No al cierre de Austral Líneas

¡No al cierre de Austral Líneas Aéreas!

En mayo de este año el presidente del Grupo Aerolíneas Argentinas y Austral, Pablo Ceriani, anunció la intención de fusionar ambas empresas. Para que nos explique la situación entrevistamos a Gastón Kuttnick, delegado de Austral y miembro de la agrupación anti burocrática Frente de Trabajadores Aeronáuticos que, junto a otras agrupaciones en el frente La Voz de APTA, disputa la conducción del sindicato de los técnicos aeronáuticos. Para La Verdad es una gran satisfacción poder entrevistar a un compañero con el que además nos unen los mismos objetivos socialistas, ya que Gastón es trotskista y militante de Opinión Socialista.

Verdad Socialista: ¿En qué consiste la fusión de Aerolíneas Argentinas y Austral? Gastón Kuttnick: La fusión es un plan presentado por el Licenciado Ceriani, que en realidad lo que esconde es una reforma laboral porque, primero y principal, Austral tiene un mejor Convenio Colectivo de Trabajo (que el resto de los trabajadores/as de la actividad) pero además en el plan presentado no solo es la fusión de Austral, sino que es una restructuración de toda la compañía, creando además dos unidades de negocios, dividiendo la empresa en tres: la venta de pasajes, la venta de la carga y la venta del servicio de mantenimiento.

Este modelo ya fue aplicado en otras aerolíneas con un nefasto resultado para los trabajadores, solo recordar que en estas horas lo último que quedaba de Mexicana Aviación, que era la parte de mantenimiento, también entró en quiebra. La fusión esconde el cierre de una compañía y también lo que hablábamos recién, tampoco queda muy claro desde el punto de vista patrimonial, si en el fondo no va a terminar desapareciendo la empresa, digamos que haya una contracción de la participación estatal en el mercado, producto de todos los intereses internacionales que hay en juego. En el acuerdo que se acaba de cerrar (en referencia al acuerdo alcanzado con los bonistas por el canje de deuda) seguramente hay letra chica y hay muchos interesados en que el mercado del aerotransporte pase a manos privadas y una administración de empresas que puedan lucrar.

Nosotros creemos que en perspectiva puede estar sucediendo eso, porque no se ha explicado de parte del Gobierno Nacional qué política aerocomercial quiere desarrollar. Por eso decimos no al cierre de Austral, porque vemos en esto achicamiento y despidos. También hay que decir que ellos mismos ya empezaron a nombrar estas palabras, en el sentido del plan de prejubilaciones y hay fuertes rumores de que van a haber retiros voluntarios. Además de amenazar a los empleados con que, de no aceptar el plan de reestructuración, pueden venir medidas más duras. Hay que analizar lo que está pasando en la competencia, hablando de Latam y el cierre y la pérdida de los puestos de trabajo que están enfrentando los compañeros.

VS: ¿Cómo respondieron las bases a la propuesta del Gobierno y qué acciones concretaron para manifestarse? GK: Desde el cuerpo de delegados de Austral, nosotros ya veníamos analizando un poco la situación, también desde la agrupación FTA, a la cual yo pertenezco, y habíamos sacado una advertencia en defensa del Convenio Colectivo de Trabajo, ante la primera amenaza que había hecho Ceriani, antes de este anuncio. Después, cuando sale el anuncio oficial, el cuerpo de delegados hizo una primera exposición de lo que creíamos que iba a terminar ocasionando cada una de estas medidas, la explicamos lo más didácticamente posible y empezamos a ponernos en acción en un plan de diferentes medidas. Estábamos atravesando la situación de la pandemia, por lo tanto tomamos la determinación de manifestarnos en dos caravanas automovilísticas, que tuvieron un éxito para nosotros muy respetable, rondando los 200 vehículos cada una. Hicimos una el día 23 de junio que es el día de la fundación de Austral y después el día 6 de julio, en respuesta a la primera Asamblea de Accionistas, donde se presentó el plan de fusión. Hicimos toda una exposición en defensa de la necesidad de Austral y de la defensa del Convenio Colectivo de Trabajo y, en realidad también, la necesidad de los trabajadores de conocer bien profundamente el plan y ser parte de la discusión.

VS: ¿Qué hicieron hasta ahora los dirigentes gremiales?

GK: Lamentablemente los dirigentes sindicales, salvo la Unión de Aviadores Líneas Aéreas (UALA), que se expresó en contra de la fusión públicamente (pero todavía no ha accionado con movilizaciones), todo el resto de los sindicatos, incluso también UALA, no han trabajado en asambleas informativas ni de resolución para poder llevar adelante la defensa de los Convenios, sino que todo lo contrario.

El sindicato al que pertenezco (la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico) no hizo ni una asamblea, ni reuniones de delegados ni nada. Otros sindicatos han hecho reuniones virtuales con los compañeros, pero en ninguna de ellas se planteó la necesidad de resistir, ni se sometió esto a votación. Sólo se fueron desarrollando las conversaciones que había con la empresa, pero siempre todas las conducciones alineadas al plan empresarial. Recién ahora hay unos algunos —pequeños— cuestionamientos, pero todavía la preocupación en las bases es muy grande; las suspensiones se siguen repitiendo y no hay un claro plan de defensa de los Convenios Colectivos de Trabajo.

Creemos que es necesario plantearle a toda la sociedad la necesidad de una aerolínea estatal fuerte, que pueda hacer popular el uso del transporte aerocomercial del avión y también desarrollar todo lo que tiene que ver con el transporte de cargas, todo lo que permita potenciar las economías regionales y también hacer un país más unido.

Eso es parte de lo que estamos desarrollando como campaña, a su vez también estamos con una serie de asesoramientos judiciales y veremos ahí en ese canal qué medida vamos a poder accionar, pero no vamos a descartar ninguna cuestión. Aunque sabemos que estas luchas se ganan en la calle, también pensamos acompañar con presentaciones que hemos hecho en el ministerio de trabajo (todavía no tuvimos respuesta) y estamos pensando en acudir a la justicia.