Especial Falles Patrimoni de l’Humanitat Nova època. Any VI. número 24. Novembre 2016
Que ja som Patrimoni de la Humanitat
Grans celebracions en les Torres de Serrans este cap de setmana. Plantà i Cremà d'una Falla, Crida a la Humanitat i Festival Piromusical
EXEMPLAR GRATUÏT
V al e
nc i a n en p s: eu alce m-se !
Fotos: Cipriano Fornas©
Novembre 2016
2
Primeras celebraciones el orgullo invade la ciudad La Valencia oficial brindó por el éxito tras cinco años de empeño y tesón
Objetivo cumplido: Las Fallas alcanzan la gloria universal La UNESCO acuerda por unanimidad incorporar las Fallas en la Lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. La decisión fue tomada en Addis Abeba Addis Abeba. Agencia EFE Fotografía: CIPRIANO FORNAS
Adis Abeba, 30 nov (EFE).- Las Fallas de Valencia se convirtieron hoy en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, un reconocimiento global con el que la Unesco quiere proteger los singulares oficios tradicionales de una de las fiestas más internacionales de España El Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio de la Unesco, reunido en Adis Abeba, decidió finalmente incluir las Fallas en su lista de bienes inmateriales al considerarlas una expresión de "creatividad colectiva" que "salvaguarda las artes y oficios tradicionales". Cada año, entre el 14 y el 19 de marzo, los monumentos falleros, creados a partir estructuras internas de madera recubiertas por cartón o corcho, inundan las calles y plazas de las ciudades de la Comunitat Valenciana, con su máxima expresión en la capital, para convertirlas en museos de arte efímero. La Unesco valoró el carácter satírico de los "ninots", las figuras satíricas que dan forma a las Fallas y construyen su mensaje, propiciando "la comunicación y el diálogo entre los ciudadanos". Detrás de estos monumentos, algunos de ellos de decenas de metros de altura, se esconde el trabajo artesanal diario de los artistas locales, un oficio que la Unesco considera como una "necesidad social" que debe ser protegida y conservada. La fiesta culmina el 19 de marzo, cuando el fuego reduce estas esculturas a cenizas como símbolo de la purificación y renovación social para dar la bienvenida a la primavera.
Los desfiles de las bandas de música, los espectáculos pirotécnicos, las ofrendas florales y los eventos culinarios, que se celebran desde meses antes de la semana oficial festiva, también han sido decisivos en la decisión. Según la Unesco, las Fallas, transmitidas en el seno de las familias, refuerzan la cohesión social y favorecen la creatividad colectiva de las comunidades. "Se basan en principios fundamentales como la libertad de participación y la igualdad", subraya el organismo, que las destaca como un ejemplo de "igualdad de genero". La resolución añade que esta fiesta ha permitido preservar la lengua valenciana, especialmente en el pasado, cuando fue perseguida e incluso prohibida. El camino para obtener el título de Patrimonio Inmaterial ha durado más de cinco años, en los que las Fallas han tenido que superar, con el apoyo de multitud de sectores e instituciones, las protestas de colectivos, como el antitaurino, y de entidades vecinales que se oponen a su celebración. Una de las principales impulsoras de su candidatura fue la exalcaldesa de Valencia y senadora Rita Barberá, fallecida de forma repentina por un ataque al corazón hace una semana y cuya figura ha quedado vinculada al mundo fallero tras gobernar la ciudad durante 24 años. "Somos conscientes de la gran responsabilidad que supone compartir con la humanidad, el compromiso de velar por la preservación de todos estos elementos", afirmó el concejal de Cultura Festiva de Valencia, Pere Fuset, ante el Comité reunido en Etiopía.
"Este reconocimiento es un gran estímulo para buscar la excelencia y la mejora constante en todos los valores que abarca nuestra fiesta", añadió. El Ayuntamiento plantará una falla en Valencia para que miles de personas puedan salir a la calle y festejar este logro que dará aún más visibilidad a este cita popular.
merengue dominicano y a la cerveza belga, entre otros.
Por otra parte, el Comité de evaluación, formado por representantes de 24 países firmantes de la Convención de la Unesco, también decidió incluir en la lista de bienes protegidos a la rumba cubana, el
La delegación de Cuba dedicó este reconocimiento de la cultura y la identidad cubana a Fidel Castro, líder histórico de la Revolución fallecido el pasado día 25, a los 90 años de edad.
Sobre la rumba, surgida en las barriadas urbanas pobres de Cuba, destacó su valor como "expresión de autoestima y resistencia" que contribuye a la formación de la identidad nacional.
Faltaban pocos minutos para las 13 horas de ayer miércoles, cuando saltaba la noticia más esperada y ansiada desde hace años por miles y miles de falleros y valencianos en general: La asamblea general de la UNESCO, reunida en Adis Abeba, capital de Etiopía, declaraba por unanimidad a la fiesta de las Fallas como patrimonio inmaterial de la humanidad, con todo lo que ello supone para que la gran fiesta del pueblo valenciano suba a la gloria definitiva a nivel mundial. Un concejal convertido en corresponsal Primero el regidor de Cultura Festiva del Ayuntamiento de València Pere Fuset, desplazado "in situ" con una delegación municipal y autonómica, y poco después el propio alcalde de la capital Joan Ribó anunciaban a los cuatro vientos la gozosa nueva. Autoridades y falleros brindan A las 13,30 horas, el salón de Cristal del Ayuntamiento era el lugar en donde todos se felicitaban mutuamente. Joan Ribó, alcalde de València, Ximo Puig, presidente del Consell, Mónica Oltra, vicepresidenta, Vicent Marzá, conseller de Educación y Cultura, así como varios concejales y dirigentes de la Junta Central Fallera, con su máxima representante Raquel Alario, alzaron las copas para brindar ante los fotógrafos de prensa y las televisiones.
Novembre 2016
3
Y lo celebraremos con Crida, Falla y pólvora, como siempre A partir de la siete de la tarde del domingo, crida a la humanidad y cremà de la falla.
canos. Incluso las juntas locales como en Alzira o en Gandia ya estaban alertando horas antes a sus gentes para celebrar la esperada noticia.
La gran noticia se conoció a las 13 horas y ya por la tarde, a las 19 horas, ante las emblemáticas torres de Serrans, se plantó una falla del artista Juanjo Garcia, al estilo tombé, (lástima que no estuvieran iluminadas las torres) es decir, usando los métodos más tradicionales de los monumentos falleros, que tiene como tema el propio cartel de la candidatura presentada a la UNESCO, el de las Fallas de marzo pasado.
Raquel Alario, fallera mayor, Joan Ribó, alcalde de València, y toda la corporación municipal y miembros de la Junta Central Fallera, junto a la multitud concentrada en ese lugar, contemplaron posteriormente el disparo de un castillo de fuegos artificiales.
Previamente, ya se había convocado a tal efecto a todos los presidentes de comisiones y falleras mayores de toda la ciudad y municipios cer-
Todo como si estuviéramos realmente en la semana fallera de marzo, para expresar el gozo colectivo por esta decisión que marca un antes y un después en la historia de la fiesta y deValència y de la Comunitat Valenciana.
Pero la celebración sigue hasta el próximo domingo día 4; a las 17 horas, habrá un acto institucional en el palau de la Generalitat con el Ayuntamiento en pleno y la Junta Central Fallera y cientos de invitados, representantes de todo el tejido social, cultural, económico y político valenciano. Acto seguido, desde las torres de Serrans tendrá lugar una grandiosa "Crida a tota l'humanitat" por la fallera mayor de València, Raquel Alario y un parlamento y saludo al mundo del alcalde de la capital Joan Ribó. Las Fallas entrarán así en la gloria universal.Después se podrá disfrutar de un vistoso espectáculo piromusical y finalmente será la "cremà". Miles y miles de personas se prevé que participen en estos eventos.
Novembre 2016
4
editorial
Fulanito de tal, nosequé de La Traca
Es un reconocimiento, sí, pero sobre todo es un compromiso. E n esta vecindad que nos incluye a todos tendemos a menospreciar nuestros logros y victorias; sí, las cosas cercanas que están bien hechas no lo parecen tanto; los hombres y mujeres de por aquí que triunfan por ahí los desdeñamos con el látigo de las indiferencias si no de la crítica más despiadada. Somos esa sociedad todavía desconfiada que todo lo ajeno lo sometemos a los tribunales de la sospecha y del rechazo. Aunque tengamos el talento que nos lleva a lograr lo inalcanzable.
· bunyols Les Falles deValència tenen en si mateixes el mèrit per la seua pròpia entitat, però sobretot l'assoliment és de tot un poble que va aconseguir en els limítrofs del segle XIX i tal vegada des de l'anterior convertir una festa ritual, popular i quasi espontània en la Festa Gran de València, amb arrels i orgull en tots els barris amb un afany constant de permanència.
elmirón
Viene a cuento esta reprimenda porque una vez que la UNESCO ha reconocido las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, de repente puede ocurrir como que no va con nosotros la cosa, como que tampoco era tan difícil, que a ver cómo se ha hecho y lo que nos ha costado. Que yo ya lo sabía y que tampoco tiene tanta importancia... Sin embargo, sobre nuestras cabezas y nuestro lugar en el mundo se ha asentado un orgullo y una responsabilidad que a todos compete; a las instituciones desde luego, pero a los ciudadanos de calle y “casal” principalmente. Al incorporar las Fallas a la Lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, la ciudad de Valencia, y todas aquellas a las que se ha extendido esta singular fiesta, adquieren el reconocimiento que garantiza su supervivencia . Quedará en el haber de los valencianos como esencial a su manera de ser, a su forma de ver el mundo, y allá donde la cultura y el patrimonio importen, las Fallas, la fiesta grande que lo es por decisión popular estará
a la altura de las pirámides de Egipto o el Misteri d’Elx -por ejemplo. Se ha extendido la idea de que si nos daban el título lo era a modo de galardón, premio o distinción. Y no es cierto, pues no se trata de un título que apenas se pueda colgar en nuestras vitrinas para gozo de propios y extraños. Es mucho más
La UNESCO concede sus incorporaciones con el afán de que sean reconocidos como un valor unversal, pero lo hace con una advertencia tan nítida como el sol que ilumina nuestras playas en estío: se trata de conservar, preservar, restaurar y difundir. No basta con exhibir el título como un graduado lo hace en su dormitorio. Habrá que entender en primer lugar el alcance de las intenciomes del organismo que lo otorga. El patrimonio inmaterial es más débil y vulnerable que otros. Puesto que se refiere a costumbres, fiestas, lenguas, parajes, rituales, artesanías, etc. sometidos a la creciente globalización y sus efectos perniciosos que parecen poder arrasar con todo. Un sistema cada vez más depredador que pone en peligro las mejores tradiciones y costumbres, alterándolo todo, y por tanto modificando peligrosamente la diversidad cultural. Cuando aceptamos el título de Patrimonio de la Humanidad para las Fallas nos estamos comprometiendo a mucho. No es prudente, pues, entender esta distinción como un premio. Nos puede relajar
Fotos: Cipriano Fornas
La Traca© marca registrada ®Publicacions Valencianes La Traca SL Director: Juan de Dios Leal
deimpacto
Director de Arte y fotografía: Cipriano Fornas Redactores Jefe: Ivana Villar y Guillem Nicolás Redactores y colaboradores: César Jara, Rubén Tapias, Irene Benet, Virgilio Leal, Ricard Catalá, Toni Colomina, Alexis Moya, Javier Mozas, Josep Vicent Frechina, Rafael Solaz. Opinión Ximo Puig, Enric Morera, Josep Francesc Almeria, Manuel Muñoz Ibáñez, Gil Manuel Hernández Edita: Editorial Gules, S.L. Pura Moret, Carmen Oliver, Enric Fernández Apartado de Correos,22; 46182 mail: administracion@editorialgules.com telf: 606 016 371 Depósito Legal:V743-2014 IMPRESO EN VALENCIA
Mediterráneo Proceso Gràfico Derechos reservados
y bajar los brazos como si no hubiera pasado nada. Nos estamos responsabilizando, formalmente, en evitar las alteraciones que la nueva sociedad parece imponernos inexorablemente. Por tanto, cabe hacer un inventario, en segundo lugar, de aquello que es esencial a las Fallas y ordenar nuestra legislación patrimonial para impedir su modificación, pervitiendo su naturaleza.
Nos obliga además a rectificar aquellos usos y costumbres que en las últimas décadas puedan subvertir sus bases patrimoniales. Debemos, pues, restaurar, como se restaura la portada de un edificio constructivo. Es nuestra obligación que retornemos al pasado en aquellos aspectos que han sido modificados para seguir siendo genuinos. Por ejemplo el tema de los materiales constructivos del monumento o la indumentaria.
de materiales sintéticos y plásticos arrumbando el cartón, el papel, el polvo de viga o la madera son datos peligrosos. Otro aspecto del compromiso que asumimos es el de la difusión. El origen y la esencia de la fiesta fallera siguen siendo un capítulo lleno de enigmas. Desde las propias fallas, hasta las universidades, la Associació d’Estudis Fallers y una legión de curiosos e investigadores tratan de escudriñar en el pasado. Estimulémoslo.
Al recibir el título de Patrimonio Mundial nos comprometemos a mantener las Fallas como una manifestación cultural de primer orden, y como dice la UNESCO defender el acervo de conocimientos y técnicas que se transmiten de generación en generación.
LA TRACA Como responsables de LA TRACA, actual y contemporánea, tras la dictadura y por la sintonía de nuestro editor con viejos y republicanos periodistas, quisimos darle un cariz festivo a sus contenidos y difundir lo mejor de nuestras fiestas. Somos herederos de Carceller y LA TRACA irrepetible de la República, sí, pero también somos herederos de LA TRACA que a mediados de los 80 del siglo XIX se plantó cuando se quiso prohibir las Fallas mediante tasas inasequibles para los barrios. Entonces esta revista luchó contra estas maniobras y consiguió que todo el pueblo valenciano se uniera en defensa de su ya por entonces acervo cultural.
No va a ser fácil. Las Fallas son vulnerables. Su grandiosidad, su crecimiento ilimitado, la rigurosidad de normas uniformadoras, la intrusión del mercado callejero con fritangas y batucadas, por ejemplo; las nuevas técnicas informáticas que deben ser aceptadas pues cada época tiene sus métodos escultóricos, pero que han derivado en la utilización
A LA TRACA se debe la creación de los premios (els palets) a las Fallas, hasta que a principios del XX, ya el ayuntamiento, continuó oficialmente unos premios, gracias a los cuales se inauguró para el futuro la falla artística y una competición que las ha hecho mejores. Aquellos hombres y mujeres de LA TRACA estarían hoy muy felices. Nuestro homenaje.
Novembre 2016
5 Ximo Puig i Ferrer, President de la Generalitat
És l'hora de seguir treballant
L
es Falles són una de les nostres manifestacions festives més conegudes arreu del món. El seu prestigi ha creuat totes les fronteres i els milers de visitants que cada any acudeixen a la ciutat per viure unes jornades inigualables són els millors agents promocionals d'un esdeveniment únic. Cal dir, no obstant això, que les Falles són molt més que una festa; que en elles conflueixen dimensions molt diferents i que és necessari conéixer-les, entendre-les i valorar-les per poder calibrar la magnitud d'un fenomen que supera qualsevol intent de descripció o de classificació. Festa i cultura es donen la mà a les falles, com també l'art, la participació ciutadana, la història, la sociologia o la llengua. Les falles són grans monuments condemnats a una vida fugaç, gloriosa i efímera, però són també entitats cíviques obertes i acollidores que articulen la nostra societat i creen forts lligams entre els veïns. Són, com tots sabem, una gran manifestació turística que atrau a una enorme xifra de turistes, però també són lloc de trobada per als valencians, un espai compartit per tots, sense distincions, i que tots sentim com a propi i del qual estem legítimament orgullosos. Hi ha falles grans i altres molt més menudes; les trobem al centre històric, però també en qualsevol barri de la ciutat. Agermanen a grans i menuts, a pares i fills, a dones i a homes, a gent de totes les procedències, de qualsevol opinió política i de tota classe i condició. No tenen un model rígid de funcionament, ni responen a un model uniforme. Són tan diverses com la nostra societat, tan plurals i solidàries com ho és la pròpia ciutat de València on van nàixer fa segles. Les falles són un dels nostres patrimonis més preuats, per moltes raons. Potser la més important de totes siga la seua capacitat per unir, per convidar a la participació, per oferir l'oportunitat a tots els ciutadans de ser part activa, per donar lliçons de
vida en comú, de col·laboració, de respecte i de convivència entre els valencians que viuen les falles des de dins i els que les contemplen des de fora i tots els que ens visiten. La declaració per part de la Unesco de les Falles de València com Patrimoni de la Humanitat no fa sinó constatar el que era evident als nostres carrers i places durant els dies grans de la festa. D'alguna manera ve a reconéixer interncionalment el que milers i milers de persones, d'ací i d'allà, ja sabien: el valor excepcional d'un fenomen que més que una festa és la manifestació del geni d'un poble, del seu caràcter emprenedor, de la seua capacitat d'integració, del seu enginy, de la seua vocació artística i del seu propòsit de créixer i anar a més, de progressar i modernitzar-nos, de guanyar noves metes i buscar nous horitzons, cada vegada més ambiciosos, de cara al futur. Tots ens felicitem per haver aconseguit un reconeixement que tots sabem que mereixíem. La Comunitat Valenciana, que ja estava plenament orgullosa d'altres reconeixements semblants de la Unesco, celebra ara que les seues Falles s'incorporen, de fet i de dret, al llistat de béns materials i immaterials que són propietat de tots per ser patrimoni de la humanitat. Ara, després dels discursos oficials, de la satisfacció compartida i del sentiment de plenitud que prové del fet d'haver aconseguit un objectiu tan desitjat, s'obri una nova pàgina en la història de les Falles, una etapa en la qual tots haurem de fer honor al títol que hem rebut. Arriba el moment de fer el que hem fet sempre: lluitar per la festa. És el moment de seguir donant-la a conéixer en tots els àmbits, d'aprofundir en els seus valors de pluralitat, tolerància, respecte i modernitat, i de desplegar totes les seues potencialitats. I també és temps de mirar l'endemà per a trobar nous objectius, noves empreses, reptes que haurem de superar tots junts i que projectaran les nostres Falles cap al futur encara amb més força i dinamisme, agermanant encara a més gent i fent que les noves generacions de valencians que ens succeiran puguen estar encara més orgulloses que nosaltres d'un immens patrimoni immaterial que heretaran i que estaran obligades a custodiar i a fer més gran.
Enric Morera i Català, President de les Corts
Un reconeixement que ja era nostre
P
uc començar este escrit de moltes maneres, però vull fer-ho donant les gràcies a totes les persones implicades en el projecte per aconseguir que les nostres Falles siguen Patrimoni Immaterial de la Humanitat. Gràcies pel vostre treball, per la vostra dedicació, pels quilòmetres i quilòmetres fets, per les investigacions, pels actes, per les conferències, per les exposicions... En definitiva, per tot allò que s’ha fet per a demostrar una evidència: que les Falles són un Patrimoni de la Humanitat. El caràcter valencià és un caràcter universalista i això és indiscutible. La nostra terra ha donat artistes internacionals en totes les matèries. L’art, és l’expressió més internacional i humanista que existix i les falles tenen un gran component artístic. És art pur en els monuments, però és art en la poesia de les crítiques, és art de l’artesania de la confecció de les teles i els vestits tradicionals o l’orfebreria; és art la nostra música que sempre ens acompanya i és art com aconseguim fer de la pólvora un ritual i una música, difícil d’entendre en altres llocs del món però que fascina als d’ací i als de fora. Ser Patrimoni Immaterial de la Humanitat és un títol que ja teníem de facto, perquè els valencians i valencianes ho sentim així i perquè així ho senten les milers i milers de persones que vénen tots els anys a gaudir de la festa fallera. Ara bé, ser Patrimoni Immaterial de la Humanitat ens planteja una sèrie de responsabilitats de les quals no podem defugir. S’ha de mantenir i fer augmentar el nivell d’exigència de la festa. Això, no tinc cap dubte que els fallers i falleres ho sabran fer perquè l’esperit de superació és característic del món faller.
Ara més que mai, hem de dignificar la festa, de fer-la sostenible, de fer-la respectuosa amb tota la societat i amb aquells que no poden o no volen gaudir-la. Hem de buscar consensos i equilibris perquè les Falles siguen conegudes i respectades per tot el món. No és una tasca fàcil. Créixer i projectar-se és un treball important, en el qual, les administracions han de col·laborar dins de la mesura que els pertoque pel gran impacte social i econòmic que tenen les falles en la societat valenciana. Ser universals, també, ens implica a ser més conseqüents amb la recuperació de l’essència de la festa i de la nostra identitat, perquè això és el que ens fa autèntics, això és el que ens caracteritza i això és el que volen vore les persones que ens visiten. S’ha de saber explicar i transmetre la festa, s’ha de tindre una voluntat universalista però mai, mai hem de perdre de vista la promoció i dignificació de la nostra identitat i això comporta un major esforç per la normativització i potenciació del valencià en les falles, l’estudi i recuperació de la indumentària tradicional valenciana i la potenciació del nostre folklore. I això, no és que s’haja de fer, si no que ja s’està fent per moltíssimes comissions no només del cap i casal, si no de totes les comarques valencianes on les falles han arrelat amb força com a festa i com a important factor de sociabilització. Amb el reconeixement de la UNESCO no hem arribat a una meta, més bé és un punt d’eixida des del qual hem de continuar treballant pel bé de les falles, que, al remat, és pel bé de la nostra cultura, de la nostra llengua, de la nostra economia i de la nostra terra. Com a President de les Corts Valencianes, reitere en el meu nom i en nom de tota la institució l’enhorabona a tot el món faller per la merescuda designació.
Fotos: Cipriano Fornas
Novembre 2016
6
Joan Ribó, alcalde de València Pròxim i sincer; content i orgullós de l'esdeveniment es mostra l’alcalde de València, Joan Ribó, davant de la revista LA TRACA, després que s’haja donat a conèixer la decisió de la UNESCO que declara la festa de les Falles com a Patrimoni Immaterial de la Humanitat. L’alcalde ens rep al seu despatx de l'Ajuntament, en una recessió de la seua carregada agenda estos dies, i recorda les primeres Falles que va conèixer de xiquet, quan va arribar
a la ciutat per a viure la festa amb la seua família. Ribó fa un repàs als aspectes més importants de les Falles per a dir que la festa ha de ser tal i com decidisquen, de forma democràtica, els fallers i les falleres. L’alcalde aposta per combinar la tradició i la innovació en una festa que és de les més antigues d'Europa i que ara, amb este reconeixement, ha d'atraure més visitants cada any.
«La decisió de la UNESCO és una gran notícia per a València» * «La festa de les Falles ha de ser tal i com decidisquen els fallers. Mentre jo siga alcalde es farà el que diga un congrés faller»
CÉSAR JARA Fotografía: CIPRIANO FORNAS
Com alcalde de València, quina és la seua valoració de la decisió presa per la UNESCO? Tinc una gran satisfacció, com no podia ser d’una altra manera, en primer lloc perquè és el reconeixement mundial a una festa que és més que una festa: és una manera de viure la valencianitat. En este sentit,València és una ciutat oberta al món i ara, si cal, encara més. Però també tinc una satisfacció personal perquè es recompensa el treball que hem dut a terme des de l’Ajuntament i particularment des de la Regidoria de Cultura Festiva, però sobretot des de les mateixes falles. No estaríem parlant de ser Patrimoni Immaterial de la Humanitat si no haguera sigut per la constància dels fallers i les falleres, que han estat alçant la festa a les madures i a les dures. Estem treballant perquè València siga la capital mundial del running, de l’alimentació... i ara hem aconseguit que el món veja i admire les nostres festes. València mereix ser reconeguda pels seus valors, que els telediaris parlen de nosaltres per ser una ciutat de gent honrada, que s’esforça cada dia per posar en valor el seu treball i la seua idiosincràsia. És una oportunitat d’or per posar en relleu la rellevància de la nostra cultura i les nostres tradicions. Com pensa que ha de repercutir en la festa i el seu futur, i en la ciutat? Ser Patrimoni Immaterial de la Humanitat ens ompli d’orgull i de felicitat però, atenció, que també
* «El reconeixement és una oportunitat d’or per a posar en relleu la nostra cultura i les nostres tradicions»
ens ha d’omplir de responsabilitat. La ciutat i la mateixa festa tenen l’obligació, més encara, de cuidar tot allò relacionat amb les peculiaritats falleres. A més de tot això, per què no dir-ho, hi ha una repercussió directa sobre l’economia local, perquè les falles ja són un dinamitzador econòmic de primer ordre per a la nostra ciutat i ara, a més, augmentaran la capacitat d’atracció turística que té València. S’accentua el paper tan important que tenen les falles sobre l’economia de la
ciutat. Penseu en totes les professions que tenen a vore amb el món de les falles; implica un rellançament real. I el mateix passa amb les activitats lligades amb el turisme. Hem d’aprofitar estes potencialitats. Recorda com va ser la primera volta que va viure la festa de Falles a València? I tant que ho recorde! Tenia 14 anys la primera volta que vaig vore les falles. Jo estudiava en un internat, i vaig vindre a visitar els meus tios que vivien ací en València.Vaig agarrar el tren a soles, i els meus pares li van advertir al comissari que guardava el tren que quan arribara a la ciutat m’havien de vindre a arreplegar. L’emoció va ser immensa, quan vaig abaixar del tren i, en companyia de les meues cosines i de ma tia i mon tio, vaig vore les falles plantades i tot el
* «Una festa amb la història que tenen les Falles ha de saber equilibrar la innovació amb el respecte a la tradició» comboi que es muntava al voltant! Crec que per a qualsevol persona que veja per primera vegada les falles és una emoció que no pot oblidar mai, i així ho acrediten les milers de persones que cada any ens visiten. De quina manera ha canviat la seua visió de les Falles després de ser alcalde de la ciutat? Ara supose que les coneixerà millor... Està clar que quan una persona visita València per falles obté una
visió externa, que passa per la visita de les falles plantades, disfrutar d’una mascletà, d’un castell... però les falles són molt més encara. És un treball de tot l’any i, com a alcalde, a més, tinc la necessitat de remarcar que he comprovat de primera mà com són un element cultural de primer ordre. De fet, m’agradaria recordar que les falles tenen el concurs de teatre amateur més important d’Espanya. Eixe és un orgull més que hem d’afegir al moviment cultural faller. Però encara hi ha més, perquè les falles suposen un element d’integració importantíssim en la ciutat: dóna igual d’on vingues, quin color de pell tingues, quina llengua parles... en les falles eres benvingut. Les falles servixen d’aglutinador i això és molt rellevant en una ciutat com la nostra, amb persones de diferents procedències. Demostra, una vegada més, l’hospitalitat dels valencians i valencianes. Quina és l'estratègia del seu govern respecte a les Falles com a institució pública? Tenim una estratègia “de doble direcció”: volem que les falles promocionen la ciutat, i que la ciutat promocione les falles. És una manera de treballar innovadora, que fonamentalment ha de servir per a millorar la comunicació de les falles cap a l’exterior, però també cap al conjunt de veïns i veïnes de la ciutat. Creiem en esta estratègia perquè creiem en les falles com a motor econòmic, social i cultural. Eixe potencial no
Novembre 2016 * «Ser Patrimoni de la Humanitat és també una responsabilitat. Tenim l’obligació de cuidar tot allò relacionat amb la festa»
el podem desaprofitar, de la mateixa manera que les falles no poden desaprofitar les altres potencialitats que oferix la ciutat. Per posar un exemple: si volem que les falles atraguen més visitants a la ciutat, també volem que les falles s’aprofiten de les potencialitats dels diferents barris de València. Hem de crear sinèrgies i anar tots a una. En quins termes s’han de protegir especialment les falles com a Patrimoni Immaterial de la Humanitat? Una festa amb la història que tenen les falles ha de saber equilibrar, sobretot, la innovació amb el respecte a la tradició. Això ho veiem clarament, per exemple, amb les pròpies falles, com a element que, moltes vegades, innova quant a l’estil, però que continua mantenint els arrels del ninot. Mireu, canvia tot i cada volta més de pressa, i això ni podem ni devem evitar-ho, però al mateix temps s’ha d’anar molt amb compte en mantindre les essències d’esta festa ja universal. Ser patrimoni implica haver continuat un llegat al llarg dels segles, i nosaltres volem perpetuar eixe llegat: que arribe als nostres néts i que el sapiguem transmetre de generació en generació. Perquè ser patrimoni implica multitud d'elements: la falla, la música fallera i festiva, la pirotècnia, la indumentària, la societat civil (amb les comissions), l'artesania (les joies, les pintes, els adressos...) i les lletres falleres (amb els poemes, el teatre, els llibrets...). Quines coses creu vosté que han de modificar-se en la actual forma de les Falles a València per tal que siguen més populars encara? Per què hi ha d’haver un càrrec polític presidint la Junta Central Fallera? Més que modificar, a mi m’agrada més parlar de millorar. La declaració de Patrimoni Immaterial de la Humanitat és el motiu perfecte per aprofundir en eixa búsqueda de l’excel·lència de la que sempre parlem quan ens referim a les falles. Sobre la qüestió de la presidència de la Junta Central Fallera i la relació entre la Junta Central Fallera i l’Ajuntament, he de recordar que ens guiem pel que marcà en el seu moment el Congrés Faller.Vull dir, que és el propi món faller qui pot decidir en un congrés si vol canviar la situació actual, perquè en altres poblacions com Alzira o Gandia el president de les respectives juntes és triat pels mateixos fallers. Mentre jo siga alcalde, sobre este assumpte es farà el que diga un congrés faller. Estem oberts a qualsevol canvi, però han de participar els fallers i les falleres. Pareix que a poc a poc es tornen a utilitzarr materials tra-
7 dicionals en la construcció dels monuments; així es fa, per exemple, en el monument de l’Ajuntament. El govern municipal està per impulsar eixos canvis i abandonar el polietilé, que és tan contaminant? Estem davant d’un problema de contaminació, sí, però atenció perquè també estem davant d’un problema en la pròpia Cremà: la fusta i el cartró cremen molt bé però el poliestiré crema fatal. Per això dic que no és només un problema de contaminació –que també- sinó de respecte a la Cremà, que és el moment àlgid de les Falles. En este sentit, apostem per aquelles mesures que facen avançar les falles cap a la sostenibilitat. Estem molt atents als estudis q estan fent les universitats valencianes sobre materials ecològics com la palla de l’arròs. Imaginem per un moment, com guanyaríem tots si en comptes de cremar-se allà on no ha de fer-se, com és en el Parc Natural de l’Albufera, la palla es reconvertira en un material apte per als monuments fallers. Eixa innovació, si és profitosa per a les falles, és la que jo desitge en el món de la festa. Respecte a la falla municipal, efectivament, la fusta és la protagonista des de fa uns anys. És bo, al costat de la innovació, tornar a les formes tradicionals, quan estes són bones. És un exemple molt clar de com tradició i avantguarda poden agarrar-se de la mà en les falles. Les Falles tenen l'espai cultural que els correspon, tenint en compte que durant molts anys han sigut una illa de llibertat per a usar el valencià i de democràcia als casals? Les falles són cultura festiva, i la cultura festiva és Cultura amb majúscules. Per tant les falles són un patrimoni cultural comú del primer ordre per als valencians i valencianes. Han jugat un paper important històricament i estic segur que també ho faran en el futur. Els dos extrems pels quals em preguntes són totalment certs. D’una banda, s’han configurat com una estructura ciutadana bàsica en la ciutat, en la qual, el president de cada comissió era triat de manera democràtica, i en eixe sentit, hi ha que dir que les falles han sigut en determinats aspectes un reflex de la societat. I d’altra banda, sense mitges tintes, també s’ha de dir que les falles a la ciutat de València representen el moviment de masses més important des del qual s’ha treballat per la vitalitat del valencià. I això, ho haurem d’agrair sempre a les falles. Què els diria als valencians en un moment tan important? Vull donar un últim missatge d’enhorabona a tots els valencians i les valencianes perquè, de nou, som patrimoni. Som Patrimoni Immaterial de la Humanitat, i hem de sentir-nos plens d’orgull a l’hora de promocionar la nostra festa i la nostra ciutat. A més de tot això, també vull donar un agraïment a totes aquelles persones que des de les falles i des de l’Ajuntament han treballat amb tant d’esforç perquè esta celebració siga una realitat. També als diferents col·lectius professionals i festers. A tots ells i elles: Visquen les falles! Visca València!
Gil Manuel Hernández, Director del Museu Faller
Les Falles, la calidesa d’una festa total
L
es Falles constituïxen una festa total, que ha sigut capaç de crèixer seguint la pròpia expansió de la ciutat de València, i també la dels pobles i ciutats on ha arrelat, configurant-se com una extensa xarxa associativa amb una intensa activitat cultural, que dura tot l'any, i amb una enorme capacitat de projecció simbòlica i identitària.
Les Falles sols poden existir perquè hi ha comissions falleres, algunes de les quals remunten els seus orígens a mitjans segle XIX, i que al llarg dels temps han estat capaces de romandre com un ferm pilar de la comunitat, del barri i del veïnat. És cert que en altres tipus d’associacions s’establixen forts lligams entre els seus membres, però el fet que la festa fallera siga viscuda pels seus militants com una mena de projecte transcendent fa que els sentiments i les emocions convertisquen la vida associativa fallera en la transposició de cert ambient familiar, encara que a una escala major. Encara més, dins les comissions hi ha apuntades famílies senceres, fet que reforça tant els vincles intrafamiliars com aquells que s’establixen entre els membres de les comissions. En un context social on la família s’està reestructurant ràpidament, amb l’aparició de noves formes de convivència familiar, la consistència de la comissió fallera proporciona un marc més ampli de relació i de sentit. De fet, en una societat on cada vegada hi ha més individus que viuen a soles, el fet de tindre un grup estable de referència i que aporte un marc per a desenvolupar activitats creatives, implica un factor decisiu de benestar social cada vegada més difícil de trobar en les modernes ciutats despersonalitzades, on la competitivitat, l’ansietat, la soledat i la manca de temps creixen contínuament. A més a més, els símbols de la comissió o els records compartits, incrementen la sensació de familiaritat i proporcionen una percepció de cobertura, d’aixopluc, de protecció, de cement cohesionador en el que també tenen una part molt important els grups d'amistat que es formen en les comissions, i que junt a les famílies actuen com a vehicles actius de socialització en els valors propis de la singular cultura fallera. Sobre això, no ha d’estranyar que el mot germanor siga un dels més utilitzats i valorats pels comissionats per a referir-se a les relacions humanes dins el món faller.
La festa viscuda confirma eixes sensacions. Amb el començament de la Setmana Fallera tot es transforma i la vivència que dins la comissió funciona una comunitat augmenta. Fonamentalment en determinats actes o rituals, com ara les cercaviles o l’Ofrena a la Mare de Déu dels Desemparats. En eixos moments els membres de la comissió es mouen pels carrers com un únic cos, a l’uníson, esperonats per l’ambient festiu que es respira i per la mateixa percepció que aquell és un temps extraordinari i ple de significat. Al remat, hi ha com una mena de fe que eixa gran família és possible, que per uns dies hom pot trobar-se al bell mig d’un grup altament cohesionat que fa sentir a un part d’una cosa més important i duradora. En certa manera, este sentiment de pertinença i transcendència està molt a prop de l’experiència religiosa, en el sentit que permet relligar amb un projecte superior on l’individu s’inserix sòlidament, envoltat d’una numinositat que es desprén de la màgia festiva del mateixa vincle social ritualitzat. Per això, una gran part dels fallers i les falleres mantenen relacions de màxima fidelitat i identificació amb les seues comissions, tal com les podrien mantindre amb una església o confessió religiosa. Perquè l’experiència associativa fallera proporciona als comissionats un bé immaterial cada volta més difícil d’assolir en les nostres societats individualistes: el caliu d’una empresa compartida des de la solidaritat, la identitat i el foment de lligams ferms i duradors. Tot un luxe, si bé es mira, en els nostres dies. A les grans ciutats del món occidental la vida és cada vegada més freda, distant, atomitzada, virtual i normativitzada. Una vida competitiva i massificada, lliurada al consum compulsiu i al treball obsessiu. Afortunadament, en ciutats com ara València o altres on hi ha Falles, es manté un espai de calidesa, d’amistat, de camaraderia i cosmovisions compartides. Més enllà de les ideologies i opcions sexuals. És tracta d'un món ple de sentit i significat, de certa transcendència, un entorn on els vincles amb els altres i les arrels a la terra encara es mantenen amb una certa solidesa. Una festa total, en el temps i en l’espai, de múltiples dimensions, vinculada a diverses tradicions, zelosa de les seues singularitats, però inclusiva i receptiva, oberta a totes les possibilitats.
Novembre 2016
8
Francesc Colomer, Secretario Autonómico de la Agencia Valenciana de Turismo Francesc Colomer, secretario autonómico de Turismo de la Comunidad Valenciana, es el máximo responsable de la Agencia Valenciana de Turismo, una institución que tiene como objetivo principal el de desestacionalizar el sector del turismo en toda la Comunidad. Sin duda, una fecha clave para conseguirlo es durante la semana grande de las fiestas josefinas, cuando se cuentan
por cientos de miles los visitantes que llegan a nuestra tierra para disfrutar de los monumentos que llenan las calles y plazas de muchas ciudades valencianas. Ahora, después de que las Fallas hayan sido declaradas las como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, Colomer apunta: «Las Fallas encajan perfectamente en nuestro relato de un territorio con hitos culturales carismáticos».
«Las Fallas son el espejo de una personalidad colectiva» Ivana Villar València
Radiografíe el turismo en la Comunitat Valenciana. El turismo, más allá de las cifras de su contribución a la economía y el empleo, constituye la gran esperanza para vertebrar el territorio generando oportunidades para muchos municipios condenados a la despoblación. El turismo también nos ayuda a saber quiénes somos, una sociedad abierta, tolerante y hospitalaria. Finalmente nos puede ayudar a la remontada reputación a la que merecemos los valencianos. ¿Qué podría decirnos del siempre debate sobre cómo combinar la cultura de un territorio con su capacidad de atracción turística? La cultura es la gran apuesta. Gran parte de nuestra estrategia, tanto en la definición del producto como en la promoción de nuestra oferta debe poner el énfasis en la autenticidad, la diferenciación y en todo aquello que aporte valor por ser genuino. Evidentemente el patrimonio y todas las manifestaciones culturales identitarias son un atributo turístico de primer nivel. La gente buscará experiencias únicas e irrepetibles. Ese es el turismo que nos aguarda. La Comunidad Valenciana es fértil en ese sentido, una fábrica de emociones. El turismo es fabricar emociones. ¿Cómo definiría la situación de la Comunidad Valenciana en relación al turismo cultural? Espabilándose, moviéndose. Hay muchos actores públicos y privados generando ideas y poniendo en valor elementos y dinámicas culturales. Nuestro reto es comercializar adecuadamente. Cultivar la diversidad de públicos que permitan sostener la oferta.Y, al hacerlo, ligar nuestra imagen turística a la riqueza cultural. Nuestra apuesta por la Ruta de la Seda, la de los Borgia, el Grial, los íbe-
* «La Comunitat necesita estar en el mapa de lo positivo. Las Fallas son la punta de lanza del prestigio valenciano»
ros, paleontología, olivos milenarios, la enogastronomía, etc. Busca claramente esa referencia. ¿Está la oferta de la Comunitat Valenciana poco cuidada o profesionalizada? La profesionalización es uno de nuestros desafíos. Hemos comenzado una campaña, de largo recorrido, sobre la formación en los valores de la hospitalidad. Creo que es un tema básico si queremos ser un destino turístico relevante. No podemos ni debemos competir en precio ni rebajando salarios. Nuestra competitividad debe radicar en la cualificación profesional, la innovación y la gestión del talento.
estandarización, resulta fundamental interpretar las Fallas como algo verdaderamente brillante. No solo son un recurso turístico, son el espejo de toda una personalidad colectiva. El talento, el genio artístico, el humor como credencial, la convivencia y ese final donde todo vuelve a comenzar... En fin...mediterraneidad en vena.
* «La Comunidad Valenciana es una fábrica de emociones. El turismo es saber fabricar esas emociones» Además del sol y playa, en sus planes de promoción turística usted señaló la necesidad de potenciar la segmentación de la oferta. La inteligencia de mercados nos indica que la demanda está cada vez más segmentada y que corresponde especializar la promoción. Debemos conocer la evolución de las tendencias, los gustos y deseos de los turistas. Un momento clave para la recepción de turismo en la capital del Turia, es en el periodo de marzo, para la semana grande de las fiestas josefinas. ¿Qué opina de la denominación de las Fallas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco? Me parece un reconocimiento que se corresponde con la magnitud de nuestras fiestas. La distinción añade valor y si cabe permite redimensionar internacionalmente algo maravilloso que tenemos. Esta Comunidad necesita estar en el mapa de lo positivo. Las
Fallas son punta de lanza del prestigio valenciano. Desde la AVT cómo definiría la esencia de las Fallas?
Las Fallas encajan perfectamente en nuestro relato de un territorio con hitos culturales carismáticos. Si buscamos esencias para no difuminarnos en un mundo global que tiende a la
¿Cree que su denominación pueda llamar la atención sobre otros festivales del fuego nacional e internacional y sus respectivas comunidades de la región mediterránea? Sin duda, puede jugar un papel motor para otros acontecimientos que evoquen valores similares. Todo aquello que sume y multiplique en ese camino será positivo. Nosotros debemos pelear siempre por mantener esa referencia de vanguardia, la capitalidad que merecemos. Como decía un clásico, "tenemos arte, y solo arte, para no morir a fuerza de verdad".
Novembre 2016
9
Pere Fuset, regidor de Cultura Festiva i president de la JCF Pere Fuset és, probablement, una de les persones més satisfetes per la decisió de la UNESCO de reconéixer les Falles com a Patrimoni de la Humanitat. I no només per haver encapçalat la recta final d’una candidatura que ha sabut mostrar al món les característiques d’una festa feta pel poble i per al poble, sinó per ser també un
apassionat faller que viu la festa en primera persona. Fuset, però, reconeix que el treball no està acabat encara, i que caldrà treballar de valent per tal d’aprofitar les oportunitats que ara es presenten i que passen per sumar totes les persones i institucions possibles a la causa de fer de les Falles una festa per a tots i totes.
«Les Falles són un tresor que ara compartim amb la humanitat» Text: Guillem Nicolàs Fotografia: CIPRIANO FORNAS
Han sigut uns mesos de treball intens per tal d'aconseguir que les falles foren declarades patrimoni de la Humanitat. Què destacaria d'una candidatura que ha resultat tot un èxit? Este és el fruit del treball col·lectiu de milers de fallers i valencians, un reconeixement merescut per a la millor festa del món, una festa valenciana però que també és universal. El camí recorregut ens ha permés explicar que les Falles són un patrimoni en comú, i ara cal que persones i institucions prenguen consciència que també suposen un gran motor social, cultural i econòmic per a la ciutat i per al poble valencià. Si som intel·ligents, no només preservarem els components d'esta candidatura, sinó que els convertirem en una gran oportunitat. Com s'ha d'aprofitar a partir d'ara un reconeixement tan important com el que heu rebut? Cal reflexionar sobre com fer-ho, perquè les Falles no són només una festa, sinó que permeten posar en marxa una estratègia cultural i social. Els casals són un centre de reunió de veïns, que s'ajunten per a fer grans coses: es pot fer cultura, es pot fer integració, i també són un gran motor econòmic per a la ciutat. Després de molts anys treballant per a vendre una imatge de València relacionada amb els grans esdeveniments, ja és hora que reconeguem que les Falles són el gran esdeveniment natural dels valencians, i un dels ingredients que ens fan únics al món. No necessitem inventar la pólvora, perquè ja fa molts anys que la tenim inventada. Què suposa per a un faller com vostè haver sigut un dels responsables d'aquest èxit col·lectiu? Estic molt satisfet per tindre la responsabilitat de presidir la Junta Central Fallera en el moment d'este reconeixement, però seria absolutament
nant de la identitat valenciana, i per tant hui tots hauríem de sentir-nos molt orgullosos del reconeixement, amb independència de si som o no fallers.
* «No es tracta d'atraure més turistes, sinó de saber explicar al món que les Falles representen un fenomen cultural»
Este reconeixement també comporta algunes obligacions, com la de preservar la tradició. Es plantegen per tant la possibilitat de recuperar els materials antics de construcció del monument, com el cartró o la vareta? Este reconeixement costa molt de guanyar, però també es pot perdre si les diferents administracions i agents no prenem les decisions oportunes. En els últims anys, la fusta ha recuperat molt de protagonisme. Està clar que el suro ha permés una evolució artística que d'altra banda no hauria estat possible, però cada vegada hi ha més gent conscient que, de vegades, innovar és també recuperar l'arrel i la tradició. A més, s'estan impulsant projectes per a fer que la serradura o la palla de l'arròs siguen aprofitats per a la construcció de Falles, com era costum. La millor alidada de la tradició és la innovació, perquè és la que permet adaptar-se al moment.
injust que oblidara totes les persones que han participat en este procés. A totes les vaig felicitar quan fa un any es va produir la candidatura oficial, i també cal recordar a totes aquelles que s'hi han anat incorporant posteriorment. Per a mi, haver encapçalat esta recta final de la candidatura és el màxim orgull que com a valencià i com a faller podia somiar. La candidatura a patrimoni de la Humanitat ha servit per a unir esforços. Creu que el reconeixement pot servir per a superar algunes de les diferències que hi ha hagut en el passat? Jo sempre he insistit en la necessitat de fer pinya, d'utilitzar la festa com una oportunitat per a la unió, per damunt de qualsevol ideologia i per damunt de la diversitat del món faller. Crec que la festa ens fa a tots iguals i lamente que hi haja gent que no ho entenga així. Ara, amb este reconeixement, serà molt més fàcil que entenguem que les Falles són patrimoni de tots. Quin pensa que serà el futur de la festa fallera una vegada aconseguit un dels majors reptes dels últims anys? És molt important que prenguem consciència que les Falles són la festa gran de València. Esta ha de ser la festa del cent per cent, encara que estiga gestionada pel deu per cent, els fallers i les falleres. Per això, hem de ser capaços d'incorporar altres agents i institucions a l'hora de preservar i potenciar els aspectes que contemplava la candidatura. Cada ajuntament, cada diputació, cada conselleria, el govern d'Espanya i fins i tot organismes internacionals, han de prendre consciència de la importància de la festa i prendre decisions que propicien la preservació dels seus elements. Estos elements dels quals parla, com la música, la pirotècnia o la
* «Innovar també és recuperar la tradició. Hi ha projectes per a recuperar la serradura o la palla de l’arròs en els monuments» * «Les Falles són el gran esdeveniment natural dels valencians, i un dels ingredients que ens fan únics al món» indumentària, pensa que s'han tingut prou en compte en els últims anys? La campanya duta a terme ens ha permès ser conscients de la importància que té la festa per a les bandes de música o la dolçaina; per a la conservació de la seda i de la indumentària tradicional; per a la professió dels artistes fallers, autèntics artesans que participen amb la seua creativitat en el major festival popular d'art que
se celebra al carrer; per a la literatura fallera, i per a la la xarxa associativa que generen les Falles, que ajuden a teixir la societat valenciana.Tots estos elements i tradicions passen de generació en generació, permetent que esta festa continuara endavant en els temps més durs i vaja creixent. Però no es tracta només de créixer, sinó de millorar, i esta és una oportunitat per a treballar en la excel·lència. Creu que l'essència de la festa fallera s'havia deixat de banda en els últims anys? No es tracta tant d'atraure més turistes, sinó de saber explicar al món que açò és un fenomen cultural. El reconeixement de la UNESCO ens permet articular estratègies culturals i aprofitar la festa per a crear. Les Falles són una part molt determi-
Un dels seus reptes com a màxim responsable de les Falles era el d'aconseguir obrir la festa fallera a a tots els ciutadans de la ciutat. Creu que aquest reconeixement farà que els valencians estimen, més si cap, la festa de les Falles? Confie que ha de ser així i crec que tots n'hem de prendre consciència; els primers els fallers i les falleres. Hem de ser conscients que tenim la responsabilitat de salvaguardar un tresor en comú, que compartim amb el global de la societat valenciana i ara també amb tota la humanitat. No podem mirar-nos el melic, hem de mirar-nos a l'espill i ser capaços d'obrir al màxim la ment per tal que aquesta feta siga percebuda com allò que és: una festa oberta que vol ser la festa gran de València.
Novembre 2016
10
Raquel Alario, Fallera Mayor de Valencia 2017 Como una chica sencilla, alegre y trabajadora. Así se define la Fallera Mayor de Valencia de 2017, Raquel Alario. Dice luchar por alcanzar sus sueños. Por el momento uno de ellos ya lo ha conseguido,
ser la máxima representante de las fiestas josefinas. Lo ha logrado en un año muy especial, el primero después de que las Fallas se hayan conviertido en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
«Las Fallas son un claro reflejo de nuestra cultura y tradiciones» Texto: Ivana Villar Fotografia: CIPRIANO FORNAS
¿Cómo piensa que debe ser una FMV? Una Fallera Mayor de Valencia debe ser una chica con una ilusión muy grande por entregarse en cuerpo y alma a la fiesta y que no pierda en ningún momento esa ilusión porque es todo un privilegio. Es el máximo exponente de las Fallas, y por lo tanto, debe volcarse con los falleros y todas aquellas personas que le demuestren su cariño y tener en todo momento los pies en la tierra. Por último, una FMV no está sola sino que comparte ese año con 12 amigas y por ello considero imprescindible la capacidad de crear buen ambiente y formar un buen grupo.
*«El monumento es la base de nuestra fiesta, es un elemento vivo y como tal evoluciona. Es esencial apostar por él»
¿Cree que las Fallas se merecen el reconocimiento de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad? Las Fallas son una fiesta muy rica que reúne todos aquellos elementos que la hacen merecedora de dicho reconocimiento. Son un claro reflejo de nuestra cultura y nuestras tradiciones, una fiesta que
*«La indumentaria valenciana es un reflejo de la que existía en los siglos XVIII y XIX. Tradición y modernidad pueden ir de la mano» va transmitiéndose de generación en generación y que permite mantener vivos oficios propios como el de los artistas falleros, pirotécnicos o indumentaristas entre otros. Es una fiesta solidaria e integradora que tiene la capacidad de unir a la sociedad con un mismo fin, hacer que las Fallas sean cada día mejores. Usted que ha vivido en el extranjero durante años, ¿cree que se conoce en el exterior la fiesta josefina? Se ha trabajado mucho para lograr que las Fallas sean conocidas a nivel internacional, aunque creo que es necesario continuar promocionándola para dar a conocer todos aquellos elementos que hacen que la fiesta sea única. ¿Qué acto de las Fallas destacaría? Más que un acto yo destacaría un día entero, el de la Crida. Es un día de muchas emociones en el que las ganas y la ilusión para que den comienzo las Fallas se desbordan. Tiene lugar la primera “despertà”, la primera “mascletà” y los falleros salen a la calle para celebrar y anunciarle a todo el mundo que empieza nuestra fiesta. Dentro de la semana fallera destacaría tanto la Ofrenda como la Cremà, porque aunque despiertan sentimientos completamente distintos, los dos días son muy emotivos.
* «Una Fallera Mayor de Valencia debe ser una chica con una ilusión muy grande por entregarse en cuerpo y alma a la fiesta»
Según ha comentado con anterioridad, es una amante de la indumentaria valenciana. ¿Cree que tradición y modernidad pueden ir de la mano? La indumentaria valenciana es un reflejo de aquella que existía en los siglos XVIII y XIX. En este sentido, si el término “moderni-
dad” se entiende como el proceso de evolución natural, creo que sí que pueden ir de la mano, siempre y cuando ésta sea respetuosa con la tradición. ¿Qué opina del monumento? ¿Le gusta la técnica de la vareta? El monumento es la base de nuestra fiesta, es un elemento vivo y como tal también evoluciona, ya sea en la técnica, las formas o los materiales y por ello creo que es esencial apostar por él. Desde mi punto de vista la vareta es una técnica que produce unos resultados espectaculares, con unos volúmenes y una precisión digna de admirar, tal y como hemos podido comprobar los últimos años en la falla municipal.
*«Más que un acto yo destacaría un día entero, el de la Crida. Es un día de muchas emociones e ilusión para que empiece la fiesta»
¿Cómo espera que sea su reinado en este año tan especial para la fiesta? Sencillamente espero que sea un año lleno de momentos inolvidables, poder vivir todos y cada uno de ellos de la manera más intensa posible junto a mi corte de honor y poder compartirlos con todo el mundo fallero.
Novembre 2016
12
Rubén Alfaro, presidente de la FVMP y alcalde de Elda Como una persona con muchas inquietudes por mejorar la calidad de vida de los vecinos. Así se define Rubén Alfaro, presidente de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP). Tras su elección por unanimidad en Asamblea General, el también alcalde de Elda, se puso al frente de la institución con la intención de “generar oportunidades para el empleo y la reactiva-
ción económica”. Señala convencido que “para atraer turismo hay que promocionarse”. Amante de las tradiciones y las fiestas de la Comunidad Valenciana, confesa que incluso ha desfilado con las comisiones falleras de su ciudad, Elda, y se muestra confiado de que “este reconocimiento supone un impulso turístico a nivel mundial para todas las poblaciones”.
«La catalogación es la mejor promoción para las Fallas» * «Felicito a toda la comunidad fallera y a las instituciones por la importante promoción que han hecho»
Ivana Villar València
Expectación máxima en el pueblo valenciano para saber el veredicto final. ¿Qué supone que la fiesta de Fallas sea reconocida Bien Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO? Este reconocimiento supone un impulso turístico a nivel mundial para todas las poblaciones de la Comunidad Valenciana que celebran fiestas de fallas. Para el devenir de la fiesta supone un momento histórico, y un impulso a lo que forma parte de nuestras raíces culturales. Contamos con experiencia… Así es, en la Comunitat tenemos experiencia porque ya forman parte de este selecto grupo el Misteri d'Elx, la fiesta de la Mare de Deu d'Algemesí o el Tribunal de las Aguas. Aprovecho para felicitar a toda la comunidad fallera y a las instituciones por la importante promoción que han hecho para intentar conseguir este reconocimiento. Como presidente de la FVMP me siento orgulloso, y he de decir que desde Elda también hemos contribuido a ello. ¿Cómo cree que repercute en la economía de la Comunidad Valenciana? Lo cierto es que la fiesta siempre genera muchos puestos de trabajo. Hay una gran industria alrededor de ella y en el caso de las Fallas, además de la indumentaria (textil, adornos, calzado, indumentaristas, comerciantes) están los artistas falleros, la pirotecnia, grupos de música, etc. Y, claro está, el sector hostelero, restauración, comercios, que los días clave de la fiesta josefina incrementan exponencialmente su actividad. Por eso tenemos que
* «Tenemos que estar abiertos a los visitantes, nacionales y extranjeros, para recibirles y ser buenos anfitriones»
estar abiertos a los visitantes, nacionales y extranjeros. Estar preparados para recibirles y ser buenos anfitriones. Usted afirma ser un apasionado de las tradiciones valencianas, y también conoce bien la fiesta de las Fallas... Así es, en Elda, mi ciudad, también tenemos fallas, que, como en otras poblaciones, convive en perfecta armonía con la fiesta de Moros y Cristianos, las fiestas patronales, la Semana Santa, etc.
Siempre he estado al lado de las comisiones falleras, y desde que soy alcalde me he comprometido todavía más, incluso he desfilado con ellos. Estos años he podido comprobar lo hermanadas que están las juntas falleras, aunque les separen muchos kilómetros de distancia. En la Ofrenda de este año han participado hasta trece comisiones festeras de otras poblaciones, incluidas la de Valencia y Alzira. En Elda tenemos la peculiaridad de que las fiestas de fallas se celebran en septiembre, por eso podemos
* «He podido comprobar lo hermanadas que están las juntas falleras, aunque las separen muchos kilómetros»
contar con falleros de otras poblaciones, ya que no coinciden. De esta manera se hace más grande nuestra fiesta, es una auténtica maravilla. ¿Cree que este nombramiento de la UNESCO repercutirá también en su ciudad?
Por supuesto, las fallas en Elda son un atractivo turístico muy importante, lo comprobamos cada año en Fitur, donde las Falleras Mayores nos acompañan. Este año además hemos realizado una promoción de Elda y sus fallas en Murcia. Durante un fin de semana realizamos pasacalles y montamos un stand en el centro de esa ciudad con indumentaria, ninots y paneles informativos que tuvo muy buena aceptación. Además, nuestra oficina de turismo comprueba que cada año son más los visitantes de la provincia de Murcia que se acercan a ver la fiesta de las Fallas. Estamos muy cerca y allí no existe esta fiesta, por lo que llama mucho la atención. También pienso que para atraer turismo hay que promocionarse y por ello la catalogación de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad es la mejor promoción que se puede hacer a las Fallas.
Novembre 2016
13
Xavier Rius, diputat de Cultura de la província de València El reconeixement de les Falles com a Patrimoni de la Humanitat no ha de ser el final d’un llarg camí inciat ara fa cinc anys, sinó el primer pas per tal que la societat valenciana puga posar en valor la seua rica tradició, que té en elements com ara l’artesania, el foc, la música o la indumentària, una mostra tangible del seu incalculabe valor. Això al menys és el
que pensa el diputat de Cultura de la província de València, Xavier Rius, que aposta per potenciar una rica tradició cultural pròpia que ara, a més, compta amb un nou argument al seu favor. L’objectiu no ha de ser un altre que el de donar a conéixer una realitat que es manté ben viva a pobles i ciutats, i que fins ara no s’havia sabut vendre com mereix.
«El reconeixement no és el final, sinó el tret de sortida» * Les Falles són una festa que ha nascut de la mà del poble i que també es manté viva gràcies al treball poble
Guillem Nicolàs València
Les Falles són una de les manifestacions festives i culturals més importants de totes les que se celebren a la Comunitat. Creu que el reconeixement com a Patrimoni de la Humanitat fa honor a la tradició que representa esta celebració? És obvi que en fa. No podem dir que la festa de les Falles, tal i com la coneixem hui, siga una festa que date del 1300, però és cert que és una tradició centenària, que ha nascut del poble i que ha sigut mantinguda també pel poble. Eixa característica la converteix en una festa única, allunyada d’aquelles celebracions que naixen al socaire de diverses empreses o conjuntures determinades. Com a tradició arrelada al poble i que ha perdurat en el temps, jo crec que sí, que respon als criteris que encaixen amb allò que entenem com a Patrimoni de la Humanitat. Fins a quin punt pensa que esta celebració manté encara la tradició artesanal valenciana, que va donar origen a les primeres Falles? És cert que la globalització i la modernització han fet que, en els últims temps, algunes Falles hagen optat per recórrer a alguns materials de construcció que no són estrictament els originals, però també n'hi ha d'altres que els mantenen com a una premissa d’identitat, no tan sols de la seua Falla, sinó de tota la festivitat. Eixa tradició no s'ha perdut encara i jo crec que anirà a més en els pròxims anys. Pense que les falles seran cada vegada més fidels a l'esperit del seu origen: la fusta, el cartró i fins i tot la tela. Creu que esta vessant més cultural de les Falles s'ha sabut preservar i fomentar adequadament en els últims anys? En els últims anys havíem entrat en una voràgine perillosa, en què els criteris economicistes havien afectat no solament als materials en què està fet el monument, sinó també a aspectes com per exemple la crítica fallera, que en lloc d'estar dedicada al propi barri, havia passat a centrarse en altres temes de més recorre-
pròpia. Un dels exemples és el de la música, que té ací un arrelament únic al món, però també en matèria de cultura festiva els valencians tenim molt a oferir i hem d'estar orgullosos d'això.
* El foc de cremar està present en incomptables manifestacions festives des de Morella fins a Oriola gut. Això ha vingut, precisament, en un intent d'apropar-se a una identitat més global, però crec que aquells que han sabut marcar bé el seu territori han sigut també recompensats per la ciutadania. Hui crec que eixa dinàmica s'ha aturat i que estem retornant a una visió de les falles que està més d'acord en el seu esperit original, la qual cosa pense que és molt interessant. Les institucions han de treballar per preservar la cultura i el patrimoni valencià, però la iniciativa ha de nàixer dels propis ciutadans. A més, la gent quan ens visita també vol conèixer allò més nostre i més característic del lloc on ve. De fet, en els últims anys, llevat de les falles amb els primers premis, la gent visitava totes estes falles alternatives i més tradicionals, fetes amb pocs diners però que oferixen una crítica realment àcida i arrelada al seu entorn. De fet, les diferents festes que se celebren a la Comunitat són
una prova vivent de la llarga història d'un poble que celebra els seus rituals al carrer. Pensa que les festes en general i les falles en particular, representen adequadament l'essència del poble valencià? Pense que sí. De fet, elements com el foc, la cultura o l'humor estan presents en pràcticament totes les manifestacions festives del país. Estes festes són un reflex d'allò que és el poble, i si les Falles han tingut un arrelament tan gran en tota la província de València i fins i tot més enllà, és perquè uneixen molt bé estes tres característiques principals.
* En matèria de cultura festiva els valencians tenim molt a oferir i hem d’estar molt orgullosos d’això El foc i la música també estan presents en un bon nombre de celebracions a totes les comarques... Sí, i no només en les falles. En estos moments no es pot concebre cap festa al territori valencià que no tinga foc i música. El foc de cremar està present en incomptables
manifestacions festives des de Morella fins a Oriola, i la pirotècnia suposa transformar el foc en l'alegria de la festa. La música, d'altra banda, és un altre element vertebrador de tot el territori. Amb este reconeixement, el nombre de tradicions culturals pròpies amb este distintiu continua augmentant. Pensa que la rica tradició cultural valenciana s'ha sabut potenciar com un element distintiu en els últims anys? Pense que no, i l'exemple més clar està en l'únic patrimoni material reconegut per la UNESCO que tenim: la Llotja de la Seda de València. L'edifici no té cap distintiu que l'acredite com a tal, mentre que en altres ciutats anuncien els seus elements singulars des de kilòmetres de distància. Per això cal canviar les tendències i deixar d'estar en una continua despersonalització de la cultura valenciana. Cal reivindicar les nostres festes i tradicions perquè són un atractiu per a la gent de fora. És una forma de reafirmar-nos el sentiment d'autoestima. Fa falta molta feina en matèria de turisme i de promoció, perquè més enllà de cites com la “Tomatina” que contribueixen a la internacionalització, cal posar en valor la cultura valenciana més
Pensa que aquesta distinció que ara han rebut les Falles pot contribuir de forma positiva no només al seu desenvolupament futur, sinó també a donar a conèixer totes estes riques tradicions festives? El reconeixement no és el tret d'arribada. Per a mi el reconeixement és el tret de sortida. És a partir d'este moment quan la societat ha de donar el valor que cal a totes estes manifestacions immaterials. Les institucions han de fer la seua feina, però són els propis valencians els qui s'han d'implicar a l'hora d'explotar un valor que acaba de rebre el màxim reconeixement. Si realment la ciutadania ho assimila, amb el suport fins i tot del sector empresarial i de les institucions, serà quan podrem posar en valor el nostre patrimoni. Les associacions festeres valencianes juguen tenen un important paper social que va molt més enllà de la pròpia festa. Quina és la funció dels casals fallers a l'hora d'afavorir la cohesió de la societat valenciana? Jo era faller de l'Olivereta, una demarcació que podia arribar als 6.000 o 7.000 veïns en aquells anys, i arribàrem a ser un miler de festers. Eixa dada ens dóna una idea del poder les associacions festives, que són, sense cap dubte, un moviment únic arrelat al barri i que a més han sigut un element clau per a la cohesió i la integració social. Tots els anys teníem actes amb els nous habitants del barri, que s'unien a la falla en un intent de conèixer a la gent i la cultura pròpies.
Novembre 2016
14
L’Origen i l’essència de les Falles
Des de la cultura del foc fins al patró dels fusters Quan es va presentar a la UNESCO el dossier de candidatura per inscriure la festa de les Falles a la llista representativa del patrimoni cultural immaterial de la humanitat en l’any 2015, només en un apartat es feia referència sobre l'origen temporal de la festa, al situar el seu naixement al segle XVIII i la seua expansió, a meitat del segle XIX, a altres pobles. En l'expedient, queda clar que l'origen i evolució històrica de la festa de les Falles no era un factor determinant ni calia argumentar amb detall, ja que la candidatura hauria de demostrar, sobre tot, las vitalitat actual de la festa, la seua salvaguarda cap al futur i la implicació col.lectiva de molts dels actors socials que hi participen i donen suport.
Ricard Català Associació d’Estudis Fallers
n la declaració com a Bé d'Interés cultural immaterial de les Falles de 2012, un document que es va adjuntar a l'expedient de la UNESCO, podem trobar referències concretes sobre l’origen de la festa de les Falles i la seua evolució històrica, emmarcades en les pràctiques rituals de cremar ninots o encendre fogueres amb un caràcter simbòlic purificador que estan, a més, arrelades en la “vella cultura” del Carnestoltes i de les festes de carrer.
E
Esta visió trenca amb la teoria més dominant, que ha circulat des de les acaballes dels segle XIX, d'un origen gremial o corporatiu de la festa, des de l'època foral, assimilada al gremi de fusters i el seu patró Sant Josep, difosa, entre altres, pel Marqués de Cruïlles, Teodor Llorente i Morales San Martín; front a d’altres lletraferits, com Puig Torralba i Navarro Cabanes, que es
* La primera referència a l’origen de les Falles amb figures, correspon a la dama britànica Lady Holland
decantaven pel vincle amb el Carnestoltes i la mitja Quaresma, molt pròximes en la roda del calendari festiu. La qüestió de l'origen de les Falles ha suscitat moltes disquisicions des del moment del seu assentament al calendari festiu local i que podem rastrejar, a través del segle XX, en la premsa local i forànea, plasmada en una columna o secció que quasi mai ha faltat en els monogràfics o especials sobre Falles. Curiosament, la prestigiosa revista fallera Pensat i Fet, dedicava una secció a l’origen de les Falles, segons els diversos autors més reconeguts, des del primer número en l’any 1912 fins el 1917.A més, al llarg dels anys, no deixa d’aparèixer en la mateixa revista algun article sobre aquesta qüestió. No obstant això, no es pot afirmar res contundent ni aclaridor, a dia d’avui, sobre
Novembre 2016
15
* En 1851 una revista alemanya publicava una breu ressenya sobre les Falles de València sota l’epígraf ‘Curiositats’ l'origen de les Falles. Perquè, tal com afirmen els estudiosos de la festa, no disposem ni de testimonis ni de fonts documentals fidedignes, que puguen aportar la seua data de naixement o “partida fundacional”, ni el context nodridor que l’envolta. No serà fins la segona meitat del XIX, quan es farà més habitual accedir a cròniques i ressenyes sobre les Falles, ja que abans les informacions eren molt esporàdiques. A més, cal tenir en compte que es feien més fogueres amb fusta, deixalles i trastos vells, que construccions que hui identificaríem com a falles de cadafal, amb figures o ninots. De fet, la que podríem considerar com a primera referència sobre les falles amb figures, no correspon a cap cronista local o escriptor afamat de l’època.Tampoc hi ha cap gravat o pintura primerenca que represente allò que només era en els seus inicis un foc de vigília propi d'un trànsit estacional, i que formava part de la seqüència ritual de la festivitat de Sant Josep. En aquest cas, la història ens fa l’ullet, ja que hauria de ser una dama britànica d’alt llinatge i viatgera, ElizabethVassall, més coneguda per Lady Holland, la primera que ens aportara informació sobre les Falles amb figures, a partir del seu diari personal, datat en 1803, on queda enregistrada una breu ressenya, en la qual cita les figures de Venus i Bacus, condemnades a les flames, a més d’aportar la primera explicació escrita sobre l’origen de les falles, encara que molt fantasiosa. La informació va quedar amagada fins l'any 1911, quan es va editar el seu diari personal a Anglaterra i, per això, els historiadors de les Falles no en tenien cap constància. De fet, va ser rescatada no fa molt anys i incorporada a l'inventari de notícies sobre la festa. Un segon testimoni escrit sobre les Falles correspon a un altre insigne viatger molt afamat, el francés Alexandre Laborde, coetani de Lady Holland, que en un del seus llibres de viatges (1808), traduït a diferents idiomes i amb diverses edicions en successius anys, parla de les falles de Sant Josep, tot descrivint diversos monuments amb figures a mena de composició escènica o teatral. Però Laborde també donava compte d'una vessant que forma part de la pròpia essència de la festa: la capacitat de concurrència que ja suscitaven la Falles a principis del segle XIX, en un ambient de gatzara que es vivia la vespra de Sant Josep, quan la gent acudia a la festa des de tots els llocs, es barrejaven les diferents classes socials i no es parlava de res més que de Falles. Al remat, es tractava d’una nit fecunda en esdeveniments, que afavoria la llicència i les aventures. Es pot afirmar, per tant, que des del principi les Falles generaven una gran expectació entre la gent, que s’afanava en visitar els cadafals per contemplar, en places i carrers, tot allò que anava a posar-se en pública exposició d’una forma satírica i grotesca; però les masses també eren atretes per la màgia del
* Les festes de carrer, els altars de Sant Vicent i les Falles formaven part d'un corpus festiu referencial de la ciutat foc purificador i, sobretot, per la furtivitat de la nit: una reacció secular que ha perdurat al llarg del temps i que atorga, en conseqüència, el caràcter popular que caracteritza les Falles. Si avancem cap a la meitat del segle XIX, a través de les primeres ressenyes periodístiques que sobre les Falles van publicar l’any 1849 els diaris valencians com El Cid i El Diari Mercantil, i també altres publicacions de Madrid com El Heraldo, La Esperanza o La Patria, podem conèixer un costum prou arrelat a la ciutat de València al llarg del temps i que comportava una celebració de caràcter festiu que ja cridava l’atenció més enllà del cap i casal. Dos anys després, precisament, trobem la que es podria considerar com la primera notícia internacional sobre les Falles, en la revista il·lustrada alemanya Das Pfennig-Magazin für Belehrung und Unterhaltung de 1851, editada a Leipzig. La publicació contenia una breu ressenya informativa sobre les Falles de València, apareguda en una secció titulada amb l'epígraf "Mannigfaltiges", que es pot traduir com "Varietats", que incloïa també altres informacions curioses i singulars. En aquella època, la festa recordava el tribut que feien els fusters des de temps immemorial al seua patró, el patriarca Sant Josep, tal com queda descrit per l’anònim cronista del diari El Cid sobre les falles de 1850. Però la crònica també feia referència a la significació de les mateixes fogueres, descrites com uns cadafals sobre els quals es col·locaven algunes figures fetes de palla i adornades per fora, que tenien un destí indefugible: el foc purificador. L’acte festiu de les Falles, sembla que tornava a renàixer a meitat del segle XIX tal com es proclama en aquelles
primeres ressenyes dels diaris, després d’algun temps en què sembla que perillava la seua pervivència. Les cròniques periodístiques d'aquells anys, amb expressions més o menys grandiloqüents, parlen d'un desbordament, d'un furor de Falles (1849) o d'un ardor viscut per part de la gent (1850), no menor que l'any precedent, reforçant aquella imatge ja transmesa per Laborde sobre la gran expectació que despertaven entre la gent aquells cadafals que s’alçaven als carrers de la ciutat la vespra de Sant Josep. En altres cròniques d’aquells anys, es pot corroborar tot l’ambient festiu i de bullícia que es generava al voltant de les Falles, a l’hora que es destacava la seua vessant satírica i ritual, una altra part essencial que identifica històricament a les Falles, encara que, en l'actualitat, estiga més bé subordinada a l'estètica i composició monumental. Este sentit genuí de la falla com a crítica mordaç, utilitzant un llenguatge epigramàtic i fins i tot d'ajusticiament popular, el defensen de forma molt contundent alguns dels investigadors més rellevants de la festa de les Falles, els quals han aprofundit sobre la seua evolució, fent un anàlisi molt acurat sobre el trànsit des de la falla satírica a l'anomenada falla apologètica, es a dir, de lloança d'uns costums, personatges o formes de vida, amb un valor identitari. Les Falles es presentaven, per part de la premsa de l’època, com “autos de fe”, és a dir, una pràctica ritual que anava més enllà del fet lúdic i festiu d’encendre unes fogueres, per ultrapassar, cap a un foc purificador, com la representació ritual i simbòlica d’un “sacrifici mític”, molt vinculat a les societats agràries, que va derivar, amb el pas del temps, en sàtira i art. Encara que amb les seues peculiaritats, les Falles s’anaven impregnant del mateix caràcter festiu i popular que aquelles tradicionals “festes de carrer”, que s’estenien durant tot l'any pels barris de la ciutat, i també dels “altars o miracles de Sant Vicent”, dels quals adoptarà també la seua forma d'organització, amb un lligam espacialment integrador. Les festes de carrer, els altars de Sant Vicent i les Falles de la vespra
de Sant Josep formaven part d'un corpus festiu referencial de la ciutat de València, que ja en 1839 ens mostrava l'escriptor i articulista José de Vicente i Carabantes en un article sobre el caràcter i costums dels valencians. En conseqüència, tornant a l'origen de les falles, l'acumulació de ressenyes i notícies aparegudes al llarg del segle XIX, apunten a l'anomenada “teoria veïnal”, defensada en l'actualitat per molts dels estudiosos de la festa. Un d’ells és Antoni Ariño, que en 1992 ja relacionava l’origen de les Falles amb una pràctica ritual organitzada i celebrada per les classes populars, donat el caràcter territorial de l’organització fallera, on el gremi de fusters no actuava de manera corporativa, sinó que més bé els fusters i ebenistes ajudaven en la construcció dels cadafals a les places i carrers de la ciutat de València. De tota manera, per acabar, la pregunta clau sobre la festa de les Falles no seria tant sobre el seu origen, sinó a En la pàgina anterior, dalt, el foc comença a devorar un dels monuments que actualemnt es planten als carrers de València. Foto: Cipriano Fornas. A l’esquerra, baix, una imatge de la Falla del carrer Maldonado de 1889. Foto: Derrey. En esta pàgina, dalt, el monument plantat a la plaça Pellicer en 1932; i la plantà de la Falla plaça del Caudillo en 1967. Fotos: Col.lecció Rafael Solaz. En la part inferior, una imatge de la que es considera la primera representació gràfica d’una Falla.A la dreta, un cartell de 1870 que inclou el que està considerat com el bocet faller més antic
propòsit de com un festeig marginal en el calendari festiu local, ha passat a convertir-se en la festa major de la ciutat de València i de molts pobles valencians. Ricard Català Gorgues Membre de l'Associació d'Estudis Fallers Autor del blog:“De la festa, la vespra...”
Novembre 2016
16
El Ninot El ninot faller ha sigut, des dels orígens de la festa en ple segle XIX, un dels elements més reconeguts d’una tradició que, si bé ha anat evolucionant al llarg dels anys, conserva encara l’essència pròpia de la seua forma de ser. De fet, a pesar de l’evident canvi que els ninots han viscut en els últims temps, el seu signific continua sent el mateix, el de donar forma a una expressió artística a través de la qual els valencians mostren la seua forma de ser. Així, des de les primeres figures fetes amb un esquelet de fusta i revestides amb màscares i roba vella, fins a les estilitzades formes plenes de color que cada any s’alcen al cel de València, solament cap trobar una diferència tècnica que permet als artistes mostrar tot el seu talent a partir de fer servir les últimes tècniques de construcció; però la història que conten, això sí, continua invariable. Gegants, bruixes, personatges de fantasia i fins i tot alguns personatges de l’escena política dels diferents temps han tingut i continuen tenint encara la seua particular versió fallera, una imitació que, tal i com marca la tradició, acabarà al foc purificador de la nit de Sant Josep.
Novembre 2016
17
Reportatge grĂ fico de
CipRiano FoRnas
Novembre 2016
18
L’evolució tèncica del ninot de Falla
Espantalls fets a mida il·lustren una festa de barri Els ninots han evolucionat de les formes articulades a les figures de suro blanc altament tecnificades No resulta fàcil establir, en poques línies, un recorregut exacte per les tècniques i materials que els artistes fallers han fet servir al llarg dels anys. És cert que d’una manera genèrica és possible sistematitzar els processos creatius més habituals que han marcat el model productiu de cada moment. Però a pesar d’estos procediments comuns, cada artista, cada taller i cada escola es vinculava a un estil que acabava
Text: Toni Colomina Associació d’Estudis Fallers
’origen del ninot de falla ve tradicionalment relacionat amb narracions que estan més pròximes a la llegenda romàntica que a la crònica documentada. Queda clar que germina en el context d’eixes fogueres de celebració que sorgixen en el nostre territori des de temps immemorables i que, encara que amb intencionalitats diverses, incorporen conceptes més o menys abstractes relacionats amb la purificació i la transformació.
L
En algun moment eixe amuntegament indefinit de fustes i terregalls inservibles que suposava la foguera de renovació, com una estructura indeterminada, va acabar per concretar-se en contingut i forma. Una de les teories més estesa al·ludix als cresols que els fusters feien servir durant els mesos d’hivern i que penjaven sobre una estructura de fusta. Amb l’arribada del bon temps i a l’allargar les hores de sol, estos esquelets eren cremats coincidint amb el canvi estacional i la celebració del sant patró del gremi de fusters. Amb el temps, el fanal de taller reconvertit en combustible per a falla acabaria per adquirir un aspecte figuratiu. I d’esta manera, la imprecisió formal del foc primitiu donaria pas a la concreció i a la personificació de tipus teatral. No obstant això, l’atractiva credibilitat d’esta teoria, no és tant el protagonisme que la història deu als fusters com la importància que hem d’atorgar a altres ingredients com l’associacionisme veïnal. La participació popular en el desenvolupament d’este tipus de representacions pareix estar més en consonància amb eixe caràcter obert i pròxim de l’actual festa fallera.
per marcar l’ús d’uns o altres materials i la seua manera de treballar-los. Considerant estes limitacions, una aproximació encertada convindria referències que partirien del ninot articulat, faltat de traça, fins a arribar a la figura de suro blanc altament tecnificada. I entre l’un i l’altre extrem, les carnacions de cera i els tipus de cartó pedra concorrerien com les realitats tecnològiques més característiques.
En tot cas, la pira ígnia començava a incorporar escultures efímeres que en un inici respondrien a una complexió desmanotada. Estos primers ninots, a manera de toscos espantalls, es confeccionarien a partir d’una senzilla estructura interior de fusta, sobre la qual es concertaven els volums principals amb teles, papers i palla. Una simple màscara de cartó, com les utilitzades per a la festa de Carnestoltes, serviria per a caracteritzar a la figura i una cartel·la al·lusiva a algun assumpte del barri acabaria per contextualitzar-la i dotar-la d’un significat crític i satíric. Prompte l’amuntegament de troncs que es distribuïa als peus del ninot primitiu també va mudar la seua fisonomia i es va transformar en una estructura ordenada, un taulat que acabarà per proporcionar-li a la figura protagonista un espai escènic adequat. A més, els panys d’este cadafal valdrien com a suport on pintar al·lusions al·legòriques i altres decoracions, alhora que servien com a mur sobre el qual inserir algunes estrofes explicatives o comentaris raonats sobre l’assumpte de la falla. L’evolució lògica va fer que guanyara en magnificència i la quantitat de ninots i d’escenes anaren multiplicant-se al mateix ritme que s’articulaven altres elements compositius que dotaven al conjunt d’una major grandiositat. Esta complexitat en la distribució de les peces, amb uns ambients que es disposaven al voltant de nous mòduls centrals i rematades, va córrer parella al desenvolupament de noves tècniques que van refinar els processos creatius. Amb el temps, les màscares de cartó van ser substituïdes per models de cera, de manera que des de mitjans del segle XIX les figures comencen a adquirir una naturalitat inèdita fins aleshores. Se li atribuïx a l’artista Antonio Cortina el mèrit d’introduir en el món faller la tècnica ceroplàstica, amb antecedents clarament vinculats a la tradició ita-
* Els primers ninots, a manera de toscos espantalls, es van confeccionar a partir d’una senzilla estructura de fusta
liana des de temps del florentí quatrecentista Andrea del Verrocchio. Eixe nou ofici que començava a definir-se, dedicat a la creació de figures satíriques per a la seua consumpció ígnia, es va impregnar de materials i processos que venien emprant-se en altres àmbits de la cultura popular, en les representacions festives provinents del barroc efímer i en la tradició joguetera. En concret, la tècnica de reproducció amb cartó pedra es va encimbellar com el recurs fonamental a través del qual els artesans van ser capaços d’articular imatges de vestir amb major sofisticació. Durant la primera mitat del segle XX, la cera i el cartó van conviure per a modular figures que resultaven de l’adaptació de diverses peces exemptes. Els antics esquelets de fustes i farciments de diversa procedència van deixar pas a l’organització més ordenada de braços, cames i cossos emmotllats amb cartó, que es
* Les màscares de cartó van ser substituïdes per models de cera que conferien als ninots naturalitat inèdita fins aleshores
vestien literalment amb posterioritat. Caps i mans continuaven reco-
rrent a la cera policromada amb subtils veladures a l’oli com a material que atorgava una calidesa molt d’acord amb la veracitat que l’estètica fallera de l’època demandava. La professionalització de l’artífex faller anava en augment i el virtuosisme que es va desenvolupar amb la competitivitat artística també va comportar la recerca de noves fórmules que afavoriren la productivitat i la rendibilitat de la indústria creativa. En la dècada dels anys cinquanta el modelatge íntegre en
Novembre 2016
19
Manuel Muñoz Ibáñez Presidente de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos
La fiesta de las Fallas en la Cultura Universal
H
aber conseguido estar incluidas en la “Lista representativa del patrimonio inmaterial de la humanidad”, es para las Fallas de Valencia un hito sumamente importante habida cuenta de que también se hallan introducidas en ella el Tribunal de las Aguas, las fiestas de la Virgen de la Salud de Algemesí, y el Misteri d´Elx; convirtiéndose así, la nuestra, en la comunidad autónoma con mayores reconocimientos, como reflejo del arraigo de elementos constitutivos de nuestro patrimonio compatibles con el respeto a los derechos del hombre, a la jurisdicción internacional y a la convivencia colectiva; contribuyendo desde vertientes completamente distintas, a infundir un sentimiento propio de identidad y de continuidad, a través de nuestra simultánea aportación a la creatividad humana.
* Algunes de les tendències actuals passen per reivindicar la involució i la recuperació de l’ofici tradicional
A diferencia de lo que sucede con los componentes considerados como “Patrimonio de la Humanidad”, relativos, en general, a monumentos o elementos naturales, el patrimonio inmaterial es recreado constantemente por las comunidades a las que pertenece, adaptándose en cada circunstancia para continuar vigente, sin llegar a contaminarse, ni a perder sus orígenes o sus partes esenciales. Pero, en este caso concurren un cúmulo de factores que lo enriquecen más si cabe, permitiendo incluir en él, además de la participación masiva, infinidad de variables artesanas, la lengua, la música, la crítica social o la literatura.
cartó pedra va acabar per imposarse i la confecció del ninot a base de diferents peces que s’engranaven i vestien com una imatge de candeler va anar abandonant-se amb rapidesa.
Sin embargo, a mi juicio, no debemos considerar semejante distinción sólo como un acicate para intereses tangenciales -aunque importantescomo la economía, o el turismo; sino como atributos dedicados a la festividad en sí, para continuar protegiéndola de sobreañadidos precipitados o ajenos, permitiéndola crecer por encima de los tiempos a través de una independencia popular insumisa a cualquier intento de intromisión impropia, manteniéndose al margen de las ideologías, con éxitos tan logrados como hibridar su vertiente más religiosa con un conjunto de desfiles preciosistas, compatibles también con las tradiciones laicas.
Artistes com Juan Huerta van ser dels primers que van acudir a la reproducció total i múltiple del ninot de falla, un procediment que s’instal·laria durant tota la segona mitat del segle XX. L’intercanvi de peces entre els diferents tallers i l’aparició de la còpia reinterpretada de la figura extreta d’un mateix motle configuraria un peculiar sistema de mercantilisme.
Es la pervivencia de esa libertad mediterránea y hedonista lo que ha permitido llegar a este punto culminante, convertido hoy en hito histórico, pero vértice del futuro, como un señuelo en el que progresar. Las Fallas aún tienen un largo recorrido por delante: pueden acentuar su vertiente satírica, compatible con su recreación monumental; deben estimular la creación musical para que no sea repetitiva y uniforme; les corresponde procurar incluir en su elaboración, materiales cada vez más ecológicos, evitando cualquier contaminación indeseable; y dada su enorme implantación, disfrutan de potencial para favorecer la integración social de colectivos emigrantes.
També els materials sintètics s’havien anat incorporant gradualment a les prestatgeries dels obradors de manera que, on abans abundava la cola forta de fuster i la clàssica pintura a l’oli, ara l’artista trobava nous productes com la cola blanca i els colors plàstics.
Si todo salió bien, es porque también sabemos cómo construir nuestro futuro.
El suport artístic, com a ànima material del ninot càustic, també va acabar sucumbint a la tecnificació. La resina de polièster i la fibra de vidre van començar a tindre els seus adeptes i més tard, el suro blanc, que s’havia introduït en els tallers per a la realització de xicotets detalls i complements escenogràfics, va acaparar tot el protagonisme en detriment del cartó pedra emmotllat. La talla directa que possibilitava el suro, lleuger i versàtil, acurtava el temps de producció i, en pocs anys, el taller faller va fer seu tot un repertori de ferramentes que va saber adaptar per tal de treballar amb el nou material. I com tot passa i tot arriba, els avanços tecnològics relacionats amb els sistemes informatitzats no tardarien a manifestar-se i les connotacions artesanals van acabar per adoptar vincles més pròxims al disseny de producte. Però a pesar d’este itinera-
ri, cal dir que algunes de les tendències actuals passen per reivindicar la involució i pareixen anar encaminades, considerant termes afins a la sostenibilitat i a la recuperació de l’ofici tradicional, a fer l’ullet al passat per a brindar una progressió harmònica.
A dalt, el taller de l’artista Manolo Garcia durant la construcció de la Falla municipal de 2016. Cipriano Fornas. A continuació, tres imatges dels motlles utilitzats per a la fabricació dels ninots. Toni Colomina. A la dreta, una mostra de l’intens treball que fan els artistes als seus taller. Cipriano Fornas.
Novembre 2016
20 Regional de 1909), llamada Couetera; y la tercera y última etapa (desde 1914 hasta la época actual), llamada Pirotecnia. Así pues, tendremos la traca comienza desde Felipe V, el que cuelga boca abajo en Xàtiva, quien nunca imaginaría que sus decisiones propiciarían el nacimiento de la traca valenciana.
Del tradicional «Trams de Tro» a la Mascletà actual Olor a pólvora, color y fuertes ruidos rítmicos, además del querido estruendo o “terratrémol”, aquel que llena de emoción y consigue arrancar cientos de aplausos en su final. Así podríamos definir lo que hoy en día se vive en la plaza del Ayuntamiento de Valencia: la Mascletà. Querida por todo valenciano y parte indispensable de la fiesta fallera, es sin duda una cita obligada no solo durante la semana fallera, sino durante todo el mes de marzo, tanto para todos aquellos turistas que visitan las fallas, como para aquellos que, cada año, esperan con ilusión llenar la plaza y los alrededores para rendirse al “Mestre Traca”. TEXTO: RUBÉN TAPIAS Fotografía: CIPRIANO FORNAS y Archivo ValenciaBonita
i fuéramos preguntando a cualquier persona por la calle que nos explicara “¿qué es una Mascletà?”, bien seguro que la gran mayoría nos daría como respuesta lo dicho junto con algún sentimiento de emoción. Pero la realidad es que muy pocos saben que lo que se vive hoy en día en la plaza no es originariamente una “Mascletà”, pues en principio no deberían de ser simples espectadores, sino también partícipes. Esto bien lo saben “els Mestres Traca”, que prefieren llamar a lo actual simplemente “pirotecnia”.
S
Podría decirse que, el origen de la actual Mascletà en Valencia, se ubica en los años 40 del siglo pasado en tiempos de posguerra. Hasta 1944, se disparaba durante la semana fallera, del 13 al 19 (aproximadamente) al mediodía, una “traca” que solía recorrer numerosas calles. Fue al año siguiente, 1945, cuando se da el origen de la primera Mascletà de la historia en Valencia capital tal y como la conocemos hoy. Aquel día, un 11 de marzo de 1945 a las 13:00 horas, disparó un tal Antonio Caballer, de Moncada, de ilustre apellido. Eran tiempos difíciles, sin duda. Cabe destacar que esta primera Mascletà nace por querer concentrar la disparada en la actual plaza del Ayuntamiento como
ya se vive en localidades como Godella o Burjassot, entre otras. Hasta entonces, era común que en Valencia los hombres corrieran bajo una hilera de “Trams de Tro”, como si acompañaran el disparo de “la traca” siendo partícipes y no simples espectadores como ahora. Se le conoce erróneamente en la historia, como “traca correguda” o “corre traca”, cuando en realidad es una “Mascletà de Trams de Tro”. Viajemos en el tiempo para comprender qué es lo que originó aquella explosión de sonido, pólvora y “sentiment” que hoy en día podemos disfrutar: la Mascletà actual, o pirotecnia para los puristas. La traca valenciana tiene su origen en el siglo XVIII (170714) y teniendo como referencia la batalla de Almansa tras la que el primer Borbón tomó medida en muchos sectores contra Valencia. A partir de 1714, se desmantela la antigua fábrica de armas del Reino de Valencia, donde todas las “bombardas”, entre otros instrumentos de guerra, fueron vendidos a herreros de poblaciones cercanas para fundirlas principalmente en lugares de canteras; y por otro, tal y como puede verse en la actualidad, quedando la manipulación de la pólvora como forma de vida en algunos casos. Hablamos de Godella, Bétera, Paterna o Burjassot, entre otras poblaciones cercanas. Justamente en esta última se tiene noticia del disparo desde muy antiguo sobre “els sitges” (los llamados “Silos de Burjassot”). También hay que diferenciar diversas épocas en la traca valenciana, y así podríamos llamar como primera etapa (desde los años 1714 al 1814) llamada época Traca; la segunda etapa (desde 1814 hasta los años 1907-14, influenciada por la Exposición
únicos que saben cargarlas y darles sentido y seguridad, además de armonía y ritmo. Solo cuando en acompañamiento son disparadas tras varias cargas, se le llama entonces disparar traca; y donde se cargue ésta última, la Canterella, se le da un nombre u otro: si se carga en salva, es Mascle, disparado por hombres; si se carga en aleluyas, Femella, disparado por mujeres.
De las bombas a “les traques” Nombres que recibe la traca según Cuando los herreros compran aquellos quien la dispare: si lo hacen las mujeres, cañones, entre otras las bombardas que con Canterella Femella, será disparà se situaban en la antigua muralla de Femella o Femellà; y si lo hacen los Valencia, muchos de estos artefactos se hombres, con Canterella Mascle, se dice salvan de ser disparà Mascle, o fundidos, pasanMascletà, nombre * La desaparición de do a manos de de lo que hoy los “traquers”, conocemos. Tamlas fábricas de armas quienes bautibién se dice “dispadespués de la batalla zan las bombarrà de traca” a todo das con un el conjunto de fuede Almansa podría nombre que a gos cargados con ser uno de sus muchos piropólvora incluso a técnicos de hoy las tracas cargadas orígenes. en día les sonacon disparo final de rá: “Canterella” Canterella Mascle, o “Cantarella”, debido a que cuando por el nombre de Masclets; y a las traca son disparadas, “cantan”. cargadas con disparo final de Canterella Femella, Femelletes. Las “Canterella” son disparadas, de manera habitual, tanto a las puertas de Las formas de dispararse alquerías y casas, como en las fiestas de Pero la Mascletà en época Traca y en la los pueblos, así como en las canteras, segunda Coutera, mantiene diversas lugar donde se considera a los “pedrapiformas de dispararse, como pueden ser quers” como los maestros traca en orila “Escampà”, “Engraellà” o “Eixargen. Pues son estos, “els traquers”, los mentà”, todas disparadas con la traca
Novembre 2016 clavada en el suelo y con ciertas variaciones cada una de ellas. Son decenas las formas y nombres que comprenden el vocabulario de la traca valenciana, así como sus variaciones, aunque todas ellas, en referencia a la Mascletà, con un mismo patrón: son todas después de las misas mayores de las fiestas patronales de todos los pueblos valencianos, a las puertas de las iglesias y de las ermitas, donde se plantaban en el suelo las tracas que se podían permitir el pago en dinero, para ser disparadas en “Toc Deu”.
21 fecha, titulado “Mascletà”, en el IVAM.
Sobre los rituales que se seguían, y que algunos siguen, son numerosas las acciones que el actual pirotécnico debe de realizar durante la Mascletà, siendo una de ellas, por ejemplo, la “Rechimentà” (acción de montar un fuego, armonizarlo, prepararlo), considerado como un acto sagrado, donde su fuego origen y de inicio debe de ser también tomado de un lugar sagrado, conocido como sagrario (ya hemos dicho: lugar santo de una iglesia, de las antiguas lucernas o antiguas lámparas, siendo hoy el cirio princi* El Mestre de Traca, pal que representa con un «puc», pide a Dios en Altar permiso al «Vell», quien Mayor).
Cuando éstas no se podían iniciar cerca de la iglesia, tomaban igualmente el fuego (para iniciar) del le da autorización para sagrario (lugar Una de las cosdonde está el tumbres también comenzar la mascletà altar mayor o que hoy conocecon un «pots» lugar más sagramos es el llamado do de la iglesia), “avís” (aviso), que donde se prenno es otra cosa que día la mecha para encender el disparo los tres disparos justo antes de comenzar de la traca. la Mascletà. El origen de estos disparos son los llamados “Tro Toc”, que eran Es cuando aparece el “Tro de mecha”, tres antes de comenzar los fuegos; los surgen nuevas formas de disparo, como que fuesen necesarios durante estos; y son “en Parva” (donde el Tro se encientres al final (puede que os suene la comde uno a uno y a mano, siendo lanzado posición actual, tres avisos antes de para que explote) o en “Trams de empezar, la Mascletà y los tres finales Troms”, cuando el Tro se ata por la para darla por concluida). mecha a una media caña que hace de mecha “Mare”, siendo la media caña la Tampoco era normal el silbar antes del que reciba el nombre de “Trams de comienzo (cosa muy común hoy en día Trons”. Se da la circunstancia de que las antes de aproximarse las 14:00 horas más comunes durante el siglo XIX son como muestra de impaciencia), pues “en Parva” o “Abalconats” (la propia por entonces al “Mestre Traca” se le respalabra lo dice). petaba antes de su comienzo, cuando los “Tro Toc” de inicio podrían comenSon maneras propias de poblaciones, y zar, incluso, una hora antes, espaciados modos poco o nada conocidos en de forma normal en tiempo aproximaValencia capital hasta finales del siglo do de 15 minutos (hoy impensable para XIX, donde aparecen de forma tímida muchos). las de “Trams de Tro” primero en el antiguo cauce del Turia y más tarde por Tampoco se conocía, por entonces, esa las calles, ya con las murallas derribadas. costumbre de “Senyor pirotècnic, pot començar la Mascletà”, quien, como Es este nombre, el de “Trams de Tro” el norma general, hoy en día la orden la da que puede que os suene con otro muy la Fallera Mayor de Valencia. Iniciada en conocido, el cual distorsiona la historia: tiempos actuales, desde que fuera alcaltraca correguda o corre-traca. desa Rita Barberá, desvirtúa en origen el “permís al Vell”, pues es aquel quien Impensable hoy para muchos la imagen como “Mestre de Traca”, jubilado y de correr en ella, aunque en algunos sabedor de todos los ritos traca, da perlugares, muy pocos, se sigue disparando miso al pirotécnico. ¿Qué cómo? Pues este tipo de Mascletà, tanto la de “Trams es el pirotécnico, bajo la pregunta diride Tro” como la “Engraellà”. gida al Vell de “puc?”, siendo éste el que le autoriza con un “pots”, pudiendo Durante las fallas 2016, se disparó una incluso suspenderse la Mascletà si el Vell pequeña Mascletà de “Trams de Tro” en lo considera oportuno, cosa que se ha la plaza del Ayuntamiento de Valencia, llegado a producir en la historia. aunque ni tomó fuego del sagrario ni la gente se animó mucho a correr bajo Así que la próxima vez que acudáis a ella, además de ser llamada “traca correuna Mascletà, dirigid vuestra mirada, si guda” seguramente por ignorancia o estáis cerca, a la plaza, donde está monpor un cierto temor y prudencia.Y ello tada. Quizás tengáis la suerte, si los piroa pesar de que es evidente que el Tro no técnicos son fieles, de poder ver aquello es peligroso. Tendríamos que afirmar de iniciarse el fuego con algo encendique la diferencia entre mascletà y pirodo desde un sagrario (quien sabe) tecnia es justamente el grado de pelidejando a un lado tanta electrónica y grosidad. Cuando el fuego es peligroso programación pirotécnica, y a un vell y da miedo (la actual Mascletà), deja de “donant permís” al “Mestre Traquer” ser Mascletà y se convierte en piroteccon un “pots”. Puede que, tras esta nia. explicación, veáis la Mascletà desde otro punto de vista, desde sus orígenes. Para ilustrar todo lo mencionado aquí, podemos acercarnos a la historia con Por cierto, a lo que comúnmente se le decenas de fotografías o postales antillama “castillo de fuegos artificiales”, se guas de Valencia, además de un precioso ha conocido siempre como “Nuvolà”, cuadro que puede verse en el Palacio nunca como castillo, disparado en del Marqués de Dos Aguas. Este cuadro, “Canterella de madera” y de normal titulado “Disparà de la traca en Burchapor la noche, entre otras características, sot”, es obra de Salvador Constantino con las mismas pautas que una MascleGómez, realizado a finales del siglo XIX tà. donde refleja una “Mascletà Engraella”, así como también podemos encontrar Pero esa, queridos amigos, esa es otra hisotro cuadro de Ignacio Pinazo, sin toria que da para muchas más líneas….
A la iquierda, dos imágenes de la mascletà actual, de Cipriano Fornas, junto a una foto de la traca antigua, en la Plaza de la Virgen, conocida comoTrams de Tro o traca correguda, y aquí arriba una postal del archivo BV. José Huguet donde se advierte la forma antigua de la hoy mascletà. Arriba Mascletà de José Pimazo (IVAM), sin fecha.
Novembre 2016
22
Falles i pirotència
Un lligam segellat a foc *La despertà ha quedat com a únic element de subversió pactada de la festa. El seu protagonista és el tro de bac
Molt diferents són els castells que amenitzen les nits de la festa, on es posen en joc emocions menys complexes i prima el component estètic i la creativitat del pirotècnic per a combinar formes i colors. L’evolució de la festa ha volgut posar l’èmfasi en el castell que es dispara la vespra del 19. Aquest castell rep el nom honorífic de “nit de foc” i el dispara sempre alguna de les principals empreses pirotècniques del país — que aprofita per exhibir el seu millor catàleg de troballes estètiques.
Text: Josep Vicent Frechina Fotografia: CIPRIANO FORNAS
alència, plaça de l’Ajuntament. Un migdia qualsevol entre l’1 i el 19 de març. Un foraster contempla atònit un espectacle sonor que no acaba de desxifrar, mentre la gent del seu voltant sembla extasiada pel soroll que admira amb els músculs tibants i els ulls plorosos. I quan més s’acosta l’estrèpit al llindar del dolor, més intenses semblen les emocions que acaben concorrent en un crit unànime de felicitat i aprovació. El foraster demana explicacions, i l’entusiasme amb què la gent l’informa de la seua fascinació per aquell desgavell de trons i fum, afegeix un element incomprensible més a la llarga rastrera que arrossega des que aterrà a València per conéixer la festa de les Falles: delirants i costossísims monuments destinats al foc, milers de músics desfilant tot el dia pel carrer i superposant despreocupadament les melodies que interpreten i ara, per acabar-ho de rematar, una multitud congregada per sotmetre les seues oïdes a una inquietant prova d’estrés.
V
Convertida en l’element central del calendari festiu faller -durant la pri-
Finalment, la despertà ha quedat com a únic element de subversió pactada de la festa. El seu protagonista és un artefacte pirotècnic anomenat tro de bac que la normativa de seguretat ha situat contra les cordes: durant molt de temps, l’any faller s’inaugurava oficiosament amb la publicació al BOP de la pròrroga de l’autorització per a la seua fabricació. Ara, des que entrà en vigor el nou Reglament de Pirotècnia i Cartutxeria és necessari fer un curset de CRE -Consumidor Reconegut com a Expert- per a poder ferne ús, i només una indústria pirotècnica els continua fabricant.
mera quinzena de març el temps i l’espai de la ciutat giren al seu voltant-, la mascletà és la prova més fefaent del progressiu maridatge entre la festa de les Falles i la pirotècnia. Això no ha sigut sempre així. Cap de les cròniques que descriuen la festa durant el segle XIX li atribueix cap importància. Només quan les falles comencen a convertir-se en la festa total que ara coneixem, la pirotècnia hi assumeix un paper protagonista, fonamental i definitivament orgànic en la seqüència festiva fallera. Les primeres notícies d’usos pirotècnics en la festa es refereixen al mecanisme amb què algunes falles se solien prendre foc: un aparell, sovint en forma de dragó, que carregat de coets i corrent per un fil d’aram li botava foc al monument.A mesura que augmentava el caràcter organitzat de la festa, amb la seua extensió pels diferents barris de la ciutat i l’aparició de comissions formalitzades, la seqüència festiva començà a desbordar els seus límits originals -definits bàsicament per la plantà de la matinada del 18 de març i la cremà del cadafal per la nit- i, ja en les primeres dècades del segle XX, s’hi integren nous rituals provinents del model festiu general -despertà, mascletà, nit de foc- que s’hi consolidaran definitivament amb la creació de la Setmana Fallera el 1932 i la tàcita acceptació de les Falles com a festa major de la ciutat.
La mascletà, com el seu nom encara indica, consistia en un principi en una disparada de masclets que es podia fer d’un en un o units, mitjançant reguers de pólvora, primer, i estopí, més tard, tot seguint una estructura anomenada engraellat. Amb l’inici de l’ús del paper i el cartró per a la fabricació d’artefactes pirotècnics, l’engraellat és desplaçat per la disparà: traques llarguíssimes que recorrien bona part dels carrers de cada demarcació fallera, en un clar subratllat simbòlic del territori festiu. En ocasions la traca acabava amb una disparada de rastreres de trons, eixides i carcasses que, a poc a poc, anà guanyant protagonisme fins a furtar-li’l
completament a la traca i convertirse en la mascletà actual, elevada a una certa condició artística i definitivament ritualitzada. La transformació de la mascletà en ritual afecta tant a la pròpia disparada -articulada en un inici ornamentat, una fase terrestre d’intensitat creixent i, com a colofó, un “terratrèmol” i un paroxístic final aeri- com als prolegòmens i la reacció final del públic: la frase amb què la fallera major autoritza el seu inici, “Senyor pirotècnic, pot començar la mascletà”, és, sens dubte, una de les grans icones de la festa; i l’aclamació del pirotècnic responsable per banda del públic que salta el primer cordó de seguretat, ha deixat de ser una celebració espontània per acabar constituint el desenllaç forçós del ritual.
Sobta una mica, però, l’aparent aplicació de la normativa en el cas de les despertades i la tolerància demostrada davant l’auge imparable de la disparada indiscriminada, espontània i altament participativa de petards i diversos artefactes pirotècnics de fabricació xinesa, alguns de considerable sofisticació, durant les setmanes prèvies a la festa. Una mena de gamberrisme ritual associat a l’excepció festiva que ha trobat refugi en el nivell de permissivitat aconseguit per la festa fallera i el seu estret lligam amb la pirotècnia. Un lligam que explica també el ràpid èxit assolit amb la introducció del correfoc dins de la recuperada cavalcada de foc que té lloc pel centre de València durant la vesprada del dia 19. Fins allí s’ha desplaçat aquell foraster que anomenàvem al principi i segueix preguntant. Continua sense entendre les respostes que rep, però comença a intuir que aquesta passió pel foc i la pólvora té alguna cosa a veure amb la identitat. És l’única conclusió plausible després d’escoltar una i altra vegada la mateixa frase recurrent i categòrica: “això els valencians ho portem en la sang”.
Novembre 2016
23
Patrimoni de la Humanitat
La història d’un anhel La carrera cap a la UNESCO va començar en 2011 i ha suposat un treball col.lectiu de més de cinc anys El reconeixement de les Falles com a Patrimoni de la Humanitat suposa el final d’un trajecte iniciat en 2012 que eleva, de forma definitiva, l’estatus de la festa del cap i casal a la màxima consideració de la UNESCO, la organització de les Nacions Unides per a la defensa de la cultura. Es tracta, per tant, de la culminació d’un camí emprés conjuntament per les nombroses entitats que participen de la festa i que, lluny d’acabar ací la seua tasca, tenen ara el compromís de seguir mantenint els valors d’una celebració íntimament lligada a la societat valenciana.
Text: Guillem Nicolàs Fotografia: CIPRIANO FORNAS
es Falles són una festa del poble i per al poble que, a pesar de les dificultats i impediments que ha hagut de superar al llarg de la seua història, ha continuat creixent fins als nostres dies, tot convertint-se en un referent de participació social en diferents àmbits. Precisament, eixe caràcter popular, que té el seu origen en el gremi dels fusters i els artesans, va ser el punt de partida d’una candidatura a la consideració de Patrimoni de la Humanitat que va arrancar en 2012 i que posava l’accent en eixe caràcter popular de la festa.
L
La primera pedra en este llarg camí que ha durat més de quatre anys, va nàixer de la mà de l’ex alcaldessa Rita Barberà i del seu regidor de Festes, Francisco Lledó, que van decidir, amb el suport del ple de l’Ajuntament, donar els primers passos en una aspiració, la de les Falles, que finalment ha sigut reconeguda. Des de llavors, la iniciativa ha anat recavant suports de diferents institucions i entitats, com l’Associació d’Estudis Fallers, que van acabar de donar forma a una potent candidatura que ha aconseguit transmetre l’autèntic esperit de la festa. Moltes són les personalitats que que al llarg dels últims quatre anys han aportat els seus coneixements a una iniciativa que va tenir en les anomenades converses “Les Falles a la Nau” de 2011, un dels seus principals punts de trobada per tal d’aglutinar, en un únic document, totes les característiques que feien a les Falles mereixedores d’aquest distintiu. I és que més enllà dels monuments, entesos com un treball artesanal fet des dels barris i amb l’únic objectiu de ser consumits per les flames en la nit de Sant Josep, altres elements com la pirotècnia, la música, la indumentària o l’esperit col·lectiu d’aquesta festa,
van acabar per aglutinar una proposta que inclou a totes les capes de la societat valenciana. Precisament, un dels encerts de la candidatura de les Falles a la UNESCO, capitanejada per l’actual regidor de Cultura Festiva i president de la Junta Central Fallera, Pere Fuset, ha estat el de saber unir esforços i organismes diferents en un únic objectiu comú, el d’aconseguir un reconeixement que, sense cap dubte, marcarà un abans i un després en la festa fallera dels valencians. Per això, després de l’acceptació de la candidatura, poques han sigut les veus crítiques amb una iniciativa que ha aconseguit elevar la festa josepina fins a un nivell que la situa entre les manifestacions culturals més importants del planeta. De fet, la imatge d’unitat de tots els sectors fallers en torn a la possibilitat de ser reconeguts com a Patrimoni Immaterial de la Humanitat ha sigut una constant en la recta final d’un procés que s’ha viscut amb molta expectació a la capital valenciana. Així, una de les imatges que millor reflecteixen esta unitat és la de la passada Crida de les Falles de 2016, que va donar el tret de sortida a tot una sèrie d’actes dissenyats per tal de fer arribar a la població no solament la transcendència de la candidatura, sinó també la gran implicació cultural que va aparellada a la seua festa. En aquell moment, la projecció sobre les torres de Serrans de la candidatura a la UNESCO de les Falles, davant de milers de persones, va aconseguir mobilitzar a fallers i veïns, que han mostrat el seu suport incondicional cap a un objectiu que no fa més que reforçar l‘autoestima dels valencians i obrir, més si cap, l’abast de la festa fallera. De fet, les de 2016 passaran a la història com les Falles que van aconseguir recuperar l’esperit original de la celebració, tot posant en valor la seua llarga trajectòria. Des de la imatge gràfica que anunciava la festa amb les eines que la relacionen amb els gremis artesans;
passant pel monument de l’Ajuntament que, amb la tècnica de la “vareta”, retia homenatge a alguns dels monuments que són Patrimoni de la Humanitat a tot el món, la candidatura a la UNESCO ha estat present en els últims actes de l’any: una mascletà a la plaça de l’Ajuntament, l’edició d’un llibre i d’una web dedicada al patrimoni col·lectiu que suposen les Falles, o l’acte celebrat a la Llotja de la Seda de València amb la participació de la Muixeranga d’Algemesí -dos entitats que ja han rebut el màxim guardó de els Nacions Unides en els seus camps- van acabar acabar d’assentar les bases d’un objectiu que ja és una realitat. Ara, no obstant, queda encara un camí per recórrer i cal, segons el propi Fuset, treballar de valent per a mantenir viu este esperit col·lectiu que fa de les Falles una festa única, que ha sabut mantenir intacta la seua raó de ser. L’objectiu no és senzill i caldrà posar en marxa noves iniciatives per a donar a conéixer a veïns i visitants els valors d’una festa que, ara sí, compta amb un reconeixement d’abast mundial. Cal tenir en comte, no obstant, que el fet de ser Patrimoni de la Humanitat obliga a les institucions a protegir, preservar i difondre la festa; un objectiu per al qual nous actors com el Museu Faller o la Ciutat de les Falles, hauran de jugar un paper molt important.
Patrimoni valencià per a tot el món Amb la de les Falles, ja són quatre les manifestacions culturals valencianes que es mantenen hui i que compten amb el màxim guardó que concedeix la UNESCO al patrimoni immaterial. La primera en aconseguir-ho va ser El Misteri d’Elx, que en 2001 va ser declarada obra mestra del patrimoni oral i immaterial de la humanitat. Uns anys després va ser el Tribunal de les Aigües de l’Horta de València el que entrava en la llista representativa del Patrimoni Cultural Immaterial, posant en valor així una mostra vivent de la importància de la societat civil. La Festa de la Mare de Déu de la Salut d’Algemesí, amb la
seua inconfusible Muixeranga i els balls tradicionals, no va tardar a sumar-se a una llista que ara veu ampliada la representació valenciana amb les seues Falles, que han aconseguit també el reconeixement anhelat, posant de relleu la llarga tradició cultural de la Comunitat. Però el patrimoni valencià no es limita a les tradicions intangibles, sinó que paratges naturals com el Palmeral d’Elx, edificis com el de la Llotja de la Seda de València, o fins i tot les mostres d’art rupestre que es conserven a l’arc mediterrani, completen un catàleg que cal reivindicar.
Novembre 2016
24 popular alrededor del fuego, la pólvora y la música. Las Fallas y las sociedades musicales, principal agente cultural de la Comunidad Valenciana y un movimiento asociativo único en el mundo, deberían trabajar estrechamente para potenciar el valor patrimonial, artístico y cultural que atesoran. Esta labor generaría acciones muy beneficiosas para ambas partes, así como en una futura candidatura a la que podrían optar las sociedades musicales. Para esta distinción de la Unesco reúnen argumentos suficientes según los expertos.
* La sensibilidad en torno al papel de las bandas de música ha ganado enteros para abordar propuestas de futuro en las Fallas
Fallas y Sociedades Musicales, patrimonio del pueblo valenciano Las Fallas y las sociedades musicales, un elemento clave en la fiesta y principal agente cultural de la Comunidad Valenciana, deberían impulsar su colaboración para potenciar el valor patrimonial y artístico que atesoran. Estas asociaciones podrían aprovechar los esfuerzos realizados para la declaración de las Fallas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco; para esta distinción reúnen argumentos suficientes, según los expertos, por ser un movimiento social, educativo y cultural único en el mundo. TEXTO: ALEXIS MOYA Fotografía: CIPRIANO FORNAS
a música es uno de los componentes singulares asociados a las Fallas, una fiesta que tiene sus comienzos documentados en el siglo XVIII aunque hunde sus raíces en las fiestas paganas alrededor del fuego. Los esfuerzos realizados para su declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco deberían ser aprovechados para poner en marcha la promoción de otro patrimonio del pueblo valenciano que reúne atributos suficientes: las sociedades musicales.
L
Estas asociaciones y sus músicos han apoyado estas fiestas y son percibidas como uno de los elementos fundamentales de las Fallas en los centenares de municipios donde se
celebran, con más de 100.000 falleros sólo en la ciudad de Valencia. Hay otros que confluyen en ellas y se subrayan en el informe: ciudadanos, falleros, artistas, pirotecnia, artesanos (orfebres, indumentaristas, peluqueros y sederos) y llibrets (literatos festivos), sin los que no se entiende la fiesta. La importancia patrimonial, artística y cultural de las Fallas y las sociedades musicales es innegable y así lo reconocen expertos en este proceso que creen que hay que potenciar el espacio vivo y social que generan estas fiestas y a todos los que la han hecho y la hacen posible en la actualidad, sin olvidar la consideración nuclear que tiene el monumento como obra de arte efímera. Y habría que preguntarse si no se pueden impulsan sinergias para aportarles más valor. Más allá de la declaración de la Unesco, que por supuesto se merecen, los proyectos e iniciativas que se podrían poner en marcha con un trabajo conjunto y una colaboración seria y decidida aportarían mucho a la riqueza de esta manifestación tradicional y
Tradición y socialización Los puntos en común entre ambos patrimonios son diversos con importantes nexos que les caracterizan. Su larga historia les convierte en fenómenos arraigados que han superado todo tipo de dificultades y contingencias, su capacidad de vertebración vecinal y social, el trabajo de cohesión, integración, y la socialización es bien conocida en los ámbitos en los que se circunscriben. La música es clave en el desarrollo de la fiesta ya que no se entendería sin la participación de alrededor de 10.000 músicos en la ofrenda, pasacalles, recogida de premios… Y los nuevos responsables políticos parecen haberlo entendido así al impulsar, desde la Junta Central Fallera (JCF) y concejalía de Cultura Festiva del Ayuntamiento de Valencia, las ayudas a la contratación de las bandas de música o colles de tabal y dolçaina a las que se han acogido cerca de 230 comisiones falleras en 2016. Las cantidades, que se asignan en función de diversos criterios, como el número de integrantes o actuaciones, no se estiman suficientes pero son el primer paso en un reconocimiento que merecería una dedicación económica más importante en los sucesivos presupuestos. La sensibilidad en torno al papel de las bandas de música ha ganado varios enteros tras muchos años de intentos de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana para que hubiera una interlocución fluida con la anterior JCF, y abordar propuestas en torno al repertorio, promoción y creación de música fallera que den más valor a los actos más representativos de las Fallas. Hay mucho por hacer, pero se podría empezar por poner en marcha el potencial artístico de estos colectivos. Internacionalización Todas las acciones que aporten valor a estos patrimonios serán factores determinantes en su valoración y posibilidades de internacionalización, lo que ayudará a que el impacto económico de la fiesta crezca exponencialmente. Un precedente fue el trabajo de emigrantes valencianos que plantaron fallas en ciudades españolas como Madrid o Barcelona, o extranjeras (Buenos Aires, México y París) y otras iniciativas en las que el ingenio y una visión global y cosmopolita
sean importantes constituirán una labor crucial. Un programa con conexión con las Fallas como el de la milenaria Ruta de la Seda de la Unesco, que enlaza a tres continentes y 32 países, es una oportunidad para dar a conocer la importancia deValencia desde el siglo XV en esta industria que llevaba consigo intercambios de inventos (pólvora), comerciales (seda, abanicos, porcelana...), gastronómicos (arroz), y también culturales... Ahí comienza el Siglo de Oro valenciano con Jordi Sant Jordi,Ausiàs March, Joanot Martorell, Sor Isabel de Villena, Jaume Roig... Los papas Calixto III (14551458), primero y AlejandroVI (14921503), su sobrino, eran valencianos. ¿Y la música? La música vive en esta época en el Reino de Valencia unos momentos álgidos, al igual que otras artes como la pintura, escultura, poesía… Muchos músicos valencianos fueron a Roma donde se ve reflejada la pujanza comercial y artística. Los papas se rodeaban de los mejores músicos de Europa y los Borja disfrutaban de la “mejor capilla musical que podía existir en toda la cristiandad” según Carles Magraner, director de Capella de Ministrers. Esplendor musical El Misteri d'Elx o el Cant de la Sibil.la son dos fenómenos a destacar en esta época y que perduran gracias al pueblo.Valencia contaba con compositores, intérpretes y luthiers con proyección y tenía “la mejor capilla musical del mundo después de la de Roma”. Años después, estos instrumentistas dieron esplendor a la corte de Germana de Foix, segunda esposa de Fernando el Católico y virreina de Valencia que murió en Llíria en 1538, subraya Magraner. Estos apuntes podrían servir para establecer algunos precedentes y paralelismos históricos que pueden servir para realizar conexiones con la historia y la tradición, con el presente y nos muestra un esperanzador futuro porque, como entonces, la Comunidad Valenciana sigue exportando excelentes músicos a las mejores formaciones de todo el mundo.Y en esto, el papel de las sociedades musicales, desde hace 200 años, ha sido y es nuclear. Movimiento social, educativo y cultural Algunas cifras ilustran sobre la importancia de estas asociaciones, un movimiento social, educativo y cultural conformado por 547 sociedades musicales (el 50% de España) con 40.000 músicos, 60.000 alumnos de escuelas de música y más de 200.000 socios. Están presentes en el 90% de los municipios de Alicante, Castellón y Valencia de más de 200 habitantes y en su seno desarrollan su labor un total de 1.686 formaciones artísticas con 1.075 bandas de música, 174 orquestas, 233 coros, 133 grupos de cámara, 52 big bands y 19 grupos de dolçaina y tabal. Si estos datos se extrapolaran al total de España habría que multiplicarlos por 9, hay que tener en cuenta que hay más sociedades musicales que municipios en la Comunidad Valenciana (542) y que el número de socios de estas asociaciones sin ánimo de lucro es cinco veces mayor que la masa social del Valencia CF, dos veces
Novembre 2016
25
Josep Francesc Almeria Diputat de les Corts Valencianes, pel grup de Podem Ex president de la Federació de Societats Musicals de la C.V.
El silenci de la festa Fallera C
ada vegada que pense en les Falles de València no puc deixar d'evocar una multitud d'imatges que se succeeixen en un entorn d'immens silenci. Un monument faller que crema amb fermesa, falleres i fallers entrant en la plaça de la verge el dia de l'ofrena, primers plànols de falleres majors i altres representants institucionals on els somriures i les llàgrimes s'articulen en una melodia silenciosa que no té final… i més.
No pot ser, pense immediatament, i un torrent de compassos musicals irrompen en el meu cervell a través de les notes de les composicions falleres més notòries, habitualment bastonejades sense parar en actes de carrer, institucionals i fins i tot als mitjans de comunicació, peces d'un repertori no massa extens de composicions especialment dedicades al món faller, evidenciant la forta unió de la música amb la festa.
* Potenciar otros patrimonios como las sociedades musicales debería ser un proyecto colectivo e institucional más que la del Real Madrid y superior a la del FC Barcelona. Vertebración La Universidad de Valencia constata que “son un potente mecanismo de socialización y vehículo que posibilita la participación, la formación, la práctica musical, la convivencia... y que constituyen un elemento diferencial valenciano que se manifiesta en cualquier tipo de territorio (urbano y rural, costa e interior, castellanoparlante y valencianoparlante). Un fenómeno estructurado y “el elemento simbólico con mayor capacidad para estructurar y soportar estrategias de vertebración y cohesión social”.
La Comunidad Valenciana es la que cuenta con más reconocimientos culturales inmateriales (4) de la Unesco (Tribunal de las Aguas, Misteri d’Elx, Centro de Cultura Tradicional Museo Escolar Pusol d’Elx y la fiesta en honor de la Mare de Déu de la Salut de Algemesí) en España, que a su vez, es la que tiene más figuras en la lista representativa de Europa (15). Con estos mimbres, potenciar patrimonios como las Fallas y las sociedades musicales debería ser un proyecto sin más dificultad ni obstáculos que la voluntad política para dar herramientas a dos grandes entramados asociativos de la sociedad civil que históricamente no han recibido apoyos que se correspondan con su valor y proyección nacional e internacional. Reconocimientos de la Unesco aparte, quizá es el momento de respaldarlos en consonancia con su relevancia y peso específico y fomentar colaboraciones, iniciativas y sinergias con imaginación pensando en su proyección nacional e internacional.
Ayuntamiento de Elda con sus Fallas. Felicitaciones. Nosotros también
Supose que la sensació de certesa del que sembla aparentment impossible garanteix, com en altres aspectes de la vida, la continuïtat d'allò que sembla unit de forma indissoluble i que no té cap perill de ruptura. Així, la presència de la música de banda, a l'entorn de la festa de les Falles, sembla que no tinga un final previsible, malgrat la visible reculada que ha experimentat en les dues últimes dècades. No obstant açò, aquesta visible tendència i el seguiment objectiu de la presència de les bandes de música en les falles, aporta certs dubtes sobre el seu futur, sense oblidar que tampoc fa tant temps que les comissions falleres desfilaven al so d´agrupacions de cornetes i tambors amb un cert aire marcial en les desfilades. Paradoxalment, la relació de la música de banda i les falles ha sigut d'un perllongat silenci. Un silenci institucional continuat, durant molt temps, davant l'oferiment repetit de col.laborar amb les entitats representatives de les societats musicals valencianes, amb el propòsit de potenciar el binomi Música-Festa que tan bons resultats ha donat en altres realitats festeres. Silenci en la mateixa activitat festera, que ha vist reduir el nombre de components de les bandes que actuen en els seus actes, silenciant instruments que són imprescindibles per a garantir una mínima qualitat interpretativa en les composicions musicals que s'utilitzen per aquestes agrupacions. Silenci, així mateix, en la pròpia resolució de la Generalitat Valenciana, on es va aprovar incoar l'expedient de declaració de Bé d'Interès Cultural Immaterial a favor de la Festa de les Falles de València, i on les referències a les manifestacions
musicals, la música en si mateixa o les agrupacions que actuen en aquestes festes, són de caràcter puntual i no formen part de la descripció del bé a protegir, com si que ocorre amb el monument faller, el cicle ritual, l'ofici d'artista faller, la literatura fallera, la indumentària tradicional, la pirotècnia, el llegat artístic dels museus fallers i el llegat documental. Sembla com que la música no fos un element substancial d´aquesta festa. Silenci… un silenci que és part de la música, però que es transforma en un interminable calderó musical quan no aflora en la seua deguda importància. En el moment de finalitzar aquestes línies, llig en un conegut diari valencià que la candidatura de les Falles de València compta amb tots els predicaments per a obtenir el vistiplau de la Convenció Intergovernamental de la Unesco i ser declarada, en conseqüència, Patrimoni Immaterial de la Humanitat. Sincerament, desitge que al llegir aquestes paraules ja s'haja produït aquesta declaració, molt merescuda per la Festa de les Falles, i desitge així mateix que la protecció de la festa ajude al fet que la música de banda es protegisca també, aprofitant aquesta sinergia, i reafirme el binomi Festa-Música com a factor de desenvolupament de tots dos, d'acord amb l´Informe sobre la declaració de la festa de les Falles com a Bé d’Interés Cultural Immaterial de la Comunitat Valenciana, aprovat pel Ple del Consell Valencià de Cultura del 27 de febrer de 2012, i on a l'epígraf específicament dedicat a la Música s'explicava que: “Si les festes populars valencianes solen anar acompanyades de música, la festa de les Falles, des que va començar a organitzar-se i a vincular-se al barri, va necessitar rodejar-se de música. És així com les comissions es procuren la presencia de dotzenes, centenars d’agrupacions musicals, que animen des de cercaviles a grans desfilades i a tots els actes que celebren, siga en la seua demarcació o en el marc de la ciutat. D’esta manera, les Falles es convertixen en un element clau a l’hora de sostenir i promoure un altre gran fenomen cultural i festiu del poble valencià: les associacions, ateneus i bandes de música. Més interessant encara és observar com no poques comissions falleres han estat promotores de bandes de música pròpies, una activitat que enriquix la seua projecció festiva i culta.” Que la música trenque el silenci.
Novembre 2016
26
La indumentària valenciana
De la vestimenta tradicional als trages de festa
A l’esquerra, un moment de l’ofrena floral a la Mare de Déu amb la catedral al fons. Cipriano Fornas. Text: Irene Benet blog: diariodeunapeineta
er a poder parlar d’indumentària valenciana com a part del Patrimoni de la festa de les Falles, cal fer primer una xicoteta introducció. Saber per què vestim la indumentària d’una època en concret és tan o més important que saber en quin any va començar la festa de les Falles a la ciutat de València, que es remunta a finals de 1700. En els seus inicis, esta celebració d’origen popular no va fer massa gràcia a les autoritats i els actes fallers de manifestació de la opinió pública es perseguiren.Va ser en aquell moment quan entrà en escena la revista «La Traca», que va aconseguir posar en valor la festa en instaurar els primers premis a les millors construccions. Es creà així una competició entre places i carrers i que va donar lloc a l’aparició de falla artística, fins que ja en l’any 1900 fou el propi ajuntament qui va prendre el relleu per a seguir amb els banderins.
P
Podem dir, que va ser precisament en aquell moment quan va aparèixer la necessitat d’assignar una indumentària a la festa, i es va crear la indumentària fallera. La paraula “crear” es molt important en este context, perquè en aquell moment, la indumentària que
es va prendre com a model no va ser la indumentària tradicional valenciana del segle XVIII, sinó que el vestit que es va fer per a la festa, tenia una gran influència de la moda del moment, en ple segle XX. La indumentària al segle XVIII La única indumentària valenciana tradicional, pel que fa als teixits i la confecció, és la que pertany al segle XVIII. No és que aquesta època coincidisca en l’època de màxim esplendor valencià, en absolut. Es tracta del moment en què la indumentària valenciana va prendre més força degut a la incorporació dels processos que facilitaven el teixit de les sedes, abaratien els seus costos i, per tant, van arribar a un públic al qual no havien arribat mai: la baixa classe social, que anhelava imitar a la burgesia de la ciutat. Així, la confecció de les robes més tradicionals, que consistien en peces que ressaltaven el bust de la dona i marcaven la cintura, junt a la riquesa de les sedes valencianes, va acabar per donar forma a una indumentària única a la ciutat de València, on s’havien assentat un gran nombre d’empreses sederes. És en eixe moment quan podem parlar de la puresa de la indumentària tradicional valenciana. Però amb el tempos, la burgesia va començar a imitar allò que arribava de fora, i va anar incorporant la moda francesa a la seua forma de vestir. Per
això, a principis de 1900, i coincidint amb el començament de la festa de les falles, es va instaurar una indumentària que recordava a aquella que es portava al segle XVIII, però que en canvi incloïa elements de la moda del segle XX, com els rodets laterals al pentinat de la dona, o els plecs forçats als saragüells masculins. És, per tant, una indumentària buscada, creada a propòsit per a la festa, que feia més de 100 anys que no es portava. La primera imatge que tenim d’aquesta indumentària és la que ens va deixar la Regina dels Jocs Florals de 1879, Maria Llorente i Falcó, en la qual ja es mostrava la intenció de tipificar la indumentària festiva valenciana. Hem de tindre molt clar, però, que la dona valenciana, més enllà de la festa, mai va portar este tipus de roba, sinó que els trages van ser creats únicament per a les falleres de finals de segle, i més endavant també els homes van adoptar una indumentària que mesclava una jupa del segle XVIII i el trage masculí de l’època. Així, a mesura que la festa de les Falles ha anat evolucionant, també ho ha fet la indumentària festiva, que ha donat lloc a allò que ara coneixem com a «trage de festa», o «de gal·la», o «de farol». El problema és que poc o res queda dels meravellosos vestits que es portaven al segle XVIII. Per això, des de fa un temps, els indumentaristes
més prestigiosos de la ciutat (que per cert, si els contem, ens en sobra amb els dits d’una mà) han intentat recuperar l’essència de la vestimenta del segle XVIII, l’esplendor de la indumentària valenciana. De fet, algunes Falleres Majors de Valencia ja han triar este tipus de indumentària per a vestir el dia de la seua Exaltació, com per exemple Paloma Redondo, o Carla Muñoz Antolí Candela. D’opinions al respecte n’hi ha moltes. Alguns pensen que amb les peces del segle XVIII, no vestim una indumentària digna de ser portada en actes importants per a la festa de les Falles, com l’Exaltació de les Falleres Majors o l’Ofrena. Però altres defensen que vestir tal i com ho feien al segle XVIII, no és vestir com una llauradora, sinó
A la dreta, una imatge d’un antic Saragüell (Irene Benet), una pintura de Francisco Boví de la regina dels Jocs Florals de 1895 (Lo Rat Penat), i un conjunt d’indumentària amb falda, gipó, mocador de pit, davantal i adreç del llibre de Victoria Liceras “El trage de valenciana” Baix, l’exaltació de la Fallera Major de 2016, amb el trage de Farol. Cipriano Fornas. En la pàgina següent, Paloma Redondo, Fallera Major Infantil deValència any 2000. Arxiu JCF.
com una dona valenciana, i posar en valor a aquell moment en què la nostra indumentària popular va assolir un gran prestigi. Per desgràcia, hi ha molta desinformació al respecte, i de vegades hem d’escoltar que, anar vestides o vestits del segle XVIII, és portar la roba que portaven els nostres avantpassats al
Novembre 2016
27
camp. Això és del tot incorrecte, ja que una llauradora mai portaria un guardapeu de seda, o un brocat, per a anar al camp. La roba per a anar a treballar, com també passa ara, probablement era la roba més vella que les famílies del segle XVIII tenien a casa. La realitat és que, hui, en la festa conviuen d’una manera més o menys rigorosa els dos trages de dona: el del segle XVIII i el del segle XX. Això però, no ha passat en els homes, per als qui el trage fet per a la festa, el «de cucaratxa», ja ha deixat de portar-se per considerar-lo incorrecte. L’evolució de la indumentària fallera va, per tant, arrere en el temps, ja que les Falles en un primer moment van optar per crear la seua pròpia indumentària, mentre que ara, anys després, es busca recuperar els vestits tradicionals del segle XVIII, per entendre que es tracta d’una indumentària més pura i sense cap influència. De monyos i bandes Una altra qüestió més discutible és si la festa de les Falles ha estat sempre vinculada a un pentinat en concret, que també ha evolucionat al llarg del temps, i que tampoc és el mateix que es portava al segle XVIII. Per això, des de fa dos anys, amb el relleu a la Junta Central Fallera, es va tractar d’imposar que les Corts d’Honor i les Falleres Majors lluïren un únic monyo quan portaven el segon trage, el del segle XVIII. La intenció és molt bona, però el problema és que el segon trage poc té de segle XVIII... És més bé una evolució cap enrere del trage de fallera i, per tant, abans de preocupar-se pel pentinat, caldria revisar les característiques del segon vestit de la Cort d’Honor, que s’adjudica tenint en compte més l’aspecte econòmic que el fet de si les empreses es dediquen o no a confeccionar indumentària valenciana tradicional. La polèmica arriba també a un altre element de la indumentària fallera, la banda. La Cort d’Honor, per exemple, ja no la porta en cites com la de la Dançà de la Mare de Déu, i l’últim any tampoc la portaven amb el segon trage. La banda no és un element gens característic de la indumentària tradicional valenciana del segle XVIII, però sí que ho és de la indumentària fallera des que la primera Fallera Major de de la ciutat, Angeles Algarra, va ser triada en 1931 en un certamen de bellesa. Des d’aquell moment, com que ella anava vestida amb tres monyos, les Falleres Majors també la porten. El dilema, per tant, està servit. Queda clar que hui, l’elecció de Falleres Majors de València no té res a veure amb allò que era originalment... No és ja un certamen de bellesa, i per tant, no queda clar si respectar la tradició de la banda té massa sentit. La qüestió, a més, no solament afecta a les màximes representants de la festa, sinó també a les falleres de totes les comissions.
La crítica y la estética unidas para no ser vencidas Texto: Ivana Villar Valencia
icen que arte es la actividad en la que el hombre recrea, con una finalidad estética, un aspecto de la realidad o un sentimiento en formas bellas valiéndose de la materia, la imagen o el sonido. También se dice que arte es el conjunto de obras que resultan de esta actividad, así como las diferentes tendencias o estilos de las mismas. Los amantes de las Fallas disfrutan con cada una de las manifestaciones de arte que ofrece una fiesta que se remonta a la antigua tradición de los carpinteros de la ciudad, que en vísperas de la fiesta de su patrón San José, el 19 de marzo, quemaban frente a sus talleres, en las calles y plazas públicas, los trastos inservibles junto con los artilugios de madera que empleaban para elevar los candiles que les iluminaban mientras trabajaban en los meses de invierno.
D
Eso era en el siglo XVIII, pero estas Fallas, fueron evolucionando y cargándose de sentido crítico e irónico, mostrándose sobre todo en los monumentos falleros escenas que reproducían hechos sociales censurables. Los vecinos de cada barrio, de cada calle, empezaron a poner carteles que hablaban de alguien conocido del barrio y los niños iban de casa en casa pidiendo “una estoreta velleta” (Una alfombra vieja). Esta petición se convirtió en un canto popular a la hora de recoger todo tipo de muebles viejos para quemarlos junto a las fallas. En esa época las fallas eran todavía unos cajones altos con tres o cuatro muñecos vestidos con ropa de tela. Debido a la creación de los premios a las fallas más artísticas (1895), las comisiones falleras empezaron a contratar artistas y artesanos y apare-
ció una profesión muy peculiar, la del artista Fallero. Si retrocedemos en el tiempo, no podemos olvidarnos de la presencia de la temida censura a la crítica. En 1870 se persiguieron duramente los festejos populares como el Carnaval y las Fallas. Esta presión provocó que en 1885 surgiera un movimiento en defensa de las tradiciones típicas. En todo este devenir, tuvo especial importancia la publicación de la revista satírica valenciana La Traca, que creó además unos premios a los mejores monumentos falleros. Este hecho provocó la competición entre los vecinos y dio lugar al nacimiento de la falla artística, donde no desaparecía la crítica, pero predominaba la preocupación estética. En el pueblo valenciano, la costumbre de las fallas crecía poco a poco durante el siglo XIX. Sin embargo, al tratarse de una forma crítica, las autoridades municipales decidieron en 1851 que los bocetos de los monumentos deberían pasar una censura previa, la cual sólo dejó de existir de 1868 a 1870. En este segunda mitad del siglo XIX se hizo muy habitual la llamada “falla erótica”, que era aquella que hacía sátira sobre el matrimonio, los cortejos entre hombres y mujeres o las relaciones sexuales; sin embargo, también podían encontrarse monumentos con crítica política, apologéticos y humorísticos. Lo cierto es que a las autoridades no les hacía gracia tanta crítica a la política local, nacional e internacional de España, que llegó hasta el punto de que en 1895 la cremà de la falla de la plaza de Pellissers, dura con la política africanista, se convirtió en una manifestación que tuvieron que disolver las fuerzas del orden público. Por ese motivo, las autoridades quisieron reprimir esta temática, consiguiéndolo a principios del siglo XX al ponerse de
moda las fallas apologéticas. Son los años en que irrumpe con fuerza la falla artística, empujada sobre todo por la creación de los premios al monumento fallero en 1901 por parte del Ayuntamiento de Valencia. Este hecho, que fomentaba el valor artístico sobre el crítico (que tanto molestaba entonces), motivó a los falleros a crear fallas mejores estéticamente y por tanto a buscar buenos artistas que las realizasen. De rebote se creó el embrión de la nueva profesión de artista fallero, ya que algunos de esos profesionales (en su mayoría escultores, pintores y carpinteros) acabarían dedicándose exclusivamente a realizar fallas. De la preocupación por la estética, llegó también el deseo por el reconocimiento y los premios. Aunque la aparición de premios falleros, fue en 1884, cuando la Peña El Fum otorgó un pergamino a una mejor falla. Los premios que transformarían la fiesta los inauguró LA TRACA, que, tras enfrentarse a los intentos de prohibición de las Fallas, otorgó a partir de 1885/87 premios a las fallas más destacadas, en el que la falla de la calle Embajador Vich fue la que consiguió el Primer Premio gracias a su parodia al Rey Jaume I. El Ayuntamiento tuvo que claudicar y eliminar las tasas impuestas para evitar las plantàs y finalmente asumió a principios de siglo los premios que creó LA TRACA. Este fue el comienzo de la unión entre el pueblo y el poder político, evolucionando con pasos agigantados esta fiesta popular en número, estructura y organización.Así nació la falla artística: de la competición. En 1929, se creó el primer concurso de carteles para hacer promoción a la fiesta y en 1932 se instauró la Semana Fallera. Fue en estos años cuando las
Fallas se convirtieron en la fiesta mayor de la Comunitat Valenciana. En 1934 se elige el primer ninot indultat para crear un museo de folklore que al final fue el Museo Fallero. La Guerra Civil Española (19361939) supuso un paréntesis, aunque se plantaron en 1937 algunas fallas de contenido propagandístico por parte de ambos bandos. Recién finalizada la contienda, en 1939, el Ayuntamiento de Valencia crea Junta Central Fallera, la cual en 1944 promulga el primer Reglamento Fallero, normas que han de cumplir todos los falleros asociados a esta entidad.Todo ello, añadido a que en 1941 se crea la Sección Especial, máxima categoría de concurso para los monumentos, y que en 1945 se oficializó la Ofrenda de Flores a laVirgen de los Desamparados, va configurando poco a poco la fiesta fallera que conocemos hoy en día. El papel del ‘llibret’ No podemos olvidarnos en el siglo XIX, del papel que tuvieron los ‘llibrets’. Eran unas pequeñas ediciones de textos en verso escritos en valenciano con el particular humor cómico, crítico, satírico e incluso erótico, emulando al más puro estilo a su predecesor en forma de magazine La Traca, revista satírica creada en la ciudad de Valencia en 1884 y capitaneada por el periodista Vicent Miquel Carceller. El ‘llibret’ apareció como una serie de hojas encuadernadas que contenían únicamente la explicación de la falla, y que vendían los niños a pie de la misma. El primero data de 1855, explicaba la falla plantada en la plaza del Almudín de Valencia y lo escribió el abogado, político y poeta Josep Bernat i Baldoví. Se titulaba El conill,Visenteta y Don Facundo, y en él su autor hacía gala de una poesía erótico-satírica de la cual existen aún en la actualidad buenos escritores. Actualmente, el contenido y estructura no ha cambiado prácticamente desde la década de 1940.
Novembre 2016
28
A l’esquerra, majors i joves gaudeixen de la festa de les Falles al carrer. Cipriano Fornas. A la dreta, un grup de veïns es reuneixen en torn a la Falla plantada en la plaça Doctor Collado l’any 1911. Rafael Solaz. A baix, un grup de fallers i falleres participa en un acte contra la violència masclista durant les festes de 2016. Cipriano Fornas
Les Falles dels barris assalten la Humanitat Amb més de 380 comissions censades a València, la festa suposa un teixit associacitu que s’estén per tota la ciutat i que abraça totes les capes socials Text: Guillem Nicolàs Fotografia: CIPRIANO FORNAS
ada mes de març, amb l’arribada de la festa fallera, els carrers de València i de les altres ciutats on també se celebren les Falles, comencen a omplir-se de gent disposada a participar en els diferents actes organitzats, que conformen una atapeïda agenda festiva que s’estén per tots els barris. Els casals fallers obrin les seues portes, les carpes van prenent forma als carrers i fins i tot les bandes de música comencen a fer sonar els seus instruments de cara a una setmana d’alegria que inundarà cada racó de la ciutat. I és que la de les Falles és una festa que es viu principalment al carrer i que fa servir l’espai públic com a punt de trobada, com el lloc on es prenen les decisions més importants de les diferents comissions, i evidentment, com el lloc de culte on llueixen les creacions artístiques que caracteritzen esta festa: des de les composicions florals en honor a la Mare de Déu, passant per les mostres de música i literatura fallera, fins als imponents monuments que s’alcen al cel mostrant tot el seu colorit.
C
Precisament, esta característica popular de les falles, és un dels motius que ha fet que la seua tradició s’haja mantingut fins als nostres dies, ja que es tracta d’una celebració que va nàixer del poble i per al poble.Tothom està convidat a parti-
cipar-hi, ja que el seu habitat natural no és altre que el de l’espai comú que s’obri entre els carrers i les places de la ciutat.
comissions seguien elegint als seus representants a pesar de la situació política del país, i mantenint part del seu caràcter popular.
Únicament des d’eixe punt de vista s’explica la vitalitat d’una tradició que si bé s’ha convertit en la festa grossa del cap i casal, ha hagut de superar, al llarg de la seua història, deferents èpoques en què el poder establert va fer tots els possibles per tal d’evitar la seua celebració. I és que, ja en els inicis de la festa, al segle XIX, les falles eren una manifestació popular carregada de crítica que arremetia contra les classes dominants i s’estenia per les classes populars. Amb el temps, però, i davant la passió dels fallers, que a pesar de les dificultats seguien plantant els seus monuments, les autoritats van decidir institucionalitzar la festa, a partir de concedir diferents premis, fins a estendre-la a totes les capes socials, incloent-hi les més altes.
Hui, sense cap dubte, l’evolució de la festa fallera al llarg de la seua història marca l’esperit d’una tradició que agrupa a més de 280 comissions falleres en tota la ciutat de València, per a conformar un teixit associatiu
L’aposta va resultar transcendental per tal d’assentar les bases d’una celebració que hui és Patrimoni de la Humanitat gràcies, en part, al treball dels milers de fallers que, de generació en generació, han mantingut una tradició que ha sobreviscut als diferents canvis polítics de l’Estat: des dels temps de la segona República, passant per la dictadura de Franco, i fins a convertint-se en protagonista de la transició democràtica. De fet, el poder assolit per les associacions falleres no ha passat desapercebut al llarg dels temps, i fins i tot el món faller es va convertir en un dels pocs reductes democràtics durant la dictadura, quan algunes
únic al món i que ha acabat per ser una part fonamental de la candidatura a Patrimoni de la Humanitat, que reconeix els seus valors democràtics i de diàleg. Les associacions falleres són l’esperit d’una festa multitudinària, que no entén de classes socials ni d’imposicions, i que contribueix al llarg de tot un any a portar la cultura i les seues activitats a tots els punts de la ciutat de València.
* Les associacions falleres representen l’esperit d’una festa miltitudinària que no entén de classes socials ni d’imposicions
Eixe és, precisament, un dels punts forts de les Falles i que els permet convertir-se no només en motor econòmic de primer nivell per a la ciutat, amb centenars de milers de visitants cada any, sinó també en una eina de cohesió social i d’inclusió que entronca directament amb altres manifestacions culturals i socials valencianes. Una tradició que té el seu origen als carrers i que penetra en totes les cases, teixint una xarxa amb forts lligams culturals i afectius. Una realitat envejable que, des d’ara, té el reconeixement merescut de ser Patrimoni de la Humanitat.
Novembre 2016
29 * Les Falles arriben a un total de 137 municipis de la Comunitat, així com a d’altres llocs de l’estat i diferents països
ació de la ‘Gran València’, un espai periurbà comprés per les localitats limítrofes a la capital valenciana, i que la Junta Central Fallera va anar incorporant: Xirivella (1967), Burjassot i Quart de Poblet (1969), i Mislata (1971). A partir d’ací, més d’un centenar de localitats s’afegien a la llista de poblacions que planten les seues falles, de les quals 36 ho van fer per primera vegada.
L’expansió geogràfica de les Falles
Des de València i per al món sencer Text: Javier Mozas Associació d’Estudis Fallers
Les Falles eren originàriament un festeig que es celebrava en la ciutat de València dins del cicle festiu en honor a Sant Josep. Es plantaven en la matinada del 17 al 18 de març, i estaven només eixe dia per a visitarles, fins a l’hora que es posava el sol. Per això eren conegudes comles «Falles de la Vespra de Sant Josep». Els monuments estaven formats per una caixa d’uns dos metres d’alt, amb laterals pintats o dibuixats, i al seu interior es posaven els trastos vells arreplegats pels xiquets. A dalt, s’alçaven els ninots, a tamany natural i amb moviment, amb una estructura de fusta recoberta de palla i roba, amb les cares i les mans fetes de cera. Els versos explicatius es col·locaven a les façanes dels edificis propers.
* La primera etapa d’expansió de la festa fallera va arribar per tren a localitats com Xàtiva, Sueca, Gandia, Alzira o Torrent
a festa de les Falles era, en el seu origen, similar a qualsevol de les festes de carrer que se celebraven a València, amb despertaes, passacarrers, traques corregudes i concerts de música, i eren els veïns de cada carrer o plaça els qui organitzava els actes i construïen la seua pròpia falla. Però a partir de la segona meitat del segle XIX, les Falles comencen un nou camí. La premsa local es fa ressò de la festa de manera contínua cada any, i a poc a poc s’afegiren més actes al programa de festejos. Així, la duració de la celebració acabà ampliant-se a un dia més i les Falles van passar de ser un festeig, a una festa individualitzada.
L
Però el seu primitiu origen en les fogueres de solsticis i equinoccis fan que la festa no fóra exclusiva d’un carrer o plaça en concret, sinó de celebració per tota la ciutat. A més, la comunicació directa entre València i Xàtiva, amb la inauguració de la línia de tren en 1854, faria la resta per a la difusió de la festa. I així començà la primera etapa d’expansió de la festa de les Falles més enllà del seu àmbit inicial, cap a d’altres localitats com Xàtiva (1865), Sueca (1876), Gandia (1876), Alzira (1889), o Torrent (1900). Fins i tot, a principis del segle XX, l’expansió traspassà l’àmbit provincial i també s’estengué de manera puntual a municipis de Castelló i Alacant, com per exemple a Gata de Gorgos (1898 i 1899), Onil i Petrés (principis de segle), Dénia (1900), Oriola (1906), i Castelló (1904).
Cullera i Gandia (1928), Xàtiva (1932) o Alzira en la província de València, i Borriana (1928) en Castelló.
En les dècades dels anys vint i trenta del segle XX, la festa es convertí en una senya d’identitat del valencianisme cultural i popular, un fet que propicià que s’expandira de manera més o menys contínua per 46 localitats de diverses comarques: l’Horta, el Camp de Morvedre, el Camp de Túria, la Foia de Bunyol, la Ribera Baixa, o la Vall d’Albaida, a la província de València, a més de les castellonenques i alacantines de la Plana Alta i Baixa, l’Alt Palància, el Vinalopó Mitjà, l’Alt Vinalopó i la Marina Baixa. D’entre totes, destacava la comarca de l’Horta, amb 17 localitats que es convertiren a les Falles, tot i que només a Burjassot hi va haver falles amb certa continuïtat. La resta reemprengueren la seua activitat als anys 70. A les altres comarques passà el mateix, i només es poden citar els casos de continuïtat de
Després del parèntesi obligat de la Guerra Civil, la festa va prendre un nou impuls en la dècada dels quaranta, amb la creació en la ciutat de València de la Junta Central Fallera hereva del Comité Central Faller-, i que va ser imitada en altres localitats, com exemple en Alzira (1944), Carcaixent (1945) o Gandia (1946). La festa, però, va patir un creixement més lent en comparació amb l’època anterior, i fins a la dècada dels seixanta, van aparèixer falles en 23 municipis valencians i 7 alacantins, dels quals s’ha mantingut la tradició en Torrent (1943), Cheste (1944), Utiel (1944), Benaguassil (1945), Carcaixent (1945), Dénia (1946), Pego (1947), Ribarroja del Túria (1948), Sueca (1951), Llombai (1956), Elda (1958), Turís (1962), La Encina (1962), i Buñol (50s). Però la fase de més expansió de les Falles va ser a partir de la dècada dels setanta, possiblement arran de la cre-
Les quantitats parlen per elles mateixa i en la majoria de les localitats la tradició fallera encetada en esta fase és manté encara; solament 8 municipis han deixat de plantar falles. En aquesta època, de nou el moviment faller arrelà de manera destaca a l’Horta, en municipis com Paterna, Manises, Montcada, Paiporta, Silla, Aldaia, Alfafar, Albal, Massanassa, Benetússer, Massamagrell, Catarroja, Picassent o Puçol. Però la festa també va arribar a d’altres comarques valencianes i municipis com Alginet, Algemesí, L’Eliana, Benifaió, Alberic, La Pobla de Vallbona, Llíria, Oliva o Tavernes de la Valldigna; així com també a Benicarló i La Vall d’Uixó, en Castelló; i a les places alacantines de Benidorm i Calp. Va ser també en este període quan es van crear les prop de cinquanta Juntes Locals Falleres. Des dels anys quaranta estaven íntimament lligades a la Junta Central Fallera de València, però els últims anys la vinculació era més fictícia que real, ja que són els propis municipis els qui aproven o deneguen la fundació d’una nova comissió fallera. En total, tot este moviment festiu abraça a més de un miler de comissions falleres distribuïdes en 137 municipis que s’estenen per la majoria de les comarques de les tres províncies. A més, cal afegir les falles “silvestres” plantades en escoles, residències de tercera edat, centres de dia, o associacions de jubilats, que apropen la festa fallera als veïns, inclús en aquelles on no hi ha comissió fallera oficial. Però amb el temps, la nostra festa s’estengué també a altres països hispanoamericans, fruït de l’exili posterior a la Guerra Civil. Per això, les falles també arriben encara a llocs de l’Argentina, Mèxic, Costa Rica, l’Uruguai, Perú, Xile o Veneçuela. Des d’estos països, i des dels anys vint del segle passat, els descendents han fet el possible per tornar uns dies a València per a gaudir de la festa i retrobar-se amb la família, en tota una sèrie d’iniciatives conegudes com el Tren Faller, el Vaixell Faller, o més recentment, l’Avió Faller. D’altra banda, també s’ha estès a altres províncies de l’estat espanyol gràcies a la tasca realitzada des de les prop de quaranta cases regionals de València, que han portat les falles a llocs tan diferents com Eivissa, Mallorca, Gavà o Getafe, alguns dels quals fins i tot realitzen la seua pròpia plantà.
30
Novembre 2016
Les Falles: Història viva des del segle XIX
L
a història de les Falles de València és també la història d’una ciutat que ha anat canviant amb el pas del temps. Des dels carrers de Ciutat Vella fins a l’aparició dels nous barris de l’extraradi, els monuments fallers han anat omplint les places de vida, a mesura que la ciutat s’ha anat fent gran. Unes imatges que han quedat gravades en la retina dels més majors i que s’han transmés de pares a fills fins als nostres dies. Unes instantànies que ara permeten il·lustrar l’evolució d’una festa que ja és patrimoni de tots. Fotos: Rafael Solaz
En la part superior, la Falla de la plaça del Caudillo en els anys 50 i el monument de la plaça de la Reina de l’any 1965. En la segona línia, la Falla Quart-Doctor Monserrat de 1914, la Falla plaça Sant Jaume de 1943 i la Falla placa del Doctor Collado en 1928. A continuació, el monument plantat al Mercat de Colón en 1931, la Falla de la plaça Mariano Benlliure en 1927 i el monument de la plaça Ripalda en 1903. En la parti inferior, la falla del Mercat Central en 1934, la Falla Carrer de Baix de 1920 i el monument plantat en la plaça de Tetuán en 1927. Fotos Col.lecció de Rafael Solaz.
Novembre 2016
Testimonis Eduardo Martínez Stomvi
31
Manuel Civera
Maria Josep Safont
Alcalde de Llíria
Alcaldessa de Borriana
«Llíria es suma a un esdeveniment històric»
«¿Alguien imagina unas Fallas sin música?»
Benvolguts i benvolgudes fallers i falleres, és tot un honor dirigir-me a vosaltres com a alcalde de la Ciutat de la Música, de Llíria, i aprofite estes línies per enviar-vos la més sincera felicitació.
Cuando las Fallas de Valencia reciben el título de “Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”, cuando estos monumentos de cartón piedra han sido reconocidos por los organismos competentes como arte extraordinario creado para ser destruido por el fuego purificador, me pregunto qué importancia tienen la música y nuestras bandas en estas fiestas.
Després de molts anys treballant, tots els que formeu part del col·lectiu faller heu aconseguit que les nostres festes, les Falles, siguen declarades «Patrimoni Immaterial de la Humanitat» per la UNESCO. Ara hem de continuar treballant per tal que les Falles apleguen a tots els racons del món. Tots sou ambaixadors de la nostra festa, que amb vosaltres, té el futur assegurat.
¿Alguien puede imaginar una semana fallera sin música? ¿Un desfile o pasacalle de una comisión fallera, con su Presidentes y Falleras Mayores al frente, ataviados con sus trajes regionales, sin ir acompañados por una banda de música? Imposible, ¿verdad? ¿Se conciben unas fallas y unas falleras sin el efímero ramo de flores en su brazo? ¿Y sin fuegos de artificio anunciando acontecimientos sublimes? El arte de creación de esos monumentos, el arte floral, el arte pirotécnico y la mayor de las artes, la música, son componentes de una fiesta efímera, donde todo se consume en cuatro días y entonces ¿qué queda? Quedan las mujeres y hombres falleros, los artistas falleros, los pirotécnicos, los florales, los músicos y sus instrumentos, que volverán a sonar al día siguiente. Instrumentos que, como las Fallas, son elaborados de forma artesanal en Valencia por la primera marca nacional de viento-metal, Stomvi.
César Sánchez Presidente de la Diputación de Alicante
«Fiestas que traspasan fronteras» Quiero felicitar a todos los valencianos y valencianas por la reciente declaración de sus Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Se trata de una magnífica noticia que avala el prestigio y la singularidad de esta celebración ancestral, símbolo universal de nuestras costumbres y tradiciones. Este importante fenómeno artístico, cultural y social comparte muchas de sus señas de identidad con las fiestas populares de la provincia de Alicante, donde la música de bandas, la pólvora y los fuegos artificiales también son los principales protagonistas. Durante todo el año, son muchas las personas que visitan la Comunitat atraídas por la solemnidad, la belleza y el esplendor de unos festejos únicos en el mundo, entre los que destacan, precisamente, las Fallas de Valencia, les Fogueres de Sant Joan d’Alacant o las Fiestas de la Magdalena de Castellón. Todas estas celebraciones, muchas de ellas milenarias, se han convertido en un reclamo turístico innegable que traspasa fronteras, especialmente en la Costa Blanca, donde sus Fiestas Mayores, Patronales, Moros y Cristianos, Hogueras, Romerías o Ferias se suceden a los largo de los 365 días del año. Esta realidad es posible gracias al esfuerzo, el cariño y la dedicación que los festeros dedican, generación tras generación, a mantener vivas estas costumbres. Un trabajo ejemplar que siempre recibe una gran respuesta por parte de los ciudadanos y que, en ocasiones, se ve recompensado con reconocimientos tan importantes como el que ha obtenido las Fallas de Valencia en esta ocasión. ¡Enhorabuena!
Des de Llíria ens sumem a este esdeveniment històric i seguirem donant-vos el suport necessari per a que les festes falleres no només siguen una setmana de festa a l’any, sinó que configuren una manera de vida. Continueu gaudint com sabeu, la recompensa a l’esforç, ja és vostra, ja és nostra, és de totes i de tots.
Esteban Morcillo Rector de la UV
«Les Falles projecten els nostres artistes al món» Les Falles, com ha quedat sobradament acreditat, són una expressió festiva popular que han desenvolupat tot un conjunt d'arts al seu voltant, des de les plàstiques fins la música. En eixe sentit, les falles són un patrimoni immaterial que no pertany ja sols als valencians i valencianes sinó que, per la seua difusió i impacte globals, pertanyen a la Humanitat. Aquesta Declaració així ho confirma, permitint a la nostra societat continuar gaudint i engrandint una festa que projecta una dimensió de les nostres expressions artístiques al món.
Francisco Mora Rector de la UPV
«Contribuirà a la salvaguarda de les Falles» L'any 2007, José Luis Montalvá, llavors vicepresident de la Falla de la Universitat Politècnica de València (UPV) i director de Fòrum UNESCO Universitat i Patrimoni, va coordinar la primera proposta presentada davant la Junta Central Fallera perquè la festa de les Falles fóra considerada Patrimoni Immaterial de la Humanitat. Des d’aleshores fins ara, la UPV ha continuat donant el seu suport a la candidatura de les Falles, un suport manifestat, per exemple, en el fet que la UPV siga una de les quatre institucions valencianes que participen en el projecte CARNVAL (cofinançat pel programa Europa Creativa de la Unió Europea). Des de la UPV pensem que aquest reconeixement contribuirà a la salvaguarda de les Falles com a singularitat festiva, i que garantirà la viabilitat i la transmissió a les futures generacions.
José Vicente Morata
Diego Gómez
Pres. de Cámara Valencia
Alcalde d’Alzira
«Cada 20 de març la festa torna a nàixer»
«Un motor para la economía valenciana»
Quan el matí del 20 de març Borriana encara fa olor a ninot cremat; quan encara algun coet dels que va quedar amagat al fons de la caixa ens desperta del somni faller... als borrianencs i borrianenques se'ns dibuixa un somriure a la cara. Un somriure entre melancòlic per l'inici del compte enrere fins les properes Falles, i de satisfacció per vore com un any més, les 19 agrupacions falleres de la ciutat han pogut complir la seua cita amb la història, la tradició i la festa d'una de les nostres majors manifestacions culturals, les Falles de Sant Josep. I gràcies a la il·lusió que cada 20 de març comença a tornar a créixer dins dels fallers i falleres, la festa renaix i supera totes les dificultats per unir, al voltant de l'art, el foc i la festa, a aquells que tant volem a les Falles.
Las fallas tienen una trascendencia económica y social cada vez más importante para Valencia. La magnitud que van adquiriendo año tras año y su impacto internacional las convierten no sólo en una manifestación artística y cultural de nuestro pueblo, sino en un generador de riqueza para la economía de la ciudad. Durante los cinco días centrales de las Fallas, la ciudad duplica su población, lo que supone una importante inyección de ingresos para todos los sectores que viven del turismo: hostelería, restauración, comercios, transportes, etc.
I avui, els nostres ninots, els fallerets i falleretes, les notes musicals d'una banda o d’una colla de dolçainers, la festa i l'ambient faller estan d'enhorabona amb la inclusió al llistat de Patrimoni Immaterial de la Humanitat. Un reconeixement que farà que els pobles que celebrem les Falles estiguem més orgullosos i satisfets de vore com al matí del 20 de març, cada vegada seran més els qui inicien el seu particular compte enrere fins a les properes Falles!
Lorena Milvaques Vicealcaldessa de Gandia
«Mereixíem ser part d’eixe club selecte» Com a vicealcaldessa de Gandia i com a fallera, vull donar la més sincera enhorabona a tot el col·lectiu faller perquè la Nostra Festa, en majúscules, és ja part del llistat d’esdeveniments que han rebut el títol de Patrimoni Cultural Immaterial de la Humanitat. Les Falles són la nostra manifestació festiva per excel·lència. Són la manera més nítida i espontània que tenim les valencianes i els valencians de traslladar a la resta del món el que som com a poble. Les Falles són un vehicle de socialització, un motor cultural, un aparador turístic, una mostra de la nostra capacitat de riure’ns de nosaltres mateixos. Totes eixes coses i moltes més. Les Falles, a més, s’estan convertint cada vegada més en un vehicle de valencianitat, en un instrument que ha d’ajudar a conformar el nostre univers identitari com a poble. Per totes estes raons, ens mereixíem formar part d’eixe club selecte promogut per la UNESCO. I per totes eixes raons seguirem treballant per fer de les Falles una festa oberta al món.
La actividad fallera va más allá de los monumentos y los visitantes y muchos sectores se ven beneficiados e impulsados por el trabajo que generan las comisiones falleras a lo largo del año, lo que sin duda tiene un impacto económico a lo largo del territorio. En este sentido, la designación de la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad será un reconocimiento al impacto, atractivo y personalidad de estas fiestas y una fuente de promoción turística.
Pedro Rodríguez Presidente de la FSMCV
«Nuestra más sincera felicitación» Conseguir el reconocimiento como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad no es algo sencillo. Aunque a los ojos inexpertos de muchos, la falla puede parecer monumento y poco más, quienes estamos dentro sabemos del papel de los diferentes actores que intervienen para el normal desarrollo de la fiesta. La confluencia de acuerdos y el hecho de que cada uno de nosotros haya expresado su apoyo particular a esta iniciativa, ha sido uno de los factores para que el proyecto resultara merecedor del reconocimiento de la UNESCO.
«L’autèntica idiosincràsia dels alzirenys» Les Falles d'Alzira són molt més que una expressió festiva. Al llarg de tot l'any les places i carrers de la ciutat alberguen actes fallers. Enguany, per primera vegada en els 128 anys d’història de les Falles, s'ha organitzat el Mig Any Faller des de la Regidoria de Festes de l'Ajuntament. De les moltes activitats programades per al cap de setmana del 12 i 13 de novembre, caldria destacar la participació de més de dos mil persones en la creació d'una gran flama, per tal de donar suport a la candidatura de les Falles d'Alzira a Patrimoni Immaterial de la Humanitat per la Unesco. Ara que hem aconseguit esta anhelada declaració cal continuar treballant per la nostra festa, ja que les Falles a la nostra ciutat són l'autèntica idiosincràsia de les alzirenyes i els alzirenys. En nom de tota la corporació municipal, l’enhorabona pel reconeixement. Entre totes i tots engrandim la ciutat com a segona potència mundial de Falles.
#somdeTorrent
«Una celebració centenària» A Torrent s'origina la base del monument plantat enguany al festival d'art més important del món, al desert de Nevada, el Burning Man. A Torrent, les Falles són Festa d'Interés Turístic i Bé d'nterés Cultural per tractar-se d'una celebració centenària. Són ja més de 40 anys portant endavant concursos de Jocs Florals, de Declamació, de Teatre o del popular Cant de L'estoreta. A Torrent s'imprimixen llibrets de falla d'entre els millors considerats de la Comunitat, i en breu vorà la llum un nou premi de la mà de Lletres Falleres. #SomdeTorrent i FEM CULTURA. #SomdeTorrent i ens felicitem que la Unesco reconega les nostres Falles com a Patrimoni Universal. Enhorabona.
Las Sociedades Musicales forman parte del entramado fallero como un actor poco valorado por el mismo, pero imprescindible para que la fiesta lo sea. Recordar el sudor frío que nos recorre la espalda tan solo de pensar en unas fallas sin música de banda no debe ser el centro de nuestra manifestación el día de la concesión del tan ansiado reconocimiento. La felicitación honesta y sincera del universo bandístico de toda la Comunitat, a ese otro universo de algunas poblaciones de esta tierra –entre ellas nuestro Cap i Casal-, es lo que expresamos de todo corazón en este histórico momento.
l’Ajuntament de Gandia amb les seues Falles. Felicitacions. Nosaltres també
l’Ajuntament de Llíria amb les seues Falles. Felicitacions. Nosaltres també
l’Ajuntament de Borriana amb les seues Falles. Felicitacions. Nosaltres també