, se iba a las 6 a.m. y llegaba a las 12 a.m. que ¿en qué trabaja? Bueno según lo que escuché es contadora pública en una empresa, que digo contadora, la ascendieron a gerente la semana pasada, según porque es una trabajadora excelente, pero qué va, yo sé que es porque se acuesta con el dueño de la empresa, una vez la vi brincando encima del jefe, pero se les acabó el recreo cuando llegó la esposa, no trabajo allí, pero tengo que hacer papeles en esa empresa, lo chistoso es que es re amiga de la mujer del jefe, le habla de Rosita por aquí Rosita por allá. Hipócrita si es, pero hay que ser estratégicos ¿no? Los fines de semana, cuando la esposa está en su trabajo o viajando se queda a cuidar el hijo del jefe y no hace falta decir que de vez en cuando también cuida al jefe; todos en la empresa saben de la aventura de Saira y el jefe, pero nadie se atreve a decirle a Rosa su esposa, me dicen que el que quiere hablar no vuelve. No sé cuanto tiempo lleven con la aventura, pero se notó que desde que empezó, la vida de Saira se acomodó, y no miente cuando dice que papá Noel le ha dado todo, porque ¿adivinen como se llama el jefe?

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FABULA

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