Cruce de mundos. El Sol es fuente de vida, la ciudad, un inerte que lo pusieron por ahí porque había lugar. Su cruce genera formas nuevas, colores y texturas. Vida donde no hay vida. Un poco de aire donde sólo basta con mirar para arriba, observar y dejarse llevar. Es así como este libro busca retratar esta idea. A su vez, refleja momentos que disfruté de vivir.