Invitamos a los niños a la aventura de cocinar y explorar el mundo de la comida; a descubrir espacios para compartir, con los padres y amigos, en una actividad recreativa y formativa. Que el cocinar se convierta en un canal de comunicación gracias a las diversas actividades y conversaciones que se desarrollan cuando se prepara una rica receta. Invitamos a desarrollar la creatividad e incentivar el uso de los sentidos, mediante la combinación de sabores, olores, texturas y colores, ya que, en la cocina, la vista, el gusto, el tacto y el olfato son todos indispensables. Queremos que, al ser más que un comensal, el niño reconozca el comer en la mesa como una valiosa instancia de socialización y de acogida con quienes comparten con nosotros. También creemos que hay una íntima relación entre el cocinar y el apreciar una alimentación balanceada, variada, nutritiva y, por supuesto, deliciosa.