Ruta del ingenio libro

LUIS HERNANSÁIZ

EN UN MUNDO ESFÉRICO NO HAY VIAJE SIN RETORNO TODA IDA TE ACERCA A LA VUELTA Y CUANDO REGRESAS, YA NO ESRES EL MISMO

PRESENTACIÓN DEL AUTOR Luis Hernansáiz, nació en el año 1955, a la salida del Sol sobre una pequeña y ahora casi despoblada localidad de La Alcarria Conquense, en plena primavera.

Un iniciador de obras, que casi nunca termina.

• Desde los 27 años ha sido un viajero constante entre España y América Latina, con periodos largos de estancia en México. Se formó como Diseñador Industrial, pero su mayor vocación ha sido promover el encuentro entre personas y culturas, realizando trabajos de Animación para jóvenes. Ha ejercido como formador de Monitores y Directores Juveniles y ha sido promotor de la creación de diversas asociaciones, Escuelas de Animación y ONGs. Colaborando con estas últimas sobre todo en Centro América y Colombia • Profesor en técnicas para el Desarrollo de la Creatividad, Ludoterapia y otras disciplinas afines.

• Experto en Técnicas Orientales, habiendo estudiado, experimentado y enseñado desde el año 1978 prácticas de Yoga, Meditación, Wu-Shu, Wu-Wei. Pionero en Madrid, en la formación de Profesores de Yoga.

• Participó como experto de Yoga en el INCUAL Ministerio de Educación del Gobierno Español, para cualificar el Yoga como enseñanza oficial • Director de Centros de desarrollo Humano y Educación Medio Ambiental – Ashram (enclave en un medio natural, tipo albergue, con capacidad para más de 200 personas, donde se estudian y practican todo tipo de iniciativas humanas para la consciencia).

• En definitiva, un artesano de la cultura, un hacedor de puentes, entre las técnicas de mejora y participación social propias de Occidente y las milenarias disciplinas para el desarrollo del Ser Humano de Oriente, ofreciendo a otros lo encontrado en el transcurso de los años, con los mejores deseos de crear un estado de armonía social y ¡PAZ! interior. Sin dogmas que defender o ideologías que inculcar.

Ser un Ser Humano, con los tinos y desatinos propios de esta condición, es lo que mejor me define; que ha de transitar por este mundo, como todos lo hacemos, sin ninguna pretensión, nada más que vivir lo que la vida me ofrece o me quita, a sabiendas que la única obra que termine será mi propia vida, cuando este corazón se pare.

J. Luis Hernansáiz

INCORPORACIÓN ¿QUIÉNES SOMOS?

La Ruta del In-Genio

El Genio, cada vez que sale de su lámpara maravillosa, es para hacer de lo cotidiano algo excepcional y de lo excepcional algo cotidiano.

No pretendo decirle a nadie quién es, esa es tarea de cada uno; si yo te dijera quién eres te estaría mintiendo.

Sólo es posible describir el campo donde tu Esencia duerme y que todo Ser humano tiene. Disponemos de un cuerpo con sus múltiples funciones fisiológicas pero ¿somos el cuerpo?. También tenemos emociones, aunque en muchas ocasiones ellas nos poseen a nosotros, con sus nacientes, antiguos y cambiantes estados. Además, continuamente, y aunque uno no quiera, la mente discurre vagabunda, creando mundos fantásticos. Por último, fuimos capaces de amar y a esa función específicamente humana le llamamos espíritu; pero hasta el espíritu, en ocasiones, se exalta transportándonos a una experiencia de totalidad, como en otras, se sumerge en el más oscuro aislamiento y torpe fanatismo.

Por tanto, poner nuestra identidad en atributos tan inestables, nos expone a una constante incertidumbre y es, entonces, cuando queremos construir acontecimientos, relaciones, objetos y cosas estables y duraderas, en un territorio donde, en realidad, todo es propenso a cambiar y nada permanece. A pesar de ello, tenemos la necesidad,

desde los más remotos tiempos, de encontrar la inefable inmortalidad, narrada en tantos cuentos y leyendas.

Lamentablemente, hemos llegado a creer que lo inmortal sólo es posible encontrarlo después de muertos, en un idílico paraíso que transciende nuestra existencia terrenal, o sea, en otro tiempo, e incluso en otro espacio, dando como resultado una tendencia escapista, que ha provocado el desprecio por la vida presente y todo aquello que la genera y la sustenta.

Si hay alguna solución al enigma humano, es muy seguro encontrarla en cada momento que vivimos, responsabilizándonos de nuestros propios pensamientos y actos, como generadores de efectos que, tarde o temprano, regresan a la fuente de donde partieron.

Siendo artífices de nuestro propio destino, nada hay que lamentar, pues todo forma parte de un aprendizaje cuya meta es darnos cuenta, experimentar en uno mismo; saber que, arropado por todos los atributos humanos, hay un Ser, que como testigo de la existencia e inmerso en ella, descansa en el vasto océano del SILENCIO interior.

LA HERENCIA GENÉTICA DEL GENIO Esa historia que resume toda la experiencia humana, desde los más remotos tiempos y que no está escrita en los libros pero que la guardamos hasta en la más pequeña de nuestras partículas, está al alcance de cualquier persona, es posible acceder a ella, sin complejos estudios universitarios y sofisticados y carísimos laboratorios de genética. Sólo hace falta parar la batalla diaria y sumergirse, limpio de conceptos, en la sigilosa contemplación de sí mismo. Ahí, en eso que los científicos denominan código genético y los religiosos llamaron Alma, es el almacén donde radica el poso de los acontecimientos pasados, donde se absorben los del presente y duerme la semilla de los que quedan por llegar. Para acceder a ese depósito de datos, es necesario insertar en el cerebro un código de acceso: “SILENCIO” Con tiempo, triangulando acontecimientos y alguna dificultad, conseguí rescatar del almacén de mi alma, cierta historia reciente, pero no inmediata, de un incansable buscador de tierras vírgenes, a mediados del siglo XVIII, llamado Ariba.

MI ANTEPASADO Nació en el norte de África, en un pequeño balcón, suspendido en la ladera sur de la Cordillera del Atlas. Es hoy como ayer, pues no ha cambiado apenas nada desde entonces, una ciudad llena de caños de agua, que brotan de paredes blancas, formando calles estrechas y empinadas. Cada casa es una tienda, haciendo de esta ciudad una gran medina, sobre todo en los días de mercado, cuando del valle suben agricultores y de la montaña bajan artesanos, para intercambiar sus mercancías y asistir a alguna de las muchas y limpias mezquitas. En una de las repletas tiendas, llenas de todo tipo de antiguos cachivaches, dos ancianos de turbante y barba blanca fabrican tiempo. Tomando un humeante y aromático té de hierba buena, conversan sobre el profeta y algunos versículos del Corán. El Ramadán comienza mañana y un especial ambiente se filtra por todas partes, hasta alcanzar su culminación el día en que la luna llena sale entre las crestas de la montaña. En ese instante emerge una sonora vibración humana, que partiendo de los diversos minaretes, recubre como polvo plateado terrazas, porches, callejuelas y el corazón de los hombres, de una afable y tangible magia, que hace detener el tiempo y suspende en el aire a toda la ciudad.

La disciplina y el control del musulmán, entregado a su fervor en Alá, despertaban en Ariba, a pesar de sus pocos años, respeto y admiración por aquellas gentes, que soportaban el colonialismo Español. Sus padres, católicos, le sacaron de aquel cálido ambiente, enviándole a un pequeño y solitario montículo, en medio de la meseta castellana, donde se levanta el sobrio monasterio de Uclés, de la distinguida

Orden de Santiago. En siete años adquirió Ariba como fundamento de su vida, la fe, que junto con la tristeza y una sobrada capacidad de estudio, le acompañaron toda su vida, por el camino de la esperanza, en busca de la ciudad de la fortuna, por todo el mundo, enfundado en una roída y negra sotana de la Compañía de Jesús. Una vez ordenado, regresó al lugar de la infancia y los beduinos le añadieron a su nombre el prefijo Bu, que quiere decir Padre, Bu-Ariba.

El Padre Ariba, después de la más larga y fatigosa travesía que nunca antes hubiera realizado, desembarcó en un puerto Japonés bajo la divisa de los señores Samuráis, cuyo orgullo basado en el sentido del honor y en la palabra dada, le pareció oportuno colocárselo como divisa de su propio comportamiento. Otros rincones del país del Sol Naciente le quitaron pesadas y rígidas cargas de su costroso cuerpo, al limpiarlo y exponerlo desnudo a otros compañeros de baño, además de llenarle otras estancias vacías de su alma. El respeto por la naturaleza, el Shintoismo y sobre todo las prácticas monásticas de los templos Zen, la sutileza de su arte y filosofía, aplicada incluso al tiro con arco, la profundidad del koan y la prolongada estática contemplativa de la meditación –capaz de desvelar los misterios del Vacío o fuente primordial de la creación, más allá del pensamiento racional, en línea con la devastadora fuerza de la intuición–, fueron suficientes para flexibilizarlo como un junco, y así romper la rígida barra del celo dogmático y la ignorancia.

Unos años más tarde, viaja a la impasible China; los descubrimientos anteriores ya le habían convertido en un ávido explorador de nuevas fuentes de inspiración humana y su deseo encontró satisfacción al entrar en contacto con la tradición Taoísta. Los curvados tejados de la pagoda, se deslizan desde su techumbre, hacia el suelo del patio central, pero la propia inercia de su caída los impulsa de

nuevo hacia arriba, como queriendo imitar los movimientos siempre circulares de un pequeño grupo de ágiles practicantes de Wu Shu. Se emplean a fondo siguiendo al anciano maestro que, a pesar de los años, desplaza su cuerpo, como una pluma empujada sin ningún esfuerzo, desde su vacío interior (Wu Wei). En él se manifiesta la sabiduría de la sencillez que dan los acontecimientos cotidianos, desde una óptica del pensamiento ingrávido y unificador.

La enigmática India, ofrecía todo un inabarcable continente de posibilidades, en cuanto a la gran incógnita de la existencia humana y ya, a una edad avanzada, La Gran Barata se le mostraba como un variopinto mosaico de exhibiciones callejeras: desde los mendigos faquires, los vedas y sus rituales, las cremaciones, los incontables santuarios de innumerables deidades –conviviendo en armonía unas con otras, las fachadas de los templos, decoradas con sugerentes alusiones sexuales, adoradores del falo y el yoni–, aquellos vagabundos y nómadas santos vestidos del cielo (desnudos)… Pero sobre todo, encontró un sistema muy práctico y altamente efectivo en los yoguis, personajes que, por iniciativa propia y sin pertenecer a ningún culto o deidad, limpios de castas, condicionamientos sociales y creencias, habían tomado la resolución de fortalecer su cuerpo y su voluntad, profundizando además hasta lo más insondable de su propia naturaleza.

Ariba, “mi antepasado”, terminó sus días, desprendiéndose poco a poco de todo; de la mejor forma que un explorador de la condición humana puede hacerlo, entre los austeros y sonoros murmullos de un monasterio Budista de Cachemira.

“Así consiguió llegar al centro de sí mismo, después de dar la vuelta al mundo” Ariba, el querido hijo de la Tierra, después de 72 años, la devolvió el préstamo que le había hecho y en una mañana clara, dejó aquí su andamiaje, para emprender el vuelo hacia otra cuna, aquella donde yo nací.

Aquel explorador de nuevos y fascinantes territorios, dejó en mí la semilla de su última cosecha: “No hay nada nuevo bajo el Sol. Todo lo nuevo, a partir de ahora, sólo podrás descubrirlo en tu interior” LA NUEVA INFANCIA A veces, cuando me da por aquella lejana y heredada tristeza, empezaría por contar mis pesadumbres, fracasos, perdidas y errores; pero cuando miro por la ventana del Ashram y veo la diversidad de árboles, rebosantes de dignidad natural a pesar de haber perdido sus hojas, pienso que toda pérdida humana, es preludio de nuevas y renovadas ganancias.

Recuerdo mi infancia, como un refugio que todavía vive en mi interior y, geográficamente, situado en un remoto y pequeño pueblo de la Alcarria castellana.

Los lirios, al borde de la empedrada carretera, su aroma, su color, y aquellos campos de abundante primavera, rojas amapolas entre los tiernos y mullidos trigales donde esconderse del mundo y observar el misterioso universo de los más sorprendentes insectos.

Trepar arriesgadamente por los frondosos olmos y estilizados chopos en busca de un nido de urraca con sus huevos blancos de pintas negras, e inhalar los olores de la siega, acentuados por las tormentas de verano, olor de

paja y tierra húmeda. De todo esto, yo, con apenas seis primaveras cumplidas, formaba parte, integrado en el tejido de la silenciosa perfección, sobre todo en las noches de verano, cuando los segadores, después de la cena contaban los sucesos más extraordinarios ocurridos en las tierras del sur y los acontecidos en el norte, el año anterior. El espíritu de la leyenda nunca muere, mientras haya un solo hombre sobre la tierra, pues él es un archivo vivo de los más remotos hechos.

La felicidad y despreocupación de vivir intensamente los colores del otoño, arropándome con mis amigos bajo las hojas muertas de la alameda; los caminos entre paredes de nieve que llegaban hasta la escuela, con botas de goma hambrientas de calcetín; la cartera en una mano y un tronco de leña en la otra, para alimentar la estufa que nos ahumaba todas las mañanas; en el desván de la escuela, el solitario palomar con sus celdas, donde macho y hembra, pactaban el cese de hostilidades, entre mezcla sonora del batir de alas y el rumor de los graznidos, que hacía trepidar la desconchada bóveda. Era este melódico retiro, desde el cual emprendía alucinantes viajes al lomo de cada tórtola, al desaparecer por el agujero de la pared y luego perderme como un lejano puntito sobre el cielo azul, a lugares lejanos y desconocidos. Así liberaba mi espíritu de aquella otra monótona música de las tablas de multiplicar.

También en la escuela, por debajo del crujiente entarimado del suelo, abundaban divertidos ratones, que en contadas ocasiones cambiaban la sombría y silenciosa clase de D. Tomás en un improvisado y explosivo recreo. Entre las páginas de los libros, una hoja seca de hierbabuena, de la huerta de mi abuela, junto con grandes héroes y mártires, capaces de quitar o

dar la vida por la patria o su fe, conceptos éstos tan ambiguos por los que perder algo, que ahora me parece tan valioso, como la existencia.

Todos estos recuerdos estaban ahí, guardados, hasta que veinticinco años después y en el mismo centro geográfico de la Península Ibérica –donde hace unos cuatro mil años, fueron tallados sobre granito los Toros de Guisando–, una nueva fortaleza de los Caballeros Templarios, de reciente construcción y porche de madera, cubriendo una simple palabra “SILENCIO”, me abrió la puerta, y una vez dentro, al escuchar el batir de pasos, de otras palomas blancas, sobre baldosas blancas y negras, en torno a una mesa, buscando su Nido, me devolvieron aquel Paraíso Perdido.

“Buscando la gratificación de los resultados futuros, al estar ausente del presente, nunca acaricias los actos” LA EDUCACIÓN DE LOS HÉROES Y LOS MÁRTIRES Los antiguos héroes, que daban su vida por una causa, los resignados mártires, que pretendían alimentar un futuro paraíso con su sufrimiento presente, o aun peor, los que se imponían sobre otros utilizando el miedo o la mentira, me han perseguido demasiado tiempo, hasta el día en que les di muerte, al verlos tan sólo como fantasmas de otra época. Sin embargo, de la enciclopedia, sólo recuerdo con precisión y a pesar de los años transcurridos, una historia de Alí y Mustafá: dos árabes que iban de peregrinación a la Meca, cuando de pronto, les salieron al camino unos chuchos que ladraban furiosamente. Mustafá cogió un palo y se enzarzó con los perros, Alí siguió su

camino. Cuando regresaba de la Meca, se encontró en el mismo lugar al compañero de viaje rodeado de tantos sabuesos que sólo se le veía el turbante.

Hoy se impone la necesidad de hacer surgir un renovado Ser humano, capaz de celebrar cada instante de la vida, con el valor de ese nuevo héroe, que se enfrenta con sus miedos y consigue acariciarlos con amor, estableciendo una relación amistosa consigo mismo, aceptando sus limitaciones y aprovechando todos los recursos, lejos de perros ladradores o clichés preestablecidos, con suficiente creatividad y sabiduría.

“El dolor es el guardián natural que preserva la vida, el sufrimiento es una invención humana que la destruye” EL EJERCITO “Tu no piensas, tu jefe piensa por ti” Fue la primera regla que me trataron de imponer el día que, forzosamente, me dieron un uniforme del ejército español en el norte de África, donde tiempo atrás Bu-Ariba vino al mundo.

Durante ese tiempo traté de poner en práctica esta singular manera de servir, a eso que llamaban patria –vistos los resultados que producía en algunos desobedientes pensadores, que lejos de encontrar congruencia, sofocaban sus penas en la cantina o el hachís; o como en el caso de Pedro, un sensible artista que hacía retratos al carbón y un día de guardia sobre una antigua fortaleza portuguesa del siglo XVIII, convertida en prisión militar de desertores legionarios, me lo encontré con el rostro desencajado, el fusil en la

boca y el dedo en el gatillo dispuesto a terminar su vida–.

Indagué sobre diversos métodos para detener la dispersa actividad de la mente, sometida a un constante riesgo de desajuste ante la falta de sentido, de aquel agresivo y estricto orden incoherente.

Cada día desertaba, saltando los muros de lo absurdo, para visitar la silenciosa y desértica biblioteca del cuartel. Era el fantástico santuario donde, asidua y lealmente, acudían para dialogar conmigo Buda, Pitágoras, Platón, Descartes, Cristo, Albert Einstein, S. Juan, Mahoma, Camilo Flamarión, Teihard de Chardin, Krishnamurti, desconocidos yoghis hindúes y reconocidos astrónomos; todos estaban de acuerdo, todos encontraron orden en mi interior, sobre todo en las tupidas noches estrelladas de solitarias guardias.

Hubo muchos atardeceres, pero aquél especialmente me reclamaba, quería que participara con él. Le hice caso, apoyé el fusil en la garita, me despoje de los correajes con la munición y, medio desnudo, me recosté relajadamente en el banco. La montaña “Mujer Muerta” estaba a punto de tragarse al Sol y a mi vida de soledad, para nacer a una sorprendente sensación: Yo estaba en todas partes sin dejar de estar en mí.

Duró poco tiempo; pero el suficiente para imprimir una huella que me puso en el camino hacia una meta, conseguir lo mismo de forma voluntaria. Desde entonces, muchas veces me extravío pero nunca me siento perdido, hay un oriente que me guía.

“Hay un AMOR que sin pedir, poseer, ni esperar nada, llega a tenerlo todo”

RECONOCIENDO Ahora me reconozco, como un Ser humano, que no tengo especial animadversión hacia nada ni a nadie.

Aunque sintonice mejor con la sencillez de unos que con la complejidad y prepotencia de otros, aprecio, especialmente, a aquellos que sienten confianza en los demás y por tanto respetan los procesos naturales de crecimiento y transformación de las personas, considerando hasta la libertad que cada quién tiene de equivocarse.

Descubro que algunos juicios, expectativas y pensamientos, me causan insatisfacción, sé que tengo que quitarlos, hacer suficiente hueco, para que en mí anide la felicidad. Pero ese lastre, ninguna persona, método o institución, me lo puede desprender; sólo mi determinación, claridad y persistencia pueden hacerlo.

Cuando la soledad me llama, encuentro en ella un refugio vacío, capaz de albergar a todo y a todos, incondicionalmente; y a partir de ahí consigo un punto de apoyo en mi centro, donde hacer palanca para mover el mundo y poder acercarme a otros de igual a igual.

“Todo aquello que construyo, no sirve para nada si a la par no edifico en amor y en libertad; valores que no corroe el tiempo”

EL PODER En la estación Sur de autobuses, pueden verse los más diversos rasgos faciales, como consecuencia de una globalización, forzada por la emigración que los

poderosos han impulsado al empobrecer a algunos rincones de la “Redondeta”. Africanos, orientales, latinoamericanos, caucásicos... diversos rostros de la única y doliente raza, la raza humana. Es el sitio, con el tipo de egregor necesario, para destilar el entramado social de este tiempo, mientras espero la hora de mi embarque hacia Levante y escucho zumbar megáfonos anunciando procedencias y destinos.

Mientras, otros poderosos y obscuros zumbidos, se aíslan en medio del Atlántico; tres politisimios y su anfitrión, hacen horas extras, para crear destrucción y guerra, sacando de sus cavernas a los descerebrados cuartelícolas, con sus portainvasiones y armas de destrucción rapiña, ante la impotencia del civilingenuo, que periódica y democráticamente, elige al dictaduro de turno – apreciándose una notable diferencia, entre los abominables tiempos, en que el dictador era impuesto y los dichosos momentos, en los que al dictador, lo puedes elegir tú–.

En la casa, el sometido padre, que somete a su familia; entre semana, el bravucón del colegio, rodeado de unos pocos, que cuando te lo encuentras solo en la calle, se cruza de acera; los fines de semana, el líder pandillero de barrio, que luego se hizo policía; en el trabajo, el jefecillo pretencioso; en el ejercito, el sargento de nariz roja, cuyo poder se lo dan unos galones y la punta de su bota; en la Gran Vía, el antidisturbios de turbios pensamientos, con el rompe-costillas en la mano; en la ONG, el jerarca, que en lugar de servir, se sirve de los otros.

A lo largo de mi vida y en distintos lugares, han ido apareciendo esas miserias humanas, representadas por distintos personajes, que ocultaban sus frágiles cuerpos, tras una máscara de punzantes espinas; todos ellos, representados por el mismo actor de fondo, D. Miedo.

“En el juego de la vida, hay ocasiones que levantamos tanto polvo, que al final, acabamos peleándonos con nuestra propia sombra” INVENTA TU VIDA PARA UNA SOCIEDAD EN PAZ Al fin descubrimos el eslabón perdido que une al animal con el ser humano civilizado. “Somos nosotros, el hombre actual”. Aún no superamos los instintos de agresión, aún no somos civilizados. Ya no tenemos enemigos naturales de quien protegernos y el peor enemigo del hombre es el propio hombre, que transita en el presente sin haberse quitado los miedos naturales del pasado cuando, para sobrevivir, era necesario depredar.

Hoy, que por medio de la ciencia y la tecnología, somos capaces de producir más de lo que necesitamos, seguimos acumulando innecesariamente, pensando en que algún día nos llegue a faltar; y es así como privamos a otros de lo necesario, sembrando el germen que destruye la Paz. La mitad del tiempo de nuestro trabajo es esfuerzo dedicado a pagar impuestos destinados a alimentar ejércitos, adquirir sofisticados mecanismos de destrucción, policías, rejas, cerraduras, agentes de seguridad, alarmas...; de tal manera que en ocasiones ya no es necesario ir a la cárcel para estar preso; porque somos presos de nuestros propios miedos.

Es lamentable constatar los resultados de la ambición individual desmedida sobre todo en los informativos de los medios de comunicación, en los cuales se hace agobiante ver siempre las puertas de los juzgados, las denuncias, los pleitos, la corrupción, el

terrorismo, la guerra, como lo más destacable del día. No podemos dejar esta herencia a nuestros hijos, ellos no la necesitan. Es el momento para que padres y madres de familia, educadores, y todos en general, incidamos positivamente en una nueva educación de las próximas generaciones. Es el momento de educar para la Paz. Ahora, se hace necesaria una urgente revisión de las actitudes humanas, para que al fin “dejemos de pagar por vivir en nuestra casa LA TIERRA” LA TIERRA Somos hijos de la Tierra, ella nos creo un temporal cuerpo físico animado por la energía del Sol. Pero también somos pensamiento, amor e intemporales y prodigiosos viajeros del cosmos, que formamos parte del luminoso e infinito Ser; y ahora se nos presenta un nuevo reto: transformar este conflictivo cuerpo celeste, en el maravilloso Paraíso Terrenal, que está destinado a ser.

La Tierra siempre fue un planeta redondo e ilimitado, sin embargo, sólo en la mente de algunos de nuestros más recientes ancestros, era plana y con abismos en sus confines. Hoy, aquel concepto nos parece un infantilismo y por tanto, sería bueno corregir el grave error nominativo, de “planeta” por el de “redondeta”. Todavía quedan muchos errores que corregir y abismos que saltar, en la agitada y egocéntrica trastienda de las “occimentes” instruidas e informadas de nuestro tiempo.

El Arco Iris siempre aparecía, incluso en aquellos tupidos bosques, anteriores a las glaciaciones, cuando un fotón de luz atravesaba una gota de agua. Siempre estuvo ahí, pero tuvo que acontecer la hecatombe del diluvio, para

que el ojo y cerebro de Noe, y después el de todos nosotros, dejáramos de ver sólo en blanco y negro y, por fin, distinguir la maravillosa gama de colores que aparece cuando el Sol y la lluvia se enamoran.

“La Tierra es un Ser, hija del Sol, que empujándose a sí misma, organizó sus elementos hasta convertirlos en mente, amor y libertad.”

MEMORIAS DE UN VIAJERO Nací a la condición humana, cuando me di cuenta de ser un individuo, en torno al cuál sucedían misteriosos acontecimientos. Sucedió esto, hace ya mucho tiempo, en el más “terrorífico y hostil” de los múltiples planetas habitados del cosmos; es un lugar que, desde nuestro organizado y legislado mundo, situamos rumbo a las Pléyades.

Para los Pleyadianos, tanto la democracia, como la teocracia o la autocracia, forman parte de un pasado: la era de los astutos políticos, indiscutibles jerarcas clericales, sumisos soldados y engreídos cabecillas militares. Tiempos oscuros en los que la “des-cracia” les hizo racionar y, buscando soluciones, optaron por el extraño comportamiento que se describe a continuación: Todo allí comienza con los niños; no tienen que ir a la escuela, ni los encierran en j-aulas, pues no hay agudos arquitectos que las diseñen, ni esforzados albañiles que las construyan, ni un gobierno que haya implantado un plan de estudios para que el niño aprenda a memorizar, competir, obedecer y someterse o, por el contrario, ser un inadaptado descontento y rebelde.

Los niños aprenden de lo que ven y sobre todo de los ancianos y abuelos, que les van aportando la experiencia de su larga existencia, de modo natural, directamente sobre los acontecimientos de la vida y sin horarios, pues tampoco existen los relojes.

No tienen vehículos rápidos y confortable porque no tienen prisa para llegar a ninguna parte.

Ni la bisutería ni la industria textil se ha desarrollado, al considerar que cualquier parte del cuerpo es tan bella que no es necesario adornarla, y tan digna que no es necesario ocultarla. No tienen ningún pudor y transitan desnudos haga frío o calor, pues son ellos los que se han adaptado al medio, con el ejercicio continuo, alimentación natural y fresca, y lúdicos baños en las cristalinas aguas de los ríos y mares, al no existir industria alguna que los ensucie.

El desempleo es total, pues no hay contratadores ni contratados; cuando necesitan obtener algo para la subsistencia, se agrupan y todos colaboran en comunidad.

Son unos irresponsables, no tiene seguros, ni siquiera el de defunción; no ahorran, ni cotizan para la vejez; en principio por no haberse desgastado en rutinarios, prolongados y esforzados trabajos y, aunque tengan muchos años, aún son personas moderadamente activas y autosuficientes.

No saben lo que es hacienda, ni impuestos o inspectores, por la sencilla razón de no existir el dinero, ni almacenes, ni administradores; cada uno sabe administrarse a sí mismo.

No hay policía, ni ejércitos porque no hay propiedad privada, ni fronteras que defender.

Los conflictos conyugales entre esposos, no existen, porque nadie se siente esposado a otro o tiene la propiedad en exclusiva sobre otras personas.

Cuando aparecen las estrellas, confeccionan nidos de paja entre la bieneza (forma como se denomina aquí a la maleza) y duermen agrupados, en parejas o solos, según sus gustos.

No tienen vacaciones, para hacer por fin lo que les plazca; en principio porque suelen hacer lo que les place. Tampoco libran los fines de semana para ir de compras, de caza o ir a la casa de campo, porque siempre viven en el campo y, la tierra amiga es el abundante supermercado.

No existen los grandes emplazamientos hospitalarios, pues son pocos los enfermos. Nunca tomaron alcohol, ni tabaco u otros estimulantes, no se registran accidentes de tráfico, ni se deslomaron trabajando, tampoco fueron ambiciosos.

Viven en la más absoluta miseria, pues solo poseen aquello que necesitan en ese momento –y además es muy poco–, alegando que ya son ricos, por la razón de no querer serlo.

No hay admiradas y grandes obras de arte, ni galerías de venta, ni refinados conciertos de cámara o masivos y abotargados festivales, al no existir consagrados ídolos a los que adorar; pues todos son artesanos, que se recrean en sus propias obras, sin seguir pautas o estilos definidos.

Desconocen los medios de comunicación de masas por la simple razón de no haber masas y no ser la comunicación a medias; sino calmadamente completa, con todos los sentidos, de persona a persona y sin intermediarios.

Sorprende ver a parejas festejando la sexualidad, en cualquier lugar, sin ningún recato, y a otros pasar por delante sin escandalizarse, como si fuera lo más normal de este extraño mundo.

No poseen distintivos ni símbolos de identidad nacional; para ellos su nación es su planeta y su identidad se basa tanto en el próximo como en el lejano, aquí no hay extranjeros.

Además respetan tanto la vida de un anibien (forma como se denomina aquí a un animal) que les resultaría repugnante comer sus músculos, vísceras, tendones y sangre.

No hay grandes templos, iglesias, ni siquiera religión. Su templo es su cuerpo; su iglesia fue hecha por la propia mano de Dios, que la formó a partir de piedras, árboles, ríos y estrellas; su Dios es el otro y cuando quieren sentirse unidos a Él, miran al otro a través de los ojos, o al Sol al atardecer, cuando colorea las piedras, árboles y ríos de la fina sustancia de Su Esencia Eterna; de tal modo que, sin haber apenas nada, lo tienen todo y nunca se sienten solos.

El eje de aquel astro, fue enderezado por sus habitantes desde hace tiempo y desde aquel trágico momento, no tuvieron que pagar por vivir en él.

Cuando leí esto a Pepe, mi amigo de la infancia; me dijo: “El mundo ideal” yo le contesté: “Del cual cada vez nos alejamos más”.

“Caerse no es un error; el error es no levantarse” LA ELECCIÓN DE NACER En el curso de Yoga que imparto a un grupo de alumnos; después de la sesión de posturas, les comento anécdotas e historias que luego traslado a estas páginas; se da una curiosa simbiosis, idónea para concebir ideas, que me asombran a mí mismo, aprendiendo en ocasiones, más de mis alumnos que, seguramente, ellos de mí.

Se crea una atmósfera de empatía, similar a una orquesta, donde todos tocamos la misma partitura y cada uno el instrumento que le corresponde. Mientras las pláticas eran coincidentes en cosas obvias, nos producían a todos una singular complacencia y complicidad, al coincidir en los pareceres; pero aquella tarde el viento soplaba más fuerte que otros días y se llevó por delante todas las partituras, cuando dije: “Cada cual es responsable de todo cuanto le pasa” “Cada uno elige nacer en el lugar, el momento y con la familia que tiene” Las reacciones fueron para mí, un punto importante y necesario de rebeldía.

–Acaso, si alguien nace con alguna deficiencia, física o psíquica, ¿es su responsabilidad?

–Si pudiera haber elegido a mis padres ¡No hubiera optado por los que tengo!

En la etapa infantil de nuestra especie, siempre responsabilizábamos de cualquier acontecimiento benévolo o desfavorable a los dioses, que caprichosamente actuaban a favor o en contra de nuestras necesidades.

También cuando somos adolescentes culpamos a los padres, a los políticos, a los gobiernos de nuestra situación; pero mientras no asumamos que todo cuanto nos pasa, nosotros lo hemos generado, no seremos realmente mayores de edad, aun cuando tengamos cuarenta años. Y, aún peor, estaremos otorgando a otros el control de nuestra vida, o sea, no seremos libres, ni podremos variar los acontecimientos.

“Aquello que llamamos mentiras, solo son verdades que están buscando completarse”

LA CREACIÓN Creación y creatividad, palabras parecidas, con diferentes significados, complementarias y una raíz común cre-er, o lo que es lo mismo, confianza.

La creación, el universo y toda la naturaleza, ya está hecha y siempre conspira para elegir la más apta y eficiente opción. Lo mejor que podemos hacer, es fundirnos con ella, cabalgar sobre su lomo, abandonarse a sus portentosas fuerzas, sin oponer resistencia a sus leyes; ellas están a tu servicio para protegerte. La creación trabaja por sí sola, sin tu esfuerzo. Sustenta la prodigiosa e incalculable maquinaria de la vida, incluso la de tu propia vida, con un propósito que desemboca en la construcción de seres libres, e independientes, capaces incluso, de contrarrestar una de sus más magnificas manifestaciones: la abundancia “Hay acontecimientos, entidades, personas, planetas… que no es posible poseer, sólo se puede formar parte de ellos”.

LA CREATIVIDAD La creatividad comienza, al cumplirse el propósito de la creación, del universo y de la naturaleza: la abundancia. Utiliza este producto –que sólo es patrimonio de seres libres, no condicionados por la educación o los temores que la restringen– con la mente limpia de un niño y el bagaje de un adulto, que decide voluntariamente regresar al Hogar u origen de la propia creación, El Creador. El creativo utiliza sus propios medios e inventa su vida única y genuina para aportarla a La Fuente de donde surgió, como fruto maduro de su experiencia, enriqueciendo al propio Creador.

La Creación es la piedra bruta, la materia prima que El Creador aporta, al involucionar desde lo sutil a lo más denso de la naturaleza.

La Creatividad se compone del cincel del talento agudo que, junto con el mazo de la voluntad, esculpen la piedra, dándole forma para construir el honroso Templo de la Vida.

“Toda experiencia es diferente, cada persona es distinta; pero el Testigo Silencioso que observa desde dentro, siempre es el mismo.”

EL JUEGO LÚDICO El juego, desde siempre, fue un factor determinante para el aprendizaje y un medio natural de socializar. Es una aventura que propicia el respeto a unas normas, facilita la acción, crea valores, aptitudes, actitudes, dotes de observación y autoestima; agiliza la mente, hace vivir el presente, agudiza la inventiva y la impronta para resolver situaciones, desinhibe al individuo presentando su parte más genuina, rompe las máscaras –sujetas con tan excesivo esfuerzo que nos provocan graves lesiones y patologías tanto psíquicas como corporales–, potencia la camaradería, el trabajo en equipo y afán de superación; desarrolla la voluntad por propia iniciativa haciéndonos más dinámicos, deportivos y por tanto saludables; nos despierta facilidad para las relaciones amistosas, amorosas y de galanteo –o facilidad para la conquista del otro sexo–, por medio de una actitud más positiva y humorística ante la vida, abriendo nuevas puertas a la comunicación con nosotros mismos, descubriéndonos nuevas facetas y propiciando una comunicación mas fluida con los

demás; y, sobre todo, nos hace personas mucho más creativas, hasta tal punto que podemos hacer de los acontecimientos cotidianos situaciones extraordinarias y de lo extraordinario algo cotidiano.

El juego es un psicodrama que nos hace vivir situaciones reales; no es un aprendizaje memorizado de las experiencias de otros, es el flujo de la propia experiencia que por siempre quedará grabada en el alma. ¿Quién no recuerda con agrado, los amigos forjados en los fogosos juegos de la infancia?

El niño, de manera natural y primera, se acerca al mundo por medio del juego. Conforme crece, el juego pierde su naturalidad y lo trasforma en jueguitos psicológicos, con el ingrediente de la astucia. Perdemos la capacidad de jugar y las frustraciones comienzan a hacer mella sobre todo en la condición del adolescente, que le huye a la realidad y busca medios evasivos de ella.

El juego posibilita quitar los jueguitos de la astucia, despertando de nuevo nuestro niño dormido, sin por ello renunciar a lo positivo del aprendizaje del adulto; cuantas veces nos dijeron, –¡Ya no eres un niño como para andar con esas tonterías; tómate con seriedad la vida!– asesinado de este modo la alegría, el vigor y la espontaneidad del ardor juvenil.

En la antigua Grecia se decía: “Los dioses mueren jóvenes” Y no por morir a temprana edad, sino por morir sin haber perdido ese espíritu jovial.

Los Guías de la Expedición LOS GRANDES MAESTROS También fueron aprendices; pero sirvieron de punto de referencia para crear nuevas sociedades, aun después de muchos años de su desaparición física, y eso es lo que les convirtió en prototipos excepcionales de determinados pueblos. Cada uno de ellos creó un sistema completo de realización haciendo hincapié según el momento, el lugar y las gentes con las que vivieron, en determinados aspectos muy concretos de la naturaleza humana; por ejemplo: Hermes, el misterio.

Quetzalcoatl, la transmutación. Moisés, la Ley. Krishna, la Afirmación y el servicio desinteresado. Lao Tse, el Pensamiento Ingrávido, la Intuición. Buda, la Compasión, la Meditación. Cristo, el Amor, la Fe. Mahoma, la Disciplina.

MI MAESTRO Era Navidad, mi Maestro y algunos discípulos cercanos, lejos de la ciudad, buscamos confluir en un lugar, donde apreciar nuestra complicidad.

La Aldea de los Reyes tenía más vacas que habitantes y una inmensa mole le protegía la espalda: “La Mujer Dormida”, mítica montaña blanqueada durante todo el año y visible desde México capital, cuando los días son claros.

Con algunos vehículos ascendimos hasta donde el camino se estrecha en angosta y empinada senda; a pie avanzamos hasta la blanca falda de La Mujer

Dormida y quedamos suspendidos en un gélido ambiente.

Por encima de las nubes, algunos claros destapaban un lejano punto, La Aldea de los Reyes. Me invadió el instinto de pájaro y hubiera querido tener alas para descender planeando de regreso a nuestro refugio. No tenía alas pero a mis piernas les salieron plumas y con agilidad insospechada me vi saltando barrancos y cañadas tan rápido y ligero como un gamo.

El crepúsculo llegó, al tiempo que yo a pie y los otros en coche, a la aldea. Faltaba el Maestro que se había quedado buscándome en la montaña; él fue montañero.

Cuando de nuevo regresamos a su encuentro, al verme dijo: “Nunca dejé a un miembro de mi equipo perdido en la montaña.”

Esto fue en el principio, cuando la relación era entre el neo-fito (planta nueva) y el experto jardinero; pero pasó el tiempo y un día me di cuenta, que solo me tenia a mí mismo, cuando después de algunas sacudidas, mi maestro demostró con hechos algo que anteriormente él mismo me había dicho: “No te fíes ni de tu Maestro.”

Un maestro, no es un ser elevado sobre el resto de los mortales, infalible y ejemplar; es un compañero de viaje que ya ha pasado por el tramo de camino en el que uno se encuentra y conoce los hoyos y desniveles, donde quedar atrapado; pero aún esto, no impide que incluso él, pueda llegar a meter el pie dos veces en el mismo agujero.

Si en verdad es un Maestro, no es tanto por las cosas que dice, si no desde donde las dice y la inspiración que

pueda llegar a producir, para que cada uno a fin de cuentas, trace su propio camino.

Un Maestro auténtico, no persigue seguidores ni discípulos, o incorporarte a determinada institución, o inculcarte una establecida creencia; más que dar brillantes respuestas, te plantea nuevas preguntas, más que añadir nuevas teorías, te proporciona instrumentos, para quitarte lo que sobra; solo es un testimonio vivo, de la posibilidad existente, de que todo Ser humano puede llegar a ser libre, por la libertad y desprendimiento que emanan de sus propios actos.

EL MAESTRE “No me miréis a mí, mirad a donde señala el dedo” En la ruinosa Europa de la posguerra mundial un apuesto parisino de 33 años, Serge Raynaud de la Ferriere, emprende un viaje por diversos puntos del planeta. Al principio, viste una camisa de coloridos listones y pliegues tableados, particular insignia de los bardos (transmisores de la tradición) o juglares de los antiguos celtas, habitantes de las Galias. Se cubre con una capa blanca que trae a la memoria la desafortunada Orden del Temple y pantalón bombacho al estilo Sufi del Islam. Él saluda con la mano en alto, al uso Esenio y su larga barba y cabellera recuerda el singular voto de los Nazaritas de Israel.

Porta un emblema pectoral, con cuatro palabras-tipo muy

bien estudiadas en la masonería que se remonta hasta los Colegios Herméticos del esplendoroso Egipto. Con estos símbolos en su persona, resume la síntesis de las más destacadas Tradiciones Iniciáticas de occidente, pero explora otras tradiciones en el oriente para realizar una recopilación del saber humano acumulado hasta ese momento y ponerlo, después, a disposición del ser humano actual, en un nuevo continente: América. En su viaje por la India se sumerge en el tradicional método de aprendizaje de los Ashrams y planifica la implantación actualizada de este fenómeno en todo el mundo. En ese sentido continuaron sus discípulos y los discípulos de su discípulo; los siguientes relatos comprimen lo hecho y lo que queda por hacer.

“La humanidad del futuro vivirá en el continuo cambio.”

EL MAESTRO En los agitados años 70, época del aperturismo español, arribó a Madrid, procedente de México, D. José Manuel Estrada, hombre de unos 75 años, hijo de un emigrante español en Venezuela. Vestido todo de blanco –con capa blanca y blanca barba –, ojos fogosos y espíritu alegre, pero firme; hablaba con el gesto y creaba imágenes con la palabra, parecía uno de esos magos tomado de alguna fascinante leyenda del pasado, que por algún prodigioso encantamiento hubiera aparecido sobre el moderno escenario del Centro Cultural de la Villa de Madrid.

Aquel hombre sacó a la luz inconfesables e ilusorias locuras que dormían en mi interior y que al irse despertando adquirían lúcidas realidades por las que luchar; de él rebosaba un idealismo práctico sobre un mundo mejor donde, según decía: “El hombre algún día no tendrá que pagar por vivir sobre la Tierra” Algunas de las sugerencias más pragmáticas del Maestro para viajar gratis sobre nuestro planeta han ido tomando forma. Tal es el caso de la propuesta de un cambio alimenticio para la raza humana basado en una dieta exenta del consumo de la carne de todo animal, más cercana a la fuente primera de la vida, el Sol, de cuya emanación, al contacto con los minerales, el oxigeno y la humedad de la tierra, da lugar a la fotosíntesis, o reino vegetal, fuente energética de primera mano, más propia para una raza inteligente, capaz de mostrar con hechos un mayor respeto por la vida animal.

ningún sitio. A mi maestro José Marcelli y al maestro José Manuel Estrada, los he conocido, he visto su presencia y he intuido su esencia; al Maestre de la Ferrier solo lo he conocido por el brillo de los ojos que se filtraba hacia fuera y hacia dentro, cuando D. J. Manuel Estrada hablaba de él; pero es con el más lejano y desconocido de los maestros de este contemporáneo linaje, que más me he sentido identificado, el Maestre Sun (El Tibetano, el Maestro del Maestre de la Ferrier) quizá porque él era su única institución, no se representaba nada más que a sí mismo y sobre todo porque era un vagabundo sin papeles ni patria y además decía cosas como estas: “No busques tu destino, tu destino te encuentra” “La mejor manera de llegar al centro de sí mismo, es dar la vuelta al mundo”

“El Gran Enigma, dejaba huella detrás de su pisada, vibraba en el interior de cada palabra y, sobre todo, en el fondo de su mirada limpia y sostenida”

Maestre Sun Wu Kung EL TIBETANO

EL LINAJE

PLÁTICAS CON LOS MAESTROS

Estos tres personajes, desde mediados, hasta final del siglo XX, trazaron un tramo de surco, forjaron una línea; son una sucesión de puntos, que vienen de puntos anteriores y seguirá avanzando, hasta curvarse sobre sí mismos y formar una espira, que probablemente no venga de ninguna parte y no concluya en

LOS SEGMENTOS INGRÁVIDOS Arriba de la truncada pirámide de COVÁ, que los Mayas construyeron con el bálsamo del tiempo, superponiendo una piedra a otra, hasta hacerla despuntar por encima de la arbórea planicie, que se extiende como una

interminable alfombra verde, mantenida sobre el sedimento de uno de los mayores meteoritos que hirió a la tierra en este lugar, llamado Península del Yucatán.

En ese mágico momento, cuando el atardecer mella el horizonte, con las sombras de la selva sonora y bulliciosa, y con el último rayo de Sol, gradualmente, la agitación se desvanece, en uno de los más profundos silencios. El corazón se enardece y su cadente pulsión conecta con el propio ritmo del universo. Se abren los poros de la piel, el cuerpo flota y la libertad más preciada diluye todo límite.

En este lugar los árboles chaparros forman una extensa trama con sus raíces, ante la imposibilidad de horadar la enorme losa de roca; se protegen del viento, que al acecho, por encima de sus copas, está ávido por cobrarse una pieza solitaria, queriendo afirmar su fortaleza. Todo es vida nutrida por las caudalosas lluvias, que con rápida obsesión la vegetación absorbe y el resto ocultamente se desliza por los subterráneos meandros de piedra, hasta formar furtivos ríos, que ocasionalmente emergen a la superficie, formando lagunas teñidas de azul celeste, mientras que otras se protegen con viseras de granito; fueron estos, lugares sagrados para los mayas, hoy los llamamos Senotes.

SAT ARHAT VENERABLE ANCIANO S.A.V.A. es un Héroe Solar, que sin estar en un sitio concreto, es sin embargo localizable en cualquier lugar y sobre todo en lo más profundo de uno mismo.

Hace unos cuantos años reanudamos el contacto después de varios y olvidados lustros de silencio, en ese mítico lugar llamado COVÁ, nombre Maya que se traduce como "El deseo de Dios".

Sentado sobre la cúspide piramidal de ese nombre y ahondando en su significado, me pregunto: ¿Dios tiene deseos?

S.A.V.A. responde: "Dios es inconsciente en el mineral, duerme en el vegetal, sueña en el animal, piensa, desea y ama en el ser humano y se reconoce a Sí Mismo en el Ser Humano Transcendental, haciéndose Libre".

Así, una vez más, el diálogo se reanuda y yo me siento feliz ante respuestas claras y momentos de unión compartida lejos de la estéril soledad. Pero cada respuesta, al final de su trayecto abre puertas a nuevas preguntas. ¿Cómo es esto, Dios es o no libre?

"Dios se encuentra encadenado a sus propias leyes" Y ¿Que son las leyes?

"Constantes universales de las que El se sirve para crear" Cada contestación es un Koan cargado de plácidos momentos contemplativos. La mente se hace ingrávida y rompe los límites impuestos por rancios conceptos adquiridos en una educación llena de creencias, sin respuestas congruentes.

Pero ¿Hay algo que realmente sea constante, que nunca cambie? "¡Sí! El propio cambio es constante, una determinada acción se repite hasta que confluye con otra acción, ambas reaccionan y cambian su trayectoria explorando nuevas posibilidades que a veces no son acertadas para el proceso evolutivo, auto eliminándose al no poderse adaptar al Plan Global. Pero cuando los nuevos resultados son acertados y sirven al Plan, se fortalecen, adquieren consistencia y se transforman en constantes, hasta confluir con otra que la modifique, repitiéndose el ciclo infinitamente".

¿Acaso el infinito existe?

"Todo cuanto existe tiene comienzo de su propia existencia, contornos, límites y finalización de la misma ¡El infinito no existe, el infinito Es!".

No logro entender que el infinito Es. "Y nunca lo entenderás, porque el infinito es incomprensible por tu mente finita y racional, el infinito sólo se puede experimentar más allá del lenguaje, más allá de la verbalización mental, en el SILENCIO". ¿Cómo llegar al silencio?

"Medita, haz meditación".

Una pista para comenzar.

"Corta en dos a la palabra y dale la vuelta acción - medit, busca la acción del medio". ¿Dónde está el medio?

"En el propio medio, pues todo medio es un fin en sí mismo, sin miedo vive el presente". ¿Qué es el presente?

“El pasado ya pasó, es uno de los extremos que ya no existe; el futuro todavía no llega, es el otro extremo, que tampoco es. El presente es el punto medio, que aglutina a los extremos, la única verdad, que siempre ha sido, es y siempre será. Es la puerta de entrada a lo Eterno” ¿Qué es la verdad?

“Aquello que siempre ha sido, es y será; sin tiempo ni espacio” “Es el conjunto de todas las pequeñas verdades e incluso de las mentiras” ¿Qué es la mentira?

“Es una verdad fuera de su tiempo o de su lugar” Entonces ¿Existe la mentira?

La realidad es la contraparte de la Verdad, la realidad es relativa; lo que es real para uno, es mentira para otro, cada cabeza es un mundo. Pero la verdad, es Una y en ella todos nos reconocemos como unidad” “El bien y el mal, son dos caras de la misma moneda, redonda para que pueda rodar. Que caiga de un lado u otro, no es lo importante. Lo conveniente es que ruede, para que se mantenga en equilibrio. Pero si cae, no es un fallo, el error sería no levantarla, para que se siga moviendo”

Los Cambios En este universo ¿Qué es lo único que no cambia? ¡El cambio!

LA DEPRESIÓN Moderna epidemia de los países y las personas desarrolladas económicamente.

En un vagón de metro, agitaban sus pesadas cadenas dos fantasmas, con chaqueta, camisa y corbata transparentes, que dejaban entrever sus almas. Eran aquellos primitivos exploradores en busca de tierras vírgenes del pasado, que han venido al Madrid moderno, para aprender informática y exhibir sus habilidades, como ya hacían antes, pero ahora como exploradores electrónicos; el fanfarroneo del mono inteligente, que pretende adueñarse del mundo, recubre con gran ingenio su más ancestral temor: ¡No ser dueño ni de sí mismo!

Ha comenzado un nuevo milenio, una nueva Era; los viejos valores no satisfacen; pero tampoco se reconocen los que han de sustituirlos. Hay un vacío, una hondonada, una depresión, una medida “de presión”, que empuja desde lo más profundo del alma, obligando a cargarnos de valor, para operar los cambios necesarios, más ajustados a los tiempos. La naturaleza nos impulsa utilizando el dolor del alma para revisar y regular nuestras vidas; los viejos abrigos y corazas que nos han protegido durante mucho tiempo hoy son

pesadas y sucias cargas que deben ser despojadas; pero el miedo a la desnudez, ha creado otras hojas de parra, otras guaridas donde esconderse para operar clandestinamente y sin aparentes riesgos. Tres son las principales defensas donde buscamos abrigo: Poderoso D. Dinero, Sexo sin amor y Estimulantes del sistema nervioso.

Los tres son instrumentos con doble contenido, siendo el operario el responsable de utilizar uno u otro.

EL DINERO Sus dos contenidos ¿Fuerza para el servicio público? o ¿Poder para servirse del público?

Un cazador de talentos olímpicos fue informado de la sorprendente destreza de un monje Zen en el tiro con arco –practica ritual que algunos monjes utilizan para desarrollar su concentración al disparar la flecha sobre la diana sin mirarla–. Al visitar el monasterio y ver con sus propios ojos los repetidos aciertos del monje, se acercó a él y le invitó a competir en los Juegos Olímpicos. El sorprendido cenobita, ante propuesta tan inesperada, se negó a participar en aquella competición, el buscador de talentos le insistía diciendo que sus habilidades engrandecerían el orgullo de su patria, ya que seguramente podría conseguir una medalla; el monje ante tanta insistencia contestó: “Si mente está en medalla, mente no está en diana.”

EL SEXO Sus dos contenidos ¿El “sexo” instintivo? o ¿El “seso” humano?

En ruta por la Península del Yucatán, entre la boscosa planicie despuntan las pirámides Mayas de Uxmal.

Un tostado indígena de pequeña estatura y prominente cabeza, camina hacia nosotros, como si fuéramos invitados de su casa, dispuesto a enseñarnos las piezas más valiosas de su hogar; un colorido pájaro hace reverberar su canto sobre las arcaicas piedras y nuestro anfitrión dice que es el guardián de sus antepasados en forma de ave, protegiendo el dormido y sagrado lugar, a la espera de que un día vuelva a su antiguo esplendor; explica que es un pájaro muy sensible hasta el punto que si lo atrapas en tu mano, inmediatamente muere de infarto.

Cuando llegamos a conocer la raíz profunda de algo, el pasado y el futuro se juntan en el presente –así como una semilla contiene toda la experiencia del árbol que murió y, en potencia, al futuro árbol que está por crecer–, pues la comprensión de la raíz de las cosas vividas “comprende”, o sea integra o incluye, a todo lo que ya existió, o pueda llegar a existir.

Y así sucedió en una ocasión, cuando caminando junto al Maestro, un hombre del grupo volvió la vista para seguir el exuberante cuerpo de una mujer y el maestro, a modo de Koan Zen dijo: “La belleza no se puede poseer, solo se puede admirar.”

En efecto, la belleza muere de infarto y pierde su atractivo, cuando intentas atraparla en tu mano, en tus ojos, tus oídos, tu mente, o tu corazón.

La sexualidad compartida alimenta constantemente a la creación generando a otros seres; pero además puede llegar a ser manantial inagotable de inspiración creativa. ¡Sí! Es un atributo animal, pero el animal racionalespiritual, con las herramientas que le son propias, la consciencia y el amor, puede convertirlas en peldaños, para subir al recinto donde moran los dioses. Y una vez ahí, inhalar la fragancia de la más noble inspiración, uniendo el cielo y la tierra, como fundamento para acabar con los pesados tributos de la propiedad privada, que los seres humanos, cuando entran en una relación, se suelen exigir el un al otro.

“Hay un tipo de AMOR que sin pedir, poseer ni esperar nada; llega a tenerlo todo.”

LOS ESTIMULANTES Sus dos contenidos ¿Estimulantes artificiales? o ¿Estímulos naturales?

Por la mañana el cálido Sol, sediento de humedad, se bebía las lágrimas que la lluvia de la tarde anterior, depositó en las inmensas hojas tropicales, en los árboles de aguacate, naranjos, limoneros, coloridas flores del ave del paraíso y orquídeas silvestres. Este idílico lugar, servía de refugio a toxicómanos rehabilitados, convertidos en esforzados comerciantes, que fabricaban pan, galletas y

granola entre otros productos, con la firme convicción, de que el empeño servía a la causa que su Maestro, ya desaparecido, les encomendó: “Construir un lugar donde pudieran llegar personas de todo el mundo, para potenciar lo mejor del Ser y lo humano”.

La ley del mercado, cerebros ofuscados, la falta de su Maestro y el negocio, les “negó el ocio” necesario para su propio equilibrio interior y se cerraron sobre sí mismos, creando un baluarte de propiedad privada, lejos del propósito inicial.

En ese ambiente otro Maestro en línea directa con el anterior, incursionaba en aquel amurallado territorio, para continuar su obra. Un gélido recibimiento hacía temer futuras dificultades, de las que yo formé parte como último eslabón, con violentos resultados por parte de aquellas gentes, sobre mi persona.

Los prolongados estímulos de narcóticos en el sistema nervioso, producen daños irreversibles en el tejido cerebral, ciertas conexiones craneales desaparecen y cuando el discurrir natural del pensamiento humano encuentra puentes insalvables, se derrumba en el más lamentable y agresivo instinto.

AMO: Dueño de vidas y haciendas.

YO AMO: Dueño de mi vida, sin haciendas que defender.

LA NUEVA ERA Hay un hilo de oro que une las perlas de los días, de los años y de las Eras; por su interior se mueve la Luz del empíreo fertilizando con su gloria los dos mil

años que vienen, el clima es propicio, solo nos resta ser buenos hortelanos.

Vivimos en la Era de los grandes cambios y todo cambio supone abandonar algo; uno de los más desgarradores abandonos, llega cuando aquella persona que se fundió con nosotros hasta lo más íntimo, decide un día romper el lazo. Pero el dolor no es producto de la renuncia; el sufrimiento se da, por la resistencia que la mente opone al cambio; dejar viejos conceptos y transformar nuestros hábitos mentales, es el gran reto que espera a las generaciones de este nuevo milenio. ¿Es esto algo nuevo?

Si, es nuevo para nosotros, una estación por la que antes no habíamos pasado; no obstante hubo en otros tiempos viajeros con otras formas, que dejaron su huella, sobre otros cambios.

ALGUNAS DIFERENCIAS Nueva Era

Anterior

SABER

CREER

CRITERIO

TEMOR

CLARIDAD

HIPOCRESIA

GLOBALIDAD

AISLAMIENTO

LA VERDAD

EL MISTERIO

NATURALIDA

PURITANISMO

EL SABIO

EL MARTIR

PLURALIDAD

UNIFORMIDAD

AUTOGESTIÓN

DEPENDENCIA

CREATIVIDAD

IMITACIÓN

RECREACIÓN

ESFUERZO

ALTRUISMO

USURA MISERIA

LUZ

OBSCURIDAD

TOLERANCIA

FANATISMO

RIQUEZA

CONOC. SEXO

OCULT. SEXO

ESTUDIOSO

PIADOSO

INVESTIGAR

JUZGAR

IGUAL H. M.

SOMETER H.M.

EQUIPO

LÍDERES

AMÉRICA

EUROPA

“Las formas cambian y el cambio siempre permanece.”

AMÉRICA ¿Dónde hubo tan decisivos cambios?

Donde quiera que te detengas y observes encontrarás pisadas, algunas casi borrosas y otras tan recientes que aun queda el eco de las conversaciones mantenidas sobre los riesgos y anécdotas de los imprevistos del camino.

Quiero hoy detener la mirada en un lugar de meso América, del que nunca podré olvidarme: COATEPEC Las turbinas rugen y Barajas con sus campos secos queda atrás; por delante un vacío que parece mantener al corazón flotando ingrávido sobre el pecho.

Por primera vez cruzo el Atlántico rumbo a esas tierras donde Toltecas, Mayas y Aztecas entre otros, por largo tiempo vivieron ignorados de su existencia por los “cultos” europeos.

Dos imponentes moles blanqueadas de nieve – una con forma de mujer dormida y la otra cónica coronada de un oscuro cráter– ocupan casi al completo la ventanilla de mi avión. Me traen al recuerdo mitos y leyendas que de niño leí sobre estos lugares. La inmensa metrópoli, la antigua Tenozitlán, transformada hoy en la urbe más habitada del planeta, México D.F., se extiende sobre un interminable valle, imposible de imaginar cubierto de agua, como lo vieron los desconcertados españoles hace 500 años.

En el aeropuerto Azteca ondea la bandera tricolor; sobre el lienzo blanco un águila sujeta entre sus garras a la serpiente, elocuente seña de identidad

que hace referencia al glorioso pasado de un pueblo, no por su vasto imperio, sino más bien porque fueron capaces de crear ciudades donde los hombres se transformaban en Dioses “Teotihuacan”.

–Impresionante conjunto arqueológico, que a pocos minutos de México capital, hoy puede ser admirado con sus enormes pirámides, del Sol y la Luna– El Águila y la serpiente hacen referencia a ese poder transformador del que todo ser humano es depositario: la serpiente rastrera y astuta que, sujeta por el Águila, planea libre y majestuosa sobre el cielo. Es la representación del héroe de las Américas: Quetzalcóatl, nombre compuesto de Quetzal –Pájaro de bonito plumaje– y coatl –expresión que proviene de la diosa Coatlicue que es representada como el cuerpo de una serpiente con dos cabezas, de ahí deriva la palabra “coate”, que aun hoy emplean los mexicanos para indicar la estrecha unión entre dos amigos–. En muchos sitios arqueológicos, que fueron usados como centros ceremoniales puede contemplarse esculpida en piedra la serpiente con plumas, símbolo de éste personaje mítico, que era blanco y barbado, –atributos que hacen referencia al hombre Solar– representando al Maestro o Iniciado de América. Todo maestro lo es por tener discípulos y Quetzalcoatl los reunía en Colegios de Iniciación llamados “Calmecas”, donde se practicaba el arte de la transmutación de lo más denso del ser humano en sus facultades más sutiles. Existían otros colegios donde eran instruidos los guerreros y curanderos, denominados “Calpulis”, cuyo gobierno se le atribuía a Tezcatlipoca, hermano de Quetzalcóatl y que como opuesto de éste era negro y sin barba.

Aun hoy existen éstas dos tradiciones, que con el tiempo han derivado como calpulis en el nahualismo o chamanismo, con sus limpias, temascales y rituales con

hongos alucinógenos, provocadores de estados alterados de la consciencia y por otro lado los calmecas en la Iniciación Real y Solar, que enriquecida con el aporte de otras tradiciones tanto de Oriente como de Occidente, ha vuelto a ocupar los antiguos lugares de aprendizaje en el arte de la transmutación interior en América, como continente emblemático para la incipiente Nueva Era. Es el caso de Coatepec –Cerro de las Culebras–, ubicado en un bello paraje de exuberante flora semitropical, extensos cafetales, fuentes termales, cascadas y ríos de aguas rápidas, provenientes del Citlatepec –Cerro de la Estrella– de unos 6.000 mts. de altitud con nieves perpetuas. Esta montaña emerge como hijo mayor de la Sierra Madre Oriental que bordea el Golfo de México, lugar donde Maestros de Sabiduría ejercitan a sus discípulos en el arte de la autodisciplina del cuerpo y la mente, para así tener la oportunidad de conectarse al Ser Ilimitado que mora en el interior de cada mujer y hombre y, de este modo poder actuar, tomando la responsabilidad de construir una mejor vida social partiendo de la construcción saludable y consciente de la propia vida.

“La mayor aventura de un viajero es: Que al dar la vuelta al mundo, regresa al punto de partida y se encuentra consigo mismo.”

EL ASHRAM “Un lugar abierto a todo el mundo; pero que no es para toda la gente.”

Muchos avances se han conseguido, pero muchos más quedan por hacer, hasta que nuestra

especie sea capaz de mostrar que sabe darle un apropiado uso, a dos de sus cualidades superiores: la inteligencia y el amor.

La inteligencia, como herramienta para entender las leyes que mueven la vida y poder adaptarnos a ellas, sin necesidad de rompernos la cabeza.

El amor, lejos de sensiblerías emotivas, entendiéndolo como la experiencia de sentir la relación que todo guarda con todo, de modo que si un ser humano crece todos crecemos un poco con él.

Es un hecho que, la raza humana, por naturaleza del amor, se hizo comunitaria y gracias a ello hemos subsistido; pero también la capacidad de razonar nos dio la experiencia de estar individualizados en nuestra consciencia, aislados en el interior de esa frontera llamada piel, acontecimiento que aunque sucediera en los remotos tiempos de la infancia de nuestra especie, nos creó el difícil dilema de conciliar los intereses individuales y colectivos; aún hoy.

Los Ashram son lugares que tradicionalmente en la India cumplieron la función de reunir a los maestros con sus discípulos para transmitirles su experiencia en las cosas de la vida y el alma humana. Configuraron, así, un tipo de cultura propia de esa parte del mundo, donde los valores de la experimentación del cuerpo y del espíritu eran tan reales, como para un occidental hoy, la tecnología para construir un automóvil.

En la actualidad los Ashram, siguen propiciando el encuentro entre maestro y discípulo en plena naturaleza, creando espacios idóneos para ahondar en los más sutiles aspectos de la condición humana; a los que se accede eliminando todo estimulante dañino para la salud, además de mantener un amable respeto por la vida animal, excluyendo su consumo alimenticio. Pero al mismo tiempo

son laboratorios donde experimentar, a pequeña escala, un nuevo tipo de comunidad, donde hombres, mujeres y niños juntos, mantengan su más genuina y creativa naturaleza, sin menoscabo del interés colectivo.

cuando consigue una presa de gran tamaño la sumerge en el río hasta ahogarla y luego manteniéndola en sus fauces la despedaza, dando unas tremendas vueltas sobre sí mismo.

“Mi pueblo es el lugar donde nací; pero mi auténtico pueblo, es el que tengo que construir yo.”

“La metáfora es tan generosa, que es capaz de repartir tantas y tan diversas sensaciones, como personas la escuchan”.

LA VIDA DE UN COCODRILO

LA MAGIA

Nace en tierra y en zonas tropicales; pero inmediatamente que sale del huevo corre hacia el agua.

En sus primeros años, puede ser víctima de cualquier pequeño depredador, incluso hasta un insignificante cangrejo; pocos son los que sobreviven en el inicio de su vida. El modo de alimentarse en esta época es pasivo; permanece largo tiempo con su boca abierta hasta que algún animal se posa en las fauces, entonces las cierra y consigue su presa. Cuando es adulto, sin embargo, es uno de los más temibles depredadores; posee un cuerpo acorazado y al sumergirse en el agua es capaz de blindarse completamente: unas membranas le cierran automáticamente todos los orificios del cuerpo, incluso el de la boca, lo que le permite mantener su arma letal disponible sin ahogarse. Ahora es el rey y no tiene enemigo que temer; pero inexplicablemente, cuando descansa en la ribera de algún río, las nutrias comienzan a mordisquearle la cola, sin él hacer nada, hasta producirle una herida, que incluso pude provocarle la muerte por desangramiento.

Está adaptado para pasar inadvertido, todo su cuerpo sumergido en el agua, sólo se le ven los ojos y los orificios respiratorios, se deja llevar por la corriente pudiendo pasar por un tronco que arrastrara el agua;

Era primavera y un cocodrilo andaba suelto por los transitados paseos de los centros comerciales de Madrid, estaba ocioso y decidió emplear el tiempo abordando a otras especies de la fauna urbana; lo hizo con una interrogante: ¿Crees en la magia? El cocodrilo estaba satisfecho y no pretendía cobrarse ninguna presa; pero para sorpresa suya, a la primera gacela que se acercó con la pregunta, dio un respingo del susto y temerosa aceleró el paso. Otra, sentada en un parque, al ponerse a su lado y cuestionarle, se levantó y con ademanes de protección dijo: “Déjame tranquila, vete, no me molestes” Hubo otros que simplemente contestaron “no creo en esas cosas”, otros ni contestaron; uno en su rostro se dejo ver una expresión que decía: “Este cocodrilo debe estar fuera de su charca”. Por fin, una bella mujer que andaba triste, al hacerle la extraña pregunta alegró el rostro, el cocodrilo le sonrió y le dijo “La magia existe, tú me lo demuestras” Ella sonrió y dijo “Sí, es posible” Ella siguió su camino y el cocodrilo, más contento que antes el suyo. Pero con una oscura pregunta rondándole la cabeza. ¿Por qué hay tanto miedo en la calle? ¿De dónde nace? ¿Que le pasa a esta época donde hay tanto progreso material y tanta incertidumbre interior? ¿Por qué la civilizada raza humana capaz de utilizar carísimas e

“inteligentes” armas para cometer atrocidades que ni el más cruel de los cocodrilos haría? ¿Por qué? ¿Qué puedo hacer yo al respecto? ¡No lo sé!.

Las respuestas de las personas a las que abordó le hicieron pensar que en las grandes ciudades y cerca de los centros comerciales, la magia hubiera huido del corazón de las gentes y algún afortunado empresario la hubiese capturado encerrándola en un frasco de perfume o el último modelo de automóvil.

“Si cierras la puerta de tu casa por miedo a los ladrones, atraerás la atención de los rateros y además impedirás la entrada de los amigos.”

LOS CENTROS TELÚRICOS Cada doce años, el plenilunio de Mayo reúne a miles de hindúes entorno al monte Kailas para nutrir su alma de una inexplicable belleza, en el Kumba Mela o fiesta del Aguador. Periódicamente se bañan en el Ganguees con el fin de purificarse en sus aguas, que siendo de las más corrompidas, sin embargo, transportan la energía que arrancaron en su nacimiento a las piedras del Techo del Mundo, en el Tibet. Todo pico o arista tiende a concentrar un tipo de fuerza; esta es la razón por la que nuestros antepasados, más sensibles que nosotros al vigor de la Tierra, consideraron sagradas muchas montañas y las eligieron como retiros o morada de los dioses.

Ciertos beduinos nómadas, después de largos recorridos, cuando quieren elegir el lugar más propio para el descanso, sueltan a los perros y ahí donde se recuestan, ponen su campamento; la experiencia les ha

enseñado, que ellos perciben los lugares donde la energía es más favorable para reponer fuerzas.

Hoy, el método científico predomina para estudiar, de otro modo, la misma fuerza telúrica de la Tierra, y pone otros nombres a los acontecimientos naturales de siempre, como es el caso del Cinturón de Van Allen, que como gajos de naranja y partiendo de los polos, rodea el planeta protegiendo la vida de las irradiaciones que viajan por el espacio, y que de no ser filtradas por ese escudo, destruirían la existencia. Esa cubierta protectora, guarda relación con las líneas de Hatman, un entramado similar al de los meridiano y paralelos, que forman cuadrículas sobre la superficie terrestre, en distancias aproximadas de un metro, fáciles de detectar por dos varillas metálicas que, sujetas en paralelo por las manos, al caminar, se cruzan entre sí cuando traspasan una de esas líneas de fuerza.

Otros pueblos en el pasado y sin aparente conexión entre ellos, sacaron rendimiento de este suceso y construyeron montañas artificiales: ¡Pirámides!. Con el fin de trasladar la dispersa energía que la Tierra desprende en paralelo hacia el espacio, se encauza por las vertientes de la pirámide hasta hacerla confluir en el vértice, provocando una potente concentración telúrica, capaz de hacer reaccionar, en sentido inverso, un vórtice cónico de emisión proveniente del cosmos, ocasionando así, el conocido Efecto de la Pirámide, nada paranormal o extraño, pues es el comportamiento habitual y simplificado de un árbol, que toma la energía de la tierra por sus raíces en forma de humedad y minerales y la hace subir hasta la copa como savia, que al entrar en contacto con la luz solar, provoca la vida por medio de la fotosíntesis.

LOS CENTROS MAGNÉTICOS La Magia siempre la llevamos con nosotros y brota como caudal contagioso, si la desbordamos sin prejuicios, también impregna en ocasiones los lugares, cuando un grupo de personas se congregan en un sitio, con la decidida intención de mejorarse. Es el caso del respetuoso magnetismo, que flota en el silencio de un abandonado monasterio, situado en el mismo centro de la Península Ibérica, cerca de los ancestrales Toros de Guisando. Las ruinosas piedras sin techo, se han revestido de gruesas venas de hiedra y abundantes hojas verdes que dan albergue a varios pájaros, cuyos cánticos sonoros adornan el silencio y acarician arcos y capiteles; como antaño aquí hicieran los monjes cistercienses, con sus místicos cantos gregorianos; hay en este espacio una puerta abierta al Cielo, que conecta a los seres humanos con el Dios que llevan dentro. ¡Sí! cada vez hay más almas sensibles, que buscan remansos de Paz, en una sociedad que ha sustituido los auténticos valores, aquellos que brotan del espíritu humano, por los ficticios, basados en el temor y el miedo.

La historia es irreversible y la máquina del tiempo, que solo viaja al futuro, dispone de un mecanismo que impide el regreso al pasado; con sabio atino, pues quiere lanzarnos a la construcción de un futuro mejor.

El tiempo pasa, la tierra se mantiene y las construcciones humanas se deterioran lentamente, con la guadaña de Saturno; pero de las viejas construcciones, resurgen nuevas formas más aptas para los nuevos tiempos.

Este es el caso de algunos pragmáticos idealistas, sociólogos constructores de una nueva sociedad, de una Nueva Era, que frente a la montaña donde se sitúa el ruinoso monasterio Cisterciense, edifican un espacio respetuoso con el medio ambiente, donde de forma permanente practicar milenarias disciplinas para el cuerpo, las emociones, la mente y el espíritu, sin dogmas que defender o imponer, con un carácter asociativo, lejos de cierto mercantilismo del que se ha contagiado la naciente Nueva Era; un lugar donde crecer y descubrir las múltiples facetas de una peculiar especie, capaz de las más aberrantes acciones y las más singulares hazañas.

“Somos viajeros en el tiempo habitando siempre los mismos espacios; pero de diferentes maneras.”

LOS CENTROS TELÚRICO-MAGNÉTICOS La cordillera de los Himalayas recorre en paralelo con el Ecuador una porción de Oriente, haciendo de sombrero a la India. Durante los últimos dos mil años de oscuridad, fue refugio de Iniciados, hasta que los políticos y militares de China instalaron sus cuarteles. Fue el primer síntoma, de que ese centro Telúrico, perdía su magnetismo para desplazarse a otro lugar.

Otra cordillera, la de Los Andes, que casi va de Polo a Polo, como columna vertebral del planeta, toma el relevo y reactiva los viejos emplazamientos, que ya fueron foco de actividad en otro tiempo…

El río Urubamba se desliza dando forma y vida al Valle Sagrado de los Incas, a partir de Oyantaitambo. Los accesos a Machupichu, se estrechan y sólo se puede llegar tras tres jornadas de marcha por El Camino Inca, subiendo altitudes de hasta 4.500 metros, que los portadores

sobrellevan a base de masticar hojas de coca. Mientras, algunos de nuestro grupo, sin peso y aun con la coca, sufren los vértigos del mal de altura; otros optan por tomar un viejo y saturado tren que serpentea por los cañones a lo largo de la rivera del río. Al final toda la expedición coincide en las milenarias ruinas, para celebrar el Inti Raimi o Amarre del Sol, como cada 12 años se viene haciendo, desde 1964 y cuando Júpiter transita por la constelación de Acuarius.

El cóndor planea sobre nosotros en círculos, como seguramente lo hacia hace 6.000 años cuando el Inca, o Hijo del Sol, pretendía hacer regresar a su Padre de nuevo al Sur. El Machupichu (Cerro Viejo) y el Guainapichu (Cerro Joven) conforman un conjunto Telúrico, que esta despertando. Como otras veces ya lo ha hecho de forma natural y cíclicamente; pero además la constante actividad de las personas que accede a este encantado lugar, le está dotando de un magnetismo que sólo el propósito de la mente humana confiere a los sitios por la intención que se pone al realizar ciertos rituales, convirtiéndolo en un centro Telúrico Magnético.

El Círculo de la Real Iniciación LOS ESPEJOS CONFRONTADOS Siempre que me sitúo entre dos espejos, me llena de curiosidad observar aquellas partes de mi cuerpo que me son más desconocidas; pero nunca me había fijado, que la réplica de las imágenes proyectadas unas sobre otras hasta el infinito, no siguen una línea recta y se curvan de tal manera, que en un lugar invisible fuera de ambos espejos, aquellas abismales reproducciones, se volverían a encontrar formando un círculo.

Toda vida, todo cuerpo, traza círculos en torno a un centro, éste centro, a su vez, se mueve girando alrededor de otro centro mayor y, arrastrando al que circula en torno a él, le hace describir espirales que se abren y cierran helicoidalmente, en asombrosa sincronía.

La Real Iniciación, se ha mostrado al mundo periódica y cíclicamente en distintas épocas, por medio de diferentes personas y grupos: Herméticos, Toltecas, Mayas, Taoistas, Calmecas, Órficos, Pitagóricos, Druidas, Sanyasines, Esénios, Sufis, Bodhisatvas, Nazaritas, Cátaros, Teósofos, Templarios, Masones, Acuarianos... Diversos puntos que emanan del mismo centro y configuran una tradición: La Tradición Iniciática Real, que no es exclusiva de nadie y ha sido representada por toda persona o grupo del pasado, presente,

o futuro, que la enriquezca, aportando nueva luz para la raza humana.

Aquello que logramos concretar, entender o percibir lo llamamos Real.

Iniciación es sinónimo de comienzo y aprendizaje, por tal motivo alguien que pretende formar parte del Círculo de la Iniciación Real es una persona abierta al asombro, para que lo inédito de sí mismo pueda ser transformado en vida a través de sus actos y, así, cooperar en estrecha armonía con el orden del cosmos.

“Todo medio es un fin en si mismo; además, el medio es el centro entre los extremos” EL PUNTO DEL CÍRCULO Toda circunferencia necesita de un centro generatriz, los yoghis le llaman Bindu, o punto de partida. El punto de partida del Círculo Iniciático, es cada individuo que lo compone, la Sangha o asamblea está para el desarrollo del individuo, por que desarrollándose la persona la comunidad crece.

Entre las cualidades de un Iniciado, son destacables las siguientes: 1. Servicio, sin servilismo, sin esperar recompensas.

Servir es dar de sí, dar de sí es descubrir capacidades, actitudes y creatividad que no conocíamos, por tanto aumentar la autoestima.

2. Humildad, que no es igual a humillación.

Es el estar haciéndose continuamente, sin llegar nunca a estar terminado, para eso es necesario, una

gran dosis de apertura al continuo aprendizaje o humildad; pero nunca apocamiento.

3. Iniciación, que es igual a vida.

Infundir vida, entusiasmarse y contagiar entusiasmo, para luchar por traer a la existencia, las sutiles esencias que nos trascienden. Abriendo nuevos caminos, fluir con la vida, propiciar el cambio, la experimentación, perder el miedo a equivocarse.

4. Dignificar, dar valor y afirmación a la persona.

Respetar los procesos de cada uno. No manipular ni utilizar a otros para fines propios. Poner por delante a las personas que a las instituciones.

5. Responsabilizar, confiar en la capacidad de actuar y resolver, que toda persona tiene.

Dar responsabilidad es dar un porqué vivir, las dificultades no son las que vencen a las personas, todo lo contrario, lo que las derrota es el no encontrar un sentido a lo que hacen. Confianza en los demás, no quiere decir ingenuidad, que tarde o temprano se transforma en decepción, pues nadie es perfecto; se trata pues, de confiar en el precioso potencial, que todos sabemos sacar, cuando es necesario.

6. Motivación, el que se cree vencido, ya está derrotado; proponer sin imponer.

No puede motivar quien no está motivado, cualquier propuesta de acción que estimule, debe partir del propio estimulo y estar luego dispuesto a acompañar en el acto hasta cuando sea necesario; o sea, no proponer algo, que luego uno no sea capaz de hacer. Y muy importante, el motor invisible del dinamismo externo, tiene su

origen, en la escucha silenciosa de los reveladores ángeles de la soledad (La meditación).

7. Imparcialidad, no establecer juicios, pre-juicio, ni post-juicios.

Aceptar a las personas como son, no como nos gustaría que fueran. Saber escuchar a otros desde el silencio interior, dejando al margen a la mente inquisitiva, que está valorando, por lo que la persona hizo en el pasado o sus posibilidades de futuro. Ser imparcial no quiere decir falto de opinión, tibio o indiferente, también es saber poner límites cuando alguien se está degradando a sí mismo o a otros. No se trata de suprimir las confrontaciones; pero sí darles honor y dignidad.

8. Humor, para romper la tragedia.

Es el más perfecto de los lubricantes, que destruye el aislamiento entre la gente grave y perfecta; es una de las posturas más ecuánimes, para afrontar cualquier obstáculo y, además, un manantial de ocurrencias sencillas, que pueden salvar las más difíciles situaciones.

9. Capacidad de síntesis, hablar para transmitir esencia, no para convencer.

Si repites una y otra vez lo mismo aburriendo al auditorio ¡Observa! ¿Cuál es la intención?. Al hablar se ha de poner más atención, desde dónde empujas a las palabras, si le pones alma a los sonidos, o sólo haces florituras y adornos para dar placer al oído o al ego.

La síntesis simplifica, deja márgenes para que los otros construyan a través de lo tuyo, agudiza la

intuición; permite que cada persona tome su propia dirección y, al final, cada uno pueda ocupar su lugar dentro de la misma estancia, sin tener que haber empujado a nadie.

10. Olvido, para recordar el presente.

Resolver el pasado para abordar el presente, es lo que proponen los expertos de la psiquis. Es una aceptable propuesta cuando el alma está saturada de conflicto; pero para no llegar a ese límite, el Iniciado observa lo que la vida le señala en cada segundo, pues cada instante está diciendo todo que necesitas saber para ese momento. Y si te equivocas, pide sinceras disculpas y sigue adelante; si el otro comete el error, olvida y brinda siempre nuevas oportunidades. “No pasa nada”.

Son tres mágicas palabras, que hacen que el Sol salga de nuevo cada mañana, sin las manchas del ayer, tanto para el santo como para el delincuente.

11. La Brújula, para encauzar el rumbo.

• Afirmación, confianza, amor, libertad y creatividad, son vientos que empujan a un buen destino.

• Miedo, desconfianza, rencor, dependencia, apatía, son vientos contrarios que detienen el avance.

Pero la ventolera de la vida, no mantiene constantes puras, es una cambiante mezcla de la Rosa de los Vientos, aun así el experto navegante saca partido de todos ellos.

12. Desaparecer, evitar el protagonismo.

Si cuando el Iniciado desaparece, el grupo se desmorona, es debido a que no se han forjado nuevos iniciadores, seguramente por haberse generado depen-

dencias, propias de ciertos elegidos, que se envuelven de incomprensibles misterios.

Cuando muchos se ponen de acuerdo sobre una mentira, parece ser verdad. Pero la VERDAD es un jardín de mentiras desnudas.

EL OMNIMETRO Cando se aborda un estudio de modo racional, especulativo y práctico, se hace por especialidades y diseccionando al todo en sus diversas partes, por ejemplo un árbol: Tomamos por separado 1º Las raíces, 2º El tronco con sus ramas, 3º Las hojas y 4º Los frutos, para luego de manera descriptiva explicar su funcionamiento y utilidades.

Pero el Omnimétro, además: 1º Pretende hacer dialogar al árbol con su entorno.

Como ocurre con la capilaridad de las raíces – ese oculto laboratorio donde se destila el salto evolutivo, desde el reino mineral a la materia orgánica vegetal– el tronco habla de dónde se sitúa el Norte, de la edad del árbol y las características climáticas que le rodearon desde su existencia, así como de las relaciones amistosas que establece con los insectos que lo habitan y con las aves que utilizan sus ramas como vivienda.

Las hojas definen la estación del año y la coordinación existente entre las partículas para ordenar inteligentemente las simetrías; las semillas son ingeniosas formas que instruyen sobre aerodinámica y

navegación y en tan reducido espacio caben los inmensos bosques de un mundo futuro; los exquisitos frutos que las recubren son llamativos focos de atención para otros seres vivos, que las impulsarán a viajar lejos, a otros espacios que colonizar y a otros niveles evolutivos que abordar, cuando son comidos tanto frutos como semillas, dando un salto más en el desarrollo, desde el reino vegetal al animal, o incluso humano.

2º Establece relaciones afectivas y simbólicas, con aspectos incluso alejados temporal, espacial o genéricamente de él.

Para los enamorados que declararon su amor bajo las ramas, es el símbolo de su unión; para Isaac Newton, fue descubrir la gravedad; para Eva es la metáfora de la perdida del Paraíso; para un cansado caminante, la sombra de un sueño premonitorio; para el carpintero un mueble, que hará un confortable hogar; para el escultor, la futura expresión de la armonía, en la talla que se forma al quitar las vetas que le sobran; para un poeta, la musa de su tronco, que se transforma en escalinata para ascender al paraíso de la alcoba de la amada; para el viento, alguien con quien jugar y para un enterrador la última morada de una vida que se extingue.

3º El objeto cobra vida dentro de una conciencia humana.

Sus raíces, te pone en contacto con tus propias raíces; el tronco, con la solidez de tus metas; las hojas con tu capacidad de absorber la luz de la vida; los frutos, con la facultad de nutrir a otros y las semillas, aquello que dejas como legado. De este modo el árbol cobra vida a través de tu persona, hasta el punto que el objeto de observación y tú que observas, rompen las diferencias y a través de un árbol o una simple brizna de hierba, puedes establecer puentes entre tu persona y todo cuanto te rodea, ya sea grande o

pequeño, e influir y transformar del mismo modo que eres influido y trasformado.

Establezcamos relaciones en X y en Columna: TESIS EVOLUCIÓN VIBRACIÓN ALIMENTACIÓN HATHA YOGA ASCÉTICOS INFANCIA FISIOGONÍA INHALACIÓN MINERAL CIENCIA MATERIA INSTINTO CUERPO TIERRA

MATESIS COHESIÓN LUZ AMOR BAKTHI YOGA MÍSTICOS ANCIANO TEOGONÍA RET. SIN AIRE HUMANO RELIGIÓN GLOBALIDAD SUPRACONSC. ESPÍRITU FUEGO

AIRE MENTE CONSCIENTE LEYES FILOSOFÍA ANIMAL EXHALACIÓN COSMOGONÍA ADULTO GNÓSTICOS GNANI YOGA MEDITACIÓN CALOR EQUILIBRIO SÍNTESIS

AGUA EMOCIÓN SUBCONSC. ENERGÍA ARTE VEGETAL RET. CON AIRE ANDROGONÍA ADOLESCENTE SIMBÓLICOS KARMA YOGA SERVICIO MOVIMIENTO ENTROPÍA ANTÍTESIS

Occidente

Oriente

LAS HERRAMIENTAS Mi amigo Mark viajaba periódicamente a México DF, compraba artesanías que luego vendía en Nueva York y sacaba un dinerillo que le permitía pagarse el pasaje de avión y acudir a las reuniones de la ONG, como representante de Norte América; yo representaba a Europa y, junto con otros compañeros de diferentes rincones de la tierra, configurábamos el Consejo Mundial de una organización con muchos ideales y poco dinero, pero con unos entusiastas recursos humanos que voluntariamente prestaban su servicio en favor de una causa noble: “Unir a todos los Seres humanos sin distinción de credos, razas, sexos, niveles académicos, económicos, sociales o nacionales, configurando una única nación, La Tierra y una única raza, La Humana”.

Una obra tan enorme, no es realizable si no comienza por algo tan sencillo, como ofrecer dos elementales herramientas individuales, la salud y la consciencia; la salud que se adquiere por medio de la alimentación, el ejercicio y la higiene, y la consciencia a través de la meditación, sin dogmas que inculcar o doctrinas que defender.

Años después y ya residiendo en Madrid, regresé a México, Mark me invito a dar un pequeño rodeo y viajar vía Nueva York, para visitar a él y su familia. Me recogió en el aeropuerto internacional J. F. Kennedy, transitamos enormes autopistas y llegamos a los hermosos bosques de Nueva Jersey. Abrió su puerta el garaje de una bonita casa de tres plantas, con piscina, cancha de tenis, sin cercas ni alambradas y algún que otro gamo paseando por los alrededores. Por las mañanas Mark abría el periódico por las páginas finales y después de ojear las columnas de la

bolsa de alimentos, con tono de suficiencia me decía: “Acabo de ganar tres mil dólares”. El garaje, era su refugio privado y santuario repleto de un montón de cosas, pero su mayor orgullo, era el completísimo cuadro de herramientas, todas brillantes y pulcramente colocadas cada una en su respectivo lugar. Un día que su hijo quiso hacerle un ajusta a la bicicleta, fue a descolgar de su digno sitio el destornillador y mi amigo le dijo: “Para esos arreglos ahí tienes las herramientas de uso” Y de una caja metálica extrajo un mugriento destornillador.

“La VERDAD es sencilla, la INICIACIÓN es simple, con una sola herramienta conseguir todos los ajustes, sin grandes alardes o exhibiciones”

PRIMERA DISCIPLINA DE UN INICIADO La Real facultad del: INSTINTO Precioso material y abundante mano de obra, que escapa a nuestra voluntad y consciencia; altamente cualificado en mantener la salud corporal por medio de funciones muy diversas, como dirigir la digestión, nacimiento, nutrición y regeneración celular, gobernar al sistema nervioso, administrar el riego sanguíneo, el calor corporal, mantener el impulso que preserva a las especies por la atracción sexual y, en definitiva, aquilatar el funcionamiento general de la vida mineral, vegetal, animal y humana, tanto en el ámbito individual, como de grupo por especies, colectivo global del planeta tierra, e incluso el orden general del cosmos.

En el Ser humano, además es un instrumento de incalculable valor, pues es el operario al que le encargamos las labores de mantenimiento mientras nos enfrascamos en la investigación de nuevos experimentos.

La iniciación primera y más primitiva es de origen ascético, ellos cultivaron el vigor atlético, la resistencia al dolor, la destreza corporal o la ritual cadencia de la danza y las artes marciales, como medio para sumergirse en el interior del ingenuo instinto, apropiándose o, a veces, disolviéndose en ese poderoso cinturón del automatismo del que participa la naturaleza.

Cuando el ardor instintivo es provocado por monótonas danzas de percusión y crea convulsiones e inconsciencia, en un desconcertante estado de trance, hablamos de atávicos rituales como el Vudú, ligado a las

más poderosas fuerzas naturales, que abandonado a ellas, poseen al oficiante.

El Instinto además, puede ser reflejo y entonces la emoción se desborda, en lo que popularmente llaman los bailaores flamencos “duende”, difícil arte, que provoca una fluida y artística improvisación, desplegando una gran fuerza vital y excitante apasionamiento.

También en la sorprendente y antigua China, en remotos monasterios de monjes, apreciaban mucho ciertas prácticas de combate, hasta el punto de adquirir el rango de arte; el arte de actuar con toda precisión y sin esfuerzo, desde el vacío de la mente racional, siendo uno con el oponente, que era convertido en aliado y, así, encontrar el poder del más lúcido instinto gobernado por la propia sabiduría del cuerpo y como fuente de inspiración intuitiva.

“Hay una acción que empujada desde el vacío, lo mueve todo con certeza y armonía; hay un vacío que estando siempre lleno, es capaz de admitir más y no agotarse nunca”

TRATADO DE PRÁCTICAS Iniciación Ascética VALOR Y LEALTAD EL CLAN DEL PELÍCANO Una remota tribu de África, de los grandes lagos, estaba de fiesta, varios jóvenes pasaron la noche en vela ante la iniciación que les aguardaba al día siguiente, los adultos habían construido una elevada empalizada en un claro del bosque desde la cual los adolescentes deberían lanzarse al vacío, protegidos por una liana flexible atada a los tobillos; si eran capaces de vencer los temores, dando el salto, demostrarían haber superado el primer examen: EL VALOR “Tomar la iniciativa, perder el miedo a la crítica y al fracaso, es desplegar alas, para emprender el vuelo a la libertad” La segunda prueba que da el definitivo paso a las responsabilidades y deberes de los adultos, no se hace esperar.

LA GRUTA SAGRADA Oscuro y profundo santuario que según los abuelos del clan contiene el más secreto y valioso de los tesoros para la tribu, si un día esa fortuna fuera robada, la estirpe del Pelícano se extinguiría.

Los jóvenes aspirantes debían montar solitaria y persistente guardia, uno tras otro, en sucesivas noches para proteger el gran tesoro, a sabida cuenta, que la oscuridad nocturna era el espacio natural de horrendos y peligrosos

fantasmas, empeñados en apropiarse del apreciado patrimonio.

Si el aspirante conservaba su puesto en calma, los fantasmas desaparecían y el tesoro de la gruta adquiría una nueva y valiosa moneda para la tribu, sellada con el cuño de:

pérdidas y reconstruyendo con renovado entusiasmo, sin lamentarse por el fracaso.

La segunda, para establecer una relación amistosa consigo mismo, evitando perjudicarse, por medio de costumbres y actitudes dañinas, para la salud del cuerpo y del alma.

LA LEALTAD

LA VACA ARGENTINA

Pero si el aspirante temeroso huía, los fantasmas, le perseguirían durante toda la vida y el clan perdía para siempre, una pieza de su más insustituible fortuna, un joven.

Los oficiales del ejercito apartados en el norte de África, lo eran a la fuerza como castigo o voluntarios para hacer méritos. El capitán que pretendía dirigir nuestro destino, no sé si era de los primeros o de los segundos, pero siempre tenia la cara roja y el habla torpe, cuando salía de la cantina de oficiales. Aquel día, cuando se dirigía a su despacho, me dijo que le siguiera. De pie, frente a él, puso a prueba mi lealtad diciendo: Tu sabes que hay enemigos de la patria entre nosotros y quiero pedirte que honres la bandera y un servicio para la nación: ¡Presta atención a todo cuanto escuches y luego me informas!.

Yo le contesté: Cuando me vaya del ejercito, en mi cartilla, seguramente pondrá: – Valor – ¡Se le supone! y aunque no se evalúa la lealtad, antes que a nada, me la debo a mí mismo y no puedo faltar a mis principios espiando a otras personas. Él sólo hizo un gruñido y me dijo: ¡Márchate!

Pero después de aquello, muchas noches, el calabozo fue mi dormitorio y la cocina el puesto de trabajo.

Un caluroso día, de los que forzosamente acudía a la cocina, me cerraba el paso una enorme vaca, que colgaba abierta en canal. Un negro contingente de moscas zumbaban alrededor de aquel fétido cadáver; en una oreja pude distinguir su placa de identidad, ponía Argentina 1948, aquel animal fue muerto antes de que yo naciera.

“En la Sagrada Gruta del Pelícano se organizan grandes banquetes; cada uno en su horno cocina el más exquisito plato, luego todos son depositados sobre una mesa y cada quien puede comer lo que quiera y cuanto quiera” EL MERCADO DE VALORES Los valores del provecho mercantil vencen, con frecuencia, el valor de ser uno mismo, de ser libre.

El auténtico valor, es un atributo perteneciente al linaje de aquellos, que vencen día a día al demonio del temor y practican la lealtad a sus propios principios, no siendo objetos de transacción económica.

La vela del Valor, se despliega para aprovechar cualquier viento, aun por adverso que sea y la Lealtad a sí mismo, es el timón que dirige adecuadamente la travesía de la vida.

Son las dos virtudes iniciales, que un Iniciado hoy también pule.

La primera, para afrontar la muerte de algo, de alguien, de partes de él o de todo él, aceptando las

Después de varios años, a aquella vaca le sigo teniendo un enorme agradecimiento, por su convincente discurso a favor de mi salud, haciéndome vegetariano.

A partir de aquel día mis amigos aumentaron, sobre todo en la mesa del comedor. Todos querían sentarse a mi lado, para que les cambiara mi correspondiente trozo de aquella vaca, por sus ensaladas.

“Paz es una hermosa mujer que nunca querrá hacer el amor con los militares, por más que ellos pretendan protegerla” SALUD Se fundamenta en tres pilares básicos: Alimentación, ejercicio e higiene.

Los grandes retos de las pruebas físicas de antes, se han de adaptar a nuestro tiempo, para superar nuevos desafíos.

Aquel día el Ministro de Sanidad y Consumo, con orgullo, inauguraba un nuevo hospital y alardeaba de que nuestro país, formaba parte de los más desarrollados, por tener más camas de hospital que otros. A mi parecer, un error grave, pues cuantas más camas y hospitales, implica una sociedad de hábitos de consumo más exagerados, menos saludables y por tanto más enfermos.

En la estación de Chamartín hay un elegante club deportivo, con nombre español, pero escrito en inglés. Paso por delante de caras conocidas del deporte, chicas ceñidas de coloridos trajes, que al ritmo de una música machacona suben y bajan de un taburete, una sala repleta de complicados y costosos aparatos, ejecutivos caminando sobre cintas transportadoras o

bicicletas estáticas, mientras miran el televisor o leen una revista, sudando enfundados en trajes de neopreno.

Contrasta con un reducido grupo de practicantes de Yoga, que en una sala vacía y más tranquila, con ropa clara y holgada, ejecutan con suavidad armónicas posturas, estiran el cuerpo, regulan la respiración y se concentran en un ejercicio, que sin esfuerzo, les aporta vitalidad y armonía interior.

El baño de agua natural, alcanzó tan alta consideración en algunas culturas, que llegó incluso a convertirse en un acto sagrado; pero el casto pudor de la cultura judeo-critiana, lo consideró algo indigno, hasta el punto que algún gracioso mestizo mexicano, bromeaba diciendo, que el hedor de los mugrientos conquistadores, fue el arma decisiva de la conquista de México.

SEGUNDA DISCIPLINA DE UN INICIADO La Real facultad de la

“El idealista mata el presente; el Ser humano íntegro lo crea y lo vive” NAHUALES

PSIQUIS Alucinante pantano del subconsciente donde se despiertan los sueños, se gozan y sufren las emociones, la fantasía crea mundos utópicos y la imaginación ostenta el poder para realizar lo inverosímil. En este lugar todo es posible, las rigurosas leyes del instinto aquí no tienen jurisdicción y las espirales espacio temporales se mezclan, en una liberadora danza, que desata los nudos del simple orden de la naturaleza y la lineal razón del Ser humano. Es una eficiente válvula de escape que va, desde las opresoras leyes a lo imprevisto, con dos puertas de entrada; una conduce a la locura y la otra al genio. Pero todo genio a de tener un amo al que obedecer, una lámpara maravillosa entorno a la cual girar: La luz de la consciencia.

Sin ese candil al que sacar brillo, el genio permanecerá cautivo en su mundo, pues de lo contrario suelto y sin dueño, en la siguiente plataforma de la inteligencia y la lógica, podría ser altamente destructivo.

Como ocurre con la ingestión de ciertos alcaloides, que al ser ingeridos exterminan e intoxican el sistema nervioso, provocando estados alterados e ilusorios de la consciencia.

Especie humana ligada fuertemente a la tierra, de arcaicos expertos en medicina y espíritus, autóctonos de América y en extinción; que el movimiento ecologista ha conseguido rescatar, debido a la moderna preocupación por la conservación de la naturaleza y que ya cultivaban mucho antes los Nahuales.

Iniciados de segundo orden, cuya pretensión es apropiarse del poder del animal congraciándose con los espíritus que los gobiernan, por medio de ofrendas y sacrificios; todo ello, a cambio de pequeños sobornos, para obtener, valiosos réditos: la visión del águila, la destreza del jaguar o el poder del tigre.

“Hay un poder que no se obtiene de los amigos, ni de la derrota de los enemigos, que no se exhibe ni necesita contrafuertes” Con el fin de agudizar la percepción, el Nahual utiliza hongos alucinógenos, como vehículo propulsor, que deja atrás la conciencia y permite entregarse al subconsciente, donde el propio instinto animal del hombre yace y conecta con el instinto colectivo de la Tierra; o también, por medio de prolongados aislamientos sin comida ni bebida y escaso movimiento encerrado en un reducido círculo hasta que la conciencia desfallece y las alucinaciones crean mundos fantásticos.

Son estilos de iniciación donde el psiquismo la fantasía e imaginación provocados por agentes externos, cobran singular importancia. Todos ellos han sido englo-

bados bajo el termino Chamanismo, el cual es originario de Mongolia.

“Hay una emoción, que sin flaquear la consciencia, ni desbordar la energía, calmadamente fluye y descifra los enigmas del SILENCIO” MAESTROS CONSTRUCTORES Los últimos rayos del áspero Sol medieval, huían hacia su fuente entre los pliegues de la colina y las sombras cambiaban el color de las piedras recién pulidas, que el maestro constructor superpuso unas a otras para la edificación del Templo. Cerca de la obra, un encordado y rectangular emplazamiento, se iba llenando de animados aprendices, elocuentes compañeros y reservados Maestros, pertenecientes al gremio de los constructores. Una vez al completo y sentados en sus respectivos lugares, con orden y respeto sesionaban en su tenida de esta manera: La piedra bruta representa al hombre sin forma, que por medio del cincel de la inteligencia, rebana las aristas que le sobran. A través del medido golpe del mazo de la voluntad, creando la piedra pulida, que encajará con otras, para la digna construcción del Templo Humano.

La escuadra y el compás, son las preciadas herramientas de nuestro arte, de las que nos servimos para delimitar formas cúbicas y trazar exactos círculos.

Las primeras simbolizan la materia, – la pre-esencia –, el propio cuerpo y el espacio donde se desenvuelve la existencia; los otros hablan del espíritu, – la esencia –, el tiempo sin principio ni fin.

Así, ceremoniosamente comenzaban y, a continuación, deliberaban sobre los acontecimientos y

la enseñanza del día, de modo que el aprendiz desarrollaba habilidades con las herramientas, que en principio solo eran útiles de uso material. Cuando el neófito, encontraba las relaciones simbólicas que unían al instrumento de uso en el trabajo, con los valores personales, era una indudable muestra de su adelanto en el arte, e inmediatamente obtenía aumento de salario, pasando a formar parte de la logia de los compañeros, Si en la continuidad de la obra, el compañero hábil y atento era capaz de transformar al símbolo inerte, en vida, a través de sus actos, era señal inequívoca, del grado de maestría alcanzado, lo cual le permitiría formar parte de la asamblea de maestros.

Somos artesanos constructores de obras materiales y artistas consagrados en la construcción de la propia obra humana puliendo nuestros defectos, para ser: “Hombres libres y de buenas costumbres” Y con este propósito, por último, se retiraban dando gracias al Gran Arquitecto del Universo.

TRATADO DE PRÁCTICAS Iniciación Simbólica BELLEZA, ARMONÍA Y SERVICIO LOS NUTRIENTES DEL ALMA Todo ser vivo se nutre y excreta; pero no solo en su parte material, también la psiquis y las emociones, como elementos del alma se alimentan y eliminan los desechos.

Belleza, armonía y servicio, son las saludables substancias que dan vigor al cuerpo emotivo.

Por el contrario el desorden, la violencia y el miedo, son los virus causantes de infinidad de desgracias y en gran medida de la perdida del sueño, el cual actúa por medio de liberadoras vivencias simbólicas, como laxante, para desechar los residuos tóxicos de las nefastas impresiones, no digeridas por la consciencia.

BELLEZA Lejos de estilizados, competitivos, sofisticados y pasajeros prototipos, impuestos artificialmente por la moda, la auténtica e inagotable belleza es una manifestación fina, tenue y gentil de un orden, que abreva en el inagotable manantial del Silencio, donde no hay juicios ni prejuicios.

ARMONÍA La Armonía, como la música es capaz de provocar acordes, a pesar de las rudas agresiones propinadas al instrumento.

Es la mina de los diamantes del alma, que todos afanosamente buscamos y pocos encuentran, por la pesada mochila que cargamos a nuestras espaldas repleta de impaciencia, avidez, deseo, ambición y expectativas futuras, que harán imposible el avance, sin antes abandonar esos agotadores lastres.

SERVICIO El Buen pintor con tan solo los tres colores básicos puede realizar una gran obra.

La Gran Obra no surge sin el esmero en la belleza, el cuidado de la armonía y la práctica del servicio.

Este último allana el camino con el pavimento de la humildad, actitud imprescindible para enlazar con otros caminos y poder tener acceso a una visión global de toda la red.

La Gran Obra es un proceso de continuo servicio que uno no debe estar pendiente de cuantificar; lo mensurable pertenece al mundo de las formas y con las formas, solo se pueden construir pequeñas obras; pero cuando las pequeñas construcciones se acumulan, su propio peso las derriba y surge la Gran Obra.

“La única guerra aceptable es aquella, en la que dentro y fuera de cada uno, se lucha a favor de los otros, ya que los otros, son una extensión de nos-otros” LA LOGIA URBANA Un tranquilo sábado de la mañana madrileña, fui con mi amigo Pedro a una galería de arte y me enseñó que el restringido método medieval de hacer cobrar vida a los símbolos como experiencias interiores del alma humana, hoy está al alcance de cualquier persona en la gran logia de

la vida. De modo que, por medio de cualquier obra escultórica, pictórica, cinematográfica, musical…, uno puede hoy, también como antes, mirarse a si mismo, a través de ellas, como si se tratasen de espejos parlantes.

Así decía D. José Manuel Estrada: “La vida te está diciendo en cada instante, lo que necesitas saber para ese momento, por los más insospechados medios, no te pierdas ni un detalle”.

cuerpo, cuidándolo como a un buen amigo, que nos transporta por la vida, no contaminar el aire que llega a los pulmones en forma de humo de tabaco y suprimir los excitantes que aceleran la actividad a costa de un tremendo desgaste o incluso destruyendo células irrecuperables del sistema nervioso. Además, evitar infringir sufrimiento a cualquier otro ser sensible, persona o animal por agresión física, asesinato directo o cómplice, sustituyendo la alimentación necrófila por la biófila o vegetariana.

2. Satya (veracidad) La más cercana lealtad, es la que se debe uno a sí mismo, llegando a ser lo que uno Es. El autoengaño, no permite mostrar a los demás mensajes verídicos y deforma la verdad, siempre tan relativa pero fácil de distinguir que nos alejamos de ella, cuando, con astucia, alteramos los acontecimientos, para conseguir reconocimiento, favores, o evitar el qué van a pensar de mí.

DECÁLOGO ÉTICO DEL YOGA YAMA, que incluye cinco autocontroles: 1. Ahimsa (doctrina de la no-violencia) Que dio a conocer a occidente Gandhi, como piedra angular para la independencia de la India. Se requiere poner en práctica, primero en uno mismo: no autolesionarse, ni provocarse dolor, respetar el

3. Asteya (no robar) Cualquier apropiación que no se consiga con el oportuno esfuerzo, nunca te pertenecerá realmente, pues será difícil de valorar. Incluso el retener la riqueza, no indica más que una personalidad muy temerosa, que no dejar fluir a otros los más elementales medios de subsistencia. Es conveniente tener presente, que todo cuanto poseemos, solo es un préstamo, que habrá que devolver, cuando inevitablemente nos vayamos.

4. Brahmacharya (control de deseos y pasiones) El deseo es el combustible que pone en marcha la voluntad, por tanto no se trata de matarlo, sino

reconducirlo y no de que él se convierta en el dueño. La sexualidad es uno de los más poderosos deseos, pero si la suprimimos, la vida se extingue, no son nefastos de por sí los actos; adquieren significado según la intencionalidad que anidamos en ellos.

5. Aparigraha (desapego) Toda adhesión desmedida a sensaciones, personas, emociones, ideologías, creencias, instituciones, dinero, etc. genera pesados lastres, cuando establecemos vínculos, afán de posesión o identificación posesiva con el objeto o la persona, en lugar de verlo como un elemento más del juego siempre cambiante de la vida. No se trata de dejar de actuar, sino de hacerlo con implicación, responsabilidad y sin expectativas en los resultados.

NIYAMA Con cinco consideraciones más: 6. Saucha (purificación) Mantener la higiene del cuerpo por medio del agua, así como de la mente, rompiendo sus barreras negativas, transformando los problemas en oportunidades de aprendizaje.

7. Santocha (contentamiento) Es la actitud que permite aceptar los acontecimientos como vienen, aprovechando la inercia que ellos traen, en lugar de navegar contra la vida. Es utilizar los vientos, aunque a veces sean contrarios, para encaminar la barca en la dirección adecuada. No podemos cambiar el rumbo de las fuerzas naturales –si lo hiciéramos crearíamos más

caos– pero sí modificar nuestra disposición ante ellas.

8.

Tapas (austeridad) Mejor lo explico con algunos agudos refranes "no es más rico el que más tiene, sino el que menos necesita" o "uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que dice".

Soy consciente de que el actual estado de consumismo es producido por una implantación sistemática en el cerebro de las personas, donde se equipara el tener con ciertos valores humanos y la felicidad, creando tal estado de confusión que nunca hubo tantos profesionales, a lo largo de nuestra historia, dedicados a remendar la salud de la psiquis y de la mente.

9.

Swadyaya (estudio) No se trata de erudición, en el sentido de repetir textos, sin ninguna base experimental propia, siempre haciendo alusión a famosos pensadores. Más bien, es mantener la apertura al aprendizaje, leyendo siempre entre líneas o sea "leer como beben las gallinas" y sobre todo leer directamente de la vida, fuente de inspiración de cualquier célebre autor, para culminar escribiendo nuestro propio libro, o inventando nuestro propio arte de vivir, lejos de costumbrismo repetitivos, que terminan siendo enfermizos. Atreverse a pensar por sí mismo, hoy resulta un gran reto, pues hay muchos profesionales, que pretenden ahorrarte el esfuerzo, haciéndolo por ti; hasta el punto de hacerte creer, que sus astutas sugestiones, son producto de tu iniciativa, creando necesidades inexistentes. Pero no es imposible, mantener una clara observación consciente, desde el propio Ser, por medio de la observación, el estudio y la meditación.

10.

Ishwarapranidana (devoción) Ishwara es la representación del atributo Divino que anima a todo Ser Humano, El Principio Creador morando en tu interior. El Ser Supremo se hace manifiesto en el mismo corazón del Ser humano, el más grandioso de los templos, ¡tu persona!. No es necesario ir en Su busca a remotos lugares, suntuosas capillas, o al más allá; siempre estuvo y estará muy cerca, en tu interior. Actuar desde Él es fuente de seguridad, acierto y felicidad, todo temor se desvanece y Dios mira al mundo a través de ti; todo mantiene unidad, generando respeto sin miedo, y devoción a las múltiples manifestaciones de la vida, no teniendo mejor alternativa que colaborar con ella.

Todo lo expuesto en los diez puntos anteriores, no son recetas aisladas; si no piezas de un rompecabezas, que uno puede armar dependiendo del momento y las circunstancias.

Por ejemplo: La veracidad implica, ser uno mismo, aun en las situaciones de rabia, furia o violencia, si es que fuera necesario proteger la propia vida, expresándolas en el momento que surjan, dejándolas salir con la intensidad necesaria; sin rebasar el límite, que implica infligir daños irreparables a otros seres vivos. Actuando así, pareciéramos transgredir la no-violencia, pero una vez el objeto o sujeto que nos provocó esa situación desaparece, también se va el rencor con él, aplicándole el desapego, para que ese enfermizo virus de la pasión no se enquiste y luego se manifieste como enfermedad de hígado o venganza premeditada.

Además, estas propuestas no van al juzgado, donde el fiscal de la moralidad mojigata, del castigo y el pecado actúa, en caso de ser incumplidos.

Son herramientas a disposición de la persona, con el fin de ir otorgando la fortaleza necesaria al cuerpo por la salud, la tranquilidad de las emociones por la limpieza de conciencia, la quietud de la mente al no temer a nada ni ser temido por nadie, y la paz de espíritu al reconocer la misma dignidad del origen Eterno de todo Ser vivo; actitudes que cultivándolas, con el tiempo, nos harán transparentes a la más pura Esencia del propio Ser. "Lo que con el tiempo se consigue, el tiempo lo respeta".

TERCERA DISCIPLINA DE UN INICIADO La Real facultad de LA MENTE Por primera vez, aquel animal hijo de la Tierra, protegido por su madre y obediente a ella, alcanzó su mayoría de edad; levantó la cabeza sobre los hombros, miró a la Luna ocultándose. La noche se hizo más obscura y las estrellas parecían fragmentos dispersos de Luna rota, pudo distinguir entre cielo y tierra y se dio cuenta que él, era independiente.

Separado de los otros por la frontera de la piel y distinto del resto del entorno, podía dirigir sus pasos en la dirección elegida, e impulsado por el deseo, la curiosidad y la voluntad, desobedecer los mandatos de la naturaleza. Tal enfrentamiento, rompió el pacto de protección natural que la tierra otorga a sus obedientes hijos, dando como resultado el esfuerzo, el afán y la pugna, al poner en actividad una parte nueva del sistema nervioso, el voluntario, producto de una minúscula alteración genética o perdida del cromosoma que le mantenía unido a la inercia providencial.

Desde ese momento aquel animal conoció otra variante del miedo al sentirse rodeado de tremendas fuerzas para él incomprensibles: Experimentó la soledad al verse encerrado dentro de sí mismo, separado de los otros. Perdió la inocencia, tuvo que deducir, sacar conclusiones, prever y trabajar para sobrevivir. Se reconoció culpable de sus experimentos fallidos y orgulloso de sus aciertos, individualizó su conciencia distinguiendo entre lo bueno y lo malo, puso

nombre a las cosas para diferenciarlas entre sí, se puso nombre a sí mismo; aquel animal comenzó a pensar, se hizo animal racional.

“El pensamiento es el velo del templo, que oculta al profano el Ara, donde descansa el SILENCIO, dividiendo al único recinto en dos mitades” LA CAMPANA DE VACÍO Todo estaba preparado, sofisticados sistemas electrónicos y una gruesa campana de cristal llena de agua, sería el laboratorio donde sumergir a un hombre de nuestro tiempo y experimentar con él las respuestas del cerebro humano, al aislarlo de todo estimulo exterior; a los tres días los sensores detectaban peligrosas reacciones que registraban brotes delirantes de locura.

Somos voraces consumidores de sensaciones, sin ellas no tendría sentido la vida; pero los estímulos son como las plantas, las hay nutritivas y también venenosas.

Los estímulos nutritivos son maestros de iniciación, fortalecen la voluntad de experimentar por uno mismo y cada vez se hacen menos necesarios, aunque siempre estén ahí como fuente de inspiración.

“El SILENCIO es el desierto donde se muere por inanición, o se prende el fuego purificador de la Tierra” LA GRAN PIRÁMIDE De ignotas y lejanas tierras, en los míticos tiempos de Hermes, el viajero D. Misterio, ávido de conocimiento, tras una incierta travesía, llegaba con muchas dificultades, a las riveras del Nilo.

Situado frente a la enigmática esfinge, pretendía desvelar su secreto; si el buscador conseguía descifrar en parte el enigma era engullido por el desierto y, en la soledad de su alma, tras varios años de estudio y forjar el carácter por la disciplina y la meditación, se preparaba para el último y definitivo asalto, penetrar en el interior de la Gran Pirámide; después yacía solo y aislado en el sarcófago, durante tres días y sus noches, dispuesto a morir para salvarse la vida.

Si el encierro tenía éxito, D. Misterio, deseando matar a la ignorancia, al final cometía un suicidio, ya que el Gran Enigma dejaba de serlo, pues siempre le había acompañó en su viaje, calzando sus sandalias.

“Matar a un muerto no es un asesinato, es una necesidad para volver a vivir”

TRATADO DE PRACTICAS Iniciación Gnóstica “OBSERVACIÓN, ESTUDIO, MEDITACIÓN” EL VIEJO PROFESOR Le llamaron cariñosamente, el viejo profesor, por ser de avanzada edad y buen juicio, que con conocimiento supo transmitir a una singular generación de jóvenes idealistas, como catedrático en la Universidad de Madrid.

D. Enrique Tierno Galván, hacía honor a su nombre completo: Enriquecedor, Amable y Estimulante.

OBSERVACIÓN Y ESTUDIO El día que nos recibió en su despacho, en funciones como Alcalde de la Villa de Madrid, a una pequeña representación de la Red GFU, encabezada por D. José Manuel Estrada, pude constatar que la naturaleza humana puede encarnar puestos políticos sin perder sus mejores cualidades. Mi Maestro y él eran de la misma edad y cierta similitud se dejaba translucir en un talante moderado y ecuánime; no necesitaron intercambiar muchas palabras para crear una atmósfera de entendimiento, que se tradujo en una invitación formal por parte de D. Enrique a mi Maestro para asistir a una reunión de Municipios Unidos, que por aquel entonces él presidía.

Cierto día al inaugurar una biblioteca alguien le preguntó, ¡Profesor! ¿Cómo se debe estudiar? Él respondió:

“Como beben las gallinas” • • • •

Levanta la cabeza del texto escrito.

Mueve la cresta de la mente.

Con el pico lleno del agua del conocimiento Deja que por gravedad caiga, al fértil valle de la consciencia.

Es la forma en que también recomiendo que se lea este el presente libro.

Haz un ensayo con estas frases: “El conocimiento se nutre, de la diversidad de estudios y las experiencias vividas” “La sabiduría es el producto, de la Única Fuente de la Vida experimentada” Anota en el siguiente espacio tus propias conclusiones:

De este modo comenzarás a escribir tu propio libro, o crear tu propia vida.

MEDITACIÓN UN MEDIO PARA LA ACCIÓN La meditación trabaja con los hilos de la mente, para deshacer los nudos que ella misma confecciona, debido a los miedos acumulados en el pasado y la desconfianza en un futuro incierto. Es una práctica en la que más que añadir nuevas teorías, se han de quitar, más que esforzar se tiende a fluir, más que complicar se ha de simplificar y vivir en la intensidad del presente un completo aquietamiento; algo similar a un bólido del futuro, tan perfecto, que siendo capaz de transitar a una tremenda velocidad, en su interior pudiéramos disfrutar de la más absoluta inmovilidad y silencio.

Pero ¿Cómo aquietar a alguien que desde su nacimiento fue instruido para desconfiar, ser más astuto y golpear antes de ser golpeado?. ¡Sí! Eso tuvo su justificación, en un tiempo donde la escasez hacía difícil la supervivencia y el más fuerte y astuto prevalecía; pero hoy tú sabes que la auténtica fortaleza es la capacidad de hacerte amigo de ti mismo y poder cooperar con los demás.

Por otro lado, el mayor depredador del Ser Humano, es el propio Ser humano, que asesina y se deja matar, no tanto por el acero o un proyectil, sino por el arma sutil de la desconfianza, el orgullo, el temor, la guerra de nervios, los precios, el poder; cosas que lamentablemente le atraviesan el corazón con mayor eficacia que una espada.

Estamos aplicando remedios de un pasado a un presente nuevo, hoy ya no hay escasez, sino mala gestión de la producción; pero seguimos acumulando más de lo necesario y desposeyendo a otros, cometemos el más grave de los errores gramaticales al confundir el Ser con el tener.

Los más temerosos y astutos han aprendido a retener el

agua vital en su embalse privado donde solo sirve para dar de beber al Sol, o sea a su miedoso y enfermo ego, amparado en la nueva y fanática religión de la industria, el comercio y el capital.

Pero ¿Cómo desprenderse de ese miedo, que provoca el control de los unos sobre los otros y sin menoscabo de la individualidad creativa, poder cooperar con lo colectivo?. ¿Cómo aprender a Ser, para empezar a hacer de forma diferente y mejor para todos?.

“La máxima aspiración del Ser humano es ser libre; sin embargo, por que buscamos culpabilidades, en otros, de las cosas dolorosas que nos suceden” MEDITACIÓN REFLEXIVA Al nacer ¿Cómo iniciaste tu vida?

Tomar aire, explorar el nuevo espacio, moviéndote, buscar el pecho de tu madre y por último un buen baño, para quedarte plácidamente dormido.

Respiración, movimiento, higiene, alimentación y descanso, son los primeros actos de la vida y la vida seguirá evolucionando en la medida que mantengas un equilibrio sobre ellos. En caso contrario, la inquietud, la tensión y el desgaste se traducirán en dolor, como síntoma de alguna incorrección; entonces hay que pararse y revisar, por medio de una meditación reflexiva, para corregir.

El movimiento de la mente entorno a un objeto, acto, virtud, cualidad o defecto es Meditación

reflexiva (Medita la acción) principal disposición que Occidente ha cultivado como instrumento para entender el mundo que nos rodea, por medio de la ciencia, la tecnología, la filosofía y la religión con dogmas y preceptos morales estandarizados.

MEDITACIÓN HERMÉTICA O EGIPCIA EL MISTERIO DE LA ESFINGE Lleno de polvo y sediento por confrontar el misterio, tras varios meses de supervivencia entre cañadas, valles y montañas; el candidato que llega de tierras lejanas, ha puesto a prueba su necesidad de conocimiento y está, por fin, frente a la muda y pétrea esfinge, con la difícil pretensión de convertirla en piedra filosofal y, haciéndola hablar, le indique, dónde encontrar la llave que abre la puerta de acceso a las Secretas y Sagradas Cámaras de Sabiduría.

Ya frente a ella, le pregunta ¿Cual es tu misterio? Y solo enseña sus imponentes garras de León que hablan del valor y osadía necesarios para empujar la puerta. Aun sin saber que hay tras de ella, pero con el fuego de la confianza iluminando el corazón que late al ritmo de la vida, el explorador vence el miedo a lo desconocido.

Ante sus ojos se tiende con tremenda solidez un robusto cuerpo de Toro; nuevo enigma que desafía su ingenio y al que sólo la intuición da la respuesta; no es suficiente vencer el temor, sino que además es necesaria la voluntad y perseverancia; no basta con empujar el pórtico, hay que transitar por el pasillo oscuro de los pasos perdidos.

La paciencia y la constancia, dan acceso a la luz de la sabiduría, expresada en ese Rostro Humano que con

gran dignidad se levanta sobre el cuerpo de toro. Los conocimientos son tesoros que embellecen el alma humana, mas sin embargo la envanecen; dan respuestas sobre los mecanismos que mueven la vida pero no son el nutriente que la crea y la transforma; ese germen anida en los inmensos espacios vacíos que mantiene unido el cuerpo, las emociones y la mente del buscador.

La última respuesta, no tiene palabras, se da en el silencio, en la retirada, en el desierto que sirve de base a la esfinge. De modo que el peregrino tiene que transformarse en desertor, abandonar lastres, para remontar el vuelo del Águila, matar al Escorpión, transmutar su plomo en oro. Y por fin, él mismo ser devorado por la esfinge, de manera que desaparece cualquier diferencia entre el objeto de observación y el observador; ahora es admitido y comienza la Iniciación.

Durante varios años las 22 láminas misteriosas, una tras otra van siendo descifradas, el edificio humano se consolida y se pule. Los arquetipos del Tarot cobran vida a través del hombre y lo dejan listo para la gran prueba, traspasar el umbral de la muerte y tocar el reino de los dioses inmortales, aislándose durante tres días con sus noches, dentro de la Gran Pirámide, en el interior del sarcófago y en lo más recóndito de si mismo.

Pero, ¿cómo ese enigmático, mitológico y oculto pasado, que sirvió a unos pocos elegidos para experimentar las cumbres de su propio Ser, puede actualizarse de forma clara, natural y sencilla para el mundo de hoy, donde la información viaja por los aires, accesible a cualquiera y, donde en general se valora como parámetro de felicidad la sensación del tener por encima de la experiencia del Ser?.

"La Libertad no se conquista se hace el Amor con ella" PRÁCTICA 1. Sitúate frente a una gráfica, obra musical, película, paisaje, escultura, acontecimiento de tu vida, otra persona, defecto, virtud u objeto cualquiera; ponte frente a la vida que te rodea, enmarca el objeto de tu meditación y observa con detenimiento empleando todos los sentidos durante unos minutos.

2. Seguidamente retira todos los órganos sensoriales y mantén viva esa imagen, sensación o suceso en la mente, con toda la precisión posible y sin verbalizar la observación, observándola como fotogramas dentro de tu cabeza.

3. Utilízalo como medio o arquetipo, extrae el símbolo, encontrando la relación que ello tiene contigo, utilizando el elemento externo como despertador de algo que dormía dentro; en fin, haz que la representación exterior muerta, cobre vida en tu experiencia interna.

4. Por último, permite que el objeto de la observación y tú, el observador, seáis una misma cosa, tomando la experiencia directa de la fuente.

"Si te mueves, siempre lo harás en círculo y el centro estará fuera de ti, si desde dentro permaneces inmóvil, todo girará a tu alrededor y estando en el centro, cualquiera de tus movimientos crearán armonía" El movimiento de la mente en torno a un objeto, acto, cualidad, virtud o defecto es la Meditación reflexiva (meditar la acción), que occidente ha utilizado como herramienta exploratoria de todo lo que nos rodea, dando

como resultado la ciencia, la tecnología, psicología, filosofía, la religión con dogmas y preceptos morales estandarizados. Este método tuvo su origen hace unos 6.000 años en las márgenes del río Nilo dentro de los Colegios de Iniciación Hermética.

La mente racional se desprende de las culpabilidades del pasado y de las quimeras del futuro; quedándose en el presente se despliega la intuición –en el Silencio todo puede ser dicho, en el vacío todo cabe; es la Concentración (la acción con un centro), que pudo tener su origen a las orillas de otro gran río el Indo–, aportando a la naturaleza humana la Paz Interna, la Plenitud y la fusión con El Todo de manera personal, ágil, flexible y sin el ingrato esfuerzo de la negación de la vida con todos sus componentes.

Hoy, La Tradición de los Iniciados se asoma al mundo, para unir el Nilo con el Indo, lo tradicional con lo innovador, lo racional con lo intuitivo, el hemisferio izquierdo del cerebro con el derecho, ida con píngala, yin y yang, hombre y mujer, ciencia y religión..., con el propósito de abrir el entendimiento a la percepción de lo que siempre estuvo en uno mismo, dando lugar al Samadhi, Budhi, Satori o Iluminación.

"Quien siempre transita el mismo camino, nunca tendrá la oportunidad de extraviarse y sentirse estúpido; entonces sé creerá perfecto y es cuando realmente será idiota"

MEDITACIÓN DEL YOGA LA OBRA ALQUÍMICA El practicante de Yoga es un alquimista dispuesto a realizar la Gran Obra, cuyo Krisol o laboratorio es su cuerpo, Kronos (el Tiempo) su aliado y el Oro o lo Imperecedero, su recompensa.

Actúa como un entregado atleta de alta competición, que se prepara para competir con él mismo, en el gimnasio de la quietud de su Ser y así participar en las olimpiadas de la vida, embelleciéndola con su habilidad.

Lejos de preceptos dogmáticos, creencias incomprensibles o reglas morales estandarizadas, él utiliza un sistema que se va modificando conforme a sus individuales necesidades, teniendo en cuenta que "los fines están en los medios" y con la confianza y orientación de un amigo, su Maestro.

Antes de entrar a considerar esta meditación es necesario aclarar los cinco tipos de acciones donde se mueve el Ser Humano: •

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La acción ciega inconsciente o instintiva que sustenta y protege la vida, con reflejos condicionados, impulsos veloces, involuntarios, que no requieren de esfuerzo ni conllevan sufrimiento o placer; es la actuación del sistema nervioso vegetativo.

La acción emotiva o subconsciente, que conduce poderosamente los actos por el agrado o desagrado inmediato que ellos proporcionan, sin mediar otras consecuencias en el tiempo.

La acción razonada o consciente, que conforma la actuación por la conveniencia o inconveniencia en

contraste con actuaciones anteriores y previniendo los acontecimientos futuros.

• La acción intuitiva o supraconsciente, es la cúspide de la razón, no la niega sino que la completa, surge de experimentar el presente como la única realidad que incluye al pasado y el futuro. Es espontáneo, se puede ser en todas partes sin dejar de estar aquí, es el mundo de la magia, la poesía, donde todo es posible y hay unidad, la soledad y el temor desaparecen.

• La acción desde la no-acción o trascendente; el silencio produciendo el sonido y el sonido alimentándose del silencio, recreándose en su obra, explorando todas sus infinitas posibilidades, sin agotarlas; el héroe vence a la muerte y se recubre con los laureles de la Inmortalidad.

Los cuatro primeros campos de acción, desde los cuales actúa en el ser humano, se conectan con ejes referenciales del cuerpo de la persona, en forma sucesiva y ascendente.

"La libertad es un farol; pues en el mundo del espacio todo tiene sus contornos y límites y sin embargo también es un farol que ha alumbrado toda conquista humana" ¡Comencemos!

Siéntate sobre un tapete en el suelo cómodamente, con las piernas cruzadas, concentra la acción sobre ti mismo, (Concentración o pequeño Dhyana), inicia una serie respiratoria lenta y relajante, observa todo tu cuerpo en su conjunto en su forma piramidal: su base, su centro a la altura del corazón y el

vértice coronando la cabeza: Mantén la disposición adecuada para el inicio de la escalada de abajo a arriba, de lo denso a lo sutil, de lo primitivo a lo supremo.

Ahora, comienza la meditación (Dharana) PRÁCTICA 1. Pon toda la atención en Kanda, zona situada entre el ano y genitales. Desde ahí como centro, abre la percepción a todas las funciones involuntarias de tu cuerpo, (movimiento del corazón, flujo del riego sanguíneo, proceso digestivo, regeneración celular..)

2. Distingue con claridad el abdomen, en su interior hay todo un proceso de selección de aquellos elementos químicos que pasarán a formar parte de ti y otros que serán desechados. De igual modo observa tus emociones, sin dejar de estar en el plexo solar, y descubre y selecciona aquellas que le dan belleza y vigor a tu alma.

3. Pasa por la estación central, en el eje del pecho y detente a observar la vida que asciende de la tierra y se une con la que desciende del cielo provocando la sístole y diástole que mueve tu corazón.

4. A la altura del entrecejo y en el centro del cráneo, distingue como la mente se sumerge en los acontecimientos del pasado intentando rescatar a náufragos ya cadáveres, o se proyecta sobre las posibilidades de los sucesos futuros.

Mantén lucida la atención, date cuenta que tú no eres tus pensamientos y mete en una mazmorra oscura a esos dos ladrones, para dejar en absoluta libertad al presente.

5. Desde la atalaya de tu cabeza ábrete incondicionalmente a la experiencia del amor, siéntete en todas partes sin dejar de ser en ti; acepta todo y a todos sin rechazar nada, ni a nadie.

6. Experimenta cómo en el fruto de tu amor, madura la semilla de la libertad abriéndose al silencio; con sencillez todo fluye, en profundo estado de concentración.

7. Regresa por donde viniste, purificándolo todo.

El objeto de la meditación y el que medita se funden, la escuela de la vida te revela sus secretos y te preparas para abordar otra nueva aventura.

Todo lo descrito no deja de ser medios artificiales, que la insatisfacción humana ha creado para encontrar respuestas a su propio enigma, pero sin embargo esos artificios a veces funcionan y además nos acercan a la vía más natural de crecimiento, la de la pareja, que se unen con el propósito de explorarse uno, por mediación del otro.

“Un defecto, es un acierto que no está ni en su justo tiempo ni en su lugar”

CUARTA DISCIPLINA DE UN INICIADO La Real facultad del ESPÍRITU La función de la mente es pensar, la del espíritu es amar.

La alta espiritualidad es una experiencia que une; sin dejar de ser en ti, puedes llegar a ser en los demás, sintiendo a los otros, como una extensión de nos-otros, o sea de ti mismo; pero para ello hay que aceptar incondicionalmente a las personas, tal como son, sin intentar cambiarlas. Donde quiera que esté aquello que uno ama, se viaja con ello, provocando una expansiva liberación, que rompe los cercos de la piel y nos integra sin reservas a todo.

El que ama experimenta el amor dentro de él y aunque aquello que le despertó el amor desaparezca, el amor seguirá en su corazón; si esto no sucede y la soledad o la tristeza le embarga por la perdida, pensando que la vida ya no merece la pena, no hubo amor, más bien pasión, posesión o querer.

Pero el espíritu también se enferma, cuando la bacteria del fanatismo encuentra un cuerpo debilitado por el temor; el temor es un tumor que lo infecta todo de odio, es el más dañino virus que mata el amor.

El amor es la misma y única fuerza de cohesión que ejerce su poder tanto en el Cosmos, como en el Ser humano; en el universo opera por medio de la fuerza centrípeta y centrifuga, creando formas espirales, en el ser humano le llamamos Amor y Libertad, creando fondos espirituales.

Ya fue dicho: “El amor os hará libres” “Ama y haz lo que quieras” “Uno es grande cuando tiene capacidad suficiente de incluir a todo dentro de sí, incondicionalmente y sin ponerle barrotes” LAS GOTAS Y EL OCÉANO “La Sabiduría del Budismo”, la llevaba siempre en el bolsillo grande del pantalón de faena.

En las guardias o en la cola del comedor, clandestinamente, leía su contenido, mientras se repartían algunas bofetadas en la fila. Fue un libro que a los 21 años me dio una seña de identidad propia y poco común en aquel adverso ambiente.

De todo él, una frase de tinta negra tomó el rojizo color de mi sangre, decía así: “Somos como gotas de rocío que se deslizan al Resplandeciente Océano” Es una asignatura difícil de comprender, para una gota, que se ha hecho opaco hielo racional y cree no tener nada que ver con el Océano o incluso niega, siendo que, inevitablemente, un día el cálido Sol la hará retornar.

–Pero, ¿cómo retornar?

–Con plena consciencia del recorrido y enriqueciendo al océano.

Recuerdo la parábola de los talentos, donde Cristo dice: “Un hombre entregó cinco talentos a uno

de sus siervos, se fue y cuando regresó encontró, que el siervo había producido cinco más”.

–Y ¿cómo hacer el retorno?

–Permitir que el Gran Océano vea al mundo a través de su partícula, manteniendo cristalina la gota.

Del mismo modo que un artista se conoce a través de su obra, así el Supremo Constructor, se conoce así mismo utilizando su creación y por medio del Ser humano. .“Dios es Perfecto por ser infinito y el hecho de ser infinito lo hace imperfecto por estar siempre sin terminar” EL TIEMPO Y EL ESPACIO LOS HUSOS HORARIOS En cierta ocasión tuve un sueño, yo me encontraba en la Luna, la Tierra era una majestuosa esfera, cubierta por un fino anillo plateado, tan tenue que me daba la impresión que si alguien crecía un poco más por encima de lo normal, tendría que vivir agachado el resto de su vida para poder respirar. Estaba en ese sueño, cuando me sorprendió una animada disputa que mantenían por teléfono un Jarocho, habitante de un tranquilo pueblo colonial del Golfo de México y un Baturro Aragonés de la Península Ibérica.

Pascual mi amigo español sostenía de forma contundente que la buena hora es la que marcaba su reloj, las 12 del medio día, mientras que Carlitos mi otro amigo mexicano, después de muchas florituras decía: “no mi cuate, la buena hora la marca el mío, son las 5 de la mañana”, para mayor confusión de ambos intervine al mismo tiempo en sus teléfonos y les dije:

–Desde la Luna os saludo y os digo, que desde aquí: “Todas vuestras horas son al mismo tiempo”

toda forma está junto a otras semejantes constituyendo un cuerpo mayor, que a su vez junto con otras de su dimensión, constituyen algo todavía más grande, en una trama infinita, de conjuntos de conjuntos asociados, hacia lo inconmensurable e ínfimo.

El uni-verso es uno y diverso, es grande y pequeño, finito e infinito al mismo tiempo, dado que, los pequeños finitos son englobados dentro de otros finitos mayores y éstos dentro de otros, y así sucesivamente, configurando un infinito sistema.

“La VERDAD es el conjunto de todas las pequeñas verdades, e incluso de las mentiras.

EL ÁRBOL DEL AMOR

EL UNI-VERSO El Planetario, es lugar idóneo para una corta siesta bajo las estrellas artificiales, pero aquel día no pude dormir, ni cuando las estrellas reales se hicieron visibles al retirarse el ególatra Sol. El astrónomo conferencista de aquella tarde me quitó el sueño cuando dijo: “Los últimos descubrimientos parecen indicar que el universo es finito”.

Todo parecía insinuar, que las avanzadillas científicas más progresistas, nos hubieran convencido de lo contrario en los últimos años y ahora lo nuevo vuelve a los viejos conceptos.

Es muy natural ver que todo tiene contornos, toda existencia se desenvuelve dentro de un determinado marco, con unos bordes que la delimitan; pero

El Vico es un rincón al abrigo de dos montañas, por donde se descuelga una pequeña cascada, nutriendo helechos, olmos y pequeños huertos, es una zona fresca y apacible, donde se oye reverberar el canto del cuco, e idóneo para bañarse en desnuda soledad y también ir de merienda con los amigos en las calurosas tardes de verano.

Lugares como este se encuentra de vez en cuando, moteando los secos campos de cereales y girasol, en una comarca a caballo entre la Alcarria y la Serranía de Cuenca.

En este sitio hay un inmenso pino milenario cargado de sabiduría. Desde mi infancia siempre me tumbaba bajo su silenciosa sombra para admirar sus remas; pero la última vez que me apoyé sobre su tronco, después de muchos veranos que no lo visitaba, rompió su silencio y me dijo: “Tu vida, no es muy diferente de la mía, ya que me sustento y nutro gracias a la tremenda variedad y dispersión de las raíces; pero todas ellas convergen sobre

el único tronco, el del amor, sobre el cual crecen las ramas, de donde cuelgan los nutrientes frutos de la libertad” “Para cumplir con tu destino puedes recorrer muchos caminos; pero al final todos confluyen en uno, el del Amor, sin amor no hay libertad” TRATADO DE PRÁCTICAS Iniciación Mística “AMOR, AMOR Y AMOR” UNA TARDE EN EL TRÓPICO Un grupo de discípulos sentados entorno al Maestro se protegían del Sol de las cinco bajo un frondoso árbol tropical, un gusano se descolgaba lentamente desde las hojas por un fino hilo fabricado por el mismo, que sutilmente mecía el viento. Había calma y el placer del disfrute del momento era visible en los rostros, mientras el Maestro introducía la plática de la tarde diciendo: "La vía natural que conduce a la Iluminación, es la de la pareja".

La mujer y el hombre, son un único y sólo misterio que ante la dificultad de observarse a sí mismo, se hubo de fraccionar en dos, para tener la capacidad de mirarse el uno en el otro –como el que se sitúa delante de un espejo, de modo que lo que se ve en la persona que está al frente, es porque yo lo tengo en mí–, y así, poder observar los rincones más limpios y

sucios de sus respectivas personas; con el empeño de formar equipo en la vida cotidiana para descubrirse mutuamente, incluso dentro del acoplamiento pausado, sutil y ritual del acto sexual.

Entre el sexo y el seso hay treinta y tres vértebras, que el buen alpinista escala con el propósito de observar y disfrutar del paisaje desde la cúspide, venciendo la tremenda gravedad que el instinto ejerce. Esta relación sexual, no sólo es genital, se humaniza por medio de la consciencia, que le da belleza, al entregarse mutuamente en un acto de servicio, y se hace sublime por el amor; única experiencia capaz de abatir las fronteras que producen la ilusión del aislamiento, que impiden darse cuenta de la unidad con la otra parte del misterio, que es mi mismo misterio, abordando la conexión con el Misterio Total, aclarando así parte del enigma.

Para que haya éxito tiene que darse polaridad o potenciales bien definidos dentro de la masculinidad y la feminidad. Ha de haber atracción o química, pasión y estima, sin desesperarse, pues "a cada olla le llega su tapa". Únicamente se ha de estar abierto, para reconocerla cuando aparece, no forzando nada, siendo natural y guardando el esfuerzo, para la siguiente fase, en la que es necesario un compromiso de trabajo y dedicación desde uno para tener buenas defensas ante las inevitables dificultades. Por lo común se actúa al contrario, se hace el esfuerzo al inicio, vendiendo las mejores cualidades para agradar, presentando una ilusión, y hecha la conquista, comienza el abandono, soporte del fracaso y la decepción.

La mujer es el cuenco místico abierto a lo sutil; siendo capaz de moldearlo y darle forma, es la artífice de la creación. El hombre es la pirámide de base firme que debe pulirse para trepar al vértice, es el artesano que debe transformar la creación en creatividad.

De dos formas, entre ambos, pueden crear, incrementando la especie o intensificando la lucidez; en la primera aun siendo susceptible de ser mejorada, la naturaleza se encarga de poner todo tipo de trampas para que la vida siga abriéndose camino; la segunda, ineludiblemente requiere de mucha dedicación y aprendizaje partiendo de una consideración preliminar: la tremenda veneración que ha de despertar en nosotros la otra parte, al ver en ella una manifestación de lo Supremo.

"Adán tomó la manzana que Eva le ofrecía, pero no se comió el corazón y utilizó las semillas para sembrar otro árbol".

PRÁCTICA 1. Con esa condición, dos amigos en un lugar confortable e íntimo, se sitúan sentados con las piernas cruzadas, uno frente al otro, en contacto con las rodillas, la palma de la mano izquierda hacia arriba, la derecha para abajo, se las cubren el uno al otro y reposan sobre las rodillas.

2. Inician una lenta respiración, alargando, sobre todo, la salida del aire, pero sin forzarla, dando relax y naturalidad al acto, sin otra expectativa que la de vivir y disfrutar intensamente el momento, dejándose fluir.

3. Se miran al abdomen captando el momento de la respiración del otro, la sincronizan de modo que cuando uno toma el aire, el otro lo está expulsando.

4. La mano derecha extendida se posa con suavidad sobre el corazón, mientras el otro, con la izquierda le cubre el dorso de la mano oprimiéndola despacio contra su pecho (de la misma manera que antiguamente bailaban una pareja de enamorados)

mientras del otro lado se actúa en simetría. Toda la atención está sobre el ritmo de la vida, que se hace manifiesta en el palpitar de ambos corazones y que por si solos tenderán a latir al unísono.

5. La mirada se abre y sumerge en lo profundo de la otra mirada, más allá del ojo, no hay nada que ocultar, no hay conjeturas, nada que aparentar, sencillez, silencio, aceptación y adivinación mutua.

6. Con la mano derecha presiono sobre el pecho del otro y seguidamente con la izquierda hago que la mano de la otra persona presione sobre mi pecho, mientras que al tiempo le digo: Tu estás en mi, yo estoy en ti; haciendo que las presiones de la mano coincidan con las pronunciaciones verbales, la otra persona seguidamente responde con los mismos movimientos.

7. Por último, sin verbalizar labial ni mentalmente, la frase: "Tu y yo somos lo mismo" y viviendo intensamente su sentido, permanecen unidos en silencio, lúcidos y plenos. Ambos terminan rebosantes de felicidad, por el aporte de mutua complacencia, con un abrazo de agradecimiento.

"Lo Infinito se asoma al mundo, cuando el orgasmo se prolonga más allá del coito".

LAS CURVAS DE LA VIDA Hace mucho tiempo, fuimos capaces de poner en marcha, el fabuloso tren de la mente racional; pero se nos olvidó colocarle frenos y en las múltiples curvas de la vida, corremos el riesgo de descarrilar. O aun peor, cuando dos trenes transitan por la misma vía e insisten en mantener las opuestas direcciones, colisionar con graves consecuencias.

Saber aquietar a la mente racional, es necesario, para que se despliegue la mente intuitiva, capacitada para comprender o incluir todo sin discriminación alguna, el día y la noche, la luz y la oscuridad, lo grande y lo pequeño, todo es lo mismo; esto es magia, es mente global, divergente, integral, capaz de incluir y entender de una sola vez.

De todos los sentidos, dos, en el ser humano, son vitales: El oído y la vista.

El oído nutre de información al hemisferio izquierdo o pensamiento racional por medio de la consecución de palabras, la memoria y el análisis, actúa linealmente, salvo en los casos de la música, la poesía o las metáforas.

La vista capta de una vez la impresión de una imagen, que golpea de forma compacta al hemisferio derecho, provocando una compresión global, exenta de elaboración racional, que consigue hacer verídica aquella frase que dice “Una imagen vale más que mil palabras” Mientras, el sentido del tacto, que no se encuentra localizado sobre un órgano concreto y está en estrecha relación con el placer, el dolor, los sentimientos, afectos y percepciones que incluso rebasan la piel y toca lo más intimo del cariño humano, hasta hacernos fundir, como una sola pieza con otro individuo.

“La vida es un soplo; pero cada segundo que se vive, es la Eternidad” CONTEMPLACIÓN DE MANDALA EL ESPACIO:

¿Que cabría encontrar en el punto central, si lo ampliáramos?

EL TIEMPO:

“El Tiempo son las manecillas de un reloj espiral que girando entorno a un eje único e inmutable, señala cambiantes números infinitos”

QUINTA DISCIPLINA DE UN INICIADO La Real facultad de: SER EL TESTIGO SILENCIOSO Una invisible, pero sólida barrera separaba la obscura y sucia fábrica, de la rancia oficina técnica.

Cuando un obrero pasaba por delante de mi tablero de dibujo iba con recato y cobardía a postrarse como un vasallo delante del ingeniero jefe.

El ruidoso taller tenía sus propias normas, cuando un determinado aristócrata de titulo

universitario entraba en la nave, una secreta contraseña avisaba a todos de la incursión.

Eran los principios de los setenta, esta mísera condición humana me despertó simpatía por ciertos movimientos, que pretendían destruir toda autoridad impuesta; yo quería hacerlo manifiesto, y junto con otros jóvenes idealistas, recorríamos en grupos la Gran Vía, gritando contraseñas contra el poder dictatorial, impuesto con sangre al pueblo, cuarenta años atrás.

Aquella tarde, la policía era como una sudorosa bandada de ciegos y narcotizados búfalos, aplastando a su paso niños y ancianos. Uno de mis compañeros cayó bajo el castigo indiscriminado de sus porras, mientras otro sujetándole del largo cabello le arrastraba, dejando un reguero de sangre en la acera. La impotencia y el miedo se comieron mis ideales y una fiera rabiosa ocupó su lugar, lista para destruir, aun a costa de la propia destrucción; pero el Testigo Silencioso que siempre me ha acompañado salió de su Cámara Secreta para preguntarme: ¿Qué te está pasando?

El odio y la rabia comenzaban a exudar en mí el mismo y repugnante olor de los ciegos búfalos.

La respuesta fue luminosa: Este no es el camino.

“Si ha de producirse un cambio, debes comenzar por cambiar tu mismo” LA CÁMARA SECRETA La Cámara Secreta, es un ingrávido recinto cerrado, alumbrado por su propia Luz Interior, abierta al mundo exterior por medio de siete ventanas de coloridos cristales y una angosta puerta oculta, donde el Inmortal

Testigo Silencioso flota en el Vacío, de la increíble estancia del cráneo.

Es La Fuente de la Eterna Juventud, de la que mana eternidad y baña con sus cristalinas aguas los minerales de tu cuerpo, transmutándolos en bellas emociones, pensamientos lúcidos y amor incondicional.

Es La Piedra Filosofal, que al establecer diálogos de comprensión consigo misma, deja de emitir juicios y se abstiene de prejuicios, de modo que el hombre perteneciente al cuarto reino de la naturaleza, se da a Luz a sí mismo, como Hijo del Hombre, para crear un nuevo reino: El Quinto Reino

incansables guerreros, que luchan entre sí, por la supremacía del territorio de tu agotada persona; son como los lados de una pirámide truncada, a la que le falta el vértice conciliador, que demuestra no haber oposición, sino unidad de propósito. Mientras a un cuadrado televisor le falte su antena, las imágenes son distorsionadas.

Mientras el Ser humano no alcance la consciencia de la cúspide de su Ser, el conflicto entre sus fracciones humanas lo tiene asegurado.

“ La armonía es la manifestación dinámica de un Orden, que se nutre del inagotable manantial del Silencio”

LAS CIENCIAS SAGRADAS

EL QUINTO REINO Reino mineral, vegetal, animal y animal racional, son los testigos escalonados de la evolución, que no ha terminado y se prepara para dar el paso al siguiente Reino.

Los primeros cuatro dedos de la misma mano, no pueden tocar las yemas unos con otros, el quinto último y peculiar dedo, que nos distingue de las otras especies animales, el pulgar, puede tocar todas ellas sin dificultad.

La Quinta Esencia, es el substrato ingrávido, donde no hay movimiento y sin embargo, estimula los continuos cambios de los sólidos, líquidos, gaseosos e ígneos y, en el Ser humano, aviva su pre-Esencia como cuerpo, emociones, mente y espíritu. Éstos son cuatro

“Todo lo posible está en ti; en el vacío todo cabe, en el silencio todo puede ser dicho, en el blanco lienzo toda forma es posible”

El curso de Cultura Iniciática despertó tanta expectación, que el Ashram de Coatepec durante un mes, fue amplio muestrario de habla Castellana, en los más diversos acentos.

La comida era abundante y excelente, según los nativos mexicanos, cosa que no compartían italianos, españoles y un bretón francés, que harto de comer frijoles, pidió permiso a la cocinera para hacer el menú del día siguiente. Todos nos pusimos contentos ante la expectativa de la exquisita comida francesa: postre de naranja, naranja asada y sopa salada y caliente de naranja, –insufrible brebaje que alguno deslizó por debajo de la mesa, para que se lo bebiera el gato; a la mañana siguiente, inexplicablemente, el gato apareció muerto y todos culpamos al francés de gaticida–.

La conversación estaba animada con estas bromas, cuando el Maestro comenzó la plática de la tarde diciendo:

“Para un candidato a la Iniciación Real, es importante adquirir el sentido de lo Sagrado, de lo sacro, de lo secreto, porque la vida tiene siempre un aspecto temporal y espacial y además un sentido oculto Sagrado. Desde siempre, el Ser humano, –Ser en lo Sagrado y humano en el tiempo y en el espacio–, ha intentado comprender el sentido total de su vida. De este esfuerzo inmemorial han nacido dos corrientes, la científica materialista y la que se ocupa de las ciencias sagradas. Ambas, a lo largo de los milenios, se han excluido mutuamente. Sin embargo, las aportaciones que unas y otras nos han dado, son indispensables para comprender la Vida en su totalidad”.

Cuatro son las Ciencias Sagradas, que conducen a la Iniciación Real, – la Quinta Iniciación: • • • •

Fisiogonía: Cosmogonía: Androgonía: Teogonía:

Origen de la materia Origen del cosmos Origen del hombre Estudio de Dios

“Si buscas encuentras, si no buscas es porque ya tienes; si buscas ya teniendo ¡Perfecto! pero antes reparte las propiedades anteriores”

TRATADO DE PRACTICAS Iniciación Real SILENCIO WU WEI – La acción desde el vacío – Venus y su séquito de estrellas, oscilan emboscadas entre las copas de los árboles; al alba, con el bastón de una mano y el aparato de música en la otra, subo en sosegada soledad, por el empedrado camino bordeado de bambú que se arquea sobre mi cabeza. Una vez rebasada la suave pendiente, al fondo se extiende una alfombra de hierba verde llena de rocío, es la explanada donde se levanta un edificio circular, aerodinámico, parecido a un hongo gigante: “La Cámara Secreta”. Antaño era este lugar un pequeño montículo, que fue rebanado y convertido en plataforma natural, ideal para moverse al cósmico ritmo de la música y danzar con la vara, que al desplazarse en armónicos círculos, va rasgando la oscuridad de la noche y de mi alma. La luz del día rompe poco a poco, ganando terreno a las sombras y el hueco bordón de noble bambú, con ocho canutos silba al girar casi solo, movido por la mano del afable dios del Silencio.

“Primero, la forma oculta al Silencio, pero luego, el Silencio mueve sin esfuerzo a la forma”

GEOMETRÍA El Pasadizo de San Ginés, es un castizo callejón aledaño a la Plaza Mayor de Madrid. En su esquina se asan castañas en invierno, y se adentran aventureros lectores sobre los libros expuestos en la acera; de madrugada, allí van a terminan sus juergas los noctámbulos, para tomar chocolate con churros, y algunos afamados actores salen a respirar por la puerta trasera de un antiguo teatro; habiendo en espacio tan reducido, una original mezcla de ambientes.

Para mí, además, era el pasaje de la academia, a la que asistía todas las tardes, después del rutinario trabajo de la imprenta, para estudiar diseño industrial.

De todas las materias, guardo especial agradecimiento a la geometría; por medio de ella le puse timón y alas a la mente: ver y comprender, con los ojos cerrados, volúmenes en el espacio, es un eficaz entrenamiento, para después ver con los ojos abiertos, por medio de la meditación, las piezas del rompecabezas de tu vida y de la vida en general.

Básicamente, entre las varias aplicaciones de la geometría, hay dos que responden, una a las formas y otra a los fondos: • Geometría del espacio • Geometría proyectiva Ambos conceptos geométricos configuran nuestro mundo; aunque el primero es quien gobierna a esta generación, repleta de imágenes, astutamente elaborada para envolver mercancías, quedando al margen el segundo, el de los modelos parlantes, cuyo objetivo es construir al constructor.

La Geometría Proyectiva, es de especial interés para los aventureros de lo Sagrado, ya que revela, por medio de simbólicas formas, íntimos aspectos de la naturaleza humana; de modo que, determinada distribución espacial de un perímetro, lo habilita para manifestar los ocultos secretos del Ser –como ya hicieran los Druidas, con la arquitectónica distribución de dólmenes o piedras brutas en plena naturaleza, y también, los constructores de pirámides, pagodas, mezquitas, templos griegos, logias, catedrales y, afortunadamente en la actualidad, las Cámaras Secretas–.

En la Geometría Simbólica, las formas y el hombre interactúan; cada figura geométrica surgió de sensaciones, emociones, ideas y misticismo del Ser humano; y cada cuerpo o continente abre puertas al Contenido, a lo desconocido de Sí mismo.

El cuadrado fue la primera forma que construyó el hombre primitivo, contando sus pasos en las cuatro direcciones, para delimitar su territorio y proteger la supervivencia; representa lo mensurable, concreto y material de nuestra naturaleza.

Aquel mismo naciente proyecto de hombre, tomó un palo y miró al mundo dando vueltas sobre sí mismo, se dio cuenta que él era el centro, en torno al cual se sucedían los incomprensibles e innumerables acontecimientos, dando como resultado un círculo sobre el suelo que le protegía de lo desconocido; símbolo de lo imponderable, infinito e inconmensurable de su propio y desconocido Ser. El esfuerzo constructor sobre el cuadrado y el círculo, hacia un propósito común, hacen que sus lados crezcan y al unirse todos en el vértice, da lugar al mundo tridimensional, como pirámide y cono.

La pirámide, es el volumen faraónico, firme y estable que implica voluntad y esfuerzo. En lenguaje actual

es el pensamiento convergente, que parte de una base o premisa cuadrada, – la observación, el análisis, contraste y deducción, – para llegar a una conclusión o vértice común. Es la inteligencia al servicio de la calidad de vida material.

El cono invertido, sugiere: Un punto generador, que al oscilar hacia arriba en círculo sobre sí mismo, crece hacia el infinito y forma un útero, un recipiente hueco capaz de atraer lo etéreo y llenarse de lo sutil; es el pensamiento divergente, holístico, mágico, creativo, intuitivo, que precisa un apoyo en lo racional: el vértice de la pirámide.

De este modo el pensamiento mágico-creativo, renueva las formas creadas por la mente racional, incapaz por sí solo de experimentar nuevos territorios.

Vista en alzado

Vista de planta desarrollada

“Primero es el esfuerzo sostenido, luego, Eso se manifiesta sólo si el esfuerzo cesa” LOS RITUALES Cerca del Pirineo Aragonés, hay uno de esos lugares donde se rezuma virtud, el monasterio Templario de S. Juan de la Peña, que surge de la roca y se ha protegido con ella del paso de los siglos. Fue el

escenario idóneo, donde concluyó el encuentro entre diversas corrientes de buscadores de lo Sagrado.

Uno a uno, en la ceremonia de clausura, los representantes de las distintas tradiciones, subieron a un basamento situado en el centro del espacioso templo y dirigieron sus últimas palabras a los asistentes que les rodeábamos por todas partes.

En su turno el Maestro subió al pedestal. No recuerdo bien sus palabras pero nunca podré olvidar el porte de su presencia, desplegando círculos a la derecha, enfundado en su blanca capa Templaria.

El afán de la mente es ordenar y organizar, cuando el desorden de los objetos o de la propia vida nos rodea, la mente se agita al sentirse incapaz de restablecer el concierto.

El Ritual, desde el más sencillo que a veces realizamos de forma inconsciente, como limpiarse dientes o dar brillo a los zapatos, a otros más delicados como la danza o el baile, o incluso más complejos como el juego de naipes, ajedrez, encajar piezas de un puzzle, competiciones deportivas… Los hay más sofisticados, que rememoran algún destacado acontecimiento como las ceremonias religiosas; y aun otros que pretenden representar el orden del cosmos o la vaporosa ceremonia del té japonés.

Todos, de alguna manera, dicen a la mente: Todo está bien, todo está en su sitio, en orden; no te pre-ocupes, solo ocúpate en lo que te dicta el presente.

El presente no sólo une al pasado con el futuro, además une lo pasajero y cambiante con aquello que es inmutable.

“El presente es el cascarón vacío, donde Lo Inmortal derrama siempre su esencia”

LAS DIMENSIONES El campanario de la iglesia infundía un gélido respeto cuando tenía que ir a doblar las campanas por el difunto que yacía rodeado de velas, frente al altar; sin embargo, los domingos soleados de primavera las campanas repicaban creando luz y color celestial.

No podía por menos que sorprenderme, como la misma campana con su mismo badajo podía decir cosas tan diferentes.

Largo, ancho y alto, son las tres dimensiones que definen al espacio, por donde, temporalmente, transita toda existencia.

El punto es un abismo abstracto, que sale de su oquedad y, al añadirse a otros puntos, se convierte en línea, forjando la primera dimensión; la línea se desenrolla y engendra el plano con sus dos dimensiones; el plano se anima y al avanzar, cubica el espacio creando las tres dimensiones.

Trata de imaginar lo que sucede si a un cubo lo inflas y se expande, aparece la cuarta dimensión, en forma de un esférico planeta que visto de lejos, no es más que el mismo y abstracto punto inicial, que encuentra sentido si está en relación con otros puntos, otros planetas; todos juntos configuran el inmenso mundo esférico del universo, que unido a otros universos forman un sobrecogedor y esférico cosmos.

La cuarta dimensión se compone de esferas, que contienen a muchas otras más pequeñas y a la vez, son contenidas por otra esfera mucho más grande, que con otras de su tamaño se agrupan en otra mayor y todas se mantienen íntimamente unidas entre sí, por el infinito tiempo del Creador.

Este tiempo se comporta como un inmenso reloj, cuyas manecillas señalan sus correspondientes dígitos, siendo cada uno de ellos, el eje dimensional de otro reloj más pequeño y rápido, de modo que cada número horario es el “eje-mónico” de su dimensión y a la vez uno más de los doce números del reloj mayor; cosa difícil de razonar, por no ser la razón, la habilidad que se necesita para su entendimiento, sino la intuición.

Los pequeños relojes unen su rápido esfuerzo para mover al reloj mayor que marcha más lento. Éste se une a otros de su tamaño y empuja a otro todavía más grande, y así, sucesivamente, creando el tiempo infinito, único y diverso a la vez.

El hombre instintivo se maneja en la primera dimensión; cuando la belleza o fealdad es el baremo selectivo, nace a la segunda y emocional dimensión; la tercera es la mente capaz de razonar y la cuarta el espíritu entrenado para amar, unir e intuir, de modo que en esta dimensión, todo es posible y los objetos inanimados cobran vida, hasta el punto que una campana llora, un árbol canta, o el mar habla.

Noé construyó el Arca y no le puso timón, uno de sus hijos viendo que navegaban a la deriva y la embarcación trazaba círculos, quiso ponerle rumbo; pero estando todo cubierto de agua ¿Cual sería la dirección adecuada? La tierra de la salvación estaba bajo ella. ¡Solo había que esperar a que las aguas bajaran!

En la quinta dimensión todos los mundos ya eran en el Silencio antes de emerger como forma y existencia con todas sus cualidades.

“Dios ve al mundo a través de tus ojos, solo necesitas mantener limpio el cristalino” También solía decir el Maestro Estrada: “Dios a través de la forma humana comienza a conocerse a sí mismo” “El que crea se reconoce así mismo, por medio de su obra”

Las Ciencias Sagradas EL ORIGEN El misterio de nuestro origen y del universo es el combustible que echamos al depósito de las naves espaciales, y además, nutre la inventiva para crear extensiones de nuestros sentidos, como el microscopio y el telescopio. Pero la visualización de objetos acompañada de la visión interior y la audición de sonidos junto a la escucha interna, nos dota de unas posibilidades que nos hacen muy diferentes del resto de los animales.

El método de las Ciencias Sagradas se basa en la unidad y la relación que todo guarda con todo, de modo que, el laboratorio, la probeta de ensayo, las horas de ponderada laboriosidad, los resultados y su aplicación, son el propio individuo.

Las Ciencias Racionalistas, poco a poco, han ido dejando atrás un modelo mecanicista al margen del individuo y se van acercando, aunque algunos investigadores lo desconozcan, al tradicional método de las Ciencias Sagradas.

Ambas ciencias, se basan en la experimentación, son complementarias y se necesitan mutuamente.

Las C. S. salen del rebelde e indómito corazón del hombre que se niega a la ignorancia y quiere, de múltiples maneras, descifrar la vida; para ello traza esferas de investigación en torno a su insaciable espíritu. Explora del mismo modo que un geofísico sondea la Tierra, envuelta en sus distintas capas, desde el núcleo a la estratosfera, relacionando al Todo con sus partes para comprender la interrelación global de todo el orbe, e incluso verificar la

relación que pueda tener con el Ser humano, como medida arquetípica y fuente última de comprobación.

EL ORIGEN DE LA MATERIA – FISIOGONÍA – EL CALENDARIO AZTECA

Las C.R. partiendo del mismo ávido corazón, traza líneas que, partiendo de un punto, divergen en todas direcciones, especializando la investigación, que transmite e informa de las leyes y mecanismos de la vida. Son exploradores lineales que dotan de un armazón concreto y necesario a las esferas circundantes.

Las dos juntas trazan un entramado de líneas y ondas esféricas concéntricas, al estilo de una tela de araña; pero no plana, sino tridimensional, de modo similar a como se produjo la explosión original de Universo. Configurando, de este modo, una forma de investigación completa, que abarca todo el campo, trazando: Una Línea Solar

Una enorme losa de piedra es el orgullo y la joya más preciada del Museo de Antropología de la ciudad de México, El Calendario Azteca. Frente a él pude sentir la grandeza de muchas culturas que yacen dormidas entre los relieves esculpidos en la roca; yo estaba ahí, como Alibaba delante de la sellada puerta de la gruta, solo tenía que pronunciar la palabra mágica y quizá aquellos concéntricos círculos de piedra se harían rotativos engranajes parlantes.

Una nueva generación de físicos, también pretenden lo mismo. Frente a los últimos hallazgos de la materia, han penetrando en su más mínima composición, y la ven disolverse como tal para mostrase como energía animada por procesos dinámicos que se influencian unos a otros, e incluso se ruborizan y modifican su comportamiento,

dependiendo del observador, creando la imprevisible trama del Supremo.

Tonatiuh preside el centro de la magnifica estela pétrea. Rodeado de cuatro soles, él representa el Quinto Sol: el Sol central en su quinta manifestación, del que todos los elementos que le rodean y los planetas han surgido.

“Los planetas son exploradores, que trazan círculos entorna a su padre, de donde salieron y su madre que los nutre. El SOL”

que entre si realizan un reducido número de elementos” EL ANILLO DE LA VIDA Nuestro sistema solar está en expansión. El Sol tiene su propia atmósfera y nuestra Tierra está dentro de ella, los planetas guardan distancias entre sí en un orden progresivo; quien descubrió esto, le puso su nombre – la Ley de Bood–.

VENIMOS DEL SOL El Sol no es un enorme horno candente, es un hueco que el espacio dispuso para que anidara la energía y de energía es el cuerpo de las partículas o Consciencias Solares que lo componen y habitan.

Toda vida ya sea grande o pequeña, está en constante avance, consume energía nueva y excreta la que le sobra –del mismo modo que funciona un motor a reacción–. El Sol se nutre de la Mente Cósmica y excreta materia. Ésta comienza a solidificarse en las extremidades polares del Sol y es visible al ojo humano como una mancha solar que la misma rotación de la estrella empuja hacia el ecuador impulsada por su peso específico. Si la solidez persiste, llega a ser lanzada al exterior transformándose en un planeta, que queda ligado al Sol sobre la misma pista de expulsión, el Ecuador Celeste, o Eclíptica, que es la prolongación del Ecuador Solar.

“Las más diversas manifestaciones de la vida, eclosionan debido a las diferentes combinaciones

Hay un anillo a la distancia optima para la vida orgánica en torno al Ecuador del Sol, sobre ese anillo la Tierra evoluciona; por él, ya transitó Saturno –el astro de los ángeles caídos–, luego Júpiter –el mundo de los gigantes–, después Marte – el planeta de los señores de la guerra– y después en un lejano futuro, lo hará Venus –el de la raza de los amantes–. Nuestro hogar, la Tierra, está entre esos dos opuestos y más próximos vecinos –la guerra y el amor–. El último en pasar será Mercurio –el mensajero de los dioses.

Un gran respeto me infunde el esfuerzo de los investigadores racionalistas, cuyo especializado sistema de exploración analítica se asemeja al despiece de los gajos de una naranja. A sus ojos lo anterior pudiera parecer una arriesgada teoría sin fundamento serio; pero hay que entender que no estoy siguiendo sus métodos y no pretendo demostrar nada, ni configurar un dogma de creencias, si no

exponer posibilidades globales dentro del método metafórico e intuitivo de –las capas de cebolla– las Ciencias Sagradas.

“Los aciertos se hacen costumbre forjando civilización y las costumbres siempre intentan abortar a los nuevos aciertos”

EL ORIGEN DEL COSMOS – COSMOGONÍA –

idearon “eSqueMAs”. Nomenclatura que proviene de las tres letras madres del alfabeto hebreo, A M S que al )! " #( ser traspasado al nuestro, cuya lectura es en sentido contrario, dio lugar a S.M.A –sema, semilla, semen–, o sea esquema. Y uno de los esquemas más antiguos, sobre el cual se pueden trasportar múltiples investigaciones de la existencia es el Árbol de la Vida, con sus diez séfiras o números, perteneciente a la tradición Kabalística de Israel y que aparece en el dibujo, en esta ocasión lo utilizo para comprimir de manera rápida el origen y evolución del Cosmos.

EL RETORNO DEL BINDÚ

TODO - NADA

Hombre

Vibración

Animal

Leyes

Vegetal

Energía

Cristales - Mineral

LOS ESQUEMAS Para obtener una más accesible comprensión de aspectos tan complejos, desde tiempos muy remotos se

De la Nada, Bindu, o Vacío Primordial, emana una explosión o vibración, que como onda expansiva se ordena creando unas constantes universales, que denominamos leyes. Las leyes crean centros de poder sutil en forma de energía; la energía puede llegar a comprimirse de tal manera que da lugar a la materia, concluyendo un ciclo descendente o involutivo desde lo sutil a lo denso.

Dentro de la densidad del primer reino de la naturaleza, la materia mineral, las partículas pueden llegar a organizarse de tal manera que se hacen transparentes a la luz del Sol, dando lugar a los cristales, los cuales, hemos coincidido en denominar piedras preciosas, por su gran valor. Pero su valor real, proviene en verdad, de ser el origen de la vida orgánica –u organizada para progresar de nuevo hacia la Fuente, al permitir el paso de los fotones de

luz solar a través de su estructura, mezclarlos con sus propios minerales y la humedad de la tierra, y así, disponer, de todos los ingredientes necesarios que dan lugar a la fotosíntesis–, en forma de las más elementales algas y líquenes, o el nacimiento del segundo reino, el vegetal. La inteligencia vegetal vence a la gravedad en busca de la luz, sufriendo procesos de adaptación al medio, que le hacen progresar hasta el límite de generar, incluso, un incipiente sistema nervioso capaz de reaccionar con cierta rapidez al tacto de elementos externos y mover sus hojas; o crear estructuras que faciliten su desplazamiento y ser arrastrado por corrientes de agua –para reproducirse en medios más adecuados–, dotándose, así, de una incipiente movilidad que algunos microorganismos, sobre todo acuáticos, van adquiriendo propiedades del tercer reino, el animal, como la locomoción, sensibilidad, aprehensión y captura. Se diversifican, de este modo, en multitud de especies, cada vez más sofisticadas, hasta el punto de aparecer el animal racional, cuarto y último trampolín desde donde catapultarse para dar el salto al quinto reino, el del racional intuitivo, capaz de fundirse de nuevo a la Fuente, con todo el bagaje del recorrido: el hijo extraviado retornando a la casa del Padre, con nuevas y acumuladas ganancias que ofrecerle.

“DIOS duerme en el mineral, sueña en el vegetal, despierta en el animal, se manifiesta en el hombre y se glorifica en el hijo del hombre”.

LA EDAD DEL COSMOS “Hemos dejado de creer en los cielos”, decía hoy el reportero de un informativo televisivo, ante el anuncio de catástrofes provocado por la alineación de cinco planetas.

También recibí un correo electrónico celebrando los maravillosos cambios que por este hecho se aproximan; catastrofistas y optimistas en extremo que quisieran ver realizadas sus quimeras en el acto, cuando el proceso global de la creación con respecto a nuestra corta existencia es tan lento.

El cosmos se expande de igual manera y con la misma rapidez que un niño crece, sus sólidas partículas se siguen multiplicando sobre un mar de energía, de la que se alimenta y conforme la edad del universo aumenta, entre sus procesos dinámicos de energía, forma espacios ingrávidos cada vez mayores.

De esta manera, al gran cuerpo del Cosmos, lo vemos ensancharse con mucha rapidez en sus confines, debido al aumento casi imperceptible de distancia entre sus más diminutas partículas.

Asemejándose esto a dos relojes: uno es pequeño y el minutero parece no moverse, en el otro enorme reloj y el minutero se mueve con relativa rapidez; el espacio que ambos recorren es diferente y sin embargo el tiempo que contabilizan es el mismo.

La edad del hombre es la misma que la del Cosmos.

“El tamaño del reloj, no hace que el tiempo sea distinto”

EL ORIGEN DEL HOMBRE – ANDROGONIA – EN BUSCA DEL FUEGO Los primeros prototipos humanos (Adán y Eva) eran inocentes y vivían en el Paraíso. Inocencia y Paraíso, definen un estado infantil, donde la mente es todavía incipiente.

Cuando comenzaron a poner nombre a las cosas, distinguir la diferencia entre el otro y uno, prever los resultados de los actos, almacenar para los momentos de escasez e imponer la propiedad privada, fueron entre otros, claros indicativos del despertar de la consciencia individual, que nos desarraigó de la protección espontánea de las leyes naturales y, a partir de entonces, se hubo de acumular esfuerzo mucho antes de la obtención de resultados, para sobrevivir.

La soledad, ante los inexplicables actos circundantes, provocados por las sobrecogedoras y a veces devastadoras fuerzas de la naturaleza, les hicieron sentir sus insignificantes vidas, manejadas por caprichosos espíritus, invisibles, pero latentes, en el fondo de todo acontecimiento. Esos espíritus, más tarde se transformaron en dioses y de entre todos ellos, uno de los más temidos, el dios del fuego, que de ser terrible, pasó a ser amigo una vez comprendido. Al tener de nuestro lado este gran aliado, dotó al ser humano del poder que le permitiría llegar a ser la especie dominante.

Primero nómadas y recolectores, luego ganaderos, después agricultores y por último la industria y las comunicaciones. Conforme se han ido

aplicando los últimos descubrimientos sobre los iniciales, se ha mejorando la función primaria. Aunque cada nuevo hallazgo ha facilitado la vida, también ha cobrado sus respectivos tributos.

Nuestros más remotos antepasados, fueron recolectores de semillas, frutos, plantas y raíces. Después de las devastadoras glaciaciones, la escasez vegetal, hizo que nuestros ancestros buscaran recursos en otras fuentes energéticas, más difíciles de conseguir, pues suponía agilizar el ingenio para capturar, apresar y matar a otros seres animados con unas manos sin garras, unas mandíbulas sin cortantes y afilados colmillos y una carrera mucho más lenta que la de la mayor parte de los animales. Se hubieron de desarrollar estrategias y útiles para la caza, lo que supuso una utilización y posterior desarrollo del cerebro, que más bien por la necesidad de su uso fue enlazando conexiones cada vez más sofisticadas y adquiriendo mayor volumen, y no tanto por el posterior consumo de proteína animal, pues si esto fuera así los leones y otros carnívoros serían más poderosos e inteligentes que nosotros.

Gracias a todo esto, ahora podemos recoger datos, hacer historia, intuir, imaginar y comprobar el discurrir de nuestra especie en el tiempo y sacar algunas conjeturas que nos deberían servir para mejorar nuestros actos presentes y enrumbar un futuro más hermoso y humano.

Ya descubrimos el fuego amigo que calentó nuestros cuerpos y facilitó la supervivencia; el otro fuego amigo, que ha de devorar lo que nos sobra y con su combustión, calentar nuestro espíritu, todavía está esperando ser encendido en nuestro oscuro y frío recipiente interior. Si el uno nos dio la supremacía sobre la tierra, el otro nos abrirá otra vez las puertas del Paraíso, que hace tiempo cerró la llave de la mente, facilitando así de nuevo

la entrada a ese perdido lugar, con la consciencia del adulto y la recuperada inocencia del niño.

LAS PULGAS Por mucho tiempo fuimos el jardín de la abundancia para este insecto, hasta que el agua y el jabón, nos convirtió en territorio inhóspito para ellas.

Sin embargo, debemos mucho a este singular parásito que facilitaba excusas para el compañerismo, camaradería, e incluso yendo más lejos, relaciones intimas, al convertirnos en exploradores de cabelleras foráneas.

Este pequeño bicho, nos hizo ejercitar el dedo, que en su honor adquirió el nombre de pulgar, logrando la movilidad suficiente para oponerse al índice y a los otros dedos, siendo el único capaz de tocar las yemas de todos ellos, sin que los demás puedan llegar a tocarse entre sí. De este curioso modo, desarrollamos una mano prensil diferente de los simios, capaz de atrapar un palo de manera mucho más efectiva, y después, manipular y crear otros instrumentos que, de otro modo, nunca hubiéramos conseguido, a no ser por el solidario afán de quitar esa diminuta molestia a nuestros próximos. Así pues, quiero dignificar a la pulga, elevándola a la categoría de patrona de la informática, como último eslabón de la industria.

LAS GOTAS DE ROCÍO Dijo Gautama, El Buda: "Somos como gotas de rocío que se deslizan al resplandeciente mar" Salimos de la cálida Unidad del Océano, como partículas programadas para devorar experiencias, experiencias que el tiempo ha ido sedimentando en nuestro almacén, dando forma a eso que llamamos

Alma. Esa acumulación silenció el recuerdo de nuestro origen, con la algarabía de la existencia, interpretada por el bullicio de la mente, en la fiesta sonora y colorida de la vida.

Asistimos al espectáculo de la impermanencia de todo cuanto existe observando desde el intelecto, como herramienta útil para entender el mundo de la forma en el transcurrir del tiempo y el devenir de los acontecimientos, las personas, las cosas, las leyes. Este tipo de pensamiento es lineal, lógico, analítico, deductivo, consecutivo, capaz de mejorar la calidad de vida material y, sin embargo, es insuficiente a la hora de hacer brotar la Paz Interna, la solidaridad entre los pueblos y entender la unidad global e interdependencia de todo con todo; donde una sola forma contiene a todas, las horas son al mismo tiempo, día-noche; bueno-malo forman parte de una misma cosa.

Experiencias estas, incomprensibles por la razón; pero necesarias para que del animal racional surja, el animal racional INTUITIVO. En lo más profundo de ti y de mí, está el anhelo de conectar con el Fuego Primordial, el Origen Perdido, la Fuente, el Útero Protector, la Unidad, con Aquello que no va ni viene, que siempre ES. Al dificultarse el acceso a esa experiencia en su propio medio, el del Vacío, y continuar latente la aspiración a la Unidad Imperecedera, lo queremos hacer tangible en lo único que conocemos y vivimos, donde todo está lleno de cosas aisladas y transitorias, –transitorias para dejar hueco a otras expresiones–. Pretendiendo hacer perpetuo lo que está destinado a pasar, cambiamos de lugar nuestro empeño, de modo que, por ejemplo, cuando los recuerdos duran más que las personas, se corre el riesgo de que tu persona se convierta en un simple recuerdo de sí misma. Pero aun más pobre, es la intención que pretende el retorno por el camino

de salida, la regresión o involución hacia la inconsciencia –lo anímico o animal–, que olvida la conquista de la razón, sumergiéndose en un sonambulismo o trance hipnótico, propiciado por ritmos sonoros monótonos o drogas extasiantes que debilitan la voluntad y provocan estados alterados de la consciencia, destruyendo el ego o la individualidad, para quedar sumergido en la aniquilación de la nada.

Esfuerzo inútil, por otro lado, ya que la propia vida tiene sus válvulas protectoras que permiten el avance y se cierran al pretender el retroceso. Este mecanismo, comúnmente, lo sufrimos como dolor.

La vía natural de la evolución, explora nuevos caminos a la unión con el Todo, aportando a ese Todo la experiencia del recorrido y enriqueciendo su propia Alma. En la misma medida que la maquinaria humana se perfecciona y sutiliza, el combustible Divino fluye mejor por sus conductos, y la distancia entre ambos se encoge, hasta tocar con tu dedo, el dedo del Creador y, cerrándose el círculo entre el Eterno Hacedor y aquello que continuamente se hace, ya no habrá diferencia entre ambos, dando lugar al nacimiento del Ser Humano Trascendental, señor y colaborador de la creación, que permite a Dios crear y renovar el mundo a través de él. Diciendo con digno y respetuoso orgullo: “YO SOY TU MISMO” Todo ser viviente animado es sensible al dolor para que en el libre deambular de su existencia, cuide la supervivencia. Sin embargo el sufrimiento, sólo es propiedad de una mente que teje expectativas y espera resultados mejores que los obtenidos por otros, o los de él mismo en el pasado. Una mente que en su lado opuesto, además embalsama y lucha contra la entropía,

cuando en realidad el desgaste y la perdida, son los mejores amigos, ya que eliminan lo inservible, para remplazarlo por algo mejor. De modo que la evolución, no consiste en ambicionar nuevas cosas sino, más bien, en desprenderse de aquellas que son pesadas y sobran, dejando hueco suficiente, para que otras sobrevengan por sí solas.

“El conservacionista pretende que nada cambie, transmite tradiciones; pero vive muerto, con los cadáveres del pasado.

El idealista abre vías entre hoy y mañana; pero mata el presente.

El Ser Humano Trascendental, crea el momento y lo vive” EL ESLABÓN PERDIDO Todos los días llenaba mi caja de zapatos con hojas verdes de la morera cercana a mi casa, las esquinas se trenzaban con hilos de color de oro formando un capullo dorado, en el interior un blanco y tierno gusano se encerraba para morir. A los pocos días una alada mariposa resurgía en su lugar, para mí eso era un gran misterio: ¿cómo en tan poco tiempo aquello se transformaba en algo tan distinto?

La evolución es una suma invisible de hechos que, llegado el momento, se desbordan creando algo nuevo; del mismo modo que una constante gota de agua hace crecer su contenido en el interior de un recipiente opaco hasta que la última gota lo desborda.

La creación emergente de algo nuevo, ya era como arquetipo en la mente del Creador; pero El Gran

Arquitecto, utiliza el instrumento de la evolución, para hacerse manifiesto a través de su obra y conocerse a sí mismo sin agotarse nunca.

El Eslabón Perdido entre especies nunca será descubierto, porque en realidad no existe pues, entre tanta diversidad de familias, al menos en alguna pudiera haber sido hallado ese codiciado salto de una a otra. En esto se han basado algunos grupos de carácter dogmático religioso que, por mucho tiempo, han defendido la Generación Espontánea de una especie tras otra, creadas por el mandato instantáneo de Dios, al tomar como verdad escrituras sagradas cifradas en símbolos. Hoy, algunos de estos grupos, ante criterios tan insostenibles, también han experimentado un salto importante en la evolución y han perdido parte de la cola del dogmatismo, siendo dignos de elogio al retractarse de sus errores.

“Cuando veo a un Ser humano agrediendo salvajemente a otro, creo haber descubierto al eslabón perdido, entre los antropoides y el hombre civilizado” LOS HABITANTES DE OTROS MUNDOS Paco fue la persona que me informó cuando, por primera vez y recién licenciado del ejercito, me acerque a un centro de yoga. Era un muchacho inquieto que buscaba resultados rápidos en todo lo que se proponía.

Se enamoró de una atractiva joven de Zaragoza, se fue a vivir cerca de ella y por mucho tiempo le perdí el rastro, hasta que un día reconocí su chillona voz por teléfono y con su tradicional entusiasmo me dijo:

“Tengo algo muy importante que decirte, una gran catástrofe se avecina, el cometa Halley va a impactar sobre la Tierra y todos vamos a morir; pero hay una salida, hemos sido elegidos por una raza superior de extraterrestres que vendrán a rescatarnos con platillos volantes y después del suceso nos regresarán para repoblar la Tierra y hacer un mundo mejor”.

Al tiempo que le escuchaba, me vino a la memoria la imagen de una película, donde un barco se hundía y por todas partes corrían las ratas para salvar sus vidas, mientras el capitán y sus marineros permanecían en sus puestos para auxiliar en lo que fuera.

La edad de la materia en el universo, es igual en todos sus confines. Regidos por las mismas leyes y debido al continuo y ramificado avance evolutivo, se llegan a producir organismos muy diferentes dentro de un determinado orbe, como el caso de nuestro planeta y su magnífica pluralidad. Pero hay otros planetas que, englobados dentro del mismo universo, son idénticos al nuestro, con su correspondiente diversidad, haciendo que la diversidad y uniformidad coexistan en maravillosa armonía.

Nosotros, que ahora habitamos este mundo, ya hemos vivido en otros, siendo auténticos cosmopolitas o habitantes del cosmos. Sin embargo, en un determinado momento abandonamos la condición puramente animal y nacimos como humanos en determinado planeta, siendo ese nuestro planeta natal, aunque ahora habitemos en otro diferente.

Además del universo material, hay otros universos diferentes; pero todos enlazados entre sí y también con el nuestro, todos respondiendo a un propósito común.

Es el caso de un mundo para nosotros desconocido y que en pequeñas dosis se filtra al nuestro en forma de sueños, percepciones psíquicas, intuiciones, imaginación,

fluidos, y que tiene su propio lugar en las estrellas.

Aquí las leyes de la materia no rigen, tienen sus propias leyes, su propia dimensión del tiempo, sus propias voluntades y habitantes, cuyo cuerpo es de energía y su mente se baña en una luz para nosotros invisible y cegadora.

Las estrellas difieren en tamaños; pero sus funciones son las mismas, generar planetas. Ya se han detectado otros planetas fuera de nuestro sistema solar, muchos de estos planetas dentro de su propio sistema, están en un proceso parecido a la Tierra, incluso allí probablemente tenemos un doble, el que está cumpliendo en su mundo la función que nosotros realizamos en el nuestro. Las células nerviosas que componen el cuerpo de Luis cumplen la misma función que las de Karen, aunque uno naciera en España y la otra en Inglaterra.

No hay civilizaciones extraterrestres más avanzadas dentro de nuestro reino, el cuarto, hay culturas y personas más o menos avanzadas dentro de cada planeta; pero la punta de lanza de la evolución es la misma en y cada una de las tierras. Debido a la influencia o resonancia mórfica entre especies similares, se mantiene una estrecha correspondencia a pesar de las distancias; formamos un solo cuerpo universal, una aldea global cósmica con sus habitantes del Cuarto Reino, el material. Hay colectividades de vida más avanzada; pero éstas pertenecen a un nivel de existencia para nosotros desconocido, pertenecientes al Quinto Reino que tiene su morada en las estrellas, o sea el radiante mundo de la energía, sutil para nosotros; pero tan concreta para ellos, como lo es para nosotros la materia.

Quizá en un día no muy lejano, podremos comunicarnos, por medio de ondas de luz, con nuestros vecinos más próximos del Cuarto Reino, en un planeta que gira alrededor de la estrella Alfa de la constelación del Centauro; claro que sus noticias nos llegarían con cuatro años de retraso, que es la distancia a la que se encuentra, cuatro años luz.

Todo el cosmos está habitado, hay otros cuerpos celestes, hay otras moradas de energía, espacios de mente e inimaginables horizontes de consciencia con sus respectivos habitantes, otras escuelas en las que ingresar, cuando la asignatura correspondiente a nuestra condición terrenal y humana revele todos sus secretos.

“Y.E.V.E. La Potencia Creadora. Es dentro de ti, también tú y todos somos dentro de Él ”

LA BÚSQUEDA DE DIOS –TEOGONÍA– ¿Dios creó al hombre? O ¿El hombre ha creado a Dios?

LOS CIEGOS Y EL ELEFANTE Una antigua leyenda oriental dice: Hubo un sabio Rey, que entorno a un enorme elefante, reunió a treinta y tres ciegos, cada uno fue situado para palpar distintas partes del elefante y luego el Rey les pidió su particular descripción del paquidermo, nunca se pusieron de acuerdo y la confusión fue garrafal.

Aquello que llamamos Dios; Brama, Arquitecto del Universo, Tao, Ometeotl, Ishwara, Gran Espíritu, Principio

Inteligente, Alá, Jehova, Demiurgo... Son distintos nombres para designar al TODO, que de por Sí, es innombrable, pues todos los nombres, no son, nada más que opiniones fragmentadas y limitadas de su innombrable y verdadero nombre. Así lo entendía el Zoroastrismo, antigua religión persa, enseñada por Zaratustra 6000 años a.c, que fue capaz de englobar bajo el nombre de Abraxas, al Dios del bien Ormuzd y Ariman el Dios maligno, como un todo completo o las dos caras de una misma moneda. Sin embargo dimos un paso atrás, cuado quisimos justificar el mal, inventando a ese Dios Total, un hijo rebelde “Sat-an”, para justificar el lado oscuro de la vida.

LOS ERRORES DE DIOS El TODO, más allá de lo espacial y temporal de nuestra existencia conocida, es Aquello que engloba a las partes y las coordina entre sí como Inteligencia Suprema. Pero esa inteligencia superior también comete errores, auque el error no ha de considerarse como un desacierto o desgraciada equivocación a combatir, más bien como parte del proceso de experimentación necesaria, para, de entre todas las posibilidades, elegir siempre la mejor opción y desechar la menos conveniente para el desarrollo del proceso global.

Por ese motivo me atrevo a decir, que Dios se equivoca y eso es lo que le hace perfecto, al ser capaz incluso, de admitir el error. Además, no es bueno, ni malo. Es Justo.

LA DEVORADORA DE CREENCIAS El cambiante proceso, tanto personal como histórico, de nuestro limitado (como el de los ciegos)

concepto divino, se ha ido modificando a lo largo del tiempo, con la información, conocimiento y sabiduría que hemos sido capaces de extraer, en cada momento, de Su propia manifestación: la naturaleza que nos circunda y las leyes que la gobiernan, junto con nuestro propio sentir de aquellos acontecimientos que nos dan felicidad y los que nos hacen sufrir –ambos dependientes del propio entorno–, más los resultados de la actuación individual y las relaciones colectivas. De modo que, la creencia y moral establecida, en cada lugar o época, se ha ido destruyendo y transformando, en función de las experiencias y los conocimientos adquiridos, aplicados a lo más conveniente para la subsistencia y buscando la felicidad más duradera, sacrificando a veces las pequeñas satisfacciones momentáneas.

ANIMISMO La forma más arcaica de concebir a Dios, fue depositada en las poderosas fuerzas de la naturaleza, que unas veces facilitaban y otras nos impedían la vida, estando por encima de nuestro control. Fueron los primeros dioses que adoramos, y pretendíamos estar a bien con ellos, ofreciéndoles sacrificios, para recibir sus favores, otorgando a los dioses atributos muy humanos. Fue la época animista, de misteriosas y desconocidas fuerzas, que habitaban como espíritus en los bosques profundos, Gnomos; en los lagos, Ondinas; en el aire, Sílfides; en el fuego, Salamandras; en las inaccesibles montañas o los abismales océanos, junto con el poder de los volcanes, o los caprichos de las terribles tormentas gobernadas por el dios de la lluvia Tláloc (De los Aztecas), con el cegador rayo del dios griego Zeus, acompañado del rugir del trueno, provocado por el mazo de Thor de los nórdicos. Un abundante testimonio, legado por nuestros antepasados, en

forma de atractivos mitos, fábulas y leyendas, que uno descubre en partes opuestas del mundo, con distintos nombres; pero con similar significado.

Espíritus y dioses a los que hemos ido arrebatando su misterio; pero no su poder y hoy los estudiamos y entendemos como leyes de la naturaleza, que ahora como antes, tenemos que respetar.

POLITEÍSMO – MONOTEÍSMO – OMNITEÍSMO Ante la tremenda diversidad de dioses, Politeísmo, que se manifestaba hasta en el más insólito rincón del mundo visible, pero habitando en un lejano e invisible mundo (Paraíso, Ahsgard, Olimpo, Shamballa...), llegamos a sospechar la relación entre ellos, sus parcelas de poder y sobre todo su jerarquía.

Llegando a la conclusión de la existencia de un dios más poderoso que los demás, siendo el padre de todos ellos, optamos por elegir a un único y poderoso dios, Monoteísmo, que premia a los buenos y castiga a los malos desde su “Paradhiso” (Para: más allá. Dehesa: espacio) alejado de nuestro angustiado y miserable mundo, un valle de lágrimas sumido en la oscuridad, dejado de la mano de su creador, salvo en contadas ocasiones, cuando nos visitaba alguno de sus emisarios.

En definitiva, un lugar de paso donde hacer méritos y tener los créditos suficientes para ingresar en Su morada.

“Entre NADA y ADÁN Dios solo tuvo que poner la N del principio al final, con tan poco esfuerzo que Le costamos, ¡No debería exigirnos tanto!

Pero uno de sus mensajeros más recientes, llegó a decirnos que Él era uno con el Padre y que nosotros deberíamos hacer lo mismo, procurando que Su reino venga a nosotros. En realidad Su reino siempre estuvo oculto dentro de nosotros y hace algunos miles de años, así lo experimentaron ciertos Yoguis en la India, al designar a Ishwara como ese Dios personal, que siendo en todas partes, Omniteísmo, también lo Es dentro de nosotros y Él mira al mundo a través de los ojos de un sencillo Ser humano, de modo que podemos afirmar, que la dignidad humana adquiere una nueva y honrosa dimensión puesto que: “Dios se conoce así mismo, por medio de la forma humana” Quedándonos la noble y singular función de mantener limpio el cristalino, para que la Luz que sale de adentro, se funda con la luz de afuera y todo adquiera un nuevo brillo.

Si llenas tu vida de cosas, acontecimientos, sensaciones, personas, no tendrás espacio para albergar el silencio, el vacío, a DIOS. La definición más exacta, que nunca he podido encontrar sobre la comprensión de Dios, se resume en una antigua oración, anterior al cristianismo y que propagaban los Bardos, entre los pueblos Celtas, como miembros ilustres del Colegio de los Druidas, que se suele pronunciar en francés antiguo, para mantener su vibración original; pero que traduzco, para poder apreciar su profundo sentido y se denominada:

ORACIÓN AL DEMIURGO

DEVOCIÓN POR LO FEMENINO

¡OH, DEMIURGO, ESCÚCHAME! DEMIURGO ETERNO, DEMIURGO INFINITO, DEMIURGO ÚNICO. FUERZA, JUSTICIA, AMOR. ¡AYÚDAME! TÚ QUE ERES LLAMA, TÚ QUE ERES FUEGO, TÚ QUE ERES LUZ, ¡PROTÉGEME! TU SUSTANCIA ESPIRITUAL ETERNA, SER PERFECTO, INGENERADO E INMUTABLE. QUE ERES SIN PRINCIPIO, SIN MEDIO Y SIN FIN Y QUE ETERNAMENTE SE ENGENDRA A SÍ MISMO. TÚ ARQUITECTO SUBLIME, QUE POR EFECTO DE TU VOLUNTAD SACAS DE LA NADA TODO EL UNIVERSO. TÚ EJE Y POLO DEL COSMOS, INFINITO, ETERNO E INCREADO. TÚ CAUSA ORIGINAL Y PERMANENTE DE TODAS LAS COSAS. TÚ ALMA ESTABILIZADORA DEL MUNDO. TÚ MAESTRO DE LAS ENTIDADES DE LOS TRES MUNDOS. TÚ FUENTE INAGOTABLE DE VIDA Y DE INTELIGENCIA.

LA DAMA DESNUDA ES EL PASAJE DE LUZ QUE ALUMBRA MIS NOCHES Y SUAVIZA LAS MAÑANAS. ES MI HERMANA, A LA QUE LE TIENDO LA MANO PARA SUBIR AL CASTAÑO Y CONVERSAMOS EN UNA DE SUS RAMAS. ES MI MADRE, CUANDO DESCANSO MI CABEZA ENTRE SUS FRONDOSOS PECHOS Y SIENTO SU CORAZÓN, COMO LE DA LA VIDA AL MÍO. ES LA MADRE DE MI PADRE, PUES EN OCASIONES TENGO LA SENSACIÓN DE QUE ELLA ALUMBRÓ A DIOS. ES LA AMIGA DE LOS INGENUOS JUEGOS INFANTILES, EL CACHORRO QUE ROMPE LA PIEL DEL ADULTO, PARA HACERSE DE NUEVO AQUEL TRAVIESO NIÑO QUE NUNCA MURIÓ.

ES EVA CON UNA HOJA ADORNANDO SU PUBIS, BRUÑIDA DEL BREVE SOL DEL MEDIO DÍA, AL PIE DE LA CASCADA. ES LA SACERDOTISA, QUE ME TRADUCE TODOS LOS SECRETOS, QUE A ELLA, EN LENGUAJE FEMENINO, LE SUSURRAN LOS DIOSES. ES LA DEVADASI SAGRADA, QUE ME HACE ACUDIR AL TEMPLO PARA RECONVERTIR MIS DESEOS, AL AÑADIRLES, ELLA, LA MÁGICA POCIÓN DEL AMOR. ES DOS CRISTALINAS GOTAS DE AGUA EN SU ROSTRO, QUE FERTILIZAN MI SILENCIO. ES UNA HISTORIA, QUE SE UNIÓ A LA MÍA, EN ALGÚN TIEMPO TAN LEJANO QUE YA NO ME IMPORTA RECORDAR. ES UNA GUERRERA SOLAR, QUE SE ESTREMECE CUANDO UNE SU FUERZA Y SUDOR CON EL MÍO, EN LA LUCHA OLÍMPICA DEL VICTORIOSO AMOR. ES UN RECUERDO CONTINUO DE QUE NO HAY RECUERDOS, SÓLO MOMENTOS, INSTANTES CUBIERTOS DE FUGAZ Y GLORIOSO PRESENTE. ES LA DANZA, QUE AL INICIARSE EN SUS CADERAS CREA REMOLINOS DE PLACER EN SU ENTORNO Y SUAVEMENTE ME COMPRIME EN SU INTERIOR, HASTA TRASPASAR TODA MI COLUMNA. ES UN PÁJARO LIBRE, QUE SI COMETIERA LA ESTUPIDEZ DE ATRAPARLO ENTRE MIS MANOS SE MORIRÍA ASFIXIADO. ES YO MISMO, SIN DEJAR DE SER ELLA. ES LO QUE ES, PORQUE NO PUEDE SER OTRA COSA. ES ELLA MISMA.

YO SOY TU MISMO YO TE VEO EN TODOS LOS LUGARES. TE SIENTO EN TODAS PARTES. TU VERBO ES LA ARMONÍA DE LOS MUNDOS Y DE LOS CIELOS. TÚ ERES TODO. TÚ ERES LA VIDA, TÚ ERES LA MUERTE. TÚ ERES EL VACÍO, TÚ ERES EL LLENO. TÚ ERES LA OSCURIDAD, TÚ ERES LA LUZ. TÚ ERES EL SILENCIO, TÚ ERES EL TRUENO. TÚ ESTAS ADENTRO, ARRIBA Y ABAJO, EN EL CENTRO Y EN LA PERIFERIA. TÚ ENVUELVES EL INFINITO Y EL INFINITO ESTÁ LLENO DE TI. TÚ ABRAZAS Y TÚ CONTIENES TODO. TÚ ERES EL TODO QUE ES UNO. ¡OH, DEMIURGO! ¡OH, MARAVILLOSO SILENCIO!

ÍNDICE INTRODUCCIÓN ¿Quiénes somos?

¡Shanti!

Para mi padre y mi madre ¡Shanti!

Para mis maestros y maestras ¡Shanti!

Para la vida y la muerte

Luis Hernansáiz

LA HERENCIA GENÉTICA DEL GENIO • Mi antepasado • La nueva infancia • La educación de los héroes y los mártires • El ejército • Reconociendo • El poder • Inventa tu vida para la paz • La Tierra • Memorias de un viajero • La elección de nacer • La creación • La creatividad • El juego lúdico LOS GUÍAS DE LA EXPEDICIÓN • Los grandes maestros • Mi maestro • El maestre • El maestro • El linaje • Pláticas con los maestros • Los segmentos ingrávidos LOS CAMBIOS • La depresión • Don dinero • El sexo

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Los estimulantes La nueva era América Coatepec El Ashram La vida de un cocodrilo La magia Los centros telúricos Los centros magnéticos Los centros telúrico-magnéticos

EL CIRCULO DE LA REAL INICIACIÓN • Los espejos confrontados • El punto del círculo • El omnímetro • Las herramientas 1ª Disciplina de un iniciado (El instinto) Tratado de prácticas (Iniciación ascética) • El clan del pelícano (Valor) • La gruta sagrada (Lealtad) • El mercado de valores (Valor y lealtad) • La vaca argentina • Salud 2ª Disciplina de un iniciado (La psiquis) • Nahuales • Maestros constructores Tratado de prácticas (Iniciación simbólica) • Los nutrientes del alma Belleza Armonía Servicio

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La logia urbana Decálogo ético del yoga

3ª Disciplina de un iniciado (La mente) • La campana de vacío • La gran pirámide Tratado de prácticas (Iniciación gnóstica) • El viejo profesor Observación Estudio Meditación • Meditación reflexiva • Meditación hermética (El misterio de la esfinge) • Meditación del yoga (La obra alquímica) 4ª Disciplina de un iniciado (El espíritu) • Las gotas y el océano • El tiempo y el espacio • Los usos horarios • El uni-verso • El árbol del amor Tratado de prácticas (Iniciación mística) Amor, amor y amor • Una tarde en el trópico • Las curvas de la vida • Contemplación de Mandala 5ª Disciplina de un iniciado (Ser) • El testigo silencioso • La cámara secreta • El quinto reino • Las ciencias sagradas

Tratado de prácticas (Iniciación real) Silencio • Wu-wei (La acción desde el vacío) • Geometría • Los rituales • Las dimensiones LAS CIENCIAS SAGRADAS • El origen El origen de la materia (Fisiogonía) • El calendario azteca • Venimos del Sol • El anillo de la vida El origen del cosmos (Cosmogonía) • Los esquemas • El retorno del Bindu • La edad del cosmos El origen del hombre (Androgonía) • En busca del fuego • Las pulgas • Las gotas de rocío • El eslabón perdido • Los habitantes de otros mundos La búsqueda de Dios (Teogonía) • Los ciegos y el elefante • Los errores de Dios • La devoradora de creencias • Animismo • Politeísmo monoteísmo omniteísmo

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Oración al Demiurgo Devoción por lo femenino