“En chinga, como este documento que hice en chinga. Reporte anual en chinga... ¿Cómo se escribe ‘haber’? Tú que eres de una revista has de saber... Ahora sí dime, ¿en qué te ayudo?”. Estas fueron las primeras frases que escuché del funcionario público con un alto poder de Comunicación y Orientación de Recursos de nuestra CDMX cuando en 2016 puse en sus manos nuestra primera edición: Made in Chinga. Y es que ante tal respuesta, es imposible no reírse —o llorar y reír—. ¿Qué más queda?, ¿sólo llorar?
Este tipo de diálogos los escucho a menudo en nuestro sistema de gobierno y me ayudan a entender la gastada frase de: “Por eso estamos como estamos”. Sin embargo, me sorprende mucho cómo estamos, cómo seguimos funcionando, con nuestro modo descarado de hacer las cosas… en chinga. Por eso, 23 números después, regresamos a explorar este interesante tema que define con precisión muchos de los empeños que materializamos en esta gran ciudad.