Río de Janeiro, famoso por sus bellezas naturales, cultura y turismo posee entre las cosas más intrigantes en su paisaje no solo las playas, las selvas y los cerros, sino que también las favelas. Con una densidad demográfica de 36.415 hab/km² y una morfología completamente entramada con el tejido urbano, es innegable que las favelas no generen impacto ambiental y espacial de grandes proporciones. El Plan Favela Barrio a su vez, a partir del momento en que interviene proponiendo soluciones para la mejoría del espacio de dichas significativas fracciones de la ciudad, sus acciones también conllevan en impactos ambientales a nivel urbano. Analizando distintos proyectos hechos para el plan, este ensayo abordará la dimensión ambientalespacial de dicho proyecto urbano, Favela Barrio. Conforme lo visto anteriormente, el Plan Favela Barrio es un programa de urbanización de asentamientos populares que nace en 1994, con la unión de la Municipalidad de Río de Janeiro y el Banco Interamericano de Desarrollo, cuyo objetivo principal es el de implementar mejorías urbanísticas, comprendidas en obras de infraestructura urbana, accesibilidad y en la creación de equipamientos que, a través de estas acciones, procuran obtener beneficios sociales, “orientado hacia la recualificación de los asentamientos precarios y marginales para convertirlos en parte integrante de la ciudad “formal”, dotados de los indispensables servicios básicos” Pero desde el momento en que el plan empezó a funcionar, por ser el estado uno de los principales actores en el proyecto, los cambios de gobierno y de gestión implicaran ciertas desorientaciones generales en el proceso de planificación. Sin embargo, en casi 15 años de existencia, muchos proyectos fueran realizados para el plan, dentro de los cuales buena parte fue de hecho implementada. Espacialmente ¿cual fue la envergadura de dichas intervenciones? Así, lo que este ensayo viene a abordar es cuál sería la real dimensión espacial que el plan Favela Barrio da a las favelas y cuál es su envergadura en el tema de la ciudad. La ciudad de Río de Janeiro es una ciudad mundialmente conocida por sus bellezas naturales, cultura y turismo. Pero entre las cosas más interesantes en el paisaje de Río no están solo las playas, las selvas y los cerros, sino que también las favelas, pues con una alta densidad demográfica -36.415 hab/km²- y una morfología completamente entramada con el tejido urbano, es innegable que las favelas no generen impacto ambiental y espacial de grandes proporciones. Cuando en 1993 asumió César Maia el cargo de Alcalde se produjo un cambio profundo en la estrategia urbana del municipio. Bajo la dirección de Luiz Paulo Conde, Secretario de Urbanismo -después elegido Alcalde en el período 1997-2000- , y de Sergio Magalhães, Secretario de Vivienda durante los dos períodos, la ciudad vivió un desenfreno constructivo. Esto porque fue la primera vez en que dos arquitectos asumían importantes cargos administrativos. Pero esto no significa que anteriormente los gobernadores no promovieran obras públicas, sino que tuvieron una limitada participación al limitarse al embellecimiento de la zona sur o al desarrollo de infraestructuras.