Los cuentos de Clo-Cl贸 ERENA B. BURATTINI
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Ilustraciones de Leonor P茅rez
LOS C UENT OS DE CLO - CL Ó ERENA B. BURATTINI Ilustraciones de Leonor Pérez
Colección
Colección La buena letra Dirección editorial: Gloria Páez Editor: Héctor Hidalgo Ilustraciones: Leonor Pérez Portada de colección: diseño i punto
MN Editorial es una marca registrada de MN Editorial Ltda. © Erena B. Burattini (Erna Butendieck Burattini) © 2010 MN Editorial Ltda. Avda. Eliodoro Yáñez 2416, Providencia, Santiago, Chile Teléfono: 233 5101 e-mail: promocion@mneditorial.cl web: www.mneditorial.cl Primera edición: 2011 Nº de inscripción: 204.606 ISBN: 978-956-294-307-9
La presentación y disposición de la obra son propiedad del editor. Reservados todos los derechos para todos los países. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada o transmitida de ninguna forma, ni por ningún medio, sea este electrónico, fotocopia o cualquier otro, sin la previa autorización escrita por parte de los titulares de los derechos. Impreso en Chile por World Color Chile S.A.
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Pompas de jabón
Sentado en medio del césped donde
no le molestaban los árboles, ni los arbustos, Guille acostumbraba a soplar pompas de jabón. Para él eran sus aviones porque soñaba con ser piloto. Guille quería probar algo nuevo esta tarde. En el jardín infantil había escuchado a sus profesores que, entre ellos, comentaban recetas fáciles para preparar el líquido de las pompas de jabón. Para no olvidarse de los ingredientes, los había repetido varias veces. —Jabón líquido, agua, azúcar molida y… y… ciento trece
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Había oído otro producto que no conocía y tampoco recordaba el nombre. Intentaba recordar esa palabra sin conseguirlo, pero al fin le vino a la memoria lo que comentara una profesora. —En su lugar se puede usar aceite. —¡Ya lo tengo, esos son los ingredientes! –se dijo ese día y una vez más los repitió. Por eso esta tarde, antes de bajar al jardín, fue a la cocina a buscar todo lo que necesitaba y lo mezcló en una botella grande. También le agregó un frasco del líquido que su papá le compraba en cantidades. Lo batió bien y bajó al jardín. Al principio sólo consiguió globitos pequeños que se deshacían casi al instante. Fue a casa por más jabón
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y agua, pero no estaba contento con las pompas que conseguía. Pasó gran parte de la tarde entrando y saliendo, ahora por azúcar y aceite, luego por agua o por gel para mejorar la mezcla hasta que logró pompas grandes que no desparecían. Continuó soplando con paciencia, mientras sonreía feliz. Estas eran sus burbujas y le parecían maravillosas. De tanto soplar se le acabó el líquido. Se levantó, se giró en torno suyo y sólo entonces miró hacia arriba. Una nube de pompas de jabón iridiscentes flotaban sobre su cabeza. Parecían pequeños arco iris. Guille comenzó a saltar de entusiasmo. Este es un gran día, se dijo. Claro que seguiría probando hasta conseguir las pompas más grandes que jamás se vieran.
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De pronto, se levantó un viento suave que fue juntando las pompas de jabón para llevárselas como si fuera una bandada de pájaros de cristal que se alejaba por encima de los árboles. Ese mismo atardecer, un chico llamado Lucho se encontraba en el patio de su humilde casa en las afueras de la ciudad. Miraba al cielo pidiendo ayuda. —Échame una mano, necesito encontrar trabajo. Dame al menos una señal, cielo bonito. El chico suspiraba e insistía en que el cielo le enviara una señal. En eso estaba cuando distinguió a lo lejos unos globos que brillaban como los arco iris. La brisa los arrastraba hacia su barriada. Sin apenas moverse esperó que se acercaran y sus ojos brillaron húmedos por la
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emoción. Creyó que esa era la señal que estaba esperando. —¿Será un milagro? –se preguntó Lucho. No despegaba la vista de las pompas que se agrandaban por la cercanía. Entonces distinguió los fucsias, los morados, los rojos, los naranjos y tantos otros colores. Se pellizcó un brazo para asegurarse de que no era una ilusión. Esas pompas iridiscentes que flotaban ya sobre su cabeza le trajeron el recuerdo de los volantines. —¡Bravo! –gritó eufórico–. Ya sé lo que voy a hacer. Me dedicaré a fabricar volantines y serán tan hermosos como estos globitos. Lucho se cogió la cabeza entre las manos riendo y saltando de alegría, porque ya tenía la solución que tanto había buscado.
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ÍNDICE 1. Los cuentos de Clo-Cló........................................5 2. La ranita del arco iris.........................................24 3. La ratita bailarina..............................................33 4. Las estrellitas del estanque...............................54 5. Brujas sí, brujas no............................................60 6. Qué linda está la tarde.....................................79 7. Diario de vida de una violeta...........................90 8. Pompas de jabón.............................................113
6 Los cuentos de Clo-Cló ERENA B. BURATTINI
789562 943079 9
ISBN 978-956-294-307-9
Los cuentos de Clo-Cló es una colección de buenas historias dirigidas a recuperar el placer de la lectura por parte de los niños. En este libro la bondadosa anciana Clo-Cló cuenta y recrea historias plenas de ilusión, fantasía y ternura, y lo hace desde el banco de una plaza pública a un niño que de inmediato se cautiva y deslumbra con sus cuentos de ratones que aprenden a bailar, de patos que sueñan con una lluvia de estrellas cayendo sobre la superficie de un estanque, de un sapito que vuela con las alas de una mariposa, de un secreto muy guardado para reconocer brujas camufladas, de unas pompas de jabón viajeras, o con el emotivo diario de vida de una violeta solitaria.