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El año de la igualdad y la independencia federativa
by LNCleon
FULGENCIO FERNÁNDEZ
LEÓN Sin duda, si hubiera que apuntar la noticia que marca el inicio de la nueva temporada de lucha leonesa, especialmente la competición estrella que siempre es la Liga de Verano, sería que es la «temporada de la igualdad», entre la competición masculina y la femenina, igualdad en todos los ámbitos aunque lo más llamativo resulte la paridad en los premios en metálico en los corros;
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LUCHA LEONESA 3 es decir, cobra lo mismo el campeón masculino y la campeona femenina, e igualmente el resto de premios. Otra novedad derivada de la aplicación de esta Ley de Igualdad es que desaparecen los corros masculino y feemenino, habrá corros de categoría senior que deberán tener las dos modalidades, los cuaytro pesos de la masculina y los tres de la femenina, como ya ha ocurrido en el corro ya celebrado, el de Quintana de Rueda, al haber suspendido el que iba a abrir la liga, en la Romería de Camposagrado, que se suspendió por la lluvia y ha sido tras-
La Ley de Igualdad llegó a la lucha y debe aplicarse ya, lo que, por ejemplo, iguala los premios
La igualdad en los premios en metálico encarece los corros, lo subsana en parte una ayuda de Diputación
Ya no existen corros masculinos y femeninos sino corros senior con las 2 modalidades ladado al primer fin de semana del mes de septiembre, en el que había una fecha libre.
EL AUMENTO DEL PRECIO
El principal problema que planteaba esta paridad en la competición masculina y femenina es el aumento del coste de los corros (las chicas cobraban antes mucho menos) y se ha podido sulsanar en una parte importante aumentando la cuantía de la ayuda de la Diputación a cada corro, de manera que se mantiene el número ‘habitual’ de corros.
Mayor implicación de los árbitros en el corro
Al margen de los premios y el aumento del coste de los corros hay otros aspectos derivados de la nueva situación. Se supone que la igualdad en los premios atraerá a más luchadoras a los corros (aunque en el ya celebrado en Quintana de Rueda realmente no ha ocurrido), lo que supondría un aumento en la duración de los mismos que resultaba preocupante para la Federación pues una cita que se vaya de manera habitual a más de tres horas es, sin lugar a dudas, exce- sivo para cualquier competición deportiva.
Por ello, han puesto en marcha algunas iniciativas, vinculada a la mayor implicación de los árbitros en dar agilidad a los corros, en aspectos como no dejarles perder tiempo, aplicar con más rigor las pasividades o poner un tiempo máximo para los agarres, que se ha establecido en 40 segundos, si los superan serán amonestados, los dos luchadores, o uno, a criterio de los colegiados. Para ello, los árbitros disponen de un cronómetro manual con el que controlarán este tiempo. También se establece un periodo má- ximo de dos minutos para recibir asistencia médica; podrá pasarse a disputarse otro combate si la espera es más larga y si esto no fuera posible deberán tomar una decisión de abandonar o seguir.
Con la finalidad de estimular una lucha de ataque, con caídas, se incentivan las caídas mediante un premio especial para el luchador o luchadora que más caídas haya dado a lo largo de la temporada, premiando cada caída entera con 0,10 puntos y cada media con 0,05, sin contar las caídas de la disputa por la tercera plaza y tampoco las de las finales.