Editorial
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
c o n s o l a c i ó n
“¡Qué curioso!”
Nunca había oído hablar del Día Internacional de la Felicidad. “¡Qué curioso!” –pensé-. Celebramos días Internacionales por todo: reivindicaciones y luchas por motivos concretos, defensa de las riquezas naturales, fomento de valores morales, ideologías de determinados grupos de personas… Días internacionales para expresar deseos o tareas que, como humanidad, tenemos pendientes… Claro que, según nuestra historia, nuestras experiencias personales, las personas y realidades que conocemos, esos días encuentran en nosotros un eco diferente, una mayor o menor sensibilidad y, por supuesto, mucha o ninguna o muy poca implicación. ¿Y la Felicidad? ¿No es ésta para todas las personas un desafío común que da sentido a las demás iniciativas? ¿Quién de nosotros puede estar al margen? Posiblemente pensemos que dedicar un día a la felicidad tiene gracia y esbocemos una sonrisa, como a mí me ocurrió. Aunque si lo analizamos bien, ¿no os parece que los cristianos deberíamos poseer un máster en Felicidad, ser gente especialista y especializada en ayudar a otras gentes a ser felices, sobre todo a los que en la vida caminan a nuestro lado rotos por el sufrimiento y hundidos en la desesperanza? La Celebración de la Pascua de Cristo, victoria sobre todo callejón sin salida, toda desilusión y oscuridad, que se levanta por encima de todo juicio injusto… ¿puede dejarnos indiferentes? En este sentido, los testimonios de las diferentes Celebraciones de la Pascua nos confirman un estilo de vida nueva el estilo de vida generosa y entregada del Señor Jesús que queremos vivir. “A ti te digo: Construye” convierte a la Familia Consolación en una empresa de arquitectos; por ello es genial el compromiso pascual que Misiones Consolación nos ofrece para que ayudemos a dibujar la Felicidad en los rostros de muchos niños que solo necesitan algo tan sencillo y preciado como una clase, unas mesas y sillas para aprender a leer y a escribir. Misiones Consolación nos traslada a una tierra, Mozambique, en la que María Rosa Molas no sabemos si pensó o no; lo que sí es cierto que, como profeta, la soñó. Sus palabras resuenan aún en nosotros: llevar el Consuelo de Dios a las necesidades más urgentes de los hombres y mujeres de cada momento histórico. Ahora que estamos a punto de celebrar litúrgicamente la santidad de nuestra Madre, nos lanzamos un estupendo desafío: ¿qué ladrillo, piedra o viga he de aportar al gran edificio de Consolación? El Papa Francisco nos dice “Anunciad el Evangelio y si es necesario también con palabras”… Vamos, pues, a multiplicarnos en gestos de consuelo que anuncien la vida de Cristo, que es siempre provocación para construir juntos una sociedad más justa y alegre, porque “Nuestro estilo de vida propuesto y vivido con la alegría que mueve el corazón de quien ha sido cautivado por Jesucristo es una alternativa válida hoy en día” (Cf. Mensaje de Inauguración de M. Emilia Sebastiá en el Año Vocacional)
3
Consolación
R E V I S T A
n º
1 1 0
Iglesia en camino - Mercedes Onieva
LA BUENA NUEVA, UN TESTIMONIO DE AMOR GRATUITO Y FIEL… El Papa Francisco nos hace una invitación preciosa en este tiempo pascual. Nos invita a contemplar, desde la fe y la esperanza, la situación de tantos y tantos hermanos que sufren con dolor, en este mundo, por distintas situaciones. Hoy nos unimos a la petición del Papa y sentimos, con gozosa certeza, que nuestra oración en manos de Jesús Resucitado llega hasta el Padre. Por esto decimos a todos: «Venid y veréis». En toda situación humana, marcada por la fragilidad, el pecado y la muerte, la Buena Nueva no es sólo una palabra, sino un testimonio de amor gratuito y fiel: es un salir de sí mismo para ir al encuentro del otro, estar al lado de los heridos por la vida, compartir con quien carece de lo necesario, permanecer junto al enfermo, al anciano, al excluido… «Venid y veréis»: El amor es más fuerte, el amor da vida, el amor hace florecer la esperanza en el desierto.
Conforta a quienes han dejado su propia tierra para emigrar a lugares donde poder esperar en un futuro mejor, vivir su vida con dignidad y, muchas veces, profesar libremente su fe. Te rogamos, Jesús glorioso, que cesen todas las guerras, toda hostilidad pequeña o grande, antigua o reciente. Te pedimos por Siria: la amada Siria, que cuantos sufren las conse-
gan los atroces ataques terroristas en algunas partes de Nigeria y la violencia en Sudán del Sur. Y te pedimos por Venezuela, para que los ánimos se encaminen hacia la reconciliación y la concordia fraterna. Que por tu resurrección, que este año celebramos junto con las iglesias que siguen el calendario juliano, te pedimos que
Con esta gozosa certeza, nos dirigimos hoy a ti, Señor resucitado. Ayúdanos a buscarte para que todos podamos encontrarte, saber que tenemos un Padre y no nos sentimos huérfanos; que podemos amarte y adorarte. Ayúdanos a derrotar el flagelo del hambre, agravada por los conflictos y los inmensos derroches de los que a menudo somos cómplices. Haznos disponibles para proteger a los indefensos, especialmente a los niños, a las mujeres y a los ancianos, a veces sometidos a la explotación y al abandono. Haz que podamos curar a los hermanos afectados por la epidemia de Ébola en Guinea Conakry, Sierra Leona y Liberia, y a aquellos que padecen tantas otras enfermedades, que también se difunden a causa de la incuria y de la extrema pobreza. Consuela a todos los que hoy no pueden celebrar la Pascua con sus seres queridos, por haber sido injustamente arrancados de su afecto, como tantas personas, sacerdotes y laicos, secuestradas en diferentes partes del mundo.
4
cuencias del conflicto puedan recibir la ayuda humanitaria necesaria; que las partes en causa dejen de usar la fuerza para sembrar muerte, sobre todo entre la población inerme, y tengan la audacia de negociar la paz, tan anhelada desde hace tanto tiempo. Jesús glorioso, te rogamos que consueles a las víctimas de la violencia fratricida en Irak y sostengas las esperanzas que suscitan la reanudación de las negociaciones entre israelíes y palestinos. Te invocamos para que se ponga fin a los enfrentamientos en la República Centroafricana, se deten-
ilumines e inspires iniciativas de paz en Ucrania, para que todas las partes implicadas, apoyadas por la Comunidad internacional, lleven a cabo todo esfuerzo para impedir la violencia y construir, con un espíritu de unidad y diálogo, el futuro del País. Que como hermanos puedan hoy cantar Хрhctос Воскрес. Te rogamos, Señor, por todos los pueblos de la Tierra: Tú, que has vencido a la muerte, concédenos tu vida, danos tu paz. Queridos hermanos y hermanas, feliz Pascua. Que así sea.
c o n s o l a c i ó n
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
Vamos a pensar - Mª Victoria Aymerich
Lo que me mantiene Unos versos de mi padre, que, seguramente, me dedicó en un momento de intensa oscuridad de ánimo, producido, pienso yo, por la opción de vida que tomé y que él, por cierto, tardó algunos años en asimilar, me ayudan hoy a centrarme en unas consideraciones sobre algunas actitudes que, para los tiempos que corren, considero vitales, sobre todo si somos cristianos. Los versos los traduzco, contando con la limitación de la sentencia italiana que dice: traducción, traición, pues él los escribió en valenciano, su lengua materna:
¡Cuando se hace del todo de noche, un alba nueva yo espero! ¡Siempre en medio de la tormenta, que pronto escampe yo espero! ¡Está, si camino, cerca, lo que está lejos… espero! ¡Por mucha fiebre que tenga, enfermo, la salud espero! ¡¡¡Si de mí saber no quieres, como yo te quiero tanto, espero!!! No me detendré a analizar cada uno de los tópicos literarios que utilizó mi padre para expresar lo que sentía. Me detengo, sí, en el momento anímico que le llevó a escribir lo que escribió, como catarsis de algo que le atormentaba… unas cuantas realidades de superación personal, que nos hablan de una postura luchadora y comprometida ante los contratiempos de la vida y un grito final que estalla en una rotunda afirmación: ¡No importa que te hayas alejado de mí, no importa que nada quieras saber de mí… porque yo espero a pesar de ti, porque mi amor por ti es más fuerte que tu distanciamiento, más profundo y verdadero que tu desdén… porque soy tu padre y mi amor está muy por encima de tu comportamiento, de tus conductas! Al hilo de lo que escribo, pienso en la mucha significatividad de mi padre en mi vida. Él, con gran entusiasmo, me enseñó a soñar, a soñar que merece la pena pasar por la vida haciendo el bien, entregando lo mejor
que uno tiene, amando la belleza, el arte, la música, los libros… queriendo a las personas, cultivando la sensibilidad, expresando la emoción… y, muy importante: en consecuencia, me enseñó a creer, amar y a esperar. Lo digo muchas veces y es mi experiencia de creyente: Si mi padre me quería tanto, si era tan bueno, si me perdonaba, aceptaba, valoraba… ¡Cómo, por analogía, es mi padre Dios! Como es habitual en algunos de los escritos que hago para esta revista, un texto, una anécdota, una situación vivida… me sirven de pretexto para comentar y ahondar sobre otras realidades, las cuales pretendo iluminar con la Palabra de Dios, hacer, a mi modo, una lectura creyente de las mismas. Hoy, en el artículo que estoy escribiendo, es mi intención señalar algunos aspectos que considero fundamentales para llevar en el equipaje de la vida. Así pues, hoy, y solo en cierto sentido, los versos paternos me inspiran a afirmar con San Pablo: “Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no defrauda; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” (Romanos 5,3-4). O sea: Los contratiempos y dificultades que continuamente nos asaltan en el diario vivir, no son obstáculos insalvables para los que creemos en Dios, aunque, el ser creyentes, no nos exima del sufrimiento y de los sufrimientos… las tribulaciones, en contexto paulino, son fuente para la madurez y equilibrio personales; además, a través de ellas, de la “paciencia” en soportarlas, crece en nosotros la fidelidad y la esperanza, una esperanza cristiana que, incluso una vez superadas, nos lleva a encontrarnos con Dios allí donde parecía que nunca iba a estar. La clave está en que el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones. Nos sustenta el amor de Dios… de ahí nace la esperanza cristiana y, como dice otro texto bíblico que Pablo refiere a Abraham, origina que podamos esperar contra toda esperanza (Romanos .4,18).
5
Consolación
R E V I S T A
n º
1 1 0
Una esperanza, la cristiana, que está en la raíz del anhelo de felicidad que Dios ha colocado en la profundidad de nuestro ser, que impulsa nuestras actividades y las dirige a la construcción de un mundo mejor y más habitable; una esperanza que nos preserva del abatimiento, nos encamina a vivir alegres –porque es Dios nuestra esperanza– y nos ayuda a soportar con paz los momentos difíciles y complicados y nos infunde confianza y seguridad en la fidelidad amorosa de Dios, revelada de tantas formas en el ayer, presente en el hoy y que sostendrá también nuestro futuro. Una esperanza que nos libra, como dijo el ya canonizado San Juan XXIII al comenzar el concilio Vaticano II, de ser “profetas de calamidades”. Al respecto, observo –creo que se puede tachar casi de pecado– el que muchos, en comentarios, actitudes, posturas… corean convencidos –coreamos– a menudo, aquella canción de los años 60 que decía: “No sé qué pasa que lo veo todo negro” –ya sé: su sentido no era el que yo quiero darle; a buen entendedor…– No podemos, ni debemos teñir de negro la vida, el mundo, las personas, ver siempre la parte negativa de todo, instalarnos en la queja continua y ruidosa y en el displacer, donde parece que estemos instalados, incluso los cristianos… lo dice el mismo Papa Francisco, en esa gran exhortación que ha escrito y que, vehementemente, recomiendo leer y releer, la Evangelii Gaudium: “Hay cristianos cuya opción parece ser la de una Cuaresma sin Pascua”. Y una esperanza, al mismo tiempo, que no es de vivir con ilusiones vanas, de soluciones fáciles, de varitas mágicas y recetas salvadoras que transforman la realidad, de espectaculares atajos para obtener lo que deseamos. Esperanza que, aunque lo parezca, no es mero optimismo, entre otras cosas porque no nos exime de la duda, de las vacilaciones y problemas de la condición humana, sino que es una esperanza fruto de la confianza en Dios, experiencia de su plan de salvación, que se ha hecho realidad en Jesucristo, “nuestra esperanza” (1 Timoteo 1,1). Otro texto fundamental, al que me conducen los versos citados y comento aquí en relación a mi experiencia personal, es la parábola del hijo pródigo o de los hijos perdidos o más bien, del Padre bueno, que, por archiconocida, no transcribo. La relata el evangelista San Lucas en el capítulo 15 de su Evangelio, versículos 11 al 32. Lo decía en un párrafo anterior: ¡Cómo, por analogía, es mi padre Dios!... es decir si mi padre y mi madre, personas “normales” con sus respectivos defectos y virtudes propios de la naturaleza humana, fueron buenos y generosos hasta el límite conmigo y mis hermanos, cómo será, pues, el amor y el perdón de un Padre divino. Sólo puedo alcanzar una cierta comprensión por analogía, la analogía me sitúa, al menos, en los umbrales del misterio del inmenso e infinito amor de Dios. Por esta razón la Palabra de Dios está llena de analogías, pues ¿cómo expresar, si no, lo inefable? Porque sabemos cómo es el amor de un padre o una madre, podemos acercarnos a intuir algo del misterio divino...
6
Vamos a pensar - Mª Victoria Aymerich En esta parábola, Dios aparece como padre, un padre fuera de serie, que espera al hijo menor sin cansarse, que lo acoge sin juzgarlo, que celebra una gran fiesta porque vuelve... un padre que tampoco reprocha la actitud envidiosa y áspera del hijo mayor… La hemos analizado miles y miles de veces, se han escrito páginas y páginas sobre su enseñanza, multitud de comentarios, homilías, interpretaciones, libros… No queda nada por decir que alguien no haya dicho ya… Y, sin embargo, es inagotable, una fuente inagotable de sabiduría… Para mí esta parábola, la quinta esencia del Evangelio, es un retrato genuino y fiel de Dios Padre, un retrato revelador del amor de Dios, un retrato que rezuma el conocimiento que el Hijo, Jesús, tiene de su Padre, un retrato en el que late la revolución amorosa que Cristo nos trae… Un mundo al revés, un mundo al contrario… Nadie, salvo Dios mismo, podía hablar de un amor tan desmesurado, tan especial, tan… ¡Ni palabras hay para describirlo! Esta parábola, continuando un poco más allá la reflexión, nos afianza en la seguridad de que Dios es nuestro Padre, el Padre de todos nosotros, el Padre que perdona al máximo, que nos quiere tal como somos, que sabe lo que hay dentro de cada uno, que nos ama tanto, tanto que nos espera y lo espera todo de nosotros, que sale al encuentro nuestro, aunque seamos unos sinvergüenzas que reclamemos nuestra herencia, gastemos sus dones y, si volvemos a él, sea por interés o porque tengamos hambre; o bien, que nuestra postura, aun viviendo con él en la casa paterna y participando plenamente de todo los suyo, le vayamos con exigencias y reclamemos nuestros “derechos” sin una pizca de comprensión de su misericordia y amor a nuestros hermanos. Dios es nuestro Padre, somos hijos en el Hijo. Con Jesús proclamamos el Padre nuestro… y, con estas premisas, ya solo falta declarar que somos hermanos. Sin duda esta convicción pone de relieve el importante nexo que se establece entre paternidad, filiación y fraternidad. Por la conciencia que tenemos de la paternidad de Dios y de la consiguiente filiación respecto a él, los cristianos, partícipes del amor infinito de Dios Padre, nos sabemos responsablemente unidos a todos los hombres y estamos llamados a manifestar ese amor con obras, en todas las circunstancias, y momentos de la vida. Es maravilloso que mi padre me dedicara poemas, es impagable y motivo de acción de gracias continua a Dios el haber compartido sus sueños, haber aprendido de él el entusiasmo, la mirada positiva hacia las personas y los acontecimientos, el humor…, el haberme sentido amada pese a, aparentemente en algún momento, defraudarle. De sus versos han brotado las analogías que os he comunicado y la reflexión que de ellos he sacado. Para terminar un último mensaje: no matemos la esperanza, no nos alejemos de la alegría, de lo que da sal a la vida… la vida es un don y hay que vivirla a tope, vale la pena sumergirnos en el amor inmenso de Dios, que, por el Espíritu, ha sido derramado en nuestros corazones.
c o n s o l a c i ó n
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
Con Vocación... Maura Aranguren María Dolores García Goméz
TENGO QUE OCUPARME DRE DE LOS ASUNTOS DE MI PA Cuando Jesús aceptó en su corazón la noble misión que Papá Dios le entregó, de salvar a la humanidad, de revelar su rostro misericordioso y consolador, lo aceptó con todas las consecuencias. Asumió que su predicación tendría efecto, en algunos suscitaría el amor y la adhesión a su mensaje, pero en otros generaría el odio que lo llevaría a la cruz. Jesús aceptó que por Dios estaba llamado a dedicarse enteramente a Él, sirviéndole en los más necesitados, esa fue su respuesta cuando en el templo después de tres días María y José lo encuentran hablando con los sacerdotes “No sabían que yo debo ocuparme de los asuntos de mi Padre” Lucas 2, 49. Este adolescente de tan solo 12 años, va intuyendo en su corazón la posible llamada que Dios le va haciendo y va tratando de responder a ella, no con la profundidad y radicalidad con que lo hará a partir del Bautismo cuando ya contaba con 30 años. Pero nos encontramos a un Jesús que define con palabras muy acertadas a lo que quiere dedicar su vida “A los asuntos de su Padre”. Dedicarse a los asuntos de su Padre es en pocas palabras: dedicarse al proyecto de Dios. Dedicarse a la misión de anunciar que Dios vale la pena, que servirle a él deja más ganancia que quedarse encerrado en una carpintería haciendo mesas y muebles. Dedicarse a los asuntos de Dios va unido al socorro del necesitado, al trabajo por la paz, la libertad, la justicia y la defensa de la dignidad humana. Y tú ¿Sabes a qué quieres dedicar tu vida? ¿Vas intuyendo en tu diario vivir lo que Dios quiere de ti?... ¿Te gustaría dedicarte por completo a los asuntos de Dios? Pide a Jesús que te ayude a descubrir en ti, en tu vida diaria ese dedicarte a los asuntos de tu Padre. Si nos ocupamos de las cosas de Dios, seguro que él también se ocupará de las nuestras. A veces creemos que todo camino debe ser fácil, y no es así, cada vocación tiene inserta la cruz y el dolor. Claro, la cruz que asumimos como parte de nuestro seguimiento a Jesús, es una cruz que está llena de resurrección, porque esas dificultades nos conducen siempre al crecimiento humano y espiritual, y nos hacen más sensibles al dolor del hermano. Hoy Jesús nuevamente nos hace la
invitación de dedicarnos a los asuntos de su Padre. Precisamente porque muchos de nosotros estamos dejando solo a Jesús. Mucha gente, muchos jóvenes ni siquiera conocen de nuestro cristianismo y tampoco tienen modelos de referencia para decir “quiero ser como tú”. “Tú me inspiras algo bonito”. “Tú me reflejas paz, tú me hablas de Dios”. Jesús quiere que nos ofrezcamos para seguirle y dedicarnos a sus cosas, seguir sembrando el evangelio del amor. Nuestro mundo, nuestra sociedad necesita que le demos a conocer el amor de Dios. El Evangelio de Lucas nos relata que Jesús bajó con María y José a Nazaret y allí crecía en gracia y en sabiduría, Lucas 2, 51-52. Ese crecer en sabiduría indica que Jesús fue cultivando en su corazón esta vocación de dedicarse completamente a su Padre. A medida que fue creciendo, fue observando, contemplando, palpando de cerca el dolor y la alegría de sus vecinos, de sus compañeros, de sus amigos. Fue descubriendo que su principal misión era la de consolar. ¿Te sientes llamado a ser consolación? ¿Sientes que puedes ayudar a Jesús a consolar? Para Jesús no fue fácil hacer esta opción tan radical de dedicar toda su vida a Dios. Algunos lo llamaron loco y hasta despreciaron su procedencia; su familia, en un primer momento, se queda fuera “Llegaron su madre y sus hermanos y, quedándose afuera, lo mandaron llamar” Marcos 3, 31. Es decir, la familia de Jesús se muestra un poco reticente ante al trabajo evangelizador de Jesús, luego vemos cómo la familia también lo sigue. Otros lo llamaron endemoniado porque hacía milagros en sábado. ¿Qué expresan de ti las personas? Jesús fue capaz de poner por encima de sus propios ideales la voluntad de Dios. Se sintió llamado a construir ese pedacito de cielo en la tierra ayudando a cargar nuestra cruz. Su meta va mucho más alla de hacer realidad su sueño personal, está centrada en el sueño de Dios para la humanidad. Si Jesús en estos momentos te está llamando a dedicarte a sus asuntos, no lo dejes esperando, si te llama es porque ve en ti la posibilidad de servir a los demás. Abre tu corazón a Dios y Él lo llenará de amor.
7
Consolación
R E V I S T A
n º
Palabra y Vida - Marta García
1 1 0
Siete claves Artículo publicado en la revista: Catequistas Aunque comenzamos una nueva sección –Biblia, siete claves para leerte –, lo que vamos a desarrollar aquí engancha con las últimas preguntas que me hicisteis y que tratamos de responder el curso pasado en el apartado Biblia, ¿quién eres? de la revista Catequistas.
Muchos os preguntabais cómo unos textos tan antiguos pueden decir algo al hombre de hoy. Otros, en cambio, resaltabais la dificultad que encontráis para acceder al significado de los textos y me interrogabais sobre qué hacer. Pues bien, este curso vamos a ofrecer siete claves útiles a la hora de leer un texto bíblico. Y esto lo vamos a hacer teniendo como horizonte los pasajes bíblicos que propone el Catecismo, de manera que, lo que tratemos aquí os sea también de ayuda en vuestra misión de catequistas. Antes de comenzar esta aventura es necesario que hagamos una serie de consideraciones. Distintas preguntas para una realidad No descubro nada nuevo. De hecho, en lo que a continuación voy a decir se fundan las ciencias, así como sus metodologías. Toda ciencia nace de una pregunta. Ante la realidad que uno observa surgen interrogantes. Es más, ante una misma realidad pueden surgir cuestiones muy diferentes. Por ejemplo, al observar las estrellas me puedo preguntar a qué distancia estarán, o de qué elementos están compuestas, qué reacciones químicas se dan en su interior, cuándo surgieron, qué tipo de energía producen, o bien, por qué han cautivado tanto al ser humano, o por qué algunas religiones las han asociado a divinidades, qué relación tienen con el zodiaco y si su situación puede desvelar algo del futuro al ser humano.
8
Sin ir tan lejos, el hombre también ha suscitado múltiples cuestiones. De hecho, las distintas preguntas sobre la persona y sus dimensiones han creado nuevas ciencias. Pensad en la medicina, la psicología, la sociología, la economía, la antropología, la historia, etc. Así mismo, es importante caer en la cuenta de que el método de investigación y los medios que se usan dependen de la pregunta y dependen de la realidad que se está estudiando. Para ver una estrella no puedo utilizar un microscopio, como tampoco una radiografía refleja el perfil psicológico de una persona. Algo parecido sucede con la Biblia. Desde siempre la Escritura ha suscitado interrogantes. Algunos de ellos han sido tan importantes que han fraguado un método. Pensad que el curso pasado dedicamos los ocho números de Catequistas a responder preguntas de diferente calibre: unas eran sobre el origen y formación de la Biblia; otras, en cambio, recaían sobre la historicidad de los relatos; algunas, sobre su naturaleza compleja, una Palabra de Dios expresada en palabras humanas y, por tanto, inspirada; mientras otras muchas se referían al mensaje, etc… Podríamos decir que cada una de estas grandes cuestiones ha generado un método o, al menos, un modo propio de aproximarse. Es decir, si uno se pregunta sobre la historicidad de la Biblia entrarán en juego disciplinas como
la arqueología o la historia que no intervienen cuando la pregunta es: ¿cuáles son las reglas de composición de la poesía hebrea? Nuestra pregunta Dicho esto, seguramente que os estaréis preguntando y ¿cuál es nuestra pregunta? Pues bien, a nosotros en estos momentos nos interesa conocer el mensaje y la experiencia de fe que nos están transmitiendo los textos bíblicos. O lo que es lo mismo, consideramos que quien escribe nos quiere comunicar algo importante y esto lo hace a través de un relato o narración. Es importante que tengamos en cuenta este último punto. No es lo mismo comunicar un mensaje por mail, a través de una película, que por medio de un relato escrito. Los canales y el modo que elegimos para comunicarnos tienen sus características y, con ello, sus ventajas y sus inconvenientes. Nuestra realidad Como hemos dicho, además de la pregunta, es necesario que tengamos presente la realidad. En primer lugar, la Biblia es un “escrito” y esto conlleva una serie de características. Pero además, la Biblia contiene un número considerable de relatos. Es más, los Evangelios son una especie de narración de la vida de Jesús. Y esto es importante porque yo puedo decir lo mismo de distintas maneras. Es decir, yo puedo decir que Jesús es el hijo de Dios escribiendo un tratado de teología, o bien en una expresión sintética y concentrada de la fe como es el credo, o también lo puedo decir a través de una narración. Observaréis que, aunque el “qué” siga siendo el mismo (Jesús es el Hijo de Dios), el “cómo” varía considerablemente. Lo que pasa es que nosotros hacemos el camino inverso del que hacen los escritores bíblicos. Nosotros partimos del “cómo” (relato) para llegar al “qué” (mensaje). Y a veces esos relatos o narraciones pueden tener elementos importantes que no sabemos descifrar muy bien y que pueden constituir un pequeño impedimento para captar plenamente el mensaje. Por eso nos debemos de ayudar de alguna clave. Las siete claves Nosotros nos vamos a ayudar de un método que se llama el método narrativo. Como su
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
c o n s o l a c i ó n
nombre indica, este método se aplica a los relatos, no se aplica a otros textos bíblicos que se escribieron en poesía como, por ejemplo, el libro de los Salmos. Pues bien, este método ofrece una serie de claves o herramientas útiles para abordar un texto. Ahora bien, antes de pasar a enumerarlos es importante que tengamos en cuenta lo siguiente. Una clave es como una llave que abre una puerta. Por tanto, el conjunto de estas ocho herramientas sería como un manojo de llaves. Sin embargo, no todas las llaves son útiles ni sirven para abrir la puerta. Habrá textos para los que una determinada clave abrirá su sentido profundo, mientras las otras claves no aporten nada relevante al mismo. Por eso si vemos que la puerta no se abre, no debemos de “forzar la cerradura”. En eso también consiste el arte de interpretar, en saber intuir y elegir la clave justa. Y esto se hace practicando. Otra cosa que tenemos que tener en cuenta es que la aplicación de un método, aun cuando nos ayuda a comprender el mensaje, no agota su sentido. La riqueza del texto es siempre mayor. Por esta razón, hay que “relativizar” los resultados. Es como si yo digo que una rosa es un conjunto de moléculas unidas entre sí. Como comprenderéis, una rosa nos evoca siempre algo más. Comenzamos la aventura… Dice Jean Louis Ska, un profesor de Biblia, que un texto de la Escritura se parece más a un bosque que a una esfera. Mientras que en esta última todos los puntos de la superficie son equidistantes del centro y de un golpe de vista se puede observar toda la esfera, el bosque es distinto. Es cierto que se puede mirar el bosque desde fuera. Sin embargo, la verdad del bosque, así como su complejidad, se descubre en la medida en que te adentras en su espesura. Ya que presenta paisajes y hábitats muy distintos y todo ello forma parte de la realidad del bosque. Algo así sucede con la Escritura. Por eso, como él mismo dice, antes de comenzar el viaje hay que cargar en la mochila cuatro utensilios imprescindibles: sentido “crítico”, gusto por la aventura, gratuidad y confianza. Si ya los tienes, comenzamos la aventura…
9
Consolación
R E V I S T A
n º
1 1 0
Huellas de Mª Rosa Molas - Antonia Munuera
MUJER DE OJOS RESUC Cuando las mujeres parten a toda prisa del sepulcro, con miedo y con gozo, a dar la noticia de lo que han visto y oído, le encontraron en el camino. Cuando el discípulo amado se inclinó sobre el sepulcro vacío, vio y creyó. Cuando María Magdalena escuchó pronunciar su nombre, reconoció a su Señor.
estrellas, ve la belleza incomparable de Dios y exclama que no hay nada más hermoso sobre la tierra. Cuando María Rosa víctima de la caridad ve partir a su madre, divisa en aquella ausencia un impulso para dejar sigilosamente la casa paterna y dirigirse a las fuentes donde podría apagar la ardiente sed que la consumía3.
Cuando los discípulos de Emaús se sentaron a la mesa con el compañero del camino, reconocieron al Maestro al partir el pan porque se les abrieron los ojos. Cuando Simón Pedro escuchó: es el Señor, se lanzó al mar para quedarse con el Señor de la Playa1. Estos personajes bíblicos son muy diferentes entre sí pero tienen algo en común, sus ojos. Son capaces de ver a Jesús VIVO después de la Cruz, perciben que ya no está sometido al tiempo ni al espacio, está con Magdalena y con Pedro, en el cenáculo, en la playa, en Emaús y en Galilea. Lo ven en su camino y en las situaciones concretas en las que se encuentran; está vivo aquí y ahora, en el tiempo y en la eternidad. Estos ojos iluminados, capaces de descubrir tan grande verdad, son ojos resucitados. A esta lista de personajes de ojos resucitados podemos introducir, sin temor alguno, a María Rosa. Ella, de mirada penetrante, también es capaz de ver a Jesús vivo en el camino que recorre cada día, vivo en ellas y en sus hermanas, vivo en la entraña de la historia. Sus ojos resucitados, iluminados desde dentro, son profundos, serenos, bondadosos. Cuando María Rosa mira al enfermo, al pobre, al anciano, al niño abandonado, en ellos ve al mismo Jesucristo2. Cuando María Rosa contempla Monte Caro, el Toscá, Mig Cami, el río Ebro, cuando admira una flor o un pajarito, cuando observa a un niño en los brazos de su madre o una noche de
10
Cuando María Rosa ve amanecer el día, atisba una oportunidad para servir al pobre y alabar a Dios, pues sabe que un instante importa una eternidad4. Cuando María Rosa descubre la orfandad espiritual en la que se encuentra, desde su heroica obediencia vislumbra la voluntad de Dios. Inicia entonces, con espíritu de docilidad, un largo camino para que ella y sus hermanas, en el seno de la Iglesia, dilaten el conocimiento y el Reino de Jesús5.
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
c o n s o l a c i ó n
CITADOS Cuando María Rosa siente en su carne y en su alma la desolación, distingue el camino que debe recorrer para que el Dios de la Consolación la haga su instrumento. Cuando María Rosa ve a sus hermanas incansables en el servicio de consolar al pobre, al enfermo, al niños, al abatido... secundando la misión sobre la tierra de nuestro dulcísimo Redentor, percibe que su corazón arde de amor, el mismo por ellas que por su Amado6. Cuando María Rosa percibe que todo le falta, mirando a Jesucristo tan pobre7 no desconfía, se abandona en la Divina Providencia y sus ojos ven el milagro permanente de Dios cuidando con ternura a sus hijos mucho más que a los lirios del campo. Cuando el Señor le requiere más pruebas de amor, se mantiene siempre serena ante las calamidades y contratiempos conservando siempre su rostro alegre como si viera al Invisible 8.
María Rosa a lo largo de su vida contempla a Jesús levantado en el altar de la cruz, el Árbol de la Vida. Permanece en el Calvario a los pies del Señor, único ideal de su cariño y hermosas aspiraciones9. Mira con amor Aquel que traspasaron y sus ojos son invadidos por la belleza de este Amor hasta encontrar en esa mirada todo consuelo y alivio. Pero no se queda aquí, de tanto mirarlo, de tanto amarlo, de tanto desearlo, lo coloca en el sepulcro nuevo y vacío de su huerto interior y como la esposa del Cantar de los Cantares exclama ¡Entre mi Amado en su huerto...! 10. En el sepulcro de su huerto interior nadie ha entrado, es el sepulcro de su debilidad y vulnerabilidad, de sus tinieblas y temores, de su miseria y pecado. Y en este sepulcro coloca María Rosa al Cristo que la consuela y la seduce, al Cristo contemplado al pie de la cruz. Y así, con el cuerpo de Jesús en ella, en el silencio y en la soledad de su sepulcro, la Vida renace como columna de Fuego y de Luz. Y ella con el gozo de la criatura nueva, resucitada en Cristo, cantará: ante ti se postran las cenizas de mi tumba11. 1. Evangelios de la Resurrección 2. Testimonio 65 y 67 3. P. León pág. 37 4. P. León pág. 41 5. P. León pág. 76 y R.C. n° 1
6. Testimonio 47 7. Testimonio 27 8. P. León pág. 55 y pág. 97 9. P. León pág. 102 10. Ct 4,18 11. Sal 22,30
Para reflexionar... María Rosa, como José de Arimatea, ha depositado el cuerpo sin vida de Jesús en su sepulcro a la espera de que el Señor de la Vida alcance la Victoria en ella. Esta experiencia le hace tener ojos resucitados y vivir como criatura nueva.
1. En el Calvario a los pies de Jesús ¿encuentro todo consuelo y alivio? 2. ¿Alguna vez me he planteado colocar en “mi sepulcro” el cuerpo de Jesús sin vida a la espera de su Victoria en mí? 3. ¿Puedo decir que mis ojos son resucitados? ¿Puedo describir lo que con ellos puedo ver? 11
R E V I S T A
n º
Entrevistando a ...
1 1 0
Hace tan solo unos meses surgía Nahúm, una nueva apuesta de las Hermanas de la Consolación por los jóvenes y por la música. En este nuevo número de la Revista Consolación, tenemos la oportunidad de que algunos de los miembros de este grupo nos cuenten cómo se están dando los primeros pasos de este proyecto. La Hermana Aurora Mechó y los jóvenes Paula Marán y Víctor García nos explican en primera persona su experiencia dentro de Nahúm, justo antes de que se lancen este verano dos álbumes con canciones muy especiales para la Familia Consolación. Con la intención de dar a conocer a todo el mundo la alegría de la fe vivida desde el Carisma de la Consolación surge este grupo que seguro dará mucho que hablar.
¿Cómo definiríais vosotros Nahúm? Paula explica que Nahúm es un proyecto que nace de las Hermanas de la Consolación, junto con jóvenes laicos y que su principal misión es la de acercar más a los jóvenes el Movimiento y el Carisma. Aurora añade que se trata de un proyecto de evangelización a través de la música. Es un proyecto ambicioso que pretende ser más que la grabación de unos CD’s: quiere ser un enlace de encuentro con Dios para jóvenes y para toda la Familia Consolación. Víctor considera que Nahúm nace de un impulso de querer difundir la alegría de la Fe a través de un instrumento tan importante y expresivo como es la música. Queremos expresar por medio del ritmo y el canto el gozo de sentirnos Familia Consolación.
12
¿Cómo surgió la idea de lanzar este proyecto? Con la intención de evangelizar y seguir proclamando el carisma a través de un formato nuevo y original como es la grabación musical de dos CD’s, todo con canciones de la Consolación, comenta Paula. Víctor nos recuerda que este proyecto nace en un tiempo muy especial para la Familia Consolación: por un lado la celebración del año Vocacional, y por otro, la fiesta del Bicentenario del nacimiento de Mª Rosa Molas (24 de marzo de 1815, Reus). En este contexto de jubileo para la Congregación y todos los que vivimos el Carisma de la Consolación, Nahúm quiere ser un altavoz que anuncie el Consuelo de Dios a los hombres. Nahúm quiere ser una obra, primordialmente musical, que toque el corazón y rompa las barreras que impiden sentirse cercano a la palabra de Dios, haciéndola presente en la vida de todo aquel que se pare a escuchar sus letras. Como jóvenes del Movimiento Consolación, ¿qué ha supuesto para vosotros esta experiencia? Víctor nos explica que para él ha significado un indagar un poco más en nuestro ser Consolación, ha sido un viaje a través de 25 canciones que nacen del gozo de sentirse Consolados por Cristo y del sentirse Consolación para nuestros hermanos. Paula comenta que ha sido muy enriquecedora especialmente a nivel personal, por haber convivido con personas que ya conocía y otras que no, y poder juntos compartir risas, música, oración y fe. La conexión entre todos ha sido desde el primer momento muy especial puesto que es un proyecto del que nos ilusionaba mucho formar parte.
por Adrian Casabó
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
c o n s o l a c i ó n
Y para ti Aurora, como Hermana de la Consolación, ¿qué ha supuesto esta experiencia? Ha sido como recibir un regalo inesperado con lo que ello supone de expectación, alegría e ilusión. Durante este tiempo que llevamos caminando, desde julio de 2013 hasta ahora, hemos tenido ya cuatro encuentros, hemos ido creando lazos entre nosotros a través de la música, los momentos de oración y profundización, la preparación de materiales de las canciones... que nos han ayudado a consolidar el grupo y a tomar conciencia de la tarea que llevamos entre manos. Es una experiencia que me ayuda a crecer personalmente y en grupo.
¿Creéis que Nahúm puede ser una buena manera de difundir entre la juventud la alegría de la fe? Por supuesto que sí, asegura Paula. La música nos envuelve en el día a día, a todas horas hay música por todas partes y más entre los jóvenes. Por ello pienso que es un gran atractivo para promover la fe especialmente entre este sector. El principio de Nahúm son estos CD’s pero continúa dando cabida a cualquier proyecto musical a los jóvenes y para los jóvenes. Bueno, eso pretende, apunta Aurora. Siento que es un reto el mostrar y difundir el Evangelio a través de la música y hacer que cada uno pueda hacerla resonar en su vida cotidiana, en el momento que vive. Como nos dice el Papa Francisco en su exhortación Evangelii Gaudium “somos invitados a aceptar este llamado: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio” (EG20).
Por último, Víctor espera que Nahúm consiga llevar la Fe a donde otros medios de comunicación no saben o no pueden llegar. En palabras de Víctor Hugo: “la Música expresa aquello que no puede decirse con palabras pero no puede permanecer en silencio”. Así se quiere expresar Nahúm, llegando a rincones del corazón y del entender humano, que de cualquier otro modo, sería mucho más difícil.
13
n º
1 1 0
Consolación
R E V I S T A
Desde el pasado 12 de marzo, un grupo de hermanas de diferentes nacionalidades y trabajos apostólicos diversos, nos hemos reunido en Santiago de Chile para el Curso de Renovación espiritual Avanzamos. Esta etapa especial de formación está siendo un tiempo que nos ayudará a responder de nuevo a ese grito que con fuerza cada uno de los miembros de la Familia Consolación escuchamos: “consolad, consolad a mi pueblo, hablad al corazón del hombre”. Aunque te vamos a contar brevemente cada una nuestra experiencia queremos presentarnos como grupo: Margot Vergara (Chile), Abril Evelinda Carrero (México), Sandra Rizzoli (Brasil), María José Gómez (España), María José López (España), Rosa Kim (Filipinas-Cebú), Agnes Min (Corea), María Vásquez (Corea), Reme Santiago (España), María Salome Illescas (Ecuador), Marisa Dauder (África) junto con Mª Josefa Carmona y Milagro Gómez que forman parte del Gobierno General y nos acompañan en esta andadura. Comenzábamos nuestro curso con una invitación clara del Señor a “pasar a la otra orilla” (Mc 4,35-41), la orilla desconocida donde se dan diversas experiencias y un momento único de compartir con el Otro. Muchos han sido los momentos compartidos en este tiempo: momentos de oración, de estudio y reflexión, la oportunidad de participar en una formación intercongregacional con religiosos/as de otras nacionalidades y culturas, el encuentro con las hermanas de algunas comunidades de Chile, etc. Todo nos ayuda a adentrarnos en este ser Hermanas de la Consolación desde nuestra propia vocación, a afianzar esa entrega sin reservas al Dios que nos hace en medio de nuestro mundo Instrumentos de su Misericordia y Consolación. Acercarnos a varias realidades pastorales de esta ciudad también ha sido un momento importante dentro de este curso AVANZAMOS: la cárcel de mujeres, los Hogares de Cristo, el compartir en las comunas más pobres de las periferias, el poder ayudar en Semana Santa en Valparaíso tras el grave incendio.
14
Formación El paso del Señor en la vida... “Gracias, Señor, porque Tú eres un Dios que me amas profundamente y conoces lo más hondo del corazón, con todo lo que tiene de fragilidad y belleza. Eres un Dios que me haces caminar cada día mirándote y, como Tú, entregándome con alegría para Consolar, donde me llevas a ser signos de tu misericordia y consolación. Son muchas las experiencias vividas, contempladas, palpadas, donadas y recibidas a lo largo del camino recorrido hasta hoy. Tu paso, Señor, en mi vida va abriendo puertas, rompiendo fronteras y esquemas. Son tantas las historias de vidas recibidas como regalos, personas que de alguna manera fueron signos de Dios en mi camino, (hermanas, destinatarios, jóvenes, alumnos, padres, profesores...) ayudándome a vivir con alegría la pertenencia a Ti...” (Sandra Regina Rizzoli, Brasil) Mi experiencia, aquí en Chile, tiene la fuerza de un sueño realizado. En los años de mi juniorado, en un encuentro de formación, fuimos invitadas a leer un cuento de Mamerto Menapace: “La historia de los tres arbolitos”. Os lo recomiendo. Termina diciendo algo así: “Nuestro sueño, tal vez no se realicen como soñamos, pero Papá Dios está comprometido con ellos, así que su cumplimento superará lo que nosotros nos atrevemos a imaginar.” Desde niña he soñado pisar tierra americana. Cuando recibí el traslado a Burkina Faso pensé: “Dios realiza los sueños a su manera”. Este traslado me dio la oportunidad de cumplir otro sueño: trabajar por los más pobres. Siendo novicia tuve la posibilidad de conocer la vida de un santo chileno: Alberto Hurtado, jesuita. Todos estos años él ha ayudado a Mª Rosa Molas a cultivar mi espíritu, haciendo crecer mi amor a Dios y a los hermanos. La Congregación nos ofrece un espacio para orar más, leer con tranquilidad, estudiar y acoger el pensar y sentir de la Iglesia y de la Congregación. ¡Y cómo no!, encontrarnos las hermanas que hace 14 años nos conocimos en la preparación para los Votos Perpetuos y disfrutar de la fraternidad. ¿QUIEN SE ATREVE A SOÑAR? (Mª Luisa Dauder, Burkina Faso)
Vengo de la comunidad de Cebú, desde Filipinas. Este curso “Avanzamos”, nos invita a vivir con mayor intensidad el sentido de la Vida Consagrada en un ambiente fraternal como hermanas de la Consolación. Muchos de los talleres que tenemos, nos hacen redescubrirnos y conocernos más para fortalecernos en el Carisma y la Misión y teniendo una espiritualidad más profunda de la Consolación. Doy gracias a Dios y a la Congregación que nos regaló este tiempo en el que voy renovando mi vida con el deseo de ser más de Dios con mis hermanas. Rosa Kim Misuk, Cebú
“El Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas”. Así es como está siendo mi experiencia de este Curso de Renovación que la Congregación nos ofrece con tanta generosidad. Sólo palabras de agradecimiento salen de mi boca para expresar mi alegría por este tiempo, por estas Hermanas que pone en este camino, por Milagro y por M. Josefa, por su gran disponibilidad, por su acogida, por su tiempo y por lo que supone de abandono a la voluntad de Dios. Gracias, una vez más, a Dios y a la Congregación por acompañar, por ser Camino, por ser Fuente en la que poder saciar la sed. Mª José López Lorca- Villacañas A lo largo de estos meses en Santiago de Chile, el Señor me está regalando una nueva oportunidad de encontrarme con Él, con la Palabra, con el carisma, con la hermanas… Un impulso para seguir consolando a su pueblo por el camino que en su día inició una gran mujer: Mª Rosa. Siempre adelante, AVANZANDO por aquello que realmente merece la pena, Jesús y su Reino. Reme Santiago (España) Lo que está siendo para mí esta experiencia podría resumirse en un texto de resurrección, aquel en el que Jesús se aparece a las mujeres que habían ido al Sepulcro (Mt 28,9-10). Como aquellas mujeres, siento que este momento está siendo un salir al encuentro del Señor y encontrarme con la sorpresa, con la alegría de que está resucitado. Es un momento para tener la valentía de acercarme a Él, de postrarme y de dejarle que él también se acerque a mí. Es una invitación clara, de volver a lo esencial, de anunciar con urgencia que está vivo en medio de nuestro mundo. Un tiempo donde gestar la vida que late dentro para dar nueva vida. María José Gómez (Sevilla)
P a r a
e l
m u n d o
y me invita a ir a la otra orilla. Yo me pongo en sus manos. Confío. Y espero hacer un equipaje nuevo para ir “a mi pueblo” nuevamente. Agnes Min (Corea) “...Yo, te Amo, Tú Eres Mía...” La experiencia de vida que me regala Dios en este curso de “Avanzamos” es única y enriquece mi ser; espacio sagrado donde nos habita Él, lugar donde se gesta la vida fraterna en la diversidad, que es apertura a lo nuevo, que enriquece la manera de pensar y vivir. Espacio para amar mi historia personal. El Espíritu que “hace siempre nuevas todas las cosas” me invita hoy a asumir el icono de Betania, como casa de encuentro, comunidad de amor y corazón de humanidad. Con Jesús Maestro aprendo a ser más humana y más prójimo; con Marta, a profesar la fe y servir; con Lázaro a pasar de la muerte a la vida y a caminar en libertad del espíritu; con María a quebrar los frascos y a derramar el perfume de la escucha y del amor. Señor, que yo sepa escucharte donde la vida clama y pueda ser “casa” abierta para todos. María Salomé Illescas (Ecuador) Cuando llegué mis expectativas eran descansar, recargar fuerzas, actualizarme en algunos temas de espiritualidad, discernir algunos asuntos. Han pasado 2 meses y soy la misma, algunas cosas en mí se han trasformado. Quiero más otras realidades del Instituto y de la Iglesia chilena; me empiezo a visualizar formando la provincia con hermanas de otras nacionalidades. Ha sido un tiempo de vivir en la pregunta profunda y en la íntima amistad con Jesús, con mi comunidad y con la gran COMUNIDAD (Valparaíso, otros Institutos, Iglesia, el mundo…) ¿Con qué me quedo después de este tiempo? Me llevo un argolla cargada de llaves para entrar a mi corazón; unos juegos de lentes para leer la vida; una comunidad más grande; un botiquín para curar heridas a mí misma y me llevo de nuevo a Jesús y su BUENA NOTICIA. Abril Evelinda Carrera (México)
Para mí el AVANZAMOS . . . Es una experiencia de ser una mujer Samaritana en pleno “mediodía de la vida apostólica” acudiendo al Pozo a sacar el Agua viva. El Señor me pregunta por mi vida personal, me interpela
15
Consolación
c o n s o l a c i ó n
Consolación
R E V I S T A
n º
FestivalVida Samuel 2013 de grupos
1 1 0
PASCUA CAMPINAS 2014
En la ciudad de CAMPINAS –São Paulo– Brasil El pasado día 17 de abril JUEVES SANTO tuvo lugar en el salón de la parroquia de Santa Teresiña, la “VIGILIA DE JÓVENES”. Unos 150 jóvenes bajo el lema: “FOI POR VOCÊ: SEGUI-ME”. Comenzamos acompañados por una reflexión-oración del padre Wilson que nos ayudó tomar conciencia de Quién es el que lo está dando TODO por cada uno de nosotros. Continuamos con una reflexión sobre el seguimiento del discípulo preparada por el seminarista diocesano Cleber. Luego, nos dio su testimonio Marcos de Fogo, un joven católico cuya vida está marcada por una fuerte experiencia de paso de la esclavitud a la libertad. También, tuvimos una dinámica de reflexión y profundización por grupos orientada por la hermana Nati Escudero, para adentrarnos y descubrir el sentido de la vida, su fin último… y cómo podemos cada uno de nosotros seguir a este Jesús que nos pide darlo todo y darlo por amor. El Viernes Santo el grupo de jóvenes de Santa Ana participamos en la procesión del Señor muerto por las diferentes calles de la ciudad de Campinas. El grupo de jóvenes participó en la procesión con la representación “teatral” de la “Vía Sacra”. Para mí fue un honor poder
Pascua en Caspe
representar e interpretar la clásica melodía de la Verónica. ¡¡¡¡¡RESUCITO!!!!! El grupo de jóvenes representamos la obra musical “O canto das Irias”, un musical protagonizado por los jóvenes que estuvieron en la JMJ de Brasil esos que abren a Dios sus vidas para descubrir qué quiere Dios de ellos. “O Canto das Irias” es una obra que pertenece a la comunidad católica chalón, cuyo argumento es destacar cómo el ser humano, cuando se aleja de Dios, pierde o desvirtúa su capacidad de amar, y sólo en el encuentro con Cristo vuelve a ser una criatura nueva descubierta en gracia, belleza y verdad, es una persona nueva, resucitada. El musical va mostrando ese proceso de abandono y reencuentro con Cristo el Resucitado. Para mí ha sido una bendición poder tener con cada uno de ellos esta experiencia de preparar y vivir juntos este tiempo tan significativo y crucial que no ha pasado desapercibido por ninguno de nosotros y que como todo lo de Dios… comienza a ser ”un sueño sin fin”.
“Al ritmo de los tambores” Por cuarto año, las Hermanas hemos podido participar de la Pascua en Caspe (Zaragoza), un pueblo que desde hace varios años nos acoge como a los suyos. Los Oficios del Jueves y el Viernes, la Hora Santa con los más jóvenes, las procesiones, el Vía Crucis, la Vigilia,… nos hacían compartir fe y vida con los que son y se sienten cada vez más consolación. Al ritmo que marcan los tambores se vive la Semana Santa en Caspe, y se respira ese no sé qué que habla de algo más que una tradición o una afición. Y sobre todo, ese calor de hogar en los que una vez más abrieron sus puertas (las de sus casas y las de sus vidas) para que pudiéramos hacernos un huequito en lo sencillo y lo auténtico del día a día, que es donde nos encontramos con la verdadera Vida, la del Resucitado.
16
Irmã Nati Escudero-São Paulo - Brasil
P a r a
e l
m u n d o
PASCUA ESPINARDO 2014
“Porque estuve en la cárcel y vinisteis a verme…” Este año hemos tenido la oportunidad de vivir una Pascua de Servicio en Espinardo-Campos del Río. Éramos unas 30 personas, dos Hermanas de la Consolación, una Hija de la Caridad, dos Hermanitas de la Asunción, una Hermanita de Jesús, un Padre Paul y un sacerdote Diocesano, el resto éramos laicos. Por la mañana íbamos al Centro Penitenciario de Campos del Río y celebrábamos en la Prisión el Triduo Pascual, por la tarde participábamos con la gente del Barrio del Espíritu Santo en las celebraciones de la Parroquia. Vivir el Jueves Santo con los internos es vivir el Lavatorio de los pies cada vez que uno de los internos ayuda a otro a sobrevivir un nuevo día. Vivir el Viernes Santo junto a ellos, es abrazar la Cruz en la que viven cada día que cumplen su condena. Resucitar en la Prisión es decir SÍ a la Libertad
de sentirnos hijos de Dios, de sentirnos amados por Él, de pensar, de imaginar, de amar al hermano. Cuando estas palabras las escuchas de un interno, jamás olvidas su rostro, te sientes llamado a rezar por él cada día. Gracias a los 950 internos de la prisión de Campos del Río, por compartir sus vivencias y testimonios de vida con nosotros. Gracias por recibirnos con una sonrisa. Gracias a Dios porque nunca se olvida de quién carece de Libertad. Gracias a las personas del Barrio del Espíritu Santo que nos abrieron las puertas de su Parroquia, compartiendo con nosotros su oración, su trabajo pastoral y esas monas de Pascua, rosquillas y chocolate, que nos endulzaron la Noche más grande del año. Tete (Caravaca)
PASCUA VALENCIA 2014
Me habéis descubierto un mundo que desconocía... Esta Semana Santa un grupo de jóvenes hemos vivido la Pascua en casa de las Hermanas de la Consolación. Éramos un equipo de 17 voluntarios con un grupo de chicos y chicas con capacidades especiales y sus familias, de la Comunidad de Fe y Luz
Para mí era la primera vez como voluntaria, y era algo que desconocía. Lo que más ilusión me hizo es que esa Pascua estaba dedicada a personas discapacitadas que necesitaban de mi ayuda, e iba a poder reflexionar sobre mi interior y conocer más a Dios en mí.
Para muchos de los voluntarios era su primera experiencia con personas con discapacidad; es una situación que asusta porque tienes que hacerte responsable de personas con síndrome de William, Coen o Down; otras con retraso mental o con movilidad muy reducida y sin ninguna experiencia…, pero lo que más asustaba es que ellos confiaban ciegamente en nosotros. Ellos nos descubrieron un mundo que desconocíamos.
Llegué allí y en solo el primer día con ellos se me abrió el corazón. Ver cómo estas personas son felices y consiguen lo que se proponen me ha servido de mucho, porque te das cuenta de que hay que apreciar lo que uno tiene y aceptarse tal y como eres.
Han sido ellos los que nos han acercado a Dios, con sus limitaciones nos han hecho ver las nuestras porque son espontáneos, abiertos, no tienen miedo a compartir sus experiencias, su dolor; cuando sonríen es que están contentos, si se enfadan o están tristes te lo hacen saber, la doble cara no existe para ellos. Nos han hecho romper con nuestro ritmo y adaptarnos al suyo; y estoy feliz de cómo todos los voluntarios han sido capaces de hacerlo.
Tanto ellos como sus familiares le dan gracias a Dios en sus vidas por lo que tienen, y por como son. Gracias a su fe van superando las pequeñas dificultades y nunca se rinden. María (Espinardo)
El Domingo de Resurrección han preguntado ¿Podemos repetir el año que viene? Para mí esto es la alegría de la Pascua. Amparo Gosálbez (Valencia)
17
Consolación
c o n s o l a c i ó n
Consolación
R E V I S T A
n º
Vida de grupos
1 1 0
PASCUA MISIÓN 2014
“Me amó y se entregó por mí” Son sentimientos que me mueven cada año para ir de misiones y compartir con el pueblo. Este año fui a la comunidad de Maluay y Conchán de Milagro con el joven Emmanuel Sarmiento de décimo de Básica, los días 17, 18, 19 de Abril. Ha sido una experiencia maravillosa; las personas nos han compartido todo lo que tienen en sus casas y sobre todo la vida espiritual. Iniciamos nuestra misión con la celebración de la Última Cena, primero en la comunidad de Maluay y luego en Conchán de Milagro; después la adoración del Santísimo en la comunidad de Conchán de Milagro hasta que amaneció. El día Viernes fuimos de visita a los hogares, sobre todo de las personas ancianas y enfermas; al contemplar el rostro de estos ancianos se contempla el mismo rostro de Jesús. Luego, por la tarde, para realizar el vía crucis nos unimos las dos comunidades, terminando con la reflexión de las siete palabras, la adoración de la cruz y la comunión. Sábado por la mañana la comunidad de Maluay recibía a los enfermos y ancianos de las comunidades cercanas para recibir la unción de los enfermos de manos del Párroco Bolívar Jiménez, quien les exhortó a vivir en la presencia de
Dios y aprovechar estos sacramentos como regalos suyos. Luego les dimos almuerzo a todos los ancianitos que fueron a la Iglesia. Por la tarde vimos la película de la vida de Jesús y se hizo la entrega de los alimentos y ropa que habíamos llevado a las comunidades, quienes recibían con mucha gratitud y alegría. Por la tarde se llevó a cabo la Vigilia Pascual, primero en la comunidad de Conchán de Milagro y luego en Maluay, con la bendición del fuego, la renovación de las promesas Bautismales y la comunión. La gente nos agradeció por haber compartido estos tres días con ellos y a la vez nos invitaban para que los acompañemos los otros años venideros. Llegando a mi comunidad nos encontramos con los jóvenes misioneros que fueron a PucaCruz y compartimos un momento sus experiencias de misión. Cada uno regresó feliz. “Lo que más nos sorprende es la hospitalidad y cercanía de la gente. Para nosotros es una experiencia muy grata. Ver y descubrir cómo se vive la fe, aquí se ve y se siente la presencia de Dios”. Hna. Doris María Romero Aguirre Comunidad del Valle Cuenca - Ecuador
PASCUA CAMPILLO DEL RIO 2014
“HE VISTO AL SEÑOR, HA RESUCITADO”
Junto con María Magdalena podemos gritar que realmente” he visto al Señor y está resucitado”. Sí, el Señor se manifiesta en lo pequeño y así lo he podido constatar nuevamente en la Pascua de estos pueblos de Jaén, Torreblascopedro y Campillo del Rio. Es el octavo año que acudo a celebrar el Triduo Pascual en estos pueblos y es bonito ver cómo, desde el primer año, Dios se va manifestando y va bendiciendo el trabajo de las Hermanas, principalmente en Campillo. Me llena de gozo el ver que la gente va tomando conciencia de lo que significa celebrar este misterio tan grande como es que todo un Dios muera y resucite por nosotros. También me doy cuenta de que los fieles de la Parroquia acuden a los actos litúrgicos con deseos de vivir en profundidad y con gozo estos días. Que el primer año el templo estaba medio vacío y en la Vigilia Pascual de este año prácticamente lleno. Que te dicen desde lo más profundo de su corazón: “HERMANAS NO NOS DEJEN, QUE USTEDES NOS AYUDAN A VIVIR MEJOR TODO ESTO DEL SEÑOR”.
18
Es motivo de dar gracias a Dios por su obra y seguir pidiendo para que la presencia de las hermanas en estos pueblos fructifique en vocaciones para la Iglesia. Que siga bendiciendo a cada una de las personas para que cada día que pasa le amen más. Nosotras somos meros instrumentos en sus manos.
P a r a
e l
m u n d o
PASCUA Forcall 2014
“Apasiónate”
Durante el Triduo Pascual nos hemos reunido en Forcall 7 jóvenes y dos hermanas de la Consolación procedentes de Castellón, Reus, Tortosa, Valencia y Villacañas. Bajo el lema “Apasiónate” hemos querido ir viviendo junto al Señor este Misterio apasionado de su Amor por cada uno que quiere provocar en nuestra vida una respuesta de entrega y de servicio, de testimonio con nuestra vida de lo que Él hace cada día por nosotros. Una experiencia impactante ha sido el preparar y compartir los Oficios de este Triduo Pascual con diferentes Comunidades cristianas, en Olías del Rey, principalmente y en Forcall, tanto en la Parroquia como en la Residencia de personas mayores de este pueblo. La sencillez y la acogida de estas gentes que viven en poblaciones muy pequeñas, la entrega generosa del sacerdote que atiende fielmente y desde el silencio cinco pueblos diseminados en estas montañas, el poder colaborar en el anuncio del Evangelio nos ha ayudado muchísimo a sentirnos Iglesia y salir a evangelizar con nuestra palabra y nuestro gesto.
Tras la oración de envío del Domingo de Resurrección fuimos a Morella a compartir con las hermanas de la Residencia de mayores la comida de Pascua y la experiencia vivida en estos días. “Para mí la Pascua de Forcall ha sido un atreverme a hacer un alto en el camino, un tratar de concentrarme y profundizar en todas las experiencias de muerte y resurrección que vivo día tras día mirándolas desde el prisma de la esperanza y la certeza de que la VIDA en mayúsculas es posible si nos atrevemos a caminar de la mano de Jesús. Esta Pascua ha supuesto para mí el descubrir realidades de la Iglesia que desconocía y que me han ayudado a sentirme más parte de ella” Reme Spí- Valencia “La Pascua en Forcall ha sido un intento constante de interiorizar y ser consciente del camino de seguimiento y acompañamiento recorrido por María y sobretodo de percatarme de su ACTITUD ante el dolor y el vacío y su capacidad de atravesarlo con esperanza.” María Rosa-Reus
PASCUA Villareal 2014
“Una Pascua diferente” En la parroquia de Franciscanos de Vila-real hemos vivido una Pascua Joven que para mí ha sido vivir una Pascua con sentido, compartiendo los días más intensos para un cristiano junto a otros jóvenes como yo. Ha sido poder experimentar momentos de oración, Eucaristía, cantos y reflexión en un clima de fraternidad, alegría y amor, que han caracterizado nuestra Pascua. Un AMOR en mayúsculas que atraviesa barreras, que supera obstáculos y que se ha hecho presente en cada uno de los instantes vividos. Ha sido acompañar a Jesús en su camino hacia la Cruz, sufrir junto a María el dolor de una madre a quien arrancan las entrañas, y abrirme a ese sufrimiento trayéndolo a mi vida, a mis preocupaciones, a “mis dolores”.
Animo a todos los jóvenes a participar en las actividades de alguna Pascua y a descubrir en ella lo que están buscando y a dejarse sorprender por lo que Dios seguro les va a regalar. María Serrano Font
Pero, sobre todo, ha sido sentir la alegría de la Resurrección, dejarme empapar por el Espíritu de Dios, permitir que la luz irradie cada rinconcito de mi alma. En definitiva, me he sabido unida a los demás jóvenes por un mismo fin, sentirnos hijos de un mismo Padre.
19
Consolación
c o n s o l a c i ó n
Consolación
R E V I S T A
n º
1 1 0
Familia Consolación
delwende Hace apenas unas semanas hemos celebrado un encuentro muy deseado por todos los que nos sentimos parte de esta familia: la Asamblea anual de DEL-WENDE. Tanto en las informaciones que nos llegaron de parte de los miembros de la Junta central, como en las conversaciones informales entre pasillos, resonaba un sentimiento común: Delwende tiene vida, mucha vida, gracias al entusiasmo, a la creatividad y a la labor incansable de cada una de las Delegaciones y de los voluntarios, que de manera gratuita y constante, van poniendo su granito de arena para que esta obra siga consolidándose. Mientras recordaba el transcurrir del año pasado para informar a los participantes, me venía a la mente una canción ya vieja: “Yo vi reír a Dios”. Sentíamos que se apretaba el corazón y parecía que no íbamos a llegar, pero, como por arte de magia, se recuperaban los fondos y ningún proyecto ha quedado sin atender.
Me atrevo a pensar que en este año Dios ha reído muchas veces a costa nuestra. Ha debido reír al ver que no nos salían las cuentas y hemos caído en la tentación de sufrir por no confiar del todo en la divina providencia. En estos tiempos de crisis, a muchos de nosotros, sobre todo a los miembros de la Junta Central, en algunos momentos se nos oscurecía el horizonte: llegaban peticiones, proyectos… y las arcas de Delwende estaban vacías. Hoy el mundo entero mira y escucha con atención al Papa Francisco cuando habla de solidaridad y opción por los pobres y a mí me alegra pensar que, gracias a los socios, a los voluntarios, a las Delegaciones Locales, a tanta gente buena… en nuestra ONG la palabra solidaridad hace tiempo que se escribe con mayúscula. Tenemos la certeza de estar escribiendo otra página de la historia, una página en color verde, en color de esperanza; esa historia que se vive en el corazón de cada socio, de cada delegación y que se escribe con el lenguaje de los signos más variados: deporte en familia, cena solidaria, maratón, festival, mercadillo solidario, fiesta de los abuelos… una historia que en algún lugar de la geografía consolacionista leen con inmensa gratitud porque les cambia la vida. Y la vida continúa, está siempre por delante. Ahora tenemos como proyecto inmediato unir nuestras pequeñas manos a todas las manos del mundo que trabajan por dignificar la condición de la mujer, educando, promocionando, valorando… Pronto nos llegará más información sobre la próxima campaña y ojalá que todos nos impliquemos porque en verdad, como dice el lema: “De ella depende el futuro de muchos”
familia Consolación
Mª Dolores García Gómez
20
c o n s o l a c i ó n
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
Noticias Noticias
¡¡Ya es oficial… Somos COM!! El pasado domingo, 23 de marzo de 2014, en la residencia de Santa Fe, y acompañados por las Hermanas, nuestros familiares, amigos y residentes, celebramos una bonita y emotiva Eucaristía como inicio del Año Vocacional. Durante la celebración las Hermanas renovaron sus Votos. Ade, una de las laicas de la Consolación de Granada, que nos acompañó junto a su familia, también renovó su compromiso como laica Consolación. Además se produjo la incorporación de nuestro grupo de jóvenes al COM, momento en que Javi y Ana nos impusieron los pañuelos azules. Azul, porque después de tantos años conociendo a la Madre y a las Hermanas nos sentimos preparados para dar un paso más en nuestra Fe, para marcarnos un compromiso más férreo y sincero, sintiendo la “Sed de la Consolación”.
Lar de Santana – Matosinhos “Cruz Peregrina” No passado 23 de Marzo os voluntários e grupo de oração fomos convidados pelas Irmãs da Nª Srª da Consolação a refletir no III Domingo da Quaresma o encontro de Jesus com a Samaritana, no Seminário da Boa Nova, em Vila Nove de Gaia. Iniciámos os trabalhos dirigidos pela Irmã Virgínia, com a oração de Laudes. Seguiu-se uma palestra pelo Frei Joaquim Augusto. Ele referiu nos que somos agentes de misericórdia e não apenas voluntários. Acabamos a Jornada com a Eucaristia. Também, no passado dia 4 de Abril, a Capela do Lar de Sant’Ana, em Matosinhos, acolheu os fiéis que quiseram orar junto da “Cruz Peregrina”, que esteve presente nas Jornadas Mundiais da Juventude, realizadas em 1987, na Argentina, presidida pelo Papa João Paulo II. A “Cruz Peregrina” partirá para o Vaticano, para estar presente no próximo dia 27 de abril, data em que João Paulo II irá ser canonizado.
MISIÓN COMPARTIDA El I Encuentro de Laicos en Misión Compartida se promueve ante la necesidad de concienciar, reflexionar, visibilizar y celebrar la dimensión eclesial de un laicado en “misión compartida” con la Vida Religiosa, que vive la fe desde la espiritualidad y el carisma de diversas familias religiosas. Más de mil personas acudieron al mismo, que se celebró el 22 de marzo en el Colegio Nuestra Señora del Recuerdo-Madrid. Recibieron la bienvenida de Monseñor Carlos Osoro, Presidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar y Arzobispo de Valencia quien subrayó que la Iglesia se debe hacer presente en el mundo de manera organizada; a través de los laicos y de las diversas instituciones, debe hacerse visible para mostrar al mundo que estamos sostenidos por el amor de Dios. En la mesa de diálogo se reflexionó sobre quiénes son los laicos y su papel en la Iglesia. María Dolores López Guzmán afirma que “compartimos lo esencial pero no somos lo mismo”. Sin embargo, “el punto fundamental que sostiene el edificio es que los fieles laicos somos personas que deseamos profundamente que nuestro vivir esté tejido y estructurado por la fe”. Por su parte, Chema Pérez Soba recordó el carácter de fraternidad que supone la misión compartida: “los laicos multiplican la vida. Compartimos mucho en misión, y organizamos mucho y bien, pero echamos en falta compartir la vida que mueve esa misión. Nuestros carismas son complementarios pero necesitamos saber quiénes somos. Y, aunque somos frágiles, la fragilidad compartida nos hace muy fuertes”. En la jornada se explicó también el papel de los laicos en los diversos ámbitos: social; educativo, cultural y medios de comunicación; pastoral, sanitario, familia, trabajo y ciudadanía, liderazgo, etc. El cantautor Migueli animó la tarde con un concierto muy participativo. El encuentro continuó con el trabajo de los talleres para terminar con la celebración de la Eucarística que presidió Monseñor Carlos Osoro.
21
Consolación
R E V I S T A
n º
1 1 0
Orar con... - Carmen Aloys
¡QUIERO SER LIBRE! ¿Libre…?¿Libre de quién? ¿Libre para qué…? «La libertad es el bien más noble de la naturaleza, propia solamente de los seres inteligentes, da al hombre la dignidad de estar “en manos de su propia decisión” y de tener la potestad de sus acciones. El hombre alcanza su dignidad cuando, liberado totalmente de su propia cautividad, tiende a su fin con la libre elección del bien, y procura para ello los medios adecuados, con esfuerzo y eficacia crecientes» (León XIII). “…ustedes, hermanos, han sido llamados a la libertad; solo que no usen la libertad como ocasión para la carne, sino para servirse por amor los unos a los otros”. Gal. 5,13 “Si permanecen en mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos y conocerán la verdad, y la verdad les hará libres”. Jn 8, 31 “¿Señor a quién iremos? Sólo Tú tienes palabras de vida eterna” Jn.6, 68 Este regalo de Dios, a veces nos pesa, no sabemos encauzarlo y terminamos esclavos de nosotros mismos; otras veces se convierte en un reclamo constante que hacemos a los demás, pero resulta que los primeros acaparadores de nuestra libertad somos nosotros. • ¿Tenemos miedo a nuestra propia libertad? • ¿Cómo es que la libertad resulta para muchos una meta ansiada, mientras que para otros no es más que una amenaza? • ¿Puede la libertad volverse una carga demasiado pesada para el hombre, al punto que trate de eludirla? • ¿No existirá tal vez, junto a un deseo innato de libertad, un anhelo instintivo de sumisión? Ser sumisos es estar prestos a cumplir los deseos y la voluntad “de otros”: ¿nuestras emociones?, ¿nuestros sentimientos?, ¿nuestras conveniencias?… sin capacidad para “discernir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo que a Él le agrada, lo perfecto” lo que construye(Rm 12,2) Busca en tu interior: serénate, pacifícate… respira profundo, controla tus emociones y tus pensamientos.
22
Permanece en esta actitud un rato largo… ahora, deja que aflore a tu mente y a tu corazón la imagen, el rostro de Jesús… su rostro sudoroso y cansado bajo el sol de Galilea… ¿cuál era la lucha de Jesús? ¿Por qué motivos o razones se jugó la vida, su tranquilidad, su comodidad? ¿Por qué le sigue la gente?Da vuelos a tus recuerdos y a tu imaginación… Escucha atentamente su voz: “El sábado se hizo para el hombre, no el hombre para el sábado” “los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio “(Mt. 11.5). “… ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó en manos de los salteadores?» Él dijo: «El que practicó la misericordia con él». “Le dijo Jesús: «Vete y haz tú lo mismo»”. “…el que esté libre de pecado que tire la primera piedra…” La opción primordial de Jesús es a favor del hombre, esto le costó la vida… La muerte liberadora de Jesús no queda encerrada entre paredes raciales, sino que las trasciende totalmente y salta al universo entero. Su acción liberadora nos llega a todos, atraviesa el tiempo, las fronteras de los hombres, los muros de la humanidad y nuestras propias prisiones. Ora y agradece al Señor, pídele usar bien de tu libertad, aprende a ejercerla y a gozarla: Cristo nos da la libertad, Cristo nos da la salvación Cristo nos da la esperanza, Cristo nos da el amor Cuando luche por la paz y la verdad, la encontraré Cuando cargue con la cruz de los demás, me salvaré Dame Señor tu Palabra, oye Señor, mi oración.
TODOS LOS DÍAS DE MI VIDA (The vow) Inspirada en hechos reales nos cuenta la historia de una pareja que, poco después de casarse, tiene un accidente de coche. Debido a ello, la mujer se queda en estado de coma. Cuando despierta, no se acuerda de su matrimonio ni de quién es su esposo, de tal modo que éste tendrá que conquistar de nuevo su corazón. Un reto que pondrá a prueba su visión del amor, sobre ser fiel a uno mismo y sobre esa parte sagrada de toda ceremonia matrimonial, el voto que la pareja se hace el uno al otro: en la salud y en la enfermedad, todos los días de la vida, hasta que la muerte los separe. Profundizamos en torno al compromiso: -PERSONAL. Vivir siendo fiel no es algo que se improvisa. Revisa tus pequeños compromisos de cada día: Estudio, trabajo, familia, crecimiento personal, amigos, grupo de fe... ¿cuál es tu respuesta? ¿actúas con responsabilidad en lo que te has comprometido? -DE FE. ¿Cómo es tu vivencia de fe? ¿En qué aspectos de tu día a día experimentas la relación fe-vida? ¿A qué te compromete? -A NIVEL DE PAREJA. ¿Vives la etapa de noviazgo como búsqueda de lo que Dios quiere para ti? ¿lo recibes como don de Dios para cuidar y vivir el amor al estilo de Jesús? ¿Experimentas tu matrimonio como lugar de crecimiento en los valores del evangelio? PARA PROFUNDIZAR Y REZAR: «Ser fiel no es sólo tener aguante, sino crear todos los días aquello que uno prometió un día. Yo prometo algo hoy para cumplirlo mañana, en un momento en el cual puedo tener sentimientos distintos de los que abrigo en la actualidad. Por eso prometer implica siempre riesgo. Pero este riesgo constituye la grandeza del que sabe prometer y cumplir lo prometido, porque esta fidelidad supone que uno está por encima de los avatares del tiempo y los sobrevuela con soberanía de espíritu…» (Alfonso López Quintás)
P a r a
e l
m u n d o
Consolación
c o n s o l a c i ó n
Tiempolibre libre Tiempo
La educación compartida
Luis Fernando Vílchez PPC En qué momento comprende un hombre que su intervención vital en la realidad es un legado? Para un educador, cuya tarea vocacional es precisamente transmitir el legado recibido de sus maestros y enriquecido por él mismo, tal vez el momento de inflexión –en el que se percibe el destello de la misión cumplida– sea el cambio de situación laboral, el paso de profesor en activo a emérito. Esta circunstancia debe de ser la causa de que Luis Fernando Vílchez nos regale este libro que contiene el tesoro de su legado. Tanto su personalidad como su labor profesional –poliédrica– están impregnadas de una cualidad que ha transformado de una u otra manera las vidas de quienes nos hemos cruzado con él en algún punto del camino. Esta cualidad consiste en algo que me atrevo a llamar la mirada fertilizante. Es una forma de mirar capaz de ver, en todo aquel que se acerca, la semilla de una capacidad escondida y de hacerla brotar. La mirada fertilizante es la quinta esencia de las cualidades de un educador. Y es una de las características más destacadas de Luis Fernando Vílchez. Fue esta mirada la que se que se posó sobre mí hace unos años y me conminó a escribir. Y así, con exigencia de maestro, Luis Fernando Vílchez cambió mi vida, aunque no por primera vez, ya que cuento desde siempre con el tesoro de su amistad generosa. La generosidad –otra cualidad de maestro– impregna también de principio a fin las páginas de este libro, desde el hallazgo de su propio título: la educación compartida. Y pensándolo bien, tiene razón Vílchez al denominarla así. ¿De qué otra manera podría ser? Se trata de transmitir algunas de las experiencias, reflexiones y saberes acumulados en una vida con sentido. Una vida feliz, por tanto, ya que la felicidad solo puede provenir de lo que tiene sentido, de lo pleno. Y se trata también de contar una historia. En la tradición de los grandes pensadores, Luis Fernando Vílchez nos desvela un secreto: el docente, el educador, no es quien imparte instrucción ni quien corrige errores; es sencillamente un ser humano que cuenta historias. Un narrador del mundo, de los logros y saberes del hombre, de su intervención sobre los mecanismos de la naturaleza, de su arte, de su cultura, de los valores que ha escogido para afrontar la vida y explicarse la muerte. La esencia narrativa que subyace en este libro es de nuevo una elección coherente. Sobre todo recomiendo sus recuerdos de quienes le educaron a él: su padre, que fue maestro; su valerosa madre. Una vida para compartir, una educación compartida. Padres y profesores nos vamos a sentir interpelados por esta narración sobre la esencia de la educación, llena de valiosas reflexiones. Quien ame la educación, quien tenga que educar, debe conocer este libro.
23