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Historia de la UAA 06: El Instituto y el Positivismo

NETZAHUALCÓYOTL AGUILERA R. E.

Sinopsis. Hemos visto la paralización del conocimiento provocada por el sistema de enseñanza escolástico basado en dogmas religiosos que debían creerse sin discusión, impuesto por el imperio católico romano dominante en Europa en el período conocido como Edad Media, durante los mil años que van aproximadamente del 500 al 1,500 d.C.

Y hemos visto también la fuerte reacción que los turcos otomanos y el nuevo imperio musulmán provocaron en los comerciantes europeos cuando les arrebataron las rutas de la seda y de las especias que controlaban desde hacía más de mil años.

Al buscar otra ruta para llegar a los países asiáticos sin intermediarios, los comerciantes y la primera reina Isabel de Castilla (la Católica), haciendo caso omiso de las amenazas del fuego eterno pusieron en práctica los conocimientos de los vikingos y otros navegantes que en sus viajes afirmaban haber estado en tierras desconocidas al occidente y financiaron el primer viaje de Cristóbal Colón en 1492 con la esperanza de los mercaderes de recuperar sus ganancias y de conquistar nuevas tierras por parte de la Corona.

A pesar de ser errónea, la noticia de que Colón había demostrado la redondez de la Tierra al llegar a territorio asiático desde España por vía occidental causó conmoción en la Iglesia, que no supo cómo detener los cuestionamientos de los estudiosos que a pesar de las amenazas de muerte de la Inquisición empezaron a profundizar en sus investigaciones.

Pero 30 años después, cuando el primer viaje completo de circunnavegación iniciado por Magallanes fue concluido por Sebastián Elcano en 1522, demostró que las tierras encontradas por Colón no eran asiáticas sino que pertenecían a un continente que los europeos desconocían -el nuestro- sin embargo confirmó, científicamente, que la forma de la Tierra no era plana sino global y tampoco es el único planeta en el Universo.

Aquí sí ya le fue imposible a la Iglesia detener el torrente de cuestionamientos que fueron encontrando explicación lógica mediante el novedoso método científico.

LIBERALISMO FILOSÓFICO. Entre los autores que borraron del mapa la enseñanza dogmática dominante en la Edad Media para sustituirla con los conocimientos adquiridos por la experiencia vivida mediante la observación empírica, tenemos al filósofo inglés Francis Bacon, que entre otras obras publica su Novum organum en 1620 sobre la interpretación de la Naturaleza.

Igual sucede con René Descartes con su Discurso del Método de 1637, que con base en el uso racional de los preceptos que denomina duda metódica , análisis, síntesis y control, debemos ser capaces de rechazar afirmaciones sin fundamento y sí, en cambio, obtener nuevos conocimientos por la vía experimental.

Aplicados a la organización del Gobierno, esos nuevos conocimientos dejan al descubierto las columnas en que la monarquía hereditaria, dictadura, caciquismo, etc., se apoyan para mantener sometido al pueblo: el poder del brujo, hechicero, mago, sacerdote, etc., basado en el sistema de enseñanza dogmático que lo mantiene en la ignorancia por el temor a lo desconocido, y el poder militar dispuesto a reprimir cualquier cuestionamiento que se relacione con la distribución de la riqueza, que pudiera alterar el sistema de explotación imperante.

LIBERALISMO POLÍTICO, El título que los pueblos le han impuesto a su lucha por sacudirse la explotación que padecen por parte del poder absoluto ha sido, precisamente, liberalismo, materia ampliamente estudiada por los teóricos de las disciplinas políticas.

CONSTITUCIÓN, LA CLAVE . El instrumento básico que se encontró para que los pueblos puedan liberarse progresivamente de la explotación que padecen a manos de los dueños de la riqueza, es el documento en el que se puedan ir estableciendo los derechos y obligaciones de cada uno de los miembros de la sociedad hasta alcanzar la justicia social que reduzca o elimine esa explotación.

Y han sido, básicamente, dos las formas que se han logrado establecer al respecto:

1,215 Primera monarquía constitucional. Este sistema, que se aplicó por primera vez en Inglaterra, restringió el poder absoluto del Rey empezando con la Carta de Derechos (Bill of Rights) de 1215 hasta llegar, tres siglos después, a la consolidación de la monarquía constitucional donde el rey ejerce el poder ejecutivo, pero acotado por otro poder denominado Parlamento integrado por dos cámaras: la cámara alta o de los lores (nobles designados por el rey) y la cámara de los comunes (burgueses o civiles designados por vía electoral) que representa los intereses del pueblo.

1776 Primera república constitucional. El sistema republicano se aplicó por primera vez en Estados Unidos de América, al unirse las catorce colonias establecidas por la Gran Bretaña en nuestro continente, después de conquistar su independencia con el reconocimiento expreso de su metrópoli, juró su Constitución en 1787 con un gobierno integrado por tres poderes independientes entre sí: el legislativo, el ejecutivo y el judicial, siguiendo la teoría de Montesquieu en “El espíritu de las leyes”, plasmada en la Enciclopedia francesa.

1789 Revolución francesa. Si bien fue la segunda república constitucional del mundo, su trascendencia fue de mucha mayor repercusión que la de Estados Unidos, tanto por la forma en que se dio como por la influencia de las teorías filosóficas, políticas, sociales y económicas que se proyectaron al mundo entero y que incluso en muchos casos fueron adoptadas por las monarquías ilustradas.

Pero quiero centrar el interés no en las diversas teorías, sino en una simple frase que se apoderó de la atención mundial para definir lo que se entendía sintéticamente por liberalismo en Francia: “Libertad, igualdad, fraternidad”

Clara, simple, atractiva, se ganó de inmediato la simpatía de la población desheredada, que se preguntaba cuál era la receta para alcanzar aquél sueño que ninguna doctrina había logrado alcanzar.

EL LIBERALISMO EN AMÉRICA LATINA . En el sistema educativo de nuestra Nación existe un vacío lamentable. No incluye la historia de América Latina. Y sin esa información, el estudiante de primaria, de secundaria, de bachillerato y profesional carecen de la información elemental para entender la historia de nuestra propia Nación. Esto quiere decir que el pueblo mexicano carece de la formación necesaria para tener un panorama completo de su propia identidad.

Y lo que sucede en México también sucede en otros países de América Latina, a pesar de que la historia de nuestra Región, que el cubano José Martí calificara como “Nuestra América” y el argentino Manuel Ugarte como nuestra “Patria Grande” por la identidad de nuestro pasado, la riqueza de nuestras culturas originarias y la prosperidad que lograríamos si uniéramos nuestros esfuerzos como alguna vez se hizo, pero que nuestras nuevas generaciones desconocen.

En nuestra próxima colaboración expondremos un ejemplo de ello precisamente con el tema del liberalismo, para entrar luego al caso mexicano y concluir esta etapa con el capítulo de Aguascalientes, para comprender el porqué de nuestro Instituto de Ciencias en el siglo XIX.

Por la unidad en la diversidad Aguascalientes, México, América Latina tlacuilo.netz@yahoo.com

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