Cuidado con los golpes de calor

Profesionales de la salud aconsejan tener cuidado y no exponerse a padecer un golpe de calor. Las elevadas temperaturas sumadas a un ambiente húmedo juegan en contra del sistema de “refrigeración natural” (sudoración) del cuerpo. Recurrir a controles periódicos de salud, consumir agua pura y evitar la exposición a los rayos del sol, forman parte de las recomendaciones médicas.

El golpe de calor se caracteriza por presentar la piel caliente, enrojecida, seca o húmeda, pulso rápido y fuerte (taquicardia). Pueden también aparecer calambres, dolor de cabeza, mareos, visión borrosa, náuseas, vómitos e incluso pérdida del conocimiento, si no se actúa con rapidez.

El trabajo muscular (ya sea por caminar, correr, andar en bici y/o ejercitarse) aumenta el calor corporal, que se elimina al exterior del organismo sobre todo por medio de la sudoración. Si el ambiente es muy caluroso (cercana a los 40º C), y además hay humedad, ese proceso no se puede realizar. Entonces, el organismo sufre.

Retiene el calor y aumenta la temperatura interna corporal hasta niveles que el organismo no puede soportar.

Ahí es cuando se produce el golpe de calor. Así lo explicó el doctor Abdón Villamayor, titular del Programa

Nacional de Prevención Cardiovascular del Ministerio de Salud Pública y

Bienestar Social (MSPBS).

De acuerdo a las expresiones del médico, cuando aparecen los prime-

• A pesar de no sentir sed, es muy importante que se mantenga hidratado. El cuerpo requiere como mínimo 2 litros de agua por día, a fin de reponer lo que pierde. Sin embargo, no se debe tomar toda esa cantidad de golpe. Lo ideal es tomar un sorbo de agua cada 15 minutos. • Utilice prendas de vestir holgadas, ligeras, y preferentemente de colores claros. • Ante la exposición al sol, ya sea durante actividad laboral, deportiva u otro, se aconseja utilizar sombrilla/sombrero, lentes y protector solar. • Evite la exposición directa al sol, sobre todo en horarios pico, que va entre las 09:00 y las 17:00. • El tereré es una forma de hidratarse, pero se debe priorizar la ingesta de agua pura, en vaso. • El consumo de bebidas alcohólicas debe ser moderado. La cerveza actúa como diurético, lo que es contraproducente para la persona que la ingiere. La hidratación posterior tiene que

ros síntomas es necesario resguardarse del calor en sitios más frescos, recostarse y aflojar la ropa, para contrarrestar los efectos del golpe de calor.

“De ser posible, se debe refrescar la piel con paños húmedos y fríos, tomar sorbos de agua y buscar incluso atención médica con urgencia si se presenta vómitos persistentes, obnubilación y cefalea intensa”, indica el Dr. Villamayor.

NIÑOS Y ADULTOS MAYORES

Los bebés y los niños, de 8 a 10 años de edad, son muy sensibles a los efectos del calor. Estos dependen de otras personas, para mantenerse frescos e hidratados. Hay que estar atentos para hacerles beber agua. Por otro lado, nunca deje a un niño en un vehículo estacionado.

Por su parte, las personas de 65 años o más tienen menos probabilidad de sentir y reaccionar ante los cambios de temperatura. Por lo mismo, deben evitar exponerse al sol y, de ser posible, permanecer -tanto como sea posible- en ambientes con ser suficiente. • Se recomienda la realización de chequeos, como el control de la presión arterial, sobre todo si se va a realizar actividad física. Asimismo se debe tener especial cuidado si se consumen medicamentos como los diuréticos.

acondicionadores de aire.

Es conveniente que el adulto mayor esté acompañado de algún amigo o vecino, y no solo.

Ellos deberían beber más agua que de costumbre y no esperar a tener sed para beber más.

Se debe prestar especial atención a quienes deben tomar diuréticos. Su consumo se debe disminuir, hasta donde le permita su médico tratante, y/o suspender en estas épocas de calor intenso, por la posibilidad de deshidratación.