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Semanario de Evangelización Integral No. 988 - Año XX
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Diócesis de San Juan de los Lagos, Jal. Colaboración: $10.ºº
JUBILEO CIRCULAR DIOCESANO DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO DECANATO 2 LAGOS DE MORENO
24, 25 y 26 de febrero Parroquia Señor del Calvario 27,28 de febrero y 1 de marzo Parroquia Inmaculada Concepción (Moya) Pág. Pág. 94
MISA DE ENFERMOS DECANATO SAN JUAN DE LOS LAGOS
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En la exho rt a c i ó n a p o s t ó l i c a postsinodal “Querida Amazonia”, el papa Francisco expresa cuatro sueño, que aunque están pensados en la realidad concreta de la Amazonia, que abarca nueve países, bien se aplican a nuestra realidad mexicana. En el sueño social el Papa expresa su deseo de la Amazonia integre y promueva a todos sus habitantes para que puedan consolidar un “buen vivir” y en este sentido, advierte, se debe integrar la justicia en las discusiones sobre el ambiente, para escuchar el clamor, tanto de la tierra como de los pobres. En días pasados México ha sido testigo de estrategias de comunicación que buscan callar el clamor de los 34, 582 homicidios dolosos registrados en 2019, de los que uno de cada diez, es castigado, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP); o el grito desesperado de las mujeres ante un sistema que declara que es la misma terminología la que lo incapacita para responder con justicia y celeridad (en 2020 ya suman 265 feminicidios, según la periodista Frida Guerra); o la voz quebrada de los padres de familia cuyos hijos sufren ante un Instituto de Salud para el Bienestar que sabe qué, pero no sabe cómo; se suma, según el INEGI, el crecimiento económico del País durante 2019 de 0.0%; desde luego, todo esto a reserva de otros datos que usted pueda tener.
Consciente de que en estos tiempos no es fácil escuchar, el Papa propone un camino para lograrlo: reconocer la realidad, indignarse y pedir perdón, promover y fortalecer el sentido comunitario; sanear las instituciones dañadas y abrirse al diálogo social. Una definición irónica de la estadística es aquella de que es la más inexacta de las ciencias exactas y que se la dedica a torturar los números para que digan lo que se desea. Ante los datos presentados por uno, el otro siempre podrá argumentar que tiene otros; pero el asunto no es discutir los números, sino reconocer la realidad. Ante esa realidad habrá que indignarse, todo lo contrario a la indiferencia y a subestimar el problema del otro creyendo que “ya se habló demasiado del tema”; si es el caso pedir perdón con acciones concretas que eviten que el error se vuelva a cometer en el futuro. Algo que no hay que hacer es dividir las fuerzas sociales que buscan el bien del País, no se trata de ver cuánto somos diferentes, sino cuánto queremos juntos sacar al País adelante; “a río revuelto, ganancia de pescadores” hay otros que sí están, lamentablemente, bien organizados y con sus estrategias masacran al País.
de los genios anteriores. No se trata de inventar la rueda, sino de aprovecharla para nuevos inventos. No se sanea una institución cambiándole de nombre, ni se debe echar por la borda todo lo bueno que hay simplemente porque “no lo hice yo”. Finalmente, el diálogo implica dos partes en la dinámica, y que nos números reporten excelentes crecimientos en las redes sociales, no significa que se está dialogando con la Nación. En fin, cuánto tiene la exhortación del Papa para nuestro México, y para nuestra Diócesis, que también deberá seguir este camino si quiere ser generadora de un ambiente que favorezca el “buen vivir”.
Dicen que los grandes genios siempre están sobre los hombros
Director y editor: Presbítero Ildefonso García Pérez Formato: Rosa García Pérez Colaboradores redacción: Presbítero Jaime Enrique Gutiérrez Gutiérrez; Presbítero Francisco Escobar Mireles; Pbro. Francisco Isaac Ávalos Navarro; Hna. Margarita Migdalia Cundapí Morales; Silvia del Valle; Luz María Mora. Publicidad: Susana del Carmen Martín Jiménez 01 (378) 712 0490 Capilla de Guadalupe; 01 (474) 742 0915 Lagos de Moreno; publicidad@mensajerodiocesano.com Distribución: Francisco Javier García Pérez.
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"DE LA MENTIRA PIADOSA
A LA MENTIRA POLÍTICA"
El Papa Francisco nos ha dado una exhortación apostólica, documento que tiene validez para toda la Iglesia y que inspira la vida espiritual, pastoral y de santificación de todos los fieles; esta exhortación se llama “Querida Amazonia”, es el resultado de un sínodo que el año pasado se llevó a cabo sobre este lugar y esta cultura. Aún cuando se refiere a un lugar y una cultura concretas, se habla para toda la Iglesia y nos invita, el Papa Francisco, a tener en cuenta las consideraciones que allí aparecen en nuestra vida personal, social. El Papa pone cuatro capítulos, cada capítulo refleja un sueño, que como humanidad y como Iglesia tenemos. El primero es un sueño social, es decir, la presencia del Reino de los Cielos, con sus valores, en todas las realidades sociales. El segundo es un sueño cultural, donde la cultura esté impregnada de esa antropología cristiana que va apoyando la realización del ser humano. Se habla de una inculturación del Evangelio. El tercero es un sueño ecológico, donde la ecología integral, que el Papa ha mencionado en la encíclica Laudato Si, va guiando la vida, las relaciones del entorno y entre nosotros seres humanos. Y el cuarto es un sueño eclesial, donde se habla de los carismas, de la servicialidad que los ministerios en la Iglesia tienen. Hoy les invito a conocer esta exhortación, así como los caminos que el Vicario de Cristo nos invita a tener. También, por otro lado, quiero invitarles a participar, como lo debemos hacer cada miembro de la Iglesia, con nuestro apoyo en las labores caritativas, de solidaridad, formativas, con los que se logran sueños a través del diezmo. El diezmo es una expresión religiosa de cada creyente, desde el antiguo testamento. En el libro del Levítico se nos habla ya de este don, que agradecidos con Dios damos a la fe que pertenecemos. Quiero invitarles a que, a partir de este domingo, podamos apoyar toda la obra de nuestra Diócesis, a través de nuestro diezmo, que consiste en, aproximadamente, un día de salario. Que todo esto sea para agradecer a Dios sus dones, que como Padre Providente nos da; pero también para ser solidarios, como Iglesia, con las actividades pastorales, con los más necesitados que hoy el mundo pone ante nosotros y que Cristo nos pide servir. Que Dios les bendiga. Les encomiendo a María Santísima. +Mons. Jorge Alberto C.A.
Redacción:Pbro. Jaime Gutiérrez Gutiérrez Fotografía: Especiales
Un problema moral (no menor) es la Mentira Piadosa que pretende evitar un daño, de quien miente, o para otros. Y en este afán de una Moral light quisiéramos que los árbitros de moral dijeran que es... casi buena, aunque una mentira no deje de ser una mentira. Pues bien, hoy en México, las mentiras de quienes nos gobiernan, sí, de los mismísimos guardianes del orden y apóstoles de la verdad social del bien común, institucionalmente están mintiendo y sin derecho a réplica porque sólo ellos tienen el micrófono, sin que nadie pueda públicamente disentir o desmentir. De esta manera están, poco a poco, familiarizando al pueblo a recibir con aplauso las no verdades y las falsas acusaciones que se dan en el "Mañanero". Pareciera que se justifican las mentiras políticas, y más aun a un carismático presidente. Prueba de ello son las encuestas altas de simpatía. Para nosotros los mexicanos, las promesas incumplidas no son mentira. Tener otros datos, sin demostrarlos, tampoco es mentira.
Creámosle sólo a la Verdad
Estimados hermanos en el Señor, la paz de Cristo esté en ustedes.
Acusar a personas, sin pruebas, no son falsos testimonios. El insistente optimismo de una economía (a cero crecimiento) ¿es una realidad hecha fantasía? Conclusión: cuidémonos de las mentiras piadosas, y más de las mentiras políticas. No se gobierna con buenas intenciones y seductores discursos de amor y paz. No basta señalar a los delincuentes sin tenerlos, con una justicia pronta, en la cárcel. No avanzamos si también avanza la violencia. Creámosle sólo a la Verdad, tal y como nos lo dice Jesús: "La verdad los hará libres".
Toda máscara se cae
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BIENAVENTURADOS LOS POBRES DE ESPÍRITU CATEQUESIS DEL PAPA
Redacción: vatican.va Fotografías: Mensajero Diocesano
Continuando con su catequesis centrada en las bienaventuranzas el Papa Francisco se adentró el pasado miércoles 5 de febrero en la primera de las ocho Bienaventuranzas del Evangelio de Mateo. Jesús inicia a proclamar su camino hacia la felicidad con un anuncio paradójico: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos» (5, 3). Un camino sorprendente, y un extraño objeto de bienaventuranza, la pobreza. Tenemos que preguntarnos: ¿Qué se entiende por “pobres”? Si Mateo usara solo esta palabra, entonces el significado sería simplemente económico, es decir, indicaría a las personas que tienen pocos o ningún medio de sustento y necesitan ayuda de los demás. Pero el Evangelio de Mateo, a diferencia de Lucas, habla de «pobres de espíritu». ¿Qué quiere decir? El espíritu, según la Biblia, es el soplo de la vida que Dios comunicó a Adán; es nuestra dimensión más íntima, digamos la dimensión espiritual, la más íntima, aquella que nos hace personas humanas, el núcleo profundo de nuestro ser. Entonces los “pobres de espíritu” son aquellos que son o se sienten pobres, mendicantes, en lo profundo de su ser. Jesús los proclama Bienaventurados, porque a ellos les pertenece el Reino de los cielos. ¡Cuántas veces se nos ha dicho lo contrario! Es necesario ser algo en la vida, ser alguien... Es necesario hacerse con un nombre... Es de aquí que nace la soledad y la infelicidad: si yo tengo que ser “alguien”, entro en competición con los demás y vivo con la preocupación obsesiva por mi ego. Si no acepto ser pobre, comienzo a odiar todo lo que rodea mi fragilidad. Porque esta fragilidad impide que yo me convierta en una persona importante, un rico no sólo en dinero, sino en fama, en todo. Cada uno, delante de sí mismo, sabe bien que, por más que se ponga a trabajar, queda siempre radicalmente
incompleto y vulnerable. No existe un truco que cubra esta vulnerabilidad. Cada uno de nosotros es vulnerable, dentro. Debe ver en dónde. Pero, ¡Qué mal se vive si se rechazan los propios límites! Se vive mal. No se digiere el límite, está ahí. Las personas orgullosas no piden ayuda porque deben mostrarse autosuficientes. Y cuántos de ellos tienen necesidad de ayuda, pero el orgullo les impide recibir ayuda. Y cuán difícil es admitir un error y pedir perdón. Cuando yo doy un consejo a los nuevos esposos, que me dicen cómo llevar adelante y bien su matrimonio, yo les digo: “Existen tres palabras mágicas: permiso, gracias, perdón”. Son palabras que vienen de la pobreza de espíritu. No es necesario ser entrometidos, sino pedir permiso: “¿Te parece bien que haga esto?”, así hay diálogo en familia, esposa y esposo dialogan. “Tú hiciste esto por mí, gracias, lo necesitaba”. Después siempre se cometen errores, deslices: “Perdóname”. Y normalmente las parejas, los nuevos matrimonios, los que están aquí y muchos, me dicen: “La tercera es la más difícil”, pedir perdón, pedir perdón. Porque el orgulloso no es capaz. No puede pedir perdón: siempre tiene razón. No es pobre de espíritu. En cambio, el Señor nunca se cansa de perdonar; somos nosotros, desafortunadamente, quienes nos cansamos de pedir perdón (cf. Ángelus 17 de marzo de 2013). El cansancio de pedir perdón: ¡esta es una fea enfermedad! ¿Por qué es difícil pedir perdón? Porque humilla nuestra imagen hipócrita. Y, sin embargo, vivir buscando ocultar las propias carencias es cansado y angustioso. Jesucristo nos dice: ser pobres es una ocasión de gracia; y nos muestra y la salida a esta fatiga. Nos da el derecho de ser pobres de espíritu, porque este es el camino del Reino de Dios. Pero hay que destacar algo fundamental: no debemos
Reina verdaderamente quien sabe amar el verdadero bien más que a sí mismo. transformarnos para convertirnos en pobres de espíritu, no debemos realizar ninguna transformación porque los somos ya. Somos pobres... o más claro: somos unos “pobrecillos” en el espíritu. Tenemos necesidad de todo. Somos pobres de espíritu, somos mendicantes. Es la condición humana. El Reino de Dios es de los pobres de espíritu. Están aquellos que tienen el reino de este mundo: poseen bienes y tienen comodidades. Pero son reinos que acaban. El poder de los hombres, también los imperios más grandes, pasan y desaparecen. Muchas veces vemos en el noticiero o en los periódicos a aquel gobernador fuerte, poderoso o aquel gobierno que ayer estaba y hoy ya no está más, cayó. Las riquezas de este mundo se van, y también el dinero. Los viejos nos enseñan que el sudario no tenía bolsillos. Es verdad. No he visto nunca detrás de un cortejo fúnebre un camión de mudanzas: nadie se lleva nada. Estas riquezas se quedan aquí. El Reino de Dios es de los pobres de espíritu. Están aquellos que poseen los reinos de este mundo, poseen bienes y tienen comodidades. Sin embargo, sabemos cómo acaban. Reina verdaderamente quien sabe amar el verdadero bien más que a sí mismo. Y este es el poder de Dios.
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BIBLIA Y CATECISMO Redacción: Pbro. Francisco Escobar Mireles Fotografía: Mensajero Diocesano
¿En qué se resumen los 10 mandamientos?
AMARÁS AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU CORAZÓN, CON TODA TU ALMA Y CON TODAS TUS FUERZAS (Mt 22, 37). 1° ADORARÁS AL SEÑOR TU DIOS Y LE SERVIRÁS (Mt 4,10)
¿Qué manda el primer mandamiento?
Fotografía: Especiales "'Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante de la Ley?'. Jesús le dijo: 'Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el gran mandamiento, el primero. Pero hay otro muy parecido: 'Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 40. Toda la Ley y los Profetas se fundamentan en estos dos mandamientos'" (Mt 22,36-40). "Porque los mandamientos que dicen: 'No cometas adulterio', 'No mates', 'No robes', 'No codicies', y todos los demás mandamientos, se resumen en este precepto: 'Ama a tu prójimo como a ti mismo'. El amor no perjudica al prójimo. Así que el amor es el cumplimiento de la ley" (Rm 13,9-10). "Cuando le hacen la pregunta: '¿Cuál es el mandamiento mayor de la Ley?' (Mt 22,36), Jesús responde: 'Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el mayor y el primer mandamiento. El segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos penden toda la Ley y los Profetas' (Mt 22,37-40; cf Dt 6,5; Lv 19,18). El Decálogo debe ser interpretado a la luz de este doble y único mandamiento de la caridad, plenitud de la Ley: 'En efecto, lo de: No adulterarás, no matarás, no robarás, no codiciarás y todos los demás preceptos, se resumen en esta fórmula: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. La caridad no hace mal al prójimo. La caridad es, por tanto, la ley en su plenitud' (Rm 13, 9-10)" (CEC 2055).
"Pero viene la hora, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que le adoren. Dios es espíritu, y los que le adoran deben adorarle en espíritu y en verdad" (Jn 4,23-24). "Este pueblo de labios me honra; mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres" (Mt 15,8-9). "Por eso deben mantenerse alertas, no sea que venga de repente y los encuentre durmiendo" (Mc 13,36). "El primer mandamiento llama al hombre para que crea en Dios, espere en Él y lo ame sobre todas las cosas" (CEC 2134). "'Al Señor tu Dios adorarás' (Mt 4, 10). Adorar a Dios, orar a Él, ofrecerle el culto que le corresponde, cumplir las promesas y los votos que se le han
hecho, son todos ellos actos de la virtud de la religión que constituyen la obediencia al primer mandamiento" (CEC 2135).
¿Podemos seguir cualquier religión? "Me asombra que tan pronto estén dejando ustedes a quien los llamó por la gracia de Cristo, para pasarse a otro evangelio. No es que haya otro evangelio, sino que ciertos individuos están sembrando confusión entre ustedes y quieren tergiversar el evangelio de Cristo. Pero, aun si alguno de nosotros o un ángel del cielo les predicara un evangelio distinto del que les hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición! Como ya lo hemos dicho, ahora lo repito: si alguien les anda predicando un evangelio distinto del que recibieron, ¡que caiga bajo maldición! (Gal 1,6-9). "Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ese sí tiene al Padre y al Hijo" (2Jn 9). "El derecho a la libertad religiosa no es ni la permisión moral de adherirse al error (cf León XIII, Libertas praestantissimum), ni un supuesto derecho al error (cf Pío XII, discurso 6 dic. 1953), sino un derecho natural de la persona humana a la libertad civil, es decir, a la inmunidad de coacción exterior, en los justos límites, en materia religiosa por parte del poder político. Este derecho natural debe ser reconocido en el ordenamiento jurídico de la sociedad de manera que constituya un derecho civil (cf DH 2)" (CEC 2108).
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HABLEMOS DE EDUCACIÓN UNA SÍNTESIS SOBRE EL CONCEPTO DE MADUREZ
Redacción: Pbro. Francisco Isaac Ávalos Navarro isaac_teol@hotmail.com Fotografía: Especiales
En los últimos diez artículos publicados en este medio nos hemos dado a la tarea, siempre compleja, de describir el conceto de madurez en sus distintos aspectos: afectivaemocional, mental, social, moral y religiosa. El estudio de cada una de estas áreas nos ayudará a entender y mejorar aquellos aspectos que es posible potenciar como educadores en el plano personal y en el plano del acompañamiento de las personas que nos han sido confiadas a través de la tarea educativa. Sin embargo, es necesario tratar de hacer una síntesis que sea capaz de ayudar reconstruir el concepto que hemos descompuesto para mejorar su comprensión. En este sentido, un buen educador debe ser capaz de reconocer aquellos signos de esperanza que aparecen en nuestros educandos. De la misma manera, reconocer aquellas situaciones críticas o conflictivas nos debemos aprender a potenciar a través de acciones específicas, especializadas y conscientes para hacer crecer mejor a nuestros pequeños. El maravilloso viaje hacia la madurez humana comienza con los primeros días de vida en donde el pequeño a través del juego, los reflejos, la interacción con los adultos y los estímulos del ambiente comenzará a tomar conciencia cada vez más clara de sí mismo. En estas etapas, sumamente fundamentales, es necesario que la relación con las personas que lo cuidan sea de lo más cuidada y atenta. Estos primeros años estarán marcados por los descubrimientos del mundo y de las personas que lo rodean, provocando constantes rupturas con los conocimientos anteriores, empujando inevitablemente el desarrollo de los niños hacia estadios cada vez más elaborados de resolución de problemas y conocimiento del mundo,
elaborando teorías ingenuas sobre la realidad (cfr. Formella, 2009, 50-51; cfr. Vianello – Lucangeli, 2004). Después de la infancia, llegan la adolescencia y la juventud, momentos maravillosos de la vida, que se centran aun en el plano imaginario de la existencia humana, construyendo a través de sueños e ilusiones las acciones necesarias para poder madurar. En este momento de la vida el adolescente y el joven necesitan un educador eficaz capaz de ayudarlos de pasar del sueño y la ilusión al plano la vida con sentido, objetivo y proyecto. Solo las acciones concretas como la adquisición de conocimientos, valores y habilidades podrán ayudar a nuestra juventud a pasar de un estadio de desarrollo a otro superior. Es en la adolescencia donde con más propiedad, se comienzan a consolidar las habilidades sociales desarrolladas lentamente en la infancia, mientras que en la juventud, se supone por lo menos, que ha alcanzado un grado de madurez humana en casi todas las áreas capaz de ayudar al individuo a entrar en el complejo mundo de los adultos. Es necesario también ayudar al adolescente o joven a encontrar la imagen de adulto en el cual se quiere convertir. Los modelos de comportamiento de hombres
o mujeres significativos en esta etapa de la vida son cruciales para concretizar el proyecto de vida (Bandura, 2000, 133). Es importante intentar, como adulto y compañero de viaje, ayudar en estas edades a dar cumplimiento a cada una de las tareas propias de esta edad. Quien ha superado de manera positiva dichas tareas estará más capacitado para entrar al complejo mundo de la realidad de los adultos (cfr. Formella, 2009, 50-51). Antes de hablar de la vida adulta, es necesario aclarar el rol del conflicto y de las crisis en todo este proceso de crecimiento. Como ya fue presentado en el artículo anterior, las crisis y conflictos juegan un papel importante en el crecimiento de los seres humanos. Madurar significa enfrentar dos situaciones: aquellas crisis que vienen con nuestro propio desarrollo y aquellas crisis provocadas por eventos accidentales de la vida (cfr. Formella, 2009, 34-35). Para el ser humano es esencial, de frente a la crisis, saber dejar el desarrollo adquirido precedentemente para poder adueñarse de uno posterior y de recuperar el equilibrio después de la situación que nos hizo madurar. Efectivamente, también es estos momentos críticos la presencia de un adulto es esencial sobre todo a través de la compañía, el consejo y el testimonio.
El mundo del adulto, cada vez más complejo, necesita personas capaces de realizar las transacciones necesarias hacia la madurez humana, capaces de reconstruirse constantemente para responder a las situaciones concretas de la vida. Los aspectos particulares de la madurez humana más sobresalientes que nos pueden ayudar en la vida adulta son: la capacidad de sintetizar en la existencia particular de cada uno todas las dimensiones del crecimiento humano (mental, afectivo, social, moral, religioso); la capacidad de saber trabajar con los demás, saber acoger al otro con toda sus grandezas y miserias, como parte fundamental e importante de la raza humana; saber mantener un cierto grado de serenidad en la vida, a través de una cierta sensibilidad que permite poner tanto las personas, las cosas y las situaciones en el lugar adecuado en nuestro mundo interior; saber “tomar distancia” de las situaciones de la vida, que no consisten en huir de ellas, sino en razonar desde fuera las posibles soluciones a dichos problemas, sin impulsos fastidiosos para superar una emoción o situación conflictivas a través de una reflexión profunda que inspire una acción adecuada (cfr. Formella, 2009, 52). Nuestras reflexiones sobre la madurez humana y toda su complejidad no son un fin en sí mismas, sino que servirán como base para hablar sobre nuestro próximo tema general: la relación educativa. La mejor manera de ayudar a crecer al otro (al educando) es poniendo a su servicio toda nuestra madurez y experiencia para garantizar un crecimiento lo más adecuado posible. Aprovechamos las líneas finales de este artículo sobre todo para saludar a dos de nuestros más asiduos lectores: al Pbro. Sergio Serrano Magdaleno y a nuestro Obispo emérito Mons. Felipe Salazar Villagrana, uno de mis grandes maestros.
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SACERDOTES EN FORMACIÓN PERMANENTE
Redacción: Pbro. Francisco Isaac Ávalos Navarro Fotografía: Mensajero Diocesano
En el marco del proceso de formación permanente de nuestro presbiterio diocesano se llevó a cabo, el pasado día 17 de febrero, una serie talleres de estudio y actualización donde participaron la mayoría de los sacerdotes de nuestras comunidades. El evento se realizó en tres sedes distintas: San Juan de los Lagos, Arandas y Tepatitlán de Morelos. En está ocasión docentes e investigadores de UNIVA Guadalajara compartieron sus conocimientos con nosotros. El tema central de estudio fue: “Antropología y libertad” en un mundo de relaciones complejo siempre cambiante. Entre las principales ideas que se trataron se encuentran, por ejemplo, la
reflexión sobre la nueva comprensión del fenómeno de la complejidad actual; la comprensión del ser humano, del mundo y los demás seres vivos; la robótica en la vida cotidiana; el determinismo económico y social actual; la cultura de la violencia y el descuido; el problema educativo en México; la obediencia y la libertad; el capitalismo y las nuevas maneras de producción de riqueza en nuestras sociedades, entre otros tantos. En este sentido es necesario recordar aquello que la nueva Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis sobre el “Don de la vocación presbiteral” afirma, en el número 56, sobre la formación permanente del presbítero: “La formación permanente representa una necesidad imprescindible en la vida y en el ejercicio del ministerio de cada presbítero; en efecto, la actitud interior del sacerdote debe caracterizarse por una disponibilidad permanente a la voluntad de Dios, siguiendo el ejemplo de Cristo. Tal disponibilidad implica una continua conversión del corazón, la capacidad de leer la vida y los acontecimientos a la luz de la fe y, sobre todo, la caridad pastoral, para la entrega total de sí a la Iglesia según el designio de Dios”.
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LA IGLESIA Y LA FORMACIÓN DE LOS DISCÍPULOS MISIONEROS
Redacción: Margarita Migdalia Cundapi Fotografía: Especiales
PRIMERA PARTE
“El mismo Señor me ha dado una lengua de discípulo, para que yo sepa reconfortar al fatigado con una palabra de aliento. Cada mañana, él despierta mi oído para que yo escuche como un discípulo. El Señor abrió mi oído y yo no me resistí ni me volví atrás” (Is 50,4-5). “El acontecimiento de Cristo, es, por lo tanto, el inicio de ese sujeto nuevo que surge en la historia y al que llamamos discípulo, porque “No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva»” (DA 243, DCE 1) La naturaleza misma del cristianismo consiste, por lo tanto, en reconocer la presencia de Jesucristo y seguirlo. Ésa fue la hermosa experiencia de aquellos primeros discípulos que, encontrando a Jesús, quedaron fascinados y llenos de estupor ante la excepcionalidad de quien les hablaba, ante el modo cómo los trataba, correspondiendo al hambre y sed de vida que había en sus corazones (cfr. Jn 1, 38-39). La formación de los discípulos misioneros es un proceso gradual, de maduración de la fe, de encuentro con Jesucristo, de inserción en la comunidad, de compromiso en la misión de salvación y de formación para esa comunidad y su misión. El Documento de Aparecida ofrece caminos para el proceso de formación de los discípulos (cfr. DA 278).
a) El encuentro con Jesús. Es una
experiencia viva, ser seducido por la persona del Señor, un acontecimiento que toca y transforma nuestra vida. La invitación “Vengan y verán” (Jn 1,39) expresa el encuentro de fe con la persona de Jesús.
b) La conversión. “Conviértanse y
crean en el Evangelio” (Mc 1,15). Es un cambio: de mentalidad y de vida, de acción y de compromiso, pasar de la ley a la fe; de obras de la ley a la fe en Jesús. Es el abandono del pecado y de muchas cosas que son contrarias a los valores del Evangelio. El objetivo de la conversión es “sean misericordiosos como es misericordioso el Padre de ustedes” (Lc 6,36). Y como Él, Jesús, es misericordioso “aprendan de mí, que soy sencillo y humilde de corazón” (Mt 11,29).
c) El discipulado. Es el seguimiento de Jesús que se profundiza y lleva a vivir
en el Espíritu y a ser perseverante en la amistad con el Señor. “El seguimiento es fruto de una fascinación que responde al deseo de realización humana al deseo de vida plena. El discípulo es alguien apasionado por Cristo, a quien reconoce como el maestro que lo conduce y acompaña” (DA 277) Es testigo y no solamente un repetidor del actuar de Jesús.
d) La comunión eclesial. El cristiano es, ante todo, un hermano que hace comunión fraterna en la familia, en la Iglesia, en la vida. Es la vivencia de la fraternidad y de la solidaridad.
e) La misión. Ir al encuentro del pueblo, de las personas, de las casas, de las comunidades y más allá de las fronteras. Discipulado y misión son inseparables, son dos caras de una misma moneda.
La Iglesia está invitada a mirar a Jesús, el Maestro que formó personalmente a sus apóstoles y colocarse también ella como discípula. Cristo nos da el método: “Vengan y vean” (Jn 1, 39), “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida” (Jn 14, 6). Con Él podemos desarrollar las potencialidades que están en las personas y formar discípulos misioneros.
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MISA DE ENFERMOS DECANATO SAN JUAN DE LOS LAGOS Redacción y fotografía: Mensajero Diocesano
El pasado 11 de febrero, conmemoración de Nuestra Señora Lourdes, en el marco de la XXVIII Jornada Mundial del Enfermo, el Decanato de San Juan de los Lagos organizó una celebración eucarística en el Santuario de Nuestra Señora de San Juan, misma que fue presidida por el señor Obispo, Jorge Alberto Cavazos Arizpe y a la que asistieron cientos de enfermos para pedir a Dios el don de la salud del alma y del cuerpo. El lema para la jornada de este año fue “Venid a mí todos los que estáis cansado y agobiados y yo os aliviaré”, tomado del evangelio de san Mateo (11,28) y en el mensaje que el Papa Francisco dirigió al Pueblo de Dios en esta ocasión, recalcó que Jesucristo “Él mismo se hizo débil, vivió la experiencia humana del sufrimiento y recibió a su vez consuelo del Padre. Efectivamente, sólo quien vive en primera persona esta experiencia sabrá ser consuelo para otros”. Teniendo en cuenta la solidaridad en el sufrimiento que Cristo tuvo con el ser humano, el decanato 1 organizó, no sólo el aspecto litúrgico, sino también la logística para transportar a los enfermos desde sus hogares hasta la Catedral y convocó a los sacerdotes para que facilitaran la administración del sacramento de la reconciliación haciéndose “ambulantes” para llegar hasta donde estuviera el enfermo. Todo esto facilitó la asistencia de los cientos de enfermos que participaron en la Eucaristía. Durante su homilía, el señor Obispo recalcó que Dios “nos fortalece en todas nuestras necesidades, nos consuela, nos acompaña, nos lleva adelante, como el Buen Pastor, que toma a la oveja herida en sus hombros y la conduce a un lugar seguro de su paz, de su compañía, de su cuidado mismo”. Don Jorge Alberto recordó a los asistentes que “el mayor dolor del ser humano es cuando no tenemos a Dios, cuando no dejamos que Dios, como a oveja suya, tal vez herida o lastimada, nos mire tiernamente, nos abrace, nos consuele, nos acaricie en nuestro corazón, en nuestro espíritu. Él, lleno de amor, es la salud y es la paz”. Con esta motivación invitó a los enfermos a encomendarse también al cuidado
maternal de la Virgen María “Dios ha querido dejarnos, a través de su Madre Santísima, un remedio, un camino, un refugio ante nuestras dolencias, ante nuestros cansancios o aquellas situaciones que nos agobian… bien sabemos, lo hemos vivido, la cantidad de hermanos que llegan hasta esta casa para encontrarse con esa salud de Dios a través de la Virgen de San Juan”. Dentro de la misma Eucaristía los enfermos recibieron también el sacramento de la Unción de los Enfermos y estuvieron acompañados por sus familiares y un gran número de Ministros Extraordinarios de la Eucaristía, que se mantuvieron siempre cerca y atentos para brinda apoyo ante las necesidades de los asistentes. Oramos a Dios para que a todos nos conceda, por intercesión de la Virgen María -salud de los enfermos- la salud del cuerpo y del alma.
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FEBRERO
VERANO
23 DE FEBRERO SR. PBRO. ÁLVARO RAMÓN ÍÑIGUEZ BARBA 24 DE FEBRERO SR. PBRO. JOSÉ MANUEL GARCÍA GARCÍA SR. PBRO. JOSÉ ALBERTO CAMPOS ROMO SR. PBRO. JOSÉ DE JESÚS COSS Y LEÓN RUBIO 25 DE FEBRERO SR. PBRO. ADALBERTO VÁZQUEZ RUIZ SR. PBRO. ALBERTO MARTÍN JIMÉNEZ 27 DE FEBRERO SR. PBRO. ALEJANDRO VARGAS VALDIVIA
¡Felicidades!
Redacción:kopi Luak / Fotofrafía: Especiales
A esta estación del año le hemos atribuido muchos poemas, películas, obras inmensas, y quizá sea por la realidad que saca de nosotros mismos esta época. Pues bien, en la actualidad uno de los mejores autores que han representado la realidad de esta estación es Vladimir Volegov (nacido en Jabárovsk, 19 de diciembre de 1957) es un artista visual polifacético actualmente residente en España. Quiero permitirme platicar un poco de él, siendo en este punto uno de los pocos autores que aún viven de los que he hablado. Comenzó su carrera en Moscú como diseñador gráfico para grabaciones de música, historietas y carteles comerciales. Su expresión artística, sin embargo, ha despuntado en Occidente principalmente por sus óleos realistas, de colores brillantes que a menudo representan escenas románticas la de vida familiar al aire libre. La educación de Volegov lo hace despuntar, estudió en el Instituto Poligráfico de Leópolis, donde se graduó en 1986, viaja por Europa occidental como pintor nómada. Entretanto desarrolla su estilo pictórico glamoroso y realista, representando a menudo la belleza femenina, la maternidad y la infancia en entornos románticos. En esta sencilla obra de una mujer en la tranquilidad del verano representa una escena tan cercana y característica a todos que puede tener dos pases directos; o hacernos pasar de largo, o contemplarnos a nosotros mismo en ella. Es una pintura en el realismo y un realismo en la pintura. Roba la atención necesaria para contemplar los trazos y los colores, pero no podemos pasar de largo ante la expresión fresca, colorida, con vida en la escena de la característica de la brisa del mar, de las rocas, de los pies desnudos sintiendo la arena, la sombrilla en la mano, la mirada perdida, la increíble necesidad de la calidez en los momentos sencillos e inspiradores. Un mensaje está claro, disfrutar la vida es más sencillo de lo que parece. Creo que poco a poco nos hace falta más tener cerca esta sensación de volver a vivir un sencillo verano.
23 de febrero de 2020
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ESPACIO DE LUZ Y DE BONDAD CAÑADAS DE OBREGÓN “Los abuelos son la sabiduría de la familia, son la sabiduría de un pueblo. Y un pueblo que no escucha a los abuelos es un pueblo que muere” (Encuentro mundial de las familias, Roma, 27/10/2013)
Redacción y Fotografía: Parroquia Nuestra Señora de la Luz
El pasado 1 de febrero del presente año, en el marco de las fiestas patronales a Nuestra Señora de la Luz, nuestro pueblo de Cañadas de Obregón, junto con nuestro pastor el Sr. Obispo Jorge Alberto Cavazos Arizpe, nos congregamos con alegría y esperanza para la bendición y colocación de la primera piedra del proyecto “Espacio de Luz y de Bondad”. Tal espacio pretende ser un lugar de atención y esparcimiento para todos los adultos mayores que por una u otra razón se encuentran solos o en alguna situación de vulnerabilidad, brindando asilo y acompañamiento en esta etapa compleja pero bella de su vida. Espacio de Luz y de Bondad, germinó como respuesta al considerable número de adultos mayores de la comunidad que se encuentran en una realidad precaria. La iniciativa surgió de nuestro Párroco, el Sr. Cura Luis Carlos García Rea, quien manifestó su inquietud de responder a tal necesidad, dicha iniciativa fue bien recibida y el proyecto comenzó a fraguarse como un trabajo de comunidad y fraternidad; en él ya desde sus inicios comenzó a percibirse la generosidad de tantas personas que de manera desinteresada han comenzado a apoyar, desde sus diversas posibilidades. Así podemos mencionar entre tantos, el apoyo de los hijos ausentes de esta “tierra de amistad” y el valioso trabajo del comité, que una vez consolidado el proyecto, puso manos a la obra para conseguir los recursos necesarios.
La comunidad de Cañadas vibramos como familia y como Iglesia ante el inicio de la construcción de nuestro asilo, pues sabemos que es un beneficio para la comunidad entera; pero también nos compromete a servir y a trabajar por el bien de nuestros adultos mayores. Reconocemos que el cuidado de nuestros adultos va más allá de una cuestión meramente humana, sino que es un compromiso de aquellos que nos profesamos cristianos. Como pueblo y comunidad parroquial hacemos nuestras las palabras del Eclesiástico: “Hijo mío, socorre a tu padre en su vejez y no le causes tristeza mientras viva. Aunque pierda su lucidez, se indulgente con él; no lo desprecies, tú que estás en pleno vigor. La ayuda prestada a un padre no caerá en el olvido y te servirá de reparación por tus pecados”. (Eclo 3, 12-14)
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23 de febrero de 2020
«HAY QUE LLORAR SI ES NECESARIO»
Redacción: Sem. Juan Diego Vázquez Valle. Fotografías: @aliyahjam
En nuestra cultura hemos adoptado costumbres que no nos han ayudado del todo a sentir y disfrutar de nuestra humanidad, por ello hoy quiero hablar de una acción que arrastra muchos sentimientos y que practicándolo como es debido podemos saborear más nuestro ser humanos: el llorar, sentir la debilidad y aprender a dar gracias a Dios por sabernos débiles pero acompañados de su presencia amorosa entre nosotros. Este miércoles 12 de febrero, el Papa Francisco habló sobre una de las Bienaventuranzas que hace referencia al llanto: Bienaventurados los que lloran, porque serán consolados. Hizo una reflexión sobre dos tipos de llanto: por la pérdida de alguien o de algo y llorar el pecado. La pérdida de un ser querido nos destroza, nos mueve todo el interior por el amor que sentimos hacia esa persona o cosa. Es triste cuando perdemos a alguien o algo y no pasa por nosotros ningún sentimiento, podemos ser indiferentes y no valorar debidamente a esa persona o esa cosa que perdimos. Sobre todo tener en cuenta que muchas veces no valoramos lo que tenemos y eso también puede ser un pecado. Lo importante es llorar ante la pérdida y reponernos en
la vida, porque el llanto nos va a dar también ánimos para salir adelante y descubrir que tenemos muchas personas que nos quieren y queremos y cosas que nos pueden ser útiles para nuestra santificación. La otra cuestión que nos debiera hacer llorar es el pecado. Llorar de arrepentimiento por nuestras ofensas a Dios es muy reconfortante, pues podemos mirarnos con los ojos de Dios, vernos pequeños ante el Creador pero amados por Él, podemos tener la actitud de que cuando caigamos vayamos al encuentro del Señor, postrarnos a sus pies y pedirle permanecer una vez más en su presencia, sentirnos hijos amados por Dios y allí es cuando puede venir el llanto de arrepentimiento pero también de tanto amor de Dios hacia nosotros. Hay que llorar cuando sea necesario, porque es necesario, es parte del hombre llorar, porque somos débiles y llorar es una oportunidad para sentir nuestra humanidad, sentir las lágrimas sobre nosotros nos hace sentir que estamos vivos y tenemos sentimientos, que podemos ser buenos y que somos sensibles ante los que nos rodean. Lloremos, porque es bello llorar por el otro y con el otro, llorar por Dios y con Dios, llorar porque nos contemplamos y nos apreciamos así como somos. ¡Hasta la próxima!
23 de febrero de 2020
En estos días, nos hemos enterado de una noticia que nos indigna y nos deja helados.
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CUIDADO CON TUS HIJOS, SON TU TESORO
El secuestro de una niña pequeña, de siete años, que después de varios días fue encontrada muerta dentro de una bolsa de plástico. ¡Es increíble que sigan pasando estas cosas! El gobierno debería meter orden en la sociedad, pero cuando el gobierno no es capaz de hacerlo, nosotros como papás debemos implementar medidas de seguridad familiares para procurar que nuestros hijos estén bien y seguros. Por eso aquí te dejo 4 Tips para lograrlo
PRIMERO: PLATICA CON TUS HIJOS SOBRE ESTOS TEMAS Aunque nuestros hijos sean pequeños, las condiciones actuales, nos obligan a platicar con ellos de estos temas. Es necesario que estén conscientes de que hay peligro, aunque deben ver que están seguros porque nosotros los cuidamos. No se trata de causar pánico, se trata de hacer conciencia para que aprendan a cuidarse y así evitemos situaciones complicadas o que pongan en riesgo su vida.
TERCERO: ENSÉÑALES A OBSERVAR SU ENTORNO Y A PLATICAR CONTIGO DE LO QUE LES PASA Si nuestros hijos aprenden a observar lo que los rodea, será más fácil que se den cuenta cuando alguien los observa, cuando alguien lo sigue, o si alguna persona que está su alrededor tiene malas intenciones. No se trata de hacer los inseguros, por el contrario se trata de que pongan atención en lo que sucede a su alrededor para que puedan tomar las medidas necesarias y que todo salga muy bien. Por otro lado es importante que tengan la confianza de platicarnos todo lo que le sucede, así podremos ayudarles en cualquier circunstancia. En muchas ocasiones ellos no pueden notar cuando hay algo extraño, pero si nosotros estamos al pendiente y les escuchamos con atención podremos detectar alguna señal de alerta.
SEGUNDO: ENSÉÑALES A TUS HIJOS QUE NO HABLE CON EXTRAÑOS Y PROCUREN NO ESTAR SOLOS Este tema es polémico, pero cada papá o cada familia, tiene el derecho a tratarlo como mejor convenga. No hablar con extraños garantiza que los niños no den información, inocentemente, que pueda ponerlos en riesgo a ellos o a la familia. También es una forma de evitar que algún extraño con malas intenciones se acerque a nuestros hijos y pueda sus traerlo de la escuela, del partido de fútbol, la biblioteca o de cualquier lugar donde puedan encontrarse sin nuestra compañía. En los lugares públicos los niños pequeños deben ir siempre de la mano de mamá o de papá, o de algún adulto de nuestra confianza.
CUARTO: APRENDAMOS DE LOS ERRORES En el caso de la niña que fue secuestrada, todo sucedió al ir a recogerla a la escuela, por eso es muy importante que conozcamos los protocolos de seguridad de la escuela; cuál es la seguridad para recogerlos, cuál es la seguridad para entregarlos, qué sucede si algún extraño entra a la escuela, etc. Últimamente hemos escuchado cosas impensables, por lo que también es necesario saber qué plan tiene la escuela si algún alumno lleva un arma en la mochila. Lo primordial es la seguridad de nuestros hijos, por eso que no te de pena preguntar por estos temas en la escuela.
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23 de febrero de 2020
ALGO MÁS QUE PALABRAS ¿RECHAZO O ACOGIDA?
“De nada sirven los derechos humanos si permanentemente los violamos”
Redacción:Víctor Corcoba Herrero Fotografía: Especiales
Me indignan las continuas historias de injusticia y crueldad que nos desbordan, el atropello de tantas vidas humanas que son explotadas a diario, los incesantes guiones despreciativos de la gente, la prepotencia de algunos líderes que se sirven de los más desvalidos, la de esos moradores convertidos en auténticos depredadores de las riquezas naturales, los asentamientos israelíes en territorio palestino que son una violación flagrante y que a pesar de haber sido condenados repetidamente por la comunidad internacional continúan activados, o esos países ricos como España, donde muchas gentes viven en la pobreza generalizada… A estas diversas situaciones ilícitas, cada vez más habituales y que se extienden como la pólvora, hay que injertarles en vena el más profundo rechazo, con otro espíritu más donante, sin dejar a nadie al margen de nada.
producir entre territorios. La mentira no entiende de relaciones humanas. Todo lo tergiversa a su antojo. Romper vínculos nos desarraiga y enmaraña. Por eso, en una sociedad profundamente dañada, hace falta restituirla con la acción de lo auténtico, de lo justo, del amor en suma. Ya está bien de potenciar alientos inciviles, de que el ser humano sea un lobo para sí mismo, de que la selva se acreciente de veneno, en lugar de convertirse en un bálsamo de concordia. Ojalá aprendamos a juzgarnos a nosotros mismos, pues lo trascendente es evitar divulgaciones arbitrarias, oratorias simplistas que nos lleven a conclusiones nefastas.
Nos hemos globalizado pero no nos hemos hermanado. No hay sentido de familia. La humanidad se ha deshumanizado y sólo coexiste en función de don dinero. Hemos de despertar y volver nuevamente a cuidar el hábitat y a protegernos de nosotros mismos. Tampoco hay tiempo que perder y la vida es un camino en el que todos hemos de contar y poder vivir. De nada sirven los derechos humanos si permanentemente los violamos. Hay que oponerse a toda forma de discriminación y dominación entre las diversas culturas. Ahora bien, quedarnos únicamente en esa sublevación sin tender la mano, sin reconocer al equivalente en su manera de cohabitar y batirse el cobre, tampoco impulsa el encuentro que es lo que verdaderamente nos insta a entendernos. Tal vez tendremos que repensar sobre lo que queremos. La comprensión siempre pone sosiego.
En cualquier caso, me niego a ser un mero consumidor pasivo, rechazo la visión de tragaderas a los que nos suelen someter los engranajes del poder, y pido la consideración hacia toda vida y hacia esa casa colectiva de la que todos formamos parte. Por consiguiente, no se trata de encerrarnos en nosotros mismos, sino de abrirnos a los demás, bajo el sentido corresponsable de la escucha y el diálogo verdadero. Justamente, lo que nos retrocede como especie son esas culturas amenazadas, esos pueblos en riesgo permanente, esos pobladores a los que no se les acoge ni se les acompaña. Esta frialdad de corazones, abonada por el espíritu de los hipócritas, realmente nos aleja de ese estado armónico que es lo que en realidad nos reconforta. El rechazo de un mundo que se vuelve hostil difícilmente va a poder aproximarse, porque no conoce ni se reconoce su gente en el amor hacia sí mismo.
Indudablemente, la acción más significativa que un ser humano puede lograr es compartir ideas y experiencias para crecer como sociedad. Por tanto, resultan provocadores esos contextos corruptos, donde se cultiva la falsedad por principio y se amasa un aliento vengativo que nos destroza el alma, pues grandes son los atropellos que se suelen
En verdad todo se equilibra desde ese espíritu generoso de donación, entregado al deber de preservar el medio ambiente y los recursos naturales. Cuando se rehúsa este vacío que nos inunda, propiciado en parte por ese poderío que nos mueve y que no es otro que el capital, resulta que es cuando avanzamos en dignidad. Sabemos
que la paz no se consigue con las armas o cuando las atrocidades cesan, es menester conciliar posiciones, compartir lágrimas, restaurar la confianza y, sobre todo, hacer justicia. En efecto, considerando que cada uno de nosotros únicamente será equitativo en la medida en que lleve a buen término su hacer responsable, apártese de los pedestales, que la virtud y el poder no fraternizan bien. La ciudadanía, en consecuencia, necesita valorar los caminos transitados y dejarse reeducar por lo vivido, frente a tanto soborno y aislamiento. Ahí están las nuevas redes de la degradación, intentando hacernos ver, avances que no son, desarrollos abusivos y adelantos que solo llegan a esos habitantes privilegiados por el sistema. Sea como fuere, no podemos continuar fragmentados, hemos de hacernos piña, al menos para poder ampliar horizontes más allá de los conflictos, lo que nos exige solidaridad frente al rencor. No podemos continuar con este resentimiento, hace falta pasar página, resurgir hacia otros caminos menos excluyentes, más humanitarios, con gentes que defiendan la tolerancia. Deshumanizar, dividirnos y demonizar a las personas es un mal presagio. Desde luego, el repudio hacia este tipo de actitudes violentas tiene que ser contundente. Quizás tengamos que avivar, a falta de interés político, un desvelo más social, sobre todo para movilizar otros comportamientos menos supremacistas y más éticos. Al fin y al cabo, como decía el inolvidable político y pensador indio Mahatma Gandhi (1869-1948), “la humanidad es una familia unida e indivisible, y yo no puedo desligarme del alma más cruel”, entonces tendremos que pulir esa barbarie con el abrazo permanente entre análogos. No olvidemos que, en ocasiones, nosotros mismos somos nuestro peor enemigo.
23 de febrero de 2020
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VII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO PRIMERA LECTURA Lectura del libro del Levítico 19,1-2.17-18 En aquellos días, dijo el Señor a Moisés: “Habla a la asamblea de los hijos de Israel y diles: ‘Sean santos, porque yo, el Señor, soy santo. No odies a tu hermano ni en lo secreto de tu corazón. Trata de corregirlo, para que no cargues tú con su pecado. No te vengues ni guardes rencor a los hijos de tu pueblo. Ama a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy el Señor’ ”. Palabra de Dios: Te alabamos, Señor.
SALMO
Del salmo 102 R. El Señor es compasivo y misericordioso Bendice al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre. Bendice al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios. R. El Señor perdona tus pecados y cura tus enfermedades; él rescata tu vida del sepulcro y te colma de amor y de ternura. R. El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso para perdonar. No nos trata como merecen nuestras culpas, ni nos paga según nuestros pecados. R. Como dista el oriente del ocaso, así aleja de nosotros nuestros delitos; como un padre es compasivo con sus hijos, así es compasivo el Señor con quien lo ama. R.
SEGUNDA LECTURA Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 3,16-23 Hermanos: ¿No saben ustedes que son el templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? Quien destruye el templo de Dios, será destruido por Dios, porque el templo de Dios es santo y ustedes son ese templo. Que nadie se engañe: si alguno de ustedes se tiene a sí mismo por sabio según los criterios de este mundo, que se haga ignorante para llegar a ser verdaderamente sabio. Porque la sabiduría de este mundo es ignorancia ante Dios, como dice la Escritura: Dios hace que los sabios caigan en la trampa de su propia astucia. También dice: El Señor conoce los pensamientos de los sabios y los tiene por vanos.
Así pues, que nadie se gloríe de pertenecer a ningún hombre, ya que todo les pertenece a ustedes: Pablo, Apolo y Pedro, el mundo, la vida y la muerte, lo presente y lo futuro: todo es de ustedes; ustedes son de Cristo, y Cristo es de Dios. Palabra de Dios: Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN Aleluya, Aleluya En aquel que cumple la palabra de Cristo, el amor de Dios ha llegado a su plenitud. Aleluya, Aleluya
EVANGELIO Lectura del santo evangelio según san Mateo 5,38-48 En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Han oído que se dijo: Ojo por ojo, diente por diente; pero yo les digo que no hagan resistencia al hombre malo. Si alguno te golpea en la mejilla derecha, preséntale también la izquierda; al que te quiera demandar en juicio para quitarte la túnica, cédele también el manto. Si alguno te obliga a caminar mil pasos en su servicio, camina con él dos mil. Al que te pide, dale; y al que quiere que le prestes, no le vuelvas la espalda. Han oído que se dijo: Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo. Yo, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian y rueguen por los que los persiguen y calumnian, para que sean hijos de su Padre celestial, que hace salir su sol sobre los buenos y los malos, y manda su lluvia sobre los justos y los injustos. Porque, si ustedes aman a los que los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen eso mismo los publicanos? Y si saludan tan sólo a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen eso mismo los paganos? Ustedes, pues, sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto’’. Palabra del Señor: Gloria a ti, Señor Jesús.
REFLEXIÓN Jesús, viene así a suprimir la Ley del Talión del Antiguo Testamento, la que decía: “Ojo por ojo y diente por diente”. Según ella, era lícito causar al otro el mismo daño que él había producido. Por exagerado que parezca, esta ley trajo al principio una mejora para el comportamiento de la sociedad, ya que estableció que el castigo no podía ser mayor que el delito. Con esta ley se cortaba la cadena de venganzas, donde el daño era cada vez mayor.
Pero Jesús trae un nuevo y definitivo avance en la moral, mandando perdonar y superar el orgullo. Jesús reemplaza “la Ley” por “la misericordia”. Por eso, si la ley del talión podía responder a un espíritu de antigua justicia, no responde al espíritu de Evangelio, que es espíritu de amor, ni responde al concepto de justicia que hallamos en las palabras de Jesús. No se trata de que exista siempre la obligación de renunciar a la defensa razonable de los derechos personales. Jesús mismo, durante la pasión, le responde al sirviente de Anás: “Si he hablado mal, prueba en qué, pero si he hablado bien, ¿por qué me pegas?” Cuando algo es injusto, debe señalarse. Pero sin odio. Sin rencor. Sin venganza. Muchas veces no solamente dejamos de perdonar cosas graves, sino que nuestro orgullo nos lleva a exagerar ofensas que objetivamente carecen de importancia. Nos sentimos heridos por hechos que con frecuencia fueron hechos sin mala intención, y que quienes nos rodean, ni lo notaron. Pero nosotros, rápidamente los consideramos como ofensas inadmisibles. Jesús nos dio su ejemplo para que seamos simples..., sencillos. Que evitemos ser susceptibles o rebuscados. Que no nos sintamos ofendidos por cualquier cosa que se nos dice, o se nos deja de decir. La actitud que nos propone hoy Jesús de noviolencia, de no hacer frente a los agravios, distan mucho de ser actitudes de debilidad. Por el contrario para poder cumplirlas, se necesita de una gran fuerza interior. ¡Debemos vencer en nosotros el espíritu de venganza! No se domina el mal cuando se le responde con la misma dureza. El mal recibido, queda siempre, en el fondo, exterior a nosotros... pero cuando lo hace uno mismo, al devolverlo, el mal gana una victoria suplementaria: entra en nosotros. Jesús abre otro camino a la humanidad: vencer el mal con el bien, responder al odio con el amor. En el Antiguo Testamento, en el Libro del Levítico se mandaba al pueblo elegido “amar al prójimo”. El “guardar rencor a los enemigos” no viene de la Ley de Moisés. Las palabras de Jesús aluden a una interpretación generalizada entre los rabinos de la época, los cuales solo consideraban como prójimo a los israelitas. Jesús enseña claramente en la parábola del buen samaritano que prójimo es todo hombre, sin distingo de condición alguna. Cuando en nuestro corazón, aparece ese amor magnánimo hacia el otro, podemos asemejarnos a Dios, porque Dios es precisamente amor. Jesús nos dice: Sed perfectos, como el Padre celestial es perfecto. Vamos a pedirle hoy al Señor, unidos a María, que nos conceda un corazón grande, para que podamos acercar a Dios a quienes lo necesitan.
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23 de febrero de 2020
GRACIAS A LAS PERSONAS QUE ADQUIRIERON BONOS DE COOPERACIÓN PARA LA ADORACIÓN NOCTURNA Los números premiados fueron: PRIMER PREMIO - NUMERO 2134 SEGUNDO PREMIO – NUMERO 2077 Atentamente: Consejo Superior Diocesano Vigilia Asamblea del 7 de marzo de 2020 San Cristóbal Magallanes, Pegueros Jalisco