Javi hace historia y David confirma la ‘alternativa’

FULGENCIO FERNÁNDEZ

LEÓN El 21 de agosto se convirtió en una de esas fechas que quedan escritas para la historia de la lucha leonesa, además en un corro singular y de gran tradición, el Corro cubierto de Riaño.

Allí, Javier Oblanca Sánchez, ‘La Cátedra Ambulante’ de Villabalter, acababa de batir el récord de longevidad al ganar un corro, con 48 años y medio. Curiosamente lo volvió a batir, el 11 de septiembre, en otro recinto cerrado para la lucha, en Mansilla de las Mulas. Le arrebataba este honor a Roberto Andrés Moro, El Morín de Riaño.

Fue una fecha que ahí queda grabada. En la cruz de las fechas quedó el día que un accidente de moto dejó fuera de combate a Víctor Llamazares, el campeón de 8 ligas, y se abría una nueva fase en la que David Riaño se convirtió en el líder sólido, pero también hubo oportunidades para Fer, que ganó en Vegaquemada; para Jorge Iglesias, que se convirtió en el primer berciano en ganar un corro, pues el de Vega de

Javi Oblanca hizo historia al ganar un corro con 48 años en Riaño, después repitió gesta en Mansilla

La lesión de Víctor hizo de David Riaño el favorito y el de Cistierna cumplió con creces

Fer, Jorge Iglesias y Florián en dos ocasiones también ganaron sus primeros corros en categoría senior

Espinareda ganó, además, a la sombra de la Catedral; para Florián Yugueros, que ganó en Riello y la romería de las Manzanedas.

También Rubén Cerezal se asomó metiéndose en alguna final y, sobre todo, Jesús el de La Braña, que sigue sumando finales sin victoria. Acabó además el año apartado de la actividad al fallecer su padre, el que cuidó y mucho en la larga enfermedad que pasó.

La ‘pena’ —para esta categoría— es que parece que Jorge Iglesias se va a ir a luchar en medios.

David Riaño, un campeón amenazado

David Riaño, de Cistierna, es el campeón actual de ligeros. Merecido campeón al margen de que la lesión de Víctor Llamazares le allanara el camino. Pero antes de la lesión el chaval ya había dado muestras de calidad y ganas de plantarle cara al Hombre Tranquilo de Valderrueda. Así, por

Florián y Fer y Rubén, año de plantar cara

Hay un grupo de luchadores jóvenes que vienen apretando y los aficionados esperan que den un paso más. Los más representativos serían aquellos que ya han ganado algún corro, como serían los casos de Fernando Rodríguez, Fer de Villavente de la Sobarriba, o Florián M. Yugueros, de Sorri- ejemplo, David ya había derrotado a Víctor en el corro nocturno de Quintana y estaba siempre ‘en la pomada’. Y, sobre todo, es importante saber el plus de confianza que le puede otorgar el haber sido el gran dominador de la Liga y otras competiciones, el sentirse capaz de todo, que es muy importante en cualquier deporte y más en la lucha, donde comerse la cabeza está a la orden del día

Víctor Llamazares, regreso y victoria

La lesión por accidente de moto de Víctor Llamazares marcó la temporada 22 en ligeros, donde el de Valderrueda era el gran favorito, como no podía ser de otra manera después de haber ganado ocho ligas en la categoría. Esta temporada ha regresado después ba, que son los que ‘más cerca’ están de plantar cara a los dos grandes favoritos: David y Víctor; pero también luchadores con gancho entre la afición, como Rubén Cerezal, marcado por el afecto que siempre despertaron los luchadores de Corcos (su padre y sus tíos) o Fran, El último Pelayo de Liegos, que debe coger el testigo de ese club que siempre presentó a buenos luchadores.

Javi y el corro que la lucha le debe a Jesús

Ligeros siempre fue una categoría con veteranos ejemplares, gente que da juego. En la actualidad, sin duda, el gran representante es Javi Oblanca, que ostenta el título de ser el ganador más longevo de un corro de Liga (lo batió en dos ocasiones la temporada de un año en blanco por el accidente y su debut en Quintana de Rueda no pudo ser más brillante, victoria incluso con suficiencia a pesar de que reconoce el de Valderrueda que aún no está bien, que incluso no ha recuperado toda la movilidad en el brazo derecho. Todas las posibilidades están abiertas, David más confiado, Víctor menos... pasada), pero entre los aficionados circula un dicho que es, a su vez, un deseo: «La lucha leonesa le debe un corro a Jesús el de La Braña». Y es que el deportivo y ejemplar luchador, que no luchó la última parte de la Liga por fallecimiento de su padre, ha luchado más de una decena de finales pero aún no la logrado la victoria, que ya merece.

MEDIOS La temporada pasada estuvo marcada por la lesión de Moisés que propició la irrupción de Adri, el alumno de El Junco que quiere ser El Junquín