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Sumario
Director
1 Editorial
Pablo Oscar Vera
Jefe de redacción Gabriel “Gallego” Rodríguez Consejo de redacción Jorge Samonta Pablo Mattesz Carlos «Pocho» Baraldini Javier Vogel María Cristina Tucci Colaboración especial Martín Piqué Xavier Dupret Roberto Sconza Pablo Dipierri Rosana Sanín Giao Fotografía
María Cristina Tucci
Ilustración
Rep Colaboradoras Graciela Sarmiento Claudia Borsa Carla Petrone Corrección Jorge Samonta Pablo Mattesz Claudia Borsa María Cristina Tucci Agradecimientos Carlos “Charly” Sozzani Mariela Giorgi Leonardo Patti Diagramación y diseño Carla Samonta carlasamonta@hotmail.com Impresión
Gráfica Cogtal
Distribución: María Belén Gómez Silvestre Rodríguez
Entrevista a JULIANA DI TULLIO 2 “Nacionalizar Y.P.F. fue un hecho más trascendente de lo que la mayoría cree” Por Jorge Samonta
7 Cuento El asistente Por Roberto Sconza 8 Entrevista a Ángel Clemente Rojas- “Rojitas” De cuando en Boca jugó un ángel Por Jorge Samonta
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Lanzamiento de la Cátedra Abierta del Pensamiento Argentino y Latinoamericano Néstor Kirchner
12 El odio viaja en primera clase Por Pablo Mattesz 15
La militante del puño crispado
Por Pablo Dipierri
16 Entrevista a AGUSTÍN ROSSI “Nosotros éramos los locos Addams y ellos la familia Ingalls” Por Jorge Samonta 20
El misterio europeo
Por Xavier Dupret
22 Aportes al debate: Movimiento, Democracia y Poder Por Carlos “Pocho” Baraldini 25 NÉSTOR QUIJOTE Por Rep Los dichos y opiniones vertidos en esta publicación corren por cuenta y responsabilidad de sus autores.
Registro de la propiedad intelectual Exp. Nº 958610. Director: Pablo Oscar Vera / Propietario: Gabriel Ignacio Rodríguez Dirección : Av. Mitre 976 - Avellaneda - Buenos Aires.
Editorial
LA PELOTA NO SE MANCHA… Dijo el Diego en la tarde de su despedida, envuelto en la emoción, y con un dejo de nostalgia que se hacía extensiva a millones de argentinos, que tuvimos momentos de alegría extrema, y por qué no de reparación histórica, gracias a él. En aquella frase memorable, y de acuerdo a nuestra libre y arbitraria interpretación, Diego nos quiso significar que a pesar de lo turbio que rodea al fútbol, de sus complejidades y de sus contradicciones, con su espíritu lúdico siempre va a constituir un rasgo sagrado de nuestra identidad y de nuestra cultura popular. Venga entonces la comparación no menos arbitraria con el actual momento político y con el derrotero del Proyecto Nacional, con sus contradicciones y complejidades, pero que no se puede permitir que nada ni nadie lo tiña en su avance de transformaciones, aún escudándose en reclamos cuya legitimidad y justicia son bastardeadas por los marcos de alianzas corporativos y claramente
funcionales al monopolio, reclamos y derechos que fueron atendidos y restituidos por Néstor y Cristina. Únicamente el actual camino de afectación de intereses de unos pocos en beneficio de unos muchos es el que garantiza el avance a paso firme, y no los mensajes de “fe”, “esperanza”, “mesura” y “racionalidad” aplaudidos y apañados por la tribuna de los consensos. Sólo el Estado presente será el árbitro que administre justicia para el lado de los más vulnerables, y no la neutralidad aséptica cuyas verdaderas intenciones son las de favorecer al equipo de unos pocos. Es precisamente el actual Estado presente el que, desde aquel 25 de mayo del 2003, vino a romper con la lógica imperante de los mercados reemplazándola por la política en su rol indelegable de transformar la realidad. En este sentido vale el recuerdo de aquel ministro de economía: les hablo con el corazón y me contestan con el bolsillo…, un claro ejemplo de que no se puede apelar a la misericordia de estos muchachos, serán las políticas activas de este Estado presente el camino a recorrer, aunque desde la Tribuna de los Consensos baje el grito de ¡¡intervencionistas, intervencionistas!! Quien quiera jugar en nuestro equipo tendrá que recorrer ese camino, no otro; con la hidalguía del Diego, gambeteando adversidades. Con hidalguía tendremos que sortear intereses en disputa, zancadillas de poderosos y fantasmas del pasado que quieren regresar, éste es el desafío, ésta es la continuidad del Proyecto, que se revalida día a día, sin detenerse, y con un objetivo concreto: la felicidad de nuestro pueblo.
Krispados 1
Entrevista a JULIANA DI TULLIO - Vicepresidenta del bloque de diputados del FPV
Con Cristina:
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De los dos, la primera que tuvo visibilidad en la provincia de Buenos Aires fue Cristina. Me acuerdo que para el 8 de marzo de 1999, Día Internacional de la Mujer, hicimos un acto en el Salón Azul. Me empecé a interesar por Santa Cruz y por ese hombre que gobernaba esa provincia. Me atrajo la manera que ellos resistieron al neoliberalismo. Evidentemente Cristina captó mi compromiso y lo llamó a Néstor, él me dijo que me quería conocer. Me citó a una reunión en la Casa de Santa Cruz. Cristina me encantó desde que la conocí, es linda, inteligente, brillante. Y con Néstor, como muchos, quedé maravillada al conocerlo. Cuando saca el 22% y sabíamos que la segunda vuelta la ganaba con comodidad, la alegría que me envolvió me generaba vértigo. Me daba vértigo la emoción de saber que un buen tipo, un visionario, alguien que quería construir un país normal fuera a ser Presidente, a mí me impactó. Cuando juró lloramos todos.
“Nacionalizar Y.P.F. fue un hecho más trascendente de lo que la mayoría cree” Nota: JORGE SAMONTAlestonsamonta@gmail.com
Fotos: MARÍA CRISTINA TUCCImcristinatucci@yahoo.com.ar
La Diputada Juliana Di Tullio es Licenciada en Psicología Social, nació en Morón en 1971. Integrante titular del Parlamento del Mercosur (2010-2013). Fue embajadora para temas de la mujer en Cancillería (2003-2005). Diputada Nacional por el Frente para la Victoria (2005-2009), renovó su mandato hasta 2013. Nos recibe en una antesala el libro apaisado con las fotos de Néstor Kirchner. De inmediato nos avisan que nos espera la Diputada. Se abre la puerta de un amplio despacho y Juliana Di Tullio con una sonrisa simple y de entre casa se hace a un lado y nos franquea el paso con un ademán cortés y simpático. En las paredes laterales unos cuantos cuadros nos muestran a la Diputada en distintas etapas de su carrera política, intercalados hay otros cuadros con la imagen de Néstor Kirchner. En la pared frontal una imagen de Evita con el pelo suelto. Exhibe un trato de compañera militante, no hay que subir demasiado para encontrarse en un pie de igualdad con Juliana Di Tullio, apasionada, directa, feminista como se define a sí misma y kirchnerista de la primera hora. Nació en Morón en 1971. Es Licenciada en Psicología Social. Viene de una familia militante, sus padres tienen hoy sesenta y cinco años y formaron parte de la Juventud Peronista de fines de los sesenta y principios de los setenta. Mi infancia está muy ligada a la política, pero muy ligada. Yo vivía en Castelar a doce cuadras de la Mansión Seré, a la vuelta vivía el Jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires durante la dictadura, el comisario Rossi. Como si esto fuera poco a dos cuadras vivía Bignone. Y en ese escenario vecinal mis viejos militaban. A mi no me pasó lo que algunos sectores de la sociedad aseguran ignorar sobre la desaparición de personas, de torturas y muerte. En mi casa se hacían reuniones políticas, se cantaba la marcha, despacito pero se cantaba. Mi viejo tenía los libros guardados en el altillo, escondidos. Tengo una imagen de mi infancia y es la aparición en televisión de Nicanor Costa Méndez (Canciller de la dictadura durante el conflicto de Malvinas) y yo que era muy chica dije “qué viejito con cara de bueno”, mi papá se puso loco y ahí me empezó a bajar línea y empecé a conocer y a comprender más profundamente el horror. El Mundial del setenta y ocho fue terrible para mi hermano y para mí; queríamos salir a festejar, pero mis padres nos explicaron que era una situación muy contradictoria, y que no había tanto para festejar. Mis viejos no eran militantes ni de Montoneros ni de F.A.R., tampoco pertenecían a ningún espacio de lucha armada. Pero eran militantes de la J.P., muy concientes y muy solidarios. La familia de mi viejo tanto como la de mi vieja eran muy gorilas, extremadamente gorilas. Cuando el 24 de marzo de 1976 fuimos a lo de mi abuela paterna
a saludarla por su cumpleaños, ella abrió la puerta y dijo “es el día más feliz de mi vida”. Así como llegamos a la puerta pegamos media vuelta y nos fuimos, yo no entendía nada. Fueron años de distanciamiento e incomunicación con mi abuela. Yo siento que el peronismo está inscripto en mi genoma humano. El peronismo es un hecho cultural que intentamos transmitir de generación en generación para perpetuar el futuro. Volviendo a mis viejos. Su militancia es por absoluta convicción y no por otra cosa. Vengo de una familia de clase media alta y no teníamos necesidades económicas. Te doy un ejemplo, televisores había en casa, pero el ascetismo militante de mis viejos nos prohibía verlos. Hacíamos otras cosas que más tenían que ver con juegos con nuestros amigos, la lectura, etc. Pretendían que no nos contamináramos de ninguna publicidad de la dictadura. Existía en mis padres esa cosa culposa de la clase media alta, que era la que los llevaba a corrernos de determinadas costumbres burguesas. No olvidemos que era la primera generación de una familia gorila que se rebelaba ante los mandatos familiares. Es curioso, mi abuelo paterno que murió no hace tanto, a los noventa y tres años, se murió reivindicando a Perón, y yo lo entendí como un gesto de amor hacia mí. Mi abuela se pregunta por qué la odió a Evita y a Perón si el pueblo los amaba, no sé qué me pasó me dejé llevar, eso dice hoy mi abuela. Esto que digo no lo tomó como una historia individual, siento que es la historia de la Argentina.
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Los noventa:
Un día, Néstor…
me llama, yo estaba en Morón, en la sede de nuestra agrupación (local que inauguró él en 2001) y me pregunta dónde estoy, le contesto que en Morón, bueno venite, adónde, acá a Casa de Gobierno. Eran las diez de la noche, estaba muy cansada de trabajar todo el día; quería volver a mi casa, pero por supuesto le dije “bueno voy para allá”. Cuando llego me dice: “quiero que estés en las listas de diputados nacionales de octubre”. Yo quedé impactada. Me cuenta sobre las compañeras que iban a integrar esas listas, y agrega “yo quiero que lo hagas no sólo por vos, yo quiero que lo hagas por tus viejos, porque la nuestra es una generación que necesita una reivindicación. Aparte va a ser una lista que va a cambiar el Parlamento”. Nosotros veníamos de romper con el duhaldismo. Fue en 2005. Mientras Néstor me hablaba yo llorisqueaba de la emoción. Por suerte, mis hermanos y mi padre volvieron de España, y no por la crisis que se avecinaba, sino por no quererse perder este momento histórico. Cuando estaba sin mi familia y me preguntaban, casi retóricamente, si me había quedado sola, yo les respondía que sola no, me quedé con Néstor y Cristina.
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Mi viejo era un industrial de raza, enarbolando el pensamiento nacional, la industria nacional. Tenía fábricas de baterías. Un día se inaugura el primer Carrefour en Liniers y fuimos con mi viejo. Él quería ver la sección de autopartes; mi papá se para ante las baterías y me dice:” acabo de ver mi partida de defunción”. Las baterías, importadas, estaban a cuarenta y dos pesos que era el costo que tenía mi viejo de producción. Perdió todo, pero absolutamente todo. No soportó más y se fue a vivir a España, después se fue toda mi familia. Me quedé muy sola en la Argentina. La primera vez que me tocaba votar no tenía el D.N.I., fue la primera vez que Menem era elegido presidente. La segunda ya tenía D.N.I. pero ni loca lo voté. Me quedé decidida a hacer política. En 1999 me engancho a militar con Cristina (Fernández de Kirchner) y en el 2000 me sumo a Néstor. Yo tendría 28 cuando hablo con Néstor por primera vez y le cuento resumidamente esto que les estoy diciendo a ustedes sobre mi familia. Digo resumidamente porque el que habló fue él durante tres horas, sin parar. Me habló todo el tiempo del Proyecto Nacional. Encontré en él al primer dirigente que hablaba de política real, verdadera y encima coincidía con cada cosa que él me decía. Por supuesto que ahí le firmé “la rendición incondicional”. Quería ser presidente en 2007. En ese momento estaba el Grupo Calafate, pero no lo iban a usar para acumular a nivel nacional, también el Frente para la Victoria de Santa Cruz, pero lo que más usábamos era La Corriente. Se sumaban compañeros como Dante Dovena, el “Cuto” Moreno, Aldo Sampedro más otros compañeros que todavía están. Con Dante (Dovena) y Edy Binstock armamos la primera sección electoral, pero todo muy marginal. Luego se suma Mario Oporto. En 2001 abrimos el primer local kirchnerista, yo creo que de la Provincia de Buenos Aires. Ahora con el tiempo, pienso que Kirchner estaba a 5.000 kilómetros delante de cualquiera. Tenía una doble capacidad: ser un tipo común, con una vida común, con una historia común y la otra capacidad es la que dije antes, ese tipo común estaba a miles de kilómetros adelante de cualquiera.
Teresa Rodríguez: Género:
La reivindicación de los derechos de la mujer, obviamente, es anterior al peronismo. Cuando Perón empieza a construir lo hace con lo que estaba excluido, lo que estaba por fuera, el obrero, la niñez y por supuesto las mujeres. El peronismo siempre se caracterizó por canalizar la necesidad en un derecho, ya sea acompañando o proponiendo. En lo particular soy militante del Movimiento de Mujeres hace muchos años. Soy feminista, no sólo no me da vergüenza decirlo, sino que es parte de mis orgullos. El Movimiento al que hago referencia es un espacio heterogéneo, no obstante para mí feminismo y peronismo van de la mano. Ningún espacio político otorgó tantos derechos a la mujer como Perón, Evita, Néstor y Cristina. Vale la salvedad que, obviando los nombres de nuestros cuatro líderes, el otro peronismo ha sido muy refractario a los derechos por los que luchamos las mujeres. Una curiosidad: miremos los últimos cacerolazos y el odio expresado por esas mujeres, que participaban de esas pequeñas marchas, hacia Cristina. Eso excede el sentimiento opositor, para mí eso se llama odio de género. Si no hubiera mujeres machistas no habría machismo. Respecto del aborto, soy autora de un proyecto de interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana doce de gestación. Creo que es un debate que hay que darlo; y hay que darlo porque existe y atraviesa a todos los sectores sociales, con la diferencia que la clase alta o cierta clase media acomodada lo realiza en lugares seguros para la salud y las mujeres de escasos recursos en un alto porcentaje, se mueren.
Entre los numerosos proyectos que impulsó la Diputada Di Tullio está el de ponerle el nombre de Teresa Rodríguez al primer pozo de extracción de petróleo. “Creo que ese nombre sintetiza la historia de lucha de los argentinos durante los años oscuros del neoliberalismo. Es fuertemente simbólico y además es un hecho reparador. Nacionalizar Y.P.F. fue un hecho más trascendente de lo que la mayoría cree. Desde la ciudad, lo visible es la estación de servicio. Cuando aún estaba privatizada con mis propios ojos vi cómo los pueblos que existían en torno a la actividad petrolífera se habían convertido en pueblos fantasmas. Sus cines abandonados, las casas de los Ypefianos que eran lugares de encuentro, los comercios, habían arrasado con todo. Ahora, a partir de la nacionalización todo eso vuelve a cobrar vida, a generar muchos puestos de trabajo, a ser el país normal que quería Néstor y todos nosotros”.
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CUENTO
El asistente Por: Roberto Sconza robertosconza@hotmail.com Siempre que subía al ascensor se sorprendía a sí mismo cantando “Camino a Camagüey”. Siempre se bajaba sin saber por qué. Entró al departamento, tanteó la tecla y encendió la luz. “Es por lo del tren lechero” escuchó decir a una voz familiar, tan fácil de reconocer como de saber imposible. El joven militante saltó hacia atrás y golpeó la espalda contra la puerta. Quiso gritar, pero no pudo. -Vos le pusiste “el lechero” a ese ascensor que para en todos los pisos, como el tren lechero a Camagüey de la canción, que para en todas las estaciones –dijo el hombre de la voz y siguió mirando por la ventana. -Ah –dijo el joven, y se quedó pensando en por qué contestaba a esa revelación como si el que la había pronunciado no hubiera sido un intruso en su departamento en el medio de la noche. Los dos se quedaron en silencio. El hombre frente a la ventana, mirando hacia la calle, con las manos en los bolsillos. El joven aterrado, sorprendido, incrédulo, tratando de comprender, entre otras cosas incomprensibles, por qué las luces de la calle parecían atravesar aquella silueta. -¿Néstor?-preguntó. El hombre se dio vuelta, se miró el traje gris, cruzado, arrugado y desabotonado; la camisa, los mocasines negros. Sus ojos de nene con sueño se esforzaron por hacer foco en la penumbra. Hasta que mirando al joven y después de saludarlo con una sonrisa dijo: -No, Blancanieves y los siete enanitos. -Néstor –dijo el joven alargando la e y con los ojos llenos de asombro. No puede ser, no puede ser –repitió mientras caminaba por la habitación tropezando con los muebles. -¿Dijiste o no dijiste “Te quisiera ver Néstor, peleando contra estos buitres”? -Lo pensé –contestó el joven y al tiempo que contestaba pensó que había ido demasiado lejos, que tener una alucinación y además conversar con ella eran suficientes motivos como para sospechar de su cordura. -Me estoy volviendo loco, todo esto me está comiendo la cabeza, tengo que parar, por Dios tengo que parar –gritó el joven, caminó hacia la puerta, la abrió e intentó salir del departamento. -¿Te vas?, Qué cosa, haber sabido que arrugabas. -Yo no arrugo –dijo el joven. -¿Ah no?, entonces ese que sale rajando debe ser otro. El joven se detuvo, giró sobre sus pasos.
-Esto no está pasando –dijo. El hombre que ahora miraba otra vez hacia la calle dijo en un tono que pareció más de evocación de algún recuerdo que de argumento: -¿Nunca sentiste como si una voz te dijera, “esto sí” “esto no” “leé tal o cual cosa” “cuidado con fulano”?, cosas así. –preguntó. -Esto no está pasando -volvió a decir el joven. -¿Vas a entrar o te vas a quedar ahí parado? El joven entró al departamento y cerró la puerta. Pensó en que quizás fuera la presión, la falta de descanso, las mil cosas que tenía que resolver. -No es nada de eso –dijo el hombre y después se refutó a sí mismo –Bah, no sé, qué sé yo, a lo mejor estoy acá por la manera en que estás poniendo el corazón y el cuerpo. -¿Por qué me está pasando esto? -¿Me preguntás a mí, o te lo estás preguntando a vos mismo? El joven se encogió de hombros. Supo que no habría de encontrar una respuesta por su cuenta. -A usted –dijo. -Porque precisás ayuda, y te la merecés. Estás entre los primeros de la lista. -¿Lista de qué? -De jóvenes inteligentes, estudiosos, que no están corrompidos, que laburan, que hacen obra, que se ganan todos los días la confianza de la gente, que tienen mucho por hacer. -¿Y usted estaba en la lista de alguien? -De nada –dijo el hombre. -Gracias, perdón, es que estoy… -Si, estuve dijo el hombre. Era un pibe como vos cuando vino mi asistente. Era condición para después ser asistente. Y también era condición morirse en la lucha. El joven lo miró asustado. El hombre se acercó, soltó una risa breve, le dio dos golpes suaves en la cara con la mano abierta. -No te asustés, no hace falta que te mueras, dije “era condición”, las cosas están cambiando allá arriba. Además yo que vos me preocuparía más por lo que tenés que hacer acá que por lo que vayas a tener que hacer después. Lo que sí sigue siendo condición es que seas digno de la confianza que la gente pone en vos. -Pero yo… -Sí, sí, ya sé, recién empezás. Pero venís con premio, como decía el General. Después lo agarró del hombro. -Vení –dijo. Juntos se acercaron a la ventana. Se quedaron uno al lado del otro mirando hacia la calle. Unos gatos maullaron en la cornisa, se escuchó una sirena de ambulancia. -No dudes en llamarme –dijo el hombre y le dio dos palmadas en el culo. El joven se quedó parado esperando despertar. Lo sorprendió el amanecer mirando por la ventana.
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Entrevista a Ángel Clemente Rojas- “Rojitas”
De cuando en Boca jugó un ángel Nota: JORGE SAMONTAlestonsamonta@gmail.com
Fotos: MARÍA CRISTINA TUCCImcristinatucci@yahoo.com.ar
Recuerda a distintos jugadores de su época y su posterior destino. Habla de Bernao, de Mura, de Corbatta, de Menéndez, recuerda y mira atravesando las paredes del Bar Sarandí y llenando de jugadas magistrales y gritos de gol y de gloria, el lugar. Una encuesta reciente lo incluye entre los cinco mayores ídolos de la historia de Boca, junto a Maradona y Riquelme. A él eso lo emociona y reflexiona sobre lo curioso que resulta que votantes tan jóvenes lo elijan, dado que no lo vieron jugar. Dice que es un elegido porque tuvo la suerte de jugar con su máximo ídolo de pibe: Ernesto Grillo. Era tal el respeto que, aún siendo compañeros, Rojitas no lo tuteaba. El autor de esta nota está entrevistando a su más grande ídolo de la infancia, alguien que pudo más que Batman, que Súperman o que Patoruzú. Ángel Clemente Rojas, “Rojitas”, es un poeta en el sentido que Fontarrosa, Osvaldo Soriano, Víctor Hugo Morales u otros tantos consideramos poetas, ésos que usan el pasto del estadio para escribir sus bellezas. Hoy recibe una jubilación otorgada por Boca Juniors y el club lo envía de visita a todas las peñas xeneizes del país. La gente lo ama, como su nombre de pila, Rojitas, tiene un ángel que lo hace distinto. Aquel que no lo vio jugar le expresa el afecto y la admiración que sólo se le reservan a los mitos. Nació en 1944, en Sarandí, y debutó a los diecisiete años en la primera de Boca. Dice que ganó dinero, pero que es incomparable con lo que puede ganar cualquier jugador de primera actual. Que los dos primeros años no cobró sueldo porque Alberto J. Armando, presidente histórico del club, lo entregaba directamente para el pago de la casa que le había hecho comprar. Esa casa costó un millón de pesos de la época, primeros años de la década del sesenta. Con lo cual, como afirma Rojitas, se echa por tierra la leyenda que dice que el primer partido cobró trescientos mil pesos y se los gastó en una noche. Es imposible, asegura, son habladurías, jamás había visto toda esa guita junta. Ganó cinco campeonatos con Boca en 1964, 1965, Nacional de 1969, Copa Argentina de 1969 y Nacional de 1970. A diez manzanas a la redonda de dónde él nació, vivían Mura, Bernao, Ferreiro, Santoro, épicos jugadores de las épocas de gloria de Independiente; también “el
mariscal” Roberto Perfumo, ídolo indiscutido de Racing Club. Todos jugaban juntos a la pelota en el barrio, como si Sarandí se hubiese propuesto parir cracks. En una gira nos tocó jugar contra el Real de Madrid y jugaba Di Stéfano, para mí el mejor equipo que tuvo el Real y le ganamos. Cuando volvemos a Buenos Aires, Armando me dice que el Real me quiere comprar y yo le contesto que ni loco me voy de Boca. Qué inocente que fui, me hubiera llenado de guita, pero para mí Boca, la gente, los compañeros, el barrio, valían mucho más.
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La llegada a Boca y el debut en Primera
Para que te probaran en ese tiempo tenías que conseguir “la citación”. El padre de un vecino mío se la había conseguido para el pibe, pero mi amigo me pidió que lo acompañase. Mi amigo no jugaba bien, pero al padre se le había puesto que tenía que ser jugador y entonces lo acompañé con la condición que viniera mi padrino que realmente era como un padre para mí. Las pruebas las hacía “El Nano” Gandulla en un club que quedaba por el barrio de Agronomía. El pibe había llevado botines, estaba bien equipado y yo con zapatillitas solamente. Resultado que mi vecino no anduvo bien. Mi padrino mientras tanto lo volvía loco a Gandulla para que me probase, y “El Nano” no quería porque yo no tenía citación. A mí me daba vergüenza la situación. Se conoce que mi padrino le ganó la pulseada. Gandulla me pregunta de qué jugaba y mi padrino le dice de nueve. Me dieron una pecherita y un pantalón, me hizo entrar en el segundo tiempo, en veinte minutos hice tres goles. A los dos días me estaban haciendo radiografías y mi papá y mi mamá firmaban el permiso en la sede de Boca que en ese entonces estaba en la Avenida Almirante Brown. Así es la historia, Dios quiso que vista la gloriosa azul y oro, porque yo podría haber sido jugador de Independiente o de Racing, por la cercanía, pero amores son amores, Dios lo sabe.
Cuando a los diecisiete años me avisan que el sábado siguiente concentraba con la primera casi me muero. Ellos concentraban en el Hotel Nogaró y yo no tenía zapatos para ponerme, en casa la pasábamos mal económicamente. En vez de estar contento estaba angustiado por los zapatos. Qué hago, qué no hago. Me decidí, me fui hasta lo del panadero de la esquina de casa, que era fana de Boca y le dije: “Mire Don José, le voy a dar una satisfacción. Hoy a la noche concentro con la primera de Boca, pero tengo un problema, no tengo zapatos”. El tipo se puso loco de alegría. Agarró la camioneta, me llevó hasta Mitre y Acha, acá en Sarandí y me compró un par de zapatos. A las nueve de la noche tenía que estar en el hotel para cenar. Voy con mis zapatos nuevos, no podía más, era la primera vez en mi vida que usaba zapatos. Encima en la mesa, que era de cuatro personas, me toca con Rattín, con “El Beto” Menéndez y con Gonzalito. De los nervios y de la vergüenza no comí, me temblaban los cubiertos en las manos. Me mandan a preguntar con quién me toca en la habitación y me dicen con Antonio Ubaldo Rattín. Me quería morir. Subí, el “El Rata” llegó después con un bolso lujoso, pijama de seda, claro, el tipo era un consagrado, caudillo de Boca, jugaba en la Selección. ¡Mi Dios! No pude dormir en toda la noche. Antonio me hablaba, me daba ánimo, pero no había caso. Amanece con lluvia. Adolfo Pedernera que era el técnico, no me iba a poner de titular. Empieza la charla técnica y me dice que salgo con la nueve titular. Me pone en lugar de Paulo Valentím. Yo no lo podía creer, es como si lo estuviera viendo ahora; viene el utilero, me trae los botines y la camiseta con el número nueve. Boca había gastado una fortuna en traer jugadores. Trajo a Corbatta, a Sanfilippo, a Del Vecchio. Grandes jugadores, pero el equipo no andaba. Cuando debuté tuve la suerte de romperla, realmente. Al instante me gané a “la doce”. Le ganamos 3 a 0 a Vélez con tres goles del “Loco” Corbatta y dos jugadas impresionantes mías, el otro gol lo hizo de penal. Sólo los que jugamos en Boca sabemos qué se siente al salir del túnel; te parece que la cancha se te viene encima. Además en la época en que jugaba yo, el vestuario local estaba debajo de donde va “la doce”. Uy! Dios, cómo se movía todo. Como dicen ahora, no tiembla, late.
Krispados 9
De botineras, ventaja a los rivales y el Diego
Las botineras siempre existieron. No las llamaban con ese nombre pero que estaban, estaban. La otra diferencia es que ahora hay diez cámaras para escracharte. Antes nos íbamos a la Costanera y si tenías mala suerte un fotógrafo te mandaba al frente, no más que eso. A mí como a cualquier muchacho me tiraba la joda. En ese sentido igual que Maradona le di ventaja a mis rivales, pero ojo yo nunca consumí drogas, y con esto no lo estoy juzgando a Diego que lo quiero un montón. La joda es la joda y si te faltan piernas, te fatigás y bueno, ahí le estás dando ventaja a los rivales. Así y todo Diego fue un grande y yo creo, humildemente, que también. No quiero imaginarme si no le hubiéramos dado esa ventaja, lo que hubiésemos sido. Hay que saber que nosotros hacíamos un solo turno de entrenamiento. Hoy hay jugadores que juegan por el estado físico y nada más, porque los ves jugar y es imposible que estén en Primera. Cambió todo, qué le vas a hacer. Carecemos de potrero, de la libertad que teníamos los pibes para crear. Ahora parecen fabricados en un laboratorio, no se les cae una idea. Ojo, siempre hay excepciones. Los hacen jugar en canchitas de papi fútbol, cuando van a jugar a una cancha de once no entienden nada.
10 Krispados
Sigue yendo a La Bombonera a ver a su Boca; y a cada partido se repite el amor de la gente, los autógrafos, los abrazos y hasta hay quién dice ¡Volvé Rojitas! Que es como decir: volvé poesía, volvé fútbol, volvé cinturita, ahí, a la Bombonera, ahí donde como en una película sin fin seguirás haciendo la tuya, es decir, la belleza.-
Lanzamiento de la Cátedra Abierta del Pensamiento
Argentino y Latinoamericano Néstor Kirchner
Se realizó el pasado 5 de julio, en la sede de la UNDAV, la primera Jornada de la Cátedra, en la que participaron el Director del IPAL y Coordinador de la Cátedra, Dr. Pablo Vera; el Rector de la Universidad Nacional de Avellaneda Ing. JorgeCalzoni; el Intendente de Avellaneda Ing. Jorge Ferraresi; el Senador provincial Eduardo “Cholo” Ancona y el Diputado Nacional y Presidente del Bloque de Diputados del FPV, Agustín Rossi. Con más de trescientos inscriptos y un auditorio colmado, escucharon con atención las palabras de los disertantes y el discurso de cierre del Diputado Agustín Rossi. Los encuentros se extenderán hasta noviembre de 2012, con la participación entre otros de: Hernán Brienza, Eric Calcagno, Guillermo Moreno y Luis D’ Elía.
INFORMES E INSCRIPCIÓN: catedrank.avellaneda@gmail.com Av. Mitre 976- Avellaneda Teléfono: 4201-1647 HORARIO de 14 a18hs
Lic. María Alejandra Pérez Responsable Académica
Dr. Pablo Vera Coordinador
El odio viaja en primera clase Por Pablo Mattesz
pablomatt2000@yahoo.com.ar
¿Qué es el odio? Antipatía y aversión hacia alguna cosa o persona cuyo mal se desea, dice la definición del Diccionario de la Real Academia Española. ¿Aversión? Oposición y repugnancia que se tiene a una cosa o persona, utilizando la misma fuente. .......................................................................................................... Bob Esponja · Hace 1 hora 10 minutos Esta BASURA y VAGO de Mínimo Kirchner nos costó a los argentinos u$s 82.000 Dólares el transporte del Tango 01 ida y vuelta y el helicóptero H 01 para que la Kretina se trasladara a ver a su “Hijito” hasta el Hospital Austral nos costó u$s 8.000 Dólares. CACEROLAZO NACIONAL 20/06 a partir de las... .......................................................................................................... En el imaginario tren de la historia argentina, el odio siempre ha viajado en primera clase. Primero el visceral odio del despojo a los pueblos originarios en la absurdamente mentada Campaña del Desierto, esa vergonzosa matanza seguida de repartija de las tierras más fértiles y generosas del país en escritorios siempre bien regados en todos los malos sentidos, gracias al cual hoy pasean sus culos protestones en cuatro por cuatro y ponen el grito en el cielo si deben pagar algo más de impuesto a la propiedad los latifundistas más poderosos del continente; después el tan civilizado odio al gaucho, sobre el cual abunda la excelentemente escrita violencia explícita de Sarmiento (al menos antes tenían calidad, inteligencia y hasta belleza en la expresión los voceros del odio; hoy ni eso); luego al inmigrante con ideas anarquistas y socialistas le echaron encima ese falso sentimiento nacional armado hasta los dientes, perros rabiosos ungidos en Liga Patriótica que regaron con sangre obrera la urbana Semana Trágica o los levantamientos patagónicos, tan magistralmente investigados y narrados por ese dignísimo historiador y escritor, argentino de verdad, don Osvaldo Bayer; y, finalmente, el hecho maldito de cabecera de la primera clase vernácula: el peronismo. Bajo cualquiera de sus formas: resistentes, gremialistas, militantes, jóvenes, movimientos sociales, kirchnerismo. .......................................................................................................... Juan · Hace 6 horas No te preocupes, ya está facturada a la orden del pueblo, incluso los del club del 54,11%... Miguel · Hace 4 horas “54,11%” DE IDIOTAS, no?
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fofi · Hace 3 horas EQUIVOCADO SR. CAPUSSI EL 54% SE LLAMA “ l a g i l a d a “ en donde existen diversas categorías de giles. lo encabeza los “boludos importantes” y la terminan las ratas o ratones con los mismos meritos que los anteriores pero ya casi no existen, se los esta morfando L A I N F L A C I O N ... ......................................................................................................................................
“¿Qué fue eso de darle derechos a los que sólo deben agachar la cabeza y trabajar? ¿Aguinaldo, vacaciones, aportes sociales a esas bestias? ¿Por qué nosotros debemos solventar ese gasto desquiciado? ¿Porque a ese miliquito descarriado y a esa puta se les ocurre? Indignante. Marchemos. Sumemos a todos. Que crean que pertenecen. Que piensen que les devolvemos la libertad. Curas, comunistas, socialistas, radicales, gremialistas arrepentidos, clases media y periodistas, sobre todo periodistas que comuniquen bien, ¿viste? No estos alcahuetes vendidos favorecedores del Régimen. Menos morochos que vengan todos que volteamos al tirano y después… Después sí que van a ver lo que es bueno estos negros de mierda… ¡Viva el cáncer!... Descorchemos que se quedó solo ese milico engreído… Ya está: ahora cae… Bombardearon la Plaza con toda la lacra adentro. Mirá todos esos fiambres negros: morcillas parecen. Bien hecho. Ya cae… Ahora hay que perseguirlos a todos. Que ni nombrarlo puedan. Tirano prófugo… Y el cadáver de ella que desaparezca, a ver si estos grasas le hacen un altar y la veneran todo el tiempo… A la mierda con la Fundación… Palos a todos, carajo: eso hace falta”… ........................................................................................... PABLO · Hace 4 horas ....””””EL LECHON VAGO PUTANIERO Y COCAINOMANO TENDRIA QUE EMPEZAR A DEVOLVER LAS 8O LUCAS VERDES QUE NOS COSTO A LOS ARGENTINOS SU TRASLADO”””””........ Oscar · Hace 3 horas JAJA!!!!.....A VEEERR!!!!!...AHORA LE TOCA A “LA BOBITA”...QUE LE VA A PASAR????????????????? ........................................................................................... Y lo hicieron, ¿eh? Vaya si lo hicieron. Utilizando a modo de profiláctico al siempre dispuesto brazo armado de la patria. Ellos nunca se mancharon las manos, pero siempre fueron los que verdaderamente dieron las órdenes. A aquel feroz bombardeo le siguieron las torturas en los sótanos del Congreso Nacional, una vez instalada la cínicamente llamada Revolución Libertadora (a propósito, ¿a cuál libertad aludiría; a esa que sigue hoy reclamando el periodismo independiente?). Los fusilamientos relacionados con el levantamiento de junio de 1956 que encabezara el general Valle, fuera de toda ley marcial o la que fuere, y sobre los que ese gigante llamado Rodolfo Walsh echara luz con su coraje sin fin y una pluma maestra. La persecución permanente y la proscripción en cuanto acto eleccionario se llevó a cabo en el país hasta 1973. Y de ahí en adelante, con la ayuda de traidores de dentro y sicarios de fuera, la cacería mayor: primero la Triple A, una fuerza parapolicial que actuó con la impunidad y el beneplácito de un gobierno que se llamaba pero que en realidad era una mueca peronista. Luego, ¿podía pasarle algo peor a este pueblo? Sí. 1976 inauguró la más sangrienta, pérfida y abyecta de las dictaduras, con lo peor de las pasadas y el más macabro de los inventos: la figura del desaparecido. Ni un lugar donde llorar a nuestros muertos nos dejaron.
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........................................................................................... Carlos · Hace 1 hora 40 minutos EL GORDO CABEZA DE CHANCHO SE VINO HACER EL CINTURON GÁSTRICO. LADRON ........................................................................................... La democracia incineró rápidamente las ilusiones. Parecían al comienzo soplar vientos de justicia y las cabezas del genocidio fueron sentadas en el banquillo de los acusados. Pero todo quedó allí. La economía siguió siendo un oprobio para los pobres y una buena oportunidad para el poder de costumbre, ése que sólo otorga don Dinero. La primavera democrática fue eso: una primavera, un lapso breve, un respiro luego de tanta noche. Otra vez dieron un paso al frente los mismos de siempre, aprovecharon la ineptitud del gobierno de turno y dieron ahora un golpe de mercado. Locura, saqueos, represión. Fin del alfonsinismo e irrupción de un caudillo cuyos atavíos también daban peronismo. La impostura duró muy poco otra vez. Traición de alta gama, desfile de miserias, maquillaje para disimular lo indisimulable. Indulto. Cavallo. Convertibilidad. Farándula. Pizza con champán. Desocupación. Resistencia. Alianza con la gente (todavía no habíamos recuperado el vocablo pueblo; quedaba mal) y dos años de lo mismo o peor. Empobrecimiento, endeudamiento, Cavallo de nuevo (ese que ahora también es opinólogo anti K) descuentos a jubilados, corralito, represión y muerte. Cinco presidentes en diez días. Duhalde. Regreso de muertos vivos. Un político sospechado de haber sido impulsado a la política por la Triple A allá por los setenta, cómplice del despojo en los noventa y gobernador de nuestra provincia con una caja fastuosa de la que no se preocupaba Clarín. Como premio al silencio de tantos años pesificación asimétrica para los amigos y que la gilada (la verdadera gilada) pague. Represión. Puente Pueyrredón. Asesinatos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. Sangre humilde otra vez para poder abandonar la pesadilla. ........................................................................................... DiegoC · Hace 2 horas 16 minutos Me encantan los comentarios pero.. donde están los Cristinistas y/o Camporistas de siempre que nos tratan de golpistas ?? se cansaron de justificar lo injustificable ?? espero que no nos tilden de agentes del Grupo Clarín o algo así... Denle che ! comenten algo a favor del gordo, nosotros aceptamos... ........................................................................................... 2003 puso a Néstor Kirchner en la Casa Rosada, quien afirmó al asumir no dejar los principios en su puerta. Parece que el poder, por una vez en más de sesenta años, se distrajo. Y le costó caro. El detalle de lo que viene ocurriendo desde entonces lo hemos expresado largamente en nuestras páginas. Tal vez la prueba más elocuente sean esos miles que desfilaron ante su féretro tan prematuramente dispuesto, diciendo: “nos devolvió la dignidad”. Se tiró de cabeza sobre la gente, física y metafóricamente. Supo del odio de los otros (volvieron a descorchar en barrio Norte la noche de su muerte)
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pero no le importó. Hizo (es) Historia. No una anécdota: Historia. Dio (nos dio) todo. Dijo Pablo Neruda, “Tengo un pacto de sangre con mi pueblo”. El nuestro está sellado. Con él (cómo les jode que Ella diga Él, por favor) y con su compañera y la nuestra, Cristina, la Presidenta que el 54 % (más de once millones de ciudadanos como vos, estimado cacerolero de Cecilia Pando y Jorge Lanata; quién diría, el diablo los cría y la miseria los amontona) revalidamos en las urnas para profundizar el modelo. Así que malas noticias, che: Vamos por más. Y por lo que vemos en el horizonte político, hacen bien en preocuparse, muchachos. Parece que van a tener que seguir dándole a la tablet y a la Essen a lo loco. Pero son pocos, no tienen onda; y desafinan tanto… A lo mejor tendrían que tomar algunas lecciones con nuestros pibes. Ellos sí que saben de batucadas. Suele decirse, y con toda razón, que resulta admirable el pacífico reclamo de justicia por sus muertos de todos los organismos de defensa de los derechos humanos. Tolerar durante décadas que los verdugos de tu hijo, tu hermano, tu madre paseen tranquilamente por las calles de tu país mientras la Justicia mira para otro lado es conmovedor. Otro tanto ocurre con la Presidenta y su entorno, quienes jamás responden a los agravios permanentes de los que son víctimas. Las cosas que también pacíficamente escuchan y sufren a diario los hombres y mujeres humildes, pobres, morochos y mayoritariamente peronistas desde hace muchas décadas en nuestro país, justifica también el reconocimiento de todos (los bien nacidos, al menos). Ahora que un poco, sólo un poco de lo muchísimo que merece ese sector eternamente postergado llega a sus manos, encerremos en su vagón de primera clase al odio con sus acólitos y que el buen viaje continúe.
Nota del Redactor: los textos interlineados entre los párrafos de esta columna de opinión, pertenecen a algunos comentarios vía mail que lectores del diario La Nación en el servidor Yahoo enviaron con motivo de la internación del hijo de la Presidenta, Máximo Kirchner. Estos se publican con los errores de origen.
La militante del puño crispado Por Pablo Dipierri pablodipierri@gmail.com
La memoria resbala en el bronce. Con el cabello suelto al viento en una fotografía o el puño crispado en un manual de Historia, la academia congela la figura de la militante María Eva Duarte de Perón en un relato que combina ecuaciones metafísicas y fuentes de rigor conspicuo pero escasa raigambre social. Así, el recuerdo de la abanderada de los humildes admite una clausura provisoria para el consumo sintético en fascículos impresos con testimonios que se convirtieron en eslogan. Sin embargo, la potencia de sus acciones fisura esos relatos de papel que terminan envolviendo los huevos en las verdulerías. Porque los héroes son de carne y hueso. Y las cuñas que calan en el pueblo no son de carambola. Mecida sobre un coraje sin garantías, “Evita” abrió un tajo sin sutura en las curvas del destino. Las disquisiciones sobre la posibilidad de que el peronismo hubiera sido igual sin ella o que ella no hubiera pasado a la inmortalidad si no fuera por el propio Juan Domingo Perón revisten tanta esterilidad como resentimiento y, mal que les pese a los analistas, demuestran que sumergirse en cavilaciones para determinar si la liturgia es causa o consecuencia constituyen una dimensión ociosa frecuentada por intelectuales con una epidermis impermeable a los sentimientos. Con el mismo rencor que los jerarcas sindicales agravian hoy a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, abundaron los dirigentes gremiales que minimizaron las arengas que propinara “la esposa de Perón” la noche previa al 17 de octubre de
1945, como si el movimiento se bastara a sí mismo sin mística ni líderes que toquen las fibras más íntimas de los que batallan. Bajo esa perspectiva, nunca faltaron las críticas de revolucionarios atildados que la consideraron reaccionaria por aplazar la huelga que promovían los obreros ferroviarios en 1951, porque el dogmatismo los enceguecía y les impedía advertir las acechanzas en ciernes de una derecha que no perdonaría. Odiada y vilipendiada desde el principio por los que entendieron que esa mujer investía la revancha de los postergados que pugnaban por la justicia social, empeñó su cuerpo en una causa que identificó, tempranamente, como la lucha por liberar a la Patria de la opresión. Amada y santificada por los descamisados que leían en su mirada fulminante contra la oligarquía la reivindicación de una clase que había permanecido en la ignominia, subvirtió las reglas del juego y transformó las condiciones del país que la parió. Nació el 7 de mayo de 1919, mientras el caudillo Hipólito Yrigoyen presidía la Nación combinando su tibieza para la organización de los comités con la represión a los trabajadores de la basura en la Capital Federal o el fusilamiento de los peones rurales de la Patagonia. Consumida por el fuego que ardía dentro suyo en cada trifulca contra la desigualdad, falleció el 26 de julio de 1952, dejando a los argentinos una herencia tan frondosa que su legado no se subordina a las biografías de yemas delicadas y letra yerma. Había prometido que volvería y sería millones. Hoy su cara resplandece en las pancartas, pero su rebeldía bulle en la militancia y reverbera en la Casa Rosada.
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Entrevista a AGUSTÍN ROSSI Presidente del Bloque de Diputados del FPV
Nosotros éramos los locos Addams y ellos la familia Ingalls Nota: JORGE SAMONTAlestonsamonta@gmail.com
LA TABERNA DE LA DIGNIDAD: En la plenitud de la beligerancia con los sectores del campo, a mi hermano y a mí se nos ocurre ir a comer al restaurante “La Taberna” que queda acá a la vuelta del Congreso. Los ruralistas habían estado con algunos sectores de izquierda en el Monumento a los Españoles, pero después a un grupo de unas quince personas se les dio por ir a comer al mismo lugar que entramos con mi hermano. Cuando nos sentamos empezaron a silbarnos, a abuchearnos. Lo llaman al dueño del restaurante y le dicen señalándonos “si no se van ellos, nos vamos nosotros”. Una chica jovencita con el novio en voz alta decía “qué hacen ellos acá (refiriéndose a nosotros) si esto es un lugar público”. (SIC) El gallego que era el dueño, con seriedad les contestó a los ruralistas que “vivimos en democracia, todos pueden estar aquí; si a ustedes no les gusta se pueden ir”. Y se levantaron los quince tipos y se fueron. 16 Krispados
Fotos: MARÍA CRISTINA TUCCI.mcristinatucci@yahoo.com.ar
Empecé a militar cuando tenía doce años. Me encontré con el libro Mi amigo el Che de Ricardo Rojo en donde cuenta sus primeros viajes, sus aventuras, etc. Mi padre murió cuando yo era muy chico, pero tuve un tío que, si bien no era peronista, me pasaba libros. Recuerdo el de Félix Luna De Perón a Lanusse. Ahí empecé a involucrarme. En mi casa estaba toda la obra de José María Rosas, algunos de Rodolfo Puigróss, así me fui formando. Yo vivía en Vera, Provincia de Santa Fe, que queda a 250 kilómetros de la capital de la provincia; la militancia en el pueblo era muy liviana a pesar de que corría el año 1972. En segundo año de la secundaria empiezo a militar en la U.E.S.; una de las acciones que hicimos en ese momento fue cambiarle el nombre a la avenida principal que se llamaba John Fitzgerald Kennedy y le pusimos Chacho Peñaloza. Después viene la dictadura, me voy a Rosario e ingreso a la facultad. En 1980 empiezo a militar. Lo hago en torno a la revista Línea que era una de las pocas que tenían algo de visibilidad. En el caso de mi familia tanto mi madre, que era cuñada del fiscal Ricardo Molinas, y mi padre, que era abogado, ávido lector y con algunos libros publicados, no eran peronistas; pero tampoco antiperonistas. Los libros del pensamiento nacional que encontré en la biblioteca de mi padre más responden a su curiosidad de conocer que a una toma de posición ideológica. Tuve distintos trabajos: en una empresa constructora, mi mamá había quedado cesante y en mi casa había necesidades. Para no abandonar la militancia empecé a preparar alumnos, lo cual me proporcionaba un ingreso económico y un horario más elástico para militar. Lo hice hasta 1984-1985. Fui luego, por breve tiempo, asesor de Carignano en la Cámara de Diputados, y después concejal en Rosario. Ahí abandoné mi carrera universitaria; la que luego finalicé en 1993. Retomando, en 1984 nos vamos de la agrupación e intentamos construir otra con el resto de los jóvenes peronistas que había en Rosario. Tratamos de reconstruir la J.U.P
(Juventud Universitaria Peronista); no sólo se militaba en la facultad, también se intentaba construir en los barrios. Nos vinculamos con la Juventud Peronista Renovadora y con la Renovación propiamente dicha. En ese momento había dos referencias peronistas unificadas a nivel nacional, una con El Canca (Dante Gullo), Unamuno, Bullrich, y otra más vinculada al grossismo en donde estaba Jorge Argüello, Eduardo Valdez. Nosotros tratábamos de articular con las dos expresiones juveniles. El proceso de la Renovación en Rosario lo encabeza Raúl Carignano. Se pierde la elección interna con Vernet que representaba al peronismo ortodoxo. Si bien en la provincia se pierde, se gana en Rosario. En 1985 encabecé la lista de concejales de esa ciudad.
LA 125:
Fueron días difíciles. Se habían generado fuertes rechazos y agresiones hacia el Gobierno Nacional por parte de algunos sectores de la sociedad, alimentados mediáticamente por los grupos concentrados que hoy conoce el ciudadano mejor que en esa época. En lo personal me complicó familiarmente, porque la verdad es que fueron dos veces a mi casa. Estaban mis hijos menores de nueve y siete años respectivamente. Yo no dejé nunca de ir a Rosario, a estar con mi familia a la cual le habían afectado la cotidianeidad, y aún así tenía que fortalecerme para poder enfrentarlos. Fueron cuatro meses desde abril a julio de 2008 de un trabajo intenso, sin solución de continuidad, y de una virulencia de parte de los sectores patronales del campo que había que tener espaldas para soportar. Fue muy complicado. Los medios le hicieron creer a la sociedad que nosotros éramos Los Locos Addams y que ellos, la Sociedad Rural y sus aliados, La Familia Ingalls. El poder institucional y legítimo del Gobierno Nacional estaba para ese discurso a la misma altura del poder instituido por las corporaciones mediáticas y patronales del campo.
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El voto de Cobos creo que no sorprendió a nadie, porque cuando Cristina envía al Parlamento la Resolución 125, inmediatamente Cobos propone, con el apoyo de los gobernadores opositores, un proyecto alternativo que era el de la Mesa de Enlace. No hay que olvidar que había entre dieciséis y dieciocho diputados que siempre votaban con nosotros y en esa oportunidad lo hicieron en contra. El conflicto conmigo, en particular, continúa en 2009 porque salgo a recorrer Santa Fe como candidato y se reavivan las agresiones. Una vez en Laguna Paiva, otra vez en Reconquista y otra en Venado Tuerto. A pesar del alto componente rentístico que tiene la actividad agropecuaria, al ser sectores tan conservadores reaccionan ante la simbología sin que por esto sus ganancias se vean afectadas. Son sectores históricamente refractarios al peronismo. El conflicto de 2008, más que los reclamos de un sector, fue el acuerdo de una coalición para tratar de arrebatarle la agenda a la Presidenta y que la agenda fuese la de ellos. A partir del discurso de Cristina en abril de 2008 en Plaza de Mayo se visibilizó a los medios destituyentes como no había ocurrido antes de la 125. A partir de esos hechos se empieza a dar la participación juvenil, en un principio muy atenuada, enfrentando a una derecha corporativa con “legitimidad social”. Muchos nos achacan que comunicábamos mal, se equivocan, no había forma de romper ese cerco mediático, no había forma de comunicar. Néstor decía: “entramos al debate perdiendo 60 a 0”. Se había desvirtuado todo. Muchas veces los propios afectados por la no distribución ecuánime de la renta, eran los más acérrimos defensores de los señores feudales. Se fue revirtiendo ese escenario cuando la crisis mundial de 2009 impacta tenuemente en Argentina. La nacionalización de las AFJP permite al Estado ponerse en el centro del dispositivo económico. Se alientan niveles de consumo importantes. Ya a finales de ese año comienza la reactivación económica que se da con más fuerza en 2010, permitiendo un crecimiento casi inédito. La otra gran decisión fue instalar el debate de La Ley de Medios. Se interpeló en distintos ámbitos a aquellos que construían el 90 % de la opinión pública. En ese marco corrimos al multimedio del lugar que tenía de la verdad absoluta. Clarín pierde más con lo que perdió de credibilidad que con la propia sanción efectiva de la Ley. Por ejemplo, el enojo con 6-7-8 es haberlos interpelado, desenmascarado. También la aparición de Fútbol para Todos generó otro triunfo de la democracia, porque antes Clarín no perdía ninguna batalla. Perdieron un negocio de millones de dólares. En ese tiempo también se nacionaliza Aerolíneas Argentinas. Se promulga la Ley de Asignación Universal por Hijo, una de las medidas más progresistas de la historia. La A.U.H. se puede hacer después de la estatización de las AFJP, porque parte de esa rentabilidad va a implementar y sostener esta Asignación.
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UN HOMBRE LLAMADO NÉSTOR KIRCHNER: Conocía a Néstor y a las experiencias del Grupo Calafate por referencias. En 2002, yo había vuelto a ser Concejal en Rosario y hacemos una reunión con la agrupación pequeña que teníamos en ese entonces, tomando la decisión de tratar de vincularnos con Néstor para empezar a trabajar con él. A través del flaco Kunkel y Jorge Argüello, conseguimos una reunión en la Casa de Santa Cruz y ahí empezamos. Llevamos adelante en Rosario la elección de 2003, de la que no salimos beneficiados en términos electorales, pero sí fortalecidos en términos de construcción. Mantuve relaciones con viejos amigos: Kunkel, Gullo, Bielsa que estaba en la Cancillería. En 2005 me preparaba para ser reelecto como candidato a Concejal. Para mi sorpresa me ofrecen encabezar la lista de diputados en Santa Fe. Cuando me lo proponen tardé como dos segundos y medio en decir que sí. Hicimos un acto en Newell’s en donde habló Cristina y yo. Bueno, después terminé como Presidente del Bloque.
En cuanto a Néstor, lo que más te impactaba era su simpleza, un tipo que prontamente lograba acortar distancias. Néstor hablaba de 2003, pero si no llegábamos, la meta segura era 2007. Decía: “yo me estoy militando todo, yendo pueblito por pueblito”. También en Santa Fe hizo un acto importante en la Universidad Tecnológica. Él nos contagiaba sus ganas, era imposible no sentir lo mismo que él. De los cinco candidatos presidenciales, el único que hablaba desde un paradigma distinto era Néstor. Hablaba de revalorizar el papel del Estado, del mercado interno, del consumo, de trabajadores con salario digno. La última semana de la elección presidencial los medios querían instalar a López Murphi como el adversario de Menem en el ballotage. Creo que en ese momento dudé de los resultados; no hay que olvidar que Néstor sacó 22% y López Murphi 18 %. Cuando Kirchner asume el 25 de mayo de 2003 y escucho su discurso, tuve la certeza de que era un discurso fundacional. (Rossi va hasta el escritorio de su despacho y toma el discurso de Néstor, al que había resaltado en varios párrafos)
Fíjense que Néstor habla de superávit fiscal, balanza comercial positiva, desendeudamiento y agrega “pertenezco a una generación diezmada”, “no dejaré mis principios en la puerta de la Casa Rosada”. Habla del mercado interno, del consumo; habla de las corporaciones. Hace referencia a los medios de comunicación, específicamente, sin nombrarla, se refiere al editorial de Escribano del diario La Nación. Una de las cosas que siempre cuenta Cristina es que Escribano en esa nota solicita que Kirchner eche al asesor que le escribió ese espantoso discurso. Bueno, el asesor del espantoso discurso no era otra que Cristina. Néstor y Cristina han hecho una enorme demostración de cómo hay que conducir en política en la adversidad. ¿A quién se le podía ocurrir que
después de perder las elecciones de 2009 se sancionaría la Ley de Medios? Y Néstor, después de la derrota, en horas de charla me decía: “vamos por todo y pensando en 2011”. Siempre con una mirada positiva del escenario que se presentase. La imagen de Cristina se potencia al tener que superar las adversidades políticas y las personales, con la pérdida de su compañero. Nunca ninguno de los dos se desvío del paradigma propuesto, ninguno se salió de la coherencia ideológica con la que se diseño el Proyecto Nacional. Como decía Néstor: “es la Presidenta Coraje”. La Presidenta, además, tiene una capacidad analítica y de comunicación pocas veces vista. Cuando el pueblo va a despedir a Néstor, una de las consignas era “Gracias Néstor, fuerza Cristina”, es decir, el pueblo no quería quedar huérfano de líder; y Cristina asumió ese rol de líder única e indiscutida para su pueblo.
LO QUE FALTA:
Al decir de Kirchner “queremos formar parte de una generación que vuelva a lograr la movilidad ascendente en la Argentina”. Me parece que eso es una construcción permanente, por más que hayamos logrado mejorar las condiciones del pueblo trabajador. Estamos en las puertas de que Argentina tenga un desarrollo autónomo, con todas las medidas que estamos tomando: la modificación de la Carta Orgánica del Banco Central, la nacionalización de Y.P.F. Lograr un mayor valor agregado a nuestra producción. Me parece que todo eso es el desafío de los próximos años. Es un mundo que hay que estar mirándolo mucho. La eurozona en el primer trimestre creció 0%, no hubo crecimiento. Obama invierte para el consumo interno, le aumentan la gasolina y se llevan toda la inversión. A pesar de todo lo que pasó los organismos financieros internacionales siguen siendo discrecionales. Es un desafío en donde Argentina está bien posicionada y con excelentes perspectivas de crecimiento. Tenemos que lograr el máximo acompañamiento en la Región. Trabajamos y militamos para eso.-
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El misterio europeo Por:Xavier Dupret Economista belga
¿Ya vieron esa película en Argentina? ¿Por qué aceptan los pueblos de Europa, mientras que la economía de la eurozona funciona a una marcha lenta, asistir a la ejecución de ajustes que destruyen el crecimiento y desaniman el consumo popular? Los gobiernos, por razones electorales, se muestran muy lacónicos. La oligarquía financiera europea, en cambios, es más explícita: Oscar Bernal, economista jefe del Ing Belgium reconoció que “haber agravado los déficit y la deuda durante la crisis (...) era indispensable para evitar una depresión. Pero está claro que ahora un poco más de rigor es indispensable (…) para reconstituir los márgenes de maniobra”. Evidentemente, los banqueros europeos anticipan nuevos sobresaltos para los que necesitarán ayudas públicas.
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Cuando los Estados entraron en el capital de los bancos en Europa, lo hicieron endeudándose. Pero, ¿qué adquirieron a cambio? Balances rellenados por títulos tóxicos que ya no valían nada pero que fueron vendidos por su precio original. El Estado fue usado como basura por la oligarquía financiera y, por eso, en lugar de traer plata a los estados “inversores”, los bancos adquiridos de esa forma siguen costando dinero. Este esquema es válido para describir las raíces de la crisis en la parte industrializada del continente europeo, aunque no es suficiente para explicar la deriva alarmante de Portugal, de Grecia o de España. El euro es una moneda fuerte cuyo curso está dado por el poderoso Deutsche Mark. La entrada “gloriosa” en la zona euro significó oportunidades de endeudamiento para los países mediterráneos. Y les venía bien, porque desde la creación del euro, la parte meridional del continente tenia un déficit comercial crónico con las naciones industrializadas del norte. Cuando los gobiernos del centro industrial de Europa tuvieron que ayudar a “sus” bancos, la canilla del crédito fue directamente cortada y allí arrancaron entonces los problemas para la “periferia” europea. En conclusión, las soluciones para la zona euro tienen fundamentalmente que ver con un proyecto político renovado. Se necesitan límites a la dominación de las oligarquías sobre las clases populares y al librecambio que destruye las capacidades productivas de
las naciones periféricas. Todavía, nadie, adentro del ámbito político europeo del poder, llegó a esta conclusión. Ojala que sea sólo una cuestión de tiempo para que colmemos nuestro retraso comparado con el escenario político suramericano. Mientras, la crisis europea sigue...
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Aportes al debate: Movimiento, Democracia y Poder Por: Carlos “Pocho” Baraldini carlosbaraldini@hotmail.com Hoy suele pasar que muchos jóvenes interpretan que el Movimiento Nacional y Popular, que tiene en su centro al Peronismo con todos sus sectores, puede caer en viejas contradicciones e incluso en la violencia que nos envolvió en los `70. Para ello hacen lecturas erradas sobre la corriente que lidera H. Moyano y su CGT, el gobernador Scioli y su escaso compromiso con la filosofía de este proyecto, algunas gobernaciones provinciales y sus partidos justicialistas traspasados con viejos intereses feudales y religiosos y otras expresiones que, no solo demuestran la gran amplitud del Movimiento y sus alternativas siempre vivas en el debate democrático y popular, sino también la posibilidad de expresarse en el campo de las ideas y la disputa del poder que corresponde. Se verifica entonces, que no hay discurso único. Cabe rescatar a A. Gramsci (1891-1937) para quien el problema de la democracia tenía un valor especial, porque era constitutivo de la idea de socialismo, ya que no puede haber socialismo sin autogobierno de las masas, pero también porque era el único terreno en que se podía derrotar la hegemonía de la burguesía con la vigencia de la representación parlamentaria. Para este pensador italiano el gran problema estratégico no era cómo llegar al poder, sino más bien, cómo son aceptados por el conjunto de las clases sociales subalternas y no como un gobierno inevitable que hay que aguantar, sino como los nuevos dirigentes de la sociedad. Pensemos cuántos meses pasaron de la asunción de Cristina y el intento de destitución por los gordos del campo. La no aceptación de esta burguesía agraria tenía un objetivo destituyente. Ya Cooke en carta a Perón le aclaraba que la consigna “la columna vertebral del Movimiento son las organizaciones obreras” era de difícil cumplimiento, pues ningún dirigente de la burguesía agraria, industrial o financiera iba a acatar a un dirigente obrero. Hoy el debate es aislar a esa burguesía de los otros sectores, desbloquear a los pequeños productores y ganar a los sectores medios, de ninguna otra forma que con políticas específicas en todos los campos. Gramsci es el primer pensador de la izquierda que se plantea el problema del consenso, cómo ganar a las capas medias, a la dirección del proletariado y al campesinado. Porque es el primero que plantea que transformar la sociedad capitalista no significa planificar la producción o quitarle los medios de producción a la burguesía y concentrarlos en el Estado; el modo más eficaz de esta transformación social es el consenso y la política no debe estar en manos de determinados depositarios que ejercían el poder, la política debía ser universalizada.
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Estos son los rasgos que lo diferencian del leninismo y de la suerte que tuvo ese socialismo de estado que dominó medio mundo. Fue el principal impulsor de los consejos obreros en Turín, donde la industria concentraba miles de obreros a los que había que ganar desde la política, con el desafío de ganar también al campesinado pobre y obreros rurales del sur de Italia. “El ejercicio normal de la hegemonía en el terreno, ya clásico del régimen parlamentario se caracteriza por la combinación de la fuerza y el consenso que se equilibran en formas variadas, sin que la fuerza rebase demasiado al consenso, o mejor tratando de obtener que la fuerza aparezca apoyada sobre el consenso de la mayoría que se expresa a través de los órganos de opinión pública -periódicos y asociaciones-…”1 Hoy debemos rescatar ese concepto gramsciano de hegemonía, como un proceso de alianza, de nexo, buscando un bloque histórico, donde la clase obrera se convierta en una clase nacional. Perón nos repetía que la clase obrera era la columna vertebral del Movimiento y el bloque histórico lo conformó en el 46, en el 52 y en el 73. El Movimiento peronista supo liderar ese bloque y supo liderar vastos sectores sociales en momentos cruciales de la historia. Ahora mismo lo está haciendo con Cristina, no exento de desafíos y errores. Esto demuestra que la política está en el centro vital de la democracia que vivimos. No se trata de pensar que la política es un instrumento o un medio para un determinado fin, sino que es el proceso mediante el cual se constituye el sujeto como hombre libre. Acordando con Gramsci quien -a diferencia de Lenin- es un hombre que se nutre de la cultura popular consideramos que 1. Notas sobre Maquiavelo. Antonio Gramsci. Nueva Visión. 2003. Buenos Aires, Pág. 125
Diario La Opinión: 27 de junio de 1973: “Estructura partidaria y liderazgo de Perón”
hoy debemos acentuar que no es necesaria, para este proceso de transformación, una vanguardia ilustrada o identificar quién es la vanguardia. Son ejes perimidos en la construcción de un Movimiento que busca el consenso y la transformación de la realidad. Algunos se pueden preguntar ¿es la juventud sindical o la Cámpora la vanguardia de este proceso? Ese planteo es falso y no sirve, es una burrada. ¿Cuántas CGT necesita el bloque histórico para avanzar? Tampoco ayuda este planteo meramente cuantitativo. Y si vamos a números, entre las 5 CGT no tienen la afiliación de la mayoría de los trabajadores, ¿de qué representación hablan? Y el que difiere en metas u objetivos ¿es un traidor? Tampoco sirve de mucho hasta dejar que avance el proyecto nacional y popular. ¿Cuántos votos ciudadanos tiene el dirigente sindical de turno? Eso es lo que cuenta: el consenso, la construcción del bloque y que sea reconocido por el resto de los sectores sociales. Un reconocimiento político y no sectorial. “Todo en su medida y armoniosamente”, “¿El tiempo o la sangre?” nos repetía el General. Tampoco nos sirve esa tradición heredada del marxismo mecanicista sobre el “derrumbe natural del capitalismo”. Tampoco Gramsci lo creyó, como también resistió la idea del centralismo burocrático, el autoritarismo y las deformaciones de un partido único que apostaba a la eliminación de la burguesía como clase social. Para él lo fundamental es la socialización, es decir el proceso de formación del conjunto de hábitos en el hombre colectivo, ya que era conciente de la historia de los cristianos primitivos que se multiplicaron sobre la base de su militancia, ejemplo y palabra. Por ello hay que remover ese lastre conceptual cuanto antes e iniciar una profunda intensificación de la democracia participativa en todos los ámbitos, utilizando categorías y conceptos que hemos heredado de las luchas nacionales y latinoamericanas.
No tenemos otra herramienta que la política para cambiar la realidad que nos duele, que lastima, como esa proporción todavía alta de pobreza e indigencia, como ese número terrorífico de miles de jóvenes que no trabajan ni estudian, como los más de 3 millones de trabajadores en negro y otros miles de cooperativistas que tiene ingresos debajo del mínimo vital y móvil.
Esa realidad que conocemos gracias a la militancia es la que nos anima a no perder el rumbo y seguir apostando a la política, al compromiso diario. Este cuadro descriptivo del Movimiento que se publica en junio de 1973, con un auge de movilización de masas y de militancia en centenares de organizaciones, hoy es un desafío para todos. ¿Cómo fortificar y amplificar el Movimiento en todos los ámbitos? ¿Cómo y con qué herramientas unificar organizaciones populares, sumando? ¿Seremos capaces de no repetir los mismos errores del `73? ¿Podremos articular una relación entre los dirigentes de la base social y los dirigentes del Movimiento? Esto nos lleva a debatir con amplitud el modelo de acumulación de poder, cómo creamos poder en las masas en relación a sus propios intereses. Vamos, les doy un ejemplo que viene de Evita: cuando Carrillo le comentaba a Evita toda su defensa de la Salud Pública, ella le cuestionó con pocas palabras: “no me gusta que la salud dependa de un funcionario público, tiene que depender del pueblo”. Pasaron 60 años y todavía los peronistas no supimos interpretar ese anhelo de Evita, esa construcción social, que cada comunidad pueda administrar sus recursos de salud, empezando por la atención primaria de la salud y no dependa del funcionario de turno, que cobra igual su sueldo si aumenta o baja la mortalidad infantil, eso no lo conmueve.
Esta es la herencia de Evita que no hemos interpretado. Esto es el Movimiento construyendo consenso, democracia y poder en las masas, sin vanguardias, con un Estado transformado, ya sea en el nivel municipal, provincial o nacional. ¿Para que nos sirve un Estado similar a la era privatista del 90? ¿Para que nos sirve una organización carcelaria similar a la de la dictadura? ¿Cómo podemos convivir con una Policía que continúa torturando en comisarías? La construcción de poder se refiere a eso precisamente. No basta con asumir la “gestión” y ser un “buen funcionario” si no transformamos la organización del Estado al servicio de un proyecto de masas, porque el Estado no es un instrumento, es simplemente un sistema de dominación social que se ejerce a través de la reproducción de la sociedad capitalista y del conjunto de instituciones a través de las cuales se universaliza la reproducción social, en lo económico, lo cultural, lo político. ¿Cómo avanzar hacia un ejercicio pleno de la democracia. En los niveles locales, territoriales y específicos de los intereses de las masas, como el ejemplo de la salud ya visto o de la educación o de la seguridad? Tenemos pendientes varias reformas, como la Constitución Nacional y ahora sumamos cómo avanzar con el Movimiento, cómo lograr consensos, cómo debatir políticas públicas y cómo representar efectivamente a los grandes sectores políticos nacionales. Como diría ese gran filósofo del racionalismo, Renato Descartes, “De lo simple a lo complejo”. ¡Vamos por más!
Krispados 23
NÉSTOR QUIJOTE
GENTILEZA MIGUEL REP