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NACIONAL
“No es violación porque estaba inconsciente” • • •
La Fiscalía decidió aumentar la acusación de abuso a agresión sexual en el caso de Manresa La Audiencia rechazó el delito, sostiene que no hubo violencia ni intimidación porque estaba inconsciente Las penas son de entre 10 y 12 años de cárcel y 12.000 euros entre los cinco
Los cinco procesados del caso de abuso sexual en Manresa. Fuente: El Periódico
MAYTE CABANES | MADRID La Audiencia de Barcelona ha condenado por abuso sexual y no por agresión a cinco acusados de la violación grupal por turnos a una menor de 14 años en Manresa el 2016. En un primer momento la Fiscalía había decidido elevar el delito a agresión sexual en el informe final, argumentando que aprovecharon que eran más y que la joven estuviese ebria. La sala se opuso porque estando inconsciente la víctima no podía “determinarse y aceptar u oponerse a las relaciones sexuales” con los inculpados, “no sabía qué hacía y qué no hacía”. b La carencia de violencia explícita es lo que el Código Penal distingue entre abuso y violación, no se necesitó emplear “ningún tipo de violencia o intimidación” contra la víctima. Muchas asociaciones, juristas y organismos de mujeres exigen que no haya diferenciación. b Los cinco acusados deben indemnizar con 12.000 euros a la víctima en conjunto y solidariamente por las secuelas de la “intensa y especialmente denigrante” violación.
D OS ABSUELTOS Marco Antonio R., condenado en primer momento por ser partícipe, queda absuelto por la fiscalía porque “durante la instrucción de la causa no fue procesado por ninguno de ambos delitos”. En las pruebas del juicio no se le nombra como “interviniente en los actos sexuales”. Sin embargo, sí amenazó a la amiga de la víctima poniéndole una pistola en la boca, “sé dónde van tus hermanos pequeños a la escuela”, le dijo. La Fiscalía se abstiene de condenarlos por amenazas por recrearse con una pistola de fogueo. En los juicios había un séptimo hombre, el segundo que quedó exculpado. Estaba acusado de omisión de evitar delitos al masturbase ante la escena, pero la situación es el argumento que sostiene la sala para no imputarle: “no podría haber hecho nada efectivo para evitar los delitos, cometidos por una pluralidad de hombres y en un descampado alejado de zonas habitadas donde poder encontrar auxilio, fuera para detener los ataques a la víctima o, en caso de enfrentarse solo a los atacantes, evitar la posible reacción agresiva de estos contra él”.
En las redes sociales se critica fuertemente la postura tomada por la fiscalía con tweets como “Señor presencia una violación en grupo a una menor. Mientras presencia la violación se masturba. La Audiencia dice que no podía impedir la violación porque se sentía intimidado por los demás, pero no se considera violación porque no hubo intimidación” o “No sé quién está más desequilibrado el que se masturba mirando una violación o el que lo absuelve, que asco por favor”.
últimas controversias es la desinformación que hay respecto a esto. Se dice que eran “MENAS”, esto es, Menores Extranjeros No Acompañados, sino que tres son españoles, tres de nacionalidad cubana y otro argentino; todos mayores de edad cuando realizaron la agresión.
MANIFESTACIONES
LOS HECHOS - 2016 La víctima no tiene prácticamente ningún recuerdo de aquella noche del 26 de octubre de 2016, la amiga que la acompañaba se convierte en “piedra angular” de la acusación para el tribunal. La menor de 14 años, ahora de 17, asistió a una fiesta en una fábrica abandonada y aislada de Manresa de la que recuerda solo el principio. Testifica que días antes del botellón había mantenido relaciones sexuales consentidas con uno de los acusados, Bryan M. Al comienzo de la fiesta este trató de meterle los dedos vaginalmente, a lo que ella se negó. Él fue el que presuntamente abusó sexualmente de ella primero, llevándola a una casa abandonada cercana para violarla. Volvió al lugar de la fiesta para animar al resto a hacerlo en turnos de quince minutos. Le siguió uno de los amigos, Walter, que le dijo a Daniel David “te toca a ti, no tardes”. El siguiente fue Mikel Pascual, seguido por Marco Antonio y terminando con Yordanis. Todos violando en cadena. Más tarde Maikel obligó a la joven a hacerle una felación poniéndole el miembro en la boca “que la tenía ya llena de ampollas”, “chupa y traga”, le dijo Maikel. Ante la situación de desamparo en la que se encontraban las dos jóvenes, la amiga de la adolescente tuvo que jurar varias veces a los cinco que se mantendría callada y la llevaría consigo a su casa. Amenazaban con tirar a la desorientada menor al río. Bryan amenazó durante los días siguientes días a varios menores que estaban en la fiesta para que no dijeran nada.
CONTROVERSIAS Los cinco agresores sabían que la víctima era menor, que tenía 14 años, mientras ellos eran ya mayores de edad. Una de las
Manifestación en Manresa el 2 de julio . Foto: Acción Lila / Les Aamas
Manifestación en Manresa. Fuente: Ferran Nadeu
Las manifestaciones han sido continuas y por todo el territorio catalán, llenas de pancartas con “no es abuso, es violación”, pidiendo al ayuntamiento que tome medidas o llenas de alusiones a los hechos como “ven conmigo 15 minutos si tienes cojones”. Este hecho se designa como otra “Manada”, término que se usa a partir de la violación grupal de Pamplona en julio del 2016. Se habla de manada cuando la agresión es en grupo, algo muy recurrente desde hace unos años. El concepto se ha trasladado a la política y se incluyó en el debate electoral este lunes en una de las intervenciones de Pablo Iglesias. Santiago Abascal añadió a esto que desde lo de Pamplona “ha habido más de 100 manadas y el 70% de los que están imputados son extranjeros”, dato del cual se ha demostrado ya su falsedad. En realidad no hay datos oficiales que permitan conocer el porcentaje de extranjeros o nacionales que cometen agresiones sexuales múltiples. Desde el colectivo feminista se defiende que es un problema estructural, judicial y social. Cada día y, más manifiestamente, cada 8 de marzo, se lucha contra el miedo que sufren las mujeres en la calle. Esto ocurre más de lo que muestran las estadísticas, se dice que es casi imposible poder contabilizar todos los casos. No obstante, las feministas animan a no perder las ansias de erradicarlos y salir sin tener miedo a no volver jamás a casa.
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