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19 DE OCTUBRE DE 2020
Desayuno en Tiffany’s, mon ku
Josep, de Aurel: una película de dibujos sobre la “Retirada republicana” en 1939
Cine
6 Por Carlos Belmonte
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osep es el primer largometraje del dibujante Aurel (historietas Clandestino y La Menuiserie). Una película que habla sobre la historia de la retirada española a Francia en 1939 tras la derrota republicana ante el bando franquista pero que además se vincula con la historia del exilio en México y la acogida del grupo de artistas encabezados por Diego Rivera y Frida Kahlo. Se trata de una “película de dibujos y no de una película de dibujos animados” comentó Aurel durante la proyección en el cine Utopia de Aviñón (Francia) en complicidad con la asociación Contraluz. Se hace esta precisión, porque Josep recuperó los dibujos del catalán Josep Bartolí, un comunista y republicano que tuvo que huir y fue retenido en los campos de concentración al sur de Francia. Ahí pudo, con el apoyo de un gendarme francés, dedicarse a pintar las crónicas de su encierro. Entonces en lugar de hacer que los dibujos se muevan lo que hizo Aurel fue un montaje de dibujos en fijo, aunque para algunas transiciones les dio movimiento marcando los cuadros -como si estuviéramos viendo una película silente de 1920-. Cuando vemos el filme podemos pensar que se trata de un documental hecho con dibujos. No se percibe la distancia entre el creador -director artístico del proyecto como Aurel se define- y el personaje dibujante. Aurel consiguió retomar los trazos del dibujo de Josep para insertar sus propios diseños y crear la ficción. Se pasa entonces de un croquis original de Bartolí a una recreación 80 años más tarde. La sala de Utopia estaba llena con un público sobre todo atraído por una historia más de la guerra civil -acontecimiento por demás sensible en el sur del país galo-, y es normal pensar que la cinta pudiera tener un significado especial para el creador. Pero en este caso no. Aurel no tiene ninguna raíz española, ni es historiador y aprendió español en el liceo, aunque desde entonces por sus viajes a México y a España lo habla mucho mejor. Aurel, que además hace viñetas para periódicos nacionales franceses como Le monde y Le Canard Enchaîné, confiesa que su obra es más un producto artístico que un documento a fines históricos. La película le llegó por el simple gusto del artista Bartolí, porque sus dibujos le parecieron excepcionales. Entonces comenzó, hace 10 años, el proyecto de crear la historia. Pero él quería sobre todo darle sonoridad, ponerle sonido a los dibujos. De ahí que su preocupación haya caído más por el lado de la creación sonora que
/// Aurel, director de la película Josep. Foto de Cineuropa.
por la veracidad histórica. Así, es la voz de la cantante Silvia Pérez Cruz que da música y alma a dos personajes femeninos. Evidentemente no todo es ficción: los campos de concentración, la historia de Bartolí y su posterior exilio están sacados de la biografía del dibujante. Aquí se vincula la historia a México, a donde llega en 1943. Bartolí sueña con conocer a Kahlo y en los momentos de sus sueños Aurel se permite colorear las escenas, pasar de lo monocromo a los cálidos intensos y al azul de la Casa Azul en la Ciudad de México. Esto permite marcar la evolución de la película en dos etapas de la vida de Josep, la primera en Europa y la segunda en América que se nota en los trazos de los dibujos a la pluma, al crayón y marcador y a la paleta de colores. Ya en México, Bartolí se vuelve amante de la artista mexicana y Josep mete las viñetas de su mutua alimentación y el asesinato de Trotski. La travesía de Bartolí terminará en Nueva York como parte de un grupo de artistas entre quienes están Jackson Pollock, Kline y De Kooning. Ahí murió en 1995. Aurel hizo con esta película de 75 minutos “un filme personal en homenaje a otro dibujante”. Josep fue parte de la Selección Oficial del Festival de Cannes 2020 y está actualmente en preselección a los premios de la Academia de los Lumières 2021 y tendrá su salida en cines españoles el próximo 4 de diciembre. Para cines mexicanos difícil de pensarlo, tanto por una historia que es prácticamente desconocida como por el formato aún muy tenido para el público infantil.