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EVASIÓN
Paula Cánovas del Vas propone un regreso al espíritu pop de los años 60, pero con una ética contemporánea.
Por LORENA MEOUCHI
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De origen español, Paula Cánovas del Vas se crió prácticamente en el estudio de moda de su madre, quien tiene un taller de vestidos de novia en Murcia, España. Esta pasión la llevó a la Universidad de Central Saint Martins en Londres, donde desarrolló el lenguaje visual que la caracteriza. Después de graduarse de un máster en 2018 y haber realizado prácticas en firmas tan consolidadas como Maison Margiela y Gucci, la diseñadora se dio cuenta de que tenía la necesidad de explorar su propio universo estético. «Cuando diseño no tengo a una musa o mujer en mente, no quiero clasificar ni forzar el trabajo que hacemos; es una marca para el que la quiera llevar», afirma. Con esa filosofía en mente, la diseñadora realizó su colección primavera / verano 2021 desde el confinamiento con la intención de ofrecer a sus clientes una fuente de evasión. «Es una reflexión sobre la ansiada libertad, con referencias a la psicodelia y con alusiones al escapismo», explica. «Utilizamos materiales reciclados, algodones orgánicos y nos centramos en las piezas de punto». El resultado es una magnífica propuesta de siluetas y estampados contrastantes que hacen referencia a setas alucinógenas. Con una producción muy cuidada en Europa y con un pequeño estudio de cuatro personas, la diseñadora tampoco podía dejar atrás a la persona por quien comenzó todo: su madre. «Es la reina del calzado. Ella se encarga de visitar las fábricas en España y diseñamos los zapatos juntas», explica. Porque la infinita creatividad que caracteriza a Paula le corre